Yahya Harun - El Milagro en El Atomo
Yahya Harun - El Milagro en El Atomo
Yahya Harun - El Milagro en El Atomo
EL ATOMO
Es el Creador de los cielos y de la tierra.
Y cuando decide algo, le dice tan slo:
Sea! y es
(Corn, 2:117)
H A R U N YAH YA
Todos los derechos reservados. Se prohbe la reproduccin total o parcial, por cualquier medio
electrnico o mecnico, incluidos fotocopia, grabacin magnetofnica y cualquier otro sistema de archivo
de informacin, sin autorizacin previa y por escrito del editor.
INDICE
CAPITULO 1
La Aventura de la Formacin del Atomo
CAPITULO 2
La Estructura del Atomo
CAPITULO 3
El segundo paso en el sendero que
conduce a la matera: las moleculas
CAPITULO 4
Los Atomos Que Adquieren Vida
CAPITULO 5
El Poder de los Atomos
CONCLUSION
NOTAS
no habr ninguna posibilidad de salvacin. Y para ese servicio y el esfuerzo que entraa, los libros de Harun
Yahya asumen un papel central. Si Dios quiere, sern instrumentos por medio de los cuales, en este siglo XXI,
la gente alcanzar la paz, la justicia y la felicidad prometidas en el Corn.
AL LECTOR
En esta obra como en todas las dems de su pluma, el autor trata los temas referidos a la fe a la luz de los
versculos cornicos e invita a la gente a estudiarlos y vivir segn los mismos. Al valerse de un estilo llano,
abierto, fluido, lcido, de rpida lectura y desprovisto de interpretaciones dudosas, cuestionables o irreverentes
con lo sagrado, que podran llevar al pesimismo y la desesperanza, permite que personas de cualquier edad o
grupo social puedan comprender fcilmente lo ledo y en consecuencia se afirmen decididamente sobre los
pilares de un mensaje religioso prstino y no en la opinin personal de quien escribe.
De tal manera eso es as, que hasta personas que rechazaban la espiritualidad con rigor, fueron
influenciadas por su discurso al no poder refutar los contenidos. Este criterio alcanza un esplendor muy
particular en todo lo que atae a las palabras de Dios.
Asimismo, est claro que la lectura o estudio en grupo es ms beneficioso puesto que facilita el
intercambio de reflexiones y experiencias.
Ser un gran servicio al din (a la religin) contribuir a la difusin de estas obras, redactadas solamente
para el agrado de Dios.
Por ltimo, animamos al lector a revisar los tpicos de los libros cuya presentacin se hace en las pginas
finales de este volumen.
INTRODUCCION
Por Qu?
La respuesta se convierte en la llave de la puerta que conduce a un mundo completamente distinto. A la vez es
una lnea sutil que separa lo conocido de lo desconocido.
En el mbito en que vivimos el gnero humano est ocupado en la bsqueda de respuesta a muchas preguntas
del tipo cmo?, para qu?, de qu modo?, pero lo que consigue en retorno es escaso, de poca monta. Es
imposible que lleguemos a la verdad esencial si primero no nos preguntamos por qu?, respecto al orden y
equilibrio extraordinarios con el que interactuamos.
En este libro nos ocuparemos del tomo, el fundamento de todo, tanto de lo animado como de lo inanimado.
Despus de ver qu sucede con el tomo y de qu manera, buscaremos la respuesta a por qu?, la cual nos llevar a
la verdad que perseguimos. El lugar en que la encontraremos es el Corn, la gua divina que contiene la explicacin de
todo.
Cientos de cientficos trabajaron da y noche desde la primera mitad del siglo XIX para revelar los secretos del
tomo. Esos estudios que pusieron al descubierto la forma, el movimiento, la estructura y otras propiedades del mismo,
hicieron aicos los fundamentos de la fsica clsica --la cual asuma que la materia era una entidad sin principio ni fin-y establecieron las bases de la fsica moderna. Pero tambin dieron lugar a muchos otros interrogantes.
En la bsqueda de respuestas a los nuevos cuestionamientos, finalmente estuvieron de acuerdo en que el tomo
posee un orden perfecto, un equilibrio infalible y un diseo consciente, del mismo modo que todas las cosas del
universo.
Se trata de una verdad revelada en el Corn, enviado por Dios hace catorce siglos. Como se aclara all, el
universo opera con un orden perfecto porque la Tierra, el cielo y todo lo que hay entre ellos, corresponde a la creacin
de Dios, Poseedor de poder y sabidura infinitos.
Por cierto, no sorprende que al ser Dios el Creador las cosas sean excelentes y operen segn un orden
perfecto. Lo que s es admirable es la tenaz insensibilidad del ser humano frente a los numerosos milagros que
encuentra, ve, oye y conoce --incluido su propio cuerpo--, as como la desidia respecto a la razn de porqu se
le hacen presentes todas esas particularidades extraordinarias.
Aunque este libro se ocupa de un tpico cientfico, no persigue el mismo objetivo que los libros convencionales
en la materia. Se ocupa del tomo, es decir, el ladrillo singular que integra todos los objetos animados e
inanimados, en base a las preguntas cmo?, para qu?, de qu modo?, con lo cual abre la puerta a la pregunta
por qu?. Una vez que traspasemos esa puerta, se nos revelar la superioridad y conocimiento de Dios en Su
creacin:
Dios. No hay ms dios que El, el Viviente, el Subsistente. Ni la somnolencia ni el sueo se apoderan de El.
Suyo es lo que est en los cielos y en la tierra. Quin podr interceder ante El si no es con Su permiso? Conoce
su pasado y su futuro (el pasado y futuro de los seres humanos), mientras que ellos no abarcan nada de Su
ciencia, excepto lo que El quiere. Su Trono se extiende sobre los cielos y sobre la tierra y su conservacin no le
resulta onerosa. El es el Altsimo, el Grandioso (Corn, 2:255).
