Tesis 2019

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UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA

FACULTAD DE MEDICINA
COORDINACIÓN DE ESTUDIOS DE POSTGRADO
PROGRAMA DE ESPECIALIZACIÓN EN CARDIOLOGÍA
HOSPITAL MILITAR “DR. CARLOS ARVELO”

ENFERMEDAD ARTERIAL CORONARIA: CALIDAD DE VIDA EN PACIENTES QUE


ASISTEN A UN PROGRAMA DE REHABILITACION CARDIACA

Trabajo Especial de Grado que se presenta para optar al título de Especialista de Cardiología

Carola Michael Arias Díaz.

Karla del Carmen Nava Lamon

Tutor: María Luisa Pellino

Caracas, marzo 2020


2

___________________________________

María Luisa Pellino

Tutor del Trabajo Especial de Grado

Hospital Militar “Dr. Carlos Arvelo”

_______________________________

Simón Federico Tovar Blanco

Director del Curso de Postgrado de Cardiología

Hospital Militar “Dr. Carlos Arvelo”

__________________________________

María Luisa Pellino

Coordinador del Curso de Postgrado de Cardiología

Hospital Militar “Dr. Carlos Arvelo”


3

ENFERMEDAD ARTERIAL CORONARIA: CALIDAD DE VIDA EN PACIENTES QUE


ASISTEN A UN PROGRAMA DE REHABILITACION CARDIACA
Autora: Carola Michael Arias Díaz. Cedula de Identidad: 84570985. Teléfono: 0416-9269625.
Dirección: Hospital Militar Carlos Arvelo. Correo electrónico: [email protected].
Especialización en Cardiología
Autora: Karla del C. Nava Lamon. Cedula de identidad: 16368831. Teléfono: 04142693272
Dirección: Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo Correo electrónico: [email protected]
Especialización en Cardiología
Tutora: María Luisa Pellino. Cedula de Identidad: 7234086. Teléfono: 04143379027
Dirección: Hospital Militar Carlos Arvelo. Correo electrónico: [email protected]
Especialista en Cardiología
Resumen
Objetivo: Analizar los cambios de la calidad de vida de los pacientes con cardiopatía
isquémica sometidos a un programa de rehabilitación cardiaca. Diseño: El estudio será de casos
experimental, descriptivo, prospectivo y de intervención, la población estará compuesta por todos los
pacientes con cardiopatía isquémica atendidos en el HMCA que asisten a rehabilitación cardíaca. La
muestra estuvo conformada por 20 pacientes elegidos de manera no probabilística. La diferencia se
media se evaluó con la prueba T de Student para muestras pareadas y en el caso de variables
nominales, la prueba de McNemar. Se consideró un valor significativo si p < 0,05. Los datos fueron
tabulados con SPSS 25. Procedimiento: Se aplicó el cuestionario para evaluar calidad de vida y se
realizó la prueba de esfuerzo para fines de evaluar la capacidad funcional pre y post rehabilitación.
De los 20 pacientes evaluados, la edad media fue 60 ± 7 años, la mayoría del sexo masculino (65%),
el antecedente más importante fue HTA (80%); posterior a la intervención, 45% de pacientes con
fracción de eyección normal. Hubo cambios significativos en indicadores como aumento de METS,
consumo de VO2, también hubo mejoría en la percepción de salud (p = 0,009) y en el sueño y
descanso (p = 0,026).

Palabras clave: Rehabilitación cardiaca, calidad de vida, cardiopatía isquémica

Abstract

Objective: To analyse changes in the quality of life of patients with ischemic heart disease
undergoing a cardiac rehabilitation programme. Design: The study will be experimental, descriptive,
4

prospective and intervention cases, the population will be composed of all patients with ischemic
cardiopathy treated in the HMCA who attend cardiac rehabilitation. The sample consisted of 20
patients chosen in a non-probability manner. The mean difference was evaluated with Student's T test
for paired samples and in the case of nominal variables, McNemar's test. A significant value was
considered if p < 0.05. The data were tabulated with SPSS 25. Procedure: The questionnaire was
applied to evaluate quality of life and the stress test was carried out for the purpose of evaluating pre
and post-rehabilitation functional capacity. Of the 20 patients evaluated, the mean age was 60 ± 7
years, the majority of the male sex (65%), the most important antecedent was HTA (80%); after the
intervention, 45% of patients with normal ejection fraction. There were significant changes in
indicators such as increased METS, consumption of VO2, also there was improvement in health
perception (p = 0.009) and in sleep and rest (p = 0.026).

Keywords: Cardiac rehabilitation, quality of life, ischemic heart disease


5

INTRODUCCION
Las enfermedades cardiovasculares constituyen una de las primeras causas de morbilidad. El
número de pacientes que supera un episodio agudo ha ido en incremento y las actuales y futuras
expectativas son las de un incremento del número de pacientes, lo que nos sitúa en un número cada
vez mayor de pacientes que tenemos que tratar con enfermedad cardiaca. Nos encontramos así con un
número mayor de personas que necesitan cuidados, que se orienten al objetivo principal de
incrementar la calidad de vida, es decir que contribuyan a proporcionar a los pacientes la mayor
autonomía posible para que puedan incorporarse a una vida social lo más completa posible luego de
un evento coronario.

Planteamiento y delimitación del problema

La cardiopatía isquémica es una de las patologías que tiene una alta morbimortalidad con
graves consecuencias a nivel individual (limitación física, alteración del funcionamiento psicosocial,
deterioro de la calidad de vida), a nivel social (alto costo, incapacidades laborales), y nivel del
sistema de salud (alto costo con una inadecuada relación entre el avance tecnológico y el beneficio
secundario). El equilibrio de esta relación se facilita a través de la educación y el manejo integral de
los pacientes, ya que es una estrategia que orienta hacia la prevención en la aparición de las
enfermedades cardiovasculares (prevención primaria) y al manejo y control de ellas cuando ya se han
presentado (prevención secundaria); estrategia implementada por medio de los programas de
rehabilitación cardiovascular (2).

La rehabilitación cardiovascular es un conjunto de actividades necesarias para que el paciente


cardiovascular tenga un proceso de reacondicionamiento gradual que le permita alcanzar y mantener
un nivel funcional optimo desde el punto de vista físico, mental y social por medio del cual pueda
reintegrarse a la sociedad y a su actividad laboral. Esta definición implica un trabajo en equipo
transdiciplinario que logre abarcar los aspectos fundamentales a tratar con cada paciente (2,3).

La rehabilitación cardiovascular requiere el tiempo suficiente para suministrar la información,


realizar el planteamiento de las actividades y metas (corto, mediano y largo plazo), un seguimiento y
valoración periódica de los resultados que contemple los puntos finales de morbilidad y mortalidad,
6

el impacto de la calidad de vida y el retorno al trabajo y una evaluación de adherencia al tratamiento


(2-4)
.

