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EJRCITO EXTRAORDINARIO MAYO 2011- ao LXXII -nm 842

Revista
EDITA

DIRECCIN
Director
General de Brigada
ngel Luis PONTIJAS DEUS
Subdirector, Jefe de Colaboraciones y
Administracin
Coronel Eduardo Ortiz de Zugasti Aznar
Jefe de Ediciones
Coronel Julin Barrios Barbero
CONSEJO DE REDACCIN
Coroneles
Melndez Jimnez,Izquierdo Navarrete, Domnguez
del Valle, Pouts lvarez,
Garca-Mercadal y
Molina Pineda de las Infantas
Tenientes Coroneles
Muoz Blzquez, Farr Rebull, Urteaga Tod y
Borque Lafuente
Comandantes
Hernndez Calvo, Garca Romera, Dez Alcalde,
Martnez Gonzlez, Villalonga Snchez, Mar y
Marn, Jarillo Caigueral.
Capitn
Ramrez Lpez
Suboficial Mayor
Baena Muoz
NIPO: 075-11-004-X (Edicin en papel)
NIPO: 075-11-005-5 (Edicin en lnea)
Depsito Legal: M. 1.633-1958
ISSN: 1696-7178
Correctora de Estilo
Paloma Prado Caballero
Servicio de Documentacin
Emilia Antnez Monterrubio
Corrector de Pruebas
Capitn Jos Manuel Riveira Crdoba
Diseo Grfico y Maquetacin
Luis Angelina Higuera,
Miguel Garca Tirado,
Ignacio Moreno Piqueras y
Bayardo Molina Nez

ndice
PREPARACIN DE LA FUERZA
ARTCULOS

La Fuerza Terrestre
VIRGILIO SAUDO ALONSO DE CELIS.
Teniente General. Jefe de la Fuerza Terrestre. DEM.

OTAN, Unin Europea, Eurocuerpo.


La contribucin de las unidades de la Fuerza Terrestre a los
compromisos internacionales suscritos por Espaa
JUAN FERNANDO LINARES MARTNEZ.
Comandante. Ingenieros. DEM.

12

Operaciones en terriotorio nacional.


Apoyo a autoridades civiles y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del
Estado
LVARO KROMER ESPEJO.
Comandante. Infantera. DEM.

20

Fotocomposicin, Fotomecnica e Impresin


CENTRO GEOGRFICO DEL EJRCITO
Colaboraciones Corporativas
ASOCIACIN ESPAOLA DE
MILITARES ESCRITORES
Promotor de Publicidad
VA EXCLUSIVAS SL
Modesto Lafuente,4-28010 Madrid (Espaa)
Macarena Fernandez de Grado
Telf.: 91 448 76 22 / Fax: 91 446 02 14
Email: [email protected]
http: // www.viaexclusivas.com
Fotografas: MDEF, SEPUB,
DECET, FUTER, y Alberti
REVISTA EJRCITO
C/. Alcal 18, 4. 28014 MADRID
Telf.: 91-522 52 54. Telefax: 91-522 75 53

28

El proceso de generacin y preparacin de unidades para su despliegue


en ZO en el mbito de la Fuerza Terrestre
ANTONIO RUIZ BENTEZ.
Coronel. Infantera. DEM.
Unidades CIMIC en operaciones:
generacin y misiones
JUAN ANTONIO SOTO GONZLEZ.
Teniente Coronel. Infantera.

Informacin de inters para nuestros lectores


Los distintos nmeros de la revista EJRCITO (excepto de los aos 2004 y 2005) estn disponibles
en formato digital en las siguientes direcciones:
http://www.portalcultura.mde.es
http://portal.mdef.es/portalpublicaciones/docs/docpublicaciones/index.html/

THE IMPORTANCE OF PUBLIC INFORMATION


IN THE LAND FORCE FRAMEWORK. ...................................................................... 104
Enrique ngel Costas Rodal. Major. Infantry.
The Land-Force Headquarters Public Information Office, as a specialized agency in the
management of public information, is the main adviser to the Land-Force Commander in
this matter, and to all personnel under his authority who has any relation with the media,
all this said in the framework of the new Army Communication System that regulates all
the activities related to external communication, internal communication, public relations,
protocol and image.
Now public information doesnt limit itself to relations with the mass media, but also
includes other fields such as public relations and protocol, advertising and a personalized
human attention.

MEDICAL SUPPORT TO TRAINING AND EDUCATION EXERCISES. ....................... 114


Gabriel Jos Caballero Rodrguez. Lieutenant Colonel. Military Health Corps. Medicine.
The available medicine and nursing specialist personnel to treat the force is inferior to
desirable, so it is necessary an effective use of the human and materiel health resources.
Here the legislation that regulates the health support is studied, clarifying some aspects
that could mislead.

GENERAL CASTAOS CHAIR. ................................................................................. 122


Jos Miguel Arroyo Carrillo. Colonel. Infantry.
General Castaos Chair, created upon the initiative of the South Military Region and
linked with the city of Seville and its Capitana General (Sevilles General Command),
constitutes a cultural civic-military platform for the study and investigation of historical,
artistic and cultural themes of Spain and countries with Hispanic roots. The chair has
transformed its activities to increase its interest in the field of preparation and generation
of units to its adjustment to fulfill the missions assigned to the Spanish Army.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

131

Ejrcito
EXTRAORDINARIO MAYO 2011 AO LXXII. NM. 842

38
46
54

84

Versatilidad en la preparacin ante la


diversidad de los conflictos
PABLO DELGADO DE LUQUE.
Teniente Coronel. Infantera. DEM.

Las nuevas tecnologas en la preparacin


de las unidades
DAVID TARIFA RAMREZ.
Comandante. Infantera. DEM.

94

La perspectiva de gnero en la Fuerza Terrestre


FERNANDO SNCHEZ PREZ.
Comandante. Infantera. DEM.

62

Campaa Modelo de Ciudadana


TOMS GARCA PALACIOS.
Teniente Coronel. Infantera. DEM.
MIGUEL NGEL LPEZ DE LERMA CALDERN.
Teniente Coronel. Infantera.

68
74
78

Nuevos retos para la Inteligencia.


Preparacin para operaciones
EMILIO TOM DELGADO.
Teniente Coronel. Artillera.

La generacin de los medios de mando y control


para zona de operaciones
PEDRO CORTS RUIZ.
Comandante. Transmisiones.

La guerra electrnica (EW)


en las operaciones de proyeccin
JOS MANUEL FERNNDEZ GARCA.
Coronel. Transmisiones. DEM.

La Revista Ejrcito es la publicacin profesional militar del


Ejrcito de Tierra. Tiene como finalidad facilitar el intercambio
de ideas sobre temas militares y contribuir a la actualizacin
de conocimientos y a la cultura de los cuadros de mando. Est
abierta a cuantos compaeros sientan inquietud por los temas
profesionales. Los trabajos publicados representan, nicamente,
la opinin personal de los autores

104
114
122

Mdulos de material para instruccin y adiestramiento.


Una solucin transitoria
IGNACIO OLAZBAL ELORZ.
Teniente Coronel. Caballera. DEM.
Marco jurdico de la Fuerza Terrestre
en operaciones exteriores
CARLOS MELN MUOZ.
Coronel. Cuerpo Juridico Militar.
NGEL SERRANO BARBERN.
Teniente Coronel. Cuerpo Juridico Militar.
JOS ROMERO MUROS.
Teniente Coronel. Cuerpo Juridico Militar.

La importancia de la comunicacin pblica en el


marco de la Fuerza Terrestre
ENRIQUE NGEL COSTAS RODAL.
Comandante. Infantera.

Apoyo sanitario a ejercicios de instruccin y


adiestramiento
GABRIEL JOS CABALLERO RODRGUEZ.
Teniente Coronel. Cuerpo Militar de Sanidad (Medicina).

La ctedra General Castaos


JOS MIGUEL ARROYO CARRILLO.
Coronel. Infantera.

SECCIONES

128

Sumario Internacional

Redaccin, Administracin y Suscripciones: Seccin de Publicaciones de la JCISAT. C/. Alcal 18,


4. 28014 MADRID. Telf.: 91-522 52 54. Telefax: 91-522 75 53. Pg. WEB: www.ejercito.mde.es,
E-mail: [email protected]; revistaejercito @telefonica.net. Suscripcin anual: Espaa 12,02
euros; Europa:18,03 euros; resto del mundo: 24,04 euros. Precio unidad: 2,4 euros.

(IVA y gastos de envo incluidos)


LA VIGENCIA DE LOS PRECIOS
REFERIDOS SER DURANTE el AO 2011

LA FUERZA

TERRESTRE
Virgilio Saudo Alonso de Celis. Teniente General.
Jefe de la Fuerza Terrestre. DEM.

El alto grado de instruccin y adiestramiento que demostr la


Compaa en la emboscada no es fruto de otra razn que la del
tiempo que se han mantenido los miembros de la Unidad trabajando
juntos, creando as confianza y cohesin entre ellos y una buena
preparacin.
Op. R-A (Un jefe de pelotn)

a situacin en los mbitos de seguridad y defensa haba experimentado un


cambio sustancial en la ltima dcada del pasado siglo XX. Nuevos riesgos y
amenazas haban aparecido en el panorama geoestratgico y todo ello exiga
una transformacin en nuestras Fuerzas Armadas, ya totalmente profesionales, con
objeto de conseguir su adaptacin a las circunstancias y necesidades derivadas
de una nueva situacin.
La respuesta a esa necesidad de transformacin se recogi en el RD. 416/2006
donde se aprob una nueva estructura de la Fuerza y se sealaba que dentro de
la organizacin de la Fuerza del Ejrcito de Tierra habr un nico mando responsable de la preparacin y generacin de la fuerza, mando que la Directiva
07/06 del Estado Mayor del Ejrcito (EME) asign a la Fuerza Terrestre cuyos
cometidos fundamentales sern la preparacin de las unidades y la generacin
de las estructuras operativas hasta nivel brigada.
Con la aplicacin de la normativa vigente derivada del RD. citado y aprovechando la experiencia acumulada por la Fuerza de Maniobra (FMA), la Fuerza
Terrestre (FUTER) tom conciencia de las responsabilidades que tena y, paso a
paso y sin descanso, empez a recorrer el camino para ir asumiendo los cometidos que se le haban encomendado.
Generar y preparar significan mucho: Buscar a los mejores y prepararlos
para que sean mejores. Este es el espritu general de la FUTER y todo ello con
la finalidad de conseguir que a ZO no se va a aprender, se va a responder y a
responder bien desde el primer da.
Tenemos una gran responsabilidad, pues las operaciones en las que estamos
participando son muy demandantes y no tenemos razn para pensar que otras
emergentes no lo sean, por ello adiestrarse de manera rigurosa es una necesidad

incuestionable. Su valor, si se hace con realismo,


es inestimable e incalculable.
Nuestra preparacin reposa sobre la adquisicin y el conocimiento slido de las tareas
a nivel individual y colectivo, es decir, en la
preparacin tctica y tcnica y fsica de nuestros
cuadros de mando y tropa, y tambin de la formacin moral de los mismos. Todo ello buscando
como resultado final el tener unidades adiestradas, cohesionadas y motivadas para ejecutar
de manera impecable los cometidos que se les
encomienden, superando la fatiga, la privacin y
el peligro que entraan las operaciones.
Todo lo anterior tiene que estar basado en el liderazgo de cada jefe de unidad, cualquiera que sea
el nivel de esta. Estos jefes deben ser competentes,
implicar a sus subordinados, preocuparse por ellos
y respetarlos, convencer, motivar, tener confianza
en s mismos, capacidad de decisin, amor a la responsabilidad, ser creativos y con visin de futuro.
La Fuerza Terrestre ha asumido su papel y
todos sus componentes estn totalmente implicados en el cumplimiento de los cometidos
que se nos han asignado. Se puede afirmar que
estamos convencidos y orgullosos del trabajo
que realizamos y de cmo lo realizamos, de la
preparacin de nuestras unidades y, sobre todo,
del gran afn de superacin para mejorar en todo
lo que hacemos.

La operacin se desarroll
como nos ensearon. Lo hice lo
mejor que pude, por lo tanto
estoy orgulloso de mi actuacin,
dada la presin del momento y
ser la primera vez que me vea
en una situacin de este tipo.
Me di cuenta de la importancia
de haber hecho una buena
preparacin en TN
(Op. R-A: Un soldado)

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

OTAN,
Unin Europea,
Eurocuerpo.
La contribucin de las unidades
de la Fuerza Terrestre a los
compromisos internacionales
suscritos por Espaa
Juan Fernando Linares Martnez. Comandante. Ingenieros. DEM.

Nivel Operacional y Tctico

En este trabajo se relacionan las fuerzas la Fuerza


de Respuesta y Battle Group de la OTAN, as como el
Eurocuerpo a las que han de contribuir unidades
de nuestro Ejrcito para cumplir los compromisos
suscritos por nuestra nacin, as como la generacin y
preparacin de las mismas.

onceptos como la defensa colectiva o la


seguridad compartida hace tiempo que no
son desconocidos para las unidades de la
Fuerza Terrestre, como no lo son para las Fuerzas
Armadas espaolas. No en vano, la Directiva
de Defensa Nacional de 2008 apuesta por el
multilateralismo como medio para la actuacin
concertada en las relaciones internacionales y
para la resolucin de conflictos.
De esta manera, la respuesta multilateral se
encuentra presente en nuestros das en la mayor
parte de los escenarios, ya se trate del rea euroatlntica o de otros ms lejanos pero no menos
importantes para los pases occidentales, donde
organizaciones como la OTAN estn actuando.
Sin embargo, la eficacia de este multilateralismo
exige que las capacidades que puedan ser requeridas estn efectivamente disponibles para su
empleo contra las posibles amenazas. Y es que
los estados, en este campo de actuacin multilateral, dejan de ser autosuficientes y necesitan
las capacidades aportadas por otros para poder
emplearlas cuando corresponda; todo ello sin olvidar que la no disponibilidad inmediata de estas
capacidades hara desaparecer, en gran medida,
el poder disuasorio de estas fuerzas.
Para asegurar esta disponibilidad los pases se
han dotado de los mecanismos y organizaciones
necesarios. As, la OTAN, en la Cumbre de Praga
(noviembre de 2002) dio luz verde a la Fuerza de
Respuesta de la OTAN (Nato Response Force-NRF)
y aprob el Compromiso de Capacidades de Praga
y, con parecida finalidad, la Unin Europea cre el

concepto Battle Group (BG) en la Conferencia de


Bruselas de 2004. Estructuras estas que permiten
disponer de fuerzas multinacionales, alistadas y
preparadas para hacer frente a las posibles amenazas que puedan surgir, en los escenarios que para
cada una de ellas se establecen y en el cumplimiento de las misiones aprobadas por el organismo internacional que les da carta de naturaleza.
Para los pases, el disponer de estas unidades
pre-alertadas es un requerimiento muy demandante. Las capacidades exigidas, el grado de
cobertura establecido, los tiempos de reaccin
marcados (notice to move-NTM), hacen que los
pases deban realizar un esfuerzo importante para
mantener estas fuerzas alistadas y preparadas, y
en disposicin de actuar en las circunstancias
mencionadas.
DETALLES SOBRE LA NRF Y EL BG
En el mbito OTAN, la NRF constituye la
punta de lanza de las fuerzas de la Alianza. El
concepto NRF se lanz en la Cumbre de Praga
de 2002 como un catalizador del proceso de
transformacin que se estaba llevando a cabo
en el seno de la OTAN y como un instrumento
impulsor del compromiso de las naciones de
dotarse de las capacidades requeridas por el
combate actual.
La NRF alcanz su capacidad inicial (IOC) en
octubre de 2003 y fue declarada su capacidad
operativa total (FOC) en la Cumbre de Riga (noviembre de 2006) tras el ejercicio Steadfast Jaguar
que tuvo lugar en Cabo Verde.
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 20117

Preparacin de la Fuerza
Toma de decisiones en el Cuartel General

En el marco de la NRF, se ha impulsado la


interoperabilidad de nuestras unidades, se han
desarrollado conceptos de funcionamiento en el
mbito OTAN y se ha participado en numerosos
ejercicios liderados por los diferentes mandos
de la Estructura de Mandos de la OTAN (NCS),
en los que nuestras unidades han demostrado el
nivel de preparacin alcanzado. Ejercicios como
los Noble Light o Brilliant Ledger, de certificacin de los Mandos Componentes Terrestres, los
Brilliant Sword o Noble Sword, de certificacin
de los Mandos Componentes de Operaciones
Especiales, o los de la serie Steadfast, de certificacin del paquete NRF, forman parte habitual
de los planes de adiestramiento de muchas de
nuestras unidades.
De hecho, unidades de la Fuerza de Maniobra
(FMA), primero, y de la Fuerza Terrestre, despus,
han formado parte de las NRF en sus rotaciones
nmero 5, 7, 8, 9, 10, 12 y 15 (esta ltima en
fase de disponibilidad o stand-by en el segundo
semestre de 2010) y se estn preparando para
integrarse en la NRF 2012.
Desde la creacin de la Fuerza Terrestre, el 1
de noviembre de 2006, un total de 6.440 militares se han integrado en la NRF de la OTAN, destacando el liderazgo de la Brigada NRF durante
la NRF-12 y el del Mando Componente de Operaciones Especiales en la NRF-9/10, compromiso
este que se repetir durante el ao 2012.
Por otra parte, en el mbito de la Poltica Comn de Seguridad y Defensa de la Unin Europea, nace el Battle Group durante la Conferencia
8

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

de Compromiso de Capacidades Militares (MCCC) que se


celebr en Bruselas el 22 de
noviembre de 2004. Con l
se busca el desarrollo de una
capacidad de respuesta rpida mediante fuerzas que se
puedan adaptar a la misin,
capaces de actuar en solitario o en la fase inicial de una
operacin de ms envergadura, pudiendo ser complementarias con la NRF.
Unidades de la Fuerza Terrestre han formado parte de
los sucesivos Battle Groups
en sus rotaciones I-08, II-08,
II-10 y se estn preparando para integrarse en el
II-11. En este caso han sido 4.281 militares los
que han contribuido con su preparacin y disponibilidad a esta Fuerza de la Unin Europea.
EL EUROCUERPO
Aunque no comparte con la NRF y el Battle
Group las mismas caractersticas en cuanto a
asignacin de unidades por rotaciones semestrales, s que representa una estructura permanente
de referencia para Espaa en lo que respecta a
multinacionalidad.
En cuanto a sus misiones, el Cuartel General
del Eurocuerpo es extremadamente verstil y ha
sido certificado como Fuerza de Alta Disponibilidad (HRF) para la OTAN, al mismo tiempo que
mantiene su vocacin europea, por ello, en su
lema reza: Una Fuerza para la Unin Europea
y la OTAN.
El Cuerpo de Ejrcito Europeo naci de una
propuesta conjunta de Francia y Alemania en la
Cumbre de La Rochelle, en mayo de 1992. Esta
iniciativa bilateral fue seguida por Blgica, que se
uni en 1993; por Espaa, en 1994; y por Luxemburgo, en 1996. Actualmente se encuentra en
proceso de negociacin la adhesin de Polonia,
que pasara a ser la sexta nacin contribuyente.
La entrada de Espaa en el Eurocuerpo en
1994 supuso un enorme empuje para su insercin en el mbito multinacional, ya que la
participacin de las unidades adscritas en los
diferentes ejercicios exigi un gran esfuerzo en
el estudio de idiomas (primero fueron el fran-

Nivel Operacional y Tctico

cs y el alemn, hasta que se instaur el ingls


como idioma de trabajo), el desarrollo de procedimientos y sistemas de mando y control, en
la proyeccin de personal y material a campos
de maniobra centroeuropeos, y en otros muchos
aspectos.
Aunque la aportacin espaola al Cuerpo de
Ejrcito Europeo est definida de forma permanente por un documento suscrito por las cinco
naciones que es el Troops Concept, en el que se
recoge una importante contribucin por parte
de la Fuerza Terrestre, sin embargo, como se
ha dicho anteriormente, el mayor esfuerzo se
dirige a la participacin de unidades de la Fuerza Terrestre en los ejercicios que se desarrollan
anualmente, en los que toman parte aquellas
que se determinan, segn el escenario planteado
cada ao.
El Cuartel General de la Fuerza Terrestre lidera
el proceso de planeamiento de cada uno de estos
ejercicios (excepto de aquellos de nivel CG de
divisin, liderados por CGTAD), en el marco establecido por el EME, para lo cual toma parte en

las conferencias de planeamiento, asigna la participacin a las unidades de su mbito, coordina


la participacin de unidades de otros mandos de
primer nivel y gestiona los crditos.
Desde 2006 hasta finales de 2010 deben destacarse el ejercicio COMMON TENACITY 07,
en el que particip un puesto de mando de la
BRIMZ X, o el COMMON TENACITY 09, en el
que se implement la estructura de NRF 15 (el
CG de Eurocuerpo lider el Mando Componente
Terrestre de la NRF 15), estructura empleada de
nuevo en el ejercicio COMMON TENACITY 10,
el cual sirvi para mantener el grado de adiestramiento alcanzado por la NRF 15.
EL DESAROLLO DE ESTOS COMPROMISOS
EN EL MBITO DE LA FUERZA TERRESTRE
La Fuerza Terrestre est implicada en el compromiso adquirido con las diferentes organizaciones multinacionales en las que Espaa colabora.
As, la generacin, alistamiento, preparacin y
mantenimiento de la disponibilidad de las unidades asignadas a estos compromisos representan

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 20119

Preparacin de la Fuerza

son estas unidades las asignadas


a los diferentes compromisos,
por un periodo de seis meses.

el segundo de los esfuerzos de generacin de


este Cuartel General, tras el correspondiente a
las diferentes rotaciones de nuestras unidades en
zona de operaciones.
Pero cmo afecta todo esto a las unidades?
Si para los pases el mantenimiento de sus compromisos internacionales supone un importante
esfuerzo, para las unidades de la Fuerza Terrestre
asignadas a cada compromiso, supone su principal objetivo. Durante meses trabajan en la definicin de las unidades que cubran las capacidades
a aportar, en el planeamiento y ejecucin de los
ejercicios de instruccin y adiestramiento necesarios para preparar las misiones encomendadas
y, ya en la fase de disponibilidad, en asegurar que
no se pierdan dichas capacidades y en mantener
el grado de operatividad.
Debido a lo exigente de todas estas acciones,
es evidente que no pueden ser las mismas unidades las que en todo momento permanezcan
preparadas para ser utilizadas en el mbito de los
compromisos adquiridos por Espaa. La principal
herramienta para definir qu unidades se asignan
a cada compromiso es el Plan de Disponibilidad
y Ciclo de Adiestramiento del Ejrcito de Tierra.
Dicho plan establece una secuencia de preparacin, disponibilidad y empleo de las unidades
que permite que, en todo momento, existan unidades dispuestas para su utilizacin, mientras
otras se encuentran preparndose para relevar a
las anteriores en dichos compromisos, o para su
proyeccin a zona de operaciones, contribuyendo a las operaciones en el exterior lideradas por
Naciones Unidas, la OTAN o la Unin Europea.
As, conforme a lo establecido en el Plan de
Disponibilidad, existe, en cada semestre, una
unidad ligera y una unidad mecanizada en disponibilidad, es decir, dispuesta para ser empleada, y
10

LA GENERACIN Y
LA PREPARACIN
Una vez establecido el marco genrico, por el que se sabe
cul ser la unidad base responsable de aportar las capacidades necesarias, se lleva a cabo
un proceso de generacin de
las unidades que van a ser asignadas al compromiso. Este proceso se inicia con la definicin de
capacidades por los escalones superiores, EMACON-EME, y finaliza con la evaluacin de las
unidades y su certificacin por GEFUTER como
dispuestas para el combate, de forma similar al
que se realiza para la generacin de las sucesivas
rotaciones en las misiones en el exterior y que se
presenta en este mismo Documento.
En este campo, la evaluacin es la herramienta que permite a los mandos generadores disponer de la informacin necesaria para poder emitir
su certificacin. Dicha evaluacin se lleva a cabo
durante la fase de preparacin, que tiene una
duracin de seis meses (Battle Group) a un ao
(NRF), y en ella se llevan a cabo actividades y
ejercicios nacionales, as como otros de carcter
combinado, liderados por las estructuras multinacionales que corresponden a cada rotacin.
De entre estos ejercicios de evaluacin hay
que destacar, por lo exigente del proceso y los
buenos resultados obtenidos en las ltimas ocasiones, la evaluacin OTAN (combat readiness
evaluation-CREVAL) realizada a los batallones
de Infantera asignados a la NRF. Entre ellos el
BIMZ I/2 del Regimiento La Reina N 2 y el BIMZ
I/31 del Regimiento Asturias N 31. Durante la
CREVAL, siguiendo las fases establecidas, debieron demostrar sobre el papel que disponen
de las capacidades exigidas (fase documental) y,
posteriormente, ejecutar una misin de acuerdo
al catlogo de misiones de la NRF, en la fase de
despliegue. El resultado de esta CREVAL tiene
una gran visibilidad dentro de la OTAN, de ah
la importancia de obtener buenos resultados,
de forma que se ponga de manifiesto la buena
labor de preparacin llevada a cabo por nuestras
unidades.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

As, una vez finalizado todo el proceso anterior de preparacin, evaluacin y certificacin,
la unidad pasa a encontrarse a disposicin de
la estructura multinacional por un periodo de
seis meses (este periodo es de 12 meses en el
nuevo concepto NRF), durante los cuales, si as
lo decide el nivel poltico, podr ser activada
para el cumplimiento de alguna de las misiones
asignadas.
Como se ha expuesto anteriormente, estos
compromisos internacionales suponen una gran
exigencia para las unidades. Podra pensarse incluso que se trata de una gran exigencia que pocas veces se ve reflejada en el empleo de dichas
unidades por parte de las organizaciones para las
que se encuentran en disponibilidad.
Sin embargo, no se puede olvidar la activacin de la NRF 5, liderada por Espaa, en los
terremotos de Paquistn, en 2005, o la actuacin de la NRF con ocasin del huracn Katrina,
en Estados Unidos. En otras ocasiones el Battle
Group ha estado a punto de ser activado, aunque no lo ha sido, finalmente.
La participacin en misiones en el exterior
de casi todas las unidades de la Fuerza Terrestre
hace que este tipo de compromisos estn en
segunda prioridad, sin embargo debe tenerse
en cuenta que, en caso de necesidad, si una de
estas estructuras es activada y empleada en un
escenario, pasar, sin duda, a corresponderle la
primera prioridad, desplegar como primera fuerza, con los condicionantes logsticos y operativos
que ello supone, lo har con un menor grado de
conocimiento de la situacin que el que hay en
los escenarios de L/H o R/A, dispondr de plazos
de tiempo muy reducidos para prepararse para la
proyeccin En definitiva, deber moverse en el
campo de la incertidumbre y la mxima exigencia, y deber hacer gala de la mejor preparacin.
Por ello, no debe perderse de vista el importante papel que desempean los soldados de
la Fuerza Terrestre en el cumplimiento de estos
compromisos, pues tanto durante la preparacin como durante el desarrollo de la misin,
si llegase el caso, sern siempre la cara visible
del Ejrcito de Tierra, de Espaa y de nuestros
aliados. Y de su buen hacer depender el xito
de las polticas de seguridad y defensa de tanta importancia en la situacin geoestratgica
actual. n
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

11

Nivel Operacional y Tctico

Operaciones en territorio nacional.


Apoyo a Autoridades Civiles y
Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
lvaro Kromer Espejo. Comandante. Infantera. DEM.

Descripcin de las lneas generales de actuacin de la FUTER en territorio


nacional en apoyo a las autoridades civiles y los FCSE, y relacin de
distintas misiones realizadas en la prevencin y lucha contra incendios
forestales, la desactivacin de explosivos improvisados,en el mbito de la
seguridad de grandes eventos, etc.

a seguridad y la defensa en el mundo occidental han experimentado una serie de


cambios en los ltimos aos, que han propiciado la integracin de los sistemas de defensa
y seguridad, buscando de esta manera alcanzar
la capacidad necesaria para afrontar los nuevos
retos que en este campo se planteen.
Las amenazas actuales en el mbito del terrorismo, proliferacin de armas de destruccin
masiva, crimen organizado e inmigracin ilegal,
junto con catstrofes naturales que provocan
grandes siniestros de imprevisibles consecuencias, hacen necesario que todos los instrumentos
y recursos nacionales se integren en forma y
tiempo, asegurando una respuesta nica y coordinada por parte del Estado.
En este contexto, las FAS, y por aadidura la
Fuerza Terrestre (FUTER) del ET, resultan fundamentales para aportar las capacidades que de
forma exclusiva, o como colaboracin y apoyo
a otras instituciones o administraciones, se consideren necesarias para hacer frente a estos riesgos
emergentes.

La legislacin espaola en materia de seguridad y defensa y las numerosas directivas y documentos que de ella se derivan y la desarrollan,
sirven de marco de actuacin de las FAS y por
consiguiente de la Fuerza Terrestre del ET, a la
hora de desarrollar operaciones en territorio nacional (TN) en apoyo a las autoridades civiles
(AACC) y fuerzas y cuerpos de seguridad del
Estado (FCSE).
En la LO de Defensa Nacional 5/2005, se
afirma que la finalidad de la poltica de defensa
es, entre otras, la proteccin del conjunto de la
sociedad espaola. Una de las misiones de las
FAS, que de esta afirmacin se deriva y que se
contempla igualmente en esta LO 5/2005, es la
de preservar, junto con las instituciones del Estado y las administraciones pblicas, la seguridad
y bienestar de los ciudadanos en los supuestos
de grave riesgo, catstrofe, calamidad u otras
necesidades pblicas. El tipo de operaciones
comprendidas en la misma ley, para llevar a
cabo esta misin, se ven reflejadas en las que a
continuacin se enumeran:

REVISTAEJRCITON.842EXTRAORDINARIOMAYO2011

13

Preparacin de la Fuerza

Ejercicio de descontaminacin en territorio nacional

El apoyo a las fuerzas y cuerpos de seguridad


del Estado en la lucha contra el terrorismo y a
las instituciones y organismos responsables de
los servicios de rescate terrestre, martimo y
areo, en las tareas de bsqueda y salvamento.
La respuesta militar contra agresiones que
se realicen utilizando aeronaves con fines
terroristas que pongan en peligro la vida de la
poblacin y sus intereses.
La colaboracin con las diferentes administraciones pblicas en los supuestos de grave
riesgo, catstrofe, calamidad u otras necesidades pblicas, conforme a lo establecido en la
legislacin vigente.
Ya en la Directiva de Defensa Nacional
01/2008 se afirma que como lnea general de
actuacin de la poltica de defensa en el mbito
nacional est la de intensificar la participacin de
las FAS en apoyo a otras instituciones del Estado
en la lucha contra los nuevos riesgos y amenazas ya descritos, estableciendo mecanismos de
coordinacin y control que aseguren la eficacia
y oportunidad de esta participacin.
En definitiva, en este marco legislativo se encuadra la aportacin de la Fuerza Terrestre del ET
a las distintas operaciones que, ante supuestos de
grave riesgo, catstrofe, calamidad u otras necesidades pblicas, o en apoyo a AACC y FCSE, se
han venido desarrollando de forma exitosa en
los ltimos aos.

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LNEAS GENERALES DE ACTUACIN


Dos son principalmente las directivas que
marcan el camino en aquellas operaciones en
las que la FUTER participa, aportando capacidades ante situaciones de grave riesgo, catstrofe,
calamidad u otras necesidades pblicas, o en
apoyo a AACC y FCSE.
La Directiva de JEMAD 05/08 Participacin
de las Fuerzas Armadas ante una emergencia
producida en casos de grave riesgo, catstrofe,
calamidad pblica u otras necesidades pblicas
enmarca las relaciones entre la Unidad Militar
de Emergencia (UME) y el ET, a travs de la Autoridad Militar de Coordinacin de los Apoyos,
responsable de que las capacidades de las que
disponga el ET y carezca la UME sean puestas a
disposicin de esta ltima para hacer frente de
manera integral y coordinada a la emergencia
que se plantee.
Esta directiva no contempla de forma general
la actuacin del ET por s solo en apoyo a autoridades civiles o fuerzas y cuerpos de seguridad
del Estado, sino que la forma habitual en que el
ET actuar, ser en apoyo a la UME, que ya estar
normal y plenamente implicada en la resolucin
de la emergencia que se produzca.
Por otro lado, la Directiva del JEME 01/10
Operaciones de Apoyo a Autoridades Civiles enmarca por su parte todas aquellas operaciones
en las que el ET acta directamente en apoyo a

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Nivel Operacional y Tctico

las autoridades civiles y/o fuerzas y cuerpos de


seguridad del Estado, sin necesidad de que se
haga como complemento de las capacidades de
la UME, que normalmente no estar implicada
en este tipo de apoyos.
El tipo de operaciones que se derivan de esta
directiva, son las que a continuacin se extractan:
Operaciones relacionadas con la prevencin
de incendios forestales.
Apoyos del ET a autoridades civiles que no se
puedan incluir en el mbito de la Directiva
05/08 (entre las que se incluye la neutralizacin
y desactivacin de municin y artefactos
explosivos).
Operaciones de apoyo en el mbito de la
seguridad, que se llevan a cabo en el marco
de los diferentes planes de contingencia que
regulan el apoyo de las FAS a las FCSE.

OPERACIONES DE LA FUERZA
TERRESTRE EN APOYO A AACC Y FCSE
Operacin Centinela Gallego
Desde el ao 2007, se realiza esta operacin
para prevencin de los incendios forestales, en
apoyo a la Xunta de Galicia. Entre los meses de
julio, agosto y septiembre, en la temporada de
mayor riesgo de incendios forestales, similares a
los que ya asolaron esta Comunidad en el verano
del ao 2006, se activan en los distritos forestales
de dicha Comunidad una serie de patrullas de las
unidades de la Fuerza Terrestre, con la misin
de vigilancia y disuasin ante la amenaza de
incendios forestales.
Durante esta operacin, las patrullas y clulas
de seguimiento, adems de las tareas propias de
vigilancia y prevencin, enlazan habitualmente con
los distintos niveles de la administracin civil de la
Comunidad Gallega, Consejera de Medio Rural,
Subdireccin General de Defensa contra Incendios
Forestales, delegaciones provinciales de Servicio de
Incendios, Consellos Forestales, municipios, Proteccin Civil, as como con las distintas fuerzas y
cuerpos de seguridad, destacando la colaboracin
campaa tras campaa con la Guardia Civil.
Entre las campaas del ao 2007, 2008, 2009
y 2010, ms de 800 patrullas de la Fuerza Terrestre han desplegado por periodos semanales.
Ms de 3.500 militares han participado en la
operacin, integrando las patrullas, clulas de seguimiento, oficiales de enlace, grupos de trabajo
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15

Preparacin de la Fuerza

y planeamiento, etc. Se han utilizado ms de 250


vehculos y recorrido ms de un milln y medio
de kilmetros. Han participado anualmente en la
operacin varios helicpteros y se han mantenido en pre-alerta, se han reportado ms de 600
conatos de incendios, favoreciendo la temprana
intervencin de los medios de extincin de la
Xunta de Galicia.
Adems de estas actividades, los miembros de
la Fuerza Terrestre han participado en numerosas
evacuaciones de personal accidentado, aislado
o en riesgo, debido a accidentes, inundaciones
o a los propios incendios forestales.
Las unidades de la Fuerza Terrestre que han
participado en las distintas campaas han sido:
la BRILAT en todas las campaas (ejerciendo el
esfuerzo principal y asumiendo el OPCON de
las fuerzas ejecutantes de la operacin, tanto
de otras unidades del ET como de la Armada y
del EA); la BRC II, en la campaa 09; as como
la BRIAC XII y el RCLAC Farnesio, ambos en la
campaa 2010.
Para los casos en los que se requiera elevar
el nivel de esfuerzo en la operacin, MACA,

BRITRANS, MING y FAMET tienen previsto el


alistamiento y la activacin de patrullas y helicpteros de refuerzo, respectivamente.
Operaciones de apoyo a la UME y AACC en
la lucha contra incendios forestales
Debido a la situacin geogrfica de las Comandancias de Ceuta, Melilla y Baleares, la FUTER les tiene encomendada la misin de activar
durante el tiempo que dure la campaa de lucha
contra incendios forestales, normalmente del 15
de junio al 15 de septiembre, un retn contraincendios de entidad seccin por cada comandancia, con la misin de apoyar a las AACC hasta la
llegada de los efectivos de la UME, momento en
que cesa normalmente dicho apoyo, salvo que la
propia UME reclame mantener activadas ciertas
capacidades de los retenes.
Las posibles tareas asignadas a estos retenes, a otras capacidades de las comandancias
que puedan ser requeridas, o a otras unidades
del mbito de FUTER que puedan ser activadas en caso necesario para apoyo a las AACC
en la lucha contra incendios forestales son las
siguientes:
Limpieza y apertura de cortafuegos, acopio de
tierra y barrido de cenizas.
Vigilancia de la zona del incendio y de zonas
ya quemadas.
Proteccin de las personas y bienes que puedan
resultar afectados por los efectos del incendio.
Colaboracin con las autoridades civiles en
la evacuacin de personal de las poblaciones
afectadas, as como en la asistencia sanitaria a
las personas afectadas como consecuencia de
los incendios.
Colaboracin con las autoridades civiles en el
aislamiento de la zona afectada.
Contribucin a la rehabilitacin inmediata de
los servicios pblicos esenciales.
Abastecimiento de agua para labores de
extincin.
Transporte, acarreo y tendido de materiales
contra incendios.
Operaciones de Apoyo a AACC no contem
pladas en la Directiva 05/08
Son aquellas que, desarrollndose en tiempo
de paz, suponen la utilizacin de medios militares del ET (personal, material o instalaciones) en
beneficio directo o indirecto de la poblacin, sin
estar dirigidas ni coordinadas por la UME.

Apoyo en la extincin del fuego

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Nivel Operacional y Tctico

Existir normalmente un marcado carcter de


urgencia, y consistirn en el apoyo y colaboracin con Proteccin Civil, en un apoyo concreto
a una operacin en curso de los FCSE, o en el
refuerzo de alguna capacidad a las autoridades
civiles tal como bsqueda de personas desaparecidas, transporte de personal civil, apoyo a la
acogida de inmigrantes ilegales, etc.
La Fuerza Terrestre ha llevado a cabo numerosas operaciones de este tipo, de las que sirve
como ejemplo la desarrollada el ao pasado por
los miembros de FAMET en la bsqueda de un
montaero de Manzanares el Real, desaparecido
en La Pedriza.
Operaciones de neutralizacin y desactivacin
de municin y artefactos improvisados
Hay que distinguir en el caso de que se trate
de municiones reglamentarias en las FAS o, por el
contrario, procedan de anteriores conflictos blicos o sean artefactos improvisados. En este ltimo
caso, este cometido est siendo asumido por los
servicios de desactivacin de las FCSE o de las
Comunidades Autnomas, aunque las capacidades de la Fuerza Terrestre en este mbito, estn a
disposicin de las AACC caso de que se ordenase
el apoyo a las mismas para neutralizar o desactivar
municiones procedentes de anteriores conflictos.

En cualquiera de los casos, habitualmente la


FUTER activa a aquellas unidades que geogrficamente se encuentren ms prximas al lugar
de la incidencia, y que dispongan orgnicamente de grupos de desactivacin de explosivos
(GEDE).
Operaciones en el mbito de la seguridad
En aquellas situaciones de grave riesgo, amenaza o agresin por parte de grupos terroristas o
saboteadores, ante eventos en territorio nacional
de marcada importancia y trascendencia, y en
el marco del COPLAN Cota de Malla de apoyo
de las FAS a las FCSE en la proteccin de los objetivos que se designen, la FUTER ha ejecutado
gran cantidad de operaciones en el mbito de
la seguridad. A continuacin citamos algunas a
modo de ejemplo, que resumen la importante
aportacin de este Mando al correcto y seguro
desarrollo de eventos de estas caractersticas.
CENTINELA ARAGONS. EXPO ZARAGOZA
Para esta operacin ejecutada durante la Exposicin Internacional de Zaragoza, entre junio
y septiembre de 2008, en el mbito de FUTER
se generaron capacidades de defensa antiarea,
de lucha contra amenazas NBQ, adems de una
AGT de maniobra en cada uno de los tres esfuerzos contemplados en la operacin.

