ALIMENTACION
ALIMENTACION
ALIMENTACION
Departamento de Psicología
TESIS DOCTORAL
DIRECTORES: Dr. D. Luis Beato Fernández y Dr.D. José Miguel Latorre Postigo
1
AGRADECIMIENTOS
3
A Eduardo
A mis padres
5
Basta ya de imágenes gastadas,
Imaginar, recordar.
7
ÍNDICES
ÍNDICE
ÍNDICE............................................................................................................................................ 9
I.INTRODUCCIÓN ......................................................................................................................... 23
9
ÍNDICES
10
ÍNDICES
Método...................................................................................................................................... 114
11
ÍNDICES
V. DISCUSIÓN............................................................................................................................. 261
12
ÍNDICES
13
ÍNDICES
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 17. Ansiedad rasgo y estado (STAI) y grupos diagnósticos .............................. 144
Tabla 20. Ambiente de tensión en casa según diagnóstico. N (%) ............................ 147
Tabla 22. Tipo de violencia por parte del padre según diagnóstico .......................... 149
14
ÍNDICES
Tabla 23. Tipo de violencia por parte de la madre según diagnóstico. N (%) ............. 150
Tabla 24. Tipo de violencia por parte de los hermanos según diagnóstico. N(%) ...... 150
Tabla 25. Violencia por parte del padre según diagnóstico (dicotómica). N (%) ........ 151
Tabla 26. Violencia general en la familia según diagnóstico. N (%) ........................... 151
Tabla 27. Indiferencia por parte del padre según diagnóstico. N (%) ........................ 153
Tabla 28. Indiferencia por parte de la madre según diagnóstico. N (%) .................... 153
Tabla 29. Indiferencia por parte de los hemanos según diagnóstico. N (%) .............. 154
Tabla 31. Control por parte del padre según diagnóstico. N (%) .............................. 155
Tabla 32. Control por parte de la madre según diagnóstico. N (%) ........................... 156
Tabla 33. Control por parte de los hermanos según diagnóstico. N (%) .................... 156
Tabla 34. Exigencia por parte del padre según diagnóstico. N (%) ............................ 157
Tabla 35. Antipatía hacia el padre según diagnóstico. N (%) .................................... 158
Tabla 36. Antipatía hacia la madre según diagnóstico. N (%) ................................... 158
Tabla 37. Antipatía hacia los hermanos según diagnóstico. N (%) ............................ 159
Tabla 39. Diferencia de medias en el EAT entre los diferentes grupos. ANOVA.
Comparaciones múltiples (Scheffé) .............................................................................. 161
Tabla 47. Variable dependiente: Subescala Ineficacia (IN) EDI. Comparaciones múltiples
(Scheffé). .............................................................................................................. 169
Tabla 54. Variable dependiente Subescala Inseguridad Social (SI) EDI. Comparaciones
múltiples. (Scheffé) ............................................................................................... 175
Tabla 59. Comparaciones múltiples Variable dependiente: BSQ. (Scheffé) ............... 180
Tabla 60. Puntuaciones medias en las subescalas del EMBU según los diferentes
subgrupos diagnósticos: Media (95% IC). ............................................................... 182
16
ÍNDICES
Tabla 62. Análisis de Regresión Múltiple Influencia del EMBU sobre la Ansiedad Estado
...................................................................................................................................... 201
Tabla 63. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU sobre la Ansiedad Rasgo
...................................................................................................................................... 202
Tabla 66. Análisis de regresión múltiple: Subescala Rechazo del EMBU y subescalas del
EDI controlando el efecto de la ansiedad................................................................ 206
Tabla 67. Análisis de regresión múltiple: Influencia de la subescala Afecto del EMBU
sobre las subescalas del EDI. Coeficiente estandarizado β. ......................................... 207
Tabla 69. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU en las puntuaciones de la
Subescala de síntomas BITE.......................................................................................... 209
Tabla 70. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU en las puntuaciones del
BITE (Suma), controlando el efecto de la ansiedad. ................................................. 209
Tabla 71. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU en las puntuaciones del
BSQ ............................................................................................................................... 210
Tabla 77. Nivel de estudios según diagnóstico. Frecuencia (Porcentaje) .................. 216
Tabla 78. Nivel de Estudios del padre según diagnóstico ......................................... 217
Tabla 80. Estudios del Padre según diagnóstico. Frecuencia y porcentaje. ............... 219
17
ÍNDICES
Tabla 81. Estudios de la Madre según diagnóstico. Frecuencia y porcentaje. ........... 221
Tabla 82. Medias del tiempo de evolución según diagnóstico ................................. 223
Tabla 85. Comienzo del consumo de alcohol en relación con el TCA según diagnóstico.
Frecuencia y porcentaje ........................................................................................ 225
Tabla 93. Relaciones Familiares según diagnóstico. Frecuencia y porcentaje ............ 230
Tabla 102. Violencia Madre según diagnóstico. Frecuencia y porcentaje. ................ 237
Tabla 112. Control por parte del padre según diagnóstico ...................................... 243
Tabla 113. Exigencia Padre según diagnóstico. Frecuencia y porcentaje .................. 244
Tabla 116. Diferencia entre las puntuaciones medias de las subescalas del EDI al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ..................... 248
Tabla 117. Diferencia entre las puntuaciones medias de las subescalas del EDI al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1). II. ................ 249
Tabla 118. Diferencia entre las puntuaciones medias del BITE al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ............................................................. 250
Tabla 119. Diferencia entre las puntuaciones medias del EAT al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ............................................................. 250
Tabla 120. Diferencia entre las puntuaciones medias del BSQ al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ........................................................ 251
Tabla 121. Diferencia entre las puntuaciones medias del BDI al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ........................................................ 252
Tabla 122. Diferencia entre las puntuaciones medias del STAI (ST-Ansiedad Estado) al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ..................... 253
19
ÍNDICES
Tabla 123. Diferencia entre las puntuaciones medias del STAI (RS-Ansiedad Rasgo) al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ..................... 253
Tabla 124. Diferencia entre las puntuaciones medias del RSE al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1) ............................................................. 254
Tabla 127. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia de las subescalas del EMBU en la
evolución de la psicopatología alimentaria (EDI). I .................................................. 257
Tabla 128. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia de las subescalas del EMBU en la
evolución de la psicopatología alimentaria (EDI). II ................................................. 257
Tabla 129. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia de las subescalas del EMBU en la
evolución de la psicopatología alimentaria (BSQ). ................................................... 258
Tabla 130. Relación entre estilos de crianza y TCA, comparados con población control,
según estudios previos. ......................................................................................... 277
20
ÍNDICES
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 10. Medias en la Subescala de Afecto del EMBU en los diferentes grupos
diagnósticos ......................................................................................................... 189
21
ÍNDICES
Figura 27. Nivel de estudios del Padre en los diferentes grupos diagnósticos ......... 220
22
INTRODUCIÓN
I.INTRODUCCIÓN
23
INTRODUCIÓN
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (en adelante TCA), entre los cuales
están la anorexia y la bulimia nerviosas, constituyen un problema de salud emergente
que tiene un fuerte impacto en nuestra sociedad, y se han convertido en un
importante problema sanitario en muchos países desarrollados.
Dentro de los TCA se incluyen también formas clínicas menos típicas, que
forman un continuum desde la preocupación normal por el peso, hasta las alteraciones
más graves. La problemática de estos trastornos es tan variada y multifactorial, que
exige una atención y actuación que incluya los aspectos clínicos y familiares, pero
también culturales, sociales y especialmente, educativos.
25
INTRODUCCIÓN
Entre los TCA no especificados (en adelante TCANE) se incluye el Trastorno por
Atracón (en adelante TA), que se caracteriza por la existencia de atracones, como en la
Bulimia Nerviosa, pero sin conductas compensatorias para controlar el exceso de
aporte calórico.
Sin embargo, todas estas definiciones ofrecen más una descripción de los
síntomas que una comprensión del fenómeno. En cuestiones como las de por qué se
produce esta enfermedad, o qué factores la predisponen o la desencadenan, no se ha
alcanzado un consenso. Se sabe que la diversidad y complejidad de los trastornos de la
alimentación implican necesariamente la interacción entre los factores socio-
culturales, psico-biológicos y familiares, y también se conoce que un 50% de las
pacientes con AN desarrollan síntomas bulímicos o que algunas pacientes con BN
26
INTRODUCCIÓN
27
INTRODUCCIÓN
En 1860, Marcé, de París, escribió la obra "Nota sobre una forma de delirio
hipocondríaco consecutivo a las dispepsias", caracterizada principalmente por el
rechazo de los alimentos. Según Marcé, las jóvenes en el periodo de la pubertad - y
después de un desarrollo físico precoz- sufren la convicción delirante de que no
pueden o no deben comer.
Tanto Gull como Lassègue describieron los síntomas fundamentales del rechazo
a la comida: pérdida extrema del peso, amenorrea, estreñimiento y sometimiento al
ejercicio intenso. Ambos autores examinaron además la importancia de la familia,
tanto en los comienzos de la enfermedad como durante su evolución.
Es cierto que en el s. XX, y sobre todo desde los años cincuenta, se produce una
revolución conceptual y metodológica acerca de la AN a la que se llegó mediante un
largo proceso de contraste de teorías y escuelas. Durante este siglo, hubo corrientes
diferenciadas:
28
INTRODUCCIÓN
Para H. Bruch los pacientes con anorexia presentan una patología emocional
común: 1º) Perturbación entre imagen corporal y su concepto de cuerpo; 2º) Dificultad
para reconocer señales para nutrirse y 3º) Sentimiento de ineficacia en todas las
actividades de la vida. (Bruch H. , 1973)
Media eran frecuentes los banquetes, donde la ingesta desmesurada junto a los
vómitos eran la norma. El filósofo hispano romano Séneca afirma en su obra Ad
Marciam, XIX: “Vomitan para comer, comen para vomitar”.
30
INTRODUCCIÓN
31
INTRODUCCIÓN
En las últimas tres décadas, los estudios epidemiológicos sobre los TCA
realizados sobre población general y la utilización de pruebas psicométricas
homogéneas han empezado a mostrar datos significativos acerca de la epidemiología
de estos procesos.
95%= 3.4-5) para AN con criterios amplios (sin el criterio de amenorrea o de pérdida de
peso era de al menos el 15%). La tasa de incidencia de AN en mujeres entre 15 y 19
años fue de 270 por 100.000 personas-años. Es de destacar que la mitad de los casos
de AN no habían sido detectados por el Sistema de Salud.
En nuestro país, desde los años 80, varios estudios reflejan las tendencias de
prevalencia. Según la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), la AN
afecta al 1-4% de las adolescentes y mujeres jóvenes. Si tenemos en cuenta que hasta
un 50% de casos de AN pueden presentar síntomas de bulimia (y que a la inversa
también ocurre a menudo), se comprenderá mejor la dificultad de delimitación de
casos en los estudios epidemiológicos.
Los datos correspondientes a varones son más escasos: se estima que estos
trastornos son 10 veces menos frecuentes en el varón. Ruiz Lázaro en un estudio sobre
1.854 varones adolescentes, de 12 a 18 años, de hábitat urbano, y escolarizados,
encontró que un 3,3% puntuaba por encima del punto de corte en el EAT (Ruiz Lázaro,
1998). Si bien la diferencia de prevalencia entre hombre y mujer es abrumadora,
existen indicios de que estos trastornos se van haciendo más frecuentes en hombres.