Diversos estudios europeos y norteamericanos indican una mejoría considerable en los


diferentes aspectos ya mencionados en los pacientes que son sometidos a rehabilitación cardiaca.
Tales pacientes fueron evaluados mediante la escala de calidad de vida de diversos cuestionarios (2,5).

Según la OMS la calidad de vida es la percepción del individuo de su situación en la vida,


dentro del contexto cultural y de valores en que vive, y en relación con sus objetivos, expectativas,
valores e intereses. Como lo explica la definición, cada persona da un concepto subjetivo acerca de
su calidad de vida. Hay varias escalas validadas para evaluar la calidad de vida en pacientes con
enfermedad cardiaca, algunas específicas y otras genéricas, con resultados equiparables (5).

Actualmente se desconoce el impacto real de los programas de rehabilitación cardiaca en el


mejoramiento de la calidad de vida y capacidad funcional de los pacientes en nuestro país. Por lo que
se plantea el siguiente problema:

¿Existe mejoría de la calidad de vida de los pacientes con enfermedad arterial coronaria
sometidos al programa de rehabilitación cardiaca en el Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo durante el
periodo enero – septiembre 2013?

Justificación e importancia

Los programas de rehabilitación cardiaca, son sistemas de actuación multifactorial,


aconsejados por la organización mundial de la salud. La indicación fundamental de los programas de
rehabilitación cardiaca es la cardiopatía isquémica, pero es ampliable a todo tipo de enfermedades
cardiovasculares, y deberían ser aplicados, a sujetos sanos con factores de riesgos, u otras afecciones
(6,23,24)
.

En los pacientes coronarios, la importancia de mejorar la calidad de vida se complementa, con


medidas que buscan la prevención secundaria de la enfermedad. Por ellos los pacientes que participan
en los programas de rehabilitación cardiaca se incluyen pautas de actividad física, psicológicas y de
control de factores de riesgos. Existe evidencia científica de que estas medidas de la rehabilitación
7

cardiaca no solo favorecen el control de los factores y el regreso al trabajo, sino que mejoran la
calidad de vida, disminuyen la mortalidad y morbilidad de los pacientes (6,8,22).

Los pacientes con infarto del miocardio, revascularización miocárdica quirúrgica o percutánea
previos, angina estable o insuficiencia cardiaca crónica estable deben realizar un programa de
ejercicio aeróbico de intensidad moderada o vigorosa al menos tres veces por semana en sesiones de
30 min. Se animará a los pacientes sedentarios a iniciar un programa de ejercicio de baja intensidad,
tras una adecuada valoración del riesgo grado de recomendación nivel de evidencia I-A (7).

Antecedentes

Los programas de rehabilitación cardiaca siguen siendo una herramienta infrautilizada para la
prevención secundaria post-infarto de miocardio. Se analizaron 34 ensayos clínicos aleatorizados
donde se observó el efecto del ejercicio físico durante un programa de rehabilitación cardiaca en
pacientes post-infarto. Los pacientes asignados al azar a la realización de ejercicio tuvieron un menor
riesgo de reinfarto, menor mortalidad cardiaca, y menor mortalidad por todas las causas. También se
observó que la rehabilitación cardiaca tuvo efectos favorables sobre los factores de riesgo
cardiovascular, como fumar, presión arterial, peso corporal, y el perfil lipídico. Con estos resultados,
los autores concluyen que el ejercicio realizado dentro de un programa de rehabilitación cardiaca se
asocia con reducciones en la mortalidad de manera considerable (18).

Se realizo un estudio observacional con un seguimiento de 10 años en pacientes que


participaron en un programa de rehabilitación cardiaca tras un infarto agudo al miocardio analizando
la mortalidad y la morbimortalidad de los mismos; participaron 180 pacientes, varones con edad >65
años y criterios de bajo riesgo, 90 pacientes participaron en un programa de rehabilitación cardiaca y
90 pacientes en un grupo control. El resultado fue un descenso significativo de la mortalidad por
todas las causas (supervivencia a los 10 años del 81,7 % en el grupo control y del 91,8 % en el grupo
de intervención p= 0,04); la mortalidad por causa cardiovascular descendió, aunque de forma
estadísticamente no significativa (supervivencia a los 10 años del 83,8 % en el grupo control y del
91,8 % en el grupo de intervención p=0,10). El porcentaje de pacientes con complicaciones no
mortales fue inferior en el grupo de actuación (el 35,2 frente al 63,2 %; p=0,03) y tuvieron
significancia estadística el descenso en la presentación de angina inestable (15,7 frente al 33,9 %;
p=0,02), insuficiencia cardiaca (el 3,0 frente al 14,4 % p=0,02) y la necesidad de cirugía de
8

revascularización (el 8,4 frente al 22,9 %; p=0,02), concluyendo que la rehabilitación cardiaca en
pacientes de bajo riesgo tras un infarto agudo de miocardio da lugar a descensos significativos de la
mortalidad y la incidencia de nuevos eventos a largo plazo (18).

Un estudio (Hammill 2010) de más de 30.000 pacientes con enfermedad coronaria que
asistieron al menos a una sesión de un programa de rehabilitación cardiaca mostró que a los 4 años de
seguimiento, los pacientes que habían asistido a un mayor número de sesiones (36) tenían
significativamente menos riesgo de muerte o infarto en comparación con los que habían asistido a
menos sesiones. Esto refuerza la importancia de completar programas de Rehabilitación cardiaca
exhaustivos para conseguir beneficios duraderos (9).

Fue publicado en la revista JAMA, el estudio HF-ACTION10 (Heart Failure: A Controlled


Trial Investigating Outcomes of Exercise TraiNing), con gran número de pacientes, evaluó la eficacia
y seguridad del ejercicio en pacientes con insuficiencia cardiaca en su mayoría el 51% de etiología
isquémica, en el que se aleatorizó a 2.333 pacientes con disfunción ventricular (FEVI<35%) y grado
funcional II a IV de la NYHA a recibir 36 sesiones de entrenamiento controlado de moderada
intensidad frente a tratamiento convencional. No se observaron diferencias significativas en el
objetivo primario de mortalidad u hospitalización. En el mismo número del JAMA se publican los
resultados sobre calidad de vida según el cuestionario Kansas City Cardiomyopathy Questionnary
(KCCQ), que establece una escala de 0-100 (a mayor valor mejor calidad de vida). El KCCQ 10 a 3
meses fue mayor en el grupo de ejercicio estructurado (incrementos 5,21 vs 3,28 puntos
respectivamente). Esta diferencia no aumentó, pero permaneció estable y fue estadísticamente
significativa a largo plazo. En resumen, si bien este estudio no demostró que un programa de
ejercicio estructurado mejore la supervivencia ni las hospitalizaciones, si muestra que es seguro y que
proporciona una mejoría en la calidad de vida (10).