Busqueda de explosivos
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17

Preparacin de la Fuerza

Participaron unidades de la BRC II, JTM, BRIMZ XI, MING, MAAA y el Regimiento NBQ 1.
Se alistaron cerca de un millar de militares, un
centenar de vehculos, unidades de Defensa Anti-

area, unidades de Transmisiones y una estacin


de descontaminacin NBQ, con capacidad de
despliegue casi inmediato y de descontaminacin de 120 personas por hora.
CENTINELA ELEGIDO. ELECCIONES GENERALES 2008
Esta operacin ejecutada en los primeros das
del mes de marzo de 2008, con motivo de la celebracin de las elecciones autonmicas andaluzas
y generales en Espaa, tuvo como finalidad la vigilancia de las vas ms importantes de comunicacin y de aquellos puntos considerados sensibles.
Se activaron en torno a 1.800 militares, pertenecientes a la BRIMZ X, BRIMZ XI, BRC II, JTM,
BRILAT, BRIPAC, las tres comandancias (Ceuta,
Melilla y Baleares), MACTA y BRITRANS.
CENTINELA ALADO. CUMBRE ALIANZA DE
CIVILIZACIONES
Con motivo de la celebracin en nuestro pas,
en el invierno del 2008, de la Cumbre por la
Alianza de las Civilizaciones, unidades de la
Fuerza Terrestre, en concreto del MAAA, desplegaron nuevamente sus capacidades de defensa
antiarea, proporcionando una cobertura ante
amenazas del tipo RENEGADE. En total, tres
bateras y elementos de mando y control.
CENTINELA NUTICO. COPA DE AMRICA
EN VALENCIA
Entre los meses de junio y julio de 2007, se
desarroll la operacin Centinela Nutico, en
apoyo a la seguridad de la Copa Amrica de
Valencia. En dicha operacin, se aportaron capacidades del mbito de FUTER, de defensa antiarea, enlaces CIS y de tiradores pertenecientes
al MAAA, BRITRANS y BRIPAC, respectivamente.
En torno a 300 militares contribuyeron a que el
evento se desarrollase con xito.
A MODO DE CONCLUSIN
Dentro de las misiones habituales de la
Fuerza Terrestre, enmarcadas en la normativa
que en este artculo se ha expuesto, la FUTER
ha participado y sigue hacindolo, de forma
coordinada y resolutiva, en cuantos apoyos a
AACC y FCSE se le han ordenado, y en aquellas
operaciones que por s misma ejecuta, con la
premisa de generar las capacidades requeridas
en tiempo y forma, aportar personal adiestrado
y capaz de cumplir la misin asignada, as como material en condiciones de cumplir dicha

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Nivel Operacional y Tctico

misin y contribuir con capacidades que otras


administraciones o unidades de las Fuerzas
Armadas requieran.
La proteccin del conjunto de la sociedad espaola, la seguridad y bienestar de los
ciudadanos en los supuestos de grave riesgo,
catstrofe, calamidad u otras necesidades pblicas, la vigilancia y actuacin ante riesgos
naturales, y la aportacin de capacidades propias de las FAS ante amenazas terroristas, han

supuesto para la FUTER un gran esfuerzo en


personal y material.
Consciente de la importancia de estos cometidos, el empeo de la Fuerza Terrestre del ET es
seguir estando en disposicin de generar las capacidades requeridas y mantener el nivel de los
apoyos y operaciones ya realizados, en beneficio
de la sociedad espaola en su conjunto como un
eslabn ms de todos los recursos que nuestra
nacin moviliza cuando se hace necesario. n

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EL PROCESO DE GENERACIN
Y PREPARACIN DE UNIDADES PARA SU

DESPLIEGUE EN ZO
EN EL MBITO DE LA FUERZA TERRESTRE
Antonio Ruiz Bentez. Coronel. Infantera. DEM.

Nivel Operacional y Tctico


Presentacin del actual proceso de generacin de unidades
de la FUTER, desde la identificacin inicial de las
capacidades necesarias a la certificacin del contingente
antes de ser proyectado a ZO, con especial referencia al plan
de disponibilidad y secuencia de adiestramiento, as como
al periodo de adiestramiento operativo 4+2 especfico
para cada operacin.

caban de cumplirse veinte aos desde que


las primeras unidades espaolas participaron en misiones internacionales en el
exterior, si bien mucho antes se haba producido
ya el despliegue ocasional de algunas de ellas
fuera del territorio nacional en determinados
conflictos.
Es pues, este acontecimiento, una magnfica
referencia para afrontar una reflexin sobre cmo
ha evolucionado el procedimiento de generacin
y preparacin de fuerzas y realizar una presentacin del proceso que actualmente siguen las
unidades de la Fuerza Terrestre (FUTER) para
su alistamiento y preparacin, para el cumplimiento de las misiones que en cada caso les son
encomendadas.
A lo largo de este periodo de tiempo muchas
han sido las enseanzas y lecciones aprendidasextradas y puede concluirse hoy, sin temor a ser
presuntuosos, que el proceso de generacin de
unidades est ms que consolidado y regulado,
con el nico y fundamental objetivo de que no
quede el menor resquicio de duda sobre la necesidad de que nuestras unidades estn lo suficientemente bien equipadas, instruidas y adiestradas
para cumplir las exigentes misiones que deben
desarrollar en el contexto internacional.
EL PROCESO DE GENERACIN
DE UNIDADES PARA ZO
Dentro de la Directiva 07/06 del EME, en la
que se recogen los cometidos de los cuarteles generales de la Fuerza del ET, se establece que los
fundamentales de la FUTER son la preparacin
de las unidades y la generacin de las estructuras operativas hasta nivel brigada, incluyndose

dentro de esta ltima el diseo en detalle, la


generacin y el alistamiento de las mismas y,
finalmente, el adiestramiento especfico para el
cumplimiento de la misin asignada.
Del estudio de esta directiva se extraen,
con carcter inmediato, dos conclusiones
fundamentales:
El cometido fundamental de la FUTER es la
preparacin y la generacin de unidades.
El proceso de generacin y preparacin para
el cumplimiento de una misin internacional
es un proceso complejo, en el que entran en
juego una serie de factores que deben ser
tenidos en cuenta.
Se inicia este proceso con la identificacin
inicial de las capacidades necesarias para el
cumplimiento de la misin, determinadas por
los escalones superiores a la FUTER, siendo reflejadas en los pertinentes OPLAN u rdenes de
alistamiento para el escenario que se determine.
Una vez alcanzado este punto, comienza un
meticuloso y metdico trabajo de diseo del
contingente que culmina con la elaboracin de
la correspondiente orden de generacin (OGEN),
si se genera el contingente por primera vez, o la
orden de relevo (OREL), en el caso de haber sido
desplegado ya algn contingente con anterioridad. En este documento se incluye un conjunto
detallado de anexos en el que figuran todos y cada uno de los perfiles de los futuros componentes
del contingente, reflejndose las especificaciones y particularidades de cada puesto tctico,
y establecindose una serie de consideraciones
relativas a las diferentes funciones de combate
necesarias para la actualizacin de ZO y para el
cumplimiento de la misin.

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21

Preparacin de la Fuerza

Una vez emitida la OGEN/OREL y recibida la


misma por las unidades designadas para formar
parte del contingente, nos enfrentamos con el
segundo hito importante del proceso: la reunin
de coordinacin, que tiene lugar en el CG de la
FUTER y a la que se convoca a todo el personal
clave del futuro contingente. En ella, los representantes de la Clula de Operaciones del CG de
la FUTER exponen los aspectos esenciales para el
cumplimiento de la misin, complementando as
lo establecido ya en la OREL/OGEN, y aclarando
en la segunda parte de la reunin (grupos de trabajo), las posibles dudas surgidas a la recepcin
de este documento.
En esa OREL/OGEN, se establece una autoridad de coordinacin para el adiestramiento
(ACAD) y una unidad base para la generacin
(una brigada de las de la FUTER/MACANA), inicindose a partir de este momento la generacin
interna del contingente a partir de la unidad
base para la generacin. Es precisamente en este
momento cuando aparece el primer problema
grave en este proceso de generacin: se trata de
la necesidad de adecuar la organizacin operativa de una unidad tipo brigada, diseada para
operaciones de tipo convencional, a una organizacin operativa ad-hoc, para cada misin,
con unos exigentes perfiles en idiomas, cursos
u otras cualificaciones. Esta adaptacin requiere
un tremendo ejercicio de flexibilidad, puesto que
las unidades que se disean no son semejantes a
las constituidas con carcter permanente en los
MPO de las unidades. No obstante, durante todo
el proceso, es necesario considerar la cohesin
como uno de los factores esenciales, debiendo
definirse claramente unos umbrales mnimos de
modularidad, por debajo de los cuales no se
puede descender para alcanzar la necesaria capacidad de combate fruto de la instruccin y el
adiestramiento en comn, del empleo de tcticas, tcnicas y procedimientos (TTP), de la normativa de uso, del conocimiento mutuo; en una
palabra, de unos umbrales mnimos de cohesin,
por debajo de los cuales no puede alcanzarse la
plena eficacia de la unidad.
Una vez establecido y aprobado el puesto
a puesto de la unidad que se ha de generar, se
inicia el Periodo de Adiestramiento Operativo
(PAO), cuyo objetivo fundamental es asegurar
que el contingente terrestre generado para la
22

operacin est adiestrado para el cumplimiento


de la misin. A lo largo del mismo, se desarrollan una serie de actividades encaminadas a:
seleccionar al personal ms apto, alcanzar los
adecuados niveles de instruccin complementaria y de aplicacin (individual y colectiva), adiestrar y cohesionar al contingente en su conjunto,
mediante el adiestramiento progresivo de las
unidades tipo subgrupo tctico y grupos/agrupaciones tcticas y evaluar al contingente. Este
periodo finaliza con la elevacin, por parte del
General Jefe de la Fuerza Terrestre (GEFUTER), de
la correspondiente certificacin del Contingente
al general de ejrcito Jefe del Estado Mayor del
Ejrcito (GEJEME), confirmando que se encuentra
en condiciones de ser atribuido a la operacin
para la cual ha sido alistado.
Finalmente, y una vez que el contingente ha
sido formalmente certificado, se procede a su
transferencia a la cadena operativa y a su proyeccin a la zona de operaciones, concluyendo
el proceso con el despliegue del contingente
generado, si este lo fuese por primera vez, o al
relevo con el contingente saliente, mediante la
consiguiente transferencia de autoridad (TOA).
EL PLAN DE DISPONIBILIDAD Y
SECUENCIA DE ADIESTRAMIENTO
DE LAS UNIDADES DEL ET
Adems de la necesidad de generar y preparar
unidades para el desempeo de las diferentes
misiones en el contexto internacional, el Ejrcito
de Tierra necesita contar con medios y recursos
con un alto grado de preparacin, coordinacin
y disponibilidad, capaces de actuar como factor
de disuasin y proporcionar una respuesta eficaz
integrada y, llegado el caso, de actuacin autnoma para salvaguardar los intereses nacionales.
Atendiendo a esta finalidad, el ET ha diseado el
Plan de Disponibilidad y Secuencia de Adiestramiento del ET, con un triple objeto:
Determinar las organizaciones necesarias
dentro de la Fuerza para dar una respuesta
adecuada, gradual y oportuna a los distintos
esfuerzos que en el escenario nacional e
internacional le sean requeridos al ET.
Establecer un ciclo peridico que grade la
disponibilidad de las unidades del ET, para as
obtener el mximo rendimiento del personal y
del material y evitar su excesivo desgaste.

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Nivel Operacional y Tctico

Definir una secuencia de adiestramiento


que permita a las unidades implicadas en el
ciclo de disponibilidad, alcanzar el grado de
preparacin ptimo y en el momento ms
conveniente, teniendo en cuenta las vicisitudes
de dichas unidades.
De acuerdo a las necesidades que sean solicitadas por el JEMAD al ET, las unidades de la FUTER debern estar en disposicin de aportar las
capacidades requeridas para afrontar diferentes
niveles de esfuerzo, debiendo asignarse a las unidades designadas unos grados de disponibilidad
con carcter cclico, de manera que se graden
las diferentes capacidades que se van a aportar,
con fuerzas preparadas para dar una respuesta
inmediata o una respuesta progresiva.
Para alcanzar estos grados de disponibilidad,
las unidades tipo brigada desarrollarn un ciclo
operativo de 24 meses de duracin, divididos
en cinco fases:
Disponibilidad.
Adiestramiento operativo.
Proyeccin.
Recuperacin.
Preparacin.
El desarrollo de este ciclo, asegura que las unidades, en un plazo de dos aos, son capaces de

preparase especficamente mediante el desarrollo


del periodo de adiestramiento operativo (PAO)
para el cumplimiento de una operacin no blica, pero tambin para una operacin convencional, mediante el desarrollo del periodo de
preparacin. El adiestramiento se desarrolla en
el marco orgnico (unidad tipo brigada generadora), siendo las unidades que se encuentren en
la fase de disponibilidad las que desplegarn los
diferentes contingentes terrestres que participen
en las operaciones exteriores de larga duracin.
El plan se completa con los anexos que contemplan: el calendario de relevos en los diferentes cometidos y misiones, la generacin y
preparacin de las brigadas en disponibilidad y
las unidades de combate y apoyo al combate en
disponibilidad a generar por mandos con ciclos
de disponibilidad especficos.
La FUTER, como bloque fundamental de la
estructura de la Fuerza del ET, desempea un
papel esencial en la aplicacin y desarrollo de
este plan, del que debe resaltarse que es un extraordinario paso adelante, no solo en la determinacin de las unidades con que cuenta el ET
para hacer frente a los compromisos que le sean
demandados, sino que constituye una referencia
esencial en su adiestramiento.

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23

Preparacin de la Fuerza

UN NUEVO ENFOQUE DE LA
PREPARACIN: EL NUEVO PERIODO DE
ADIESTRAMIENTO OPERATIVO (4+2)
La continua evolucin de las tcticas tcnicas
y procedimientos (TTP), tanto propios como de
la amenaza en zona de operaciones, obliga a
establecer un procedimiento para llevar a cabo
una constante revisin del proceso de generacin
y preparacin de unidades, estableciendo las herramientas necesarias para la retroalimentacin
del mismo.
De entre todas de las que se dispone para su
adecuada actualizacin y perfeccionamiento,
destaca el proceso de lecciones aprendidas, basado en las experiencias de los diferentes jefes
de contingente y jefes de unidad, cada uno a
su nivel. Estas enseanzas se vuelcan, una vez
finalizada la misin, en los diferentes informes y
reuniones post-misin cuyo objetivo fundamental
es obtener la mxima informacin actualizada,
procedente de aquellos que acaban de finalizar
su misin, para as perfeccionar el proceso de
generacin y preparacin de fuerzas. En todo
este proceso de retroalimentacin, sin duda, una
leccin aprendida sobresale de entre las dems
por su contundencia y reiteracin: la necesidad
de realizar una preparacin especfica y adaptada a cada una de las operaciones.
Basndose en esa idea fuerza, el Teniente General Jefe adopt la decisin de establecer para
todos los componentes de la FUTER, un periodo
de adiestramiento operativo (PAO), el ya famoso
4+2, especfico para cada operacin. En l
deban verse reflejados 180 das de instruccin
especfica para cada operacin exterior, con un
mtodo de trabajo riguroso y exigente.
Con estas premisas de planeamiento, el CG de
la FUTER comenz la elaboracin de una gua de
desarrollo del periodo de adiestramiento operativo,
que deba ser el documento de referencia para
asegurar que los contingentes terrestres generados
para cada operacin estuviesen suficientemente
adiestrados para el cumplimiento de su misin, establecindose una triple finalidad para este periodo:
Definir el proceso general de adiestramiento
operativo.
Evaluar y validar el contingente terrestre.
Certificar que el contingente terrestre se
encuentra en condiciones de ser atribuido a la
operacin para la cual ha sido alistado.

24

El nuevo proceso general de adiestramiento operativo se estructura en tres periodos bien


diferenciados:
Periodo de diseo.
Periodo de adiestramiento especfico (PAE).
Periodo de adiestramiento final (PAF).
Durante el periodo de diseo, se desarrollarn todas las acciones previas de planeamiento
y coordinacin que favorezcan el inicio de las
actividades propias del proceso de generacin y
preparacin del contingente en unas condiciones
ptimas. Su duracin ser de un mes aproximadamente, anterior al inicio del PAE.
Durante el periodo de adiestramiento especfico, se buscar como objetivo principal disponer
del personal con la mejor aptitud y actitud para
integrarse en los contingentes y facilitar el paso
al PAF, mediante el desarrollo de todas las tareas
de instruccin complementaria y de aplicacin
(individual y colectiva) de las unidades elementales de empleo y el adiestramiento operativo de
las unidades bsicas de empleo (seccin y compaa), para alcanzar un grado de adiestramiento
alto/medio en las unidades tipo compaa/escuadrn/batera. Su duracin ser de cuatro meses
aproximadamente.
Finalmente, el periodo de adiestramiento final tendr como objetivo fundamental integrar
a todas las unidades del contingente y adiestrar
y cohesionar al contingente en su conjunto, teniendo una duracin aproximada de dos meses.
Este proceso puede y debe considerarse un
enorme paso adelante en cuanto a la calidad en
la preparacin de los contingentes, incorporando
una serie de innovaciones a los empleados con
anterioridad y entre las que destacan:
Potenciacin de la instruccin/adiestramiento
orgnicos enfocados a la misin.
Elaboracin de guas de preparacin especficas
para cada misin.
Establecimiento de las tareas individuales
que deben ser realizadas por todos y cada
uno de los componentes del contingente,
independientemente de cul sea su puesto
tctico.
Establecimiento de un sistema progresivo de
evaluacin de unidades, en el nivel compaa/
grupo/contingente.
Racionalizacin y coordinacin de cursos,
jornadas de actualizacin y ejercicios.

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Nivel Operacional y Tctico

Incremento en el nmero de ejercicios de


entidad compaa/escuadrn/batera, como
fundamento para fomentar la cohesin.
Incremento de la fase de concentracin.
Emisin de una certificacin oficial de
validacin de las diferentes unidades para cada
nivel compaa/grupo/contingente.
Este nuevo PAO est siendo desarrollado ya
por las unidades de la FUTER que se encuentran
en periodo de preparacin para ZO, con unos
resultados excelentes.

GENERACIN DE CAPACIDADES OPERATIVAS:


UNA SOLUCIN DE FUTURO?
Desde 1992, ao en que el ET comienza sus
actividades de generacin de estructuras operativas para las diferentes misiones asignadas,
muchos han sido los criterios que han presidido
la generacin de los distintos contingentes, si
bien como denominador comn siempre han
aparecido los siguientes:
Oportunidad.
Economa.
Disponibilidad de efectivos.
Posteriormente, adems de la participacin en
operaciones, Espaa se ha visto envuelta en otras
iniciativas multinacionales como la Nato Response Force (NRF) de la OTAN o el Battle Group de
la UE, o nacionales como la Fuerza de Reaccin
Rpida, todas ellas dirigidas a disponer de unas
fuerzas adiestradas, preparadas y dispuestas para
su empleo, antes de que el conflicto se produzca
y as reducir los plazos de reaccin.
A lo largo de estos procesos de generacin, las
organizaciones resultantes han sido constituidas
en cada caso, ad-hoc, estando dichos procesos,
en su mayora, ausentes de una adecuada referencia en cuanto a estructuras operativas ya establecidas y contrastadas en los respectivos ciclos
de adiestramiento y operaciones realizadas, y
ha sido necesario proceder, por tanto, en tiempo
real, al alistamiento de las mismas.
As mismo, en los procedimientos de generacin establecidos como consecuencia de la apertura de las nuevas misiones que el ET ha debido
afrontar, ha sido comn la revisin puesto a
puesto de estructuras orgnicas de las unidades
base, hasta llegar incluso al redimensionamiento
o reestructuracin de las propias plantillas de las
unidades subordinadas elementales.

A pesar de ello, se observa que, en la mayora de los casos, las capacidades requeridas
para estas fuerzas generadas ad-hoc se basan
en unos denominadores comunes, unas capacidades operativas que constituyen el esqueleto
bsico de las fuerzas que se generan, a las que
posteriormente se podran aadir capacidades
adicionales concretas, que se pudieran requerir
para cubrir las distintas misiones especficas
que se ordenasen, capacidades que en algunos
casos seran proporcionadas por los mandos de
apoyo a la fuerza.
Por lo tanto, y para evitar situaciones anteriores no deseadas, parece conveniente afrontar
el diseo, con carcter permanente, de unas
estructuras operativas (EO) con un triple objetivo:
Disponer, con antelacin suficiente, de unos
mdulos de fuerzas necesarios para generar
unidades de una determinada entidad que
proporcionen unas ciertas capacidades.
Proporcionar una referencia bsica sobre
cules podran ser las estructuras operativas
que la Fuerza Terrestre podra aportar a las
operaciones o compromisos en curso, en
funcin de las capacidades requeridas por el
mando superior.
Disear, basndose en unos mdulos
establecidos, la estructura de la fuerza que
se va a utilizar, una vez identificadas las
capacidades requeridas por parte del JEMAD
para el cumplimiento de la misin.
Con estas premisas, en el CG de la FUTER
se ha iniciado un estudio cuya finalidad es proporcionar al mando los criterios de referencia
necesarios para la organizacin y estructuracin
de los diferentes contingentes, de acuerdo a las
capacidades requeridas, de manera que no sea
necesario definir para cada operacin un nuevo
pelotn de fusiles, si cabe esta simplificacin, y
las estructuras operativas que desplieguen en ZO
estn diseadas, adiestradas y cohesionadas con
la necesaria antelacin.
Para alcanzar este objetivo, en el estudio realizado se establecen:
Los mdulos de plantilla adaptados (MPA) de
tres estructuras operativas de entidad GT, as
como de dos estructuras operativas de entidad
AGT, de manera que permitan hacer frente a
tres esfuerzos-tipo diferentes, de nivel GT, y
dos de AGT, respectivamente, segn el grado

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

25

Preparacin de la Fuerza

de permisividad del escenario y el tipo de


amenaza.
Un catlogo de capacidades operativas
disponibles para cada una de las estructuras
propuestas, en el que se recogen las misiones
especficas que con estas estructuras podran
desarrollarse.
Un procedimiento de generacin de estructuras
operativas a partir de una estructura permanente, tipo agrupacin tctica ligera de alta
disponibilidad (AGTLAD), o, agrupacin tctica mecanizada de alta disponibilidad (AGTMAD), sobre la base de las tres estructuras de
GT establecidas, y de acuerdo con el plan de
disponibilidad.
Se tratara, pues, de disear tres organizaciones operativas de nivel GT:
Para hacer frente a un esfuerzo mnimo,
con una entidad aproximada de trescientos
militares (GT-300).
Para hacer frente a un esfuerzo medio, con una
entidad aproximada de quinientos militares
(GT-500).

26

Para hacer frente a un esfuerzo mximo,


con una entidad aproximada de setecientos
militares (GT-700).
Cada una de estas organizaciones tendra unas
capacidades operativas determinadas, de manera
que las de entidad superior complementaran con
las suyas a la de entidad inferior, de forma que el
GT-700 contara con las ya existentes en los GT300 y GT-500, reforzadas con otras adicionales.
As, el GT-300 sera el que servira de base
para dar respuesta a misiones tipo Petersberg,
en el marco de una organizacin multinacional
superior de la que depender directamente en un
escenario especfico.
El GT-500 sera el diseado para la realizacin
de misiones tipo Petersberg Plus, tales como:
Rescate y ayuda humanitaria (PSO).
Mantenimiento de la paz (PKO) y gestin de
crisis (CRO).
Fuerzas de combate para imponer o restablecer
la paz (PE).
Misiones tipo NRF (Nato Response Force) en
escenarios ms exigentes.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Operaciones de evacuacin de personal no


combatiente (NEO).
Todas ellas relacionadas en un escenario permisivo o semi-permisivo.
Finalmente, el GT-700 estara diseado para llevar a cabo acciones de ms envergadura
que las anteriores, normalmente en un escenario
semi-permisivo, e incluso no permisivo, cuyas
misiones podran ser:
Separacin de los beligerantes.
Estabilizacin, reconstruccin y asesoramiento
militar a terceros pases.
Prevencin de conflictos.
Operaciones de evacuacin de personal no
combatiente en ambiente no permisivo.
Apoyo en operaciones contra el terrorismo.
En cuanto a las AGT debern contar con
las capacidades del GT-700, incrementadas o
complementadas con las nuevas capacidades
exigidas.
Esta solucin, sin ser la nica, presenta las
siguientes ventajas:
Reduccin del tiempo de diseo de la unidad,
una vez identificadas las capacidades necesarias, al estar ya prediseadas e identificadas
las capacidades que pueden aportarse, segn
el nivel de esfuerzo que se quiera implementar
(mnimo, medio o mximo).
Modularidad: el paso de una estructura a otra
se har mediante la adicin o sustraccin de
capacidades previamente mesuradas.
Realismo: la generacin se basa en los medios
humanos y materiales reales con que cuenta la
Fuerza Terrestre, actualizndose el planeamiento de forma simultnea a los niveles de cobertura del personal y estados de operatividad de
los materiales.
Nivel de cohesin elevado: pues la generacin
de la estructura para cada misin se realiza
siempre a partir de estructuras orgnicas, asegurando que las unidades tipo GT procedan
siempre de la misma unidad base (brigada).
Autosuficiencia: las Unidades diseadas son
autosuficientes para el esfuerzo demandado.

CONCLUSIONES
El proceso de generacin de unidades en el
mbito de la FUTER, aunque complejo y perfectible, puede considerarse ampliamente depurado
y consolidado.

Se hace necesario un gran esfuerzo de flexibilidad para adaptar las estructuras orgnicas de
las unidades y de sus plantillas configuradas para
operaciones convencionales, a las empleadas en
las diferentes misiones en el exterior.
El Plan de Disponibilidad y Secuencia de
Adiestramiento del ET se ha revelado como el
marco de referencia absolutamente necesario
para la preparacin y la generacin de las unidades de la FUTER.
Dentro del Plan de Disponibilidad, se considera indispensable el establecimiento de un
periodo de adiestramiento operativo, diferenciado para la preparacin especfica de cada
contingente.
La implementacin de un sistema de evaluacin y certificacin de unidades riguroso y
metdico ha resultado ser una excepcional herramienta para verificar su grado de preparacin
y el nivel de cumplimiento de los objetivos establecidos a lo largo del proceso de generacin.
La generacin y preparacin de unidades es
un proceso continuo que requiere, para su mejora, un adecuado sistema de lecciones aprendidas, con la implicacin de todos los niveles
de mando, siendo absolutamente esencial la retroalimentacin del sistema y la depuracin de
sus deficiencias.
A la hora de generar las unidades, deben respetarse los lazos orgnicos y mantener el mayor
nivel de cohesin posible, lo cual solo puede
alcanzarse estableciendo unos umbrales mnimos
de modularidad, por debajo de los cuales no se
debe descender.
La posibilidad de contar con unas unidades
con una serie de capacidades operativas previamente identificadas y perfectamente definidas
puede ser una referencia fundamental a la hora
de establecer la entidad y capacidades que aportar a una misin o compromiso internacional.
A modo de conclusin final, puede establecerse que el proceso de generacin y preparacin
de unidades en el mbito de la FUTER, aunque
en constante evolucin y perfeccionamiento,
supone un enorme salto de calidad en la continua pugna por asegurar que nuestras unidades
estn perfectamente equipadas, adiestradas y
motivadas para el cumplimiento de las misiones
que se les asignen, por demandantes que estas
sean. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

27

CIMIC

UNIDADES
EN OPERACIONES:

GENERACIN Y MISIONES
Juan Antonio Soto Gonzlez. Teniente Coronel. Infantera.

Nivel Operacional y Tctico

A continuacin se describe el proceso de generacin


de las unidades CIMIC para integrarse en los
diversos contingentes en zonas de operaciones, se
detalla el concepto de equipo CIMIC pre-designado
y se realiza un recorrido por las principales
misiones en las distintas ZO.

lo largo de la Historia y por toda la geografa mundial, encontramos numerosos ejemplos de la interaccin entre los ejrcitos y la
poblacin civil, especialmente en aquellas zonas
donde se desarrollaron campaas militares. As, ya
en el 2500 a C los sumerios marcaban la poltica
y el trato con los pobladores de las zonas conquistadas, posteriormente los romanos desarrollaron
una extensa legislacin que llev a la plenitud las
actividades de gobierno de la poblacin civil
En la actualidad, en todos aquellos escenarios
en los que se desarrollan operaciones militares,
sea cual sea su intensidad, hay una serie de actores que si bien pode mos decir que siempre han
estado presentes en mayor o menor medida a lo
largo de la Historia, de un tiempo a esta parte
han ido cobrando un valor creciente en cuanto
a su influencia sobre el conflicto, debido fundamentalmente a su capacidad de gestin y movilizacin, repercusin meditica, influencia sobre
la ciudadana e incluso sobre el poder poltico.
Hoy en da es incuestionable que el empleo
de fuerzas militares, cualquiera que sea el escenario, causa un gran impacto en la sociedad.
Esto determina una serie de factores cuya consideracin se antoja imprescindible a la hora de
afrontar la participacin de efectivos militares en
cualquier tipo de operacin:
Respaldo legal, amparado en las leyes
nacionales y el Derecho Internacional.
Apoyo de la opinin pblica nacional, bajo
cuyo amparo debe encontrarse la decisin
poltica del empleo de las fuerzas.

Apoyo de los medios de comunicacin,


fundamentalmente por la exigencia de
informacin que demanda la sociedad y por
la influencia de estos sobre ella.
Estos tres factores indudablemente pueden
condicionar las decisiones en el mbito poltico, pero es obvio que tambin se traducirn en
condicionamientos en el plano estrictamente
militar pues impondrn limitaciones tanto en
el planeamiento como en la ejecucin de las
operaciones militares.
Fruto de todo lo anterior es la necesidad de
que, en el planeamiento y desarrollo de las
operaciones militares, se disponga de una serie
de rganos y elementos especializados tanto
en el planeamiento como en la ejecucin que
asesoren al mando y lleven a cabo una serie
de actividades en el mbito de la cooperacin
cvico-militar, con el objetivo fundamental
(aspecto este que no debe olvidarse nunca
cuando hablamos de actividades CIMIC) de
facilitar y apoyar las operaciones militares,
contribuyendo de forma incuestionable al cumplimiento de la misin asignada.
Podemos pues concluir sin temor a equivocarnos, que todo lo relacionado con el rea
de la cooperacin cvico-militar puede ejercer un efecto multiplicador que favorezca o
perjudique las operaciones por lo que debe
ser preocupacin constante del mando interiorizar la necesidad de contar con estos elementos, as como impulsar la mejora en su
aprovechamiento.

REVISTAEJRCITON.842EXTRAORDINARIOMAYO2011

29

Preparacin de la Fuerza

GENERALIDADES
Nuestra Doctrina define la cooperacin cvico-militar (CIMIC) como el conjunto de actividades encaminadas a conseguir el apoyo a la
misin mediante la cooperacin y coordinacin
entre el mando de la fuerza y el entorno civil del
rea donde son o van a ser empleadas las fuerzas
militares. El entorno civil incluye a la poblacin,
autoridades, organizaciones y agencias locales,
nacionales o internacionales, bien sean gubernamentales o no.
Igualmente seala que la accin CIMIC requiere tres elementos fsicos: estado mayor para
planear y asesorar al comandante, unidades para
realizar las actividades CIMIC y, donde sea necesario, especialistas funcionales. La entidad de
estos elementos depender adems de la misin
encomendada, de la poblacin civil, del escenario de actuacin y de la organizacin de sus
autoridades.
Entre los actores que forman parte de ese entorno civil cobran especial relevancia las organizaciones internacionales, ONG y autoridades civiles presentes en el teatro (en muchos casos con
una limitada capacidad de gestin o en pleno
proceso de constitucin tras un proceso de degradacin anterior) y, ms que nunca, las propias
poblaciones afectadas. En relacin a estas ltimas, si en el pasado el principal problema que

se planteaba en las operaciones era el control de


aquellas para evitar su interferencia en la maniobra militar, en la actualidad, las vicisitudes de la
poblacin han cobrado un impacto meditico tal
que de hecho deben ser contempladas como un
elemento ms de planeamiento e incluso pueden
llegar a modificar los planes militares. Hasta hace
unos aos, la funcin logstica llamada Asuntos
Civiles se pona en marcha cuando el desarrollo
de las operaciones comportaba la realizacin
de actividades de gobierno y/o control de la
poblacin.
En este marco de actuacin, la mayora de
los ejrcitos de nuestro entorno han modificado
la antigua funcin Asuntos Civiles para transformarla en la actual Cooperacin Cvico-Militar,
trmino que si bien no responde exactamente
al mismo concepto en las diferentes doctrinas,
s ampla el terreno de actuacin en su mbito,
pasando de ser una funcin logstica necesaria
en determinadas circunstancias a una actividad
operativa conjunta, dado su carcter de permanencia y continuidad.
EL BATALLN DE ASUNTOS CIVILES
Fruto de lo expuesto en lneas anteriores, surgi la necesidad de contar dentro del ET con
elementos especializados en este novedoso
campo de actuacin. As, en la Instruccin Ge-

Unidades CIMIC en Afganistn

30

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

neral 05/97 del EME de Adaptaciones Orgnicas


Extraordinarias para el ao 1997 aparece por
primera vez la Unidad de Asuntos Civiles como
consecuencia de la transformacin de la Unidad
de Cuartel General del CG del Mando Regional
de Levante, en Batalln de Cuartel General del
Mando de la Fuerza de Maniobra. En consecuencia, se modific la plantilla del batalln en un
mdulo independiente del mismo (Unidad de
Asuntos Civiles). Sin embargo, esta pertenencia
constaba solamente a efectos administrativos,
siendo la dependencia funcional de la 5 Seccin
del EM.
Con la activacin de la Unidad se buscaba
dotar a la Fuerza de Maniobra de unas capacidades de ejecucin en Asuntos Civiles para apoyo
de una unidad tipo brigada en operaciones de
proyeccin de fuerza en una primera fase, y en
una segunda, para una unidad tipo divisin, en
consonancia con el proyecto CIMIC 2000 de la
OTAN, por el compromiso adquirido por Espaa
con esta organizacin de tener una unidad operativa a fecha 31 de diciembre de 1998.
Posteriormente, y en cumplimiento de la Norma General 03/04 del Estado Mayor del Ejrcito,
se segreg la Unidad de Asuntos Civiles del Batalln de Cuartel General de la FMA, transformndose en batalln, bajo la dependencia orgnica
del Cuartel General de la Fuerza de Maniobra, y
pas a formar parte del ncleo de apoyo de la misma como unidad independiente con el nombre de
Batalln CIMIC I desde el da 1 de julio de 2005.
Mediante el Real Decreto 416/2006, por el
que se establece la organizacin y el despliegue
de la Fuerza del Ejrcito de Tierra, de la Armada
y del Ejrcito del Aire, as como de la Unidad

Militar de Emergencias, la dependencia orgnica


del Batalln CIMIC I pasa a la Fuerza Terrestre.
Por ltimo, y en cumplimiento de lo ordenado en la NG 04/09 de Adaptaciones Orgnicas,
cambia su denominacin a Batalln de Asuntos
Civiles (BAS I). En este sentido cabe sealar que
vistos los antecedentes y la evolucin doctrinal
de la cooperacin cvico-militar, no parece muy
acertada la decisin de cambiar la denominacin
del anterior Batalln CIMIC (BCIMIC I) por Batalln de Asuntos Civiles (BAS I), al haber sido la
funcin Asuntos Civiles superada por la actividad
operativa conjunta CIMIC.
De esta forma, la existencia del Batalln de
Asuntos Civiles I recoge la necesidad sentida de
disponer de unidades especializadas capaces de
actuar en los diversos campos que la actividad
CIMIC comporta. Dos son las misiones fundamentales que GEFUTER asigna al BAS I:
Constituir el elemento de ejecucin CIMIC en la
Fuerza Terrestre, proporcionando elementos de
apoyo a las unidades subordinadas y unidades
en operaciones, manteniendo la capacidad,
con los debidos refuerzos para actuar como
elemento CIMIC de un componente terrestre.
Asumir las competencias que sobre la gestin,
control y adiestramiento de los equipos CIMIC
pre-designados le sean asignadas.
Actualmente, el BAS I, con sede en Valencia,
tiene la siguiente organizacin:
El BCIMIC consta de PLMM, Unidad de Generalistas (UGEN), Unidad de Especialistas Funcionales (UEF) y Compaa de PLM y Servicios.
Su PLMM tiene la misin, como toda PLMM,
de proporcionar los elementos de juicio necesarios para fundamentar las decisiones del jefe del

ORGANIZACIN DEL BATALLN DE


ASUNTOS CIVILES I (VALENCIA)

CIMIC
PLMM

U.GENERALISTAS

U.ESPECIALISTAS

PLM. y SV

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

31

Preparacin de la Fuerza

batalln, transformarlas en rdenes y velar por


su cumplimiento.
La Compaa de PLM tiene el cometido de
encuadrar e instruir a todo el personal de tropa
del BAS I, as como tener a su cargo y mantener
el armamento, material y equipo del batalln con
la finalidad de apoyar en sus cometidos y logsticamente a la PLMM, Unidad de Generalistas y
Unidad de Especialistas Funcionales.
La Unidad de Generalistas consta de PLMM y
dos compaas de Generalistas.
Sus misiones son:
Constituir las unidades operativas CIMIC que
se determinen.
Instruir y adiestrar en las actividades generales
CIMIC al personal y unidades del Batalln o
ajenas.
Elaborar los informes de carcter sociopoltico
y humanitario que le sean encomendados, en
especial los estudios de rea de operaciones
emergentes en colaboracin con la Unidad de
Especialistas Funcionales.
Llevar a cabo el seguimiento CIMIC de las
diferentes zonas de operaciones donde
participen fuerzas espaolas.
Las compaas CIMIC de Generalistas tienen
una composicin tal que les permita realizar todas las actividades CIMIC que puedan llevarse a
cabo en el rea de responsabilidad (AOR) de una
gran unidad tipo brigada y, con el refuerzo necesario de equipos de especialistas, apoyar a una
GU tipo divisin. Es de destacar la existencia,
en cada compaa, de un ncleo de control de
personal y material cuyo cometido es encuadrar
en su caso a los equipos CIMIC pre-designados
procedentes de otras unidades del ET.
La Unidad de Especialistas Funcionales consta
de PLMM y reas de Cooperacin Cultural, Ingeniera de Instalaciones, Ingeniera Civil y Edificios
y Cooperacin Sanitaria. En esta ltima rea, su
activacin sigue un procedimiento anlogo al
de los equipos pre-designados de Generalistas.
Las misiones de la Unidad son:
Colaborar con la UGEN en la generacin de las
unidades operativas CIMIC que se determinen.
Asesorar sobre la situacin civil dentro de sus
reas funcionales especficas.
Proporcionar anlisis y lneas de actuacin
dentro de sus reas de especializacin
incluyendo el empleo de recursos civiles y/o

32

militares en apoyo a la misin asignada a la


fuerza militar.
Apoyar con asesoramiento tcnico, sobre
el terreno o desde territorio nacional, a las
unidades CIMIC desplegadas en operaciones.
Proporcionar apoyo tcnico al resto de
unidades y rganos del batalln cuando sea
necesario.
Elaborar los estudios de rea necesarios en
colaboracin con la UGEN.
Llevar a cabo el seguimiento CIMIC de
las diferentes zonas de operaciones con
participacin espaola en sus reas de
especializacin.
Pese al poco tiempo transcurrido desde su
creacin, el BAS I ha conseguido ganarse a pulso
un merecidsimo prestigio, fruto de su trabajo,
no solo en el mbito del ET sino allende nuestras fronteras, donde miembros de la unidad son
requeridos como instructores y conferenciantes
en los centros de excelencia CIMIC OTAN de
Holanda, Italia y Turqua.

LOS EQUIPOS CIMIC PREDESIGNADOS


En los ltimos aos y debido al incremento de
la participacin del ET en misiones en el exterior,
ha sido necesario generar de forma constante
personal y/o unidades con experiencia y/o forma-

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico


UG

UNIDAD DE GENERALSTAS
PLMM
GENERALISTAS
PLM

NCLEO CONTROL
PERSONAL/MAERIAL

GENERALISTAS

CENTRO CIMIC

EVALUACIN

ENLACE

cin CIMIC para su proyeccin a escenarios muy


diversos. Si bien inicialmente el proceso de generacin de fuerzas no fue siempre satisfactorio,
nada hay que objetar de los resultados obtenidos
gracias al gran esfuerzo y dedicacin del personal designado. As mismo, dicho procedimiento
se ha ido perfeccionando y normalizando, de
forma que hoy en da es impensable generar
una estructura operativa para la participacin en
misiones en la que no se contemple un elemento
CIMIC. Por ello la experiencia acumulada nos
obliga a disponer de forma permanente de una
capacidad de respuesta adaptada al grado de
exigencia requerido. As, la capacidad de sostenimiento de las operaciones en curso es proporcionada en primer lugar por el BAS I, completado en
su caso por los equipos CIMIC pre-designados.
UNIDAD DE ESPECIALISTAS
FUNCIONALES

SECCIN
(3 EQUIPOS)

El grado de activacin del mdulo de planeamiento (MPLTO) del Batalln de Asuntos


Civiles I, la ausencia de unidades CIMIC en el
nivel brigada, as como la creciente demanda
de equipos CIMIC en operaciones y compromisos multinacionales hacen que el BAS I no sea
autosuficiente en este mbito ni posea las capacidades necesarias para hacer frente a todas las
demandas que en el mbito CIMIC se le presentan al ET. Como consecuencia de ello, se orden
la creacin de equipos CIMIC pre-designados
para complementar las capacidades del BAS I
en aquellas unidades (brigadas, comandancias
o mandos) generadoras de contingentes para las
distintas zonas de operaciones, estando regida
su generacin, coordinacin y preparacin por
la norma elaborada al respecto por el CG FUTER.

UEF
PLMM

COOPERACIN
CULTURAL

INGENIERA
INSTALACIONES

INGENIERA CIVIL
Y EDIFICIOS

OPS/INF

ELCTRICAS

OBRAS
CIVILES

PROTECCIN
CULTURAL

GENERALES

EDIFICACIONES

COMUNICACIONES
CIVILES

COOPERACIN
SANITARIA

PREVENCIN
SANITARIA

FARMACIA

VETERINARIA

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201133

Preparacin de la Fuerza

EQ. CIMIC

EQ. MANDO

1/1/1//3

1/1/1//3

EQ. ENLACE

El personal de estos equipos, si bien pertenecen a distintas unidades subordinadas a FUTER


y durante el da a da llevan a cabo las tareas
de instruccin y adiestramiento propias de la
especialidad y puesto que ocupan, al mismo
tiempo reciben una formacin complementaria
CIMIC (escuelas prcticas, seminarios y jornadas
de actualizacin impartidas por el BAS I) que los
capacita para su empleo como unidad CIMIC en
ZO. El nmero establecido por GEFUTER permite
una adecuada rotacin en las distintas zonas de
operaciones, as como cumplimentar lo fijado
en el plan de disponibilidad establecido por el
GE JEME. La organizacin y composicin de
dichos equipos es la siguiente:.
La existencia de estos equipos persigue, por
tanto, un triple objetivo:
Dotar al BAS I de las capacidades aportadas por
las unidades CIMIC que figuran en su plantilla
como pre-designadas, para atender lo dispuesto
en el plan de disponibilidad y su empleo en

3/3/3//9

EQ. PROYECTOS

1/1/1//3

el desarrollo de misiones internacionales y


posibles ejercicios o colaboraciones CIMIC
que pudieran surgir.
Dar la oportunidad de participacin
en operaciones exteriores y ejercicios
multinacionales a los cuadros de mando
pertenecientes a unidades u rganos que, por
sus misiones especificas, normalmente no
tienen dicha opcin.
Dotar a las unidades generadoras de
contingentes para operaciones exteriores de
personal cuya cualificacin especfica (nivel
de idioma y formacin CIMIC) suponen un
valioso refuerzo.

UNIDADES CIMIC PARA OPERACIONES


Uno de los cometidos ms importantes asignados al ncleo CIMIC del CG de la FUTER es
establecer la composicin de las unidades CIMIC
que participan en las distintas zonas de operaciones, as como el perfil de sus componentes.

Relaciones con otros ejrcitos y con la poblacin civil

34

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Fruto de las experiencias recogidas hasta ahora en las misiones desarrolladas en el exterior por
el ET, el diseo de las unidades CIMIC responde
a un canon fundamentalmente prctico, de forma que tanto su composicin como los perfiles
de sus componentes le proporcionen unas capacidades que le permitan responder de forma
satisfactoria a aquellas situaciones y/o misiones
que se le puedan presentar en ZO.
Dos son las cualidades/capacidades fundamentales de las que debemos partir a la hora de
seleccionar al personal que conforma las unidades
CIMIC. Por un lado, la capacidad natural, que no
obstante puede ser mejorada mediante el aprendizaje y la prctica de determinadas tcnicas, para
el establecimiento de relaciones interpersonales.
De la capacidad del personal CIMIC para establecer y mantener unas relaciones fluidas con lderes
y autoridades de todo tipo, vencer suspicacias y
ganar su confianza depende en gran medida el
xito de su misin. Por otro lado, es fundamental
la capacitacin idiomtica. Si bien es cierto que el
empleo de intrpretes en ZO es muy importante,
no lo es menos que la posibilidad del personal
CIMIC de poder expresarse fundamentalmente
en ingls (idioma generalizado en operaciones y
empleado por las organizaciones e instituciones
internacionales) se considera imprescindible. Lgicamente, el perfil de idioma requerido se determina en funcin del puesto y de las caractersticas
intrnsecas de la operacin de que se trate.
En este aspecto del perfil del personal, siempre
ha habido discusiones acerca de la necesidad o
no de que el enviado a ZO sea diplomado en CIMIC y/o cuente con experiencia en este campo.
Vaya por delante que a la hora de designar al personal para una operacin, hay que conjugar lo
ideal con lo real. No obstante, hay que ser conscientes de que, si bien no se duda de la buena
voluntad del personal por hacer bien el trabajo
encomendado, si el personal que se desplaza a
ZO posee unos conocimientos y una experiencia
previos en el campo CIMIC, los resultados que
se obtendrn sern mucho ms satisfactorios y
la eficacia en el desempeo de sus cometidos
ser una constante desde el primer momento,
cumpliendo con la mxima de GEFUTER de que
a ZO se va a responder, no a aprender.
En este sentido hay que subrayar que el diseo de las unidades CIMIC responde a un esfuerzo

CIMIC de tipo medio en ZO. No obstante, las


capacidades de las unidades CIMIC pueden ser
reforzadas (y de hecho as se est haciendo,
cuando la situacin as lo exige) mediante la
aplicacin del concepto reachback por parte del
BAS I, apoyando tanto en asesoramiento como
en la confeccin o revisin de proyectos a las
unidades desplegadas en ZO. Como elemento
importante que reafirma esta capacidad est el
empleo satisfactorio en las distintas ZO de una
base de datos CIMIC unificada, creada por el BAS
I, que se ha revelado como un instrumento muy
eficaz para el control, coordinacin y ejecucin
de actividades CIMIC en las distintas ZO.
MISIONES DE LAS UCIMIC EN ZO
Desde la creacin de la ya citada Unidad de
Asuntos Civiles hasta llegar a hoy da, el camino
recorrido por el BAS I ha sido corto en el tiempo
pero muy intenso en cuanto a su participacin
en misiones en el exterior. Actuaciones en las
inundaciones de Mozambique, huracn Mitch en
Centroamrica, Paquistn, Bosnia Herzegovina,
Kosovo, el Lbano o Afganistn son una muestra
del extraordinario trabajo desarrollado en actividades CIMIC tanto por el personal del Batalln
como por los componentes de los equipos predesignados, que no ha hecho sino acrecentar el
prestigio y el aprecio hacia las Fuerzas Armadas
espaolas por todo el mundo como embajadoras
de Espaa.
OP. LH
Las actividades CIMIC desarrolladas en esta
operacin pueden englobarse en dos grandes
grupos: actividades de enlace cvico-militar y
actividades de apoyo a la poblacin, fundamentalmente mediante el desarrollo de proyectos de
impacto rpido (conocidos como QIP por su denominacin en ingls: quick impact projects),
cuya financiacin procede fundamentalmente de
territorio nacional (distintas instituciones y Ministerio de Defensa) y en menor medida de fondos
provenientes de UNIFIL. Estos proyectos se dirigen
fundamentalmente al rea de infraestructuras con
la realizacin de pequeas obras (conducciones
de agua, alcantarillado, reparaciones de edificios
pblicos, fundamentalmente escuelas, etc).
Aqu es necesario resear que una actividad
muy comn dentro del campo CIMIC como la

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201135

Preparacin de la Fuerza

Reunin con autoridades civiles

gestin y distribucin de ayuda humanitaria,


no se lleva a cabo en el rea prcticamente, ya
que salvo contadas excepciones (campamentos
de temporeros sirios prximos a la base Miguel
de Cervantes cuyas condiciones de vida son
bastante precarias), las condiciones de vida de
la poblacin no hacen necesario este tipo de
actividad.
En lo que respecta al enlace cvico-militar,
son constantes las reuniones y contactos con las
autoridades polticas de la zona, determinadas
por la pertinente matriz de enlace (para ello es
necesario un conocimiento previo adecuado de
la complicada estructura poltico-administrativa
del rea, que se adquiere durante la preparacin
del contingente en territorio nacional), as como
con los lderes religiosos de las diferentes comunidades presentes en el rea del contingente
espaol.
Merece ser tratado aparte el Programa Cervantes. La imparticin de clases de espaol a personal de la zona por parte de militares espaoles ha
sido una constante desde que Espaa comenz
a desplegar tropas en misiones en el exterior, a
comienzos de la dcada de los 90 del pasado
siglo. En el Lbano, el inters por esta actividad
ha crecido de forma exponencial, no solo entre
los libaneses, sino tambin entre los componentes de UNIFIL pertenecientes a otros pases y
cuyas unidades se integran en la Brigada liderada
por Espaa. Ello ha llevado a que el nmero de
36

alumnos se mueva en unas cifras por encima


de los 300 de promedio, de todas las edades
y confesiones. Este programa se desarrolla en
estrecha colaboracin con el Instituto Cervantes
en el Lbano, cuya sede se encuentra en Beirut.
OP. RA
En el rea de operaciones de Afganistn, las
actividades CIMIC se ven enormemente condicionadas por dos factores: por un lado, la deficiente red de comunicaciones que imposibilita
la llegada en tiempo oportuno de ayuda; y, por
otro lado y de forma fundamental, la situacin
de seguridad que limita de forma tajante las posibilidades de desarrollo de muchas de las actividades. Si a ello unimos el elevado nivel de
corrupcin existente en la administracin y la
lejana del territorio nacional, todos estos condicionantes dibujan un escenario muy complicado
para llevar a cabo actividades CIMIC.
Tres son las reas en que podemos englobar
las actividades CIMIC en esta operacin: actividades de enlace cvicomilitar, actividades de
apoyo a la poblacin y actividades de apoyo a
la Fuerza.
En lo referente al enlace cvico-militar, la Unidad CIMIC y la S-5 son herramientas imprescindibles para el mantenimiento del mismo ya
sea mediante entrevistas o reuniones que mantenga el jefe del contingente o los miembros de
aquellas con autoridades polticas o religiosas,

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

asistencia a shuras o jirgas (especie de consejos


consultivos de ancianos, notables), etc. En este
sentido es fundamental remarcar la importancia
de estos contactos, pues es imposible llevar a
cabo ningn proyecto o actividad si no se cuenta
con el visto bueno de los diversos estamentos.
En cuanto a las actividades de apoyo a la
poblacin, a diferencia del escenario libans,
aqu la distribucin de ayuda humanitaria es
una prioridad debido a la precaria situacin
de gran parte de la poblacin y el atraso en el
que se hallan sumidos. Esta ayuda, que procede bien de territorio nacional o que, preferentemente, se obtiene mediante explotacin
local, va desde el suministro de alimentos a
ropa, pasando por material escolar, mobiliario de diverso tipo, estufas, etc. Asimismo son
frecuentes las MEDCAP o actividades de asistencia sanitaria a la poblacin, mediante el
desplazamiento de equipos mdicos, as como
todas aquellas actividades encaminadas a la
promocin de la mujer (realizacin de talleres,
cursos, aporte de materiales para escuelas,
etc). Dentro de este tipo de actividades podemos englobar los numerosos QIP que se llevan
a cabo (independientemente de los grandes
proyectos, que son desarrollados por AECID),
ejemplo de los cuales tenemos en la construccin del orfanato Sargento Abril (denominado
as en honor del sargento fallecido en ZO) en
la ciudad de Qala i Naw, la construccin de

un colegio femenino y uno masculino en Bala


Murghab y de uno femenino en Ludina (rea de
Sang Atesh), por citar tan solo algunos de los
numerosos proyectos finalizados o en curso.
Tambin aqu se lleva a cabo el Programa
Cervantes de enseanza del espaol con notable
y creciente xito.
Por ltimo y en lo que atae a las actividades de apoyo a la Fuerza, hay que destacar que
prcticamente en todas las operaciones que se
llevan a cabo as como en los convoyes que se
organizan, se incluye un elemento CIMIC que
contribuye con sus actividades a ganar el apoyo
de la poblacin y por tanto a incrementar los
niveles de seguridad de la Fuerza.
Con estas pginas se ha pretendido dar una
idea resumida de la importancia de las actividades CIMIC en las operaciones actuales, sean de
la naturaleza que sean, as como una descripcin
en detalle de los elementos generadores (BCIMIC
I y equipos pre-designados) con que cuenta el ET
para llevar a cabo este tipo de misiones, en las
que tan extraordinario papel han desarrollado
y desarrollan. En cualquier caso, la intencin
ha sido contribuir a difundir la importancia creciente del aspecto CIMIC a la hora de planear y
dirigir las operaciones, y la necesidad de contar
con personal adecuado, tanto en cantidad como
en calidad, para hacer frente con garantas a
cuantas exigencias en este campo se le planteen
al Ejrcito de Tierra. n

Un momento de la ceremonia oficial de la primera piedra de la clnica


REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201137

VERSATILIDAD
EN LA PREPARACIN ANTE LA
DIVERSIDAD DE LOS CONFLICTOS
Pablo Delgado de Luque. Teniente Coronel. Infantera. DEM.

Nivel Operacional y Tctico

La versatilidad en la preparacin es imprescindible y


conlleva esfuerzos de innovacin y evolucin continua y
flexible en la doctrina, orgnica, formacin, instruccin
y adiestramiento, materiales e instalaciones para que
nuestras unidades sean capaces de adaptarse gilmente
al ritmo de evolucin de las nuevas amenazas.

La victoria en la guerra no depende completamente del nmero


o del simple valor; slo la destreza y la disciplina la asegurarn.
Hallaremos que los romanos debieron la conquista del mundo a
ninguna otra causa que al continuo entrenamiento militar, la exacta
observancia de la disciplina en sus campamentos y al perseverante
cultivo de las otras artes de la guerra.
VEGECIO. Epitoma rei militaris. Libro I, captulo I.

unque evolucionen las caractersticas del


conflicto armado, nada cambia en la naturaleza de la guerra. Es el mando el que
debe tener sensibilidad, flexibilidad y capacidad
de adaptacin a la evolucin de los tiempos, a
los cambios de las circunstancias; un pensamiento crtico que le permita discernir lo importante
de lo superfluo con la suficiente perspectiva para
decidir el empleo de la fuerza de manera gradual y oportuna ante la complejidad, diversidad
e incertidumbre de las amenazas actuales. En
definitiva la guerra sigue siendo un arte cuya
direccin debe residir de manera natural en los
lderes capaces de demostrar un conocimiento
profundo del entorno, de la evolucin del conflicto desde su perspectiva poltico-estratgica
hasta la operacional y tctica, y que ejerzan el
mando con ejemplo de virtudes y valores, pilar
fundamental para la confianza entre el mando
y sus subordinados, demostrando personalidad
y carcter para tomar las decisiones adecuadas,

ponderando el riesgo y asumiendo responsabilidades. Saber, Ser, Hacer. Esto se consigue con
la preparacin integral, que engloba enseanza
(de formacin y perfeccionamiento), instruccin
y adiestramiento (I/A) de las unidades.
En los aos 90, muchos analistas pensaban
que el gran avance en los sistemas de comunicacin, informacin y precisin de los sistemas
de armas haba supuesto una revolucin tal en
la forma de hacer la guerra que permitira un
conocimiento detallado del espacio de batalla
y de objetivos concretos que seran atacados
de manera rpida y bajas 0 desde grandes
distancias, lejos del contexto poltico, cultural
y psicolgico del entorno, con armas de gran
precisin que proporcionaran al mundo occidental un dominio global de las amenazas. Es el
concepto de incursiones rpidas y decisivas, con
una direccin centralizada y objetivos dispersos
en el mundo como escenario de una amenaza
globalizada, buscando efectos concretos con

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201139

Preparacin de la Fuerza

cada accin, lo que llev a doctrinas como la


de las operaciones basadas en los efectos (effect
based operations: EBO)1.
Las operaciones en los ltimos aos y las actualmente en curso estn demostrando las limitaciones de las nuevas tecnologas y que a pesar de
los avances que en reconocimiento, informacin
y precisin suponen, no estn proporcionando
ninguna victoria rpida o decisiva como se esperaba frente a un enemigo global, perseverante,
decidido y con gran capacidad de adaptacin. La
naturaleza del conflicto armado contina enmarcada en una serie de factores como su entorno
sociopoltico, su dimensin humana y la capacidad de adaptacin del enemigo a la superioridad
militar y tecnolgica, identificando y atacando
continuamente los puntos dbiles de Occidente
para mermar la voluntad nacional y el apoyo de
la sociedad a las operaciones militares, innovando nuevas amenazas que finalmente exigen
la interaccin sobre el terreno de las unidades
militares en un entorno complejo e incierto.
Ante este nuevo escenario internacional, la
Fuerza Terrestre debe estar preparada para hacer frente en un mismo escenario a un amplio
abanico de conflictos (full spectrum operations)

40

que engloban operaciones ofensivas, defensivas


y de estabilizacin.
Hoy en da, ante el marco de las alianzas de
seguridad y defensa y la evidente superioridad
de los pases occidentales en las operaciones
convencionales, es difcil identificar una posible amenaza o enemigo convencional, sin embargo, ante esta superioridad, que es necesario
mantener, surgen nuevas amenazas asimtricas
que se basan en acciones no convencionales,
mezclando la tecnologa moderna con los sistemas tradicionales de insurgencia y terrorismo en
continua adaptacin y evolucin; lo que exige
que nuestras unidades tengan una preparacin
verstil frente a la incertidumbre de amenazas a
las que debern hacer frente.
Esta versatilidad en la preparacin conlleva
esfuerzos de innovacin y de evolucin continua y flexible, tanto desde el punto de vista
de la doctrina como de la orgnica, formacin, instruccin y adiestramiento, materiales
e instalaciones para la preparacin de nuestras
unidades, adaptndose de manera gil al ritmo de evolucin de
las amenazas. Esta
adaptacin conlleva tambin
saber priorizar la
preparacin

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

en aquellos aspectos rentables en el corto-medio


plazo, reforzando progresivamente las tareas de
instruccin y los cometidos de adiestramiento
desde las pequeas unidades hasta alcanzar la
mxima capacidad en el marco orgnico de la
brigada como mdulo bsico de despliegue en
operaciones.
Las lecciones aprendidas de las operaciones
recientes indican la tendencia y necesidad de
acciones cada vez ms descentralizadas, en que
el lder de PU (desde una escuadra/pelotn hasta
un batalln, segn las circunstancias) se encuentra aislado en situaciones confusas y complejas,
y sus decisiones pueden tener una repercusin
internacional trascendental y un peso decisivo en
las operaciones. Esta descentralizacin requiere
por tanto PU bien preparadas, disciplinadas y cohesionadas, con gran confianza en su actuacin
y un alto nivel de preparacin tctico y tcnico
que les permita integrar el empleo interarmas en
operaciones conjuntas al ms bajo nivel, donde el mando, debe preparar a su unidad para
combatir en situaciones inciertas, garantizando
una actuacin equilibrada, tomando decisiones
difciles en poco espacio de tiempo, bajo situaciones de gran presin. Es por tanto necesario
reforzar la preparacin especfica para la misin,
potenciando la capacidad de adaptacin, la iniciativa y la confianza de las PU para operar en
un entorno donde confluyen la insurgencia, la
poblacin indgena, costumbres, cultura, poltica y religin, donde la niebla y la friccin del
combate persisten.
Es poco realista pensar que las U pueden tener
permanentemente un adiestramiento ptimo para
todo tipo de operaciones. S ha de alcanzarse un
grado ptimo de preparacin en aquellas misiones a las que con mayor probabilidad vayan a
enfrentarse en el corto/medio plazo; adems, los
cada vez ms escasos recursos disponibles y lo
complejo del entorno operacional aumentan el
valor de emplear de una manera equilibrada una
preparacin orientada a la misin, combinando
un conjunto de actividades en el campo y aprovechando tambin todas las capacidades que la
simulacin virtual proporciona, reproduciendo
de la manera ms realista posible las condiciones
y ambiente operacional y tctico.
Esta preparacin debe enfocarse en tres bloques principales: la enseanza (de formacin y

perfeccionamiento), la instruccin individual del


soldado y de los cuadros de mando y el adiestramiento progresivo de las unidades:
Con la enseanza se cultiva al mando, al lder, pieza clave para alcanzar la adecuada
preparacin de una unidad, debemos seleccionarlo y formarlo para hacer frente a situaciones complejas con iniciativa y capacidad
de adaptacin.
Refuerzo de las tareas individuales de instruccin desde la destreza en las tareas bsicas hasta el manejo adecuado del material y equipo
asignado, cada vez ms complejo, reforzado
con simuladores que escenifiquen situaciones
virtuales y constructivas lo ms parecidas al
entorno en que combatir, para finalizar con
ejercicios sistemticos (STX) reales que le exijan actuar bajo situaciones de estrs mental,
moral y fsico que fortalezcan el carcter y la
confianza en s mismo.
El adiestramiento de las unidades en los cometidos principales (CPA) y especialmente en
los fundamentales, reforzando tras un estudio
profundo de la evolucin de los TIC (troops in
contact) en operaciones y de las vulnerabilidades del enemigo, la sistematizacin de TTP
(tactics, technics and procedures) ante el mayor
nmero de situaciones identificadas en las que
la unidad puede verse inmersa, desarrollando
continuas repeticiones y ensayos que permitan
la automatizacin de las reacciones ante las
situaciones ms frecuentes con la consabida
flexibilidad y capacidad de adaptacin a situaciones confusas y cambiantes.
Para alcanzar un adecuado rendimiento es
importante tener presente ciertos criterios de
preparacin que aunque siempre han sido importantes, ahora adquieren una mayor relevancia:
El mando es el responsable de la preparacin
y ha de seleccionar una lista de CPA (LCPA)
detallada y realista. Debe estar inmerso en
la preparacin, dando ejemplo creando as
cohesin en la unidad, marcando claros parmetros de los requisitos que se deben alcanzar,
priorizando los cometidos fundamentales de
la LCPA, creando situaciones cambiantes y
forzando situaciones de estrs en escenarios
y ambientes lo ms parecidos a la realidad,
generando y actualizando guas detalladas de
preparacin, basadas en la experiencia y las

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

41

Preparacin de la Fuerza

lecciones aprendidas, proporcionando un continuo asesoramiento y retroalimentacin a sus


mandos subordinados, apoyado en continuos
anlisis post-ejecucin, fomentando el debate
y la discusin con las aportaciones de los escalones ms bajos, creando situaciones que
fomenten la creatividad, la iniciativa e innovacin en la ejecucin de los ejercicios.
Ha de motivar el desarrollo de actividades que
fomenten el ejercicio del mando por medio de
misiones basadas en rdenes tipo misin, donde se especifique exclusivamente la misin y el
propsito y dejar al mando de PU la ejecucin
descentralizada, basada en su propia intuicin
e iniciativa. Para ello hay que crear un clima en
que el error en la ejecucin de tareas y cometidos de preparacin pueda ser debatido, sirva
para extraer lecciones y genere motivacin y
confianza. La evaluacin continua para valorar y corregir errores as como repetir una y
otra vez hasta la perfeccin debe ser prcticas
habituales.
El papel del suboficial, vital a lo largo de la
Historia, se revaloriza en la nueva dimensin
de las operaciones descentralizadas (su papel
se multiplica). Es el lder directo, debe instruir
con el conocimiento y el prestigio que le proporciona la experiencia, y ha de estar continuamente preocupado por perfeccionar el nivel de
instruccin individual del soldado y de las tareas
colectivas del equipo, escuadra y pelotn, debe
fomentar el flujo de informacin en sentido
ascendente y descendente, identificando las
debilidades y capacidades de su unidad, para
asesorar y reorientar las LCPA de la PU, y al
mismo tiempo ser ejemplo de soldado y centro
de cohesin de la PU.
Prepararse para cmo se va a combatir requiere ambientar la preparacin y hacerla lo ms
realista posible adaptada al entorno donde se
desarrollar la misin en un corto/medio plazo
de tiempo, centrndose en:
Situaciones ofensivas, defensivas, de estabilizacin, que adems se sucedern en cortos
espacios de tiempo e incluso simultneamente (three block ops)2.
Preparar en primer lugar los cometidos fundamentales hasta la perfeccin. Las unidades que
estn bien instruidas en las tareas de instruccin bsicas y colectivas y en los cometidos de

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REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

PU tienen confianza en s mismas y desarrollan


con facilidad las actividades de adiestramiento
de cometidos progresivos o especficos de la
unidad.
Pequeas unidades pero con capacidades
interarmas, conjuntas y con frecuencia combinadas, con personal/capacidades de pases
aliados/mentorizados y actores civiles.
Preparacin activa, prctica, realista y orientada a la misin, ejercicios sistemticos en el
campo (STX) que reproduzcan situaciones ambiguas, complicadas y exigentes, con continuas
repeticiones de su ejecucin hasta alcanzar el
nivel de adiestramiento previsto, nivel que debe estar definido de acuerdo con los requisitos
que se hayan de alcanzar.
Ensear a ponderar una adecuada valoracin
del riesgo asumido frente al beneficio obtenido con cada accin, lo cual es tambin un
objetivo del adiestramiento de mandos de
PU para garantizar la seguridad y la proteccin de sus propias unidad y su capacidad de
tomar decisiones rpidas de acuerdo con el
propsito del mando en situaciones difciles y
complejas. Una adecuada preparacin genera
unidades y lderes competentes y seguros de
su capacidad operativa, refuerza la disciplina
en la accin, disciplina que tambin es un
valor fundamental para que el empleo de la
fuerza, especialmente en situaciones aisladas,
sea proporcional a la amenaza y acorde con
las leyes de los conflictos armados, aun cuando est lejos y fuera del control de su unidad
superior o mandos inmediatos, el soldado
debe ser ejemplar en su actuacin; la tica
de la guerra, es un aspecto fundamental en la
preparacin del soldado.
Mantener el nivel de preparacin tambin durante las operaciones si la misin lo permite.
Los CPA y en especial los fundamentales deben
ser revisados continuamente para no perder
el nivel de adiestramiento alcanzado por la
unidad y su plana mayor.
Mentalizar de la importancia del mantenimiento para el desarrollo de una misin, este mantenimiento no es solo del armamento y equipo,
sino tambin del personal, de su estado fsico y
psquico. El papel del mando es especialmente
importante en estos aspectos y su ejemplo en
cada situacin es vital.

Nivel Operacional y Tctico

Preparar lderes giles, educados para pensar y


elegir entre la multitud de opciones frente a la
diversidad de situaciones, de acuerdo con su
propia visin e intuicin y con capacidad de
improvisacin. Hay que cambiar la mentalidad
y escuchar las opiniones de los mandos de las
pequeas unidades. El error ha de ser parte
del riesgo a asumir y los mandos de PU deben
estar seguros de que pueden tomar decisiones
intuitivas e innovadoras ante una situacin sin
temor a la sancin. Si no existe esa libertad de
accin e iniciativa, el jefe de PU se bloquear
ante situaciones complejas y no tendr capacidad para resolverlas de acuerdo con su propia
apreciacin de la situacin que est viviendo.
No debemos confundir, claro est, error en la
decisin con negligencia, por ello hay que
formar este aspecto y evaluarlo en la idea de
que en operaciones solo deben estar lderes
que hayan demostrado un nivel de preparacin
integral.
Proporcionar feed-back al subordinado en la
preparacin y durante las operaciones para que
sea consciente del propsito del mando, de las
ROE, y del entorno en que se desarrollan las
operaciones cultural awareness.
La Fuerza Terrestre, consciente de la diversidad de situaciones en las

que se pueden encontrar sus unidades, define y


estructura en detalle una secuencia de instruccin y adiestramiento adaptada al Plan de Disponibilidad (PLDISP) del ET, en la que se evalan
y certifican las tareas de instruccin y cometidos
de adiestramiento general y se refuerzan durante
seis meses (4+2) aquellas especficas para la
operacin a la que se van a enfrentar hasta alcanzar el mayor grado de excelencia posible en
la preparacin.
Durante las fases de preparacin I y II de la
secuencia de adiestramiento, todas las unidades tienen que priorizar, instruir y adiestrar las
tareas y cometidos de las LCPA tanto generales
como especficos de la unidad y perfeccionar
los fundamentales de manera progresiva, desde
las tareas de instruccin bsica hasta los cometidos de PU tipo seccin, compaa, batalln,
secuencialmente evaluadas hasta alcanzar la
certificacin de la brigada como marco orgnico
y mdulo bsico de despliegue.
Tras estas dos fases, todas las unidades de la
Fuerza Terrestre deben ser capaces de ejecutar
adems de los cometidos especficos de su propia unidad, aquellos que se consideran generales
y que han de ser comunes a cualquier unidad,
independientemente de su especialidad, como
combatiente general.
Tras esta certificacin, las unidades entran en
un periodo de disponibilidad para hacer frente

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

43

Preparacin de la Fuerza

a posibles despliegues por necesidades nacionales o compromisos internacionales. Mientras


no se requiera, las unidades mantienen el nivel
de preparacin alcanzado y refuerzan aquellas
tareas o cometidos considerados fundamentales.
Seis meses antes de desplegar en una determinada operacin, la unidad entra en la preparacin orientada a la misin (4+2), periodo
de adiestramiento operativo (PAO), donde se
busca la inmersin total de todos los componentes de cada contingente en las actividades
de preparacin definidas como especficamente
necesarias para cada operacin, para as alcanzar
el mayor nivel de instruccin y grado de adiestramiento posibles antes de desplegar en zona
de operaciones3.
La denominacin que recibe responde a su
divisin en los dos perodos principales en que
se estructura: el perodo de adiestramiento especfico (PAE), hasta nivel compaa, escuadrn o
batera se dedican de lleno a potenciar el nivel
de instruccin y a adiestrarse en los cometidos
que realizarn durante la operacin; y el perodo
de adiestramiento final (PAF), en el que primeramente todas las unidades se adiestran integradas

en sus respectivas organizaciones operativas, para posteriormente incluidas en todo el contingente en su conjunto completen su adiestramiento
y cohesin.
CONCLUSIONES
La preparacin continua de las unidades sigue
siendo la clave del xito de la misin, preparacin que conlleva:
Una formacin integral de lderes que se encuentren cmodos en medio de situaciones
complejas, que sean capaces de motivar a sus
soldados paraa actuar con disciplina e iniciativa hacia un propsito comn y cumplir cometidos crticos, ms all del inters individual,
en el marco de las leyes y usos de la guerra.
Un perfeccionamiento continuo en las tareas
de instruccin del combatiente, desde las ms
bsicas.
Un adiestramiento reiterado de los cometidos
especficos de operaciones en un medio/corto
espacio de tiempo.
No hay que olvidar que la preparacin es
una parte ms del proceso de formacin para el
combate de los mandos y soldados. Todo debe

La preparacin de la fuerza ha de hacerse en cualquier terreno

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REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

ir vinculado, pues por un lado, la enseanza


(de formacin y perfeccionamiento) ensea a
pensar, a tener una estructura intelectual, principios, juicio y criterio que capaciten para tomar
decisiones ponderadas y ticas en situaciones
inesperadas; por otro, la instruccin y adiestramiento proporcionan la capacidad para una
accin eficiente y coordinada frente al mayor
nmero de situaciones previsibles. Sin embargo
ante lo imprevisto, ser siempre la educacin en
valores, la que har que los soldados puedan tomar decisiones correctas; valores, no exclusivos
pero vitales para el militar y que el soldado recibe de la sociedad en la que vive y en la que se ha
educado. Es, por tanto, muy importante reforzar
en el proceso educativo de nuestros mandos y
soldados la formacin en la tica militar para
poder hacer frente a los retos del conflicto actual.
La defensa es una responsabilidad nacional y la
educacin comienza desde los primeros das
de la formacin del individuo como ciudadano.
NOTAS
US Army Capstone Concept 2016-28, adaptacin
operacional en el entorno de operaciones actuales
bajo condiciones complejas y de gran incertidumbre
en una era de conflicto permanente.
2
Parte de esta complejidad fue definida con el trmino
guerra de los tres bloques (the three block war) por
el general Charles Krulak e ilustra los desafos a los
que se debe enfrentar un combatiente en el actual
campo de batalla, desde el extremo ms exigen1

te del espectro contra un enemigo bien equipado


y adiestrado, pasando por fuerzas irregulares que
emplean procedimientos de combate asimtrico; al
mismo tiempo debe ser capaz de realizar misiones
de apoyo a la paz y de ayuda humanitaria, y todo
ello, en un rea de tres manzanas de calles de un
mismo centro urbano. Es la lnea que se pretende
conseguir con el nuevo US. FM 5-0 The Operation
Process. March 2010.
3
Es interesante contrastar la adecuacin del PAO y sus
guas especficas de preparacin con el US VFM-7-1
Missin Focused Training de 2008.

BIBLIOGRAFA Y FUENTES
VEGECIO. Epitoma rei militaris.
US FM 5-0. The Operation Process. March 2010.
SILVELA, Enrique. El rey de los efectos est desnudo. Filosofa y crisis del concepto EBO. Revista
Ejrcito. n 817 mayo 2009.
US FM 7-0. Training for Full Spectrum Operations.
Dec 2008.
PD3-303 Estabilizacin.
Visin del JEME 2025. Nov 2009.
A.VANE, Michael y TOGUCHI, Robert. Achieving
excellence in Small-Unit performance. Military
Review. May-June 2010.
HERNNDEZ CALVO, Zacaras. Tradicin y modernidad: Retos de la tctica en el S.XXI. Revista
Ejrcito. N 829. Mayo 2010.
LPEZ, Isaac y TOSTON, Daniel. La preparacin
de los contingentes del ET para operaciones en el
exterior. Revista Ejercito. N 832, jul-ago 2010. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

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LAS

NUEVAS TECNOLOGAS
EN LA
PREPARACIN DE LAS UNIDADES
David Tarifa Ramrez. Comandante. Infantera. DEM.

Las aportaciones de las nuevas tecnologas a la instruccin


y adiestramiento nunca podrn reemplazar la realidad.
Entrenadores, simuladores, hardware, software contribuyen
a la I/A de las unidades y requieren una inversin inicial
cuya rentabilidad se obtiene mediante su empleo de forma
continua y creciente, reduciendo costes de preparacin y
aumentando su eficacia. Sin embargo, debemos delimitar qu
simuladores hemos de adquirir, cuntos y dnde ubicarlos.

Nivel Operacional y Tctico

a constante evolucin de los programas informticos, de los equipos que los operan
y de las tecnologas de la informacin est produciendo cambios en muchas reas de
nuestro Ejrcito y tambin en la instruccin y
adiestramiento de nuestras unidades. Los antao
denominados sistemas de entrenamiento de bajo
coste, elaborados por los mandos de manera
artesanal, han cedido su terreno a estos nuevos
programas, si bien la filosofa sigue siendo la
misma: dotar a las unidades de unos medios cuyo
coste sea bajo para poder efectuar la instruccin
de determinados puestos tcticos principalmente.
La eficacia y necesidad de estos sistemas,
junto a su precio, estn consiguiendo que ocupen cada da ms lugar en la preparacin de las
unidades, no solo de nuestro pas, sino tambin
del resto de nuestro entorno, dndose la posibilidad de que varios pases de manera autnoma
impulsen un mismo programa informtico con
lo cual todos obtienen beneficios. Un ejemplo
de esto es el entrenador Steel Beasts, empleado
para instruir unidades Ac/Mz en muchos pases
que contratan con la empresa propietaria del
programa el desarrollo de sus vehculos y las

mejoras que necesiten, ponindose junto con las


actualizaciones que realiza la propia empresa al
servicio de todos los ejrcitos usuarios.
Pero, cmo debemos emplear las nuevas
tecnologas en apoyo a la preparacin?Se debe
circunscribir nicamente a la simulacin? Podemos definir estos software/hardware como simuladores? En el presente artculo se pretende dar
respuesta a estas preguntas, si bien, en algunos
casos, las ideas expuestas son propias del autor,
basndose en su experiencia y conocimientos, e
intentando dar una visin de futuro con la dificultad que ello implica.
Para dar respuesta a estas preguntas, se hace
necesario revisar primero los tipos de simulacin
existentes. En la actualidad los diferentes tipos de
simulacin que existen en el Ejrcito son: real o
en vivo, virtual y constructiva. La primera de ellas
es la que permite la actuacin de los sistemas de
armas reales sobre el terreno, mediante su instrumentalizacin con medios de enfrentamiento,
etc. La virtual es la que proporciona representaciones de apariencia real de medios, terreno y
situaciones, mediante el uso de la informtica.
Por ltimo, la constructiva proporciona la repre-

Simulador misil antiaereo ligero (SATCP ) Mistral


REVISTAEJRCITON.842EXTRAORDINARIOMAYO2011

47

Preparacin de la Fuerza

sentacin grfica de modelos informticos de


unidades, sistemas de armas, equipos y terreno
para el adiestramiento de mandos y sus EM/PLM.
Adems, y siendo purista, solo en los casos en
los que se representa fsicamente un arma o sistema de armas que reproduce sus caractersticas
fundamentales, incluidos sus efectos, podemos
decir que estamos ante un simulador. El resto de
los casos podemos definirlos como entrenadores
(en el caso de que ayuden a sistematizar procedimientos) o como ayudas a la preparacin.
Lo ideal desde el punto de vista de la preparacin sera poder contar para cada modelo
de arma o sistema de armas, con el nmero de
simuladores que nos permitieran realizar la I/A
empleando estos medios. Sin embargo, esto no
es viable, en algunos casos por carecer de esos
modelos de simulador y en otros por no satisfacer
el nmero de los existentes las necesidades de
formacin. Un ejemplo de esto lo encontramos
en el entrenador Steel Beasts que constituye para
el Leopardo 2E uno de los pilares para garantizar
la instruccin y en el caso del Pizarro o Centauro
es una pieza fundamental, debido a la menor
existencia de medios de apoyo a la preparacin
para este tipo de vehculos.