35
INTRODUCCIÓN
valores de sensibilidad (p Ej., falsos negativos) por lo que es posible que las cifras que
presenten no reflejen de forma adecuada la realidad epidemiológica de estos
trastornos.
36
INTRODUCCIÓN
Tabla 1. Estudios epidemiológicos de la conducta alimentaria en España M.A. Peláez Fernández, F.J. Labrador Encinas, R.M. Raich
Escursell (2004). En http://www.editorialmedica.com/Cuad-71-72
Toro et al., Barcelona 1989 7º y 8º EGB BUP y VyM 12-19 706 M EAT-40 sí no no
(1989) COU
848 V
37
INTRODUCCIÓN
Raich et al., 5 ciudades 1991 EGB y BUP VyM 1.373 EEUU EAT-40 sí no no
(1992) catalanas, 3.544
EEUU España
38
INTRODUCCIÓN
Ruiz et al., Zaragoza 1997 7º y 8º EGB, ESO VyM 12-18 2.194 M EAT-40, EDI, sí sí sí
(1998) FP, BUP, COU 1.854 V CIMEC
Sáiz et al., Asturias 1997- ESO VyM 13-21 415 V 401 EDI sí no no
(1999) 1998 M
Martínez et Gijón 2000 ESO VyM 14-22 26 430 M 430 EAT-26 CIMEC- sí no no
al., (2000) (Asturias) V
et al., (2001)
39
INTRODUCCIÓN
Del Río et al., Sevilla 2001 ESO VyM 16 374 M 477 EAT-40, BSQ sí no no
(2001) V
40
INTRODUCCIÓN
476 V
Boletín CAM, CAM 2001 3º y 4º ESO 1º y 2º M 15-18 1.534 EAT-26 EDI-I, EDE sí no sí
(2002) Bach. FP (12 ed.)
Rojo et al., Valencia 1999 Escolares VyM 12-18 544 EAT-40, SCAN sí sí sí
(2003)
41
INTRODUCCIÓN
4. ASPECTOS ETIOLÓGICOS
42
INTRODUCCIÓN
43
INTRODUCCIÓN
del apetito y la saciedad), el IMC o incluso alguno de los síntomas centrales de estos
trastornos. Las preocupaciones por el peso y la silueta y la influencia del peso y la
silueta en la autovaloración han mostrado una heredabilidad moderada en una
muestra de 270 gemelas jóvenes que habían sido criadas en el mismo ambiente
(Spanos, Burt, & Klump, 2010).
esenciales sobre los que se puedan articular los futuros criterios diagnósticos para los
TCA. Los endofenotipos son componentes medibles que se encuentran en la
trayectoria entre la enfermedad y el genotipo. Un endofenotipo puede ser
neurofisiológico, bioquímico, endocrinológico, neuroanatómico, cognitivo o
neuropsicológico. Es heredable, se asocia con el trastorno psiquiátrico, se manifiesta
en el individuo independientemente del estadío de la enfermedad y se encuentra en
mayor proporción de familiares no afectos que en la población general. Están
involucrados en los posibles mecanismos biológicos y predicen la probabilidad de
padecer el trastorno. La ventaja de los endofenotipos es que se piensa implican a un
menor número de genes, lo que simplificaría la detección de los loci correspondientes.
(Bulik, Hebebrand, Keski-Rahkonen, Klump, & Reichborn-Kjennerud, 2007)
46
INTRODUCCIÓN
48
INTRODUCCIÓN
49
INTRODUCCIÓN
Hay una considerable evidencia (Sohlberg & Strober, 1994) de que algunos
rasgos de la personalidad pueden jugar un importante papel en la patogénesis de los
trastornos de la conducta alimentaria, en la expresión de los síntomas asociados a
ellos, en la evolución de la enfermedad o en la respuesta al tratamiento. Aunque no
puede hablarse de una única personalidad de la anoréxica, sí parece existir un núcleo
50
INTRODUCCIÓN
51
INTRODUCCIÓN
capacidad para dirigir la propia vida en base a objetivos y valores propios. Estas
características eran compartidas por otros trastornos mentales, por lo que su
especificidad para los TCA es baja. Las anoréxicas restrictivas se caracterizan por una
elevada persistencia y una relativamente mayor auto dirección, y las bulímicas, por
mayor búsqueda de novedades y la más baja auto dirección
4.3.2. Autoestima
Por otro lado, habría que señalar que en nuestra cultura occidental existe una
insatisfacción corporal normativa, muy generalizada en la población, que es, con
frecuencia, la que lleva a los pacientes a iniciar dietas restrictivas y ejercicio físico
intenso, con el objetivo de perder peso y que afecta sobre todo a mujeres, desde
edades muy tempranas, tan tempranas como los 7 años, hasta ya pasada la edad
madura. Sin embargo, sólo un pequeño porcentaje de estas mujeres desarrollan un
TCA. Entendemos pues, que lo que se correlaciona en mayor medida con los TCA es la
actitud menospreciativa hacia el propio cuerpo; y de nuevo, la coexistencia de otros
53
INTRODUCCIÓN
54
INTRODUCCIÓN
parte de los compañeros de escuela, o los problemas de relación con los padres.
Situaciones de fracaso personal, real o imaginario, en los ámbitos académico,
deportivo o afectivo en adolescentes con poca habilidad asertiva y de resolución de
problemas; o incluso una enfermedad somática pueden facilitar un proceso que se
hallaba latente con anterioridad (Toro & Vilardel, Anorexia Nerviosa, 1987).
55
INTRODUCCIÓN
relación más frecuente con la bulimia que con la anorexia de tipo restrictivo. Todavía
no se ha demostrado una conexión directa entre abusos sexuales u otra experiencia
traumática en la infancia, y el desarrollo posterior de un TCA, sin embargo, si parece
existir una extrema vulnerabilidad en el individuo para desarrollar trastornos
psiquiátricos, entre ellos trastornos de la alimentación. Además, la existencia de dichos
antecedentes dificulta el proceso de recuperación (Vanderlinden, Vandereycken,
Pieters, & Probst, 2003).
56
INTRODUCCIÓN
Rastam et al. encontraron que los trastornos afectivos eran muy prevalentes en
el grupo de anoréxicas, pero en el seguimiento 6-7 años después, sólo el 14% tenía un
trastorno depresivo. (Rastam, Gillberg, & Gillberg, Anorexia nervosa 6 years after
onset. Part II. Comorbid psyciatric problems., 1995). Parece que en la mayoría de
casos, los síntomas depresivos habían estado ligados a la psicopatología alimentaria
(una vez que el TCA tendía a ser menos severo, o a remitir, los síntomas depresivos
disminuían), más que aparecer como un factor causal. Y sólo en una minoría, el
trastorno afectivo precedía al TCA. Los mismos autores encontraron más síntomas
obsesivo-compulsivos en pacientes anoréxicas, que en controles.
57
INTRODUCCIÓN
58
INTRODUCCIÓN
Mientras hasta la mitad del siglo XIX el cuerpo femenino ideal se caracterizaba
por ser redondeado, voluminoso, con depósitos de grasa en caderas y muslos, unos
años después de la Segunda Guerra Mundial fue asentándose, primero en las clases
sociales elevadas, un ideal de belleza consistente en tener un cuerpo delgado, con el
mínimo depósito graso posible. Además, poco a poco, se fue añadiendo a ésto la
estigmatización de las personas con sobrepeso, que ocurre ya desde la infancia.
59
INTRODUCCIÓN
60
INTRODUCCIÓN
etiológica común. Por otro lado se ha observado que los deportistas tienen un mayor
riesgo de padecer TCA que la población general, sobre todo en deportes que propician
ese modelo corporal delgado, como la danza, la gimnasia rítmica, el patinaje artístico
(deportes estéticos) y otros deportes de élite. (Smolak, Murnen, & Ruble, 2000)
El mensaje del culto a la delgadez como ideal de belleza física y por los
conceptos que se asocian a ella, como éxito, libertad, control; llega a las adolescentes
no sólo por los medios de comunicación, sobre todo revistas “femeninas” y programas
de radio, sino también a través de la familia y del grupo de iguales, multiplicando su
efecto, y constituye así un factor de riesgo potente para los TCA. (Martínez-Gonzalez,
Gual, & Lahortiga, 2003)
61
INTRODUCCIÓN
distante y débil, (Bliss & Branch, 1960) o por otro lado, el modelo de familia
psicosomática de Minuchin con sobre implicación de los miembros, rigidez, y evitación
de conflictos, donde el paciente ejercería un papel facilitador de esta dinámica, que a
su vez reforzaría los síntomas.
M. Selvini (Selvini Palazzoli, Cirilo, Selvini, & Sorrentino, 1999) realizó una
descripción de la familia de la anoréxica, planteándola como una hipótesis basada en
sus observaciones como terapeuta familiar de pacientes con TCA durante 30 años.
Hemos de remarcar que ciertas características encontradas están, lógicamente, en
relación con el momento socio- cultural de la generación de aquellos padres. En este
estudio, los autores consideran el enfoque Tri generacional, pues la figura completa de
los padres como personas sólo se delinea con la reconstrucción de sus relaciones en su
familia de origen. Por su riqueza y por sus implicaciones en la terapia, pasamos a
describir dicho enfoque a continuación.
62
INTRODUCCIÓN
63
INTRODUCCIÓN
64
INTRODUCCIÓN
Algunas pacientes, que carecen de vínculo con la madre y con el padre, no han
disfrutado de la proximidad emocional y se caracterizan por la vivencia de una intensa
soledad.
65
INTRODUCCIÓN
Sin embargo, por otro lado, también se han hecho análisis críticos de este
intento de buscar un único modelo de familia típica, para una patología con expresión
clínica tan variada como son los TCA. El identificar un único modelo de familia que se
repita de un caso a otro resulta imposible. La realidad es mucho más compleja de
entender, entre otros argumentos por la obvia naturaleza multicausada de la
enfermedad, y por el hecho de que muchos de los estudios al respecto analizan hechos
pasados o presentes, desde una perspectiva actual, cuando ya se ha iniciado la
patología. No podemos observar la situación familiar previa al inicio del trastorno.
66
INTRODUCCIÓN
Algunos autores sugieren que la dinámica familiar puede tener un papel, más
en el desarrollo de psicopatología general que en el desarrollo específico de un
trastorno de la alimentación, puesto que las diferencias observadas en cuanto a
factores de riesgo entre individuos con BN y controles normales disminuyó cuando se
utilizaron como grupo control pacientes con otras patologías psiquiátricas (Fairburn,
Welch, & Doll, 1997)
Por otra parte, el contar con una familia monoparental, originada en la muerte,
separación, divorcio o abandono de uno de los cónyuges, sí parece influir en la mayor
probabilidad de desarrollar un TCA a medio plazo. Martínez-González ha relacionado
este hecho con la mayor frecuencia de comidas en solitario que realizarían los hijos de
estas familias, (lo que originaría una carencia en el modelado de los patrones de
alimentación) y, por supuesto, con el hecho de que la muerte de uno de los padres, o
67
INTRODUCCIÓN
agravación del trastorno en la hija. Por otro lado, la menor cohesión familiar o la baja
expresión de sentimientos también ocurren ante la presencia de otros estresantes en
las familias, por lo que no serían factores específicos de los TCA.