CAPITULO 1
LA AVENTURA DE LA FORMACION DEL ATOMO
El universo, cuya vasta dimensin apremia los lmites de la comprensin humana, funciona sin mengua,
en base a equilibrios sensibles dentro de un orden admirable. Y as ha sido desde el mismo momento en que se
form. Cmo pas a existir, a dnde se dirige y cmo operan las leyes que mantienen el orden y el equilibrio
que le son propios, han sido siempre temas de inters para personas de todas las pocas, incluida la actual. Los
cientficos han llevado a cabo incontables investigaciones al respecto y emitieron distintas teoras y
explicaciones. Los estudiosos que consideraron el orden y el diseo en el universo por medio de la razn y de la
reflexin, no tuvieron ninguna dificultad para explicar esa perfeccin. Es decir, resulta obvio e incontrovertible
para quien medita y cavila, que Dios, el Todopoderoso Que gobierna el universo, cre ese diseo perfecto. Dios
expone esa verdad manifiesta en los versculos cornicos:
En la creacin de los cielos y de la tierra y en la sucesin de la noche y el da hay, ciertamente,
signos paa los dotados de intelecto (Corn, 3:190).
Los cientficos que ignoran la evidencia de la creacin, sin embargo, tienen grandes dificultades para
responder esos interrogantes interminables. En consecuencia, no vacilan en echar mano a los prejuicios y a las
teoras sin fundamentos. Incluso, si se ven en apuros, hasta recurren al engao para defender sus hiptesis
totalmente opuestas a la realidad. Pero a pesar de todas esas cosas que rayan en la mala intencin, el conjunto de
las investigaciones cientficas contemporneas nos conducen a una sola realidad: el universo fue creado de la
nada por Dios, Poseedor de una sabidura y superioridad infinitas.
y el concepto de un universo infinito propio de la misma, para presentarlos como si fuesen realidades
cientficas.
Materialistas como Marx y Engels abrazaron con fuerza esas ideas pensando que supuestamente daran
un slido fundamento a la ideologa materialista. Esto jug un papel importante para la introduccin del modelo
de universo infinito, popular en la primera mitad del siglo XX y basamento para la filosofa materialista.
Segn ese modelo, el cosmos carece de principio y fin, posee una estructura esttica, no fue creado de la
nada y nunca se destruir. No obstante, el avance del conocimiento llev a descubrir que esa teora estaba
totalmente errada y que no era demostrable cientficamente. Dicho en otras palabras, el universo tuvo un
comienzo y fue creado de la nada.
La idea de universo infinito ha sido siempre el punto de partida de las ideologas irreligiosas que caen en
el error de negar a Dios, ya que si no tuvo un comienzo tampoco hubo un creador. Pero la investigacin puso
sobre el tapete pruebas concluyentes de que la argumentacin materialista era invlida y que el universo tuvo un
comienzo por medio de una explosin llamada Big Bang. Que algo venga de la nada tiene una sola explicacin:
fue creado. Es Dios Todopoderoso Quien cre el universo.
El reconocido astrnomo britnico Sir Fred Hoyle estuvo entre los conmovidos por este hecho. Con su
teora del estado estacionario aceptaba que el universo se expandiese pero argumentaba que era infinito, sin
principio ni fin. Segn su criterio, mientras el universo se expande la materia se origina de manera espontnea
en las cantidades requeridas. Su supuesto basado en premisas prcticamente indemostrables, iba en direccin
opuesta a la teora del Big Bang, que en aquel momento era ms razonable. En funcin de un gran nmero de
observaciones Hoyle y otros siguieron resistiendo la nueva teora, pero los avances de la ciencia operaban en
contra de sus posturas.
California se estaban alejando de la Tierra. Mediciones posteriores revelaron que las estrellas y galaxias tambin
se alejaban unas de otras, adems de seguir distancindose de la Tierra. Es decir, se comprobaba una vez ms
que el universo estaba en expansin. David Filkin relata en su libro El Universo de Stephen Hawking algo
interesante al respecto:
...En el transcurso de los dos aos siguientes Lematre tuvo noticias de algo que no esperaba tan pronto:
Hubble haba observado que la luz de las galaxias estaba corrida al rojo. Eso significaba, de acuerdo con el
efecto Doppler, que el universo se estaba expandiendo. Ahora era slo cuestin de tiempo. Como quiera que sea,
Einstein se interes en el trabajo de Hubble y decidi visitarlo en el Observatorio del Monte Wilson. Lematre
hizo los preparativos para dar una conferencia en el Instituto Tecnolgico de California y al mismo tiempo
gestion el encuentro entre Einstein y Hubble. Analiz cuidadosamente, paso a paso, su teora del tomo
primitivo que sugiere que el universo fue creado un da que no tuvo ayer. Con un esmero sin igual explic
matemticamente lo que propona. Einstein se puso de pie y anunci que lo que haba escuchado era la ms
bella y satisfactoria interpretacin, para decir ms adelante que su invencin de la constante cosmolgica fue
el ms grande desatino de su vida1.
Lo que hizo que Einstein uno de los cientficos ms importantes de la historia-- se expresase as de
inmediato, fue la certidumbre de que el universo tiene un comienzo.
Nuevas observaciones de la expansin del universo proveyeron nuevos argumentos. A partir de ello los
cientficos construyeron otro modelo en el que al retroceder en el tiempo el cosmos se iba contrayendo y
eventualmente se converta en un punto singular, como razonaba Lematre. La conclusin que se derivaba de
esto era que en algn momento toda la materia del universo estuvo compactada en un punto-masa singular de
volumen cero, debido a su inmensa fuerza gravitatoria. Nuestro universo pas a existir como resultado de la
explosin que se dio en llamar Big Bang de ese punto-masa de volumen cero.
Esa explosin sealaba algo ms. Decir que algo tiene volumen cero es equivalente a decir que es nada.
En consecuencia el universo fue creado de esa nada. Adems, tuvo un comienzo, lo que contrariaba la visin
materialista que sostena que existi eternamente.
la gran explosin. Gamow haba estado completamente acertado porque la frecuencia de la radiacin era casi la
misma que la supuesta. Penzias y Wilson recibieron el Premio Nobel por su descubrimiento.
A George Smoot y su equipo de la NASA les tom solamente ocho minutos confirmar los niveles de
radiacin informados por Penzias y Wilson mediante el satlite espacial COBE. Como fue predicho, los
sensibles sensores a bordo que verificaron la existencia de los restos de los primeros momentos de la gran
detonacin, obtuvieron una nueva victoria a favor de la teora del Big Bang y la comunidad cientfica se vio
forzada a reconocerlo.
Otra evidencia en tal sentido tena que ver con la relativa cantidad de hidrgeno y helio en el universo.
Los cmputos revelaron que la proporcin de gases hidrgeno-helio que debera existir en el universo despus
del Big Bang coincida con los clculos tericos.
El descubrimiento de evidencias precisas hizo que el Big Bang ganase la total aprobacin del mundo
cientfico. En un artculo de la revista Scientific American de octubre de 1994, se dice que el modelo del Big
Bang es el nico reconocido en el siglo XX.
