Urbanismo Alternativo
Urbanismo Alternativo
Urbanismo Alternativo
Es aquel que encasillan como “raro” por no ser convencional, logra generar con un par de
movimientos, calidad de vida.
En palabras más sencillas el urbanismo alternativo trata de unir lo que es el contexto urbano
con lo ambiental, regenerar un lugar abandonado o que no se esté aprovechando de la
mejor forma, donde se pueda crear un ambiente ecológico y duradero.
Las ciudades ya no se tejen ni construyen como antes de arriba hacia abajo por mandato
del gobierno porque la sociedad es cada vez más democrática y participativa, asegura el
arquitecto Gerardo Asali, socio fundador de la firma Desarrollo Arquitectura
Sustentabilidad (DAS), cuyas estrategias de trabajo consisten en la detección de
problemas, la propuesta de soluciones y la búsqueda de las vías para que se lleven a cabo.
Según la filosofía de la firma no existe el arquitecto genio porque hay tanta complejidad en
las intervenciones que se requiere de un equipo multidisciplinario tanto para el
entendimiento del problema como para la traducción en soluciones; por ejemplo, cómo
generar espacio público cuando no lo hay.
EJEMPLOS:
PARKLET:
El “Parklet”, que consisten en parques móviles que tienen como objetivo la recuperación
de espacios invadidos por los automóviles y que son aprovechados para la creación de
espacios recreativos. El primer “Parklet” estuvo localizado en la calle de Oscar Wilde,
en Polanco, en la Ciudad de México.
El proyecto, que surgió por una invitación de la Fundación Más Espacios, se inspiró en
un movimiento que inició en San Francisco hace seis años donde se cuestionó el
“derecho” del automóvil de ocupar tanto espacio de estacionamiento en las calles y la
pérdida de este espacio para tomarse un café, por ejemplo, si así lo desea la gente.
“Mientras menos usamos el coche más evolucionados somos”, sugiere Asali.
PROYECTO DE LA “HIGH LINE”:
El parque High Line de Nueva York, es hoy una realidad gracias al empeño de dos
vecinos que convencieron a su comunidad para salvarlo del derribo. El parque inaugurado
hace unos años en Manhattan (en 2009 el primer tramo, en 2011 el segundo tramo y el
tercero será en 2015) recupera unas vías de tren elevadas en desuso recorriendo algo más
de dos kilómetros de la zona suroeste de la isla.
En la década de 1930 se decidió construir un recorrido elevado, a unos 9 metros del suelo,
para los trenes. En los años 60 se demolió la parte más meridional de la infraestructura. En
los años 80 las vías se dejaron de utilizar y una delgada capa de tierra fue depositándose
entre los raíles y traviesas junto a semillas que germinaban y daban origen a plantaciones
que acabaron apropiándose del lugar.
En 1999 dos vecinos de la zona, Joshua David y Robert Hammond crearon la asociación
Friends of the High Line para impedir el derribo total de la estructura previsto por intereses
comerciales y especulativos, con la idea de recuperarla como un espacio público, de
disfrute de todo la comunidad. Poco a poco convencieron a parte de sus vecinos, a
arquitectos, artistas, personalidades y gente corriente que después de los estudios de
viabilidad pertinentes, etc. consiguieron que no solo que no se derribara sino que se
convirtiera en un parque y hoy es uno de los lugares más interesantes y visitados de Nueva
York.
PROYECTO DE REFORMA B. PROYECTO EN LA AVENIDA 42
CUATRO PROYECTOS PARA CONVERTIR LA CALLE 42 DE NUEVA YORK EN UN
LUGAR HABITABLE Y LIBRE DE AUTOS:
La calle 42 de Nueva York es una de las avenidas más visitadas de la ciudad debido
a que en sus 3,5 kilómetros de largo cuenta con emblemáticos lugares, como Times
Square, clásico punto de celebraciones masivas, la Biblioteca Pública, el edificio
Chrysler, la plaza de las Naciones Unidas, el edificio de la ONU y teatros.
Se quieren crear espacios con el único requisito de que cumpla con un solo objetivo:
crear un espacio que sea amigable con los peatones, libre de automóviles y que
cuente con un boulevard sustentable.
En este concurso la idea fue rescatada por Paul Boyle, estudiante de la Universidad de Western
(Australia), quien propone la circulación de un tren ligero por la avenida para transformarla en
un parque, lo que se mantendría en el tren que tendría estaciones con plantas nativas y, en los
alrededores, pasarelas peatonales con vegetación que actúen como
Rescatar el espíritu de cada barrio de la Calle 42 es la apuesta de los diseñadores Alfred Peter,
Charles Bové y Karen (Bloch) Listowsky, quienes buscan trazar un tren ligero que cumpla con
estas características a través de su diseño. Así mismo, el tren es descrito como una acera en
movimiento, en donde los ciudadanos se transportarían por un jardín lineal.
Circuito medioambiental
Entre las avenidas 8 y 9 existe un gran espacio que actualmente es usado como
estacionamiento para autos. En el plan del arquitecto Tiago Torres Campos, este lugar se podría
convertir en un terrario y unirse al proyecto de tranvía que conectaría lugares naturales de la
ciudad, como Waveland Park East 42ª y los pequeños humedales existentes. De esta manera,
el tren ligero no solo se convertiría en un atractivo urbano que fortalecería una zona con una
tradición cultural ligada al teatro, sino que también fomentaría un circuito medioambiental en
medio de la ciudad.
Una mutación social, otra medioambiental y una económica son las que propone el planificador
urbano Mathieu Deforme a través de la implementación de un tren ligero que describe como “un
catalizador para una renovación urbana”.
La primera mutación, de tipo social, tiene como objetivo que el tren conecte distintos centros de
tránsito de Nueva York en donde la libertad de expresión sea algo presente en el ambiente.
La mutación medioambiental apunta a conectar de mejor manera a los ciudadanos con los
espacios verdes de la ciudad. Finalmente, la mutación económica busca crear más espacios
para las actividades económicas al nivel de la calle, sean éstas festivales gastronómicos,
actividades deportivas, actividades al aire libre y mercados, entre otras.