69
INTRODUCCIÓN
Otros autores, (Mac Coby & Martin, 1983.) distinguen únicamente dos
dimensiones: el afecto y el control.
70
INTRODUCCIÓN
Tabla 2: Estilos educativos según Mac Coby y Martin (1983), en “Anorexia Nerviosa”, L.
Rojo y G. Cava. (2003) Ariel Ed.
A pesar de la constante creencia de que los TCA se han precedido por algunas
actitudes parentales anómalas durante la crianza, existe poca evidencia al respecto.
Hay pocos estudios sistemáticos con grupos control, y existen discrepancias entre
ellos, quizá debidas a aspectos metodológicos, como los diferentes métodos de
valoración utilizados, variables socioculturales o la utilización de muestras clínicas.
71
INTRODUCCIÓN
de atención e hiperactividad, (Eddy, Toro Trallero, Salamero Baro, Castro Fornielles, &
Cruz-Hernández, 1999) personalidad tipo A, (Castro, De Pablo, Toro, & Valdes, 1999)
etc.
72
INTRODUCCIÓN
Lilenfeld et al. (1998) (Lilenfeld, Kaye, & Greeno, A controlled family study of
anorexia nervosa and bulimia nervosa: psychiatric disorders in first degree relatives
and effects on proband comorbidity., 1998)encontraron que los familiares de primer
grado de pacientes con TCA tenían un riesgo de anorexia nerviosa y de TCA subclínicos
entre 7 y 12 veces mayor que la población general, y mayor riesgo de depresión mayor
y trastorno obsesivo compulsivo, aunque el riesgo de estos dos últimos parecía ser
independiente de anorexia y bulimia. También objetivaron que el riesgo de consumo
excesivo de alcohol o drogas era más acusado en familiares de pacientes bulímicas que
en familiares de anoréxicas y de controles, y que el riesgo de familiares diagnosticados
de trastorno obsesivo de la personalidad era superior en anoréxicas. La agrupación de
TCA en familias con algún miembro que padezca anorexia o bulimia, refuerza la idea de
que existe una transmisión familiar de ambos tipos de trastorno, aunque el riesgo es
más alto en familias donde uno de los miembros está afectado de anorexia nerviosa.
74
INTRODUCCIÓN
5.1. DIAGNÓSTICO
Son los pediatras o los médicos de familia, en la mayoría de ocasiones, los que
suelen tener el primer contacto con el paciente. Las consultas iniciales pueden estar
condicionadas por el síntoma que más preocupa a la familia. La evaluación del
paciente anoréxico debe incluir una historia exhaustiva y un examen físico completo.
Las preguntas sobre el comportamiento en relación con el control del peso que
pueden ser útiles son de este tipo: ¿cómo manejan los adolescentes el control de su
peso?, ¿cuánto les gustaría pesar?, ¿cada cuánto tiempo verifican su peso?, ¿existe
algún comportamiento adelgazante del tipo de vómitos, abuso de purgantes, uso de
diuréticos o empleo de píldoras dietéticas? y ¿cuál es la imagen que tienen de sí
mismos?
77
INTRODUCCIÓN
6. EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
En gran parte de los casos los TCA no se presentan en estado puro. Las
pacientes reúnen algunos de los criterios diagnósticos incluidos en el CIE-10 ó en el
DSM-IV. La alarma se produce cuando se presenta pérdida de peso. A menudo la
familia observa cambios importantes en los hábitos de la alimentación (come poco y
con lentitud, trocea la comida en porciones pequeñas y la extiende por el plato) y
después de comer le cuesta mantener el reposo. Se sospecha que vomita, y/o
consume laxantes.
78
INTRODUCCIÓN
Tomando en cuenta las perspectivas a largo plazo, puede decirse que en este
momento ningún programa de tratamiento para anorexia nerviosa es completamente
eficaz. En un estudio de las personas tratadas por anorexia se encontró que cerca de la
mitad eran de peso normal y socialmente ajustadas después de cinco años. Después de
diez años, aunque sólo 9% tenía anorexia en aquel momento, la mayoría todavía comía
menos de lo normal o tenía bulimia nerviosa y un 2% eran obesos. (Striegel-Moore,
Schreibe, Pike, Wilfley, & Rodin, 1995).
El riesgo para la muerte prematura es dos veces más alto en los anoréxicos de
tipo compulsivo purgativo y en los que restringen sus dietas. Las personas en mayor
riesgo incluyen también a las que han estado enfermas durante más de seis años, las
79
INTRODUCCIÓN
que fueron obesas antes de que se volvieran anoréxicas, las que tenían trastornos de
la personalidad y los matrimonios disfuncionales.
En el caso de la BN existe más dificultad para definir los factores pronósticos del
curso de la enfermedad y de las recaídas, especialmente a largo plazo. Para Yager se
produce una recuperación espontánea, aunque poco estable, entre el 25 y el 30% de
las pacientes que llevan uno o dos años de tratamiento con reducción de atracones, y
de conductas purgativas y/o abuso de laxantes (Yager, Landsverk, & Edelstein, 1987).
Sin embargo, parece ser que el seguimiento de un programa intensivo durante un
periodo largo de tiempo mejora el pronóstico. El 60% se recupera, el 29% logra una
mejoría intermedia, el 10% empeora y el 1% fallece (Luka, Agras, & Schneider, 1986).
80
INTRODUCCIÓN
La mayoría de las pacientes afectadas por un TCA viven, al menos, con parte de
los miembros de su familia de origen. Por lo tanto, hemos de pensar que esta
convivencia, no sólo puede afectar al inicio del trastorno, sino también a su desarrollo
y evolución.
81
INTRODUCCIÓN
7.1.1. EMBU
Descrito por Parker en 1979, considera dos dimensiones básicas en las prácticas
de crianza: el cuidado y el control. (Parker, Tupling, & Brown, 1979). Por cuidado se
entiende el tono emocional de las relaciones paterno-filiales, y por control las prácticas
disciplinarias utilizadas para modelar la conducta de los hijos.
Parker, encontró que el estilo de crianza control sin afecto parecía ser un factor
de riesgo para trastornos psicóticos y sobre todo para algunos trastornos neuróticos,
como fobia social, neurosis depresiva, ansiedad y agorafobia. (Parker G. , 1984).
83
INTRODUCCIÓN
El EAT en sus dos versiones es, tal vez, el cuestionario auto aplicado más
utilizado. Las preguntas del EAT se contestan a través de una escala de seis puntos tipo
Likert. Los autores del EAT sugieren utilizar los siguientes puntos de corte para
identificar a los individuos con algún TCA: más de 30 puntos para el EAT-40 y más de
20 puntos para el EAT-26 y CHEAT-26.
84
INTRODUCCIÓN
85
INTRODUCCIÓN
La prueba de bulimia fue diseñada para detectar los riesgos para presentar este
trastorno en la población general. Posteriormente Thelen y cols. , desarrollaron la
versión revisada (BULIT-R), actualmente más utilizada que la original. (Thelen, Farmer,
Wonderlich, & Smith, 1991). El BULIT-R contiene 36 ítems diseñados para medir los
síntomas de acuerdo al DSM III para BN, pero tiene validez para medir BN de acuerdo a
los criterios del DSM-IV. El nivel de estudios requerido para contestarlo es medio-
superior. En España, la versión adaptada y validada en nuestro medio del BULIT-R fue
realizada por Berrios-Hernández MN, et al. (Berrios-Hernandez, Rodríguez-Ruiz, Perez,
Gleaves, Maysonet, & Cepeda-Benito, 2007). Se puntúa de acuerdo a una escala de
cinco puntos tipo Likert. De los 36 ítems, sólo 28 son utilizados para determinar el
puntaje final, cuyo total puede fluctuar entre 28 y 140. El punto de corte para BN es de
104 puntos. El autor del instrumento informa que tiene una confiabilidad de prueba-
posprueba del 95%, con una alta consistencia interna (98%); y una habilidad predictiva
de falsos negativos del 80% y de falsos positivos del 40%. La sensibilidad es del 91% y la
especificidad del 96%; con un poder predictivo positivo del 81% y un poder predictivo
negativo del 98 (Welch, Thompson, & Hall, 1993). El BULIT-R puede utilizarse como una
86
INTRODUCCIÓN
medida global para evaluar el tratamiento en pacientes con BN, como medida de la
severidad de la sintomatología bulímica o como prueba de cribado. Se sugiere que los
investigadores que utilicen el BULIT-R como prueba de screening deberían utilizar un
punto de corte más bajo (>85 puntos) para reducir el potencial de falsos negativos.
87
INTRODUCCIÓN
Se califica por una escala de siete puntos: cuanto más alta es la puntuación,
mayor es la severidad del trastorno. Luce y Crowther, encontraron en esta prueba una
consistencia interna excelente. (Luce & Crowther, 1999)Sin embargo, el EDE-Q se
vuelve menos confiable al aumentar la severidad de la sintomatología del trastorno
alimentario.
7.2.7. SCOFF
88
INTRODUCCIÓN
89
INTRODUCCIÓN
90
INTRODUCCIÓN
A lo largo de la historia de los TCA han sido varios los modelos teóricos sobre
los que se han fundamentado las terapias. Ninguna de ellas debe excluir a las
restantes, puesto que son complementarias.
cuenta de calorías de por lo menos 1,500 al día para reducir las posibilidades de
epigastralgia, diarrea, retención de líquidos y fallo cardíaco. Con el tiempo, se le llegan
a dar al paciente alimentos que contienen hasta 3,500 calorías o más al día. Los
suplementos alimenticios generalmente no se recomiendan porque el paciente debe
reasumir los modelos de comer normales cuanto antes. La alimentación intravenosa se
necesita o se recomienda cuando la condición del paciente sea potencialmente mortal.
Estos tipos de alimentación invasiva nunca deben emplearse como una forma de
castigo durante la terapia conductual.
El proceso requiere entre cuatro y seis meses, durante los cuales el paciente se
acostumbra a tres comidas diarias, incluyendo alimentos que previamente evitaba.
Se acepta generalmente que los fármacos nunca deben ser el único tratamiento
de estos problemas, sólo ocasionalmente se asocian a las técnicas de modificación de
conducta. Ninguna de las terapias farmacológicas ha probado ser eficaz en el
92
INTRODUCCIÓN
En la BN, sin embargo, parece que se obtienen mejores o más claros resultados
con la terapia farmacológica. Está bastante estudiado el efecto terapéutico de los
antidepresivos, especialmente ISRS, que actúan disminuyendo el impulso a comer y el
número de atracones, y mejoran la clínica afectiva y la impulsividad que suelen
93
INTRODUCCIÓN
94
INTRODUCCIÓN
95
INTRODUCCIÓN
96
INTRODUCCIÓN
-El intervalo mensual entre sesiones tenía por objeto el dejar tiempo para que
los efectos de la intervención terapéutica modificaran la organización de la familia.