Entonces empezaron a aparecer las confesiones de quienes defendieron durante aos el concepto de
universo infinito. Dennis Sciama, quien haba sostenido la teora de Estado Estacionario junto con Fred
Hoyle, describi el brete en el que se encontraba frente a la evidencia del Big Bang. Dijo que primero tuvo que
colocarse al lado de Hoyle, pero que dado el cmulo de evidencias tena que admitir que la pulseada haba
terminado y que la teora del estado estacionario deba ser descartada 2.
Si la materia viva no fue producida por la interrelacin de los tomos, las fuerzas naturales y la radiacin,
cmo pas a existir?... Pienso, sin embargo, que debemos... admitir que la nica explicacin aceptable es la
creacin. S que esto es anatema para los fsicos, como lo es para m, pero no debemos rechazar lo que no nos
gusta si la evidencia experimental lo respalda4.
En conclusin, la ciencia seala una sola realidad, ya sea que a los materialistas les guste o no. La materia
y el tiempo fueron originados por un Creador, Quien es Todopoderoso y Quien cre los cielos y la tierra y todo
lo que hay entre ellos. Ese creador es Dios Omnipotente.
hablan de modo intrigante de un "huevo csmico" que consista en toda la materia del universo antes del Big
Bang. En otras palabras, todos los cielos y la tierra estaban incluidos en dicho huevo en condicin de ratk. Ese
huevo csmico explot violentamente, lo cual llev su materia a fataka, proceso en el que se cre la estructura
de todo el universo.
El Corn se refiere a otra cosa, descubierta recin en el decenio de 1920, que podra interpretarse como la
expansin del universo. El hallazgo de Hubble del corrimiento de la luz de las estrellas hacia el rojo del
espectro, se revela as:
Y el cielo, lo construimos con fuerza. Y, ciertamente, asignamos (al universo) un vasto espacio
(Corn, 51:47).
En resumen, los descubrimientos de la ciencia moderna apuntan cada vez ms a la verdad revelada en el
Corn y no respalda los dogmas materialistas. Los defensores de esos dogmas pueden suponer que todo es
producto de la casualidad, pero el hecho manifiesto es que el universo pas a existir como resultado de un
acto de creacin por parte de Dios. El nico conocimiento cierto acerca del origen del universo se cimienta en
las palabras de Dios reveladas a nosotros.
Adems, tampoco cuentan con los datos requeridos para hacer los clculos del caso. En esos lmites el
campo de las normas de la materia y de la fsica estn en un callejn sin salida. Es decir, los sucesos antes y
despus del primer instante de la explosin as como cada detalle imbuido en equilibrios extraordinariamente
delicados, poseen una realidad ms all de los confines de la mente humana y de la fsica actual.
Esta creacin, en su mismo comienzo, fue dando lugar, instante a instante, a la formacin del universo
material y de las leyes de nuestra fsica. Ocupmonos ahora de los acontecimientos que sucedieron con gran
precisin dentro de un brevsimo tiempo durante la explosin.
Como mencionamos arriba, en fsica todo puede ser calculado desde 10 -43 de segundo en adelante. La
energa y el tiempo slo pueden ser definidos despus de ese momento. En ese punto de la creacin la
temperatura es de 1032 K, es decir, 100.000.000.000.000.000.000.000.000.000.000 grados Kelvin. Para
comparar con algo, consideremos que la temperatura del sol se expresa en cientos de millones de grados (10 8) y
la de algunas estrellas mucho ms grandes en cientos de miles de millones (10 11) de grados. El hecho de que la
temperatura ms elevada que puede ser medida en la actualidad se limite a miles de millones de grados, revela
lo elevadsimo que debi ser la temperatura a 10-43 de segundo despus del Big Bang.
Si avanzamos un paso ms llegamos al punto en que el tiempo (transcurrido) es de 10 -37 de segundo. El
lapso de tiempo entre estos dos perodos no es de 1 2 segundos. Estamos hablando de lapsos de tiempo tan
cortos como la trillonsima parte de un trillonsimo de segundo. La temperatura an es extraordinariamente alta
pues est en 1029 grados (100.000.000.000.000.000.000.000.000.000 grados Kelvin). En esta etapa an no fue
creado ningn tomo6.
Otro paso ms y estamos en 10-2 de segundo, es decir, una centsima de segundo. Ahora la temperatura
es de 100 mil millones de grados. Se comienza a formar el universo primordial. Todava no aparecieron
partculas como el protn y el neutrn que constituyen el ncleo del tomo. Slo estn presentes el electrn y su
antipartcula, el positrn (antielectrn) porque la temperatura y velocidad del universo en ese momento slo
permiten eso. Menos de un segundo despus de haber sucedido la gran explosin de la nada, se han formado los
electrones y los positrones.
Desde entonces en adelante es muy importante el perodo de tiempo en el que se forman cada una de las
partculas subatmicas, pues se presentan en un momento especfico de modo que se puedan establecer las
reglas de la fsica que conocemos. Es trascendente cul es la partcula que se forma primero. La ms leve
desviacin en la secuencia o regulacin del tiempo, hara imposible que el universo se presentara en su forma
actual.
Detengmonos aqu para razonar algunas cosas.
La teora del Big Bang provee evidencias de la existencia de Dios por medio de exhibir que toda la
materia del universo se origin de la nada. Incluso exhibe que los ladrillos de la materia -los tomos- pasaron
a existir de la nada en menos de un segundo despus del Big Bang. Es importante advertir el fabuloso orden y
estabilidad que hay en esas partculas. El universo debe su actual estado a ese equilibrio, que lo describiremos
mejor ms adelante. Se trata de la misma armona que nos permite vivir como lo hacemos. En resumen, el orden
perfecto y las inmodificables leyes de la fsica se formaron a continuacin de esa gran explosin, aunque
cualquiera podra suponer de manera lgica que debera haberse creado un gran desorden y disturbio. Esto
demuestra que cada instante a continuacin del Big Bang -que dio comienzo al universo-, incluida la propia
explosin, ha sido diseado a la perfeccin.
