Sucesion Testamentaria
Sucesion Testamentaria
Sucesion Testamentaria
9.1.1 El testamento
Es una declaración unilateral de voluntad, hecha solemnemente ante testigos y
revocable, que contiene disposiciones mortis causa y esencialmente la institución de
heredero.
Las formas más antiguas son dos: el testamento ante los comicios curiados y ante el
ejército (Gayo, 2, 101):
En conclusión podemos decir, que este tipo de testamento es una venta ficticia
efectuada por medio de la mancipatio frente al librepens y cinco testigos, el testador
mancipaba sus bienes a un tercero llamado “familiae emptor”o sea comprador del
patrimonio, al tiempo que designaba a sus herederos y daba instrucciones al “familiae
emptor” (esta figura es semejante al ejecutor del testamento o albacea, recibía los
bienes en calidad de custodia, para disponer después de ellos conforme a la voluntad
del testador) sobre la forma en que debía repartir su herencia.
EL TESTAMENTO MILITAR
Se establece un régimen especial para el testamento de los militares, primero por
concesiones temporales, que inició Julio César y concedieron después Tito y Domiciano,
y después en forma definitiva y general por Nerva y Trajano. La especialidad consistía en
que se admite que los soldados: "hagan sus testamentos como quieran y como puedan y
basta la simple voluntad del testador para la distribución de sus bienes" (Ulpiano, 45 ed.
D. 29.1.1 pr.).
El pretor redujo las formalidades exigidas por el Derecho Civil, y así apareció el
testamento pretorio, que debía constar en un documento que contuviera la designación
del heredero y los sellos de siete testigos sin exigirse la formalidad de la mancipatio.
1.- Testamento tripertitum.- reconocido por Justiniano, con un triple origen tomando al
derecho antiguo la presencia de testigos y presencia en un acto, del derecho honorario
los sellos y número de los testigos y de las constituciones imperiales, el requisito del
testador y los testigos. (Inst. 2, 10, 3).
2.- Testamento nuncupativo.- era oral que se otorgaba frente a siete testigos que oían la
voluntad del testador. (Inst. 2, 10, 14)
3.- Testamento público.- bajo dos formas:
b.- Testamento principi oblatum, que se hacía por escrito y que era depositado
en los archivos imperiales.
⮚ Otro caso que disminuyen los requisitos formales son en los casos de peste, no
exigía la presencia de 7 testigos para evitar el contagio, y solo se requiere de
cinco testigos.
⮚ Testamento del padre hacía el hijo en forma oral ante dos testigos o constar en
documento ológrafo del testador.
El “ius adcrecendi” era el derecho que los demás coherederos tenían que aprovechar
una cuota hereditaria" o bien repudiada o bien atribuida o un heredero incapaz.
El “ius adcrecendi” operaba en etapas sucesivas" si dos herederos recibían juntos una
tercera parte de una herencia" la repudiación de uno aprovechaba solo al otro no a
los demás heredero solo cuando ambos repudiaban la herencia o resultaban incapaces
de recibirla" los herederos de las otras dos terceras se beneficiaban por el “ius
adcrecendi”.
c. Sustitución cuasipupilar En este caso se nombraba sustituto para el hijo loco que,
aunque púber, muriera sin otorgar testamento por no haber recobrado la razón.
9.1.4 DESHEREDACIÓN
Además, en ningún caso se exigió que la desheredación fuera motivada. “La preterición”
de un hijo traía como consecuencia la anulación de todo el testamento y la apertura de
la vía legítima o intestada (Gayo, 2,123). La “preterición” de los demás sui no anulaba el
testamento, pero los “preteridos” podían concurrir con los herederos testamentarios
obteniendo una parte igual si éstos eran también sui, o todos juntos la mitad de la
herencia si concurrían con extraños. La “preterición” de un postumi sui, hombre o
mujer, de cualquier grado, acarreaba la nulidad del testamento.
9.2 LEGADOS
Legado “per damnatíonem” o “damnatorio”, cuya forma era "que mi heredero esté
obligado a transmitir", obligaba al heredero frente al legatario dando lugar a un derecho
de crédito tutelado por una acción personal, la “actio ex testamento”. Podían ser objeto
de este legado no sólo las cosas pertenecientes al testador, sino también al heredero o a
un tercero, cosas que el heredero debía adquirir. Pero si el propietario se negaba a
vender o pedía un precio excesivo, el heredero podía liberarse entregando el valor de la
cosa (Gayo, 2, 201-204).
El formalismo exigido para la redacción de los legados fue reducido por el derecho
imperial: De esta manera, un senadoconsulto de la época de Nerón estableció que el
legado incorrecto valiera como “legado damnatorio”; más adelante, con Constantino, se
abolieron todas las formalidades. Con Justiniano se unificó el régimen del legado,
dándoles a todos el mismo tratamiento y protegiéndolos con una acción real o una
personal, según que el legado confiera un derecho real o uno de crédito.
Gravado con el legado es el que adquiere una herencia que resulta disminuida con esta
carga. Las fuentes tienden a considerar el legado como una carga objetiva de la herencia
más que como un gravamen sobre personas determinadas el derecho justinianeo,
gravado puede ser tanto el heredero testamentario como legitimo y cualquier persona
que adquiere mortis causa.
Objeto de legado puede ser cualquier cosa, tanto cosas corporales como incorporales o
derechos. El legado puede consistir en creación de derechos a favor del legatario o en
modificación o extinción de relaciones ya existentes.