98
INTRODUCCIÓN
100
INTRODUCCIÓN
101
INTRODUCCIÓN
102
JUSTIFICACIÓN
II. JUSTIFICACIÓN
103
JUSTIFICACIÓN
II.JUSTIFICACIÓN
Por otra parte, la importancia que las relaciones familiares pueden tener en la
evolución del cuadro clínico hace que la terapia familiar sea un aspecto clave en el
tratamiento de esta patología, (Espina Eizaguirre, Ortego Sáenz de Cabezón, Ochoa de
Alda, & Apellaniz, 2000) sobre todo en población adolescente, que en su mayoría aún
convive con su familia de origen. Así, se ha puesto de manifiesto que el entorno
familiar tiene una importancia decisiva a la hora de superar el trastorno de la
alimentación.
la influencia que estas pueden tener en su evolución. Hasta donde llega nuestro
conocimiento, no existen estudios previos que relacionen los estilos de crianza con la
evolución de los TCA.
106
OBJETIVOS E HIPÓTESIS
III.OBJETIVOS E HIPÓTESIS
107
OBJETIVOS E HIPÓTESIS
1. OBJETIVOS
PRINCIPAL
SECUNDARIOS
2. HIPÓTESIS
109
MATERIAL Y MÉTODOS
111
MATERIAL Y MÉTODOS
MUESTRA.
PRIMERA FASE:
113
MATERIAL Y MÉTODOS
SEGUNDA FASE.
Del grupo inicial de pacientes, se seleccionaron aquellos a los que se les había
realizado un seguimiento al año. Se excluyeron aquellos pacientes que en el momento
de corte del estudio no tenían suficiente evolución.
MÉTODO
2.1. PROCEDIMIENTOS.
Se realizó un muestreo sucesivo: a todos los sujetos que acudieron para recibir
tratamiento en la UTCA del Hospital General de Ciudad Real entre el 1 de enero de
2004 y el 31 de diciembre de 2006 se les entrevistó siguiendo la entrevista diagnóstica
para el DSM-IV, incluyéndose en el estudio aquellos que aceptaron de forma voluntaria
su participación y reunían criterios diagnósticos de TCA.
Todos los pacientes fueron informados sobre las características del estudio y se
les aseguró la confidencialidad de los datos. No fue precisa la aprobación del comité
ético porque las actuaciones formaban parte de la exploración rutinaria en consulta y
su aplicación no modificaba nada las intervenciones habituales que se desarrollaban
sobre los pacientes que aceptaban participar en el estudio.
114
MATERIAL Y MÉTODOS
Se elaboró una hoja de registro que incluía los datos socio-demográficos y los
tests anteriormente descritos (anexos II a XI), que fue cumplimentada por los alumnos
de la Escuela Universitaria de Enfermería de Ciudad Real que voluntariamente
aceptaron participar en el estudio. Dichos test fueron valorados y se excluyeron del
grupo control aquellos que obtuvieron puntuaciones en los cuestionarios compatibles
con el diagnóstico de un TCA.
115
MATERIAL Y MÉTODOS
Consta de 20 ítems de cada concepto. Se trata de una escala auto aplicada, útil
tanto en población general como en pacientes. La puntuación de los ítems de “estado”
oscila entre 0 y 3 según la intensidad (0, nada; 1, algo; 2, bastante; 3, mucho). En
alguno de los ítems de la ansiedad-estado (números 1, 2, 5, 8,10, 11, 15, 16,19 y 20) se
invierte la puntuación (3, nada;2, algo;1 bastante; 0, mucho).
Fue creado por Aarón Beck en 1961, y revisado en 1978 (BDI-IA), y en 1996
(BDI-II). En su versión actual, está diseñado para individuos de 13 o más años de edad.
El BDI-II se desarrolló en respuesta a la publicación del DSM-IV, que cambió muchos de
los criterios diagnósticos de la Depresión Mayor. (Beck, Steer, & Brown, 1996).
116
MATERIAL Y MÉTODOS
117
MATERIAL Y MÉTODOS
El EAT en sus dos versiones es, tal vez, el cuestionario auto aplicado más
utilizado. Las preguntas del EAT se contestan a través de una escala de seis puntos tipo
Likert. Cada ítem presenta 6 posibles opciones de respuestas: siempre, casi siempre,
bastantes veces, algunas veces, casi nunca o nunca. Solamente los tres niveles más
altos de respuestas puntúan 1, 2 ó 3 puntos cuando la respuesta del sujeto coincide
con una actitud típicamente anoréxica. (En el apéndice de los cuestionarios incluimos
la plantilla de corrección). Proporciona un índice de gravedad del trastorno, es decir, a
mayor puntuación obtenida, mayor grado de trastorno alimentario.
Está validado al castellano por Castro et al. en 1991 (Castro, Toro, Salamero M,
& Guimerá, 1991). Obtuvieron un coeficiente global de validez de 0,61 (p< 0.001). Para
el punto de corte de 30 obtuvieron una sensibilidad del 67,9% y una especificidad del
85,9%. El coeficiente alfa de fiabilidad para el grupo de AN fue de 0.92. El análisis
118
MATERIAL Y MÉTODOS
factorial que realizaron estos autores permitió la extracción de tres factores que
explican el 41% de la varianza. Son los siguientes:
Factor III: Trastornos psicobiológicos. Compuesto por los ítems 19, 35, 29, 13,
28 y 40 (con cargas que van desde 0.66 para el ítem 19 hasta 0.39 para el ítem 40). Los
autores comprobaron que las puntuaciones que proporciona el EAT-40 indican un
índice de “estado más que de rasgo” para los TCA, dada la sensibilidad del instrumento
para detectar variaciones en la puntuación tras la mejoría clínica de las pacientes.
Los autores del EAT sugieren utilizar los siguientes puntos de corte para
identificar a los individuos con algún TCA: más de 30 puntos para el EAT-40 y más de
20 puntos para el EAT-26 y CHEAT-26.
119
MATERIAL Y MÉTODOS
(Garner & Garfinkel, 1979) (Corral, González, Peña, & Seisdedos, 1998). Fue
diseñado para evaluar distintas áreas cognitivas y conductuales de la AN y BN.
120
MATERIAL Y MÉTODOS
Perfeccionismo (EDI_P): mide el grado en que el sujeto cree que sus resultados
personales deberían ser mejores y que sólo son aceptables niveles de rendimiento
personal excelentes. Los elementos de esta escala son: 13, 29, 36, 43, 52, y 63.
121
MATERIAL Y MÉTODOS
Esta última versión fue validada en castellano por Corral y col. en 1998. (Corral,
González, Peña, & Seisdedos, 1998).
Cada ítem se puntúa de acuerdo a una escala tipo Likert de seis puntos y en la
que los sujetos indican si cada situación les ocurre “nunca”, “pocas veces”, “a veces”,
“a menudo”, “casi siempre” o “siempre”. Las respuestas dadas a cada elemento
pueden puntuar de 0 a 3. Reciben 3 puntos las respuestas extremas en la dirección
sintomática, “siempre” o “nunca” según que el elemento esté redactado en sentido
positivo o negativo en relación a lo que evalúa la variable. Se atribuyen dos puntos a la
122
MATERIAL Y MÉTODOS
123
MATERIAL Y MÉTODOS
Cooper et al. (1987) elaboraron este auto informe con el objeto de evaluar la
satisfacción con la propia imagen corporal, así como el nivel de ansiedad que las
pacientes experimentan con relación a su cuerpo y a su peso corporal. Es un
cuestionario compuesto por 34 preguntas, cada una presenta seis posibles opciones de
respuesta (según una escala de Likert) que van de “nunca” a “siempre”. Obtienen una
puntuación de 1 a 6, respectivamente, según la respuesta se aproxime más a actitudes
patológicas. Se pueden obtener 4 escalas: Insatisfacción corporal, miedo a engordar,
baja estima por la apariencia y deseo de perder peso. Se ha establecido una
puntuación de corte de 105 puntos. Niveles altos de puntuación total en este
cuestionario se han relacionado con la presencia de TCA. Ha demostrado una buena
consistencia interna (alfa de Cronbach = 0,97) y validez concurrente (Raich et al.,
1996). Este test discrimina claramente entre población con trastornos alimentarios y
población general.
124
MATERIAL Y MÉTODOS
Factor 1: Preocupación por la figura y sentirse “gorda”. Está compuesto por los
ítems 2, 4, 6, 3, 10, 17, 22, 16, 5, 21, 14, 23, 11, 1, 19, 24 y 28. Explica el 26,65% de la
varianza total.
Posteriormente, (Raich, Mora, Soler, Avila, Clos, & Zapater, 1996) se han
realizado diferentes estudios de adaptación de este instrumento a la población
española, en dos de los cuales obtuvieron los siguientes factores:
Factor IV: Insatisfacción corporal respecto a la parte inferior del cuerpo (muslo,
caderas o nalgas). Compuesto por los ítems 3 y 10. Explica un 12,8% de la variabilidad
total.
125
MATERIAL Y MÉTODOS
2.2.4.1. APGAR-familiar.
126
MATERIAL Y MÉTODOS
4. Estimulante
15. No especificado
128
MATERIAL Y MÉTODOS
Fase I
Estadística descriptiva:
Para exponer los resultados de las principales variables socio demográficas, las
puntuaciones en el EMBU y test de psicopatología.
Estadística inferencial:
Utilizamos la Regresión logística para ver la influencia del EMBU sobre variables
clínicas dicotómicas, como los intentos de suicidio.
Fase II
Estadística descriptiva:
Estadística inferencial:
130
RESULTADOS
V. RESULTADOS
131
RESULTADOS
RESULTADOS FASE I.
Se analizaron 196 casos y 127 controles. Los casos se dividieron a su vez en tres
grupos en función del diagnóstico de trastorno de la conducta alimentaria según
criterios DSM-IV-TR (American Psychiatric Association 2000). Así, 43 pacientes fueron
diagnosticados de anorexia nerviosa, (AN 21.9% de los casos) 74 de bulimia nerviosa
(BN 37.8%) y 79 de trastorno de la conducta alimentaria no especificado (TCANE
40.3%). La distribución por grupos diagnósticos se muestra en la tabla 12. De las
pacientes anoréxicas, 28 (8.6%) presentaban AN restrictiva, y 15 (4.6%) AN purgativa.
Las pacientes con bulimia purgativa fueron 65(19.9%), y con BN no purgativa, 9
(2.8%).Los controles constituyeron el 39.3 % de todos los individuos estudiados.
Frecuencia Porcentaje
Sistema 3 ,9
133
RESULTADOS
Frecuencia Porcentaje
Anorexia n. 43 13,3
Bulimia 74 22,9
TCANE 79 24,5
a) Edad.
La media de edad global fue de 23.2 años, con una desviación típica de 5.89,
(mínimo de 13 y máximo de 44 años). La edad en las pacientes anoréxicas era
significativamente menor que la de los controles y el resto de los subgrupos
diagnósticos (ANOVA de un factor F=9.01, gl=3, p<0,001).