Marco teórico

Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en los países desarrollados
y se acompaña de una elevada incidencia de alteraciones físicas, psíquicas y enormes gastos
económicos (11).
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa directa de más de 4 millones de
muertes en Europa en el año 2000; y 1,9 millones en la Unión Europea cifra que representa el 43 %
9

de todas las muertes de cualquier edad de varones y el 55 % en las mujeres. Ha sido la principal
causa de ingresos hospitalarios, con una tasa media de 2,557 cada 100,000 habitantes en 2002. De
estos, 695/100,000 han sido causadas por cardiopatía isquémica y 375/100.000 por accidente vascular
cerebral, pero más de la mitad se han debido a otras formas de enfermedad cardiaca crónica. El coste
total en los países de la Unión Europea fue 168,757 millones de euros en el año 2003 (11).

En los Estados Unidos, en 2009 ocurrieron 652.091 fallecimientos por cardiopatías, 785,000
personas han sufrido un primer evento coronario, 470,000 han repetido un nuevo episodio y se
calculan en 195,000 los infartos silentes. El número de afectados por estas enfermedades se sitúa
alrededor de 80 millones de los cuales 16,8 millones son de etiología coronaria. La afectación
psicológica es sumamente elevada y los gastos ascienden a 503,200 millones de dólares, 324,100 por
costes directos (hospitalizaciones, pruebas diagnósticas y terapéuticas, medicación, etc.) y 179,100
por indirectos (disminución de productividad por incapacidad laboral) (11).

Los programas de rehabilitación cardiaca, buscan mejorar la calidad de vida en los pacientes y
lograr la reincorporación más completa posible a la sociedad en los enfermos coronarios y conseguir
beneficios con respecto a la morbilidad y retrasar la mortalidad (11, 12).

Rehabilitación cardiaca
El entrenamiento físico es una pauta fundamental, aunque no única, de los programas de
rehabilitación cardiaca. Ha existido, durante muchos años una indudable reticencia por parte de los
profesionales a la hora de aconsejarlo a sus enfermos, por miedo a los posibles efectos secundarios
(11,12)
.
A través de la historia se han descrito varias etapas de la rehabilitación cardiaca, es muy
probable que Asclepíades de Prusa (124 a.C – 40 a.C.), medico griego que vivía en Roma, el primero
en desarrollar un programa de actividad física en las enfermedades cardiovasculares. Sus teorías
enfrentaban las ideas hipocráticas, imperante en la época, de que cualquier patología debía ser tratada
con reposo y drogas. Asclepíades describió diversas pautas dietéticas, de gimnasia y ejercicios de
equitación, además de marchas y carreras para ser utilizadas en diferentes enfermedades (11).
El Dr. Cristóbal Méndez publicó en Jaen, en el año 1553, un libro sobre efectos positivos y la
necesidad de realizar ejercicio físico para la salud (11, 12).
10

Siglos más tarde, Heberden, publicó de forma magistral el cuadro clínico de la angina de
pecho, y luego publica la historia de uno de sus enfermos con episodios típicos de angina de esfuerzo,
el paciente fue remitido a su domicilio sin tratamiento, ya que no se conocía y en una revisión
efectuada a los 6 meses estaba asintomático, pese de hacer continuado su trabajo de leñador en la
campiña inglesa. Luego de esto William Stokes, de Dublín en el año 1854, utilizo por primera vez la
deambulación precoz e ideó programas de ejercicios físicos para los pacientes que habían sufrido un
episodio de infarto agudo de miocardio. Se mantuvieron diversas opciones a través de los años por
las complicaciones de los infartos como las roturas cardiacas, muerte súbita, reinfartos y esto
potenció el uso de sedentarismo y no es hasta el 1940 que inicia la etapa del ejercicio físico en la
cardiopatía isquémica. Levine y Lown en Boston preconizaban “el tratamiento en silla para
trombosis coronaria” la movilización al sillón se iniciaba el primer día del episodio agudo, durante
períodos de 1 a 2 horas. Como consecuencia de todos estos trabajos en el 1960 diversos boletines y
publicaciones de la OMS aconsejaban el desarrollo de programas multidisciplinares que incluían la
práctica del ejercicio de forma habitual en el tratamiento de pacientes cardiópatas (11,12).
En la actualidad los Programas de Prevención Secundaria y Rehabilitación Cardiaca son
considerados seguros y efectivos (indicación clase I) por las sociedades norteamericanas de
cardiología, American College of Cardiology y American Heart Association (7,11).

Los objetivos generales se encuentran incluidos en la definición de rehabilitación


cardiovascular, sin embargo, existen objetivos específicos a lo largo del programa (2):
1) Adquirir conocimiento de la enfermedad y sus factores de riesgo, con las
recomendaciones para su manejo y control a través de los hábitos cardiosaludables y
motivación para la adherencia al tratamiento en forma integral.
2) Mejorar la capacidad física hasta el máximo posible para cada caso conociendo las
limitaciones específicas relacionadas con la enfermedad (2).
3) Optimizar el estado mental, social y ocupacional que le permita integrarse a su núcleo
familiar, laboral y social de una mejor forma, lo cual hace referencia a mejorar la calidad
de vida (2).
4) Disminuir la velocidad de progresión de la enfermedad (2).
11

Los beneficios que se obtienen a través del programa de rehabilitación cardiaca son el
resultado de las diferentes estrategias y actividades que conforman el manejo transdiciplinario
existiendo estudios al largo de 40 años que así lo demuestran. El ejercicio bajo prescripción
individual y con regularidad indicada favorece la demanda de oxígeno, mejora la función endotelial,
los factores de coagulación y marcadores de inflamación, disminuye la agregabilidad plaquetaria y
regula el sistema nervioso autónomo, entre otros efectos que a su vez mejoran en primera instancia,
la capacidad física y mediano y largo plazo la disminución de la morbimortalidad (2).
Las diferentes actividades de educación y así como la interrelación con otros pacientes en
situaciones similares, y el soporte psicológico se refleja en una disminución de la ansiedad y
depresión del paciente con una mejoría de la calidad de vida y reintegro temprano a la actividad
laboral. Otros beneficios son control de los factores de riesgo como diminución de colesterol y
valores de glicemia, facilita el control de peso, aumenta el umbral de angina y por lo tanto
disminución de las rehospitalizaciones y consultas innecesarias a los servicios de emergencias (2).