La cantidad de partculas que aparecieron despus del Big Bang fueron determinadas con tal precisin,
que condujo a la formacin de la substancia universal. El profesor Steven Weinberg subraya lo decisiva que
resulta la interaccin entre esas partculas:
Si el universo en los primeros minutos hubiese estado realmente compuesto del mismo nmero de
partculas y de antipartculas, stas se habran aniquilado mientras la temperatura descenda por debajo de un
mil milln de grados y no quedara nada excepto la radiacin. Hay una muy buena evidencia de que haba una
diferencia: Nosotros estamos aqu! Debe haber existido algn exceso de electrones sobre positrones, de
protones sobre antiprotones y de neutrones sobre antineutrones, con el objeto de que quedase un resto que
proveyese la materia del universo actual despus de la aniquilacin de las partculas y antipartculas 8.
Ya han pasado 34 minutos y 40 segundos desde el principio. El universo tiene una edad de algo ms de
media hora. La temperatura ha descendido a 300 millones de grados. Los electrones y positrones continan
produciendo energa a consecuencia de que colisionan entre ellos. En este perodo las cantidades de partculas
que van a formar el universo se han equilibrado para permitir que se constituya la materia.
Una vez que descendi la velocidad producto de la explosin, esas partculas, casi carentes de masa,
comienzan a interactuar entre s. Se origina el primer tomo de hidrgeno por medio de colocarse un electrn en
la rbita de un protn. Con esta configuracin se establece la base de las fuerzas fundamentales que
encontraremos normalmente en el universo.
No cabe la ms mnima duda de que estas partculas con estructuras distintas y descansando en
equilibrios extremadamente delicados, son el producto de un diseo ms all de la comprensin humana y no se
han reunido o juntado por casualidad para operar hacia la misma meta. Esta perfeccin conduce a los
investigadores a una conclusin muy importante: se trata de una creacin y existe una supervisin sin igual de
cada instante de la misma. Se supone que cada partcula que es creada despus de la explosin se forma en un
tiempo especfico, a una temperatura especfica y a una velocidad especfica. Parece que este sistema que
funciona casi como un reloj, ha sido programado y puesto a punto con mucho cuidado antes de entrar en
actividad. Esto significa que el Big Bang y el universo perfecto que origin, han sido diseados antes del
comienzo de la explosin y controlados despus de producirse.
Por cierto, la voluntad que hace los aprestos, los diseos y controles del universo es Dios, el Creador de
todo.
Dicho diseo se observa no slo en el tomo sino en todo objeto del cosmos, grande o pequeo. Esas
partculas que inicialmente salan disparadas y se estrellaban entre s dieron lugar a la formacin de los tomos,
molculas, planetas, estrellas, sistemas solares, galaxias, quasars, etc., segn un plan magnfico con un orden y
equilibrio perfectos. En tanto que es imposible que las partculas que forman un tomo se renan por casualidad
y establezcan armonas delicadas, sera mucho ms irrazonable e ilgico suponer que los planetas, las galaxias
y, en resumen, todos los sistemas que hacen al funcionamiento del universo, se formasen por casualidad y
desarrollasen los equilibrios por s mismos. La voluntad que da lugar a este diseo singular es la de Dios, el
Creador de todo.
Otros tomos se formaron despus del hidrgeno, lo cual por s mismo es un milagro. Aqu se nos vienen
a la mente varios interrogantes: Cmo se formaron otros tomos? Por qu todos los protones y neutrones no
formaron solamente tomos de hidrgeno? Cmo decidieron las partculas qu tomos formaran y en qu
cantidades? Las respuestas a estas preguntas nos llevan nuevamente a la misma conclusin. En la formacin del
tomo de hidrgeno y todos los dems que le siguieron hay un gran poder, control y diseo, los cuales exceden
la capacidad de la mente humana y seala, obviamente, que el universo es una creacin superior. Las leyes de
la fsica que se establecieron a consecuencia del Big Bang, no se han modificado en absoluto durante los
aproximadamente 17 mil millones de aos transcurridos. Por otra parte, esas leyes se basan en clculos precisos.
Incluso una desviacin milimtrica de los valores actuales hubiese resultado en un desbarajuste de la estructura
y orden general del cosmos.
Es realmente interesante lo que dijo al respecto el conocido fsico y profesor Stephen Hawkins. Explica
que estos fenmenos se fundamentan en clculos mucho ms refinados que lo que podemos imaginar:
Si la velocidad de la expansin un segundo despus del Big Bang hubiese sido menor, incluso en 1 x 10 17, el universo se habra colapsado de nuevo antes de que hubiese alcanzado nunca su tamao actual 9.
El Big Bang, construido en base a clculos tan excelentes, revela evidentemente que el tiempo, el espacio
y la materia no pasaron a existir de modo espontneo sino que fueron creados por Dios. Es absolutamente
imposible que los sucesos descritos se hayan formado como resultado de la casualidad y que sea sta la que
origine el tomo, el ladrillo del universo.
No sorprende para nada que muchos cientficos que trabajan en este tema hayan aceptado la existencia de
una fuerza infinita y su autoridad en la creacin del universo.
El conocido astrofsico Hugh Ross explica que el Creador est ms all de todas las dimensiones:
Por definicin, el tiempo es esa dimensin en la que tienen lugar los fenmenos causa-efecto. Si el
tiempo no existe, tampoco la causa y el efecto. Si el comienzo del tiempo es concurrente con el comienzo del
universo, como dice el teorema de espacio-tiempo, entonces la causa del universo debe ser alguna entidad que
opera en una dimensin temporal totalmente independiente y preexistente a la dimensin tiempo del cosmos...
Ello nos dice que el Creador es trascendente, que opera ms all de los lmites dimensionales del universo. Nos
dice que Dios no es el universo ni est contenido en l10.
El aspecto ms importante del Big Bang es que le da a la humanidad la posibilidad de comprender mejor
la potestad de Dios. El origen del universo a partir de la nada, con toda la materia que contiene, es uno de los
mejores signos de la supremaca de Dios. El delicado equilibrio en la energa en el instante de la explosin es un
signo muy extraordinario que nos dirige a pensar sobre el conocimiento infinito de Dios.
de seguridad al impedir que las partculas se dispersen sin control y pongan en peligro especialmente a los organismos
vivos.
Cuando se avanza en el estudio de la cosmologa, la incredulidad crece ms. Los recientes descubrimientos
acerca del cosmos primitivo nos obligan a aceptar que el universo en expansin ha sido puesto en movimiento con la
cooperacin de una precisin asombrosa12.