Límite Límite
inferior superior
134
RESULTADOS
b) Sexo
De los 196 casos, 4 (2%) fueron varones, y el resto (98%) mujeres. En el grupo control,
el 13.7% fueron varones, y el 86.3% mujeres (Chi cuadrado 18,926, p<0.01). Al
encontrar diferencia de porcentaje de varones entre los casos y los controles,
realizamos un muestreo aleatorio en nuestra población control para comparar la
percepción de la crianza en varones y mujeres, no encontrando diferencia significativa.
DIAGNÓSTICO
CONTR0L AN BN TCANE
Hombres n=20 (6.4% del total de la muestra); Mujeres n=293(93.6% total muestra)
c) Estado Civil
De forma mayoritaria tanto las pacientes como los controles estaban solteros o con
relación de noviazgo. Había mayor proporción de pacientes sin pareja entre las
anoréxicas (81%) (Chi cuadrado 14, 859, gl 3, p=0.002)
135
RESULTADOS
N (%)
CONTROL AN BN TCANE
136
RESULTADOS
d) Nivel académico.
ESTUDIOS DIAGNÓSTICO
137
RESULTADOS
e) Núcleo Familiar
En todos los grupos, la mayoría de los sujetos del estudio convivían con su
familia de origen, bien con ambos padres o con uno de los dos progenitores.
138
RESULTADOS
1.2.1. IMC
El peso que tenían las pacientes fue diferente según subgrupos. Las
diagnosticadas de AN presentaron un índice de masa corporal (IMC) medio de 16.07
(15.5- 16.6), significativamente menor que en otros subtipos diagnósticos y en
controles (F=20,355, gl= 3, p<0.001).
Por el contrario, sí se observó una mayor ideación suicida en los tres subtipos
diagnósticos que en los controles (Chi cuadrado 46.178, gl 3, p<0.001), al igual que un
139
RESULTADOS
mayor índice de intentos o gestos autolíticos en casos que en controles, sobre todo en
bulímicas y pacientes con TCANE (Chi cuadrado 63.88, gl 3, p<0.001).
No Sí
140
RESULTADOS
NO SI
NO SI
141
RESULTADOS
1.3.1. Autoestima: Se observó una mayor autoestima global medida con el RSE en
controles comparado con todos los subtipos diagnósticos (F=58.543, gl=3, p<0.001).
142
RESULTADOS
Límite Límite
inferior superior
1.3.2. Ansiedad. La ansiedad rasgo era más acusada en pacientes bulímicas que en
anoréxicas (F=72.606, gl=3, p<0.001) y que en controles. También se halló una mayor
ansiedad estado en pacientes que en controles, sin objetivarse diferencias
significativas entre aquellos (F=40.544, gl=3, p<0.001).
143
RESULTADOS
144
RESULTADOS
145
RESULTADOS
Límite Límite
inferior superior
146
RESULTADOS
DIAGNÓSTICO TOTAL
CONTROL AN BN TCANE
MALOS TRATOS
Alrededor del 30% de cada uno de los grupos de pacientes referían unas
relaciones familiares malas o muy malas; mientras que en el grupo control este
porcentaje bajaba al 11% (Chi cuadrado 14,164; gl 3, p<0.01).
147
RESULTADOS
Control AN BN TCANE
MALAS/MUY MALAS 14 13 20 23 70
148
RESULTADOS
Tabla 22. Tipo de violencia por parte del padre según diagnóstico
149
RESULTADOS
Tabla 23. Tipo de violencia por parte de la madre según diagnóstico. N (%)
Tabla 24. Tipo de violencia por parte de los hermanos según diagnóstico. N(%)
150
RESULTADOS
Tabla 25. Violencia por parte del padre según diagnóstico (dicotómica). N (%)
NO SI
NO SI
151
RESULTADOS
Gráfico de barras
60
40
20
0
NO SI
VIOLENCIA GENERAL
Tabla 27. Indiferencia por parte del padre según diagnóstico. N (%)
Tabla 29. Indiferencia por parte de los hemanos según diagnóstico. N (%)
Chi-cuadrado=12.043; gl 3; p=0,007
Chi-cuadrado=42,688; gl 3; p=0,000
154
RESULTADOS
1.4.7. Control
Se preguntó asimismo por la percepción del grado de control ejercido por los
padres y hermanos sobre el sujeto.
Tabla 31. Control por parte del padre según diagnóstico. N (%)
1 2 3 4
155
RESULTADOS
Tabla 33. Control por parte de los hermanos según diagnóstico. N (%)
1 2 3 4
156
RESULTADOS
Tabla 34. Exigencia por parte del padre según diagnóstico. N (%)
157
RESULTADOS
158
RESULTADOS
Chi-cuadrado=8,260; gl 3; p=0,041
159
RESULTADOS
1.5.1.1. EAT
Límite Límite
inferior superior
160
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
1.5.1.2. EDI
161
RESULTADOS
162
RESULTADOS
163
RESULTADOS
164
RESULTADOS
165
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
F=52,403; gl 3; P= 0,000.
166
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
F=68,645; gl 3; p=0,000
167
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
F=60,864; gl 3; p=0,000
168
RESULTADOS
Tabla 47. Variable dependiente: Subescala Ineficacia (IN) EDI. Comparaciones múltiples
(Scheffé).
Límite Límite
superior inferior
F=21,159; gl 3; p=0,000
169
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
F=9,337; gl 3; p=0,000
170
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
F=83,712; gl 3; p=0,000
171
RESULTADOS
172
RESULTADOS
F=43,599; gl 3; p=0,000
173
RESULTADOS
Límite Límite
superior inferior
F= 35,378; gl 3; p=0,000
174
RESULTADOS
Tabla 54. Variable dependiente Subescala Inseguridad Social (SI) EDI. Comparaciones
múltiples. (Scheffé)
Límite Límite
superior inferior
F=35,751; gl 3; p=0,000
1.5.1.3. BITE
175
RESULTADOS
176
RESULTADOS
177
RESULTADOS
178
RESULTADOS
1.5.1.4. BSQ.
Valora la insatisfacción con la propia imagen corporal. Todas las pacientes puntuaron
más que las controles (F =96.37, gl 3, p<0.001), y al realizar las comparaciones
múltiples, se objetivaron diferencias significativas con mayor insatisfacción corporal en
bulímicas que en anoréxicas y en pacientes con TCANE.
179
RESULTADOS
F =96.37, gl 3, p<0.001
Límite Límite
superior inferior
181
RESULTADOS
Tabla 60. Puntuaciones medias en las subescalas del EMBU según los diferentes
subgrupos diagnósticos: Media (95% IC).
Rechazo 65,42 (62,95-7,89) 69.88 (65,20-74,57) 83,67 (77,96-89,38)** 81.00 (75.66- 6.34)***
**p<0.01, ***p<0.001
182
RESULTADOS
183
RESULTADOS
42
Media de Rechazo
40
Padre
38
36
34
32
control an bn tcane
diagnóstico
184
RESULTADOS
185
RESULTADOS
186
RESULTADOS
187
RESULTADOS
54
Media de Afecto Madre
52
50
48
46
44
control an bn tcane
diagnóstico
188
RESULTADOS
Figura 10. Medias en la Subescala de Afecto del EMBU en los diferentes grupos
diagnósticos
110
105
Media de Embu Afecto
100
95
90
85
80
control an bn tcane
diagnóstico
189
RESULTADOS
Afecto Padre 80
60
40
20
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
80
70
Afecto Madre
60
50
40
30
20
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
190
RESULTADOS
200
106
150
Afecto
EMBU
100
50
control AN BN TCANE
Diagnóstico
191
RESULTADOS
37
37
Padre
Sobreprotección Padre
36
36
Sobreprotección
de
Media de
Media 35
35
34
34
33
33
32
32
31
31
control
control an
an bn
bn tcane
tcane
diagnóstico
diagnóstico
38
Media de
36
34
32
control an bn tcane
diagnóstico
192
RESULTADOS
Sobreprotección
Embu Sobreprotección Figura 16. Medias Subescala Sobreprotección Global
75
75
72,5
72,5
70
70
de Embu
67,5
67,5
Media de
Media
65
65
control
control an
an bn
bn tcane
tcane
diagnóstico
diagnóstico
193
RESULTADOS
60 251
Sbreprotección Padre 50
40
30
20
10
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
291
Sobreprotección Madre
60
40
20
6
139
0
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
194
RESULTADOS
120
291
EMBU Sobreprotección
100
80
60
40
20
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
195
RESULTADOS
9,5
9,5
Favoritismo
de Favoritismo 99
Padre
8,5
Padre
8,5
88
Media de
Media
7,5
7,5
77
control
control an
an bn
bn tcane
tcane
diagnóstico
diagnóstico
99
8,5
8,5
Madre
Madre
Media de
88
Media
7,5
7,5
control
control an
an bn
bn tcane
tcane
diagnóstico
diagnóstico
196
RESULTADOS
19
19
Favoritismo
Embu Favoritismo
18
18
17
17
de Embu
16
16
Media de
Media
15
15
14
14
control
control an
an bn
bn tcane
tcane
diagnóstico
diagnóstico
197
RESULTADOS
20
7 130
184
Favoritismo Padre
268 191 32
15 277 131
245 114
10
136
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
20 117
245
Favoritismo Madre
118 7
110 191
15 320 44
268
10
5
6
Control AN BN TCANE
Diagnóstico
198
RESULTADOS
35 245 7
268 191
30 184
EMBU Favoritismo
25
20
15
10
Control AN BN TCANE
diagnóstico
199
RESULTADOS
200
RESULTADOS
Tabla 62. Análisis de Regresión Múltiple Influencia del EMBU sobre la Ansiedad Estado
De nuevo el afecto del padre tenía una asociación inversa con ansiedad rasgo, y
la sobreprotección de la madre se asociaba directamente con dichos síntomas
201
RESULTADOS
Tabla 63. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU sobre la Ansiedad Rasgo
202
RESULTADOS
203
RESULTADOS
Variable dependiente: EAT0 (EAT inicial). RS_STAI0: Ansiedad Rasgo-STAI; ST_STAI0: Ansiedad
Estado STAI. P:Padre, M: Madre.
204
RESULTADOS
Los resultados del análisis de regresión múltiple sobre la influencia del EMBU en las
subescalas del EDI, controlando el efecto de la ansiedad nos indican que un mayor
rechazo global se asocia con mayores puntuaciones en las subescalas de ineficacia,
perfeccionismo y ascetismo del EDI. El mayor rechazo materno se correlaciona con
mayores puntuaciones en tendencia a la delgadez, conciencia interoceptiva e
impulsividad, pero el rechazo paterno no se correlacionó de forma significativa con
ninguna de las subescalas del EDI, como a continuación se detalla en las tablas
siguientes:
205
RESULTADOS
Tabla 66. Análisis de regresión múltiple: Subescala Rechazo del EMBU y subescalas del
EDI controlando el efecto de la ansiedad: *p<0.05; **p<0.01; ***p<0.001.
Miedo a la
Madurez(MM)
206
RESULTADOS
Tabla 67. Análisis de regresión múltiple: Influencia de la subescala Afecto del EMBU
sobre las subescalas del EDI. Coeficiente estandarizado β, *p<0.05; **p<0.01;
***p<0.001.
207
RESULTADOS
B(IC) β
208
RESULTADOS
Tabla 69. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU en las puntuaciones de la
Subescala de síntomas BITE
Tabla 70. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU en las puntuaciones del
BITE (Suma), controlando el efecto de la ansiedad.