Las indicaciones para efectuar la rehabilitación cardiaca son: isquémicas (Infarto agudo de
miocardio, tras cirugía de revascularización coronaria o angioplastia y angina de esfuerzo estable),
trasplante cardiaco, valvulopatías operadas, cardiopatías congénitas operadas, insuficiencia cardiaca,
marcapasos o desfibriladores implantados, en pacientes sanos con factores de riesgo, en edad media
de la vida que inicien actividades deportivas y astenia neuro circulatoria (2).

Las contraindicaciones se han reducido considerablemente y están relacionadas con el


entrenamiento físico, lo que no impide que los pacientes puedan iniciar otros aspectos del programa
como rehabilitación psicológica, programa educacional, prevención secundaria de factores de riesgo,
etc. Entre las contraindicaciones absolutas están: aneurisma disecante de aorta, estenosis severa de
tracto de salida del ventrículo izquierdo; las relativas o temporales son angina inestable, patologías
descompensadas como insuficiencia cardiaca, enfermedades metabólicas (diabetes mellitus etc.),
enfermedades en fase aguda (embolismo pulmonar, miocarditis y pericarditis, tromboflebitis,
infecciones. Arritmias como extrasístoles ventriculares que aumentan significativamente con el
ejercicio, taquicardia ventricular, taquicardia supra ventricular no controladas y por último bloqueos
Auriculo-ventriculares 2do y 3er grado (2).
12

Los programas de rehabilitación comprenden 3 fases. La fase I comprende el periodo de


estancia hospitalaria, durante los primeros días los enfermos permanecen en la unidad de cuidados
coronarios y luego al área de hospitalización cardiológica esta comprende movilización precoz al
segundo día dependiendo de las complicaciones, realización de ejercicios pasivos (2 primeros días) y
activos con las distintas articulaciones, así como el aprendizaje de la respiración diafragmática. El
aspecto psicológico empieza a este nivel para prevenir estados depresivos y miedo al futuro, estos
aspectos pueden incidir de manera negativa en la evolución del proceso coronario agudo (13,14).
Es obligatoria la prueba de esfuerzo previa, realizada antes del alta hospitalaria o en su
ausencia, antes del inicio de la rehabilitación (13-15).
La fase II comprende desde el alta hospitalaria y la realización de la prueba de esfuerzo hasta
que se mejora la capacidad al límite esperado, o el paciente adquiere un equilibrio clínico y
psicológico adecuado. Puede ser supervisada medicamente la cual es efectuada en centros
hospitalarios o clínicas de rehabilitación, con presencia del personal entrenado (médicos, enfermería,
fisioterapeutas, médicos de familia, psicólogos, bajo la dirección de un cardiólogo) y no
supervisados, a domicilio efectuados ambulatoriamente con asesoría por cardiólogos en cuanto al
programa y realización de los ejercicios. La fase II es la continuación del trabajo iniciado en la fase I,
el promedio de duración es de 3 meses con 3 o 5 sesiones semanales. Las sesiones deben durar al
menos 30 minutos (cuanto menor sea la intensidad del entrenamiento mayor debe ser la duración), se
mide la frecuencia cardiaca de entrenamiento que es la que hay que alcanzar en cada sesión para
conseguir la máxima capacidad funcional. Se recomienda conseguir entre el 60 al 80 % del consumo
de oxigeno máximo (VO2 Max), lo que corresponde el 75 al 90 % de la frecuencia cardiaca alcanzada
en la prueba previa. Las sesiones deben ir precedidas de una fase de calentamiento que se realiza
mediante una tabla de gimnasia se continua con una sesión de endurecimiento que es la que
realmente va a aumentar la capacidad funcional que suele alcanzarse mediante cicloergometro,
carrera o marcha ligera, duración en general de 30 minutos y se termina con una sesión de
enfriamiento que consiste en movimientos suaves para evitar las reacciones vagales.
Los pacientes son entrenados para autocontrolarse el pulso para que posteriormente continúen
realizando el entrenamiento en su domicilio a la frecuencia cardiaca de entrenamiento que se
prescriba. Es una etapa fundamental para reforzar los hábitos cardiosaludables, la autoevaluación y
control durante el ejercicio y la integración de los familiares en el proceso (13,15).
13

La fase III abarca desde el final de la fase II (2 a 6 meses) tanto si se ha incorporado al


trabajo o no y debe mantenerse el “resto de la vida”. El ejercicio físico adecuado, los consejos
dietéticos, la corrección de los factores de riesgo, entre los que es fundamental la eliminación
absoluta del tabaco, el mantenimiento de una estabilidad psicológica contribuye a crear en los
enfermos un nuevo estilo de vida que debe llevar a alcanzar una calidad de vida mejor a la que tenía
antes del episodio coronario (13-15).
Existen dos tipos de ejercicio en la rehabilitación cardiaca: 1. Dinámico, aeróbico, isotónico o
de endurecimiento. 2. Ejercicio de resistencia o isométrico. Muchas actividades tienen componentes
mixtos, el ejercicio isotónico utiliza amplios grupos musculares con contracciones rítmicas que
provocan movimiento; tienen como respuesta hemodinámica un aumento significativo del gasto
cardiaco como, por ejemplo: andar, correr, nadar, patinar, y otros. Los ejercicios isométricos
consisten en contracciones musculares sin movimientos tales como levantar peso, empujar un objeto
pesado, producen un aumento importante de presión arterial sistólica y diastólica, menor incremento
del gasto cardiaco que las anteriores y en algunos casos puede aumentar el riesgo de isquemia y
arritmias por lo que han sido habitualmente prohibidos en rehabilitación cardiaca; sin embargo dado
que en la vida diaria se requieren componentes isométricos, en los últimos años se han introducido
estos ejercicios, en general de poca intensidad y corta duración comprobándose que son bien
tolerados, mejorando el tono y potencia muscular (13, 15).

Prueba de esfuerzo

La prescripción del ejercicio ha de ser individualizada, de forma que consiga el máximo de


beneficio con el mínimo riesgo. Para realizar esto se necesita conocer la capacidad física de una
persona y se determina por el cálculo del consumo de oxigeno máximo (VO 2 Max). En condiciones
basales y de reposo el consumo de oxigeno es de 3.5 ml/kg por minuto lo que se conoce como 1 MET
(equivalente metabólico en reposo). Al hacer ejercicio físico el consumo de oxigeno por el organismo
va aumentando en proporción directa al esfuerzo realizado, hasta un tope que corresponde al máximo
consumo de oxigeno (VO2 Max) este es superior en las personas jóvenes y disminuye
fisiológicamente con la edad (aproximadamente 1 % por año) aunque las personas que realizan
habitualmente ejercicio son menores (13).

La correcta planificación de un programa de rehabilitación física implica una adecuada


clasificación del perfil de riesgo de cada paciente y esto se basa en: 1) antecedentes personales:
14

angina o infarto previo, hipertensión arterial y otros factores de riesgo. 2) localización del infarto,
clase Killip, extensión etc. 3) resultado de la prueba de esfuerzo realizada antes del alta hospitalaria.
4) resultados ecocardiográficos, cateterismo cardiaco, holter, que nos dan información precisa de la
función ventricular, isquemia, anatomía coronaria, y arritmias (13).

La prueba de esfuerzo es fundamental dentro del proceso global de la rehabilitación; permite


realizar de forma no invasiva un seguimiento continuo y añade información a la valoración física
global. Ayuda a la estratificación de riesgo y aporta datos necesarios para la prescripción de ejercicio
y el cálculo de la frecuencia cardiaca de entrenamiento. Tras un infarto agudo al miocardio si no hay
complicaciones se puede realizar una prueba de esfuerzo limitada a frecuencia submáxima (hasta el
85 % de la frecuencia cardiaca máxima), limitada por síntomas se suspende cuando se alcanza la
frecuencia cardiaca máxima teórica o bien cuando aparezcan síntomas (disnea, angina, agotamiento
físico, etc.) o signos que aconsejen alteraciones en electrocardiograma, comportamiento anormal de
tensión arterial o signos de bajo gasto generalmente se realiza a partir del quinto día y si es luego de
angioplastia coronaria se recomienda realizarla a partir del 10mo día y cuando es luego de la cirugía
de revascularización miocárdica de 4 a 6 semanas, estas pruebas se deben repetir al terminar la fase de
entrenamiento o fase II, y más adelante (6 meses a 1 año) para revisar la prescripción de ejercicio y
evaluar la mejoría de la capacidad funcional (13).

Cuestionarios de la calidad de vida

La calidad de vida es un constructo complejo y no puede medirse solo de forma subjetiva con
una simple entrevista con el paciente. Con objeto de intentar medir objetivamente de alguna manera
estas complejidades sugirieron los diferentes cuestionarios que hoy en día existen en la literatura. El
cuestionario debe contener no solamente medidas biomédicas, funcionales como son movilidad,
independencia y autonomía en las actividades diarias, capacidad intelectual, integración familiar y
social, actividad sexual, actividad laboral, relaciones sociolaborales, estabilidad emocional, y
autosatisfacción del paciente con su situación en todos los campos que le rodean. En el campo
psicológico debe de estudiarse la sensación subjetiva de salud, la ansiedad, la depresión, el miedo las
dudas ante el futuro, etc. Lógicamente, esta amplia panoplia de diferentes áreas constituye en sí
mismo un fin muy ambicioso y de aquí las muchas dificultades para su medición objetiva (16,17).
15

Teniendo en consideración que la calidad de vida es concepto multidimensional, desde la


percepción del paciente y cada dimensión de la calidad de vida cambia con el tiempo se han diseñado
diferentes instrumentos para establecer una aproximación a la medición de la misma. Estos
instrumentos se han podido dividir en genéricos y específicos. Los específicos se centran en los
aspectos de la calidad de vida propio de una enfermedad y los genéricos son independientes al
diagnóstico por lo que pueden ser aplicables a cualquier tipo de población o afección (19).

Según Donovan et al. Las características que definen un buen instrumento de medida de la
calidad de vida son: 1) adecuado al problema de salud que se pretende medir; 2) preciso; 3) sensible
ósea capaz de detectar cambios tanto entre individuos como en la respuesta del mismo a lo largo del
tiempo; 4) basado en datos generados por los propios pacientes; 5) aceptado tanto por los paciente
como los profesionales sanitarios y los investigadores; 6) valido en el sentido de ser capaz de medir
aquellas características que se pretendan medir y no otras (19, 20).

En la cardiopatía isquémica se han implementado tanto cuestionarios genéricos como


específicos. Los instrumentos genéricos validados en España y los más empleados en el ámbito
cardiológico son, el Cuestionario de Salud SF-36, EL Nottinghan Health Profile (NPH) y el Sickness
Impact Profile (SIP); estos han sido utilizados en diversas situaciones: cirugía coronaria, trasplante
cardiaco, infarto y angina (19-21).

Entre los cuestionarios específicos cabe mencionar el Cuestionario de Velasco Del Barrio que
consta de 9 areas temáticas: salud, sueño y descanso, comportamiento emocional, proyectos de
futuro, movilidad, relaciones sociales, comportamiento de alerta, comunicación, tiempo de ocio y
trabajo con un total de 44 ítems (19 ,20).
Estos cuestionarios se han introducido en la práctica clínica y se han utilizado en pacientes
con cardiopatía isquémica que son sometidos a programas de rehabilitación cardiaca con excelentes
resultados y sumamente útiles para la evaluación de la calidad de vida (19, 20).

Objetivo general

Analizar los cambios de la calidad de vida de los pacientes con cardiopatía isquémica
sometidos a un programa de rehabilitación cardiaca.

Objetivos específicos
16

1) Definir la edad, género y hábito tabáquico.


2) Clasificar la calidad de vida y la capacidad funcional pre y post intervención.
3) Comparar la calidad de vida y la capacidad funcional de cada paciente pre y post
intervención.

Aspectos éticos

Antes de iniciar el trabajo de investigación se le informara a cada paciente las características


de la misma, respetando los principios bioéticos, y posteriormente se le facilitara un consentimiento
informado que nos indicara su participación en el estudio. El estudio respetará todos los principios
bioéticos de la UNESCO sobre investigaciones biomédicas. El paciente estará libre de abandonar la
investigación sin repercusión alguna en su atención médica.

Evaluación de riesgos

Las acciones médicas a realizar en estos pacientes se realizarán según parámetros


internacionales aprobados, dejando según los criterios de exclusión fuera de la investigación a todos
aquellos con riesgo de complicaciones relacionadas con el procedimiento de la rehabilitación
cardíaca.

MÉTODOS

Tipo de estudio

El estudio será descriptivo, prospectivo y de intervención.

Población y muestra

Se trata de un estudio donde se evaluarán medidas repetidas nominales (percepción de salud,


sueño-descanso, comportamiento emocional, proyectos futuros, movilidad, relaciones sociales,
comportamiento de alerta, comunicación, tiempo de ocio y trabajo) y medidas repetidas de escala
(Mets, VO2 max y tiempo de ejercicio).
17

La población estará compuesta por todos los pacientes con cardiopatía isquémica atendidos en
el HMCA que asisten a rehabilitación cardíaca. La muestra será no probabilística, de selección
intencional de 20 pacientes seleccionados pre y post intervención, con edades comprendidas entre 40
y 80 años de cualquier género atendidos durante el período enero – septiembre 2013.

Los momentos de medición de las variables serán dos:

Momento 1: Antes de iniciar el programa de rehabilitación cardíaca.