Los legados pueden cumplir finalidades especiales para atender las necesidades de la
casa y de la familia. Se trataba, sobre todo, de disposiciones a favor de la mujer y de las
hijas que seguían vinculadas a la familia a la muerte del testador era práctica usual
instituir herederos a los hijos varones y beneficiar a la mujer, a las hijas y a otros
parientes, con los siguientes legados:
Se hablaba entonces de dos momentos o plazos (dies) distintos para la adquisición del
legado: el “dies cedens” y el “dies veniens”.
2.- El Codicilo
Los codicilos contienen legados, manumisiones, nombramientos de tutores o revocación
de estas disposiciones. No pueden contener institución o desheredación de heredero
(Gayo, 2.273); sin embargo, puede hacerse en el testamento la declaración de que será
válida la institución hecha en el codicilo.
Un codicilo es, en Derecho, una disposición que el testador añade a su testamento con
posterioridad a ser otorgado y que tiene como objeto realizarle una modificación no
sustancial, siempre y cuando no se alteren los herederos ni cualquiera de las
condiciones que les afectan en tal condición.
ANEXO:
TESTAMENTO DE ANTONIO SILVANO
(Casos Prácticos de Derecho Romano)
CASO UNO:
Antonio Silvano, equite del ala primera Mauritania de los Tracios, ayudante del
prefecto, en la tropa de Valerio, hizo su testamento:
“Sea heredero en la totalidad de mis bienes tanto de los de origen castrense como de
los de procedencia familiar, mi hijo M. Antonio Satriano: todos los demás queden
desheredados: que haga aceptación de la herencia mediante cretio, dentro de los
próximos cien días: si no hiciera aceptación de la herencia en estos términos, quede
desheredado. Entonces, en segundo grado, sea mi heredero Antonio R., hermano mío, y
que acepte mediante cretio la herencia dentro del plazo de sesenta días: le doy
mediante legado, caso de no ser mi heredero, setecientos cincuenta denarios de plata.
Que sea procurador de todos mis bienes castrenses Hierax, de la familia de behex,
duplicario de la misma ala en el escuadrón de Ebucio, para que reúna y haga entrega de
los mismos a Antonia Thermutha, que es madre de mi heredero deje de estar sujeto a
tutela, y que los reciba entonces de ella: a aquel (Hierax) le doy mediante legado
cincuenta denarios de plata. A Antonia Thermutha, que es la madre de mi heredero ya
mencionado, le doy quinientos denarios de plata mediante legado. A mi perfecto doy
asimismo mediante legado cincuenta denarios de plata. Quiero que Cronión, que es mi
esclavo, sea libre una vez yo haya muerto, si administró todos mis bines correctamente
y los entregó a mi heredero ya antes mencionado o a mi procurador y quiero que el
impuesto de la vicessima sea pagado de mis bienes y no de los suyos. Este testamento
carece de dolo malo.
CASO DOS:
Nemonio, duplicario del escuadrón de Mario, fue –por causa de este testamento- el que
compró el patrimonio hereditario, siendo libripens M. Julio Tiberino, sesquiplicario del
escuadrón de Valerio, actuando como primer testigo Turbinio, portaestandarte del
escuadrón de Proculo.
Este testamento se realizó en los campamentos de invierno de Augusto de la segunda
legión trajana, conocida como “La Fuerte”, y del ala de Mauritania, en Alejandría, que
pertenecía a Egipto. Día sexto de las Kalendas de abril,, siendo cónsules Rufuno y
Quadrato.”
CONCLUSIONES
Junto a estas formas, se introducen otras en las que participan jueces o funcionarios
públicos. Honorio y Teodosio regulan el testamento “apud acta”, ante el juez o
autoridad municipal y el testamento depositado en el archivo imperial (testamentum
principi oblatum) -CTh. 4.4.4; CI. 6.23.18; 19.1.
La Capacidad para testar es un elemento esencial y Gayo, 2. 114, afirma que para saber
si un testamento es válido, debemos ver primero si el testador tenía la facultad de
testar. Esta facultad no se refiere sólo al testador, sino también a su relación con las
otras personas mencionadas en el testamento.
Se exige que el testador sea libre, ciudadano romano y sui iuris. Los sometidos a
potestad o alieni iuris pueden disponermortis causa sólo del peculio castrense o cuasi
castrense.
Capacidad para heredar es la capacidad para recibir por testamento, llamada por los
intérpretes testamenti factio pasiva, requería la condición de ser ciudadano y libre,
como en general para heredar. Esta capacidad es menos rigurosa que la exigida para
testar. Se refiere a la aceptación y no a la llamada o delación.
Se consideraban incapaces, como personas inciertas, los hijos póstumos, es decir, los
que nacían después de la muerte del padre. Sin embargo, se admitió la posibilidad de
instituir y desheredar a los hijos póstumos del testador, con tal de que hubiesen entrado
bajo su potestad de haber nacido en vida de éste (postumus suus).
En Roma los herederos tenían la facultad de aceptar como repudiar la herencia, ellos la
repudiaban cuando la herencia no le eran suficientes, ya que la carga heredada no les
convenía, muchas veces el testador beneficiaba más a los legatarios que a los herederos.
Dejando en testamento sus bienes activos a varios legatarios.
Para que el legado tenga validez hacia el legatario, el heredero tenía que aceptar la
herencia, una vez aceptado la herencia dejada por el causante en su testamento, el
legatario tenía la facultad de aceptarla o repudiarla.
ACTIVIDAD A DESARROLLAR: