Qué Es El Latifundismo
Qué Es El Latifundismo
Qué Es El Latifundismo
Aunque en el siglo XXI todavía existen fundos de vasto tamaño que están bajo el
dominio de ricos hacendados, en épocas pasadas esta proporción de latifundistas
tendía a ser mayor en diversas partes del mundo, pues no se había realizado en
aquellos tiempos unas reformas agrarias que fueran lo suficientemente eficientes
para saciar las necesidades de la población campesina. El latifundismo, de esta
manera, constituyó un serio problema que generó crisis y revoluciones.
Desde mediados del 95, explicó, con la nueva Constitución y una nueva Ley de
Tierras “sumamente liberal” empieza a aparecer “lo que podríamos llamar nuevos
latifundios”
Por otro lado, se encuentra la política de las grandes obras de irrigación de zonas
desérticas. Citó el caso de Chavimochic, donde “el 80 por ciento de esas
hectáreas son propiedad de 11 grupos económicos”. Estos proyectos se hacen
sobre tierras del estado y con recursos fiscales
Un tercer canal es lo que ocurre con las empresas azucareras que han
concentrado una gran parte de la producción. Entre estas destaca el Grupo Gloria,
que “sumando todas sus empresas azucareras llegan a más de 65 mil hectáreas”.
Fernando Eguren criticó la postura del fujimorismo, como la sostenida por José
Chlimper, asesor de Keiko Fujimori en temas agrarios, según la cual no existe
problema alguno con la acumulación de tierras.
Los grandes territorios en pocas manos, explicó Eguren, pueden dar paso a
grandes poderes políticos territoriales, y que los propietarios tengan influencia
sobre los gobiernos regionales, sostuvo el analista.
"Diferentes expertos –entre el ellos del Banco Mundial-, señalan que la economía
de gran escala no es la más rentable, y la agricultura familiar tiene grandes
potencialidades" concluyó.
La reforma agraria
Cuando se da curso a la Reforma Agraria se buscaba romper con un sistema que venía
operando hacía por lo menos doscientos años, generando pésimas condiciones de vida para
las personas que venían desarrollando su vida al alero de dichas estructuras. A su vez, se
buscaba dinamizar la actividad agropecuaria que era considerada la más atrasada de la
estructura económica del país. La solución estaba en intervenir dichas estructuras sociales y
productivas que sostenían un modelo de acumulación basada principalmente en la
hegemonía de los recursos.
40Como hemos visto en el caso analizado, se logró expropiar y distribuir una parte
importante de la superficie agrícola, sobre todo la que tenía que ver con las tierras bajo
sistema de riego, y una parte importante de las tierras de secano. Hacia mayo de 1973 había
setenta y seis asentamientos, catorce cooperativas asignadas, ciento siete centros
campesinos, veintidós Centros de Reforma Agraria (CERAS) y tres Centros Productivos
(CEPROS), lo que da un total de doscientas veintidós organizaciones campesinas (Garrido
et al., 1988). El cruce de estos dos datos nos hace suponer que existía una presencia
territorial importante. No obstante, la fácil disolución, tanto por la amenaza militar como
por la fragilidad de las organizaciones productivas hacen plantear la duda respecto a la
consolidación real de la territorialidad de dichas organizaciones.
42Es por esto que se cree que se trata de una Reforma Agraria inconclusa pues la ruptura
del antiguo sistema de tenencia de la tierra, como base de las relaciones productivas, no se
ve complementada por el control efectivo de los recursos implicados, ni con la autonomía
del campesinado en la producción agrícola (Kay, 1980a), así como con el excesivo énfasis
en la redistribución de tierras más que en la restructuración del sector agropecuario en su
totalidad (García, 1973). Dicho de otra forma, es la relación directa con la naturaleza en su
conjunto -en este caso específico, el agroecosistema- la que garantiza la emancipación del
campesinado de las estructuras capitalistas de dominación, y es allí donde está la
profundidad histórica del proyecto de Reforma Agraria. Por lo tanto, en este caso, no se
logró superar la etapa de redistribución de tierras, hacia un control efectivo del territorio.
43Por lo tanto, y puesto en perspectiva, la Reforma Agraria sólo vino a terminar con la
hacienda, la cual es una forma específica de explotación de la naturaleza. Aquella
construcción histórica respecto a la hacienda ha predominado en los análisis sobre este
conflicto, pues es en este sistema de producción que se materializó el concepto de
latifundio. Para todos los sectores, tanto los que estuvieron a favor como los que se vieron
afectados, la Reforma Agraria venía a transformar para siempre la estructura productiva.
No obstante, y en esto concordamos con Kay (1980b) las transformaciones en las relaciones
de dominación no lograron la profundidad que aspiraba la Reforma Agraria.