La existencia de este tipo de entrenadores


surge de la necesidad de paliar la diferencia
entre la formacin terica y la prctica del proceso de preparacin. Los medios de combate de
los que disponen en la actualidad los ejrcitos
son cada vez ms sofisticados, tecnolgicamente hablando, requieren un mantenimiento
exigente, el precio de sus componentes es muy
alto e incluso en la mayora de los casos tienen
asignadas unas determinadas horas de funcionamiento. La formacin de los operadores de
estos sistemas de armas no puede ser puramente
terica para despus dar el salto al medio de
combate, ya que de hacerlo as se producirn
averas de manera involuntaria por la falta de
prctica o se desgastar el material al emplearlo
en tareas de formacin. Adems, debemos tener
en cuenta que en muchos casos no se dispondr de recursos como municin o combustible
para llevar a cabo una formacin progresiva y
continuada en el tiempo.
Software de apoyo a la preparacin
Desde hace unos aos estos sistemas de entrenamiento han desembarcado en nuestras unidades con la llegada del entrenador Steel Beasts,

Personal del Mando de Artillera Antiarea trabajando en simuladores

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REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

el cual est proporcionando unos resultados excelentes en las unidades donde se ha ubicado.
En un primer momento el entrenador ofreca la
posibilidad de instruirse con el carro de combate
Leopard 2 A4 y con el tiempo se han ido introduciendo otros vehculos como el Leopardo 2E,
el VCI Pizarro y el Centauro.
Su empleo tambin ha ido evolucionando, dado el gran abanico de posibilidades que permite.
En sus orgenes se cre una galera de ejercicios
para los puestos de tirador y de jefe de carro que
iban en orden creciente de dificultad introduciendo para ello en cada ejercicio mltiples variantes como la distancia de combate, el nmero
y tipo de vehculos, las condiciones del terreno
o el combate nocturno. Una vez adquirido un
grado bsico de instruccin en el puesto tctico,
se iniciaban los ejercicios de tripulacin en los
que se conectaban en red dos ordenadores para
su adiestramiento. Esta posibilidad de conexin
en red nos permite tambin aadir ms vehculos, con lo cual se pueden instruir secciones
y compaas. Adems, el entrenador permite
incluir apoyos, pudindose configurar S/GT con
observadores avanzados de artillera y unidades
de zapadores, UAV y realizando agregaciones y

segregaciones de modo y manera que el agrupamiento tctico estara formado por unidades con
diferentes medios que adems no tienen por qu
estar fsicamente en la misma ubicacin.
Otra gran ventaja que ofrece es la posibilidad de importar planos de cualquier campo de
maniobras o zona de operaciones, con lo cual
una unidad puede ejecutar en el entrenador los
ejercicios tcticos o de tiro que van a realizar
posteriormente en dichos lugares, obteniendo
detalles para coordinar su maniobra, viendo la
viabilidad de la misma y familiarizndose tambin con el terreno donde va a desplegar con la
gran ventaja que todo ello supone.
Si el Steel Beasts es un entrenador para instruir unidades pesadas principalmente, en la actualidad el ET est evaluando el VBS2 (Virtual
Battle Space) para apoyar a las unidades ligeras.
Este ltimo programa, al igual que el Steel Beasts,
es la versin militar de un programa civil llamado Arma y cuya versin militar fue impulsada
por el Ejrcito australiano. Este software no se
circunscribe nicamente a la I/A bsicos de una
unidad ligera, favoreciendo con ello el mando
y control, la ejecucin de los despliegues, etc,
sino que tambin permite introducir IED mos-

Virtual Battle Space

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

49

Preparacin de la Fuerza

trando para ello diferentes indicios que hacen


que la patrulla aprenda a detectarlos y reaccione
ante ellos, realizar acciones conjuntas mediante
la solicitud de acciones CAS pudiendo incluso
instruir a los OFA, operaciones anfibias o aerotransportadas y ejecutar acciones en CZURB teniendo incidencia las acciones de fuego sobre los
edificios, entre otras. El hecho de que est siendo
empleado por algunas escuelas de la OTAN como Oberammergau, que esta organizacin vaya
a adquirir una serie de licencias corporativas de
VBS2 que estarn a disposicin de los pases
miembros en un corto plazo y que sea empleado
por ejrcitos como el americano o australiano,
pone de manifiesto su validez. Adems, la cooperacin internacional en este programa es similar
a la expuesta para el Steel Beasts, obteniendo los
pases un beneficio compartido con las aportaciones individuales que realizan.
Las redes de trabajo
Las posibilidades de entrenadores como los
anteriormente citados son inmensas y su configuracin es completamente flexible. Las redes
de trabajo constituidas son uno de los principales motivos para ello. Como hemos expuesto
anteriormente, los equipos que configuran las
aulas donde se lleva a cabo la I/A pueden ser

empleados de manera aislada (un ordenador,


un puesto tctico), enlazando varios para configurar un equipo, escuadra o pelotn, uniendo
hasta llegar a nivel seccin o que una seccin
sea dirigida por un nico ordenador, o activar
aquellos puestos tcticos que queramos en cada
momento, no estando pues ligado ningn equipo informtico a un solo cometido. Adems,
esta red local que est configurada en el aula,
se encuentra enlazada a la WAN PG, con lo
que se pueden realizar ejercicios entre unidades
que se encuentren en ubicaciones geogrficas
distintas, siendo el volumen de informacin el
nico problema que puede afectar al normal
funcionamiento del ejercicio. Para paliar este
inconveniente, se est estudiando la posibilidad
de empleo de un protocolo de comunicaciones
para los medios de simulacin que permita que
el volumen de la informacin que transmitir sea
muy inferior al actual, y evitar de esta manera los
problemas citados.
En relacin con esta red de simulacin,
es necesario llevar a cabo lo que podemos denominar compatibilidad. Con este trmino se
quiere expresar la posibilidad de interactuar
entre distintos simuladores que emplean la misma red para comunicarse. A modo de ejemplo,
sera la capacidad de realizar un ejercicio en el

Simulador carro de combate Leopard

50

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico


Simulador misil anticarro TOW

cual una compaa mecanizada de VCI Pizarro est ejecutando una misin desde las aulas
de la BRIMZ X empleando el Steel Beasts y la
unidad transportada se encuentra en la base de
la BRILEG participando en el mismo ejercicio
pero con el VBS2 interactuando al 100% con
la unidad mecanizada e incluso pudiendo interactuar tambin entre la simulacin virtual y
constructiva como se expone en la Figura que
ilustra estas pginas.
Pero las nuevas tecnologas no solo proporcionan software para la instruccin, tambin
aportan una serie de herramientas que facilitan la I/A. Comenzamos as a responder a otra
de las preguntas que formuladas al principio
del artculo acerca de si se debe circunscribir
nicamente a los simuladores el apoyo que las
nuevas tecnologas proporcionan en materia de
preparacin.
En estos casos en los que, como hemos puesto
de manifiesto queremos ejecutar un ejercicio
desde diferentes ubicaciones, es tambin fundamental una herramienta que nos permita comunicarnos, estableciendo/simulando las mallas
radio que en realidad se activaran para llevar a
cabo esa misin. Tambin en esto las nuevas tecnologas nos aportan el medio para materializar
estas redes radio empleando para ello los mis-

mos equipos informticos con los que estamos


conectados al programa y utilizando como canal
la propia red de simulacin que estamos usando
como vnculo entre los equipos instalados en
diferentes aulas.
La optimizacin de los recursos disponibles
es otra de las ventajas que nos permite la informtica. En el caso que estamos tratando, una de
las acciones para optimizar los medios de simulacin es el empleo de servidores de licencias.
Antao era necesario tener en cada aula de simulacin tantas licencias como equipos tuvisemos
y no todas las licencias se empleaban simultneamente. Lo que se pretende en la actualidad
es que todas las licencias estn centralizadas en
un servidor conectado a la red de simulacin,
de modo que cada usuario se descarga una de
las licencias disponibles mientras realice la I/A,
dejndola de nuevo libre una vez finalizada su
instruccin. Con este sistema optimizaremos el
empleo de las licencias que tenemos, haciendo
un mejor uso de las mismas.
Rplicas
Otro de los apoyos de la tecnologa a la
preparacin y relacionado con la simulacin es
la rplica de armamento, cmara de combate
o simplemente de aquellas partes del sistema

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

51

Preparacin de la Fuerza

Simulador de la torre del carro de combate Leopard en el CIUACO (Centro de Instruccin de Unidades
Acorazadas), San Gregorio (Zaragoza)

de armas que nos interese para sistematizar


un proceso o para instruir en un determinado puesto tctico. Es lgico pensar que para
realizar la instruccin de tirador de carro en
el Steel Beasts, el mando del tirador es una de
las piezas fundamentales que han de existir.
Sin embargo, es necesario que el mando sea el
mismo que existe en el interior del Leopardo.
Nos interesa que sea exteriormente igual, que
la botonadura cumpla las mismas funciones y
que la sensibilidad de los movimientos sea la
misma, es decir, nos basta una rplica del original, siendo su coste mucho menor. Algunos
pases han hecho de esto su filosofa de simulador, llegando a replicar en shelters aquellas
partes del interior de la cmara de combate del
vehculo que tienen activadas funciones en el
software que emplean para instruirse. Otros
en cambio solo tienen los mandos y alguna
unidad de control. El grado de desarrollo de
estas rplicas ha de estar en consonancia con
el resto de medios de simulacin de que dispongamos, es decir, un desarrollo al ms alto
nivel tendra sentido en un vehculo como el
Pizarro o Centauro que tiene menos ayudas a
la instruccin.
Adems de esta va de desarrollo de rplicas
de material, tambin existe otro tipo de hardware
52

que ampla las posibilidades de los programas


de simulacin. Los equipos de que disponen recrean una visin completa del campo de batalla
y cuando mueven sus cabezas, los sensores que
llevan en ellas hacen que la imagen se mueva
ofreciendo la misma visin y movimiento de las
que se producen en la realidad.
La sensorizacin del
campo de batalla
Desde hace unos aos, se est realizando un
esfuerzo para digitalizar el campo de batalla. El
poder visualizar los medios de una unidad en un
mapa de situacin e incluso establecer una mensajera bsica entre ellos supone una herramienta
muy til para favorecer el mando y control. Sin
embargo, el pode r materializar esto conlleva una
infraestructura de enlace muy costosa. Adems,
no recibimos de manera automatizada ms informacin que la posicin de la unidad, el vehculo,
etc. La aparicin en el mercado de sensores va a
generar una revolucin en este campo, ya que sus
caractersticas de tamao, conectividad, codificacin y modularidad les confieren un enorme
abanico de posibilidades. Estos dispositivos son
capaces de conectarse entre ellos con un alcance
de hasta 40 Km, actuando adems cada uno como
repetidor de seal del resto, o bien conectarse

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

a una red por GSM/GPRS. Su modularidad nos


permite obtener informacin de manera automatizada, ya que todos ellos facilitan de serie
la posicin (ya que contiene un mdulo GPS) y
velocidad (a travs de un acelermetro) y adems,
se les pueden aadir diferentes configuraciones
como deteccin de gases (para incendios o gases
txicos), deteccin de movimiento o presin (para
seguridad), etc.
Las posibilidades son infinitas: se pueden
emplear en el desarrollo de un ejercicio LIVEX
para dotar en cualquier CMT al DISTAFF que se
constituya, de un plano de situacin donde se
refleje la posicin de las unidades actuantes, pudiendo incluso realizar cuantos filtros queramos
para mostrar visiones parciales para otros PC por
ejemplo a un PC Bri o a la OPFOR, y grabar
la informacin del ejercicio para su posterior
juicio crtico. Relacionado con lo anteriormente
expuesto, existira la posibilidad de ver desde
cualquier punto con acceso a internet dnde
est y hacia dnde se mueve una patrulla, vehculo, etc que est ejecutando el ejercicio. Adems y empleando las diversas configuraciones
modulares que existen, se podran utilizar para
proporcionar seguridad en determinadas reas;
ver desde nuestro ordenador la ubicacin de un
contenedor de carga que se est transportando,
conociendo datos como la temperatura a la que
est expuesto; recibir una alerta en nuestro
mvil, si uno de los sensores detecta un incendio
en una parte de un CMT o si ha detectado un
escape de gas txico en una BAE, etc.
Conclusiones
Las aportaciones de las nuevas tecnologas
a la instruccin y adiestramiento nunca podrn
reemplazar la realidad. Estos medios van a aportar una ayuda en las actividades de I/A disminuyendo riesgos y costes, pero el empleo de los
medios reales es inevitable y necesario.
Los medios descritos requieren una inversin
inicial cuya rentabilidad se obtiene mediante
su empleo de forma continua y creciente, reduciendo costes de preparacin y aumentando su eficacia. Sin embargo, debemos delimitar
qu simuladores hemos de adquirir, cuntos y
dnde ubicarlos. En opinin del que suscribe,
por su elevado coste, los grandes simuladores,
que sern escasos, han de estar centralizados y

situados donde su rendimiento sea mximo. Un


ejemplo de esto lo encontramos en los medios
de simulacin del CENAD.
Sin embargo en las unidades, la I/A ha de ser
diaria y no pueden posponerse determinadas
prcticas a los periodos asignados para emplear
los simuladores ubicados en otro lugar. Adems,
en muchas ocasiones, el nmero de ventanas
asignadas de manera anual no es suficiente para
alcanzar el grado de adiestramiento requerido.
Por estos motivos, las unidades han de contar
con entrenadores para paliar este gap y satisfacer sus necesidades de I/A antes de adquirir
simuladores ms costosos cuyo empleo ser
centralizado.
La rplica de aquellas unidades de control, armamento... debe complementar los entrenadores
anteriormente expuestos, ya que van a permitir
sistematizar las acciones que son necesarias en
la realidad, impulsando de esta manera la I/A con
una herramienta de coste reducido.
Los sensores constituyen una herramienta til,
modular, barata, fcil de emplear, de mantenimiento reducido y de escasa infraestructura que
va a permitir un avance muy significativo en la
capacidad de mando y control.
Por ltimo, a la hora de decidir qu simuladores, entrenadores o hardware debemos adquirir,
debemos tener en cuenta varias premisas:
El nmero de usuarios que van a emplear
los medios, qu nivel de instruccin han de
alcanzar y qu tanto por cierto de ese nivel
vamos a conseguir, si dotamos a la unidad del
material adecuado.
La disminucin de gasto al adquirir el material.
Cul es la necesidad de emplear el medio
que queremos simular, qu grado de detalle
queremos conseguir y cules son los medios
que ms coste genera su uso.

BIBLIOGRAFA Y FUENTES
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10/00. Simulacin para la enseanza, la instruccin
y el adiestramiento. 2000.
EME, Divisin de Logstica. Plan especfico de simulacin para el periodo 2009-2013. 2008.
St-Pierre, Henry M. Virtual training environment.
US Army Combined Arms Center. 2008.
Morrison, Peter.The evolution of the virtual ba
ttlespace. 2008. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201153

LA

PERSPECTIVA DE GNERO
EN LA FUERZA TERRESTRE
Fernando Snchez Prez. Comandante. Infantera. DEM.

Nivel Operacional y Tctico

ablar de perspectiva de gnero en operaciones puede resultar algo novedoso y


en cierto modo oportunista, pues parece
que todo lo relacionado con las mujeres est de
moda y cualquier iniciativa ser bienvenida solo
por tratar ese tema, independientemente de si
tiene xito o no. Sin embargo, David Galula ya
en 1963 recoga la necesidad de introducir este
aspecto para favorecer el cumplimiento de la
misin. En su obra Pacificacin en Argelia, 195619581 extrae la siguiente conclusin: Hay que
promover los derechos de la mujer para contrarrestar el apoyo a los insurgentes [] reflexionando sobre quines podran ser potenciales aliados
entre la poblacin, pens que la mujer de la Kabyla, dada su condicin de sometida, estara de
nuestra parte si conseguamos su emancipacin.
Ms recientemente, otro de los gurs de la
contrainsurgencia, el teniente coronel australiano
David Killcullen2 enumera en el punto 19 de su
famoso documento 28 artculos: fundamentos sobre contrainsurgencia a nivel compaa: Atrae a
las mujeres, protege a los nios: la mayora de los
insurgentes son hombres, pero en las sociedades
tradicionales (especialmente las musulmanas), las
mujeres tienen gran influencia en la creacin de
las redes sociales que los insurgentes emplean
en su beneficio.
Con respecto a la preparacin y generacin
de contingentes, la UNSCR 1.325 del ao 2000
reconoce la urgente necesidad de incorporar una
perspectiva femenina en las operaciones de mantenimiento de la paz y de que todo el personal
que participe en ellas reciba un adiestramiento
especfico sobre la proteccin, las necesidades
especiales y los derechos humanos de las mujeres y nios en las zonas de conflicto. La OTAN
emiti la BI SC 40-1 en septiembre de 2009
para operacionalizar dicha resolucin.
La Fuerza Terrestre es un conjunto de unidades
del Ejrcito de Tierra que tienen por cometido
principal prepararse para constituir, de forma
rpida y eficaz, organizaciones operativas especficas terrestres para la realizacin de operaciones
militares. El Teniente General Jefe es el responsable de ms de 39.000 hombres y 5.000 mujeres,
de su preparacin, de su formacin militar y de
su bienestar.

LAS MUJERES EN LA FUERZA TERRESTRE


El proceso de integracin de la mujer en las
Fuerzas Armadas espaolas se ha completado
satisfactoriamente y queda poca literatura que
escribir sobre este asunto que comenz hace
veinte aos y se puede considerar modlico y
servir de ejemplo para muchos pases.
En la actualidad, las mujeres disfrutan legalmente de las mismas posibilidades de acceso y
promocin que los hombres dentro de la institucin militar, una vez que se eliminaron las
ltimas limitaciones para ocupar determinados
destinos.
Hoy en da podemos encontrar mujeres en
todos los puestos tcticos de las unidades de
la Fuerza Terrestre, desde la Legin hasta las
unidades mecanizadas. Desde pilotos de helicptero o conductoras del carro de combate
Leopardo hasta fusileras en las sufridas unidades
de montaa. En cuanto a los empleos, tenemos
mujeres prcticamente en todos de cada una de
las escalas con la nica limitacin de los empleos
ms altos de cada una de ellas por una simple
cuestin matemtica, los galones llegan con los
aos y 20 aos dan para lo que dan.
Por otra parte la campaa El militar como modelo de ciudadana, iniciativa comenzada el ao
2009 en la Fuerza Terrestre, adquirir un nuevo
impulso en 2011 incluyendo la perspectiva de
gnero. La lacra de la violencia de gnero afecta
a los componentes de la Fuerza Terrestre en igual
medida que a cualquier colectivo, con la diferencia de que es intencin del Teniente General Jefe
reducir estos casos al mnimo.
LAS OPERACIONES
El Ejrcito espaol lleva ms de 20 aos participando en operaciones en el exterior: Bosnia,
Kosovo, Albania, Iraq, el Lbano y Afganistn
entre otras muchas. La Fuerza Terrestre es responsable de generar y preparar gran parte de los
contingentes que posteriormente se transferirn
a la cadena operativa para el cumplimiento de
la misin.
Actualmente las mujeres no tienen limitacin
alguna para ocupar ningn puesto en los contingentes, restricciones que si existen en ejrcitos
de pases que se consideran ms avanzados en

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201155

Preparacin de la Fuerza

el reconocimiento de sus derechos, como por


ejemplo Holanda o el Reino Unido.
La perspectiva de gnero, desde el punto de
vista militar tiene una doble vertiente en las operaciones en el exterior: verificar la participacin
de la mujer en el contingente propio y estudiar
el impacto que tienen las operaciones en las
mujeres locales.
LA GENERACIN DE los CONTINGENTES
En principio, la resolucin 1.325 o la BI-SC
Directive de la OTAN 40-1 no condicionan el
proceso de generacin de los contingentes espaoles, pues tal y como hemos visto anteriormente
las mujeres tienen las mismas oportunidades de
acceso que los hombres a cualquier unidad de
la Fuerza Terrestre. Por tanto, es bastante lgico
pensar que al generar un contingente se encuadren en l hombres y mujeres de forma indistinta
y en la misma proporcin que se encuentran en
la unidad base de generacin3.
A pesar de ello, la experiencia ha demostrado
que es beneficioso encuadrar mujeres en determinados puestos del contingente, del mismo
modo que en ocasiones es contraproducente el
hacerlo, especialmente en aquellos pases de
mayora musulmana. No ser la dureza de la
misin, el esfuerzo fsico ni la proximidad a la
primera lnea de combate lo que condicione el
encuadramiento, tan solo, el beneficio para el
cumplimiento de la misin.
La directiva 40-1 de la OTAN habla de la
necesidad4, siempre y cuando sea posible, de
incluir mujeres en todas las actividades que
impliquen contactos con la poblacin civil.
Adems, velando por nuestros propios intereses
podemos forzar la situacin y encuadrar mujeres
en determinados puestos buscando siempre un
beneficio en el cumplimiento de la misin. Dichos puestos podran ser los siguientes:
Puestos que requieran contactos con la
poblacin, relacionados con la seguridad. Este
caso es el ms claro y el ejemplo tradicional
de la necesidad de encuadrar mujeres en los
contingentes. Hoy en da, a ningn soldado
espaol se le ocurre registrar con sus propias
manos a una mujer afgana. En las respectivas
rdenes de relevo de cada contingente se
obliga a encuadrar al menos un nmero
mnimo de mujeres en las unidades de apoyo

56

a la base (UABA) para realizar misiones en los


controles de entrada.
Esta obligacin podra hacerse extensiva al batalln de maniobra o la compaa de proteccin
o seguridad, aunque la realidad es que, como hemos visto anteriormente, tanto la proporcin de
mujeres en las brigadas como la concienciacin
de los jefes de la necesidad disponer de ellas
permiten encuadrar el nmero suficiente en los
pelotones y secciones de fusiles.
Personal del Cuerpo Militar de Sanidad: La
generacin de las clulas de estabilizacin no
corresponde a la Fuerza Terrestre. Tener una
perspectiva de gnero en este asunto es difcil
debido a la escasez de mdicos disponibles
para desplegar en misiones en el exterior.
Adems, el alto tanto por ciento de mujeres
que componen el Cuerpo Militar de Sanidad
hace prcticamente seguro que haya varias
mujeres, tanto mdicas como enfermeras. La
experiencia en operaciones ha demostrado
que cuando se hacen apoyos sanitarios a la
poblacin, se atienden amuchas ms mujeres y
nias cuando en el equipo mdico hay alguna
mujer, o todas son mujeres. Este hecho es de
suma importancia en un pas donde un anciano
con tos tiene preferencia en la cola del mdico
sobre una mujer con neumona.
Personal de Equipos CIMIC: Los equipos CIMIC
son los principales encargados de interactuar
con la poblacin civil. Pueden ser generados
por el Batalln CIMIC o por las propias
brigadas. En la medida de las posibilidades,
estos equipos deberan ser mixtos o al menos
tener alguna mujer, especialmente en aquellos
cuya misin sea el enlace cvico-militar. En
caso de no ser posible, se podrn substituir con
equipos organizados ad-hoc durante la misin,
como veremos posteriormente.
Intrpretes: La responsabilidad de la
contratacin de intrpretes tampoco
corresponde a este cuartel general, pero se
debe tener en cuenta la necesidad de disponer
tanto de hombres como de mujeres para la
mejor aproximacin a los diversos sectores de
la sociedad en la que actuamos.
Equipos de Asesoramiento y Enlace (OMLT):
La formacin de las fuerzas de seguridad del
pas en que se interviene es una parte muy
importante de las operaciones de estabilizacin.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Este trabajo supone un contacto directo entre


oficiales locales y sus homlogos que los
orientan, los aconsejan y guan en su trabajo
diario. A la hora de generar estos equipos
habr que valorar la eficacia de un hombre
mentorizando a una mujer o viceversa. A da
de hoy, en las OMLT desplegadas en Afganistn
hay mujeres que instruyen a oficiales afganos
y habr que esperar sus informes y extraer las
lecciones aprendidas.
LA PERSPECTIVA DE GNERO
EN LA PREPARACIN
El periodo de adiestramiento operativo es
aquel que emplean los contingentes en prepararse para estar en condiciones de cumplir la
misin asignada. Tal y como ha quedado patente
a lo largo de este monogrfico, el xito de la
operacin pasa por una preparacin rigurosa,
realista e intensa.
No existe ningn documento nacional o aliado que trate sobre la perspectiva de gnero en la
preparacin de las operaciones. El Joint Forces
Command Brunssum emiti el ao 2010 una
gua para adiestrar a las fuerzas que participan en
ISAF, la Mission Specific Training Guidance, cuyo

Anexo D se titula Gender. En Espaa el MADOC


public en enero de 2008 la PD3-301 sobre este
tipo de operaciones, cuyo captulo 10 se dedica
a la preparacin de las fuerzas pero no existe
ningn apartado sobre gnero.
A pesar de ello, la necesidad de incrementar
la preparacin en esta rea ya fue detectada en el
cuartel general. Durante el mes de noviembre del
pasado ao se desarroll un ejercicio de toma de
decisiones en que oficiales llegados de ZO exponan diversas incidencias a oficiales que iban a
desplegar en un futuro y que deban resolver de
forma terica. Una de las incidencias que muy
acertadamente se introdujo fue la resolucin del
problema creado por las fuerzas aliadas al emplazar un puesto de polica afgana en una cota
cercana a un pueblo y que recibi muchas quejas
por parte de la poblacin local, pues desde l se
divisaban perfectamente los patios traseros de las
casa particulares, dedicados al esparcimiento de
las mujeres. Lgicamente, el puesto cumpla a la
perfeccin con su cometido de seguridad, pero
fue emplazado sin tener en cuenta otros aspectos
de la cultura tradicional afgana.
Con este ejemplo queda patente la necesidad
de incorporar la perspectiva femenina en la pre-

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201157

Preparacin de la Fuerza

paracin y conduccin de las operaciones. Una


de las materias que ha adquirido relevancia en
la preparacin de los contingentes en los ltimos
aos y que debe ser potenciada, incluyendo la
perspectiva de gnero es el cultural awareness
CULTURAL AWARENESS
En Afganistn, las operaciones de contrainsurgencia implican un contacto directo con la
poblacin local. Protegerla y ganarse su apoyo
implica interactuar a diario con ella. Todo el personal del contingente, desde el jefe del PRT hasta
el ltimo soldado, debe conocer la importancia
que el respeto a la cultura local tiene en el correcto desarrollo de las operaciones. La situacin
de las mujeres, sus necesidades, su situacin
social, sus derechos, las tradiciones tribales y
otros aspectos deben ser estudiados como una
parte ms de este cultural awareness.
En el Lbano la situacin es mucho ms complicada pues en la misma rea de responsabilidad
se mezclan poblaciones de diferentes religiones
(cristianos maronitas, musulmanes y drusos) con
diferentes sensibilidades culturales. En principio,
la relacin con la poblacin cristiana, especialmente femenina, es mucho ms sencilla que

con el resto, algo que caus problemas en los


primeros contingentes pues la mayora de las
contrataciones locales de mujeres se hacan en
pueblos cristianos, lo que provoc el malestar de
la poblacin musulmana.
Por otro lado hay que mirar con lupa las estadsticas de apoyos mdicos a la poblacin civil,
pues cuando solo se diferencia entre hombres y
mujeres los datos pueden ocultar que la realidad
es que la mayora de las mujeres que acuden a
estos son cristianas.
En definitiva, el estudio de la zona en la que
se va a desplegar es fundamental para el xito de
la misin. Durante el periodo 4+2, el personal
de los contingentes estudia el manual de rea y
se imparten una serie de conferencias sobre el
pas as como de concienciacin cultural. Por
otro lado, durante los ejercicios de preparacin
se emplean fuerzas de oposicin que simulan no
solo al enemigo, si no a poblacin local incluyendo mujeres.
El periodo 4+2 puede ser empleado para formar lo que los americanos denominan female engage teams, que podra der una buena solucin
para mejorar la perspectiva de gnero durante la
operacin. El Cuerpo de Marines inici el ao

Es fundamental la atencin sanitaria a la poblacin civil

58

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

2009 este proyecto para acceder a las mujeres


de la zona de forma directa y con ms facilidad,
iniciativa que les est proporcionando muy buenos resultados. Con estos equipos se soluciona el
problema que se podra plantear al encontrarnos
un contingente que no tuviera suficientes mujeres
encuadradas en los puestos clave anteriormente
citados.
Estos equipos se podran crear ad-hoc, empleando a las mujeres disponibles en el contingente que participaran en estos como una segunda actividad. En lo referido a la preparacin
pre-despliegue, durante el 4+2 recibiran una
serie de charlas sobre: UNSCR 1325, primeros
auxilios, situacin de la mujer en zona de operaciones, etc. Con un curso de una semana, estos
equipos estaran preparados en zona para en un
momento determinado cumplir misiones como
acompaar a los equipos mdicos en las atenciones a civiles, a los equipos CIMIC o a las compaas en sus patrullas a pie por las localidades.
el desarrollo de las operaciones
Una vez estudiada la perspectiva de gnero
en lo relacionado al contingente, veremos cmo
tratarla en lo relativo a las mujeres locales. La
perspectiva de gnero implica en este caso planear y dirigir las operaciones verificando que no
afecten de forma diferente a las mujeres por el
mero hecho de serlo. Por otro lado, una efectiva
mejora de sus condiciones de vida, acceso a la
educacin y sanidad, o participacin en rganos de gobierno redundarn en la mejora de la
situacin y por tanto en el cumplimiento de la
misin. El respeto de los derechos humanos y de
la cultura local junto al cumplimiento estricto de
las ROE proyectar una imagen que el beneficiar al contingente. Este sentido es en el que se
debe entender la perspectiva de gnero: como un
beneficio al cumplimiento de la misin.
El manual americano FM 3-24 sobre contrainsurgencia, cuyo principal responsable es el general Petraeus, actual COMISAF y referencia en
temas de COIN, dice: Cuando la mujer apoya
los esfuerzos de la contrainsurgencia, la familia
apoya la contrainsurgencia. Obtener el apoyo
de la familia es un gran paso para movilizar la
poblacin contra la insurgencia.
La filosofa de las operaciones en Afganistn
se corresponden con lo que el lder contrainsur-

gente francs Joseph Gallieni6 llamaba la tache


dhuile (mancha de aceite). A medida que cada
aldea o distrito se va pacificando y se va uniendo
a otras zonas, la mancha va creciendo hasta que
todo el pas est bajo control.
El marco de las operaciones de contrainsurgencia se conoce como shape, clear, hold and
build. Es en este marco doctrinal en el que se
planean y se ejecutan las operaciones con la
finalidad de crear un ambiente estable y seguro
para hacer llegar la accin del gobierno a cualquier punto del pas. La perspectiva de gnero
debe tenerse en cuenta en cada una de estas
operaciones, cronolgicamente ordenadas en el
caso ms completo;
SHAPE: Son operaciones que sirven para
establecer las condiciones necesarias para
desarrollar con xito las siguientes. Suelen
estar relacionadas con la recoleccin de
informacin, la preparacin de las operaciones
y la informacin a la poblacin del beneficio
que supondrn estas en su seguridad.
La poblacin no debe ser considerada como
un todo, habr que estudiar en particular el
impacto que las operaciones tendrn en e las
mujeres de la zona. En funcin de la virulencia
que vayan tener las operaciones CLEAR es
posible que sea necesario que las mujeres
abandonen la zona temporalmente (en la
famosa operacin Mostharak de verano de
2009 se difundi deliberadamente informacin
sobre la ofensiva para que mujeres, nios y
nias, y no combatientes abandonaran la zona).
Adems de las jirgas que probablemente se
desarrollen con los ancianos de la zona, ser
conveniente contactar con las mujeres para ver
sus inquietudes, sus necesidades y convencerlas
de que la operacin redunda en su beneficio.
En esta fase tienen gran importancia los
equipos CIMIC trabajando con ONG y otras
organizaciones, si las hubiera en la zona.
CLEAR: Son operaciones militares ejecutadas
para asegurar una zona. Los insurgentes
se deben eliminar, detener o expulsar
del rea elegida. No tienen por qu ser
violentas, aunque no se pueden descartar los
enfrentamientos como consecuencia de la
restriccin en la libertad de accin del enemigo.
Lo ms importante durante esta fase es evitar
a toda costa las bajas civiles, especialmente

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201159

Preparacin de la Fuerza

de mujeres, nios y
nias, pues se
provocara
el

efecto contrario al deseado y no solo se


perdera el apoyo de la poblacin, sino que
ms insurgentes se adheriran a la causa.
HOLD: El objetivo de estas operaciones es
mantener aseguradas las zonas limpiadas
con operaciones CLEAR. Si no se llevaran
a cabo, las operaciones anteriores no
serviran de nada. Las fuerzas de seguridad
locales adquieren el principal protagonismo,
dedicndose las fuerzas de ISAF a su apoyo.
Los proyectos de impacto rpido (QIP) son
de gran utilidad y es fundamental para su
desarrollo conocer las necesidades de la
poblacin. Lo normal es que se coordinen con
las autoridades locales y con los elders. Es muy
importante tener en cuenta las necesidades de
las mujeres de la zona y su opinin sobre los
proyectos que se vayan a desarrollar.
BUILD: Una vez que una zona es segura,
estas operaciones buscan el fomento de la
gobernabilidad y el desarrollo econmico.
En ellas tienen gran importancia el Gobierno
afgano y las ONG y OI. Con respecto a la
mujer se debe conseguir su participacin en
los rganos de decisin locales, el acceso a la
educacin y las oportunidades para trabajar.
conclusiones
En el caso de Afganistn, las mujeres son
posiblemente el principal colectivo antitalibn del pas, aunque acceder a ellas no
es fcil para los soldados occidentales. El
objetivo de la operacin ganarse el apoyo
de la poblacin nunca se podr lograr si
solo hablamos con la mitad de ella.
De momento, la documentacin sobre
GENDER es escasa en la OTAN. Adems
del Anexo D, el Mando Aliado de Transformacin est preparando un curso a
distancia sobre este asunto orientado al
personal que va a desplegar en los estados
mayores del HQ ISAF y del IJC (mando
conjunto de nivel intermedio).
Dado que no se esperan cambios
drsticos en los prximos aos, la forma ms fcil de acceder a las
mujeres afganas ser mediante
las mujeres del contingente.
Por eso, adems de situar mujeres en los puestos relaciona-

60

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

dos con la seguridad, se deben encuadrar en


aquellos puestos desde los que se pueda tener
acceso a la poblacin femenina, del mismo modo que hay que estudiar en detalle qu puestos
del contingente es recomendable que no sean
ocupados por ellas. La idea de entrenar previamente y reunir en zona de operaciones equipos
exclusivos de mujeres para determinadas misiones, puede ser un gran paso para conocer la
realidad de la poblacin femenina de la zona.
Adems de ser una fuente de informacin se
pueden emplear para proporcionar cursillos de
primeros auxilios, cursos ocupacionales, impartir clases y sobre todo para lanzar un mensaje
positivo a este sector.
Las operaciones de seguridad implican una
serie de acciones, cinticas, no cinticas, de
informacin, debindose mantener en todas
ellas una perspectiva de gnero. As, cuando se
construy la actual base en Qala e Naw hubo
que realizar una serie de acciones de INFOOPS
y de key leader engagement para informar a la
poblacin, molesta por la posibilidad de que se
grabaran a las mujeres, de que las cmaras de
seguridad del sistema perimetral Messeins eran
para la seguridad de la base, y que las imgenes
se trataran con la confidencialidad necesaria.
Ahora que ha comenzado el proceso de transicin en Afganistn, es de suponer que sea gradual y por distritos hasta el total traspaso de
una provi ncia y finalmente de todo el pas. Este
proceso se liderar desde el Gobierno afgano con

la ayuda de las fuerzas de ISAF. Nuestra responsabilidad es mantener la mentalidad de gnero


tanto en los rganos de gobierno como en sus
fuerzas armadas a travs de los OMLT.
Finalmente, las condiciones para determinar
si una zona es transferible o no se decidirn con
toda seguridad por una serie de indicadores.
Ser de gran importancia introducir entre ellos
datos sobre las mujeres: violencia de gnero,
acceso a la educacin, al trabajo, a los puestos
de gobierno local, a la sanidad, conscientes de
que, una vez transferida la zona, la evolucin de
la situacin ser incierta y las posibilidades de
influir en la misma sern mnimas.
NOTAS
Disponible en www.rand.org
David Killcullen form parte del selecto grupo de
asesores del general Petraeus y fue uno de los colaboradores en la redaccin del manual americano
sobre COIN.
3
Si bien es cierto que el porcentaje de mujeres que
participan en operaciones puede diferir con el de
mujeres encuadradas en las Fuerzas Armadas. Cada
contingente tiene sus particularidades, pero entre
otras cosas se puede achacar al perjuicio que an
supone el alejamiento de la mujer del ncleo familiar por un periodo de tiempo tan largo.
4
Apartado 3.3.h) de la BI-SC Directive 40-1.
6
Militar francs de finales del siglo XIX que desarroll
gran parte de sus actividades en las operaciones
francesas de colonizacin. n
1
2

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

61

CAMPAA

MODELO DE CIUDADANA
Toms Garca Palacios. Teniente Coronel. Infantera. DEM.
Miguel ngel Lpez de Lerma Caldern. Teniente Coronel. Infantera.

Nivel Operacional y Tctico

El militar debe tener una preparacin operativa


ptima y una adecuada formacin cultural y moral.
Para aumentar la seguridad frente a amenazas
como la droga, el alcohol, y fomentar el prestigio
y motivacin, surgi la Campaa Militar de
FUTER Modelo de Ciudadana. La implicacin del
mando y el fomento del liderazgo y ejemplaridad,
incluyendo pautas de vida saludable, constituyen
la clave de su xito.

l militar actual no solo debe tener una preparacin operativa ptima, en sus aspectos
fsico y tcnico, sino adems una adecuada
preparacin cultural y moral. Desde la enseanza de formacin hasta la instruccin diaria, al
profesional militar se le prepara de forma permanente para el desempeo de sus funciones.
Los contenidos del desempeo a que aludimos
pueden verse en el Art. 19 de la Ley de la Carrera
Militar para descubrir sin dificultad que el militar
profesional ejerce funciones operativas, tcnicas,
logsticas, administrativas y docentes, las cuales
se desarrollan por medio de acciones directivas
que incluyen las de mando y acciones de gestin
y ejecutivas.
Es fcilmente deducible la responsabilidad
que implica el ejercicio de estas funciones y
la importancia que tiene el poder contar con
una referencia moral y de comportamiento que
enmarque todas nuestras acciones. Aumenta esta responsabilidad el hecho de que cuando la
sociedad nos ve de uniforme o sabe de nuestra
condicin de militar, no ve a un individuo aislado, sino que ve y generaliza su sentimiento a
toda una institucin.
No obstante, hay aspectos que pueden afectar
tanto a la disciplina como a la moral, as como a
la imagen del ET, ante los cuales se debe mantener una vigilancia constante. De ah que resulte
primordial el prestar una especial atencin a re-

ducir las vulnerabilidades y aumentar el nivel de


seguridad frente a las amenazas que la droga, el
alcohol y actitudes no deseadas de algunos individuos, tienen en la Fuerza Terrestre, protegiendo
al mismo tiempo la moral, la motivacin y el
prestigio de sus miembros mediante el liderazgo,
la ejemplaridad, los hbitos de vida saludable y
la defensa de los ideales de la institucin.
Formar una cultura con las caractersticas necesarias para lograr una organizacin de excelencia orientada a los tiempos modernos es una
tarea ardua y en una organizacin que busque
actualmente el xito, algunos de los siguientes
ingredientes sern muy necesarios:
La motivacin: constituida por todos los factores capaces de provocar, mantener y dirigir
la conducta hacia un objetivo y solo as la institucin estar en condiciones de formar una
organizacin slida y fiable. Sin motivacin los
objetivos nunca se alcanzarn, la formacin valdr de poco y los problemas sern insolubles a
menudo.
Espritu de unidad, cuerpo o equipo: cuando
se considera que algo, un problema, una tarea,
una meta es personal, las energas para realizarlo
se multiplican. Cuando se considera que algo
no es problema de uno, y muchas veces s lo
es, la indiferencia y la insensibilidad, con todos
los daos humanos que ellas producen, ser la
norma.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201163

Preparacin de la Fuerza

Orgullo de pertenecer a una institucin, fidelidad: se encuentra muy relacionado con la


calidad, el prestigio y el reconocimiento de la
organizacin. Cuando una organizacin adquiere
cierto prestigio, sus miembros se sienten orgullosos y se incrementa su sentido de pertenencia.
Al potenciar un estilo de vida saludable, tratamos de crear comportamientos que disminuyen
los riegos de enfermedad. En los pases desarrollados las formas de vida poco saludables se
centran en dos: el consumo de sustancias txicas
y la falta de ejercicio fsico. Ambos son objeto de
atencin especfica por parte del ET, el primero
con el Plan Antidroga del ET (PADET) y el otro
con la implantacin del test general de la condicin fsica (TGCF) y el fomento de la prctica
deportiva en todos los niveles.

la FUTER contra la incidencia de las drogas, el


alcohol, los abusos de gnero y las actitudes no
procedentes frente a las FCSE, conocida genricamente como CAMPAA MILITAR de FUTER
MODELO DE CIUDADANA.
De forma simultnea y como elementos que
favorecen un resultado positivo, con la campaa
se pretende impulsar las siguientes acciones:
1) Reforzar las acciones de mando dirigidas a
disminuir la amenaza que de actitudes de sus
miembros que puedan provocar riesgos para la
seguridad de la Fuerza Terrestre.
2) Concienciar al personal de la FUTER de
cul ha de ser en todo momento el modelo de
conducta de sus componentes.
3) Contribuir a la asuncin de un modelo de
vida ms saludable.
4) Elevar el prestigio y el sentimiento de
pertenencia a la Fuerza Terrestre.
El principio de integracin con la accin del
Mando en todos los niveles es fundamental
para el desarrollo de la campaa. Indicadores
positivos en la evaluacin de la campaa ponen
de manifiesto una accin de mando eficaz.
Por consiguiente, la implicacin del mando
y el fomento del liderazgo y ejemplaridad,
incluyendo pautas de vida saludable,
constituyen la clave del xito.

OBJETIVOS
Para hacer frente a las amenazas mencionadas
y fomentar el prestigio y motivacin, en el CG
de la FUTER se ide un plan para corregir determinadas conductas en beneficio del prestigio
de la institucin, y proseguir en la erradicacin
del consumo de sustancias psicotrpicas, implementando todas las medidas establecidas en el
PADET. En concreto se emitieron las directrices
necesarias para la ejecucin de una campaa en
64

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

FASES
Para llevar a cabo la campaa, se ide un plan
articulado en cuatro fases.
Fase inicial, durante la que se ejecutaron los
trabajos de anlisis, planeamiento y diseo de
la campaa.
Fase de Concienciacin, iniciada en el mes de
octubre de 2009 y concluida a final del mismo
ao. Dirigida a todos los militares de la FUTER
constaba de dos acciones principales: que la
explicacin de la campaa, principalmente para
los cuadros de mando, y la difusin y exposicin
de carteles explicativos.
Fase de Prevencin, en ella se desglosa y se
diversifica la campaa hacia cada una de las
audiencias-objetivo, buscando la prevencin de
actitudes incompatibles con la condicin de militar mediante la informacin, el refuerzo de actitudes positivas y la adecuada accin de mando.
Los programas de I/A deben incorporar y mantener con carcter general los mensajes de la campaa. Esta fase se inici en enero de 2010 y aunque
su finalizacin estaba prevista a finales del mismo
ao, se seguir impulsando durante el ao 2011.
Fase de Anlisis, para conocer, mediante informes y valoraciones de los mandos y unidades,
la efectividad de la campaa. Se obtuvo una
primera valoracin en junio de 2010, y una vi-

sin ms global a finales de ese ao. Para ello se


utilizan como fuentes de informacin los datos
aportados por los informes del plan antidroga de
la FUTER, la memoria anual de drogas, los informes anuales de seguridad, el seguimiento de los
partes extraordinarios y los informes especficos
de la campaa.
PROCEDIMIENTO
Durante la fase inicial de la campaa se
estableci una matriz de actuacin para la
fase de concienciacin en la que se marcaba,
para cada conducta, la audiencia objetivo,
los mensajes e ideas fuerzas a difundir y los
soportes sobre los que se materializaran los
anteriores. Como resultado se obtuvo respuesta a las preguntas bsicas de: sobre quin?,
qu?, cmo? y cundo?, que dieron origen
a la ejecucin, por cada uno de los mandos
directamente subordinados a FUTER, de su
correspondiente plan.
Para materializar esa matriz de actuacin se
establecieron cinco vas simultneas y complementarias para conseguir los objetivos previstos:
Va formativa cuya finalidad es impulsar, desde dentro y fuera de la organizacin, el conocimiento, la concienciacin y consecucin de una
actitud positiva antes estos problemas. Para su

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201165

Preparacin de la Fuerza

materializacin se aplican varios procedimientos


entre los que destacan las conferencias peridicas, el impulso a los cursos de mediadores en el
seno de las unidades y la realizacin de programas de desarrollo personal.
Va divulgativa para, de forma audiovisual,
captar la atencin de la audiencia y emitir ideas
y mensajes que refuercen conductas positivas y a
la vez generen actitudes de rechazo ante aquello
que trata de combatirse. En este va se pretende
hacer que la audiencia objetivo no solo sea el
sujeto pasivo de la misma, sino que se involucre
en su creacin y desarrollo, intentando que las
ideas brillantes surjan desde dentro y no de
un observador externo sin un conocimiento ni
vivencias personales del problema.
Las actividades que se llevan a cabo son:
Concurso de carteles, con exposicin de los
trabajos, publicacin y reconocimiento del
ganador o ganadores.
Distribucin de los mismos para que puedan
contemplarse en todas las zonas comunes
de las bases o acuartelamientos, teniendo en
cuenta la idea de no saturar los sentidos ya que
puede producir un efecto contrario al deseado.
Distribucin de ideas fuerza sobre soportes
tiles para los usuarios (pegatinas, marcadores
de libros, etc).

66

Distribucin de trpticos preventivos (militar


ejemplar, vida saludable, etc).
Amplio uso de los medios audiovisuales de
las unidades tales como circuitos cerrados de
televisin, rtulos luminosos, megafona de las
bases, etc.
Divulgacin de la campaa a travs de
publicaciones militares al alcance de todos los
componentes de las FAS tanto en formato papel
en las OFAP como en formato electrnico a
travs de la INTRANET.
Va de recompensa para mantener y elevar la
motivacin del personal, reconociendo y valorando la labor diaria de los subordinados y as
elevar la moral y aumentar su confianza en los
mandos, reforzando las acciones de liderazgo
al ver reconocida pblicamente su labor diaria.
Para conseguir estos fines anteriores, de forma
mensual, se nombra el soldado ejemplar del
mes. En un acto pblico se reconoce la labor
del personal de tropa mediante la entrega de esta
recompensa y exposicin en un cuadro de honor
en la unidad durante todo el mes. Para finalizar,
se otorga a ese soldado alguna prerrogativa extra
como premio a su ejemplar comportamiento.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Va de control para, por un lado, disuadir a los


potenciales infractores y, por otro, conocer cmo
y quines estn implicados en las conductas
que se trata de evitar. Al igual que en la va de
recompensa se empleaba el incentivo positivo
aqu se puede hacer uso del negativo. Controles frecuentes y aleatorios, empleo de medios
auxiliares de deteccin, contacto con fuerzas y
cuerpos de seguridad y relaciones fluidas con
rganos jurisdiccionales son fundamentales para
materializar esta va.
Va de colaboracin: como se ha comentado
anteriormente, estos problemas son propios de
la sociedad actual por lo que actuar al margen o
aislados de la misma no ayudar a su prevencin
y erradicacin. Con la colaboracin con las distintas asociaciones pblicas y privadas, locales,
autonmicas y nacionales, se aprovechan sus
experiencias y capacidades y se coordinan las
distintas campaas, para provocar una sinergia
de acciones. Tenemos que pensar que las causas
de estos problemas dependen de muy diversos

factores por lo que requieren una aproximacin


desde todos los puntos de su espectro.
RESULTADOS Y FUTURO
Lo que se persigue con estas actuaciones,
complementarias y simultneas entre s es, en
definitiva, concienciar a todo nuestro personal de
que sus actos transcienden de su propio entorno
personal o afectivo y pueden afectar a la imagen
del Ejrcito ante la sociedad, desde el momento
en que en su currculo aparece la condicin de
militar, y al mismo tiempo potenciar la salud,
la motivacin y el prestigio de sus miembros y
reducir las vulnerabilidades.
Los primeros datos son esperanzadores, en
ellos se observa una ligera tendencia de mejora
y por lo tanto una suave disminucin de las
conductas objeto de la campaa. Queda mucho
por recorrer, pero sin duda estamos en el camino
adecuado, que necesitar de la perseverancia y
del esfuerzo de todos para lograr nuestro objetivo. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201167

NUEVOS RETOS PARA LA

INTELIGENCIA.
PREPARACIN PARA OPERACIONES
Emilio Tom Delgado. Teniente Coronel. Artillera.

Nivel Operacional y Tctico

La preparacin y concienciacin de todo el personal


para operaciones de contrainsurgencia se basa en la
aplicacin de la normativa de seguridad, el conocimiento
de la cultura local, y la concienciacin informativa.
La preparacin de los rganos de inteligencia les
capacitar para desempear las funciones especficas
de inteligencia, contrainteligencia y seguridad. En
COIN el xito se consigue ganando el favor de la
poblacin, no basta con batir al enemigo.

a funcin de combate inteligencia ha debido evolucionar profundamente a fin de


adaptarse a las nuevas necesidades que el
combate moderno exige. Los cambios afectan de
forma significativa a los materiales, organizacin,
procedimientos y, por supuesto, preparacin del
personal no solo dirigida a su especializacin sino tambin a su mentalizacin y concienciacin.
En los escenarios tradicionales, y que no
deben caer en el olvido, las fuerzas opositoras
tienen organizaciones similares a las propias y
el enemigo denominado convencional emplea
tcticas parcialmente conocidas y previamente
estudiadas sobre las cuales se disean los documentos bsicos de inteligencia, de integracin
terreno/enemigo/ambiente (INTE), programas de
obtencin, que sustentarn las valoraciones e
hiptesis de actuacin del enemigo.
En los nuevos escenarios asimtricos la fuerza
opositora, al contrario que en conflictos convencionales, no se basa en la sofisticacin de su
armamento sino en medios muy bsicos, en el
empleo de tcticas, tcnicas y procedimientos
(TTP) que evolucionan en funcin del armamento, medios y TTP empleados por nuestras propias
unidades (buscando sorprender y causar el mximo nmero de bajas), y en estudiadas campaas
INFOOPS que desinforman a la propia poblacin
y adoctrinan a sus seguidores. El enemigo, en
este caso, es conocedor del impacto que produ-

cen en la sociedad y en la poltica de los pases


origen de las fuerzas internacionales, tanto las
bajas como las campaas desarrolladas por los
medios de comunicacin social.
Los escenarios actuales en los que nuestras
fuerzas estn involucradas, ya sea como componentes de contingentes de Naciones Unidas,
Unin Europea u OTAN, presentan un escenario
donde diversos actores intervienen con propsitos y objetivos muy dispares que obligan a
un conocimiento profundo de los antecedentes
histricos del conflicto, as como al entendimiento cultural del teatro donde se desarrollan. Por
supuesto en ese entendimiento cultural hay que
incluir las particularidades religiosas que influyen
de manera directa en el planeamiento y ejecucin de las operaciones y fundamentalmente en
el comportamiento de la amenaza.
La nueva doctrina de contrainsurgencia impulsa, cada vez ms, el empleo de nuestras unidades
en estrecho y constante contacto con las fuerzas
de seguridad, policiales y militares, del pas anfitrin. Esto es lo que se conoce como partnering.
Su aplicacin obliga a compartir la inteligencia
y el conocimiento del ambiente, exige una responsabilidad recproca para el planeamiento,
preparacin, ejecucin y extraccin de valoraciones despus de la misin (lecciones identificadas/lecciones aprendidas). Las relaciones,
fundamentales en la obtencin e intercambio

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201169

Preparacin de la Fuerza

UAV SIVA, (Sistema integrado de vigilancia area)

de informacin, deben basarse en la confianza


y esta solo se puede conseguir compartiendo el
riesgo y la responsabilidad, mientras se sufren
situaciones que exigen la mxima implicacin
de todos los participantes en las operaciones que
han de actuar como uno solo.
Si pretendemos profundizar en el conocimiento de la mentalidad, la cultura y las costumbres
de una zona de operaciones, no debemos olvidar que el nico experto en estos aspectos es su
poblacin local. Ellos conocen el terreno, saben
cmo lucha el enemigo y es ms, saben cmo
piensa. Nunca conseguiremos tener ese nivel de
conocimiento sin su apoyo.
En contrainsurgencia el xito se consigue ganando el favor y reconocimiento de la poblacin,
no solo batiendo al enemigo. Cada baja civil que
causemos minar nuestra credibilidad y estimular un sentimiento de rechazo del pueblo que
clamar por nuestra salida del pas. Cada baja insurgente tendr un hermano, un hijo, un sobrino
a los cuales su cdigo de conducta, su tradicin
y su pueblo les exigirn venganza. Las relaciones
que establezcamos sern nuestra mejor arma y
nos proporcionarn, junto con la preparacin
adecuada, la proteccin y seguridad necesarias
para las fuerzas.
Pero no olvidemos que los grupos insurgentes
existen y debemos estar totalmente preparados
70

para contrarrestar sus ataques y anticiparnos a


sus acciones hostiles. El transvase de informacin desde zona de operaciones ha de ser gil a
fin de transmitir a las unidades en preparacin
todo aquello que deban conocer antes de su
despliegue.
La preparacin llevada a cabo en territorio
nacional en relacin con la funcin de combate
inteligencia busca dos objetivos fundamentales: la preparacin y concienciacin de todo el
personal que pueda ser desplegado en zona de
operaciones, y la preparacin del personal de
rganos de inteligencia y que emplee mtodos de
obtencin (IMINT y HUMINT fundamentalmente). Esta labor se inicia en el plan de instruccin y
adiestramiento de las unidades sin que debamos
esperar a la generacin de un contingente.
Para cumplir el primero de los objetivos se
pretende concienciar a los contingentes en tres
puntos fundamentales:
SEGURIDAD
Seguridad en la generacin de fuerzas, evitando
seleccionar personal cuyos antecedentes no
sean los idneos para desarrollar cometidos en
ambientes muy demandantes.
Seguridad de la informacin, fundamental
para salvaguardar la proteccin y seguridad
de la fuerza. No solo se dirige a la proteccin
de materias clasificadas, sino que se extiende

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

a toda aquella informacin sensible, desde


grabacin y captura de imgenes tomadas
en operaciones hasta comentarios sobre
datos concretos relativos a operaciones,
traslados, movimientos, etc realizados en
lugares no apropiados o por mtodos de
enlace interpersonal como telefona, correo
electrnico, internet (foros, chats)
Otros tipos de seguridad entre los que la
seguridad fsica adquiere mayor importancia
a medida que se ocupan ms y mejores
instalaciones en zona de operaciones (bases
de apoyo avanzado: FSB; bases de operaciones
avanzadas: FOB; bases de apoyo provincial:
PSB; posiciones avanzadas de combate:
COP)
CONOCIMIENTO de la cultura y costumbres,
aspecto estudiado no solo de forma general
sino de aspectos detallados como:
Pautas de comportamiento respetuosas. El
conocimiento del comportamiento adecuado
con gentes de diferentes razas, culturas y
religiones, analizando hasta qu punto son de
aplicacin dichas normas con los diferentes
interlocutores locales con los que se contacta.
Concretamente, no se respetan las normas
religiosas y sociales igual en una entrevista
con lderes locales (gubernamentales o
religiosos) que con el personal del ejrcito o

la polica con el que se realizan operaciones


(patrullas, CP, reconocimientos) o al que se
est mentorizando/monitorizando, bien por
el nivel cultural, o la frecuencia y confianza en
el trato. Su comportamiento no ser el mismo
en privado que en pblico por la necesidad de
ser ejemplo o por miedo a posibles represalias.
Conocimiento de todas las estructuras
de gobierno ahondando en las de menor
nivel. Estas, en muchas ocasiones, estn al
margen de las estructuras establecidas, pero
son masivamente aceptadas socialmente y
profundamente respetadas por su enraizamiento
tribal y tnico. Sern con las que se relacionen
nuestros escalones inferiores de mando.
Conocimiento de expresiones bsicas en lengua
local, que se agradecen y predisponen a la
poblacin local a la aceptacin y acercamiento
a nuestras fuerzas.
CONCIENCIACIN de la necesidad de que
todos y cada uno de los componentes de un
contingente acten como sensor de informacin:
captando permanentemente el ambiente que le
rodea, observando lo que sucede y lo que no
sucede e informando de todo ello para que los
rganos de inteligencia dispongan del mayor
numero de datos y evidencias en las que basarse
para hacer las valoraciones necesarias en apoyo
al planeamiento y ejecucin de las operaciones.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

71

Preparacin de la Fuerza

Para cumplir el segundo de los objetivos


la preparacin de rganos de inteligencia se
imparten ciclos de conferencias de inteligencia, contrainteligencia y seguridad en los que
se tratan aspectos especficos de inteligencia de
la operacin a nivel estratgico, operacional y
tctico, estructuras de inteligencia, seguridad en
operaciones, capacidades y procedimientos de
los medios de obtencin disponibles en zona
de operaciones (inteligencia obtenida por fuentes humanas-HUMINT, Inteligencia obtenida de
Imgenes-IMINT) y otros.
Se recaba el apoyo de los expertos en cada
una de las disciplinas, involucrando de forma
fundamental al personal que haya cubierto los
puestos de inteligencia en la misma operacin
a fin de trasladar al contingente en preparacin
la valoracin, el anlisis directo y reciente de la
situacin, las lecciones identificadas/aprendidas

y fundamentalmente la experiencia adquirida.


Los componentes de los diferentes rganos de
inteligencia y equipos ligados a aspectos de seguridad contenidos en la estructura del contingente
desarrollan unas jornadas de actualizacin para
obtener una preparacin en detalle del puesto
que han de cubrir que les permitan perfeccionar
su preparacin hasta el momento del despliegue.
Para estos rganos nada de lo anterior ser
til si no se les proporciona en tiempo oportuno informacin de la situacin en operaciones
para mantener un conocimiento actualizado
de la amenaza. La evolucin de sus TTP o los
fugaces cambios polticos en el propio pas
donde se desarrolla la operacin o en aquellos
con influencia directa sobre l, pueden provocar un impacto importante en el desarrollo
de la operacin y consecuentemente en su
preparacin.

RQ-11 Raven small UAS (UAV)

72

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Su conocimiento y la adopcin, caso de ser


necesario, de medidas dirigidas a reconducir la
preparacin, proporcionarn mayor seguridad
a la fuerza, minimizando los riesgos en los momentos iniciales y ms crticos de la misin.
Por tanto, adquiere mxima importancia durante la preparacin el establecimiento de un
flujo de informacin permanente en el que se
difundan todos los productos de inteligencia,
informes y documentos que permitan a la fuerza
tener el conocimiento actualizado de la situacin
antes mencionado.
La evaluacin, certificacin y validacin de
los contingentes incluye la de la funcin de combate inteligencia, dirigida fundamentalmente al
personal con misiones especficas en este mbito,
pero sin olvidar al resto de componentes del contingente en determinados aspectos. Estos sern
los relacionados con aspectos de seguridad, cul-

tura/costumbres locales y conciencia informativa,


inherentes a la formacin individual de todos los
miembros del contingente.
Este proceso pretende, de forma sencilla y
directa, comprobar que los puntos establecidos
para la correcta preparacin de estos rganos se
han cumplido de forma adecuada, identificando aquellos errores o carencias que deban ser
corregidos en la preparacin de contingentes
futuros.
Terminada la preparacin solo queda la ejecucin correcta de la misin. Los rganos de
inteligencia se enfrentarn a una amenaza que
deben dominar. El correcto y gil manejo del
ciclo de inteligencia, as como la dedicacin y
el esfuerzo les permitirn aportar las valoraciones
que faciliten al mando adoptar las decisiones
necesarias para el cumplimiento de la misin en
las mejores condiciones de seguridad. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201173

LA GENERACIN DE LOS

MEDIOS DE MANDO Y CONTROL


PARA ZONA DE OPERACIONES
Pedro Corts Ruiz. Comandante. Transmisiones.

Nivel Operacional y Tctico

Visin general de los medios CIS empleados en zona


de operaciones, as como de la instruccin tcnica y
tctica del personal all proyectado. Su preparacin se
centra en jornadas de actualizacin de los equipos CIS
que no sean de dotacin en las unidades de procedencia,
ejercicios en que se ponen en prctica los procedimientos
para adaptar la utilizacin de los equipos a las distintas
peculiaridades de cada zona de despliegue, as como a
las tcnicas, tcticas y procedimientos utilizados en las
mismas.
MEDIOS CIS EN ZO
El Lbano
El sistema de telecomunicaciones montado
en la operacin L/H est basado en la red bsica
de rea (RBA), para los enlaces intrateatro, y
en los terminales satlite para los enlaces con
territorio nacional. Por su parte, la red radio de
combate (RRC) proporciona el enlace tctico al
personal y vehculos que se encuentran fuera de
los destacamentos.
Las posibilidades de los terminales satlite
tcticos de alta y media capacidad, de dotacin
en las unidades, han aumentado gracias a los
terminales satlites semiestticos, de nueva adquisicin, que aportan mayor fiabilidad y una
capacidad similar a la que disponen las BAE en
territorio nacional, para materializar la conectividad a las redes de mando y control, de propsito
general, as como favorecer la moral y bienestar.
Asimismo, la puesta en funcionamiento de las
emisoras VHF de ltima generacin ha permitido
un uso ms eficiente de la capacidad de ancho
de banda de la red radio de combate, haciendo
posible la transmisin simultnea de voz y datos
a travs de un nico canal radio.
Por otro lado, la instalacin de la red segura de datos de sostenimiento ha contribuido a
aumentar la seguridad de la informacin al disponerse de un sistema desplegable dotado de
la seguridad apropiada para la transmisin de
informacin clasificada, que incluye archivos de
todo tipo (voz, datos y video).

Afganistn
El enlace intrateatro de la operacin R/A
est basado en los terminales satlite, debido a
las grandes distancias entre las distintas bases,
as como a lo accidentado del terreno, todo lo
cual imposibilita el empleo tanto de radioenlaces
como de radio VHF para el enlace a distancias
medias.
Al igual que en el Lbano, el enlace con territorio nacional se basa en los terminales satlite
semiestticos. Asimismo, la red radio de combate
cuenta actualmente con emisoras VHF del ms
avanzado nivel tecnolgico.
Es de destacar el salto cualitativo en materia
de enlace que ha supuesto la puesta en funcionamiento de terminales satlite en movimiento
(SOTM), que proporcionan a los usuarios servicios de voz y datos de gran ancho de banda, a
travs de todo tipo de soportes (satlite, radio
HF, VHF y UHF) tanto en situaciones estticas
como en movimiento. Asimismo, se dispone
de estaciones cuyo empleo tctico principal es
actuar de vehculo de mando de jefe de unidad
dependiente/independiente, que cuenta con
todo tipo de soportes de transmisin a fin de
proporcionar la necesaria redundancia que garantice el enlace.
Ambas estaciones contribuyen a potenciar dos
aspectos claves en la operatividad de las unidades: el mantenimiento del enlace en movimiento,
y el aumento de la capacidad de mando y control
de las unidades tipo batalln e inferiores.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201175

Preparacin de la Fuerza

FORMACIN DEL PERSONAL DE LAS


UNIDADES DE TRANSMISIONES
La gran variedad de material CIS que se maneja en zona de operaciones, exige una detallada instruccin del personal encargado de su
operacin. El planeamiento al ms alto nivel de
dicha instruccin se realiza en el Cuartel General
de la Fuerza Terrestre, constituyendo la primera
prioridad en los objetivos de adiestramiento del
PIAFUTER.
De acuerdo con la orden de relevo emitida
para cada contingente, la instruccin se lleva
a cabo durante el periodo de adiestramiento
operativo, dentro del cual se incluye el periodo
de adiestramiento especfico (PAE) y el periodo
de adiestramiento final (PAF), con una duracin
total de seis meses.
Durante el PAE, la instruccin CIS se lleva a
cabo en su mayor parte por la Unidad de Transmisiones de la unidad base generadora. El resto
de la instruccin es completado por distintas unidades de la Fuerzas Armadas tanto de la Fuerza
Terrestre como fuera de ella.
Las Jornadas de Actualizacin (JJAA) CIS organizadas por el Cuartel General de la Fuerza
Terrestre (CGFT), cuando es designado Mando Coordinador de la Generacin, son las
siguientes:
76

A cargo de EMAD: SIJE/ VTC/cifradores.


A cargo de CCEA: Administrador de Lotus
Domino.
A cargo de BRITRANS:
Operador de Soria.
Operador de Guepardo.
TSAT de cobertura global.
Estaciones Extremadura y Canarias.
A cargo de JCISAT/RT-22:
Central Telefnica BP-250/MD-110.
Celador de lneas/fibra ptica y electrnica de red.
Administrador de SIMACET.
Mantenimiento de cabinas telefnicas y
satlite.
Operador de terminal satlite semiesttico.
A cargo de JCISAT/RT-22/CECOM:
Administrador Windows 2003.
Administrador MESINCET.
Operador SICOMEDE.
Operador de WISE.
Durante el periodo de adiestramiento final,
correspondiente a los ltimos dos meses, se realiza la fase de concentracin, normalmente en
la base de la unidad generadora, llevndose a
cabo un ejercicio de integracin en el que se
comprueba la adecuacin de la instruccin CIS
recibida a las misiones que se han de realizar en
zona de operaciones.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Dentro del proceso de preparacin, se estn


llevando a cabo diversos ejercicios de transmisiones con un enfoque operativo y en beneficio de
las unidades no de transmisiones participantes.
En este sentido, el objetivo fundamental ha sido
mantener la capacidad de mando y control ante
diversas incidencias similares a las experimentadas por nuestras fuerzas en ZO, empleando los
medios CIS con la mxima eficacia gracias al
conocimiento de sus capacidades y del empleo
de las tcticas, tcnicas y procedimientos adecuados a cada situacin. Los diversos informes
al respecto corroboran el acierto de esta nueva
orientacin de las tradicionales EPCIS, por lo que
se continuar su desarrollo con carcter anual.
CONCLUSIONES
Las misiones en zona de operaciones constituyen un importante reto para los sistemas de telecomunicaciones e informacin, para conseguir
la superioridad de nuestras fuerzas en lo referente
a aumento de las capacidades operativas de informacin y proteccin de las mismas.
Dichas misiones han supuesto un gran esfuerzo de adaptacin del personal de las unidades
de Transmisiones debido a:
Manejo de nuevos materiales CIS, que no son
de dotacin en las unidades tcticas.
Necesidad de redaccin de nuevos procedimientos
de empleo para dichos materiales.
Adaptacin de la orgnica de las unidades
proyectadas, con respecto a las existentes en
territorio nacional.

Por otra parte, es de resaltar la puesta en funcionamiento de nuevos sistemas CIS, todos ellos
dirigidos a aumentar las capacidades operativas
de las unidades.
Por ltimo, se ha constatado que aun teniendo
los medios CIS ms modernos, el enlace no est
garantizado. Existen imponderables en la vida
real que nicamente pueden soslayarse con una
esmerada instruccin sobre transmisiones del
combatiente, fruto de un conocimiento exhaustivo de los medios disponibles, as como de los
procedimientos que emplear en cada situacin
especfica.
Actualmente, puede afirmarse que el nivel de
operatividad alcanzado por las unidades en el
empleo de los medios CIS es muy alto, lo cual
es, sin duda, fruto de la esmerada instruccin
recibida en TN. No obstante, es necesario tener
en cuenta que la puesta al da de los conocimientos tcnicos debe ser continua, dado el
ritmo de avance e innovacin de los medios
CIS. Asimismo la formacin en el empleo tctico
de dichos medios adquiere una importancia de
primer orden, siendo la conjuncin de ambos aspectos tctico y tcnico la que proporciona
la sinergia necesaria para apoyar al mando en la
funcin especfica que lo distingue a todos los
niveles: el mando y control. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201177

LA

GUERRA ELECTRNICA (EW)


EN LAS
OPERACIONES DE PROYECCIN
Jos Manuel Fernndez Garca. Coronel. Transmisiones. DEM.

Nivel Operacional y Tctico

La EW es un medio fundamental para obtener


informacin y proteger a nuestras fuerzas. La
interoperabilidad y comunidad de doctrina y
procedimientos entre las unidades participantes en
operaciones han de ser consideradas a la hora de
disear y explotar unos medios que, adems, cuenten
con una modularidad que los hagan aptos para
su empleo en cualquier tipo de escenario y con la
oportunidad requerida.

uiz la mejor manera de comenzar un


artculo sobre una materia desconocida,
como es el caso de la guerra electrnica
(EW), sea con una sencilla definicin: accin
militar que explota la energa electromagntica
para proporcionar conocimiento de la situacin
y conseguir efectos ofensivos y defensivos. Partiendo de esta definicin, podemos decir que los
principales conceptos (pero no los nicos) dentro
de las operaciones electromagnticas (EMO) son:
ataque electrnico (EA), reconocimiento electrnico (ES), defensa electrnica (ED), comunicaciones, navegacin y tratamiento de imgenes.
El uso de estas capacidades a lo largo de todo
el campo de batalla nos proporciona la sinergia
necesaria para desorganizar, denegar, engaar,
detectar, destruir y degradar las fuerzas enemigas
y su estructura de mando y control.
El uso del espacio electromagntico (EME)
por cualquier adversario siempre debe ser considerado como una amenaza que puede afectar
al personal, las instalaciones, los equipos, el
armamento y los sistemas de mando y control.
El uso propio de las tecnologas que utilizan
energa electromagntica para reconocimiento,
bsqueda, localizacin, seguimiento y gua es
vulnerable a las tcticas de EW del enemigo, y se
acusa todava ms en los conflictos contra fuerzas irregulares, no apoyadas por ningn gobierno, y que constituyen una amenaza asimtrica.
La ltima dcada ha mostrado un incremento
exponencial en el uso del espectro electromag-

ntico (EMS) dentro de los diversos conflictos.


Para las fuerzas aliadas, la dependencia del EMS
para ejecutar operaciones se ha incrementado
paralelamente al desarrollo de las tecnologas
comerciales. Cualquier individuo, incluyendo
potenciales adversarios, puede adquirir hoy en
da equipos de ltima generacin a bajo coste y
hacer un uso hostil de ellos.
El EME debe ser considerado un dominio fsico real dentro del combate, y as se hace en
diversas publicaciones OTAN. Su xito en las
operaciones militares reside en el empleo ms
eficaz posible de dicho dominio, a la vez que se
explota, impide o reduce su uso por el adversario; sin embargo las capacidades son un recurso
escaso, y es necesario priorizar su empleo y
distribucin. Para el cumplimiento de este cometido se precisan capacidades de interceptacin
y localizacin sobre una diversidad de sistemas,
particularmente de telecomunicaciones de tipo
civil, utilizados mayoritariamente por las posibles
amenazas a la fuerza.
Si consideramos la multitud de instalaciones
permanentes que las fuerzas aliadas emplean en
las diversas ZO, para la proteccin de bases pueden ser muy tiles las estaciones fijas de EW, de
tipo esttico o integradas en las instalaciones, con
antenas de alta sensibilidad y con capacidades
de interceptacin, identificacin, localizacin y
perturbacin, al menos sobre sistemas de telefona
mvil, tanto terrestre como satlite, y sistemas de
radio porttiles en bandas civiles y militares.

REVISTAEJRCITON.842EXTRAORDINARIOMAYO2011

79

Preparacin de la Fuerza

Adicionalmente, la estacin debe contar con


una capacidad de evaluacin de EW mnima y
si fuera posible disponer de los servicios de los
intrpretes de la base, bien en tiempo compartido
con otras de sus actividades o, lo ideal, de forma
fija y exclusiva para estas actividades.
Por su propia naturaleza, la proteccin perimtrica es esttica. Esto hace innecesarios e
ineficientes para este cometido los medios mviles con los que cuentan nuestras unidades de
EW. Por otra parte, un sistema esttico permite el
empleo de receptores y antenas de mayor sensibilidad y el empleo de plataformas tipo shelter,
de menor coste y mayor modularidad que una
estacin vehicular.
Una nueva necesidad de las operaciones actuales es la proteccin de unidades en movimiento. Esta misin requiere plataformas de EW con
capacidades contra las amenazas a dichas unidades y de integrarse y maniobrar con la unidad
a la que proporcionan apoyo. Las capacidades
requeridas para este cometido son exploracin,
identificacin y perturbacin en movimiento de
seales muy diversas, con tiempos de respuesta
muy cortos y empleo de plataformas dotadas de
proteccin suficiente contra sistemas de armas.
Debido a su funcin secundaria de medio
de obtencin de Inteligencia y por la posible
80

necesidad de apoyo de anlisis externo desde


territorio nacional o desde otros elementos de la
fuerza desplegados en ZO, la estacin debe contar con un enlace seguro de datos de capacidad
suficiente para enviar y recibir bases de datos,
grabaciones de seales y paramtrica.
Para la proteccin de unidades en movimiento, al no existir posibilidad de mejora de las estaciones o medios de nuestras unidades de EW,
sera preciso el desarrollo o la adquisicin de
nuevos medios de EW adaptados a esta misin.
Dado lo prolongado de la ejecucin de un
programa de desarrollo, con el desfase tecnolgico que esto conlleva y la rapidez de los cambios en los escenarios actuales, la solucin ms
recomendable es la adquisicin llave en mano
de un sistema anlogo a los empleados en las
naciones de nuestro entorno.
Existen en este aspecto diversas soluciones,
con diferentes caractersticas y capacidades,
comercializadas por empresas del sector y en
muchos casos ya probadas en operaciones. La
adopcin de una de estas soluciones requiere de un estudio ms detallado de los sistemas
disponibles, las necesidades especficas y las
limitaciones existentes.
Dentro de este marco, procede ahora analizar hacia dnde debe dirigirse la EW tctica

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

en un futuro inmediato, teniendo en cuenta


los continuos cambios que estn sufriendo los
diferentes escenarios en los que puede ser empleada. Basndonos en los estudios realizados
por el REW 31, se exponen a continuacin las
conclusiones de los cinco aspectos considerados principales.
CONCEPTOS
En el apartado conceptual, la evolucin de
los distintos escenarios en los que el Ejrcito de
Tierra tiene que actuar exige definir nuevamente
las misiones, as como las tcnicas, tcticas y
procedimientos de las unidades de EW.
Para empezar, la EW debera clasificarse siguiendo dos criterios bsicamente:
En funcin de la misin: EW prxima, con
misiones de acompaamiento a pequeas
unidades y proteccin de convoyes; EW
de rea, con misiones de control de rea y
proteccin de BAE.
En funcin de la plataforma: EW pesada,
sobre medios mecanizados; EW media, sobre
vehculos protegidos o camiones; EW ligera,
sobre vehculos ligeros, sin preparar o a pie.
Una vez establecidas las misiones que asignar a las unidades de EW, es necesario definir las capacidades que han de tener y, en funcin de ellas, dotar a aquellas de los materiales
adecuados.

CAPACIDADES
Estas nuevas capacidades con las que han de
contar las unidades de EW que desplieguen en
los distintos escenarios, van a condicionar los
equipos que empleen, as como las plataformas
sobre las que han de instalarse para su transporte
y/o movimientos.
En telecomunicaciones, es necesario dirigir
los esfuerzos a la ampliacin de la banda de
trabajo a frecuencias ms altas, para poder
enfrentarse a nuevas tecnologas de telecomunicaciones como WIMAX (worldwide interoperability for microwave access: norma de
transmisin de datos usando ondas de radio);
asimismo, la telefona mvil y los terminales
satlites deben constituir objetivos permanentes y prioritarios, para lo que se han de alcanzar las capacidades adecuadas para hacerles
frente.
Por otra parte, dadas las caractersticas de
la gran mayora de las emisiones actuales, comunicaciones cifradas en salto de frecuencia, las medidas de EW han de ir enfocadas
a la perturbacin, ms que a la decepcin o
neutralizacin.
En no telecomunicaciones, es necesario ampliar la banda de trabajo hasta los 40 GHz para
poder hacer frente a radares de onda continua,
de baja probabilidad de interceptacin o a los
dispositivos IFF de las aeronaves.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

81

Preparacin de la Fuerza

Segn la clasificacin anteriormente expuesta de EW prxima y EW de rea, se considera


necesario dotar a cada uno de
estos dos tipos, de las siguientes
capacidades:
EW prxima:
ES y EA en comunicaciones,
principalmente en las bandas
VHF y UHF.
Capacidad de poder ejecutar
sus misiones en movimiento.
Configuracin manpack.
EW de rea:
ES y EA, tanto en telecomunicaciones (toda la banda), como en no telecomunicaciones.
Capacidad para ejecutar sus
misiones en movimiento.
Su capacidad mejora notablemente cuando no estn
en movimiento por disponer
de equipos de mejores prestaciones (mayor ganancia y
precisin).
Asimismo, como parte de los
medios de obtencin con los que
puede contar la GU o mando desplegado en zona de operaciones,
la definicin del papel que desempean las unidades de EW, as
como su integracin con los elementos de obtencin, debe quedar perfectamente definida; este
aspecto puede repercutir en los
medios de EW y en las capacidades que deben adquirir.

PLATAFORMAS
Las plataformas sobre las que
se instalen los equipos de EW van
a condicionar en gran medida las
posibilidades de las unidades en
el cumplimiento de la misin. La
naturaleza del conflicto, el tipo de
despliegue y la evolucin de la situacin hacen necesario disponer
de plataformas con un alto grado
de independencia, movilidad y
sencillez.
82

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Cada estacin de EW ha de ir sobre una nica


plataforma, con un grupo electrgeno instalado
en ella, y con capacidad de integrar sus propias
telecomunicaciones sin tener que depender del
apoyo o despliegue de otras estaciones que se
las proporcionen; estas telecomunicaciones deberan basarse en terminales satlite y WIMAX.
Por otra parte, sera deseable que los equipos
instalados fueran modulares, fcilmente extrables, y que permitieran el montaje y desmontaje
de la estacin en unos plazos de tiempo operativos, especialmente en las estaciones con misin
de EW prxima.
Otro aspecto que tener en cuenta es la necesidad, en la medida de lo posible, de disimular el
aspecto exterior de la plataforma, especialmente
las antenas.
Por ltimo hay que apuntar que la mejor forma de incrementar el rea de cobertura, la precisin en las localizaciones y la capacidad de
interceptacin sera con el empleo de UAV. Con
esto no se pretende dotar de UAV a las unidades
de EW, sino proponer la disponibilidad de esta
capacidad en el ET, con unidades que tengan experiencia en materia de navegacin area y mantenimiento de este tipo de aeronaves. Estos UAV
deberan tener la capacidad de llevar diferentes
cargas, entre las que existira una especfica de
EW. As en territorio nacional se podran asignar
horas de vuelo anuales a las unidades de EW,
mientras que en ZO se regira por las prioridades
marcadas por el jefe de la misin.
UNIDADES
En la definicin de las unidades de EW del
futuro, y dado que parece evidente que cada vez
ser mayor su implicacin y su participacin en
operaciones, es necesario dotarlas de todas las
capacidades mencionadas con anterioridad; han
de ser unidades de fcil y rpida proyeccin y
despliegue, acordes, en cuanto a movilidad, a las
unidades a las que debern apoyar, y con la suficiente versatilidad para adaptarse a la evolucin
de la situacin y a repentinos cambios de misin.

La modularidad y la sencillez necesarias, ya


expuestas anteriormente, van a facilitar enormemente esta adaptacin a la misin y a la evolucin de la situacin.
PROCEDIMIENTOS
Actualmente, existen ciertas diferencias entre
los procedimientos y la normativa con la que se
trabaja en Espaa y la existente en la OTAN y
en otros pases de nuestro entorno. Este aspecto
puede provocar que, en operaciones multinacionales, se produzcan malos entendidos y que el
rendimiento que se obtenga de las unidades no
sea el adecuado.
Los cambios surgidos en los escenarios en
los que pueden desplegar y en las misiones que
han de ejecutar, junto a la posibilidad de que
en un futuro sea necesario integrar las unidades
de EW en conceptos como NEC (concepto de
informacin en red sancionado especficamente
por JEMAD y difundido en todo el mbito de
Defensa), o que tengan que ser interoperables
con sistemas de otros pases, Armada o Ejrcito
del Aire, hace necesario prever una revisin de
sus procedimientos de trabajo actuales hacia
una mayor estandarizacin y normalizacin en
el mbito OTAN.
Vemos que la EW es, con carcter general, un
tema complejo y multidisciplinar y que, dadas las
particulares caractersticas derivadas de la situacin en cada ZO, puede aumentar esa complejidad. No obstante, se puede afirmar que, gracias a
la experiencia y trabajo de muchos, el problema
est identificado, as como las caractersticas de
los medios para hacerle frente.
Falta finalizar el desarrollo de estos medios y
un aspecto fundamental, que es la formacin del
personal que ha de emplearlos. Lo importante no
es la tcnica, sino los tcnicos; son los hombres y
mujeres que constituyen nuestras Fuerzas Armadas, con sus conocimientos y valores ambos
frutos de su formacin quienes marcarn la
diferencia entre el xito o el fracaso en cualquier
conflicto. n

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83

Nivel Operacional y Tctico

MDULOS DE MATERIAL
PARA INSTRUCCIN Y ADIESTRAMIENTO.
UNA SOLUCIN TRANSITORIA
Ignacio Olazbal Elorz. Teniente Coronel. Caballera. DEM.

En un escenario de dificultades econmicas, se ha adoptado una solucin


transitoria para el adiestramiento y preparacin de las unidades que
componen los contingentes en el exterior con materiales que no se
encuentran en dotacin en territorio nacional, centralizando los medios
disponibles, creando unos mdulos de instruccin y adiestramiento
con esos materiales. Tambin se detalla el sistema de mantenimiento
adoptado para asegurar la debida operatividad de estos mdulos.

o es la primera vez que se menciona en


esta Revista que la naturaleza cambiante de la amenaza a la que se enfrentan
nuestras unidades en las operaciones exteriores
ha hecho que debamos modificar las plantillas
de material que las dotan.
Si unimos a un escenario econmico que no es
el oportuno, alguna vez lo fue?, la perspectiva de
una amenaza que no combate como inicialmente se esperaba y unos nuevos procedimientos y
tcnicas (PTT) que nuestras unidades se ven en la
necesidad de implementar, nos encontramos con el
problema al que nuestro Ejrcito se ha enfrentado:
Debemos modicar urgentemente los materiales con los que combaten nuestras unidades en las operaciones en el exterior, pero los
presupuestos no permiten afrontar las compras
con holgura.
Ante esta cuestin, se decidi priorizar las
compras de forma que las unidades dispusieran
cuanto antes en la zona de operaciones (ZO)
de estos nuevos materiales que incrementaban la proteccin de la fuerza y su potencia de
combate.

Nada ms iniciarse su despliegue, desde este


Mando, se detect que las unidades en ZO encontraban un material del que no disponan en
sus acuartelamientos, por lo que no estaban bien
instruidas en su manejo.
Debido al escenario econmico en el que
nos encontramos, este Mando recibi una cierta
cantidad de material de nueva adquisicin con
la que proceder a la preparacin de los contingentes a desplegar en ZO. El material recibido
no cubre las necesidades de formacin de todos
los contingentes, por lo que en aplicacin del
viejo principio logstico en tiempos de escasez,
centralizar los medios, este Mando ha decidido
crear unos mdulos de instruccin y adiestramiento de material, que rotan entre las unidades
que vayan a desplegar, de forma que se adiestren
en el empleo del material de nueva adquisicin
antes de llegar a zona, aunque no sea de forma
exhaustiva, ya que el nmero de contingentes en
preparacin obliga a que estos reciban los mdulos de adiestramiento solo durante el periodo de
adiestramiento final (PAF), los dos ltimos meses
de su preparacin.

REVISTAEJRCITON.842EXTRAORDINARIOMAYO2011

85

Preparacin de la Fuerza

ORGANIZACIN DE LOS
DIFERENTES MDULOS
A medida que han ido creciendo las necesidades que imponen las operaciones, los mdulos
han ido incrementando su composicin, no tanto
aumentando la disponibilidad sino admitiendo
nuevos materiales en su composicin.
Una vez que las operaciones se han ido concretando en dos escenarios diferentes, se ha optado
por crear dos mdulos diferentes: uno para la preparacin de los contingentes que sern desplegados
en la operacin en el Lbano (L-H) y otro para la
operacin en Afganistn (R/A). Estos materiales
estn a cargo y a disposicin de las diferentes autoridades de coordinacin para el adiestramiento
(ACAD). De esta forma, las ACAD (FUL y FUP)
sern responsables del mantenimiento, control,
gestin y rotacin de los diferentes mdulos.
Estos mdulos, una vez entregados a las unidades base de generacin (brigadas de FUL/FUP)
son gestionados por ellas de forma que, mediante
su rotacin entre los componentes del contingente, son empleados intensivamente durante esos
dos meses que los tendrn a su disposicin.
COMPOSICIN DE LOS MDULOS
DE ADIESTRAMIENTO
Sin entrar en excesivos detalles, la composicin de cada uno de los mdulos de adiestramiento para L-H y R/A es diferente, puesto que
el material desplegado en ellas tambin lo es.
De forma general podemos afirmar que gracias al sistema de mdulos de adiestramiento,
todo el personal antes de ser desplegado conoce
los materiales de nueva adquisicin que encontrar en la ZO.
Inicialmente cada uno de los mdulos cuenta
con material CRC (antidisturbios), miras, regletas
y visores para las diferentes armas individuales o
colectivas, cmaras trmicas CORAL y SOPHIE,
PDA, y medios de transmisiones como la ANPRC 117 o PNR 500.
Mencin aparte merece la gestin de los vehculos (LMV, RG 31 y BMR/VEC) ya que a la
dificultad de su manejo se une la necesidad de
contar con los pertinentes permisos militares de
conduccin, por lo que inicialmente habr que
obtenerlos para continuar despus con el adiestramiento de los conductores, tiradores y resto
de las tripulaciones.
86

Otro caso digno de atencin es el de los aviones no tripulados (UAV RAVEN), ya que a su escasez hay que unir la complejidad de su manejo
y dificultad de mantenimiento.
MDULOS DE ADIESTRAMIENTO DE
VEHCULOS. PROCEDIMIENTO
Como ya se ha mencionado, las unidades
no cuentan como vehculo principal el que
luego utilizarn en ZO, lo que ha obligado
a la Fuerza Terrestre a crear un mdulo de
adiestramiento por cada uno de los vehculos
presentes en ZO y no disponibles en territorio nacional (TN) por las unidades base de
generacin (UBG). Esto no solo afecta a los
vehculos de alta proteccin (MRAP) de nueva
adquisicin como el LMV o el RG 31, ya que
tambin son desplegadas en ZO unidades que
no cuentan con el BMR/VEC como vehculo
principal. Estos mdulos rotan por las UBG
proporcionndoles los vehculos necesarios
durante los dos meses del periodo de adiestramiento final (PAF).

Cmara trmica Coral CR-P

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Nivel Operacional y Tctico

El problema es complejo, porque para poder


instruir a los contingentes es necesario mantener
unos vehculos que no estn en plantilla, y para
los que la unidad no dispone de especialistas,
segundos escalones con las herramientas precisas ni de nivel de utilizacin propio (NUP) de
repuestos autorizado.
Como solucin a esta problemtica y para la
gestin de cada uno de los tres mdulos, la FT
ha creado una serie de unidades piloto que
reciben la responsabilidad de los vehculos del
mdulo.
Esas responsabilidades se concretan en lo
siguiente:
Recibir el material bajo su responsabilidad.
Darle de alta en SIGLE en su unidad.
Controlar el estado de operatividad de los
vehculos.
Gestionar su transporte y enviar el mdulo a la
unidad que se va a adiestrar, justo al comienzo
de su PAF.
Recibir los vehculos de la unidad que se ha
adiestrado e iniciar un periodo de diagnosis.
Organizar un pequeo segundo escaln y
reparar los vehculos.
Coordinar los apoyos mviles de tercer escaln
(EMAN) a recibir por parte de la FLO.

Por lo tanto, el esquema de funcionamiento


en el tiempo de estos mdulos sera el
siguiente:
La UBG recibe el o los mdulos de vehculos
precisos para su adiestramiento justo antes de
iniciar su periodo de adiestramiento final.
Durante estos dos meses, el jefe de cada contingente ser el responsable de la coordinacin
del empleo de estos vehculos para que todos
los miembros del contingente que lo precisen
puedan hacer prcticas con ellos.
Las labores de mantenimiento que se les exigen durante estos dos meses son muy bsicas y
se reducen al mantenimiento orgnico de primer
escaln, puesto que las unidades no cuentan con
segundos escalones capaces de reparar estos
vehculos.
Sin embargo las averas de 2EMAN se producen realmente y las UBG no disponen de la
capacidad de solventarlas, por lo que en este
caso se le conceder a la unidad piloto la responsabilidad de decidir qu hacer con el vehculo
averiado:
Enviar un equipo mvil a la UBG para
repararlo.
Evacuarlo a la unidad piloto con o sin
reemplazo.

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Preparacin de la Fuerza

Una vez finalizado el periodo de adiestramiento


final, las unidades devuelven a las unidades
piloto los vehculos, estn en el estado de
operatividad que estn.
La unidad piloto al recibirlos, inicia lo que
se ha venido a denominar un periodo de
mantenimiento preferente de dos meses de
duracin, en que se pretende que no se utilicen
estos vehculos bajo ningn concepto.
Durante este periodo la unidad piloto los somete a una diagnosis concienzuda e inicia las
reparaciones propias de su nivel de responsabilidad, solicitando el apoyo de las AALOG de
referencia designadas por FLO para cada uno de
los modelos.
Al finalizar el periodo de mantenimiento
preferente, se inicia un nuevo PAF de otra
unidad base de generacin, por lo que la
unidad piloto manda otra vez el mdulo de
adiestramiento y se inicia de nuevo el sistema.
De esta forma se pretende no desatender el
mantenimiento de 2 EMAN de los vehculos.
Sin embargo, desgraciadamente el ritmo de las
operaciones manda y es el que marca los periodos de adiestramiento final de las diferentes
unidades, que por supuesto no coinciden unos
con otros ya que no todos los relevos se efectan
al mismo tiempo.
La asuncin de nuevos compromisos como los
equipos de mentorizacin (OMLT) ha hecho
ms complejo, si cabe, este procedimiento. Estos
pequeos contingentes relevan cada uno de forma independiente y no coinciden en el tiempo,
ni entre s ni con el contingente ASPFOR. Aunque
ltimamente se pretende llegar a efectuar estos
relevos de forma simultnea, lo que facilitar en
mucho la gestin de estos vehculos.

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Estos OMLT estn dotados de los nuevos vehculos MRAP, por lo que debern instruirse con
ellos para preparar a sus conductores, tripulaciones, tiradores y especialistas. Para poder dotarles
durante los dos ltimos meses de su preparacin
del mnimo de un vehculo de cada tipo y no
desatender el mantenimiento, se ha establecido
como condicin imprescindible el paso por la
unidad piloto, es decir, en ningn caso se producir un apoyo lateral desde una unidad en
adiestramiento final a otra que lo inicia sino que
siempre antes de iniciar un apoyo, los vehculos
pasan por un periodo de mantenimiento en la
unidad piloto.
INICIO DEL PROCEDIMIENTO
Antes de iniciar el periodo de adiestramiento operativo, lo primero que deben obtenerse
son los permisos de conducir en la cuanta
que se ha determinado como necesaria para
afrontar con seguridad las condiciones de las
operaciones.
La FT mantiene la capacidad de dotar a sus
unidades de los permisos de conduccin de
BMR/VEC mediante sus escuelas de conductores,
siendo sin embargo el MADOC el responsable
de la formacin inicial de conductores de LMV
y RG 31, realizndolo en las instalaciones de las
que dispone en el GIUACO en el CENAD San
Gregorio, en Zaragoza.
La obtencin de estos permisos est siempre
condicionada por la disponibilidad de vehculos
de estos centros, lo que ha obligado en varias
ocasiones a que la FT apoye con vehculos al
GIUACO, para poder llegar a obtener en tiempo el ratio de conductores necesarios para la
operacin.

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Nivel Operacional y Tctico

MDULO DE BMR
La Brigada espaola en la operacin LH cuenta con el BMR como sistema principal de armas.
Sin embargo, no todas las unidades que generan
los contingentes que servirn en el Lbano cuentan con este sistema como material principal por
lo que, si bien este vehculo est en proceso de
sustitucin, el CGFT se ha visto en la obligacin
de crear un mdulo especfico de BMR.
Este mdulo servir para adiestrar a los conductores y a las tripulaciones, a fin de adaptar las
capacidades obtenidas en sus unidades de origen
a las exigidas en la operacin.
Si bien el mdulo de preparacin habitual de
BMR est compuesto nicamente de BMR M1,
est previsto que si la unidad base de generacin no dispone de vehculos de exploracin
de caballera (VEC) se cree especialmente para
la preparacin de ese contingente un pequeo
mdulo para el adiestramiento del Escuadrn
de Caballera.
Por lo tanto, la unidad base de generacin
recibir al inicio de su periodo de adiestramiento final, el mdulo completo de BMR en estado
operativo, que deber ser dado de alta inmediatamente en SIGLE como material agregado.

Esta UBG lo utilizar para el adiestramiento


de todo el contingente durante el PAF y durante
estos dos meses ser responsable del mantenimiento orgnico de primer escaln y en una
pequea parte del segundo, lo que tambin es
til para refrescar los conocimientos de los especialistas que luego acompaarn a la unidad
en el desempeo de la misin.
La UBG devolver el mdulo una vez finalizado este periodo a la unidad piloto (hasta ahora la
BRIMZ X y en un futuro inmediato la BRC II), que
al recibirlo iniciar un periodo de mantenimiento
preferente y solicitar, si es preciso, un apoyo
mvil a la AALOG 21/AALOG 41, unidades responsable del apoyo de 3 EMAN a este mdulo.
Este proceso debe durar dos meses como
mximo, de forma que cuando se inicie el PAF
del siguiente contingente, todo el mdulo se
encuentre en estado operativo y la unidad piloto
pueda remitirlo a la unidad base de generacin.
MDULO DE LMV
La gestin del mdulo de vehculo LMV LINCE es similar a la descrita para los BMR. Si bien
los principios son los mismos, hay que resaltar
que la disponibilidad de vehculos de este tipo

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Preparacin de la Fuerza

Vehculo blindado RG-31 MK

en la FT es nula, por lo que de disminuir la operatividad del mdulo de instruccin, no existir


posibilidad alguna de apoyo por parte de la FT,
como s suceda en el mdulo de BMR.
Por otra parte, esta misma falta de disponibilidad afecta, como ya se ha comentado, a la necesidad de obtencin de los permisos militares de
conduccin como paso previo al adiestramiento
de la unidad.
Estos exmenes deben hacerse con anterioridad al inicio del PAF, de forma que al iniciarse
este, la UBG disponga ya del ratio establecido
como necesario de conductores por vehculo.
Sin embargo, ante los problemas de operatividad que presentan estos vehculos en el GIUACO
y dado que una unidad sin conductores no puede
adiestrarse, la FT se ha visto obligada a apoyar
reiteradamente este centro con los vehculos del
mdulo de IAE.
En resumen, la UBG recibe al inicio de su PAF
el mdulo operativo procedente de la unidad
piloto de LMV (BRIPAC), dndolo de alta en
SIGLE como agregado. Como ya dispone de los
conductores suficientes obtenidos en el GIUACO, cumplir su PIA durante el PAF y realizar
los ejercicios y evaluaciones necesarios para su
certificacin.
90

Durante estos dos meses realizar solo el


mantenimiento orgnico de primer escaln para
devolver la totalidad de los vehculos al finalizar
su PAF a la unidad piloto que inicia la diagnosis
y puesta en estado de operatividad del mdulo,
contactando en este caso con la ALOG 11 para
el apoyo de 3 EMAN.
En este caso hay que tener en cuenta que
muchos de los LMV se encuentran todava en
garanta, por lo que en este caso se ha autorizado a la BRIPAC al contacto directo con la casa
IVECO, de forma que no es extrao ver a tcnicos
de esta empresa trabajando sobre los vehculos
de este mdulo.
Debe resaltarse otra vez que no todos los vehculos pertenecientes al mdulo sern enviados
a la UBG. La FT se reserva el control de aquellos
que habrn de ser enviados para adiestramiento
de los OMLT. Estos permanecen en el GL de la
unidad piloto en mantenimiento hasta que son
enviados a las UBG de los OMLT que actan de
manera similar a lo ya descrito. Estas UBG devolvern los vehculos directamente a la unidad
piloto y nunca a otra UBG, evitando as apoyos
laterales sin el debido periodo de mantenimiento.
Tambin hay que sealar que, debido a la
urgencia con que han sido desplegados estos

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

vehculos en ZO, no ha habido tiempo material


para disear todas las versiones con las que se
va a contar. Por ello la FT se ve en la obligacin
de proporcionar cada cierto tiempo vehculos
de sus mdulos de IAE a los diferentes parques
o empresas responsables del diseo y montaje
de estas versiones (TACP, EOD, Guepardo, Soria,
Ambulancia, Recovery, Inhibidores Universales,
etc).
En coordinacin con la Divisin de Logstica
del EME y el MALE se intenta que estas pruebas
de montaje se realicen durante los periodos de
mantenimiento de forma que no interfieran en
la preparacin del contingente, aunque siempre
se sometern a esos periodos de mantenimiento
preferente ya descritos.
Dada la importancia de este mdulo, el MALE
y la DIVLOG van a proceder a reforzarlo para
poder incrementar el nivel de preparacin de las
unidades que se vayan a desplegar.

Tambin se encuentran en garanta los vehculos, por lo que la empresa General Dinamics/
Santa Barbara realiza las reparaciones que le
corresponden.
Subsisten tambin los mismos problemas de
diseo de las diferentes versiones, por lo que se
apoya de la misma manera.

MDULO DE RG-31
El proceso es el mismo, tanto para la obtencin de los permisos de conduccin como la
gestin del mdulo. En este caso es el GL de la
BRIMZ X el designado como unidad piloto y ser
el PCMVR N2 de El Higuern en Crdoba el que
se encargue de los apoyos de 3 EMAN.

MDULO DE ADIESTRAMIENTO
DE UAV/RAVEN
En este caso, el proceso de creacin del mdulo ha sido diferente. La dificultad para obtener
los repuestos necesarios ha hecho bajar la operatividad del conjunto de estos sistemas, por lo que
para garantizar la generacin de los sistemas que

ADIESTRAMIENTO DEL MCANA


En el caso del adiestramiento de los contingentes del MCANA que participan en la operacin RA, todo este proceso ha sido planificado
con ms detalle si cabe, ya que a la escasez de
tiempo disponible para el adiestramiento se une
el coste y la duracin de los desplazamientos
entre la Pennsula y las Islas.
Por supuesto se les envan los mdulos al
completo salvo aquellos vehculos que deben ser
reservados en la Pennsula para el adiestramiento
de los OMLT que coinciden en su PAF.

RQ-11 Raven small UAS (UAV)

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

91

Preparacin de la Fuerza

han de viajar con cada contingente que rota en


ZO, la FT se ha visto obligada a redistribuirlos,
centralizndolos en una sola unidad piloto.
Esta unidad ser responsable de:
Generar cada cuatro meses los sistemas
necesarios para dotar al contingente que releva
en ZO.
Recibir, procedentes de ZO, los sistemas que
han operado con el contingente saliente,
someterlos a un periodo de diagnosis,
reparar lo que sea de su incumbencia y
gestionar las reparaciones de 3 EMAN con el
PCMASACOM.
Mantener el resto de sistemas en dotacin en
la FT.
Proporcionar a la UBG los sistemas necesarios
para la preparacin del contingente durante
el periodo de adiestramiento operativo (PAO).

La experiencia en el mantenimiento de estos


aparatos ha llevado a la FT a solicitar la modificacin de la norma tcnica (NT) que regula su
mantenimiento, en el sentido de aumentar la
carga de tareas de primer escaln autorizadas a
realizar por la unidad piloto, ya que la aerodinmica de estos sistemas es muy similar a la que se
encuentra en el aeromodelismo civil, disponiendo nuestras unidades de personal con capacidad
para acometer pequeas reparaciones.
Este sistema, si bien sobrecarga de tareas a la
unidad piloto, permite aumentar de forma cuantitativa los pequeos stocks de piezas de repuesto
que al ser intercambiables entre s incrementan
la operatividad general del sistema.
De la misma manera se aumenta la especializacin del personal dedicado a este sistema lo
que redundar en una mayor capacidad de man-

Vehculos blindados LMV Lince y RG-31 MK desplegados en Afganistn

92

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

tenimiento y simplificar la relacin entre este


primer EMAN y el PCMASACOM como 3 EMAN.
CONCLUSIONES
La creacin de estos mdulos de instruccin
debe tomarse como una respuesta de la FT ante
la escasez de medios provocada por el actual
escenario econmico y la necesidad de adiestrar
a nuestros contingentes en el manejo de unos
materiales de reciente adquisicin que se van a
encontrar en las diferentes ZO. Por lo tanto, no
debe analizarse este sistema de adiestramiento
como tal, sino como una solucin transitoria a
las carencias que presentan nuestras unidades.
Estos mdulos van a ir suprimindose a medida que las unidades vayan recibiendo en dotacin estos nuevos materiales, de igual manera
que a medida que las UBG repitan despliegue no

necesitarn obtener el mismo nmero de permisos de conduccin, por lo que el GIUACO no se


encontrar igual de presionado y no precisar del
apoyo de vehculos procedentes de la FT.
Una vez implantado el sistema, se ha revelado
como una solucin eficaz aunque no perfecta,
puesto que ni la operatividad de los vehculos es
todo lo elevada que sera deseable, ni los periodos de mantenimiento preferente son a menudo
suficientes como para volver a reparar todos los
vehculos.
Aun as, se puede afirmar que la solucin
implantada, que exige mucha colaboracin y
coordinacin entre numerosas autoridades diferentes est consiguiendo que nuestros contingentes lleguen a ZO con la tranquilidad de
saberse suficientemente preparados para afrontar
su misin con las debidas garantas. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

93

MARCO JURDICO
DE LA FUERZA TERRESTRE EN
OPERACIONES EXTERIORES.
Carlos Meln Muoz. Coronel. Cuerpo Juridico Militar.
ngel Serrano Barbern. Teniente Coronel. Cuerpo Juridico Militar.
Jos Romero Muros. Teniente Coronel. Cuerpo Juridico Militar.

Nivel Operacional y Tctico

La Ley Orgnica de la Defensa Nacional contempla


las operaciones que las Fuerzas Armadas desarrollan
fuera de territorio nacional, distinguiendo entre las
directamente relacionadas con la defensa de Espaa o
del inters nacional, y otras operaciones. Dentro de su
rgimen jurdico han de diferenciarse la fase previa al
despliegue y la etapa de despliegue en ZO, en las que
varan fundamentalmente la atribucin de competencia
sancionadora sobre el personal integrado en el contingente y el estatuto jurdico de quienes componen la
fuerza en su relacin con el Estado en que se desarrolle
la operacin

na parte importante del peso de la participacin del Ejrcito de Tierra en operaciones recae en la Fuerza Terrestre en
cuanto componente de la estructura orgnica
(la fuerza) a la que se encomienda legalmente el
adiestramiento, la preparacin y la evaluacin
de las unidades, y la generacin de las estructuras operativas necesarias para el desarrollo de
aquellas. Las lneas que siguen pretenden poner
de manifiesto algunos problemas jurdicos que
se plantean en este mbito, con especial atencin a la cuestin de la competencia en materia
sancionadora, que presenta especiales caractersticas derivadas de la complejidad que siempre
comporta el despliegue de un contingente militar.
El Art. 16 de la Ley Orgnica 5/2005, de 17
de noviembre, de la Defensa Nacional (LODN)
establece que el cumplimiento de las misiones de
las Fuerzas Armadas requiere realizar diferentes
tipos de operaciones tanto en el territorio nacional como en el exterior, que pueden conducir a
acciones de prevencin de conictos o de disuasin, de mantenimiento de la paz, actuaciones en
situaciones de crisis y de respuesta a la agresin.
Las operaciones pueden ser, pues, interiores
o exteriores y pueden ser llevadas a cabo, sobre
todo las ltimas, de forma autnoma por las

Fuerzas Armadas espaolas o en el marco de


alguna de las organizaciones internacionales
de las que Espaa forma parte, en particular la
Organizacin de las Naciones Unidas (ONU),
la Organizacin del Tratado del Atlntico Norte
(OTAN) y la Unin Europea (UE).
Desde otro punto de vista, sin atender tanto a
la localizacin geogrfica como a las reglas de
comportamiento del militar, el Ttulo IV de las
Reales Ordenanzas para las Fuerzas Armadas
(RROOFAS) distingue entre operaciones de combate, de paz y ayuda humanitaria, de seguridad
y bienestar de los ciudadanos y de evacuacin y
rescate (Arts. 83 a 114).
Centrndonos ya en las operaciones exteriores, la LODN diferencia entre:
Las directamente relacionadas con la defensa
de Espaa o del inters nacional, como las de
respuesta a una agresin.
El resto de operaciones, entre las que se pueden incluir junto a las recogidas en el artculo
16 LODN, otras como las de ayuda humanitaria,
reconstruccin o rehabilitacin de un pas o evacuacin de residentes espaoles en el extranjero,
contempladas por las RROOFAS.
En ambos casos, acordada por el Gobierno
la participacin de las Fuerzas Armadas (Art 5

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

95

Preparacin de la Fuerza

LODN) y adoptada la decisin de iniciar la misin, su planeamiento y conduccin estratgica


corresponden al Jefe del Estado de la Mayor de
la Defensa (Art 12 LODN). Por otra parte, el
Gobierno deber informar peridicamente, en
un plazo en ningn caso superior a un ao, al
Congreso de los Diputados sobre el desarrollo de estas operaciones en el exterior (Art. 18
LODN).
Por el contrario, el rgimen jurdico de ambos
tipos de misiones difiere en otros aspectos, que
se resumen en los presupuestos para su inicio y
el estatuto jurdico de la fuerza militar durante el
desarrollo de las mismas. Son los que analizamos
seguidamente.
Presupuestos de la misin
Operaciones directamente relacionadas con
la defensa de Espaa o del inters nacional
Aunque a tenor del Art. 17 LODN estas operaciones no quedan sometidas al rgimen de consulta previa y autorizacin del Congreso de los
Diputados, no quiere ello decir que su establecimiento quede hurfano de todo control. Antes

96

bien, por la va de una situacin de anormalidad,


ser aplicable la LO 4/1981, reguladora de los estados de alarma, excepcin y sitio; especialmente
este ltimo que descansa, entre otras bases, en
un ataque a la soberana o independencia de
Espaa. Y ello sin perjuicio de las normas de
Derecho internacional que resulten aplicables,
en particular las que regulan el uso de la fuerza
en las relaciones internacionales1.
Otras operaciones
Aparte de las ya citadas consulta y autorizacin del Congreso de los Diputados que
impone el Art. 17.1 LODN2, el 19 de la propia
Ley exige:
Que las operaciones se realicen por peticin
expresa del Gobierno del Estado en cuyo
territorio se desarrollen; que estn autorizadas
por resoluciones del Consejo de Seguridad de la
ONU o que sean acordadas por organizaciones
internacionales de las que Espaa forme parte
(particularmente UE/OTAN) en el marco de sus
respectivas competencias.
Que cumplan con los fines defensivos,
humanitarios, de estabilizacin o de

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

mantenimiento y preservacin de la paz,


previstos y ordenados por las mencionadas
organizaciones.
Que sean conformes a la Carta de Naciones
Unidas y no contradigan o vulneren los
principios del Derecho internacional
convencional que Espaa ha incorporado a su
ordenamiento, Art. 96.1 CE.

Rgimen jurdico de la Fuerza


durante el desarrollo de la misin
Acciones directas de defensa de Espaa o del
inters nacional
Si implican la participacin en un conflicto
armado, quedarn sometidas al Derecho Internacional Humanitario o Derecho de los Conflictos
Armados. La declaracin de guerra, conforme al
Art. 63.3 CE, corresponde al Rey, previa autorizacin de las Cortes Generales.
En caso contrario deben regirse por las normas aplicables al resto de las operaciones, que
examinamos seguidamente.
Otras operaciones. Antes del despliegue
Toda operacin exterior tiene una fase previa
de preparacin en territorio nacional, con la
finalidad del adiestramiento de las fuerzas y de
constitucin definitiva del contingente que se
desplegar posteriormente en zona de operaciones. Durante ella3, la fuerza participante contina rigindose exclusivamente por la normativa
nacional, pero como en el contingente puede
encuadrarse personal con diferente vinculacin
orgnica, se imponen algunas consideraciones
sobre la aplicacin de la Ley de Rgimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas (LORDFAS
en adelante) durante el periodo de tiempo que
nos ocupa.
Para determinar la titularidad de la competencia sancionadora existen dos posibles
interpretaciones:
Atendiendo al criterio reflejado en los OPLAN
que emite CMOPS, durante esta poca se
aplican las reglas generales, por lo que el
jefe del contingente y el GEFUTER, as como
los dems mandos generadores solo tienen
competencia sancionadora sobre el personal
orgnicamente dependiente de ellos.
Segn la Directiva 08/07 de la DIVOPE y las
rdenes de relevo dictadas en su aplicacin
por el GEFUTER y otros mandos, la conclusin

puede variar. Disponen que el JEME transmite al


mando coordinador de la generacin el control
operativo (OPCON) de las unidades del ET
integradas en el contingente que no dependan
orgnicamente del mismo, lo que supone
atribucin de competencia sancionadora.
En consecuencia, segn esta interpretacin:
El jefe del contingente tiene atribuciones
disciplinarias sobre el personal integrado
en l desde el momento en que se inicia la
concentracin. Por lo tanto, tiene potestad para
imponer sanciones por falta leve dentro del
mbito concreto que sealan los Arts. 27 y 31
LORDFAS, dependiendo de su empleo militar
y/o de la entidad del contingente como unidad.
Tambin las tiene sobre el personal integrado
en l en comisin de servicio individual.
La atribucin de esta competencia debe
entenderse operativa desde que cada miembro
del contingente se incorpore efectivamente a
la concentracin, que puede no ser el mismo
para todos sus componentes.
Los jefes de las unidades subordinadas
encuadradas en el contingente ostentan las
mismas atribuciones, conforme a las reglas
generales de distribucin de la competencia
sancionadora en funcin de la entidad o tipo
de cada una de aquellas (batalln, compaa,
seccin, etc).
En materia de recursos tambin son aplicables
las reglas generales, debiendo precisarse dos
aspectos:
El jefe del contingente ha de entenderse como jefe de cuerpo o unidad independiente a
los efectos del Art. 77.2 LORDFAS, por lo que
sus resoluciones en va de recurso agotarn
la va disciplinaria.
La competencia para resolver recursos contra
sanciones impuestas por el jefe del contingente a personal perteneciente a unidades
de la FUTER corresponde al General Jefe de
la Fuerza Terrestre o al mando generador que
corresponda.
Dichos mandos son igualmente competentes
para acordar la incoacin de expedientes
disciplinarios por falta grave (Art. 51 LORDFAS)
y para adoptar la sancin que corresponda
dentro de los lmites sealados por los Arts.
29 y 30 LORDFAS, as como para incoar
expedientes gubernativos, cuya resolucin

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201197

Preparacin de la Fuerza

compete a la Ministra de Defensa (Arts. 17,


28, 51 y 64 LORDFAS).
De las dos posibilidades expuestas, la segunda parece ms acorde con la naturaleza de la
potestad disciplinaria, que es complemento indispensable de la responsabilidad inherente al
ejercicio del mando. En este sentido, el TS4 estima que debe entenderse por unidad, a efectos de las leyes disciplinarias, todo conjunto de
personas y medios que dependen de un jefe con
la responsabilidad que ello comporta, pues no
tendra sentido otorgar a un mando una concreta
responsabilidad y sustraerle una facultad, cual es
la sancionadora, esencial para el cumplimiento
y obtencin de los fines de cuyo logro le hace
responsable la misma ley.
Despliegue en Zona de Operaciones
Una vez iniciado el despliegue, el rgimen
jurdico de las unidades y del personal viene
determinado tanto por la normativa nacional,
que en gran medida contina siendo de aplicacin, como por las normas internacionales que
conforman el marco jurdico general de la misin u operacin de que se trate, que se analiza
brevemente a continuacin. A grandes rasgos,
se puede decir que ese marco est integrado por
tres elementos fundamentales: el mandato de la
misin, es decir, su fundamento a la luz del Derecho Internacional; el acuerdo sobre el Estatuto de
la Fuerza y de su personal suscrito con el Estado
en cuyo territorio se desarrolla la operacin,
que se conoce con los acrnimos anglosajones
SOFA/SOMA (Status of Forces Agreement/Status
of Mission Agreement); y las reglas de enfrentamiento (ROE) que establecen las directrices para
el uso de la fuerza durante el cumplimiento de
la misin.
El mandato de la operacin
Como se ha visto, la LODN exige que la operacin, para contar con participacin espaola, sea conforme al Derecho Internacional. Este
amparo jurdico puede venir dado por peticin
expresa del Gobierno del territorio en que van
a desplegarse las tropas espaolas o porque la
operacin derive de una resolucin del Consejo
de Seguridad de la ONU, lo que constituye la
prctica ms comn incluso en el caso de operaciones realizadas en el marco de la OTAN o
98

la UE5, y la resolucin podr adoptarse sobre la


base de los captulos VI (arreglo pacfico de las
controversias) o VII (medidas coercitivas) de la
Carta de las Naciones Unidas.
El contenido del mandato depende de las
caractersticas del conflicto y fija, entre otros
aspectos, los objetivos de la misin, su duracin
y las facultades que se otorgan para conseguir
tales objetivos.
En los ltimos aos ha sido frecuente el recurso al captulo VII de la Carta para permitir un
uso de la fuerza ms extenso en la consecucin
de los objetivos de la misin y en la defensa de
su personal y de la poblacin civil. En las dos
misiones de mayor entidad en las que participan
actualmente unidades de la FUTER, el mandato
est constituido por las resoluciones 1386 (2001)
y 1510 (2003) en el caso de ISAF, operacin
desarrollada en Afganistn bajo mando OTAN,
y por las resoluciones 425 (1978), 426 (1978) y
1701 (2006) en el caso de UNIFIL, operacin desarrollada en el Lbano bajo mando de la ONU.
El estatuto de la Operacin
y de la fuerza participante
El estatuto abarca el conjunto de derechos
y obligaciones que se reconocen en el territorio del Estado donde se desarrolla la operacin
(Estado anfitrin) tanto al personal civil o militar
participante en ella como a la organizacin en el
marco de la cual aquella se realiza6. Se refleja en
un acuerdo celebrado entre la organizacin o el
Estado o estados que lleven a cabo la operacin7
y el Estado anfitrin, y recibe normalmente la
denominacin de Acuerdo sobre el Estatuto de
Fuerzas (SOFA/ SOMA).
Cuando la operacin se realiza en el seno de
una organizacin internacional, es ella la que determina la conclusin del SOFA/SOMA y afecta a
todos los pases participantes. En algunos casos,
el SOFA reviste la forma de un verdadero acuerdo internacional, como en el caso de UNIFIL
suscrito entre la ONU y el Gobierno del Lbano.
En otros, adopta modalidades menos formales,
como en el caso de Afganistn, donde el estatuto
de la fuerza se contiene en el llamado Acuerdo
Tcnico Militar.
En el marco de las Naciones Unidas el SOFA sigue el modelo aprobado por la Asamblea
General el 9 de octubre de 1990 (Documento

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

A/45/594, Status of Forces for Peacekeeping Operations), mientras que en


las operaciones de la OTAN se tiende
a recoger disposiciones similares a las
contenidas en el Acuerdo de Londres
1951 (NATO SOFA)8. En la Unin Europea existe tambin un SOFA, hecho
en Bruselas el 4 de noviembre de 2003
(EU SOFA).
El SOFA es elemento esencial en
toda operacin exterior, siendo lo ideal
que se encuentre firmado y en vigor
con anterioridad al despliegue de la
fuerza, si bien las circunstancias no
siempre lo permiten. En estos casos,
por razones de urgencia, la prctica
seguida por el Consejo de Seguridad
es declarar aplicable, en la resolucin
que se autoriza la operacin, las normas contenidas en el modelo de SOFA de la ONU antes mencionado, en
tanto se concluye uno definitivo9. Esta
prctica es conforme al criterio, cada
vez ms extendido, de que en ausencia de SOFA, las normas esenciales
que contiene dicho modelo y que se
vienen repitiendo en todas las operaciones emprendidas por esta Organizacin deben ser aplicadas por el Estado
anfitrin como Derecho internacional
consuetudinario.
En el SOFA se regulan aspectos del
rgimen jurdico de la operacin y de
su personal, entre los que destacan los
siguientes.
Jurisdiccin penal
El personal militar en ningn caso
estar sometido a la jurisdiccin del
Estado anfitrin, caso de ser acusado
de la comisin de delito. Ante dicha
eventualidad, el personal militar espaol ser siempre juzgado por la jurisdiccin espaola10.
Conforme al Art. 71 de LO 4/1987,
el conocimiento de los presuntos delitos cometidos por el personal militar
espaol en el extranjero corresponder
a los juzgados togados militares y a
los tribunales militares con sede en
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 201199

Preparacin de la Fuerza

Madrid, segn sus respectivas atribuciones, salvo que se hubiera designado un rgano judicial
especifico para acompaar a las fuerzas desplazadas fuera del territorio nacional, conforme al
Art. 63 de la misma ley.
En caso de delitos que sean competencia de la
Jurisdiccin Militar espaola conforme a las reglas anteriormente expuestas, es de aplicacin el
Art. 115 de Ley antes citada, a cuyo tenor el jefe
de la unidad deber comunicarlo por el medio
ms rpido posible al juez togado competente y
nombrar un oficial para que incoe el correspondiente atestado.
Inmunidad frente a
arresto o detencin
Otro aspecto inexcusable en el SOFA es la
inmunidad de arresto o detencin para el personal militar. En consecuencia, el personal militar
espaol no puede ser arrestado o detenido por las
autoridades locales y, en caso de detencin, debe
ser inmediatamente entregado a las autoridades
espaolas o multinacionales.
Rgimen disciplinario
Es tambin habitual consignar que el personal
militar est sometido a la exclusiva potestad disciplinaria de su propio Ejrcito.
En este sentido, el Art. 39 LORDFAS indica
que tienen potestad para imponer sanciones al
personal a sus rdenes los jefes de unidades o

grupos temporales desplazados fuera del territorio nacional, cualquiera que sea la denominacin
que reciban, quedando circunscrito el ejercicio
de dicha potestad a la duracin de la misin para
la que fueran creadas dichas unidades o grupos
y a la entidad que estos tengan conforme a las
reglas de los Arts. 31 a 36. La potestad sancionadora se ejerce igualmente sobre el personal
de la Guardia Civil integrado en el contingente,
por aplicacin de la D.A. 6 de LO 12/2007, de
Rgimen Disciplinario de la Guardia Civil, que
da nueva redaccin al Art. 15 de LO 2/86, de
Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, segn el cual
cuando la Guardia Civil se integre en unidades militares resultar de aplicacin el rgimen
disciplinario de las Fuerzas Armadas.
Por otro lado, la Directiva 11/2004 del JEMAD, sobre personal militar espaol que participa en operaciones fuera del territorio nacional,
dispone que la competencia sancionadora con
ocasin del desarrollo de operaciones se ejercer
de acuerdo con las estructuras definidas en los
OPLAN del comandante del mando de operaciones, que son activados con la aprobacin del
Gobierno de la nacin. Dichas estructuras operativas constituyen una nueva organizacin que
se establece temporalmente y se debe entender
que existe una nueva adscripcin orgnica a travs de la cual se ejerce la potestad disciplinaria.
De acuerdo con esta directiva, los OPLAN de las
distintas operaciones especifican que la potestad

Consejo de Seguridad de las NN UU

100

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

sancionadora se ejercer para el personal que


participe en la operacin y durante su presencia
en ella, a travs de la cadena operativa establecida en dichos planes y no a travs de la cadena
orgnica permanente o de paz.
Dada la complejidad que suponen el despliegue y el repliegue de todo contingente, sera
conveniente, partiendo del criterio expuesto en
la directiva y sobre la base del criterio jurisprudencial antes expuesto, regular con precisin, en
una futura reforma de la LORDFAS, los momentos en que los mandos de las citadas estructuras
operativas adquieren y pierden la competencia
sancionadora.
Por lo que respecta al personal que participa
en una operacin sin estar integrado en una unidad espaola, sino en comisin de servicio individual en cuarteles generales multinacionales de
las distintas operaciones, la directiva antes citada
establece que el oficial espaol ms antiguo ser
el que ejerza las funciones de representante nacional espaol ante el cuartel general, teniendo
la consideracin de jefe de unidad, as como la
potestad sancionadora sobre el personal espaol
comisionado de forma individual.
Finalmente, debe precisarse que tras la creacin del Mando de Operaciones por el Real Decreto 1551/2004, de 25 de junio, el inmediato
superior jerrquico de los jefes de contingente y
de los representantes nacionales espaoles, a efectos disciplinarios, es el Comandante del Mando

de Operaciones (CMOPS). Es esta autoridad a la


que compete resolver los recursos por falta leve
impuestos por los jefes de contingente o por la
representantes nacionales del personal desplegado en zona de operaciones, as como acordar la
incoacin de expedientes disciplinarios por falta
grave en relacin con dicho personal y, en su caso,
imponer la sancin pertinente, salvo en el caso,
por lo dems muy frecuente, de repatriacin del
encartado, en el que la competencia disciplinaria
vuelve al mando que corresponda por razn de la
unidad de destino de aquel.
Reclamaciones Patrimoniales (claims)
Finalmente, dejando de lado otras muchas
disposiciones que suelen contener este tipo de
acuerdos, siempre contienen normas relativas a
los mecanismos de solucin de las posibles reclamaciones patrimoniales que se puedan presentar
por los daos causados por las fuerzas o personal
participante en la misin.
Uso de la fuerza (Reglas
de Enfrentamiento)
Las reglas de enfrentamiento (ROE) son directrices dadas al mando militar que especifican los
casos y condiciones en que se puede hacer uso
de la fuerza en el cumplimiento de la misin. Se
aprueban en funcin del mandato de la operacin y se deciden por la autoridad poltica que
ejerce la direccin estratgica de la operacin.