El diseo supremo y el orden perfecto prevalecen en todo el universo construido en base a las fuerzas
fundamentales mencionadas. Quien estipul ese orden es, sin lugar a dudas, Dios, el creador de todo sin tacha y de la
nada. Dios, el Seor de los Mundos, mantiene a las estrellas en sus rbitas con la ms dbil de las fuerzas, y retiene el
ncleo del diminuto tomo con la ms potente de las fuerzas. Todas stas actan de acuerdo con las medidas que El
ha determinado. En uno de sus versculos Dios se refiere al orden en la creacin del Universo y a los equilibrios
establecidos con toda exactitud:
Quien posee el dominio de los cielos y de la tierra, no ha adoptado un hijo, ni tiene asociado en el dominio
, lo ha creado todo y lo ha determinado por completo (Corn, 25:2).
CAPITULO 2
LA ESTRUCTURA DEL ATOMO
El aire, el agua, las montaas, los animales, las plantas, su cuerpo, la silla en la que se sienta, en resumen,
todo lo que ve, toca y percibe, desde lo ms pesado a lo ms liviano, est formado de tomos. Cada pgina
de este libro que tiene en sus manos est constituido por miles de millones de tomos.
Se trata de partculas tan diminutas que incluso es imposible verlas con los microscopios ms potentes. El
dimetro de un tomo es del orden de una millonsima de milmetro. Mejor intentaremos explicar como son
mediante un ejemplo.
Pensemos que tenemos una llave en la mano y queremos ver los tomos en ella. Para poder observarlos a
simple vista habra que agrandar la llave hasta alcanzar la medida de la Tierra, pues entonces los tomos
tendran el tamao de una cereza13.
Demos otro ejemplo para comprender su pequeez y como todo, en todas partes, est compuesto de tomos.
Supongamos que queremos saber cuntos tomos contiene un granito de sal y que somos capaces de contar
mil millones (1.000.000.000) de ellos por segundo. Aunque tengamos esa habilidad necesitaramos ms de
500 aos para determinar la cantidad all existente14.
Qu hay dentro de esa estructura tan diminuta?
Si bien su dimensin es extremadamente pequea, posee un sistema sin tacha, nico y complejo, comparable
en su sofisticacin al que vemos operar en el universo en general.
Cada tomo est constituido por un ncleo y cierta cantidad de electrones que se mueven en rbitas cerradas
a gran distancia del ncleo. Dentro del ncleo hay otras partculas llamadas protones y neutrones.
En este captulo veremos la estructura extraordinaria del tomo, el cual constituye el cuerpo primario de
todo lo animado e inanimado. Veremos tambin como se combinan para formar molculas y por ltimo la
materia.
El Poder Oculto en el Ncleo
Las propiedades del tomo dependen de la cantidad de protones y neutrones que conforman su ncleo. El
radio de ste es aproximadamente un diez milsimo del radio del tomo. El radio del primero es 10-12
(0,000000000001 cm) y el del segundo10-8 (0, 00000001 de cm). Por lo tanto el volumen del ncleo es igual
a la billonsima parte del volumen del tomo.
Puesto que no podemos visualizar tan impresionante pequeez, debemos recurrir nuevamente a un smil. La
cereza que en el ejemplo anterior representaba al tomo, deber expandirse y convertirse en una gran pelota
de 200 metros de dimetro. Y en esta escala tan increble el ncleo no sera ms grande que una diminuta
partcula de polvo15.
Si comparamos el dimetro del ncleo, que es de 10-12 cm, con el dimetro del tomo, que es de 10-8 cm,
llegamos a la siguiente situacin: si asumimos que el tomo es una esfera y deseamos llenarla
completamente con ncleos, haran falta 1015 de stos16.
No obstante, hay algo ms sorprendente: aunque la medida del ncleo es una billonsima de la del tomo, la
masa del ncleo abarca el 99,95% de la masa del tomo. Cmo es que algo que constituye casi toda la
masa, por otra parte no ocupa casi ningn espacio?
La razn estriba en que la densidad de la masa del tomo no est distribuida de modo parejo en el mismo. Es
decir, casi toda la masa del tomo se acumula en el ncleo. Si alguien tiene una casa de diez mil millonsimo
de metro cuadrado y tiene que poner todo el mobiliario en una habitacin de un metro cuadrado, podra
hacerlo? Por supuesto que no. Pero el ncleo del tomo s lo puede hacer gracias a una tremenda fuerza
distinta a todas las otras existentes en el universo. Estamos hablando de la fuerza nuclear fuerte, una de las
cuatro fundamentales, como lo dijimos en el captulo anterior.
Ya habamos visto que la misma mantiene el ncleo del tomo intacto e impide que se fragmente. Todos los
protones en el ncleo tienen carga positiva y se repelen entre s debido a la fuerza electromagntica. Sin
embargo, a causa de la fuerza nuclear fuerte que es cien veces ms potente que la fuerza de repulsin de los
protones, la fuerza electromagntica se vuelve inefectiva y entonces los protones permanecen juntos.
Para resumir, dos grandes fuerzas interactan dentro de un tomo que es tan pequeo que nos resulta
invisible. El ncleo permanece estable debido a los valores precisos de esas fuerzas.
Cuando consideramos la dimensin del tomo y el nmero de ellos en el universo, es imposible no advertir
que est operando un pasmoso equilibrio y diseo. Resulta claro como el cristal que las fuerzas
fundamentales en el universo han sido creadas de una manera muy especial por medio de una gran sabidura
y eficacia. A lo nico que recurren los que rechazan la fe no es ms que a suponer que todo pas a existir
como resultado de la combinacin de casualidades. Sin embargo, los clculos de probabilidades
demuestran cientficamente que la posibilidad de que los equilibrios del universo se hayan formado por
casualidad es igual a cero. Todo lo expuesto es un conjunto de difanas evidencias de la existencia de Dios
y de la perfeccin de Su creacin.
...Mi Seor lo abarca todo en Su ciencia. Es que no os dejaris amonestar? (Corn, 6:80).
El Espacio en el Atomo
Gran parte del tomo consiste en una zona vaca, lo cual nos plantea un interrogante: por qu existe ese
espacio?
En trminos simples, el tomo consta de un ncleo y de los electrones que giran alrededor del mismo. Entre
el primero y los segundos no hay nada. Esa zona ultramicroscpica en la que nada existe, en realidad es
muy grande a escala atmica. La podemos visualizar mediante una comparacin. Si una bolita de un
centmetro de dimetro representa el electrn ms cercano al ncleo, estara a un kilmetro de ste17.
Daremos otro ejemplo para comprender mejor estas magnitudes.
Entre las partculas bsicas hay un gran espacio. Si pienso que el protn de un ncleo de oxgeno es la
cabeza de un alfiler que tengo en la mesa frente a mi, entonces el electrn que gira a su alrededor describe un
crculo que pasa por Holanda, Alemania y Espaa (El escritor vive en Francia). Por lo tanto, si todos los
tomos que forman mi cuerpo se acercasen tanto casi hasta tocarse, ustedes no podran verme ms a simple
vista. Sera tan pequeo como una diminuta partcula de polvo con una dimensin de algunas milsimas de
milmetro18.
En este punto nos damos cuenta de que hay una similitud entre los espacios ms grandes y ms pequeos en
el universo. Al dirigir nuestra vista a las estrellas observamos una zona vacua similar a la que existe entre
los tomos. De una estrella a otra y de una galaxia a otra hay miles de millones de kilmetros desiertos.
Pero en esas zonas del espacio sideral y de los tomos, aparentemente vacas, prevalece un orden que est
ms all de nuestro entendimiento.
Los que estn en los cielos y en la tierra Le imploran. (Dios) siempre est ocupado en algo. Cul,
pues, de los beneficios de vuestro Seor negaris? (Corn, 55:29).
electrones se mueven a velocidades increbles, no hace ms que acentuar la existencia de ese orden singular
que de ninguna manera puede ser atribuido a la casualidad. La nica explicacin de ese orden es que Dios
cre todo armoniosamente como una manifestacin de Su potestad. Dios se refiere a ello en el Corn:
...Dios ha establecido una medida para cada cosa (Corn, 65:3).
...ha creado todo y lo ha determinado por completo (Corn, 25:2).
...Todo lo tiene medido. El Conocedor de lo oculto y lo patente, el Grande, el Sublime (Corn, 13:8-9).
Hemos extendido la tierra , colocado en ella firmes montaas y hecho crecer en ella de todo en la
debida proporcin (Corn, 15:19).
El sol y la luna, para cmputo (Corn, 55:5).
Ha elevado el cielo. Ha establecido la balanza (Corn, 5:7).
Como revelan los versculos, Dios, el Seor de los Mundos, es Quien cre todo en una medida, orden y
proporcin perfectos. Se trata de una realidad que cubre el campo de la existencia de cabo a rabo, desde las
partculas subatmicas ms pequeas hasta los gigantescos cuerpos celestes y el conjunto de lo que hay entre
ellos. Ese es el resultado del podero, conocimiento, arte y sabidura infinitos de Dios, Quien brinda Sus
atributos a los seres humanos de la manera que El quiere. Esa potestad que Dios exhibe ante nuestros ojos es
la verdad a la que debe llegar el ser humano por medio de la investigacin y clculos cientficos.
Ondas o Partculas?
Al momento de descubrirse los electrones se pens que se trataba de partculas como los protones y
neutrones encontrados en el ncleo. Pero por los experimentos conducidos a continuacin se supo que
exhiben caractersticas tanto de ondas como de partculas de luz, es decir, de fotones. Posteriormente se lleg
a la conclusin de que cada partcula es simultneamente una forma de onda con su frecuencia distintiva.
Se sabe que la luz se expande de un modo similar a los rizos de las ondas que se crean en una superficie
acutica cuando se arroja una piedra. De todos modos, a veces la luz se comporta como una partcula
material y se la observa en la forma de pulsos intermitentes y espordicos, semejante a como caen en el
cristal de la ventana las gotas de lluvia. La misma dicotoma se observ tambin en el electrn, lo que
condujo a una gran confusin en el mundo de la ciencia. Lo dicho por Richard P. Feynman, conocido
profesor de fsica terica, lo aclarara todo:
Ahora sabemos cmo se comportan los electrones y la luz. Pero, cmo puedo denominarlo? Si digo que se
comportan como partculas, doy una impresin errada. Y lo mismo pasa si digo que se comportan como
ondas. Es decir, se comportan segn su propia e inimitable manera, lo que tcnicamente se podra llamar a la
manera de cuanto mecnico. Se comportan de un modo nunca visto antes... Un tomo no se conduce como
una carga que cuelga de un resorte y oscila. Tampoco como una representacin en miniatura del sistema
solar. Ni como una nube o bruma que rodea al ncleo. Como mnimo, en todos esos casos se est haciendo
una simplificacin. Los electrones se comportan exactamente como lo hacen los fotones. Ambos son
estrambticos, pero actan de la misma forma. Explicar cmo operan exige una gran esfuerzo de
imaginacin porque vamos a describir algo que es distinto a todo lo conocido 21.
Al no poder explicar nunca los cientficos el comportamiento de los electrones, la solucin que encontraron
fue denominarlo de alguna manera: Movimiento Mecnico Cuntico. Citemos de nuevo al profesor
Feynman, quien manifiesta la naturaleza excepcional de lo antes mencionado y el temor reverente que le
invade:
No se siga cuestionando, cmo puede ocurrir esto?, si es que lo puede evitar, porque se descolgar por el
cao de desage a un callejn sin salida del que nadie ha podido escapar hasta la fecha. Nadie sabe cmo
puede ocurrir 22.
No obstante, el callejn sin salida al que se refiere Feynman no es tal en realidad. La razn por la que alguna
gente nunca acierta a encontrar una salida de ese dilema es que aunque disponen de la evidencia sustancial
no aceptan que esos sistemas y equilibrios increbles hayan pasado a existir por medio del Creador sublime.
La situacin es absolutamente patente: Dios cre el universo de la nada, lo dot con equilibrios
extraordinarios y le dio existencia sin tomar nada como ejemplo. Que la pregunta de los cientficos, cmo
puede ocurrir esto? no encuentre respuesta ni sea resuelta, estriba en la no aceptacin del hecho de que Dios
es el Creador de todo y que todo existe slo por medio de Su orden Sea!.
Es el Creador de los cielos y de la tierra. Y cuando decide algo, le dice (a ese algo) tan slo: Sea! y
es (Corn, 2:117).
recibida del sol, depende de sta y de las modificaciones que produce. Si al objeto iluminado con luz
blanca se lo ve de color rojo, es porque absorbe gran parte de la luz solar que llega a l y emite slo el
rojo.
La absorcin de la que hablamos se cumple por medio de un mecanismo al que ya nos referimos pero que
lo explicamos de nuevo. Los electrones circulan acarreando tanta energa como se lo permite el nivel de
energa del orbital por el que viajan, siendo los ms distantes del ncleo los que tienen la ms elevada.
Cuando un electrn dispone de un espacio en un orbital superior, desaparece repentinamente del lugar que
ocupa y aparece en ese orbital con nivel de energa ms elevado siempre y cuando haya elevado su propia
energa absorbiendo (tragando) fotones provenientes del sol.
Esto lo podemos explicar mejor con un ejemplo. Consideremos la mariposa Morfo. Los pigmentos que posee
absorben toda la luz solar y emiten slo el color azul. Cuando las partculas de luz que se reflejan desde la
mariposa llegan a nuestra retina, se convierten en seales elctricas por medio de las clulas conos, de tal
manera que son percibidas de color azul. Oportunamente en el cerebro se representa dicho color.
Esto significa que el color de un objeto depende del carcter de la luz emitida por la fuente del caso y el tipo
de la misma que es reflejada por el objeto en cuestin. Por ejemplo, el color de un vestido no es el mismo
bajo la luz solar que en el interior de la tienda. Si nuestro cerebro percibe algo como de color negro, significa
que ese algo absorbe toda la luz del sol y no refleja nada. Pero si refleja toda la luz que recibe, se percibe
como color blanco. Por lo tanto hay que tener en cuenta los siguientes puntos al respecto:
1. El color de un objeto depende de las propiedades de la luz emitida por la fuente que lo ilumina.
2. Tambin depende de la reaccin de los electrones de las molculas de su estructura, en cuanto a los
colores de luz que absorbe y que no absorbe.
3. El color del objeto depende de cmo percibe nuestro cerebro los fotones que golpean la retina.
Detengmonos aqu y meditemos una vez ms.
Los electrones que giran a una velocidad increble alrededor del ncleo del tomo
--demasiado
pequeo para ser visto a simple vista-- pueden desaparecer repentinamente de su orbital y saltar a otro
llamado suborbital, para lo cual tiene que haber el correspondiente espacio libre en ste. El electrn toma la
energa para realizar ese salto del fotn. Despus vuelve a su orbital original. En esta accin se forma el
color percibido por el ojo humano. Atomos cuya cantidad se puede expresar en miles de millones realizan
esta operacin de manera ininterrumpida. Esto es lo que nos permite ver una imagen de modo continuo.
Dicho mecanismo magnfico no tiene comparacin con lo que pueda realizar cualquier tipo de mquina o
artilugio construido por el ser humano. Por ejemplo, un reloj que trabaja correctamente es tcnicamente
complicado y todas sus partes deben estar ubicadas en los lugares correctos. El mnimo problema en esa
diagramacin impedira el funcionamiento adecuado. Pero cuando pensamos en la estructura del tomo y
cmo funcionan los electrones, se comprende la simplicidad del reloj. El mecanismo por el que operan los
electrones es demasiado complejo y perfecto al punto que nos deja pasmados, por lo que no resiste ninguna
comparacin con cualquier sistema fabricado por el ser humano. En consecuencia, no pudo haberse
originado espontneamente como resultado de la casualidad, cosa que suponen los cientficos materialistas.
Si usted va caminado por el desierto y ve un reloj en el suelo funcionando bien, se le ocurrira pensar que se
ha formado por la combinacin casual de polvo, arena y piedras? Nadie pensara algo as porque para todos
es demasiado obvio que alguien lo dise y lo construy segn un diagrama concienzudo. Pero el diseo y la
sapiencia que encierra un solo tomo son, como mencionamos antes, incomparablemente superiores a todo
lo fabricado por el ser humano. El Poseedor de esa sapiencia es Dios, Quien tiene un conocimiento sin igual,
sabe, ve y crea todo.
Si, Dios cre y crea todo, tanto lo que vemos como lo que no vemos, con un arte ilimitado, al mismo tiempo
que nos concede innumerables favores, independientemente de que seamos conscientes de ello o no. El
asunto del color, del que ahora ya conocemos algo y antes no sentamos ninguna necesidad de enterarnos,
pas a interesarnos con el avance de la ciencia. Es innegable que el desarrollo y progreso cientfico debera
motivar a cualquiera que use su juicio y consciencia a la aceptacin de la existencia de Dios. Pero an
encontramos gente que desconoce el arte y sapiencia preeminentes que se observa en cada punto del
universo. El aclamado cientfico Louis Pasteur realiz una observacin interesante sobre este tema:
Poca ciencia, aparta de Dios, pero su acrecentamiento te acerca a El23.
Cuanto ms aprendemos de los ejemplos que nos rodean de la creacin, mejor comprendemos que Dios la
abarca en su conjunto, que El controla completamente los asuntos en los cielos y en la tierra y que tiene todo
bajo Su control. Comprendemos que nuestra vida ser tomada y que no podremos explicar todo lo que
hemos hecho en esta vida. Eso hace que aumente sin cesar la admiracin por el conocimiento de Dios. Tal
ponderacin es un paso muy importante en la percepcin, en cierta medida, del poder y potestad infinitos de
El, lo cual nos lleva a reverenciarlo como corresponde. De esto se habla en el Corn:
No ves cmo ha hecho Dios bajar agua del cielo, mediante la cual hemos sacado frutos de diferentes
colores (o clases)? En las montaas hay vetas de diferentes colores: blancas, rojas y de un negro
intenso. Los hombres, bestias y rebaos son tambin de diferentes colores (o clases). Slo reverencian a
Dios aqullos de Sus siervos que saben. Dios es poderoso, indulgente (Corn, 35:27-28).
CAPITULO 3
EL SEGUNDO PASO EN EL SENDERO QUE CONDUCE A
LA MATERIA:
LOS MOLECULAS
Qu es lo que hace que veamos distintos los objetos que nos rodean? Qu es lo que les da distintos
colores, formas, olores y sabores? Por qu una substancia es dura, otra blanda y otra ms fluida? Segn lo ledo
hasta ahora podemos responder: la diferencia entre sus tomos es lo que hace posible esas cosas. Pero esta
respuesta no es suficiente, porque si esa fuese la nica causa deberan existir miles de millones de tomos con
propiedades distintas. No pasa por ah la respuesta. Muchos materiales que se ven diferentes y tienen
propiedades distintas, contienen no obstante los mismos tomos. La respuesta a las preguntas anteriores hay que
buscarla por el lado de la forma en que se enlazan los tomos para constituir molculas.