Momento 2: Al culminar el programa de rehabilitación cardíaca.

Criterios de inclusión

Hombres y mujeres que asisten a la consulta de rehabilitación cardiaca en su fase II con diagnóstico
de:

1) Cardiopatía isquémica crónica (post angina, post infarto, post revascularización


miocárdica percutánea y quirúrgica)

Criterios de exclusión
1) Angina inestable o infarto agudo de miocardio en el mes previo
2) Hipertensión arterial con PAS > 180 Y PAD > 100
3) Arritmia no controlada
4) Trastornos musculo esqueléticos severos
5) Pacientes con antecedente de Enfermedad cerebrovascular
6) Alteraciones en la esfera mental
7) Limitaciones físicas
Procedimientos

Luego de aceptar la participación en la investigación a través del consentimiento informado


(anexo 1), se realizará una historia clínica que incluirá los siguientes datos: edad, sexo, antecedentes
personales, antecedentes psicobiológicos, diagnósticos, tratamiento actual.
18

Luego se aplicará el cuestionario empleado para evaluar la Calidad de Vida, consta de un total
de 40 ítems agrupados según las áreas que habitualmente se miden en la calidad de vida de Velasco –
del Barrio:

- Percepción de salud (8)


- Sueño y descanso (3)
- Comportamiento emocional (3)
- Proyectos de futuro (3)
- Movilidad (5)
- Relaciones sociales (7)
- Comportamiento de alerta (3)
- Comunicación (3)
- Tiempo de ocio y trabajo (5)

En cada una de las preguntas del cuestionario se utiliza una escala de calificación de 5 puntos,
tipo Lickert (1 =nunca, 5 =siempre). La puntuación obtenida puede oscilar teóricamente entre 40 y
200 puntos, mientras más puntos peor es la calidad de vida de los pacientes y con el cuestionario se
puede seleccionar cual es el área que se encuentra más deteriorada para actuar concretamente sobre
ella. Se aplicará antes y después de la Rehabilitación cardíaca (19,20,25).

Posteriormente se procederá a realizar la prueba de esfuerzo antes de iniciar la fase II de


rehabilitación y otra prueba de esfuerzo al finalizar la etapa de entrenamiento o fase II.

Los pacientes con enfermedad arterial coronaria que requieran de programa de entrenamiento físico
para Rehabilitación Cardiaca, ingresarán al entrenamiento físico en el programa de ejercicio,
conformado por 3 sesiones semanales durante 12 semanas.

Tratamiento estadístico adecuado

Se calculará el promedio y la desviación estándar de las variables continúas; en el caso de las


variables nominales se calculará sus frecuencias y porcentajes. Las comparaciones de las variables
continuas según las variables nominales se harán con la prueba no paramétrica U de Mann-Whitney;
en el caso de las variables nominales según variables nominales, se aplicará la prueba chi-cuadrado
19

de Pearson, en el caso de las tablas 2 x 2, se utilizará la prueba exacta de Fisher. Se considerará un


valor significativo de contraste si p < 0,05. Los datos serán analizados con JMP-SAS 11.0.

RESULTADOS

Se estudió un total de 20 pacientes con cardiopatía isquémica crónica, con la media de edad
comprendida en 60 ± 7, cuyo 65% (13) estaba representado por el género masculino y el 35% (7) por
el género femenino. Los factores de riesgo descritos en orden decreciente se muestran de la siguiente
manera: hipertensión arterial sistémica 80%, hábitos tabáquicos 45% y diabetes mellitus 25,0%
(Tabla 1). Pacientes sometidos a revascularización miocárdica percutánea 14 y quirúrgica 1,
representando el 75% de la muestra estudiada (Tabla 2), con un tiempo de evolución de enfermedad
predominante, menor de 1 año correspondiente al 80% (16). En relación a la fracción de eyección, se
observó en 45% (9) de los pacientes estudiados valor normal (FE ≥55%), disfunción diastólica leve
(FE 45-54%) en 35% (7), disfunción diastólica moderada (FE 30-44%) en 10% (2) y disfunción
diastólica severa (FE <30%) en 10% (2) de la muestra (Tabla 3). Posterior a la rehabilitación cardiaca
se observan modificaciones favorables en la tolerancia al ejercicio, observando aumento de su
duración (min) con una desviación estándar pre entrenamiento 7,2 ± 2,3 y post entrenamiento 9,5 ±
1,9 (p = 0,005), aumento estadísticamente significativo del Mets pre entrenamiento 7,5 ± 1,9 y post
entrenamiento 9,3 ± 1,8 (p = 0,001) y consumo de VO2 pre entrenamiento 28 ± 7 y post
entrenamiento 34 ± 6 (p = 0,001) (Tabla 4). La fracción de pacientes con cardiopatía isquémica
crónica no revascularizados presentan mejoría estadísticamente significativa en la duración de la
prueba de esfuerzo siendo 7,4 ± 2,3 previo al entrenamiento y 10,4 ± 1,2 posterior al mismo (p =
0,025), así mismo, en METS pasando de 4,3 ± 1,5 a 6,0 ± 0,7 (p = 0,022). No hubo diferencia
estadísticamente significativa en relación al consumo de VO2 (Tabla 5).

En relación al cuestionario aplicado para evaluar la calidad de vida pre y post entrenamiento
(Tabla 6) se observó mejoría estadísticamente significativa en áreas específicas como: percepción de
salud pre entrenamiento 17 ± 5 y post entrenamiento 15 ± 4 (p = 0,009), sueño y descanso pre
entrenamiento 6 ± 3 y post entrenamiento 5 ± 3 (p = 0,026), movilidad pre entrenamiento 10 ± 4 y
post entrenamiento 9 ± 3 (p = 0,008) y comportamiento de alerta pre entrenamiento 7 ± 2 y post
entrenamiento 6 ± 2 (p = 0,010), al observar la puntuación global del cuestionado empleado, se
observó una mejoría de la calidad vida de los pacientes sometidos a rehabilitación cardiaca pre
entrenamiento 143 ±32 y post entrenamiento 137 ± 37 (p = 0,059). Al analizar la fracción de
20

pacientes no sometidos a revascularización miocárdica (Tabla 7) no se observó diferencias


significativas en la calidad de vida pre y post entrenamiento.

DISCUSION

Es admirable el papel que representa el programa de rehabilitación cardiaca en los planes


terapéuticos empleados para los pacientes con cardiopatía isquémica crónica, con el pasar de los
años, numerosos estudios consolidan este método como uno de los pilares fundamentales en la
recuperación física - mental y reincorporación del paciente a la sociedad y al área laboral.