Trabajos en el Cuartel General de la FUTER


REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

101

Preparacin de la Fuerza

Dejan siempre a salvo el derecho de legtima


defensa de las fuerzas propias, de las aliadas y
del personal de cuya custodia se sea responsable. A las ROE, se refieren especficamente
las RROOFAS, aprobadas por RD 96/2009, de
6 de febrero, en su artculo 84 (en el empleo
legtimo de la fuerza, el militar har un uso gradual y proporcionado de la misma, de acuerdo
con las reglas de enfrentamiento establecidas
para las operaciones en las que participe) y 94
(el conocimiento y cumplimiento de las reglas
de enfrentamiento le permitirn hacer frente a
las situaciones cambiantes de cada momento,
debiendo estar preparado para asumir la proteccin de la poblacin afectada y los riesgos
consiguientes).
Las ROE siguen un modelo que vara segn el
tipo de organizacin. En al mbito de la ONU
siguen el modelo contenido en el documento Guidelines for the Development of Rules of
Engagement for United Nations Peacekeeping
Operations, de 15 de mayo de 2002; en el marco
de la OTAN el documento bsico es el MC-3621, NATO Rules of Engagement, de 2003; y en la
Unin Europea es el Use of Force Concept for
EU-led Military Crisis Management Operations,
1st revision, de 2006. Los estados que participan
en una operacin pueden comunicar restric102

ciones nacionales, caveats en la terminologa


anglosajona, en relacin con aspectos concretos
de las reglas de enfrentamiento, en cuyo caso
las tropas de dichos estados no se encuentran
vinculadas por las reglas o aspectos a los que
afectan las restricciones.
Los procedimientos para la adopcin y modificacin de las reglas de enfrentamiento varan
segn el marco de la organizacin en que se
realice la operacin, aunque en el fondo tienen muchas similitudes, particularmente entre
la OTAN y la UE. Su aprobacin corresponde,
en el mbito de la OTAN, al Consejo Atlntico;
en el de la UE, al Consejo de la Unin; y en el
marco de las Naciones Unidas, al Vicesecretario
del Departamento de Operaciones de Paz (Undersecretary Department of Peacekeeping Operations). En el mbito nacional, se implementan
por el Estado Mayor de la Defensa, incluyndolas
en el correspondiente plan de operaciones.
notas
1

Simplificando la cuestin, el Derecho Internacional


contemporneo prohbe el uso de la fuerza en las
relaciones internacionales, salvo supuestos de aplicacin de medidas coercitivas del captulo VII de la
Carta de las Naciones Unidas para el mantenimiento
de la paz y de la seguridad internacionales y los

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

casos de legtima defensa individual o colectiva,


conforme al artculo 51 de la propia Carta.
2
Cuando la misin requiera, de acuerdo con compromisos internacionales, una respuesta rpida e
inmediata a determinadas situaciones, los trmites
de consulta previa y autorizacin se realizarn mediante procedimientos de urgencia que permitan
cumplir con dichos compromisos (Art 17.2 LODN).
Igualmente, cuando por razones de mxima urgencia no fuera posible realizar la consulta previa, el
Gobierno someter al Congreso de los Diputados
lo antes posible la decisin que haya adoptado para
ratificacin en su caso (art 17.3 LODN).
3
Las directrices para la preparacin del contingente se
contienen en la orden de relevo que emite el general
jefe del mando generador, en la que se distinguen
varias fases.
4
SSTS 14-7-1995, RJ 6019 y 25-1-1999, RJ 2082,
entre otras.
5
Aunque estas organizaciones pueden tambin decidir
el lanzamiento de una operacin de forma autnoma
conforme a sus tratados constitutivos o reguladores,
siempre que al hacerlo lo hagan con respeto de las
normas vigentes del Derecho Internacional.
6
O a los estados individualmente considerados, si la
operacin la lleva a cabo un Estado o una coalicin
de estados.
7
Por ejemplo, el reciente acuerdo internacional entre
el Reino de Espaa y la Repblica de Hait constitutivo de Acuerdo Temporal para el Estatuto del
personal de las Fuerzas Armadas, publicado en el
BOE 129/2010, de 27 de mayo.
8
Aplicable por remisin al estatuto de fuerzas de los
Estados Unidos en Espaa y de Espaa en los Estados

Unidos. Vanse Arts. 39, 40, 55 y 56 del Convenio


de Cooperacin para la Defensa entre Espaa y los
Estados Unidos de Amrica (BOE 6-5-1989).
9
Vid. Resolucin del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas 1545 (2004), de 21 de mayo.
10
Para hacerlo posible, el artculo 12, apartados 2
y 3, de la Ley Orgnica 4/87, de Competencia y
Organizacin de la Jurisdiccin Militar establece
que, en tiempo de paz, la jurisdiccin militar ser
competente: en materia penal para conocer los
delitos y faltas que sealen los tratados, acuerdos
o convenios internacionales en que Espaa sea
parte, en caso de presencia permanente o temporal fuera del territorio nacional de fuerzas o
unidades espaolas de cualquier Ejrcito. En esos
casos, y cuando no existan tratados, acuerdos o
convenios aplicables, ser competente para conocer de todos los delitos y faltas tipificados en
la legislacin espaola, siempre que el inculpado
sea espaol y se cometan en acto de servicio o
en los lugares o sitios que ocupan fuerzas o unidades militares espaolas. En estos supuestos, si
el inculpado regresare a territorio nacional y no
hubiera recado sentencia, los rganos de la jurisdiccin militar se inhibirn a favor de la ordinaria
Ejemplos de lo dicho hallamos en el Acuerdo entre
el Gobierno de la Repblica de Albania y los gobiernos de las naciones contribuyentes a la fuerza
multinacional de proteccin, hecho en Roma el 21
de abril de 1997 (BOE 24-7-1997) y en el Acuerdo
entre la Repblica de Bosnia y Herzegovina y la
OTAN relativo a la condicin de OTAN y de su
personal, anejo a los acuerdos de Dayton de 21 y
23 de noviembre de 1995. n

Reunin de los Ministros de Defensa de la OTAN

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

103

LA IMPORTANCIA DE LA

COMUNICACIN PBLICA
EN EL MARCO DE LA FUERZA TERRESTRE
Enrique ngel Costas Rodal. Comandante. Infantera.

Nivel Operacional y Tctico

La Oficina de Comunicacin del Cuartel General de la


Fuerza Terrestre es el principal asesor en esta materia, del
jefe de dicho mando y de todo el personal que se relaciona
con los medios del comunicacin, todo ello dentro del
nuevo Sistema de Comunicacin de Ejrcito que regula
todas las actividades relacionadas con la comunicacin
externa, la comunicacin interna y las relaciones pblicas,
el protocolo y la imagen. La comunicacin actualmente no
se cie a las relaciones con los medios de comunicacin
social, sino que abarca otros campos como las relaciones
pblicas y el protocolo, la publicidad y la atencin humana
personalizada.

ajo la premisa de que la informacin pblica (IP) es una funcin de mando de la ms


alta prioridad y, como tal, compete a este
la responsabilidad sobre la misma, no pudiendo
delegarla o subordinarla a ninguna funcin del
estado mayor/plana mayor, a nadie se le escapa
la importancia que para una institucin como la
Fuerza Terrestre (FUTER) tiene este tema.
En este sentido, se entiende por IP: La informacin que es hecha pblica o publicada con el
principal propsito de mantener completamente
informado al pblico para, de ese modo, ganar
su comprensin y apoyo (publicacin OTAN
AAP-6).
Por otro lado, bien conocido es que el empleo de las fuerzas militares causa un gran impacto en la sociedad y, actualmente, han cobrado una importancia decisiva, por un lado,
el apoyo de la opinin pblica que debe respaldar en todo momento la decisin poltica y,
en consecuencia, las operaciones que realizan
las unidades militares en defensa de los intereses nacionales; y, por el otro, el apoyo de los
medios de comunicacin social (MCS), no solo

por su influencia en la opinin pblica, sino


como instrumento para ofrecer la informacin
oportuna y veraz que la sociedad demanda
sobre el desarrollo de las operaciones. En este
punto, no debemos olvidar que el derecho a la
informacin es un derecho constitucional (Art.
20.1.d) que dice: Se reconocen y protegen los
derechos a [] comunicar o recibir libremente informacin veraz por cualquier medio de
difusin.
En los albores del siglo XXI, vivimos inmersos
en la sociedad de la informacin, sociedad que
permite que cualquier persona, con independencia de su situacin geogrfica, clase social, formacin, tenga acceso, de forma inmediata, a
acontecimientos que ocurren en cualquier lugar
del Globo. Ningn suceso, ocurra donde ocurra,
se escapa a los ojos de los MCS y en cuestin
de minutos, gracias a las ltimas tecnologas
(internet, satlites de comunicacin, telfonos
mviles), es conocido por la opinin pblica
mundial; es lo que se conoce como aldea global,
a la que todos pertenecemos y en la que todos
estamos interrelacionados.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

105

Preparacin de la Fuerza

LAS RELACIONES CON LOS


MEDIOS DE COMUNICACIN
Los MCS son los instrumentos ms eficaces
de que dispone la institucin militar para dar a
conocer sus actividades al pblico en general.
Este es el papel que la sociedad atribuye a los
MCS y ellos son el principal canal por el que
la sociedad espaola ejerce su derecho a estar
informada sobre cuanto acontece a su alrededor.
Ahora bien, a la hora de que la institucin
militar se relacione con ellos, surge un dilema:
conseguir el difcil equilibrio que debe existir entre el derecho a la informacin (ligado a la credibilidad) y la seguridad de las operaciones (ligado
al cumplimiento de la misin). En otras palabras,
el problema al que se enfrenta un mando militar
es conseguir el equilibrio entre el deber de mantener informados a los MCS sobre cuanto acontece, para satisfacer precisamente el derecho de
la opinin pblica a recibir informacin puntual
y veraz sobre las actividades de su Ejrcito, y el
deber de preservar la seguridad del personal, de
sus familias y de las operaciones.
A la hora de relacionarse con los MCS, en la
Fuerza Terrestre (FUTER) se tiene muy en cuenta
el tipo de medio al que se dirige ya que no es

106

lo mismo hacerlo a la televisin que a la prensa


escrita, la radio o internet. Tambin se presta
especial atencin a la audiencia potencial que
sigue a cada medio en una determinada franja
horaria para amoldarse a ella en la forma de
transmitirlo, que no en el contenido del mensaje.
A continuacin, se expondr, de forma breve,
las caractersticas ms importantes de cada medio y qu es lo que se tiene en cuenta a la hora
de establecer contacto con cada uno de ellos.
La televisin es imagen, luego se cuida al
mximo esta y el mensaje a transmitir se hace lo
ms visual posible, teniendo siempre en cuenta
que la correccin en la uniformidad es parte del
mensaje que el receptor espera de un militar de
la FUTER. En este medio, los segundos son de
oro, por lo se debe sintetizar el mensaje y repetirlo cuanto sea necesario. La audiencia siempre
valora positivamente la sencillez y la naturalidad.
En este sentido, se asesora al personal sobre
la importancia de cuidar el rostro y la actitud
del entrevistado pues tambin ello transmite un
mensaje.
La radio, por su parte, es sinnimo de inmediatez. Es el medio ms rpido para difundir
una informacin con independencia de la hora,

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

ya sea de da o de noche. Las necesidades de


la radio son relativamente simples. En muchos
casos los periodistas efectan las entrevistas por
telfono. En este medio, lo ms importante es la
locucin. El asesoramiento que se presta al personal pasa por conseguir que cuando se siente
ante un micrfono, est completamente seguro
de que lo que va a transmitir va a ser captado y
comprendido sin dificultad por el oyente. Un aspecto que se remarca y recuerda continuamente
es el relativo a huir de siglas o acrnimos ya que
estos sern desconocidos para la inmensa mayora de la audiencia que sigue al medio.
La prensa escrita ha sido histricamente la
fuente principal de informacin en la sociedad.
A diferencia de otros medios, aqu no impera la
rapidez. En el asesoramiento que se presta al personal se pone de relieve la necesidad de pensar
con detalle las respuestas y acompaarlas con
fotografas o grficos que ilustren lo declarado
ya que de esa forma el producto informativo ser
ms visual y de mayor agrado para el lector.
Internet se ha consolidado como uno de los
medios ms potentes para difundir informacin
ya que toda informacin que se publique en la
web podr ser vista simultneamente desde cualquier lugar del mundo. En este sentido, desde el
Cuartel General de la FUTER se ha instado a que
todos los mandos y unidades de la misma (hasta
nivel regimiento) cuenten con una pgina web
propia, permanentemente actualizada, que es la
ventana al mundo de cualquier unidad.
LA OFICINA DE COMUNICACIN
DEL CUARTEL GENERAL DE
LA FUERZA TERRESTRE
La Oficina de Comunicacin (OC) del Cuartel General de la FUTER se constituye como el
principal rgano asesor del Jefe de la Fuerza
Terrestre en materia de comunicacin pblica.
Para ello, depende orgnicamente de l (GEFUTER) y coordina sus funciones a travs del Jefe de
Estado Mayor de la Fuerza Terrestre (JEMFUTER).
Asimismo, se relaciona, funcionalmente, con el
Departamento de Comunicacin del Ejrcito de
Tierra (DECET) y con la Oficina de Comunicacin
de la Subinspeccin General de Ejrcito SUR
(SUIGESUR).
La Jefatura de la OC la ejerce un oficial de
empleo teniente coronel, diplomado en Comu-

nicacin Social y del que dependen los dos negociados en los que se articula la misma, esto
es, Negociado de Relaciones con los Medios
de Comunicacin y Negociado de Protocolo.
Asimismo, desempea los cometidos de Jefe de
Protocolo.
En la Oficina de Comunicacin existe una 2
Jefatura, ocupada por un oficial de empleo comandante, diplomado en Comunicacin Social y
que desempea los cometidos de Jefe de Prensa.
Entre otros, de l dependen todos los aspectos
relativos a la comunicacin interna y la coordinacin de los negociados que componen la OC.
El Negociado de Relaciones con los Medios
de Comunicacin, constituido por un suboficial
y uno de tropa, tiene como cometidos ms destacados: la redaccin de informes y propuestas
que se le soliciten o que confeccione por iniciativa propia; la obtencin de informacin de los
distintos medios de comunicacin social, tanto
en papel (peridicos y revistas) como a travs de
la radio, televisin o INTERNET; materializa las
relaciones y contactos con los MCS (elaboracin
de notas de prensa, convocatorias de prensa,
acreditacin de MCS para los distintos actos que
se organizan, elaboracin del resumen diario de
prensa, elaboracin de informes de prensa para
los representantes de los MCS acreditados en
dichos actos); planificar, coordinar y controlar las
ruedas de prensa, entrevistas y otros encuentros
con los MCS en el mbito del Cuartel General
de la FUTER; gestionar las solicitudes de informacin que se reciban de los MCS; fomentar la
difusin de informacin que permita al personal
de la FUTER conocer las ltimas novedades de
inters en el Ejrcito de Tierra; programar, disear y editar todas aquellas publicaciones que
contribuyan a mejorar la imagen de la FUTER
y, al mismo tiempo, asegurar la comunicacin
interna; proponer al DECET la publicacin de
aquellas publicaciones institucionales a incluir
en el Programa Editorial anual; elaborar reportajes fotogrficos de todos aquellos actos de inters
lo que permite disponer de un valioso archivo de
imgenes de todos los actos realizados; asesorar
tcnicamente y apoyar a los rganos de comunicacin de los mandos/unidades de la FUTER en
materias de su competencia; elaborar y actualizar constantemente los contenidos de la pgina
web del Cuartel General de la FUTER en Internet

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

107

Preparacin de la Fuerza

mediante la que se difunde a la sociedad las


actividades ms destacadas en las que participa
GEFUTER y el Cuartel General de la FUTER y que
supone la principal ventana abierta al exterior de
este Mando de primer nivel del ET.
Los principales contenidos de esta pgina web
son: introduccin (pgina de bienvenida), localizacin de la unidad (situacin del Establecimiento Militar Plaza de Espaa, datos generales sobre
la ciudad de Sevilla y una breve historia sobre
la capital de Andaluca), historial, organizacin
y misiones, actividades principales realizadas
(militares, culturales y deportivas), ventajas de
servir en la unidad y un ltimo apartado relativo
a unidades en operaciones del que este mando
es principal rgano de preparacin y generacin
de contingentes. Finalmente, resear como otro
de los cometidos de este negociado, el planeamiento, programacin, presupuesto y control de
los crditos asignados por el Estado Mayor del
Ejrcito (EME) a la FUTER correspondientes al
Plan General de Comunicacin (PGIC).
El Negociado de Protocolo, constituido por
un suboficial, uno de tropa y un personal civil
no funcionario, tiene por cometidos ms destacados: elaborar y actualizar permanentemente,
conforme a la normativa legal en vigor, las bases
de datos de invitados a los actos militares en los
que figuran autoridades civiles y militares, as
como instituciones y asociaciones representativas
de Sevilla relacionadas con el Cuartel General
de la FUTER; programar, organizar y ejecutar las
actividades de relaciones pblicas y protocolo,
cuando expresamente se determine, en los actos en los que participen mandos/unidades de
la FUTER; asesorar y apoyar a los rganos de
protocolo de los mandos/unidades de la FUTER;
programar las visitas de personal civil al edificio de la Capitana General de Sevilla, sede del
Cuartel General de la FUTER; y, finalmente, la
programacin y control de los crditos (gastos
protocolarios y representativos) necesarios para
ejecutar las actividades institucionales de GEFUTER, as como su gestin en coordinacin con
Gobierno del Cuartel General de FUTER
EL SISTEMA DE COMUNICACIN
DEL EJRCITO DE TIERRA
El Ejrcito de Tierra, como institucin de la
sociedad, tiene ante ella la responsabilidad de
108

elaborar mensajes que garanticen su conocimiento. Cuanto ms rigurosos sean los contenidos de los mensajes, el resultado en trminos de
imagen percibida por la sociedad ser el deseado
y correcto. Por tanto, a travs de la comunicacin
institucional, el ET, y por extensin la FUTER,
llevan a cabo todas aquellas acciones necesarias
para mejorar su imagen pblica.
En este sentido, se entiende por comunicacin institucional, aquella cuyo objetivo nico
es el de configurar y emitir mensajes capaces de
predisponer favorablemente al pblico al que
van dirigido. Se trata, pues, de conseguir que la
imagen transmitida por la institucin no sea indistinta a quien la perciba y, para conseguirlo, se
trabaja en tres grandes campos de actuacin: las
relaciones con los MCS, las relaciones pblicas
y el protocolo y la comunicacin interna. Adems, se contemplan otros dos subcampos que
no se pueden olvidar, esto es, las publicaciones
institucionales y la publicidad.
En el primero de los campos citados, las relaciones con los MCS, se busca un doble objetivo.
Por un lado, proporcionar informacin precisa y
completa de la institucin a la mayor audiencia
posible, a travs de los MCS, para consolidar una
imagen positiva de la misma y, por otro lado,
tambin se busca contrarrestar posibles efectos
negativos provocados por aquellas informaciones relativas a situaciones no deseadas para los
mandos/unidades de la FUTER.
Con el segundo de los campos mencionados, las relaciones pblicas y el protocolo, se
pretende establecer un contacto directo con los
ciudadanos, personas relevantes de la sociedad
y autoridades civiles con el objetivo de que se
conozca y valore la FUTER en sus mltiples facetas, a travs de foros, entrevistas y organizacin
de eventos con participacin civil.
Con el tercero de los campos, la comunicacin
interna, el objetivo que se pretende es mejorar cuantitativa y cualitativamente la comunicacin entre todos los niveles de los mandos/unidades de la FUTER,
informando a sus componentes sobre los objetivos
y las lneas de actuacin que se llevan a cabo. Va
dirigida a los componentes, civiles y militares, de
la FUTER y a sus familias. Es un medio de especial
relevancia para conseguir, alcanzar y mantener la
motivacin de sus efectivos, proporcionando informacin precisa y oportuna a todos ellos.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

Para conseguir todo lo anteriormente citado, el


Jefe del Estado Mayor del Ejrcito (JEME) dispone,
dentro del Sistema de Mando y Direccin (SIMADE), del Sistema de Comunicacin (SICOM)
que es el instrumento mediante el cual este,
dentro del marco de sus competencias, dirige y
canaliza las comunicaciones que la institucin
militar precisa efectuar o recibir de los MCS y de
la sociedad en general (comunicacin externa),
as como la informacin que es preciso difundir
internamente dentro del propio ET (comunicacin interna).
El SICOM se estructura en tres escalones:
Escaln Superior (constituido por el DECET),
Escaln Intermedio (constituido por las OC de
la SUIGE Centro, SUIGE Sur, SUIGE Pirenaica,
SUIGE Noroeste y SUIGE de Canarias, Comandancia General de Ceuta, Comandancia General
de Melilla y Comandancia General de Baleares)
y Escaln Bsico (constituido por las OC, planas
mayores y rganos de direccin del resto de
unidades, centros y organismos).
Segn se ha visto, la OC del Cuartel General
de la FUTER se encuadra en el Escaln Bsico
del SICOM, si bien tendr carcter de Escaln
Intermedio del mismo en aquellas competencias
conferidas al Jefe de la FUTER. Estas competencias son las relacionadas con: mando orgnico
de sus unidades subordinadas, actividades relacionadas con la instruccin y adiestramiento de sus unidades subordinadas, actividades
relacionadas con ejercicios y maniobras cuya
direccin corresponda al Jefe de la FUTER o a
mandos dependientes orgnicamente de ella,
actividades derivadas de los actos que presida
el Jefe de la FUTER, actividades relacionadas
con la fase de preparacin en territorio nacional
de las fuerzas orgnicas a proyectar (hasta que
finalice la proyeccin de la fuerza), actividades
relacionadas con el regreso a TN de una fuerza
orgnica proyectada en el exterior (hasta que se
produzca la ltima rotacin) y todas aquellas
acciones de comunicacin realizadas al personal
de una unidad subordinada que ha finalizado
una operacin en el exterior.
Por otro lado, cabe destacar que todas las actividades de comunicacin anteriormente citadas
tendrn como interlocutores a los MCS locales y
autonmicos emplazados en las localidades donde se ubiquen sus unidades, no as los nacionales
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

109

Preparacin de la Fuerza

o internacionales que son de competencia exclusiva del Escaln Superior del SICOM (DECET).
PLAN DE COMUNICACIN EXTERNA
DE LA FUERZA TERRESTRE DEL ET
En el marco de la normativa general del ET
que regula la comunicacin pblica en su doble
vertiente, externa e interna, la FUTER ha elaborado una norma particular (NP), la NP 01/08 Plan
de Comunicacin Externa de la Fuerza Terrestre,
de aplicacin a todos los mandos y unidades de
la FUTER y que busca establecer un proceso de
comunicacin claro, gil y eficaz que asegure y
facilite la divulgacin de la informacin que se
considere adecuada, bien por haber sido solicitada por los MCS locales o regionales, bien por iniciativa propia, para ser conocida por el pblico
en general de forma objetiva, fiable y oportuna.
En esta NP se exponen una serie de normas
generales que todo el personal perteneciente a
la FUTER debe llevar a la prctica a la hora de
relacionarse con los MCS En este punto, hay que
destacar la importancia del mensaje a transmitir,
tanto en el fondo como en la forma y la
necesidad de preparar en detalle las declaraciones que se van a realizar o las respuestas a
las preguntas que los representantes de los MCS
puedan efectuar.
Asimismo, tambin es importante conocer
el MCS al que nos vamos a dirigir ya que no es
lo mismo hacerlo a un medio escrito que a una
radio o a una televisin por las particularidades
que, como ya se ha expuesto, tiene cada uno de
ellos. Una buena argumentacin y el asesoramiento tcnico sobre aquellos aspectos sobre los
que se va a efectuar declaraciones garantizan el
xito en cualquier tipo de comparecencia ante
los MCS. Tampoco se debe olvidar que a la hora
de realizar cualquier tipo de declaracin ante
los medios, el mensaje debe ir dirigido a la audiencia del programa (para ello, el contenido y la
forma del mensaje deber estar en concordancia
con dicha audiencia) y no a los periodistas, ya
que estos son nicamente intermediarios entre la
fuente de informacin y los receptores (audiencia) de la informacin.
En relacin con los lmites fundamentales que
la FUTER establece a la hora de desarrollar una
accin de comunicacin, cabe mencionar como
ms importantes los siguientes: la seguridad de
110

las operaciones, la seguridad de la Fuerza, la seguridad de las instalaciones y medios y, finalmente, el derecho a la intimidad de los militares y sus
familias. Para ello, con carcter general, no se
proporciona informacin ni grficos o fotografas
sobre: informacin clasificada, procedimientos y
operaciones, grado de cobertura de las plantillas
de personal y estado de operatividad del material y los sistemas de armas, detalle de planes,
operaciones actuales o futuras (incluyendo las
operaciones pospuestas o anuladas), localizacin
especfica de fuerzas militares o que muestren
el nivel de seguridad en las instalaciones militares o campamentos (a menos que revelar esa
informacin sea de inters para las fuerzas implicadas), normas de enfrentamiento (salvo que
se ordene lo contrario), actividades de obtencin
de informacin (incluyendo fuentes y mtodos,
listas de objetivos y valoraciones de daos), informacin especfica sobre el movimiento, entidad
o despliegues tcticos de la fuerza durante una
operacin, identificacin de bases de origen e
itinerario de las aeronaves (a menos que revelar
esa informacin sea de inters para las fuerzas
implicadas), eficacia de las medidas de proteccin adoptadas por el adversario, identificacin
especfica sobre aeronaves o buques perdidos
o derribados mientras se estn planificando o
llevando a cabo las operaciones de bsqueda y
rescate, mtodos, tcticas o cualquier otra informacin sobre fuerzas especiales, vulnerabilidades de la fuerza, mtodos y tcticas de combate
especficos de las unidades, y nombre de fallecidos y heridos mientras no se tenga constancia de
que las familias han sido informadas.
Esta NP contempla, asimismo, los atributos
de identidad de la FUTER que son aquellos
rasgos que la diferencian de otras instituciones y que le dan una personalidad propia que
permite identificarla. Estos atributos, caractersticos de los mandos/unidades de la FUTER,
son: la necesidad de las Fuerzas Armadas como
elemento indispensable y vertebrador de la defensa nacional, las labores diarias, los trabajos
en beneficio de la sociedad, las operaciones en
apoyo a las autoridades y a la proteccin civil,
la multinacionalidad como caracterstica en
sus actuaciones, la buena capacidad operativa
para realizar las misiones encomendadas y la
calidad de vida.

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Nivel Operacional y Tctico

Estos atributos de identidad se transmiten a la


sociedad mediante una serie de ideas fuerza
con el fin de mejorar la imagen y el conocimiento de la institucin. Estas son: la FUTER, parte
fundamental del ET, es una organizacin viva y
moderna que est en continuo proceso de adaptacin para estar preparada, de una forma ptima, para cumplir los cometidos que, a travs de
sus mandos superiores, el Gobierno de la nacin
le ordene; la importancia de la FUTER en el mbito del ET, al estar compuesta por aproximadamente 45.000 hombres y mujeres, lo que supone
el 61% del total; la FUTER es una organizacin
activa, til y eficiente, cuya base fundamental
son los efectivos que la componen, por encima
de los sistemas de armas y cuya vocacin es
servir a la sociedad espaola, a la que ofrece un
bien muy valorado por esta en la actualidad: la
seguridad; las prioridades fundamentales de la
FUTER pasan por conseguir la mejor preparacin, instruccin y adiestramiento posible de sus
unidades y de su personal, as como la generacin del grueso de los distintos contingentes de
tropa en las condiciones idneas para cumplir

la misin encomendada; la buena preparacin,


instruccin y adiestramiento son claves fundamentales del xito; la seguridad del personal es
un objetivo permanente; alta disponibilidad de la
FUTER con miles de personas activadas o en alerta por la suma de sus actuaciones en el exterior
e interior de nuestras fronteras; alta capacitacin
profesional y personal de los componentes de la
FUTER; amplia experiencia en operaciones en el
exterior y prestigio internacional; en territorio nacional, la FUTER est preparada y colabora con
eficiencia con las autoridades civiles, de acuerdo
con sus medios y capacidades, en la prevencin
del terrorismo y en caso de emergencia, en catstrofes naturales o medioambientales; la FUTER
contina con su proceso de modernizacin y
racionalizacin en cuanto a sistemas de armas y
otros medios, procurando siempre tener el reloj
en hora; el reconocimiento de las Fuerzas Armadas por parte de la sociedad espaola es un
acicate para un continuo afn de superacin; la
integracin en la sociedad espaola del ET en general y de la FUTER en particular es una realidad;
y, finalmente, la FUTER est consiguiendo unos

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

111

Preparacin de la Fuerza

buenos resultados en su esfuerzo de captacin


y de retencin en filas de personal de tropa.
Para ello, han sido fundamentales las mejoras
en cuanto a calidad de vida y condiciones de
trabajo y el reconocimiento de la sociedad a la
labor de nuestros profesionales.
Por otro lado, en el marco del Plan General
de Comunicacin 2010, el Jefe de la FUTER
estableci para todas los mandos/unidades bajo
su mando unos objetivos a alcanzar a lo largo
del mismo.
Con el fin de incrementar la cultura de defensa, los objetivos marcados son: realizar unas
jornadas anuales con representantes de los MCS
locales y regionales para darles a conocer las
caractersticas y los aspectos ms destacados de
las Fuerzas Armadas y as conseguir un mayor
rigor en el tratamiento que dichos profesionales

112

dan a las noticias relacionadas con Defensa en


sus respectivos medios; establecer marcos de
cooperacin entre las unidades de la FUTER
y los MCS locales y regionales de su mbito
geogrfico que permitan el establecimiento de
colaboraciones con las que poder hacer llegar a
la sociedad aquellos contenidos que cada unidad, en su mbito, estime oportuno; promover
las relaciones de conocimiento mutuo entre las
unidades y los MCS mediante la realizacin de
visitas tanto a las instalaciones militares, como a
la redacciones, estudios de radio o de televisin;
establecer convenios de cooperacin con las
facultades de Comunicacin/Periodismo, donde
existan, para realizar jornadas con las que dar a
conocer a los futuros periodistas cmo son los
mandos/unidades de la FUTER y conseguir con
ello que, cuando desarrollen su labor profesional

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Nivel Operacional y Tctico

en las distintas redacciones, puedan informar a


la sociedad con un mayor conocimiento sobre
todas aquellas noticias relacionadas con Defensa; impulsar la difusin y la participacin en los
premios Ejrcito como forma de aumentar el
conocimiento que la sociedad tiene de las Fuerzas Armadas y de sus componentes; y, finalmente, impulsar el conocimiento y la participacin
ciudadana en los actos que con motivo de la
celebracin del Da de las Fuerzas Armadas se
organicen en cada ciudad para conseguir, con
ello, un mejor conocimiento de los Ejrcitos por
la ciudadana.
Con el fin de consolidar el Plan de Comunicacin Interna (PCI), los objetivos marcados
son: potenciar el PCI para que sea una verdadera cadena de transmisin de la informacin
ascendente/descendente; contribuir mediante la
remisin de datos a que se conozcan las actividades que realizan las unidades de la FUTER; dar a
conocer a las unidades de la FUTER el contenido
y la forma de acceso a la pgina Wise del Cuartel General de la FUTER donde poder consultar
aspectos de su inters; y, por ltimo, mantener
actualizada la pgina web de las unidades de la
FUTER en Intranet.
Con el fin de mejorar la imagen del ET en la
sociedad, los objetivos marcados son: realizar
una reunin de coordinacin anual con las oficinas de comunicacin de los mandos/unidades
de la FUTER subordinadas con las que unificar
criterios en el funcionamiento de las distintas
OC y en las relaciones con los MCS; rodar un
vdeo institucional con el que dar a conocer las
caractersticas ms destacadas de cada mando/
unidad y, finalmente, mantener actualizada la
pgina web de las unidades de la FUTER en
Internet.
CONCLUSIONES
Llegados a este punto, cabe concluir este artculo afirmando que la IP es una funcin de mando a todos los niveles, con plena participacin en
el planeamiento operativo y que tiene por finalidad principal contribuir a alcanzar el apoyo y la
comprensin de la sociedad espaola mediante
la difusin de una informacin oportuna y veraz.
Hoy en da, a ningn militar le es extrao ver a
representantes de MCS en mltiples circunstancias
(entrevistas, reportajes, das de medios/prensa en

ejercicios, ruedas de prensa, cobertura meditica


en actos militares) en las distintas bases, establecimientos o acuartelamientos militares en los
que se ubican los mandos/unidades de la FUTER.
Por ello, todos cuantos formamos parte de dichos
mandos/unidades podemos, en un momento dado
tener que participar en un programa de radio o
televisin o realizar una entrevista y, para ello,
debemos estar preparados para realizarlo en las
mejores condiciones y que su resultado sea lo ms
satisfactorio posible para la imagen que se quiere
ofrecer de la institucin militar.
En este punto, tampoco se debe olvidar el
aspecto, considerado fundamental, de la formacin en este campo del personal militar de
las unidades de la FUTER (Escaln Bsico del
SICOM), ya que, en la mayora de las ocasiones,
son precisamente ellos los que van a estar en
contacto con los representantes de los MCS.
Finalmente, a modo de colofn, cabe hacer
mencin a dos mximas que se emplean en el
mundo de la comunicacin y que debemos tener siempre presentes. Estas mximas rezan as:
Todo aquello que no sale en los medios de comunicacin, no existe, y la segunda, no menos
importante que la anterior: Si usted no cuenta lo
que hace, otros contarn lo que no hace.
BIBLIOGRAFA Y FUENTES
Ripoll Molines, Fernando. Comunicacin Social en
la Era Posmoderna.
Price, Vincent. Opinin Pblica.
Martn Serrano, Manuel; Piuel Raigada, Jos Luis;
Gracia Sanz, Jess, y Arias Fernndez, Mara Antonia. Teora de la Comunicacin.
Aladro Vico, Eva. Teora de la Informacin y la Comunicacin Efectiva.
NP 01/08 Plan de Comunicacin Externa de la
Fuerza Terrestre (cambio 2).
IG 08/05 del Sistema de Comunicacin del ET.
IT 04/06 Relaciones con los Medios de
Comunicacin.
Plan General de Comunicacin 2010.
Directiva 01/08 de Implantacin del Plan de Comunicacin Interna del ET.
Norma General 01/09 La Pgina WEB del ET en
INTRANET.
IT 11/07 La Pgina WEB del Ejrcito de Tierra.
Orientaciones OR7-022. Informacin Pblica en
Operaciones. n

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

113

APOYO SANITARIO
A EJERCICIOS DE INSTRUCCIN Y ADIESTRAMIENTO
Gabriel Jos Caballero Rodrguez. Teniente Coronel.
Cuerpo Militar de Sanidad (Medicina).

Nivel Operacional y Tctico

l personal mdico y enfermero disponible


para atender a la fuerza es inferior al deseable, por lo que es necesario un empleo
eficaz de los recursos sanitarios humanos y materiales. Aqu se estudian los documentos legislativos que regulan el apoyo sanitario, aclarando
algunos aspectos que pueden originar confusin.
En la actualidad en la Fuerza Terrestre por
su entidad, despliegue, variedad y nmero de
misiones que lleva a cabo, la asistencia sanitaria
tiene una importancia destacada. Por otro lado,
el personal sanitario disponible para atender las
necesidades es inferior al que sera deseable,
siendo necesario, pues, un empleo eficaz de
los recursos disponibles para poder atender las
diferentes actividades.
Este artculo pretende poner de nuevo de
actualidad, si bien nunca ha estado archivado,
el apoyo sanitario a ejercicios de instruccin
y adiestramiento en el Ejrcito de Tierra y en
territorio nacional, y trata de recordar y divulgar
la Norma General 01/07 (EME-DIVLOG) Apoyo
Sanitario a Ejercicios de Instruccin y Adiestramiento en el Ejrcito de Tierra, de enero de 2007,
del Documento de la Inspeccin General de Sanidad Evaluacin de riesgos y asistencia sanitaria
en ejercicios de instruccin y adiestramiento, de
30 de abril de 2007, y de la Instruccin Tcnica
12/07 (MAPER) Apoyo Sanitario a Ejercicios de
Instruccin y Adiestramiento, de diciembre de
2007, poniendo de manifiesto la validez de la
citada IT y aclarando algunos aspectos que pueden originar confusin.
La Instruccin Tcnica 12/07 sobre Apoyo
Sanitario a Ejercicios de Instruccin y Adiestramiento en el Ejrcito de Tierra (diciembre 2007),
tiene por objeto cumplimentar el Apartado 8
Desarrollo Normativo de la NG 01/07 (EMEDIVLOG) Apoyo Sanitario a Ejercicios de Instruccin y Adiestramiento en el Ejrcito de Tierra,
actualizando los mecanismos de apoyo sanitario
a las UCO, en ejercicios de tiro, instruccin y
adiestramiento en el ET y en territorio nacional,
adaptndolos al nmero limitado de personal
facultativo (mdico y enfermero) y a la simultaneidad de mltiples servicios, con criterios
de parecido nivel asistencial al mbito civil, y

racionalizando el uso de recursos humanos y


materiales, en funcin de la misin, del anlisis
del riesgo y de la economa de medios.
Las consideraciones expresadas en esta IT
12/07 son igualmente vlidas para la determinacin del apoyo sanitario a actividades militares
en territorio nacional que, no estando contempladas especficamente en los planes de instruccin y adiestramiento de las UCO, se estime
deben contar con apoyo sanitario, como son:
TGCF, competiciones deportivas militares, actos
y ceremonias militares, colaboraciones, etc.
El jefe de la UCO es el responsable del apoyo
sanitario de su unidad, independientemente de
la dotacin de personal de que disponga. Para
cada ejercicio de tiro, instruccin y adiestramiento, el jefe de la Unidad de Sanidad de la
UCO elaborar una propuesta de empleo del
servicio de sanidad que, una vez aprobada por
el jefe de la UCO, se convertir en la orden de
empleo del servicio. Para elaborar un protocolo de actuacin, que ser especfico para cada
ejercicio, deben tenerse en cuenta los medios
propios disponibles y los apoyos sanitarios externos que puedan recibirse y, cuando el riesgo
real de un ejercicio sea mnimo, segn los datos
estadsticos de lo ocurrido en el pasado, no se
movilizarn recursos sanitarios asistenciales si
no es totalmente necesario, siendo en muchos
casos suficiente con alertar a las entidades de
asistencia de emergencia y a los centros hospitalarios cercanos.
ANLISIS, ESTIMACIN Y
VALORACIN DEL RIESGO
El anlisis del riesgo ser realizado por el oficial de Sanidad, ya sea mdico o enfermero, que
se encuentre destinado en la UCO o que haya
sido encargado de la misin de apoyo sanitario. Para su elaboracin debe tenerse en cuenta,
adems de los factores mdicos asistenciales,
los factores de instruccin militar, coordinacin
y entrenamiento.
La estimacin del riesgo se sustenta en una
serie de factores, definidos con claridad y
evaluados continuamente, destacando por su
importancia:

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

115

Preparacin de la Fuerza

Nmero de participantes, tipo unidad.


