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Frutos de vida: Volumen 1
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Frutos de vida: Volumen 1
Libro electrónico87 páginas1 hora

Frutos de vida: Volumen 1

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Información de este libro electrónico

Un total de tres cuentos.
¿Tres cuentos? ¡Si hay cuatro!
Lo sé, pero el último está reservado para aquellos que tengan un brillo especial.

En esta colección de relatos cortos, el autor nos invita a explorar la vida desde una nueva perspectiva. Compuesta por cuatro cuentos interconectados, cada uno de ellos revela la esencia de vivir plenamente y el poder de encontrar sentido incluso en los momentos más oscuros.
A través de estas historias, aprenderemos que, a pesar de los desafíos, siempre estamos acompañados desde el preciso instante en el que fuimos concebidos. Nunca estamos solos. Con un tono esperanzador, Frutos de Vida nos recuerda que, al enfrentar la rutina, la fatiga y el desánimo, aún podemos arriesgarnos a dar color a nuestra existencia.
Si alguna vez te sientes atrapado en un pozo gris y sin salida, estas narrativas te inspirarán a redescubrir tu propósito y abrazar la Vida con valentía.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento18 nov 2024
ISBN9788410894266
Frutos de vida: Volumen 1

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    Frutos de vida - María Alejo Armijo

    Imagen de portada

    © Derechos de edición reservados.

    Letrame Editorial.

    www.Letrame.com

    [email protected]

    © María Alejo Armijo

    Diseño de edición: Letrame Editorial.

    Maquetación: Juan Muñoz

    Diseño de cubierta: Rubén García

    Ilustradora: Carmen María Martínez Herreros

    Supervisión de corrección: Celia Jiménez

    ISBN: 978-84-1089-426-6

    Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de cubierta, puede ser reproducida, almacenada o transmitida de manera alguna ni por ningún medio, ya sea electrónico, químico, mecánico, óptico, de grabación, en Internet o de fotocopia, sin permiso previo del editor o del autor.

    «Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra (www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47)».

    .

    Me llamo Miguel Castellano Jiménez y tuve el honor de ser profesor de la autora del libro que ahora sostienes entre tus manos. Me ha pedido que escriba unas palabras que sean la antesala de los cuatro relatos que contiene. Después de los nervios, de la ilusión que me hizo su propuesta, vinieron la indecisión y un tenue miedo… ¿cómo iba a enfocarlo? Me van a permitir pues que lo haga como he descubierto me siento más cómodo y seguro: como me lo dicta el corazón.

    Corría el año 1999… Septiembre olía a cuadernos, a libros, a lápices, a rostros infantiles, todo a estrenar. Veinticinco pupitres flamantes serían el hogar aquel curso, de unos niños y niñas que, como yo jamás podía sospechar, se instalarían para siempre en mi corazón; entre ellos… tú, María.

    Desde los primeros días, tu mirada curiosa ya me estaba anunciando el caudal de bondad que atesorabas y así y, a lo largo de los cuatro cursos que tuve el honor de ser tu tutor, pude comprobar que detrás de esa mirada se ocultaba una niña a la que la sociedad le tenía reservado un brillante destino y he podido comprobar que no me equivocaba en mi diagnóstico.

    Quise inculcaros el amor a la literatura, sin olvidar las otras materias, y para eso puse en marcha, pusimos en marcha, dos escenificaciones por curso, una religiosa en Navidad y otra a final de curso, esta ya una obra de teatro para niños, pero con bastante carga literaria.

    Todas fueron maravillosas; ¡qué bien lo pasamos!

    Entre las escenificaciones navideñas disfrutamos de, por ejemplo, Un par de pastorcillos, El pastorcillo y la estrella, Se armó el belén… ¿Recuerdas?

    Allá por 2001 en Un par de pastorcillos y con Izan Ramón como copresentador comenzabas…

    «En el Principio de los tiempos Dios creó al Hombre dándole supremacía y poder sobre todas las criaturas creadas y lo colocó en un paraíso donde todo era felicidad y paz».

    Aún me emociono al recordarlo…

    Nuestras obras de teatro: La bella durmiente del asfalto, La que amó a su pueblo, La pajarita de papel y la despedida con La vieja melodía.

    En esta última, y de nuevo con Izan Ramón de copresentador contigo, comenzabas…

    «Queridos padres, profesores, familiares, compañeros y compañeras, amigos todos…».

    ¿Te acuerdas? ¡Cómo olvidarlo!

    Esto ya sonaba a despedida, nos decíamos adiós.

    Tú tomarías otro rumbo y un mundo nuevo se abría ante ti y a mí se me rompía el corazón al ver que cuatro años se me iban y con ellos un grupo de alumnos, todos queridos y en él tú, María.

    Quiero destacar un hecho que de seguro dará claves al lector y le harán comprender tu evolución hacia lo que es ser un buen comunicador… una excelente escritora.

    Se me presentó un caso en el que una alumna se incorporó al grupo cuando el curso ya estaba avanzado; a la niña le costaba integrarse y yo solicité tu ayuda y fuiste capaz de integrarla en el grupo.

    Ante este hecho y otros muchos que me los guardo, he de decirte que tienes el don de curar heridas íntimas. Escuchas, das aliento, regalas dulzura y sosiego en cada uno de tus gestos y palabras. Y todo esto que tú tienes, el mundo lo necesita. Así lo he podido comprobar en mí siempre, sobre todo a lo largo del año 2021 en el que pasé pruebas difíciles y tú, aun en la distancia, siempre has estado ahí. Algo que jamás olvidaré y siempre te agradeceré.

    Ya hace un tiempo que saltaste a otro nivel. Ahora sí que el mundo está experimentando, a través de tu pluma, todo esto que he descrito antes. En esta ocasión traducido en la figura, por ejemplo, de un ángel que por primera vez pisa la Tierra con un importante encargo. O también cuando nos abres y cierras puertas de autobuses que nos llevan o traen a lugares inesperados, así como cuando nos invitas a agarrar una bandada de globos que nos eleven por encima de la realidad y nos hagan soñar. Sin lugar a dudas, María, estos relatos van a pintar de colores más vivos la vida de aquellos que tengan el placer de leerlos. El Brillo es el de la fantasía de tu escritura.

    Han pasado ya más de veinte años desde que nos dijimos adiós.

    La semilla quedó sembrada y a la vista está que, en tu caso, ha dado buen fruto.

    No he sido yo solo, muchos otros profesores hicieron también su siembra y, se puede comprobar, que todo aquel que en tu campo siembra, tiene la cosecha asegurada.

    Hoy tengo la dicha y la suerte de ser yo el elegido por ti para proclamar, presentar y difundir este precioso ramillete de relatos. Te deseo toda la suerte que mereces en tu carrera literaria y que el público siga saboreando y deleitándose con tu obra.

    Tu profe de primaria,

    Don Miguel Castellano Jiménez.

    Mi Primer Encargo

    .

    Este relato corto abraza algo tan sencillo como es la vida misma. Una relación tan especial que nos acompaña siempre, aunque no la tengamos en cuenta.

    No sé muy bien cómo surgió esta idea. Simplemente apareció y se ha convertido en una de las

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