Al analizar los resultados se observó como factor de riesgo cardiovascular predominante el


género masculino, antecedente de hipertensión arterial sistémica y hábitos tabáquicos positivos, por
otra parte, fue mayor el número de pacientes sometidos a revascularización miocárdica y con FE
adecuada que al ser sometidos al programa de rehabilitación durante 12 semanas, mostraron mejoría
estadísticamente significativa de los Mets y Consumo de VO2, simultáneamente al analizar los
resultados del cuestionario aplicado, se observa mejoría de la calidad de vida, especialmente en áreas
relacionadas con la capacidad física del individuo cómo la percepción de salud, sueño – descanso,
movilidad y comportamiento de alerta, no obstante no se observaron modificaciones de la calidad de
vida en relación al estado emocional y percepción de la realidad, lo cual sugiere deben ser estudiados
los pacientes desde el punto de vista psicológico, existe una importante asociación entre las
patologías cardiovasculares y la depresión.

Se observó no sólo beneficios en los pacientes sometidos a revascularización miocárdica, así


mismo, en aquellos con enfermedad arterial coronaria no revascularizable también se observó
modificaciones favorables en la tolerancia al ejercicio y capacidad funcional, sin embargo, no
mostraron diferencias estadísticamente significativas en relación a la calidad de vida, tal hallazgo,
podría estar relacionado con la reducida muestra analizada.

La calidad de la vida de un individuo es el producto de la interrelación de una serie de


factores físicos y psicológicos, a través de este estudio se logró observar el efecto beneficioso de un
entrenamiento físico programado y supervisado, sin embargo, existen áreas desde el punto de vista
psicológicos no influenciadas por este método, que repercuten sobre la recuperación del paciente,
integración a la sociedad y morbilidad, razón por la cual, es necesario enfatizar el empleo de un
equipo multidisciplinario que cuente con psicológicos, psiquiatras y trabajadores sociales.
21

AGRADECIMIENTOS

Agradecemos el apoyo brindado por el jefe y adjuntos del Departamento de Cardiología del
Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo, del mismo modo al personal de enfermería y técnicos
cardiopulmonares encargados del área de Rehabilitación Cardiaca.

REFERENCIAS

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Panamericana; 2000.p.15-22.
2. Santos CA. Rehabilitación Cardiovascular. En: Sandoval N, Charria D (eds.), Texto de
Cardiología. Bogota, Colombia: Sociedad Colombiana de Cardiología y Cirugía
Cardiovascular; 2007. p. 418-430.
3. Turner S, Bethel H, Evans J et al. Patients Characteristics and outcomes of Cardiac
Rehabilitation. J Cardiopulm Rehabil. 2002; 22:253-260.
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programs. American Heart Association and American Association of Cardiovsacular and
Pulmonary Rehabilitation. Circulation. 2000; 102:1069-1073.
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Calidad de vida. En: Caliani J. Rehabilitación cardíaca y atención primaria. Madrid: Editorial
médica panamericana; 2000. p.175-196.
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prevencion cardiovascular y rehabilitación cardiaca. Rev Esp Cardiol. 2000; 53:1095-1120.
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práctica clínica. Rev Esp Cardiol. 2012; 65:937-966.
22

8. Taylor RS BA. Exersise- based rehabilitation for patients with coronary heart disease:
sistematic review and meta- analysis rabdomized controlled trials. Am J Med.. 2004;
116:682-692.
9. Gene Kwan MGJB. Advancing the Field Through Emerging Science. Circulation. 2012;
125:369-373.
10. Belardinelli R. 10 years Exercise Training in Chronic Heart Failure. J Am Coll Cardiol. 2012;
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C. Prados (eds). Rehabilitación Cardiovascular. Madrid: Editorial Médica Panamericana;
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(ed.) Rehabilitación Cardiaca y Atención Primaria. Madrid: Editorial Médica panamericana;
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Rehabilitación Cardiaca y Atencion Primaria. Madrid: Editorial Médica panamericana; 2000.
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protocolos. Mapfre Medicina. 1996; 17-26.
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Montero C. Rehabilitación Cardiaca. Madrid: Edicion Olalla; 1999. p.557-566.
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10 años de seguimiento. Rev Esp Cardiol. 2005; 58:1181-1187.
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pacientes con cardiopatía isquémica. Rev Soc Esp Dolor. 2004; 11:505-514.
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calidad de vida en pacientes postinfarto. Rev Esp Cardiol.. 1993; 46:552-558.
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Rev. lat. cardiol. euroam. 1995; 16:176-179.
23

22. Maroto JM, De Pablo C, Rehabilitación Cardíaca. Morales M. Barcelona: Edicion Olalla;
1999.
23. Velasco JA, Maureira JJ, Rehabilitación del paciente cardiaco, Barcelona: Doyma; 1993.
24. Oldridge NB GG. Cardiac Rehabilitation after Myocardial Infarction. JAMA. 1988; 260:
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Cardíaca y Atención primaria. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2000. p.185-196.
24

Anexo 1

República Bolivariana de Venezuela


Ministerio del Poder Popular para la Defensa
Hospital Militar “Dr. Carlos Arvelo”
Departamento de Cardiología

Consentimiento Informado

Yo (paciente), ____________________________________________________________

C.I._________________, venezolano, mayor de edad y de este domicilio, hago constar que deseo
participar de forma libre y voluntaria en la realización del Trabajo Especial de Investigación titulado:
“Calidad de vida de los Pacientes con Enfermedad Arterial Coronaria que asisten al Programa de
Rehabilitación Cardiaca”.
Fecha: ________________ Firma: _______________________

Yo (investigador), ____________________________, declaro que explique los objetivos del


presente estudio y otorgue al paciente tiempo suficiente para decidir su participación y aclare las
dudas que surgieron.
25

Testigo:

Nombre: ____________________________________ C.I._________________

Anexos 2. Cuestionario de calidad de vida de Velasco de Barrio

Nombre del paciente: CI:


Numero de historia: Teléfono: Fecha inicio rehabilitación:
1. Nunca 2. Muy pocas veces 3. Algunas veces 4. Casi siempre 5. Siempre