Accidente durante un ejercicio programado o
no programado.
Tipo de ejercicio y equipo utilizado.
Nivel de instruccin de los participantes.
Tiempo de duracin del ejercicio completo.
Horas del ejercicio (da o noche).
Distancia al hospital.
Tiempos hasta una primera asistencia y una
asistencia especializada.
Tiempo de ingreso hospitalario.
Das de baja.
Lesiones y mecanismo lesional.
Otras circunstancias particulares (aliados
participantes, idioma de trabajo, etc).
Tras la valoracin de cada una de las actividades, segn la severidad del dao (gravedad
de las lesiones) y la probabilidad del dao (siniestralidad), se determinar el riesgo de dicha
actividad. Con carcter orientativo, pues no es
posible cuantificar cada hipottica situacin, se
aporta la Tabla I.
La valoracin del riesgo representa el paso
previo que servir para definir el nivel de apoyo
sanitario y la posterior propuesta de empleo del

Tabla I

Probabilidad

Severidad

Riesgo

Baja

Baja (1)
Media (2)
Alta (3)
Baja (1)
Media (2)
Alta (3)
Baja (1)
Media (2)
Alta (3)

Menor
Medio
Moderado
Medio
Moderado
Importante
Moderado
Importante
Intolerable

Media

Alta

1.- Lesiones que no implican ningn riesgo vital.


2.- Lesiones que pueden implicar lesiones funcionales.
3.- Lesin con riesgo vital.

1.- Lesiones que no implican ningn riesgo vital.


2.- Lesiones que pueden implicar lesiones funcionales.
3.- Lesin con riesgo vital.

servicio de sanidad. Este apartado, en general


bien explicado en la IT 12/07, incluye una clasificacin topogrfica de los tipos de lesiones
por armas de fuego, que puede inducir a la confusin. En dicha clasificacin se dice que la

Nivel Operacional y Tctico

lesin del parnquima pulmonar puede comportar neumotrax (sin riesgo vital elevado), en
algunos casos a tensin. La posible fragmentacin del proyectil y las pequeas esquirlas seas,
que suelen producirse por la alta probabilidad
con que la bala impacta sobre tejido seo, por
ejemplo costillas, provocarn en el interior del
trax numerosos nuevos proyectiles con trayectos diferentes. Si adems tenemos en cuenta el
efecto hidrodinmico sobre los rganos llenos de
lquido, y el corazn y los vasos son cavidades
llenas de sangre, cuando la bala supera la velocidad de 600 m/s en el momento del impacto,
dichos rganos suelen estallar. Concluiremos
por tanto que el neumotrax es la consecuencia
ms simple con la que nos vamos a enfrentar. En
un impacto sobre el trax debemos pensar en
neumotrax, en lesiones cardacas/vasculares y
en hemotrax entre otros daos, y que un hemitrax puede llenarse progresivamente de sangre
sin evidencia exterior de sangrado importante,
pudiendo recoger en su interior varios litros de
sangre y precipitando la muerte del accidentado
por intensa hemorragia interna.
Dentro de los parmetros que determinan la
estimacin del riesgo, se podra incluir, como
punto independiente, un apartado que recogiera
actividades que, por sus particularidades, pudieran precisar diferentes tipos de apoyos. En este
apartado podran ser incluidos: paracaidismo,
buceo, esqu, escalada, etc.

APOYO SANITARIO
La determinacin del nivel de apoyo sanitario
no parece estar claro, segn se deduce de la lectura de la matriz gua de la IT 12/07.
El riesgo de la actividad nos indica el apoyo sanitario que debe garantizar una correcta
asistencia de las lesiones que previsiblemente
se pueden producir en la actividad analizada.
El apoyo sanitario a una actividad no implicar obligatoriamente la presencia fsica con la
unidad apoyada. Pueden realizarse servicios en
alerta inmediata si la distancia o tiempo entre
el lugar del accidente y la unidad asistencial se
considera aceptable.
Para el diseo especfico del apoyo sanitario
en cada caso, se tendrn en cuenta las siguientes
consideraciones:
Medios. Toda ambulancia que atienda una
actividad de riesgo medio o superior debe ir
dotada con un equipo bsico normalizado de
asistencia mdica. En unidades especiales o
ejercicios en zonas especiales se adaptar el
material segn las caractersticas de la actividad.
Debe configurarse una lista de telfonos (militares
y civiles) que permita recibir o solicitar apoyo
sanitario inmediato. Deber dotarse al personal
de Sanidad del material de comunicacin
necesario (radio, telfono mvil, etc).
Se contar con mapas precisos donde figuren
las rutas de evacuacin, principal y alternativa,
y los centros de referencia.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

117

Preparacin de la Fuerza

Personal militar. Es fundamental que


todo el personal militar encargado de
la asistencia sanitaria est debidamente
formado en la atencin de las bajas de
combate. Se debe contar con una red de
sanitarios instruidos en compaas, y todo
el personal militar debe recibir instruccin
en la manipulacin del paquete de cura
individual y en conocimientos bsicos sobre
el uso del botiqun de compaa y el control
de hemorragias externas. (Tabla II)
En cada caso, se debe considerar el nivel
de riesgo real mediante su evaluacin, y se
efectuar una adecuada gestin del personal
sanitario disponible, evitando su empleo de
forma desproporcionada al riesgo evaluado (ver
tabla II). No ser necesaria en todos los casos
la presencia de personal facultativo (mdico o
enfermero) en los ejercicios de instruccin y
adiestramiento, incluidos los ejercicios de tiro.
Personal civil. Debido a la amplia distribucin
de las Fuerzas Armadas y la ubicacin de los

hospitales militares, es bastante probable la


asistencia final de un accidentado por un
hospital civil, por lo que deben establecerse
contactos directos con los establecimientos
sanitarios civiles ms cercanos a la zona
de actuacin, con los centros de referencia
segn indicaciones de las autoridades civiles
sanitarias, y tener alertados a los medios
bsicos y de altas prestaciones de evacuacin.
Evacuacin. Es la actividad ms importante en
todo el proceso de apoyo sanitario, por lo que
todos los esfuerzos realizados para conseguir
el mximo rendimiento y efectividad en su
ejecucin redundarn en una mejor calidad
asistencial. Normalmente se realiza con
medios terrestres, quedando reservados los
medios areos para la evacuacin de bajas con
prioridad uno o dos y en aquellas condiciones
geogrficas que hacen prcticamente imposible
la evacuacin por medios convencionales.
Como dato orientativo, la baja urgente debe
estar en un medio hospitalario en el tiempo mxi

Tabla II

Probabilidad Severidad

Riesgo

Apoyo sanitario (orientativo)

Sanitario
Baja

Media

Alta

118

Enfermero

Baja

Menor

Media

Medio

Alta

Moderado

Baja

Medio

Media

Moderado

Alta

Importante

Baja

Moderado

Media

Importante

Alta

Intolerable

Mdico

Valorar el apoyo sanitario, o actuar sobre los parmetros que


determinan la estimacin del riesgo para rebajarlo o valorar, en
ltima instancia, la conveniencia de la no realizacin de la
actividad.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

mo de una hora, que equivale a un desplazamiento de 30-40 Km para evacuaciones terrestres


y de 100-130 Km para evacuaciones areas, y
si la baja es de extrema gravedad el tiempo de
evacuacin debe ser reducido al mximo. La
urgencia del accidentado ser sealada por el
mdico o, en su ausencia, por el enfermero, que
haya valorado al herido; los plazos de evacuacin sern establecidos segn criterios tcnicos,
que prevalecern sobre cualquier otro, con la
intencin de que no se agrave el pronstico del
herido ni aumenten sus secuelas.
Ya el ttulo lo reduce a un apoyo sanitario
mnimo y en su desarrollo se reconoce la imposibilidad de cuantificar cada posible situacin,
aportando una tabla que solo tiene un carcter
orientativo. A priori, nadie puede adivinar la
severidad (gravedad) de la lesin que podemos
tener, por lo que casi siempre ser elevada la
misma a la calificacin de alta. Por ejemplo,
el impacto por un disparo accidental con arma
corta puede provocar lesiones no vitales, sin
repercusin funcional, y seran etiquetadas de
severidad baja, pero si la trayectoria hubiera
cambiado unos pocos mm el resultado podra
ser mortal. Por esto, independientemente de la
probabilidad con que se produzca un dao, la
severidad alta del mismo obligara a mandar a un
oficial mdico para cualquier actividad, incluso
para una marcha con vehculos, siendo tambin
imprescindible el apoyo de los medios civiles
sanitarios desplegados en el lugar. Por tanto,
ante esta situacin, la tabla de referencia puede
resultar de poca utilidad.

Para cada ejercicio de tiro, instruccin y adiestramiento, el jefe de la Unidad de Sanidad de la


UCO elaborar una propuesta de empleo del
servicio de sanidad que, una vez aprobada por
el jefe de la UCO, se convertir en la orden de
empleo del servicio.
Se elaborar con todo rigor y cuidado, y se
redactar de manera clara, concisa y precisa,
debiendo ser comprensible incluso para el personal sin formacin sanitaria. Es el documento
clave sobre el que se articula todo el desarrollo
tctico del Servicio de Sanidad, y representa la
base sobre la que el jefe de la UCO dicta su decisin para la ejecucin del ejercicio.
Dicha propuesta de empleo del servicio de
sanidad debe contener obligatoriamente los siguientes apartados:
Informacin
Misin.
Unidad participante, jefe de la unidad y
nmero de efectivos.
Fecha, hora y lugar del ejercicio.
Cartografa del lugar de ejecucin del ejercicio.
Informacin sanitaria
Anlisis sanitario de la informacin
cartogrfica, con especial estudio de vas de
comunicacin, caminos y carreteras de acceso,
trfico previsible, lneas de alta tensin, etc, y
de cuantas circunstancias puedan incidir en el
desarrollo del ejercicio.
Informacin de inteligencia sanitaria de la zona
de ejecucin.
Valoracin de riesgos y nivel asistencial.
Medios
Medios propios (personal y material).
Medios externos, incluso civiles, contratados
o no.
Hospital u hospitales de referencia, final de la
cadena de evacuacin.
Despliegue
Ubicacin del puesto de mando de sanidad
(coordenadas).
Ubicacin del puesto de socorro (coordenadas).
Si se precisa, ubicacin del puesto de carga de
ambulancias (coordenadas).
Ubicacin de la zona de aterrizaje de
helicpteros (coordenadas).
Vas de evacuacin terrestre, principal y
alternativas, y tiempos de evacuacin previstos.
Sern reconocidas las principales vas de

PROPUESTA DE EMPLEO DEL


SERVICIO DE SANIDAD
Segn se deduce de la NG 01/07, en su punto
6, el oficial responsable del Servicio de Sanidad de la UCO que tiene previsto realizar una
actividad, elaborar la propuesta de empleo del
servicio de sanidad y, si el ejercicio tiene previsto
su desarrollo en un centro nacional de adiestramiento (CENAD) o en un campo de maniobras
y tiro (CMT), tendr en cuenta e incluir en su
propuesta de empleo el plan de evacuacin vigente de los referidos centros o campos. Esta
propuesta de empleo, o protocolo de actuacin,
nos permitir adems una defensa razonable de
la actuacin realizada.

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

119

Preparacin de la Fuerza

comunicacin, su disponibilidad y viabilidad


confirmadas, y los tiempos de la posible
evacuacin comprobados.
Enlaces
Detallar frecuencias y tiempos de enlace,
si se usan medios radio, as como personas
enlazadas y nmero de telfonos mviles si
existe cobertura.
Nombre de la persona, generalmente el jefe
de los Servicios Sanitarios de Urgencias del
hospital de referencia, ya sea militar o civil
(final de la cadena de evacuacin prevista),
y modo de acceder a la misma (establecer,
mediante contacto previo, un punto de
contacto permanente) para facilitar la gestin
en el caso de una urgencia.
Nombre de la persona, generalmente el jefe
del Servicio de Evacuacin Area del lugar,
militar o civil, y modo de acceder a la misma
(establecer, mediante contacto previo, un punto
de contacto permanente).
Por tanto, es este documento el que, mediante
la valoracin detallada de los diferentes factores,
permite disear el apoyo sanitario.

informar sobre:
Medios humanos y materiales propios que
despliegan.
Fecha, hora, lugar y topografa del mismo.
Valoracin del riesgo.
Personas y medios de enlace.
Cualquier otra informacin que pueda incidir
en la eficacia del apoyo.

SITUACIONES ESPECIALES
Mencin especial requiere este apartado,
donde se recoge la manera de hacer frente a
diferentes situaciones con recursos limitados. Se
consideran las siguientes situaciones especiales:
Si no hay oficial mdico del Servicio de Sanidad
de escaln bsico, que tiene el cometido de
apoyo a la UCO, y s se dispone de oficial
enfermero con el mismo cometido, este ser el
jefe de la Unidad de Apoyo Sanitario y realizar
todas las misiones que se han descrito en la
parte general de la Instruccin Tcnica 12/07.
Si la UCO no cuenta con ningn oficial
de Sanidad que le apoye, ya sea mdico o
enfermero, el jefe de dicha UCO establecer
contacto con el jefe, coordinador y/o supervisor
de los servicios de emergencias locales,
provinciales y/o autonmicos, con la finalidad
de solicitar cobertura, por dichos servicios
de emergencia, para cada ejercicio de tiro,
instruccin y adiestramiento, estableciendo
el mecanismo de alerta y activacin para
cada misin en particular. A estos servicios de
emergencias se les adelantar datos precisos
del ejercicio definido. En este sentido, se les

120

OTRAS CONSIDERACIONES
El Apartado 13 de la IT 12/07, titulado Instruccin y Formacin, distingue entre los conceptos
de instruccin, definida como proceso docente
mediante el cual, se capacita al personal, no facultativo, para realizar una funcin, sin que esto
suponga ninguna titulacin oficial ni homologacin con ttulos civiles; y de formacin como
proceso docente mediante el cual, se actualizan
los conocimientos en una determinada rea del
personal facultativo, atendiendo a criterios de
formacin continuada, adecuando dichos conocimientos al mbito militar donde tienen que
aplicarse y en el tema de soporte vital bsico,
en sus distintas modalidades, el Ejrcito de Tierra
solo est capacitado para instruir a su personal,
porque no tiene la acreditacin docente en el
Ministerio de Educacin para dar titulaciones oficiales, de acuerdo con el ordenamiento jurdico
vigente. Sera idneo que existiera, a fecha de
hoy, mucho personal sanitario formado, pero dicha formacin sigue un curso lento. La actuacin
como sanitario en soporte vital bsico (SVB) del
personal instruido, no formado, podra originar
problemas mdico-legales, por lo que habra
que protocolizar el empleo de dicho personal
instruido, permitiendo su empleo en cierto tipo
de actividades.
En el Apartado 5 (Definiciones) de la IT 12/07
se define el soporte vital avanzado (SVA) como
un conjunto de tcnicas de estabilizacin de
una baja sanitaria que realiza personal facultativo, mdico o enfermero, con la finalidad de no
agravar su pronstico ni aumentar sus secuelas
durante la evacuacin. En el Apartado 11 (Situaciones Especiales) de la referida IT, se dice
que si no hay un oficial mdico del Servicio de
Sanidad de escaln bsico de apoyo a la UCO y
s se dispone de oficial enfermero con el mismo
cometido, este ser el jefe de la unidad de Apoyo Sanitario y realizar todas las misiones que

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Nivel Operacional y Tctico

se han descrito en la parte general


de esta IT. La lectura de estos dos
apartados pueden inducir a confusin ya que parece que acepta la
participacin de cualquiera de los
dos en el soporte vital avanzado y,
desde el punto de vista sanitario, el
enfermero/DUE no puede sustituir
en todas sus actuaciones al mdico, sobre todo en la indicacin de
medicamentos. En este sentido, el
RD 619/1998, de 17 de abril, por
el que se establecen las caractersticas tcnicas, el equipamiento
sanitario y la dotacin de personal,
de los vehculos de transporte sanitario por carretera, nos indica que
el personal que vaya a prestar soporte vital avanzado al menos sern
mdico y ATS/DUE, ambos con capacidad demostrable en transporte
asistido, tcnicas de reanimacin y
tcnicas de soporte vital avanzado
(SVA). Es cierto que la disposicin
adicional quinta de este RD dice
que el mismo no ser de aplicacin
a los transportes oficiales sanitarios realizados por las FAS, pero no
debemos olvidar que nuestro nivel
asistencial debe ser similar al civil y
por tanto, si bien no es exigible legalmente siempre debemos tender
a completar el equipo se SVA con
un mdico y un enfermero.
Para terminar, es importante considerar una variable que incide directamente sobre el apoyo sanitario
a ejercicios de instruccin y adiestramiento en el Ejrcito de Tierra, y
es el limitado nmero de oficiales
mdicos y enfermeros actualmente
destinados en dicho Ejrcito y su
tendencia progresiva a disminuir,
sobre todo los oficiales mdicos.
Los factores expuestos dibujan
un escenario en el que la IT constituye una herramienta muy valiosa y
cuya estricta aplicacin ser la clave para hacer frente a la situacin
descrita. n
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

121

LA

CTEDRA
GENERAL CASTAOS
Jos Miguel Arroyo Carrillo. Coronel. Infantera.

Nivel Operacional y Tctico

La ctedra General Castaos, creada por iniciativa del


Cuartel General de la Regin Militar Sur y vinculada con
la ciudad de Sevilla y su Capitana General, constituye
una plataforma cultural cvico-militar para el estudio
y la investigacin de los temas histricos, artsticos y
culturales de Espaa y los pases de raz cultural hispana.
La Ctedra ha transformado sus actividades para
incrementar su utilidad en el mbito de la preparacin
y generacin de unidades para su puesta a punto para
el cumplimiento de las misiones asignadas al Ejrcito
espaol.

n el ao 1989 y por iniciativa del Cuartel


General de la Regin Militar Sur, se cre la
ctedra General Castaos con la finalidad de
constituir una plataforma cultural cvico-militar,
que favoreciera el estudio y la investigacin de
los temas histricos, artsticos y culturales de Espaa y los pases de raz cultural hispana. Histricamente la Ctedra ha permanecido vinculada
con la Capitana General, donde tiene su sede,
con el objetivo de mantener e incrementar, en
lo posible, las relaciones culturales del mundo
militar con el civil de la ciudad de Sevilla.
ADAPTACIN A LOS NUEVOS TIEMPOS
El gran cambio experimentado en los ltimos
aos por las Fuerzas Armadas como consecuencia del entorno tan cambiante en que se desarrollan sus misiones y en concreto la transformacin
de este Cuartel General de la Fuerza Terrestre,
asumiendo nuevos cometidos, ha obligado a
modificar las dimensiones del mismo, as como
la dedicacin y exigencia de su personal. La Ctedra, consecuentemente, ha de buscar nuevas
propuestas que se adapten ms a las actuales
necesidades del Cuartel General, transformando
sus actividades para incrementar su utilidad en
este mbito de la preparacin y generacin de
unidades para su puesta a punto para el cumplimiento de las misiones que al Ejrcito espaol le

son asignadas. Ha sido necesario, pues, exponer


a los miembros del Consejo Directivo estas necesidades de cambio de la Ctedra y hacerles
cmplices del nuevo modelo que desde el punto
de vista de Fuerza Terrestre sera deseable. Con
las lgicas reticencias que cualquier cambio conlleva y sobre todo despus de ms de veinte aos
con un sistema determinado, el Consejo Directivo asumi unnimemente la nueva orientacin,
exigiendo que, en lo posible, se mantuviera el
alto nivel de participantes que hasta ahora ha
tenido. Durante el pasado ao se propusieron
temas de inters para futuras jornadas al Consejo
que fueron aprobados e inicindose los trabajos
para su organizacin.
Las primeras jornadas que, bajo este formato,
se han desarrollado han sido sobre Liderazgo,
dirigidas a cuadros de mando de la Fuerza Terrestre, profesores universitarios y alumnos de
posgrado de las universidades de Sevilla y a profesionales de la empresa, y en las que los ponentes tenan la misma procedencia. Las jornadas
se dividieron en dos paneles. El primer da, el
panel estuvo a cargo de estudiosos del tema que,
tomando como hilo conductor la definicin de
liderazgo, analizaron sucesiva y respectivamente,
los argumentos a favor y en contra en cuanto a
la posibilidad de aprender y entrenar las distintas cualidades del lder. En los tres talleres que

REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

123

Preparacin de la Fuerza

siguieron al panel, los participantes, distribuidos


en grupos mixtos, profundizaron en lo expuesto
en el panel. El segundo da, con un formato similar al primero, panel seguido de talleres, estuvo
dedicado a la exposicin de las experiencias.
En noviembre de 2010 se organizaron unas
jornadas sobre Afganistn, dirigidas inicialmente a cuadros de mando de Fuerza Terrestre y a
profesores y alumnos de posgrado de las universidades de Sevilla. El objetivo de las mismas
era dar a conocer, de forma amplia, el origen,
evolucin y situacin actual del problema, as
como su posible desarrollo futuro. El primer da
se expusieron los antecedentes histricos y la
situacin geopoltica del conflicto; el segundo,
en una mesa redonda, se examinaron distintos
puntos de vista sobre el futuro posible; las jornadas finalizaron con una conferencia sobre las
Fuerzas Armadas Espaolas en Afganistn.
COMPOSICIN
En la ctedra General Castaos estn representadas instituciones de diversos mbitos de la
ciudad de Sevilla:
De la Administracin Pblica.
Junta de Andaluca.
Ayuntamiento.
Diputacin Provincial.
Empresariado.
Fundacin Sevillana-Endesa.
Fundacin Cruz Campo.
Universidad.
Universidad de Sevilla.
Universidad Pablo de Olavide.

Instituciones.
Real Maestranza de Caballera de Sevilla.
Destacadas personalidades del mbito cultural y acadmico.
Estas instituciones y personalidades colaboran
en las actividades que se desarrollan bien aportando ideas, propuestas concretas o apoyos a los
eventos, bien patrocinando aquellas actividades
que requieran participacin econmica o de
otro tipo.
Para facilitar el desarrollo de estas actividades,
la Ctedra se constituye, de forma permanente,
en un Consejo Directivo y una Secretara. El Consejo Directivo est compuesto actualmente por
el presidente, Teniente General Jefe de la Fuerza
Terrestre, el vicepresidente, General Jefe de la
Jefatura de Intendencia Econmico Administrativa, y un nmero de vocales, pertenecientes a las
instituciones citadas anteriormente. La Secretara
como rgano auxiliar del Consejo, est compuesta por un coronel o teniente coronel (Secretario)
y personal civil y militar destinados en Cuartel
General de la Fuerza Terrestre. Eventualmente
pueden nombrarse vocales colaboradores, designados por el propio Consejo, para participar
en la preparacin u organizacin de determinadas actividades que por su complejidad o por
tratarse de temas muy especficos lo requieran.
Igualmente cuando la actividad comporte liquidaciones econmicas se constituir una comisin
delegada para estos asuntos. En estos casos, el
Presidente de la Ctedra comunicar al Consejo
Directivo la constitucin y disolucin de estas
comisiones.

Nivel Operacional y Tctico

FUNCIONAMIENTO
El Consejo se rene con carcter ordinario en
Capitana General o en la sede de alguna de las
instituciones pertenecientes al Consejo Directivo
que lo solicite con la suficiente antelacin. En los
ltimos aos ha habido reuniones del Consejo en
la sede de la Real Maestranza de Caballera y en
la de la Fundacin Cruz Campo.
El Consejo se convoca en pleno, normalmente
dos veces durante el perodo acadmico que
se establezca, que suele coincidir con el curso
escolar.
Primera antes del inicio de actividades: Para
debatir y aprobar las propuestas de actividades
y para discutir y aprobar los presupuestos.
Segunda finalizado el ciclo acadmico: Para
evaluar los resultados y rendir cuentas.
Las funciones del Consejo Directivo son:
Aprobar y organizar actividades.
Aprobar los presupuestos.
Establecer contacto con las personas cuya
colaboracin se precise.
Concretar convenios, previa aprobacin, con
instituciones culturales.
Decidir el destino de los fondos remanentes,
en caso de disolucin de la Ctedra.
Modificacin, en su caso, del reglamento.
La Secretara tiene como cometidos:
Programar las actividades aprobadas por el
Consejo Directivo.
Organizar, preparar y distribuir los documentos
de la Ctedra.
Preparar los documentos tcnicos, como los
convenios de cooperacin con otras instituciones.

Redactar las actas de las juntas ordinarias y


extraordinarias del Consejo.
Relaciones con los medios de comunicacin
social.
Secretara cientfica y tcnica de las Jornadas
Nacionales de Historia Militar.
Servicio de Publicaciones de la Ctedra:
preparacin, supervisin, control y difusin
de las publicaciones.
Apoyo en la organizacin de las exposiciones
programadas.

ACTIVIDADES ANTERIORES
Las actividades que han venido desarrollndose desde su creacin han sido fundamentalmente:
Conferencias, coloquios y seminarios.
Jornadas Nacionales de Historia Militar, con
carcter de congreso cientfico.
Exposiciones documentales, pictricas.
Visitas a centros y lugares de inters cultural.
Publicacin conferencias, actas de jornadas/
congresos y otros trabajos de investigacin de
su incumbencia.
Convenios de cooperacin con otras instituciones culturales pblicas y privadas.
Conciertos musicales de distinto gnero.
Pregones y exaltaciones.
De las anteriores actividades, las Jornadas de
Historia pueden considerarse las ms importantes, ya que sus actas han sido publicadas y han
alcanzado un gran prestigio, siendo muy solicitadas por historiadores e investigadores. Igualmente, para los comunicantes, la publicacin de sus
trabajos significa un acicate de cara al futuro y

Preparacin de la Fuerza

un importante estmulo para continuar con sus


investigaciones histricas.
A continuacin se relacionan las realizadas
hasta la fecha:
I Jornadas 1991 (19 al 22 febrero)
(Aportaciones Militares a la Cultura, Arte y
Ciencia en el Siglo XVIII Hispanoamericano).
Director: D. Pedro Mora Piris, Coronel de
Infantera y Doctor en Historia.
II Jornadas 1992 (10 al 13 marzo)
(La Organizacin Militar en los Siglos XV y
XVI).
Directora: D. Esther Cruces Blanco, Directora del Archivo General de Andaluca.
III Jornadas 1993 (9 al 12 noviembre)
(Arquitectura e Iconografa Artstica Militar en
Espaa y Amrica. Siglos XV y XVIII).
Director: D. Emilio Gmez Piol, Catedrtico
de Arte Hispanoamericano de la Universidad
de Sevilla.
IV Jornadas 1994 (9 al 13 mayo)
(Fernando III y su poca).
Directores: D. Esther Cruces Blanco, Directora del Archivo General de Andaluca, y D.
Paulino Castaeda Delgado, Catedrtico de
Historia de Amrica de la Universidad de
Sevilla.
V Jornadas 1995 (9 al 12 mayo)
(El Mediterrneo, Hechos de Relevancia

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REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011

Histrico-Militar y sus Repercusiones en Espaa). Director: D. Alberto Daz Tejera, Catedrtico de Filologa Griega de la Universidad
de Sevilla.
VI Jornadas 1996 (6 al 10 mayo)
(Fuentes para la Historia Militar en los Archivos Espaoles).
Directora: D. Antonia Heredia Herrera, Directora del Archivo General de Andaluca.
VII Jornadas 1997 (5 al 9 mayo)
(El lejano Oriente Espaol: Filipinas Siglo
XIX).
Directores: D. Paulino Castaeda Delgado y D. Antonio Garca-Absolo Gonzlez, Catedrticos de Historia de Amrica
de las Universidades de Sevilla y Crdoba
respectivamente.
VIII Jornadas 1998 (11 al 15 mayo)
(Milicia y Sociedad en la Baja Andaluca.
Siglo XVIII y XIX).
Directores: Jos Juan Galn, Gerente de la
Fundacin Sevilla de Electricidad, D. Paulino
Castaeda Delgado, Catedrtico de Historia
de Amrica de la Universidad de Sevilla y el
Excmo. Sr. General D. Ignacio Marn Marina,
Jefe del Centro Regional de Historia y Cultura
Militar R.M. Sur.
IX Jornadas 1999 (24 al 28 mayo)
(El Emperador Carlos y su Tiempo).

Nivel Operacional y Tctico

Directores: D. Jess Miguel Palomero Pramo,


Profesor Titular de Historia del Arte de la
Universidad de Sevilla y D. Francisco Nez
Roldan, Profesor Titular de Historia Moderna
de la Universidad de Sevilla.
X Jornadas 2000 (13 al 17 noviembre)
(La Guerra de Sucesin en Espaa y Amrica).
D. Paulino Castaeda Delgado, Profesor Emrito del Departamento de Historia de Amrica
de la Universidad de Sevilla y D. Emilio Gmez Piol, Catedrtico de Arte Hispanoamericano de la Universidad de Sevilla.
XI Jornadas 2002 (11 al 15 noviembre)
(Milicia y Sociedad Ilustrada en Espaa y
Amrica, 1750-1800).
D. Paulino Castaeda Delgado, Profesor Emrito del Departamento de Historia de Amrica
de la Universidad de Sevilla.
XII Jornadas 2004 (13 al 17 noviembre)
(Las Guerras en el Primer Tercio del Siglo XIX
en Espaa y Amrica).
D. Paulino Castaeda Delgado, Profesor Emrito del Departamento de Historia de Amrica
de la Universidad de Sevilla.
XIII Jornadas 2006 (13 al 17 noviembre)
(La Era Isabelina y la Revolucin (1843-1875).

D. Paulino Castaeda Delgado, Profesor Emrito del Departamento de Historia de Amrica


de la Universidad de Sevilla.
XIV Jornadas 2008 (18 al 21 noviembre)
(El General Castaos y su poca).
D. Francisco Nez Roldan, Profesor Titular
de Historia Moderna de la Universidad de
Sevilla.
Igualmente la Ctedra celebra una serie de
actos ligados al devenir cultural del calendario
sevillano, como la Semana Santa, el Roco o la
Navidad.

FINANCIACIN
Los gastos que se ocasionan con motivo de las
diversas actividades de la Ctedra, se afrontan
con las asignaciones del Plan General de Accin
Cultural y con las aportaciones de los diversos
patrocinadores con que cuenta, tanto entre las
instituciones representadas en el Consejo, como
entre otras segn las necesidades. En los ltimos
aos los patrocinadores habituales con que ha
contado la Ctedra han sido: el Banco Bilbao
Vizcaya Argentaria, la Real Maestranza de Caballera de Sevilla, la Fundacin Sevillana Endesa y
la Fundacin Cruz Campo. n

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SUMMARY
FORCE PREPARATION SPECIAL EDITION

NATO, EUROPEAN UNION, EUROCORPS.


LAND FORCE UNITS CONTRIBUTION TO THE INTERNATIONAL
AGREEMENTS SIGNED BY SPAIN................................................................................. 6
Juan Fernando Linares Martnez. Major. Engineer Corps. Staff College Graduate.
This paper links the forces NATO Response Force and Battle Group and Eurocorps
too to which our units have to contribute to fulfill the agreements signed by our nation,
likewise the generation and preparation of the forces aforementioned

NATIONAL TERRITORY OPERATIONS.


SUPPORT TO CIVILIAN AUTHORITIES AND LAW ENFORCEMENT AGENCIES........ 12
lvaro Kromer Espejo. Major. Infantry. Staff College Graduate.
Description of the FUTER general guidelines for taking action in the national territory
in support of civilian authorities and law enforcement agencies, and account of various
missions accomplished in prevention and fight against forest fire, deactivation of improvised devices, in the scope of major events security, etc.

generation and preparation process of units to be


deployed to ZO IN the land force scope....................................................... 20
Antonio Ruiz Bentez. Colonel. Infantry. Staff College Graduate.
Presentation of the present generation process of FUTER units, from initial identification
of the capacities needed to the certification of the contingent before it is projected to ZO,
with special reference to the readiness plan and training sequence, and also to the specific
4+2 operational training period for each operation.

CIMIC units in operations: generation and missions.............................. 28


Juan Antonio Soto Gonzlez. Lieutenant Colonel. Infantry.
This article describes the generation process for CIMIC units in order to be integrated
into various contingents in ZO, the pre-assigned CIMIC team concept is detailed and an
overview through the main missions in several ZO is made.

versatility in readiness TO FACE conflicts diversity................................. 38


Pablo Delgado de Luque. Lieutenant Colonel. Infantry. Staff College Graduate.
Versatility in readiness is essential and implies innovation efforts and continuous and
flexible evolution in doctrine, organic, basic and advanced training and education, materiel and facilities to make our units able to adapt to the pace of new threats development.
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NEW TECHNOLOGIES IN THE PREPARATION OF UNITS......................................... 46


David Tarifa Ramrez. Major. Infantry. Staff College Graduate.
The contribution of new technologies to training and education will never replace reality: Training systems, simulators, hardware, software, contribute to training and education
of units and require an initial investment whose return is obtained by its continuous and
growing use, reducing costs and increasing effectiveness. However, we must define what
simulators must be bought, how many and where to place them.

gender perspective in LAND force................................................................... 54


Fernando Snchez Prez. Major. Infantry. Staff College Graduate.
It is urgent the need to add a gender perspective in peacekeeping operations, and that
the personnel participating in them would get a specific training on protection, special
needs, and womens and childrens human rights in conflict zone. The presence of women
in contingents is essential for accessing to women population in ZO, in Afghanistan for
instance.

civic responsability model campaign........................................................... 62


Toms Garca Palacios. Lieutenant Colonel. Infantry. Staff College Graduate.
Miguel ngel Lpez de Lerma Caldern. Lieutenant Colonel. Infantry.
The soldier must have an optimal operational preparation and an adequate moral and
cultural education. To increase security to face threats such as drugs, alcohol, and to
promote leadership and motivation, the Military Campaign of FUTER Civic Responsibility
Model was developed. The involvement of the commander and promoting leadership and
exemplary, including healthy life guidelines, are its success key.
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011129

new challenges for inteligence. preparation for operations............ 68


Emilio Tom Delgado. Lieutenant Colonel. Artillery
In COIN the success is achieved by gaining the favor of the population, not avoiding
the existence of insurgent groups that demands a great preparation in order to anticipate
and counteract their hostile actions.
Preparation and awareness of all personnel for operations is based on the use of security
regulations, the knowledge of local culture, and information awareness. Preparation of
intelligence agencies will qualify them to carry out their specific duties of intelligence,
counterintelligence and security.

GENERATION OF COMMAND AND CONTROL ASSETS FOR zo............................. 74


Pedro Corts Ruiz. Major. Signal Corps.
A general view of the CIS assets used in ZO, as well as technical and tactical instruction
of the personnel projected there. It is focused on an update workshop of CIS equipment
which is not issued to their unit of origin, exercises that put into practice the procedures
to adapt the use of the equipment to the different peculiarities of each deployment zone,
as well as the techniques, tactics and procedures used in them.

ELECTRONIC WARFARE (EW) IN OPERATIONS OF PROJECTION............................ 78


Jos Manuel Fernndez Garca. Colonel. Signal Corps. Staff College Graduate.
EW is a basic mean to obtain information and protect our forces. Interoperatibility and
a common doctrine and procedures among the units taking part in operations must be
considered when designing and exploiting assets that also must have a modularity to make
them suitable to be employed in any type of scenario and with the required opportunity.

KITS FOR TRAINING AND EDUCATION. A PROVISIONAL SOLUTION................... 84


Ignacio Olazbal Elorz. Lieutenant Colonel. Cavalry. Staff College Graduate.
This article deals with the solution that the CGFT has taken to face a scenario of economic difficulties, the challenge of training and prepare units that make up the contingents
abroad, with assets that are not issued in national territory.
Land Force has centralized the available means, building training and education kits
out of materiel that will be found by the units in ZO and which are not organic to the
units in TN, and the article also details the maintenance system adopted to guarantee the
necessary operational capacity of these kits.

LEGAL FRAMEWORK FOR THE LAND FORCE IN OPERATIONS ABROAD................ 94


Carlos Meln Muoz. Colonel. Auditor.
ngel Serrano Barbern. Lieutenant Colonel. Auditor.
Jos Romero Muros. Lieutenant Colonel. Auditor.
The Organic Law on National Defense considers the operations that the Armed Forces
carry out abroad, distinguishing between those directly related to the defense of Spain
or national interest, and other operations. Within its legal framework the previous stage
to deployment and the stage of deployment in ZO must be distinguished, due to the fact
that the power to take disciplinary actions over personnel integrating the contingent, and
the legal status of the members of the force in connection with the State in which the
operation is being carried out.
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THE IMPORTANCE OF PUBLIC INFORMATION


IN THE LAND FORCE FRAMEWORK........................................................................ 104
Enrique ngel Costas Rodal. Major. Infantry.
The Land-Force Headquarters Public Information Office, as a specialized agency in the
management of public information, is the main adviser to the Land-Force Commander in
this matter, and to all personnel under his authority who has any relation with the media,
all this said in the framework of the new Army Communication System that regulates all
the activities related to external communication, internal communication, public relations,
protocol and image.
Now public information doesnt limit itself to relations with the mass media, but also
includes other fields such as public relations and protocol, advertising and a personalized
human attention.

MEDICAL SUPPORT TO TRAINING AND EDUCATION EXERCISES......................... 114


Gabriel Jos Caballero Rodrguez. Lieutenant Colonel. Military Health Corps. Medicine.
The available medicine and nursing specialist personnel to treat the force is inferior to
desirable, so it is necessary an effective use of the human and materiel health resources.
Here the legislation that regulates the health support is studied, clarifying some aspects
that could mislead.

GENERAL CASTAOS CHAIR................................................................................... 122


Jos Miguel Arroyo Carrillo. Colonel. Infantry.
General Castaos Chair, created upon the initiative of the South Military Region and
linked with the city of Seville and its Capitana General (Sevilles General Command),
constitutes a cultural civic-military platform for the study and investigation of historical,
artistic and cultural themes of Spain and countries with Hispanic roots. The chair has
transformed its activities to increase its interest in the field of preparation and generation
of units to its adjustment to fulfill the missions assigned to the Spanish Army.
REVISTA EJRCITO N. 842 EXTRAORDINARIO MAYO 2011131

EJRCITO EXTRAORDINARIO MAYO 2011- ao LXXII -nm 842

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