Goldin. Construcción de Lectores
Goldin. Construcción de Lectores
Goldin. Construcción de Lectores
y desafíos en la construcción
de lectores
Daniel Goldin*
1 Anoto en este sentido que la mayor parte de los discursos abarcadores que conozco
parecen estar sustentados en acercamientos cuantitativos al fenómeno de la cultura escrita
y categorías y conceptos no discutidos y que, sólo a últimas fechas, ha comenzado a haber
un acercamiento diferente a esta cuestión, que se vale de los estudios de historia, sociolo-
gía y antropología para replantear los conceptos y categorías y consiguientemente, los
planteamientos problemáticos acerca del problema.
2 La aportación de Peroné en este sentido.
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Se dice con frecuencia que hay cada vez menos lectores. Tal vez. 3
Pero para los fines de este panel me parece más relevante hacer
3 La mayor parte de las veces es una opinión no sustentada. o sustentada en metodologías
muy cuestionables, casi siempre cuantitativas. Incluso definiciones aparentemente cuali-
tativas como las usadas por los franceses son, en último término, cuantitativas pues gra-
dúan la escala de lector débil-lector fuerte según la cantidad de libros leído en un año. Por
lo demás, si de lo que se trata es de reflexionar sobre la construcción de lectores, no creo
que sea de la mayor importancia si esta afirmación no va acompañada de una caracteriza-
ción más fina de las modalidades de ser lector.
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Sin duda es cierto que los editores hemos debido cambiar para
adaptarnos a nuevas condiciones. Pero también hemos sido acto-
res de ese cambio, y si no queremos caer en un fatalismo inmovili-
zante, debemos comprender que un nuevo escenario hace que las
antiguas respuestas pierdan vigencia, presenta problemas, pero no
impone una sola vía para resolverlos.
Por eso me parece importante que revisemos las diferentes trans-
formaciones que ha habido en cada una de las etapas de la produc-
ción y circulación de lo escrito y ver de qué manera han contribuido
a hacer de la producción y circulación de los libros (independien-
temente de su calidad) un elemento potenciador de la masificación
de la cultura.
Al comparar las transformaciones de nuestro gremio con las
que han ocurrido en otros sectores es fácil percibir pautas comu-
nes. Como todos los otros profesionales, los editores necesaria-
mente hemos tenido que aprender a ponderar nuestro trabajo en
términos de eficiencia y eficacia, a racionalizar gastos y a replantear
nuestro oficio y nuestro negocio. El desconcierto no ha sido poco,
por eso tal vez hemos asumido los retos y desafíos de este nuevo
escenario con menos creatividad y profundidad que la que debería
caracterizar al gremio que durante siglos tuvo en su encomienda la
salvaguarda de las ideas y creaciones del hombre. Desde luego con
una pobre consciencia de gremio.
alfabetización ampliada y las que actualmente se dan a partir del uso de las computadoras y
el internet.
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10 que hoy impera en instituciones de lo más disímiles que antes recelaban o cuestio-
naban la formación de lectores.
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