1. Tengo dolor en el pecho 1 2 3 4 5


2. Tengo fatiga o noto que respiro mal 1 2 3 4 5
3. Me siento más cansado que antes 1 2 3 4 5
4. Me cuesta levantarme por las mañanas 1 2 3 4 5
5. Tomo demasiado medicamento 1 2 3 4 5
6. Me cuesta seguir el régimen o dieta 1 2 3 4 5
7. Echo de menos el fumar 1 2 3 4 5
8. Me siento inseguro acerca del ejercicio que debo hacer 1 2 3 4 5
9. Me apetece descansar la mayor parte del día 1 2 3 4 5
10. Cuando me siento doy más cabezadas que antes 1 2 3 4 5
11. Duermo peor que antes 1 2 3 4 5
12. Río o lloro de repente sin motivo 1 2 3 4 5
13. Reacciono de forma nerviosa o inquieta 1 2 3 4 5
14. Reacciono de forma irritable conmigo mismo 1 2 3 4 5
15. Siento miedo a morirme 1 2 3 4 5
16. Soy una carga para la familia y me siento inútil 1 2 3 4 5
17. Estoy desesperanzado con mi futuro 1 2 3 4 5
18. He dejado de ocuparme de cualquier tema de la casa 1 2 3 4 5
19. Me siento intranquilo conduciendo 1 2 3 4 5
20. He reducido mis salidas fuera de la casa 1 2 3 4 5
21. Ahora camino distancias más cortas 1 2 3 4 5
22. Evito subir escaleras 1 2 3 4 5
23. Ahora tengo menos relaciones con otras personas 1 2 3 4 5
26

24. He descendido mi actividad sexual 1 2 3 4 5


25. Reacciono desagradablemente con mi familia 1 2 3 4 5
26. Me aíslo lo más que puedo de mi familia 1 2 3 4 5
27. Encuentro exagerado los cuidados de mi familia 1 2 3 4 5
28. Me siento abandonado por todos 1 2 3 4 5
29. Tengo graves problemas económicos 1 2 3 4 5
30. Reacciono lentamente ante lo que se dice o se hace 1 2 3 4 5
31. Tengo dificultades para reaccionar o resolver problemas 1 2 3 4 5
32. Olvido las cosas recientes (lugares, citas, nombres) 1 2 3 4 5
33. Me encuentro menos afectivo que antes 1 2 3 4 5
34. Tengo que esforzarme para mantener una conversación 1 2 3 4 5
35. Mantengo menos conversaciones telefónicas que antes 1 2 3 4 5
36. Me dedico más a mis pasatiempos que a mis actividades 1 2 3 4 5
físicas
37. Ahora me resulta más difícil entretenerme o divertirme 1 2 3 4 5
38. Trabajo menos horas que antes o en trabajos más ligeros 1 2 3 4 5
39. Deseo un trabajo al distinto que tengo 1 2 3 4 5
40. Deseo no volver a trabajar 1 2 3 4 5

Anexo 3. Procedimiento

Población
Experimental
Historia clínica Consentimiento
informado

Participantes
(Población de estudio)

Cuestionario de
calidad de vida y
prueba de esfuerzo
Pre- Rehabilitación

Monitozacion y cumplimiento

Cuestionario de
27

Anexo 4

Tabla 1.

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes según características epidemiológicas.
Período enero a septiembre, 2013.

Variables Estadísticos
n 20
Edad (años)(*) 60 ± 7
Género
Masculino 13 65,0%
Femenino 7 35,0%
Factores de riesgo
HTA 16 80,0%
Tabaco 9 45,0%
Diabetes mellitus 5 25,0%
(*) media ± desviación estándar
28

Anexo 5

Tabla 2

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes según antecedentes cardiovasculares.
Período enero a septiembre, 2013.

Variables n %
Revascularización percutánea
Si 14 70,0
No 6 30,0
Revascularización quirúrgica
Si 1 5,0
No 19 95,0
Tiempo con enfermedad
≤ 1 año 16 80,0
> 1 año 4 20,0
29

Anexo 6

Tabla 3

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes según fracción de eyección. Período enero a
septiembre, 2013.

Fracción de eyección n %
Normal 9 45,0
Disfunción sistólica leve 7 35,0
Disfunción sistólica moderada 2 10,0
Disfunción sistólica severa 2 10,0
30

Anexo 7

Tabla 4

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes según indicadores de prueba de esfuerzo pre
y post entrenamiento. Período enero a septiembre, 2013.

Pre Post
Variables p
entrenamiento entrenamiento
Duración PE (min) 7,2 ± 2,3 9,5 ± 1,9 0,005
METS 7,5 ± 1,9 9,3 ± 1,8 0,001
Consumo de VO2 28 ± 7 34 ± 6 0,001
R. FC a los 2 minutos 1,000
Adecuado 20 100,0% 18 94,7%
No adecuado 0 0,0% 1 5,3%
Valores expresados como media ± desviación estándar
31

Anexo 8

Tabla 5

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes no sometidos a revascularización miocárdica
según indicadores de prueba de esfuerzo pre y post entrenamiento. Período enero a septiembre,
2013.

Pre Post
Variables p
entrenamiento entrenamiento
N 5 5
Duración PE (min) 7,4 ± 2,3 10,4 ± 1,2 0,025
METS 4,3 ± 1,5 6,0 ± 0,7 0,022
Consumo de VO2 94 ± 15 108 ± 16 0,074
R. FC a los 2 minutos 1,000
Adecuado 5 100,0% 5 100,0%
No adecuado 0 0,0% 0 0,0%  
Valores expresados como media ± desviación estándar
32

Anexo 9

Tabla 6

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes según cambios en escala de calidad de vida
pre y post entrenamiento. Período enero a septiembre, 2013.

Pre Post
Variables p
entrenamiento entrenamiento
Percepción de salud 17 ± 5 15 ± 4 0,009
Sueño y descanso 6±3 5±3 0,026
Comportamiento emocional 5±2 5±2 0,260
Proyectos de futuro 5±3 5±2 0,899
Movilidad 10 ± 4 9±3 0,008
Relaciones sociales 14 ± 4 13 ± 4 0,374
Comportamiento de alerta 7±2 6±2 0,010
Comunicación 5±2 5±2 0,217
Tiempo de ocio y trabajo 11 ± 4 11 ± 5 0,866
33

Puntuación total 143 ± 32 137 ± 37 0,059


Valores expresados como media ± desviación estándar

Anexo 10

Tabla 7

Enfermedad Arterial Coronaria: Calidad de Vida en pacientes que asisten al programa de


rehabilitación cardíaca. Distribución de pacientes no sometidos a revascularización miocárdica
percutánea según escala de calidad de vida pre y post entrenamiento. Período enero a
septiembre, 2013.

Pre Post
Variables p
entrenamiento entrenamiento
n 5 5 -
Percepción de salud 15 ± 4 15 ± 3 0,890
Sueño y descanso 5±2 5±3 0,778
Comportamiento emocional 5±1 5±2 0,374
Proyectos de futuro 4±1 4±2 0,704
Movilidad 10 ± 3 8±3 0,105
Relaciones sociales 13 ± 3 13 ± 4 0,242
Comportamiento de alerta 7±2 5±2 0,118
34

Comunicación 5±1 4±1 0,033


Tiempo de ocio y trabajo 12 ± 2 9±5 0,310
Puntuación total 136 ± 30 126 ± 28 0,158
Valores expresados como media ± desviación estándar

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