Bosque de Valores
Bosque de Valores
Bosque de Valores
DESARROLLO:
REFLEXIÓN:
Aunque los valores que aparecen en los árboles son los mismos, cada
uno es diferente, porque cada grupo los habrá colocado como hayan
considerado por distintos motivos.
Hay que respetar y comprender que dentro del bosque tenemos que
convivir con otros árboles diferentes.
ANEXO
1
Cruzando el río
2
Amigos
Dice una linda leyenda árabe que dos amigos viajaban por el desierto
y, llegados a un determinado punto del viaje, se pusieron a discutir.
El ofendido, sin nada que decir, escribió en la arena:
<<Hoy, mi mejor amigo me pegó una bofetada en el rostro>>
Siguieron adelante y llegaron a un oasis, donde resolvieron bañarse.
El que había sido abofeteado estuvo a punto de ahogarse, pero fue
salvado por el amigo. Al recuperarse, tomó un estilete y escribió en
una piedra:
<< Hoy, mi mejor amigo me salvó la vida>>
Intrigado, el amigo preguntó:
- ¿Por qué, después de que te lastimé, escribiste en la arena, y
ahora escribes en una piedra?
Sonriendo, el otro amigo respondió:
- Cuando un gran amigo nos ofende, debemos escribir en la
arena, donde el viento del olvido y el perdón se encargarán de
borrarlo y apagarlo. Pero cuando nos sucede algo grande,
debemos grabarlo en la piedra de la memoria del corazón, de
donde ningún viento del mundo entero podrá borrarlo.
3
El barquero y el sabio
Un sabio griego hacía exploraciones por las tierras del Nilo. Muy
satisfecho de su ciencia y de su filosofía, buscaba ufano por aquellas
regiones oscuras los secretos que guarda la naturaleza.
En una ocasión tuvo que pasar un río y subió a una barca. El viejo
barquero movía acompasadamente sus remos y miraba distraído las
aguas. De pronto, el sabio le preguntó:
- ¿Sabes astronomía?
- No, señor.
- Pues has perdido la cuarta parte de tu vida. ¿Sabes filosofar?
- No, señor.
- Pues has perdido la otra cuarta parte de tu vida. ¿Sabes algo de
la historia de este mundo?
- No, señor.
- Pues has perdido otra cuarta parte de tu vida.
En esto, un golpe de viento zarandeó con estrépito la barca, la cual
no resistió el golpe, dio media vuelta, y los dos cayeron al agua. El
barquero comenzó a nadar a grandes brazadas en busca de la orilla;
el sabio se hundía sin remisión dando grandes gritos y luchando por
salvarse.
- ¿Sabes nadar, amigo sabio?
- No, señor.
- Pues ha perdido usted toda la vida.
4
Arreglar el mundo
5
Con qué ojos miramos
6
El leñador trabajador
7
La piedra de hacer sopa
8
Las tres rejas
9
Los mil espejos
10
Una competición de sapos
11
Una estrella de mar
12
Una historia china: el caballo
13
ANEXO
14
15
16
17