209
RESULTADOS
Tabla 71. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia del EMBU en las puntuaciones del
BSQ
210
RESULTADOS
RESULTADOS FASE II
1. DESCRIPCIÓN DE LA MUESTRA
AN 46 35,9
BN 46 35,9
TCANE 36 28,1
211
RESULTADOS
Frecuencia Porcentaje
TCANE 36 28,1
1.1.1 Edad.
La media de edad fue de 23 años, con una desviación típica de 6,7 (13 a 44
años). Por subgrupos diagnósticos, la edad media de las anoréxicas fue
significativamente más baja que la de bulímicas y pacientes con TCANE.
212
RESULTADOS
Límite Límite
inferior superior
Límite Límite
superior inferior
213
RESULTADOS
1.1.2. Sexo.
DIAGNÓSTICO Total
AN BN TCANE
SOLTERO 40 (87,0%) 21 (46,7%) 19 (52,8%) 80 (63,0%)
214
RESULTADOS
40
Gráfico de barras
diagnóstico
30 AN
BN
TCANE
Recuento
20
10
0
SOLTERO NOVIO CASADO
ESTADO CIVIL
215
RESULTADOS
216
RESULTADOS
Diagnóstico Total
AN BN TCANE
N(%)
217
RESULTADOS
N (%)
218
RESULTADOS
AN BN TCANE
219
RESULTADOS
Figura 27. Nivel de estudios del Padre en los diferentes grupos diagnósticos
Gráfico de barras
40 diagcd
AN
BN
TCANE
30
Recuento
20
10
0
BÁSICOS MEDIOS SUPERIORES
ESTUDIOS PADRE
220
RESULTADOS
AN BN TCANE
221
RESULTADOS
Gráfico de barras
40 diagcd
AN
BN
TCANE
30
Recuento
20
10
0
BÁSICOS MEDIOS SUPERIORES
ESTUDIOS MADRE
222
RESULTADOS
Límite Límite
inferior superior
Límite Límite
superior inferior
223
RESULTADOS
AN BN TCANE
224
RESULTADOS
Tabla 85. Comienzo del consumo de alcohol en relación con el TCA según diagnóstico.
Frecuencia y porcentaje
225
RESULTADOS
AN BN TCANE
1.2.4. Autolesiones.
AUTOLESIONES AN BN TCANE
226
RESULTADOS
AN BN TCANE
1.2.5. Robo.
Un 46.5 % de las pacientes se habían llevado alguna vez algo que no era suyo.
No se encontraron diferencias entre los grupos.
AN BN TCANE
227
RESULTADOS
SEPARACIÓN 1 ,8 1,3
PADRES
228
RESULTADOS
El 21% de las pacientes valoraron sus relaciones familiares como insatisfactorias o muy
insatisfactorias. No se encontraron diferencias entre los grupos.
Frecuencia Porcentaje
INSATISFACTORIAS 19 14,8
INDIFERENTES 14 10,9
SATISFACTORIAS 86 67,2
229
RESULTADOS
AN BN TCANE AN
230
RESULTADOS
231
RESULTADOS
AN BN TCANE
AMBIENTE RELAJADO 23 8 8 39
DISPUTAS OCASIONALES/FRECUENTES 19 27 23 69
Total 45 46 36 127
232
RESULTADOS
Figura 30
diagnóstico
AN
BN
30 TCANE
20
Recuento
21,26%
18,11% 18,11%
10 14,96%
8,66%
6,30% 6,30%
3,94%
2,36%
0
AMBIENTE RELAJADO DISPUTAS TENSIÓN HABITUAL/MALOS
OCASIONALES/FRECUENTES TRATOS
TENSIÓN EN CASA
Frecuencia Porcentaje
SÍ violencia 28 21,9
Frecuencia Porcentaje
Válidos NO 91 71,1
SI 27 21,1
234
RESULTADOS
Frecuencia Porcentaje
Válidos NO 81 63,3
SI 28 21,9
Válidos NO 88 68,8
AMENAZAS/GRITOS/OFENSAS 19 14,8
235
RESULTADOS
Válidos NO 91 71,1
Válidos NO 81 63,3
AMENAZAS7GRITOS/OFENSAS 17 13,3
236
RESULTADOS
AN BN TCANE
NO 39 25 24 88
SÍ 5 15 8 28
Total 44 40 32 116
AN BN TCANE
NO 41 30 20 91
SI 5 13 9 27
Total 46 43 29 118
237
RESULTADOS
1.3.6. Indiferencia.
Válidos NO 63 49,2
LIGERA 40 31,3
MODERADA 11 8,6
ABANDONO 3 2,3
238
RESULTADOS
Frecuencia Porcentaje
Válidos NO 74 57,8
LIGERA 39 30,5
MODERAD 5 3,9
ABANDONO 1 0,8
239
RESULTADOS
Frecuencia Porcentaje
Válidos NO 66 51,6
LIGERA 27 21,1
MODERADA 14 10,9
ABANDONO 3 2,3
240
RESULTADOS
INDIFERENCIA HERMANOS
NO/LIGERA MODERADA/SEVERA Total
1.3.7. Control.
241
RESULTADOS
242
RESULTADOS
ADECUADO 20 10 10 40
45,5% 25,0% 30,3% 34,2%
EXCESIVO CONTROL/RIGIDEZ 2 12 6 20
4,5% 30,0% 18,2% 17,1%
Total 44 40 33 117
100,0% 100,0% 100,0% 100,0%
243
RESULTADOS
1.3.8. Exigencia
AN BN TCANE
1.3.9. Antipatía.
244
RESULTADOS
AN BN TCANE AN
245
RESULTADOS
246
RESULTADOS
247
RESULTADOS
Tabla 116. Diferencia entre las puntuaciones medias de las subescalas del EDI al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
248
RESULTADOS
Tabla 117. Diferencia entre las puntuaciones medias de las subescalas del EDI al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1). II.
249
RESULTADOS
Tabla 118. Diferencia entre las puntuaciones medias del BITE al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
Tabla 119. Diferencia entre las puntuaciones medias del EAT al comienzo del
estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
250
RESULTADOS
Tabla 120. Diferencia entre las puntuaciones medias del BSQ al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
251
RESULTADOS
Tabla 121. Diferencia entre las puntuaciones medias del BDI al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
Media Desviación t P
típica.
252
RESULTADOS
Tabla 122. Diferencia entre las puntuaciones medias del STAI (ST-Ansiedad Estado) al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
Tabla 123. Diferencia entre las puntuaciones medias del STAI (RS-Ansiedad Rasgo) al
comienzo del estudio y en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
253
RESULTADOS
Tabla 124. Diferencia entre las puntuaciones medias del RSE al comienzo del estudio y
en el punto de corte de la evolución (T0 y T1)
Media Desviación t P
típica.
254
RESULTADOS
4.2.1. EAT
255
RESULTADOS
4.2.2. EDI
256
RESULTADOS
Tabla 127. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia de las subescalas del EMBU en la
evolución de la psicopatología alimentaria (EDI). I
Tabla 128. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia de las subescalas del EMBU en la
evolución de la psicopatología alimentaria (EDI). II
257
RESULTADOS
4.2.3. BITE.
4.2.4. BSQ-
Tabla 129. Análisis de Regresión Múltiple: Influencia de las subescalas del EMBU en la
evolución de la psicopatología alimentaria (BSQ).
SUMARIO DE RESULTADOS
259
RESULTADOS
260
DISCUSIÓN
V. DISCUSIÓN
261
DISCUSIÓN
DISCUSIÓN
263
DISCUSIÓN
Sin embargo, no conocemos ningún trabajo que se haya llevado a cabo hasta
el momento que relacione, en una muestra tan amplia, la percepción de la crianza con
la expresión psicopatológica en estos pacientes y su pronóstico a largo plazo;
incluyendo variables tanto alimentarias como de psicopatología general.
Como hemos comentado más arriba, algunos trabajos previos señalaron que
la sintomatología de bajo ánimo no influía en la percepción de la crianza (Livianos L,
Cuquerella, & Rodrigo, 2001), sin embargo, no se ha llevado a cabo ningún trabajo en
pacientes con un trastorno de la conducta alimentaria que presenten psicopatología
activa y vivan en su núcleo familiar en el momento de la exploración.
Aún sin poder afirmar que los recuerdos de la crianza pueden tener una
influencia 'causal', algo que no podemos concluir con el diseño de nuestro estudio y
que tampoco era objetivo de nuestra investigación, los hallazgos obtenidos nos
muestran la relevancia de la percepción de las relaciones familiares de aquellos
pacientes diagnosticados de un trastorno de la conducta alimentaria en comparación
con población control.
264
DISCUSIÓN
Características de la muestra
265
DISCUSIÓN
análisis del EMBU se han llevado a cabo en diferentes culturas, con muestras que
incluían a hombres y a mujeres. El grupo control se obtuvo de la Escuela Universitaria
de Enfermería, donde también encontramos una mayor proporción de mujeres.
Teniendo en cuenta que el porcentaje de varones del grupo control era
significativamente mayor que entre los casos, nos interesaba identificar si los estilos de
crianza presentaban alguna diferencia en relación al género. Por ello seleccionamos
dos submuestras aleatorias en el grupo control, una de mujeres y otra de varones, y
comparamos los estilos de crianza en ambos grupos. Nuestro análisis permite concluir
que no existen diferencias significativas en las puntuaciones del EMBU entre hombres
y mujeres de nuestra muestra, es decir, que en nuestra muestra, el sexo no influyó en
la percepción de la crianza.
266
DISCUSIÓN
Todos ellos describen, de forma más negativa que los controles, unas
relaciones familiares con mayor nivel de violencia y exigencia paterna, especialmente
en pacientes con bulimia, así como una mayor sensación de indiferencia, rigidez y
excesivo control también en estos pacientes y en los diagnosticados de TCANE; que se
suman en estos dos grupos, a unos mayores sentimientos de antipatía hacia sus
familias.
Los principales hallazgos del presente estudio apoyan nuestra hipótesis inicial
de que los recuerdos sobre la crianza están asociados con el subtipo diagnóstico de
TCA, difieren de los controles sanos y se asocian con el pronóstico al año. También
encontramos que los diferentes estilos de crianza se relacionan con una diferente
expresión psicopatológica de los TCA, y ejercen cierta influencia no sólo sobre aspectos
relacionados con la psicopatología general, como el sentimiento de ineficacia, el
perfeccionismo o la inseguridad social, sino también sobre variables más específicas de
la psicopatología alimentaria, en concreto, los síntomas de “bulimia” o los de
“tendencia a la delgadez”. Globalmente, los resultados obtenidos también confirman
la influencia de la percepción de la crianza en la evolución del trastorno alimentario. En
concreto, aspectos como la sobreprotección paterna favorecían la persistencia de
psicopatología alimentaria y la insatisfacción con la imagen corporal medida con el BSQ
Otro aspecto que consideramos en nuestra investigación, y que por otra parte
resulta especialmente novedoso ya que no hemos encontrado ninguna referencia
previa en la literatura es si los estilos de crianza se relacionan con una diferente
expresión psicopatológica de los TCA.
269
DISCUSIÓN
270
DISCUSIÓN
272
DISCUSIÓN
Hemos de tener en cuenta que los resultados mencionados más arriba se han
obtenido con instrumentos de medida diferentes. El resultado más frecuentemente
obtenido entre los que aplicaron el PBI, fue el bajo nivel de “cuidado” y, aunque se ha
intentado contrastar la hipótesis de que los factores ‘cuidado’ y ‘control’ del PBI se
corresponden con los factores ‘calor emocional’ y ‘sobreprotección’ del EMBU Livianos
y cols. sólo encontraron una correlación “muy fuerte” entre las dimensiones
‘sobreprotección’ (EMBU) y ‘control’ (PBI) en el caso de las madres, por lo que ambos
cuestionarios no son equivalentes. (Livianos & Rojo, 1999).
273
DISCUSIÓN
274
DISCUSIÓN
Los estudios sobre las prácticas de crianza en los TCA, han presentado
resultados contrapuestos. En algunas ocasiones se han realizado con muestras
heterogéneas que incluían diferentes subtipos diagnósticos, y en otras, con pacientes
diagnosticadas de anorexia solamente. Lógicamente los resultados son diferentes
según los grupos diagnósticos incluidos y también según otras variables como la edad
de las pacientes. Las relaciones familiares y los estilos de crianza de los padres de
sujetos de mayor edad que han padecido un TCA durante muchos años, pueden
haberse visto influidos por un trastorno que comenzó en la adolescencia, periodo de
gran importancia en los procesos de separación e individualización de los hijos con sus
padres. Los estudios que incluyen solamente adolescentes de corta edad puede que
aún no detecten alteraciones en la percepción e la crianza.
Entre los estudios que incluyen muestras con algún subtipo diagnóstico
concreto, en este caso AN, se encuentra el realizado por Castro y cols., (2000) quienes
hallaron que la percepción de rechazo o sobreprotección no era mayor en pacientes
diagnosticadas de anorexia nerviosa que en los controles. Las pacientes incluso
percibían mayor calor emocional de sus padres varones que el grupo de adolescentes
de la población general. Estos autores no valoraron la Subescala Favoritismo del EMBU.
En este caso se trataba de adolescentes diagnosticadas de anorexia nerviosa jóvenes,
(media de edad de 14.8 años), por lo que el mayor afecto percibido podría deberse a la
mayor atención que prestasen los padres a las hijas desde el comienzo del trastorno.
(Castro, Toro, & Cruz, Quality of rearing practices as predictor of short-term outcome
in adolescent anorexia nervosa., 2000),
275
DISCUSIÓN
276
DISCUSIÓN
Tabla 130. Relación entre estilos de crianza y TCA, comparados con población control,
según estudios previos.
TCANE>Sbp P/M
- - - AN, BN y TCANE>Fav
277
DISCUSIÓN
En relación con este aspecto también ha sido estudiada la asociación de la crianza con
el desarrollo posterior de ansiedad y depresión. Desde el punto de vista teórico, un estilo de
crianza anómalo podría favorecer el desarrollo de un TCA bien de forma directa o
indirectamente favoreciendo la aparición de otros trastornos, como ansiedad o depresión, que
a su vez predispusieran al individuo a padecer una alteración de la alimentación. Algunos
aspectos de la ‘percepción de la crianza’ podrían favorecer la presencia de alteraciones
psicológicas ‘más generales’ que a su vez puedan condicionar las diferencias en la expresión
psicopatológica. Los trastornos depresivos se han relacionado con prácticas de crianza con
bajo afecto y sobreprotección (Duggan, Sham, Minne, Lee, & Murray, 1998) y también con
fuerte rechazo y pobre calor emocional (Rojo, Livianos, Conesa, Cervera, & Dominguez, 1999).
En el trabajo mencionado más arriba, Rojo y colaboradores (2006), encontraron que, aún
controlando el efecto de la co-morbilidad psiquiátrica, el rechazo de ambos padres, así como el
calor emocional materno permanecían significativamente asociados con la presencia de TCA.
278
DISCUSIÓN
Esto puede sugerir que dichos factores de la crianza podrían tener tanto un efecto directo
como indirecto sobre los TCA.
279
DISCUSIÓN
280
CONCLUSIONES
VII. CONCLUSIONES
281
LIMITACIONES
VIII LIMITACIONES
280
IMPLICACIONES PRÁCTICAS
La detección de factores de riesgo para la aparición de los TCA o bien de factores que
agraven el pronóstico, en especial los factores familiares, es de vital importancia para
organizar tanto la prevención como el tratamiento (psicoterapia, terapia familiar) de dichos
trastornos.
A pesar de que los adolescentes son un grupo de edad que acude con poca frecuencia
a las consultas de Atención Primaria, se ha observado que cinco años antes del diagnóstico de
TCA, estos pacientes consultaron a su médico de familia por diversos síntomas psicológicos,
gastrointestinales o ginecológicos principalmente (Ogg, Millar, Pusztai, & Thom, 1997).
Las actividades preventivas podrían realizarse con los padres de hijos adolescentes; o
con los propios chicos, aprovechando las visitas de éstos por otros motivos de salud, o bien
280
IMPLICACIONES PRÁCTICAS
281
IMPLICACIONES PRÁCTICAS
282
ANEXOS
ANEXOS
281
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
A. Rechazo a mantener el peso corporal igual o por encima del valor mínimo normal
considerando la edad y la talla (por ejemplo, pérdida de peso que llega a ser inferior al
85 % del esperable, o fracaso en conseguir el aumento de peso normal durante el
período de crecimiento, dando como resultado un peso corporal inferior al 85% del
esperable).
B. Miedo intenso a ganar peso o a convertirse en obeso, incluso estando por debajo
del peso normal.
Especificar el tipo:
281
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
2. Sensación de pérdida de control sobre la ingesta del alimento (p. ej. sensación de
no poder parar de comer o no poder controlar el tipo o la cantidad de comida que se
está ingiriendo)
Especificar tipo:
282
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
En mujeres se cumplen todos los criterios diagnósticos para la anorexia nerviosa, pero
las menstruaciones son regulares.
Se cumplen todos los criterios diagnósticos para la AN excepto que, a pesar de existir
una pérdida de peso significativa, el peso del individuo se encuentra dentro de los
límites de la normalidad.
Se cumplen todos los criterios diagnósticos para la BN, con la excepción de que los
atracones y las conductas compensatorias inapropiadas aparecen menos de 2 veces
por semana o durante menos de 3 meses.
283
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
1. Comer durante un periodo de tiempo (por ejemplo, durante dos horas) una
cantidad de comida que es superior a la que la mayoría de gente comería durante un
periodo de tiempo similar y en circunstancias parecidas.
5. Sentirse a disgusto con uno mismo, depresión, o gran culpabilidad después del
atracón.
284
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
Anexo I e. Criterios diagnósticos para Anorexia nerviosa según CIE-10 F50.0, para uso clínico
A. Pérdida significativa de peso (índice de masa corporal o de Quetelet de menos del 17,5).
Los enfermos pre púberes pueden no experimentar la ganancia de peso propia del período de
crecimiento.
B. La pérdida de peso esta originada por el propio enfermo, a través de: 1) evitación de
consumo de “alimentos que engordan” y por uno de los síntomas siguientes:
285
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
Anexo I f. Criterios diagnósticos para Anorexia nerviosa según CIE-10 F50.0, para uso
de investigación
A. Pérdida de peso, o falta de ganancia de peso en los niños, que conduce a un peso
corporal de al menos del 15% por debajo del peso normal esperado para la edad y
talla correspondiente.
Comentarios
286
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
Anexo I g: Criterios Diagnósticos actuales para la BN según CIE-10 para uso clínico
287
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
1. vómito autoprovocado
2. abuso de laxantes
3. períodos de ayuno
4. consumo de fármacos
288
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
Este término debería usarse para referirse a aquellos individuos en los que falta una o
más características básicas de la anorexia nerviosa (F50.0), como la amenorrea o
pérdida de peso importante, pero que, no obstante, presentan un cuadro clínico
bastante típico. También pueden incluirse bajo este epígrafe los pacientes que tienen
todos los síntomas básicos pero sólo en grado bajo.
A. Falta una o más de las características principales de la BN, pero por lo demás
presentan un cuadro clínico bastante típico.
289
ANEXO I: Criterios Diagnósticos en los TCA
DSM-IV-TR (2002)
Excluir:
119. Pica.
CIE-10 (1992)
Excluye:
290
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
Epd-tes2
Clave de identificación: - - - -
Fecha actual : - -
2- Mujer
3- Estado civil:
1 Soltero/a 4 Divorciado
Si 1 Univitelino.
2 Bivitelino.
291
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
10- Peso máximo que ha llegado a pesar: Kg. 11-¿Cuánto tiempo hace?:_____
12- Peso mínimo que ha llegado a pesar: Kg. 13- ¿Cuánto tiempo hace?: ________
1- No escolarizado
3- E.G.B./E.S.O./F.P. 1 Completa
7- Licenciados y Doctorado
15- Marca el máximo nivel ocupacional alcanzado de tu: Padre Madre Esposo/a
6- Obreros cualificados
8- Trabajadores agrícolas
9- Labores de hogar
10- Estudiante
292
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
1 2 3 4
17- ¿Has tenido alguna vez y en qué medida, problemas con el consumo de alcohol o
drogas?
18- Indica con qué frecuencia has usado alguna de las siguientes sustancias:
Alcohol (________)
Anfetaminas (Spid)
Tranquilizantes
Alucinógenos - LSD
Porros
Heroína
Cocaína
292
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
22- ¿Te has llevado alguna vez algo que no era tuyo? 0 No 1 Si
0 1 2 3
0 1 2 3
25- ¿Has tenido la muerte o desaparición de algún ser querido en tu infancia?, y ¿Qué edad
tenías TU cuando ocurrió?
1 Ninguna
1- Obesidad
2- Anorexia o bulimia
3- Alcoholismo
4- Diabetes
5- Depresión - Nervios -
6- Hipertensión o colesterol
8- Otras, indicar ( _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ )
4 Tensión habitual, los padres podían estar tiempo sin hablarse, y el ambiente es difícil.
28- Marca en la casilla correspondiente si has sufrido algún tipo de violencia por alguno de
los siguientes familiares:
0- Nada
295
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
29- Marca en la casilla correspondiente hasta que punto te sientes como si no eres
importante para los siguientes familiares:
30- Marca en la casilla correspondiente hasta que punto te sientes controlado/a por los
siguientes familiares:
31 Marca hasta que punto te sientes de exigido/a por los siguientes familiares:
296
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
32- Marca hasta que punto has sentido antipatía por alguno de los siguientes familiares:
0- No
1- A veces
2- Frecuentemente
3- Siempre
33- A continuación aparecen una serie de frases en relación a la familia. Por favor, marque
la
0 1 2 3
297
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
0 1 2 3
0 1 2 3
37- A parte de tus compañeros de clase, ¿Tienes amigos con los que te relacionas?
No, Casi Algunos pero Muchos amigos Pocos pero Muchos amigos
prefiero ninguno superficiales pero profundos íntimos y superficiales
estar solo superficiales
0 1 2 3 4 5
0 1 2 3
40- ¿Con que frecuencia has hecho dieta para perder peso en los últimos 6 meses?
No la he hecho ni he Me lo he propuesto Hago dieta de vez en Habitualmente
alguna vez pero no la he cuando para perder
298
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
41- ¿Durante las últimas semanas has hecho algún día ejercicio para adelgazar?
0 No 1 Si
42- ¿Con que frecuencia has ejercicio para adelgazar en los últimos 6 meses?
No lo he hecho ni Me lo he propuesto Hago ejercicio de vez Habitualmente hago
he intentado alguna vez pero no lo en cuando para ejercicio para
hacerlo he hecho adelgazar adelgazar
0 1 2 3
46- ¿Alguna vez has evitado alguna actividad por estar preocupada con tu aspecto físico.
P.ej.: dejar de salir con tus amigos, no ir a alguna excursión o a la piscina, etc.?
No, nunca A veces lo he pensado A veces, por mi Muchas veces he
pero nunca he dejado de apariencia he dejado evitado actividades.
ir alguna actividad
0 1 2 3
299
ANEXO II: Cuestionario de variables socio demográficas, clínicas y familiares
47- ¿Por estar haciendo dieta, o por evitar comer, has dejado de salir con tus amigos, ir a
fiestas o a comidas (bautizos, cumpleaños, etc.)?
No, nunca Lo he pensado pero Alguna vez he evitado ir a Muchas veces no salgo
nunca he dejado de sitios donde sabía que para no tener que
hacerlo comería comer
0 1 2 3
300
ANEXO III: Test de Actitudes Alimentarias (EAT-40)
EAT-40
Fecha: - - Fecha de nacimiento: - -
Nombre: _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ Apellidos:_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
_INSTRUCCIONES: Por favor, ponga una cruz (X) en aquella casilla que mejor
describa su comportamiento actual. La mayoría de las preguntas hacen referencia a los
alimentos o a las comidas, aunque se incluyen otro tipo de respuestas. Responda a cada
pregunta con cuidado.
3 Me pongo nervioso/a
cuando se acerca la hora
de las comidas.
4 Me da mucho miedo
pesar demasiado
7 A veces me he ‘atracado’
de comida, sintiendo que
era incapaz de parar de
comer.
302
ANEXO III: Test de Actitudes Alimentarias (EAT-40)
9 Tengo en cuenta el
número de calorías que
como.
10 Evito, especialmente,
comer alimentos con
muchos hidratos de
carbono (p.ej. pan, arroz,
patatas, etc.)
11 Me siento llena/o
después de las comidas
15 Me preocupa el deseo de
estar más delgada/o
303
ANEXO III: Test de Actitudes Alimentarias (EAT-40)
23 Tengo la menstruación
regular
27 Disfruto comiendo en un
restaurantes
35 Tengo estreñimiento
304
ANEXO III: Test de Actitudes Alimentarias (EAT-40)
36 Me siento incómodo/a
después de comer dulces.
37 Me comprometo a hacer
régimen
305
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
EDI2
Fecha: - - Fecha de nacimiento: - -
INSTRUCCIONES:
306
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
307
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
27 Me siento incapaz.
308
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
37 Me siento seguro/a de mí
mismo/a.
309
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
56 Me siento emocionalmente
vacío/a en mi interior.
310
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
311
ANEXO IV: Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI-2)
312
ANEXO V: Cuestionario de la Silueta Corporal (BSQ)
BSQ.
Fecha: _ _ _ / _ _ _ / _ _ _ _ _ Fecha de nacimiento: - -
Apellidos:_____________________________________Nombre:_________________
INSTRUCCIONES: Desearíamos saber cómo te has sentido respecto a tu aspecto
durante las ÚLTIMAS CUATRO SEMANAS. Lee, por favor, cada una de las
afirmaciones o preguntas que siguen y señala la casilla que mejor se relacione contigo.
Contesta, por favor, todas las preguntas.
313
ANEXO V: Cuestionario de la Silueta Corporal (BSQ)
314
ANEXO V: Cuestionario de la Silueta Corporal (BSQ)
315
ANEXO V: Cuestionario de la Silueta Corporal (BSQ)
316
ANEXO VI: Cuestionario Ansiedad Estado y Rasgo (STAI)
A/E P D = 30 + - =
A/R P D = 21 + - =
STAI
INSTRUCCIONES: A continuación encontrará unas frases que se utilizan
corrientemente para describirse uno a sí mismo.
Lea cada frase y marque en la casilla que indique mejor cómo se SIENTE Vd. AHORA
MISMO, en este momento. No hay respuestas buenas ni malas. No emplee demasiado
tiempo en cada frase y conteste señalando la respuesta que mejor describa su situación
presente.
Ahora, pase la página y lea las Instrucciones antes de comenzar a contestar a las
frases.
317
ANEXO VI: Cuestionario Ansiedad Estado y Rasgo (STAI)
Lea cada frase y marque en la casilla que indique mejor cómo se SIENTE Vd. EN
GENERAL en la mayoría de las ocasiones. No hay respuestas buenas ni malas. No
emplee demasiado tiempo en cada frase y conteste señalando lo que mejor describa
cómo se siente Vd. generalmente.
Casi A A Casi
nunca veces menudo siempre
21 Me siento bien 0 1 2 3
22 Me canso rápidamente 0 1 2 3
23 Siento ganas de llorar 0 1 2 3
24 Me gustaría ser tan feliz como otros 0 1 2 3
25 Pierdo oportunidades por no decidirme pronto 0 1 2 3
26 Me siento descansado 0 1 2 3
27 Soy una persona tranquila, serena y sosegada 0 1 2 3
28 Veo que las dificultades se amontonan y no puedo 0 1 2 3
con ellas
29 Me preocupo demasiado por cosas sin importancia 0 1 2 3
30 Soy feliz 0 1 2 3
31 Suelo tomar las cosas demasiado seriamente 0 1 2 3
32 Me falta confianza en mí mismo 0 1 2 3
33 Me siento seguro 0 1 2 3
34 Evito enfrentarme a las crisis o dificultades 0 1 2 3
35 Me siento triste (melancólico) 0 1 2 3
36 Estoy satisfecho 0 1 2 3
37 Me rondan y molestan pensamientos sin importancia 0 1 2 3
38 Me afectan tanto los desengaños, que no puedo 0 1 2 3
olvidarlos
39 Soy una persona estable 0 1 2 3
40 Cuando pienso sobre asuntos y preocupaciones 0 1 2 3
actuales, me pongo tenso y agitado
318
ANEXO VII: Inventario de Depresión de Beck (BDI)
B.D.I.-AL
Las siguientes opciones se refieren a posibles estados de ánimo que usted puede experimentar,
marque de cada grupo de frases la opción que más se asemeje a su estado actual (marque sólo una
casilla de cada grupo).
No me encuentro triste
No soy especialmente pesimista, ni creo que las cosas me vayan a salir mal
No me considero fracasado
4) Ya nada me llena,
319
ANEXO VII: Inventario de Depresión de Beck (BDI)
No me siento culpable
No me aprecio,
320
ANEXO VII: Inventario de Depresión de Beck (BDI)
Me mataría si pudiera,
321
ANEXO VII: Inventario de Depresión de Beck (BDI)
He perdido casi todo el interés por los demás y apenas tengo sentimientos hacia
ellos,
Siento que hay cambios en el aspecto físico que me hacen parecer desagradable (o
menos atractivo)
322
ANEXO VII: Inventario de Depresión de Beck (BDI)
323
ANEXO VII: Inventario de Depresión de Beck (BDI)
20) Estoy tan preocupado por mi salud que me es difícil pensar en otras cosas,
324
ANEXO VIII: Cuestionario Autoestima RSE
RSE
Fecha: - - Fecha de nacimiento: - -
Apellidos:_______________________________________Nombre:
Totalmente De En Totalmente
de acuerdo acuerdo desacuerdo en
desacuerdo
325
ANEXO IX: Cuestionario de síntomas bulímicos (BITE)
BITE
INSTRUCCIONES:
Por favor, ponga una cruz (X) en aquella casilla que mejor describa su
comportamiento actual.
NO SI
326
ANEXO IX: Cuestionario BITE
NO SI
327
ANEXO IX: Cuestionario BITE
NO SI
328
ANEXO X: Cuestionario APGAR Familiar
APGAR FAMILIAR
Nº.Hª.Clín: Nº.Reg.:
Apellidos:______________________________________Nombre________________________
Domicilio:_______________________________________Cód.Postal:____________________
Localidad: _____________________________ Teléfono: _______________________
INSTRUCCIONES:
A continuación aparecen una serie de frases en relación a la familia. Por favor, marque la que mejor
se adecue a su propio núcleo familiar.
329
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
EMBU
Nº. Hª. Clín: Fecha: - -
Nombre: _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ Apellidos: _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
Antes de rellenar este cuestionario lea cuidadosamente las siguientes instrucciones.
Aunque le resulte difícil recordar con exactitud el trato que recibió de sus padres cuando usted
era pequeño, la verdad es que cada uno de nosotros tiene una idea, más o menos precisa de las
normas básicas o de los principios por los que se regía su forma de educarnos. Para rellenar este
cuestionario, es muy importante que intente recordar lo que usted sentía respecto a la actitud que
sus padres tomaban con usted. Como verá, cada pregunta tiene varias contestaciones de las que
tendrá que escoger la que mejor refleje el comportamiento que, tanto su padre como su madre,
mostraban hacia usted cuando era niño. Una vez que haya elegido la respuesta más apropiada a
su caso deberá marcar la casilla correspondiente con una cruz. Al realizar esta encuesta,
partimos de la base de que la forma en que le educaron sus padres tiene una influencia
importante sobre las distintas actitudes y reacciones que usted mostrará en diferentes momentos
de su vida. Como ya hemos dicho, antes de seleccionar la respuesta que más se ajusta a su
situación lea cada una de ellas detenidamente, sin olvidar que deberá elegir por separado, la que
mejor revela el comportamiento de su padre y el de su madre. Si la respuesta coincide, es decir,
si el comportamiento de ambos en determinada situación era similar señale la misma
contestación para ambos. Recuerde que sólo puede escoger una respuesta por pregunta y por
padre. No deje ninguna respuesta sin contestar. Como podré comprobar, determinadas preguntas
no pueden contestarse si usted es hijo único; en tal caso, deje la respuesta en blanco.
Tal vez, en alguna pregunta, le resulte difícil recordar en qué aspectos coincidían y en cuáles se
diferencian sus padres entre sí. Para resolver esta dificultad lo mejor posible, intente recordar
primero cuál era la actitud que tomaba su padre ante esa situación y, después cuál era la actitud
de su madre.A continuación le ponemos un ejemplo del modo en que debe contestar las
preguntas de este cuestionario.
1 2 3 4 Madre
1 2 3 4 Madre
331
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
1 2 3 4 Madre
332
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
Nunca A A Siempre
veces menudo
1 2 3 4 Madre
333
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
334
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
335
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
336
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
337
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
1 2 3 4 Madre
338
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
339
ANEXO XI: Cuestionario sobre los estilos de Crianza (EMBU)
Bastante incoherentes.
En conjunto, severos.
No especialmente severos.
340
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