En el camino de la constitucin de la materia y despus de la formacin del tomo, el paso siguiente lo
ocupan las molculas. Se trata de las unidades ms pequeas en la determinacin de las propiedades qumicas
de la materia. Aunque diminutas, pueden estar integradas por dos tomos o ms, algunas con miles de ellos.
Estos permanecen juntos dentro de las molculas por medio de los enlaces qumicos establecidos por la fuerza
de atraccin electromagntica. Es decir, los enlaces se forman sobre la base de las cargas elctricas de los
tomos, las que son determinadas por los electrones de su orbital ms exterior. Las distintas combinaciones de
las molculas dan lugar a la diversidad de materia que vemos alrededor de nosotros. De aqu la importancia de
los enlaces qumicos.
Enlaces Qumicos
Como explicamos antes, dichos enlaces se forman a travs del movimiento de los electrones en el orbital
ms exterior de los tomos. Estos tienden a llenar ese orbital con la mxima cantidad de electrones, cedindolos
o tomndolos. El mximo posible es de ocho. Para hacer esto, el tomo recibe electrones de otro tomo para
completar su capa ms externa con ocho electrones, o si tiene en su nivel ms exterior mucho menos de ocho
electrones, entonces l los da a otro tomo, quedando entonces con orbitales completos. La tendencia de los
tomos a intercambiar electrones suministra el mpetu motivador bsico del enlace qumico que se presenta
entre ellos.
Esa fuerza que los impulsa a elevar al mximo el nmero de electrones en su orbital ms externo, hace
que se formen tres tipos de enlaces: el inico, el covalente y el metlico.
Las uniones especiales a las que se denomina enlaces dbiles, por lo general actan entre molculas.
Son ms dbiles que las existentes entre los tomos que constituyen las molculas porque stas necesitan
estructuras ms flexibles para formar la materia.
Veamos de modo resumido las propiedades de esos enlaces y cmo se forman.
Enlaces Inicos
Los tomos que se combinan por medio de enlaces inicos, intercambian electrones para completar ocho
en sus orbitales ms externos. El que tiene hasta cuatro electrones en su capa ms externa, los pasa al que
tiene ms de cuatro electrones tambin en el orbital ms externo y que es con el que se va a combinar, es decir,
con el que se va a enlazar. Las molculas formadas por este tipo de enlace poseen estructuras cristalinas
(tridimensionales). La sal de mesa comn (NaCl) se cuenta entre las sustancias as formadas. Por qu los
tomos tienen esa tendencia? Qu sucedera si no la tuviesen?
Hasta la actualidad slo se puede definir en trminos generales el porqu de los enlaces formados por los
tomos. An no se comprende a qu se debe que los tomos adhieran a dicho principio. Ser posible que los
tomos decidan por s mismos que en su orbital ms externo deben tener ocho electrones? Definidamente no. Se
trata de un comportamiento tan decisivo que evidentemente se ubica ms all del tomo porque ste no tiene
intelecto, voluntad o conciencia. Esa cantidad de ocho es la clave en la combinacin de los tomos para
constituir molculas, es decir, el paso siguiente en la creacin de la materia y, en consecuencia, del universo
ntegro. Si los tomos no tuviesen esa tendencia basada en el principio mencionado, no existiran las molculas
y por ende tampoco la materia. Pero desde el momento en que fueron creados y gracias a dicha inclinacin, los
tomos han estado sirviendo en la formacin de las molculas y de la materia de una manera perfecta.
Enlace Covalente
Los cientficos que estudiaron los enlaces entre los tomos enfrentaron una situacin interesante.
Mientras algunos de stos cedan o tomaban electrones para enlazarse, algunos compartan los de sus orbitales
ms externos. Una investigacin ms avanzada revel que muchas molculas decisivas para la vida deben su
existencia a esos enlaces denominados covalentes.
Veamos un ejemplo simple para entenderlo mejor. Como ya mencionamos, los tomos pueden tener un
mximo de dos electrones en su orbital ms cercano al ncleo. El tomo de hidrgeno tiene un solo electrn con
la tendencia a tener dos para convertirse en estable. En consecuencia el tomo de hidrgeno constituye un
enlace covalente con otro tomo de hidrgeno. Es decir, los dos tomos de hidrgeno comparten el electrn
solitario como un segundo electrn. As se forma la molcula H 2.
Enlace Metlico
Si un gran nmero de tomos se acercan por medio de compartir electrones, a eso se lo denomina enlace
metlico. Metales como el hierro, el cobre, el zinc, el aluminio, etc., que forman la materia prima de muchas
herramientas e instrumentos que vemos o usamos diariamente, han adquirido un cuerpo tangible y substancial
como resultado de ese tipo de enlace que forman los tomos que los constituyen.
Los cientficos no pueden responder porqu los electrones de esos tomos tienen dicha propensin. Lo
que resulta ms interesante es que los organismos vivos deben su existencia a esa tendencia.
La razn por la que el carbono posee esa capacidad de formar cadenas con tantos enlaces estriba en no
son exclusivamente lineales. Pueden ser ramificadas o constituir polgonos. Y la forma que adopte es muy
importante.
Por ejemplo, si en dos compuestos de carbono los tomos se combinan de manera diferente, se forman
dos sustancias dismiles, lo cual es decisivo para la vida.
Algunas molculas de compuestos de carbono consisten en unos pocos tomos. Otras contienen miles o
incluso millones. Ningn otro elemento es tan verstil como el carbono para formar molculas muy durables y
estables. Dice David Burnie en su libro La Vida:
El carbono es un elemento poco comn. Sin su presencia y sus propiedades extraordinarias, lo ms
probable es que no hubiese existido la vida sobre la Tierra 29.
Respecto a la importancia del carbono para los seres vivientes, escribe el qumico britnico Nevil
Sidgwick en Los Elementos Qumicos y Sus Compuestos:
El carbono es nico entre los elementos por la cantidad y variedad de compuestos que puede formar. Ya
han sido aislados y descritos ms de 250.000, pero an tenemos una idea muy imperfecta de sus atributos,
puesto que es el fundamento de todas las formas de la materia viviente 30.
La clase de compuestos constituidos exclusivamente de carbono e hidrgeno se llama hidrocarburos.
Configura una gran familia que incluye el gas natural, el petrleo, el kerosene y los aceites lubricantes. Los
hidrocarburos etileno y propileno conforman la base de la industria petroqumica. Hidrocarburos como el
benceno, el tolueno y la trementina son familiares para quienes trabajan con pinturas. La naftalina que protege
nuestras ropas de las polillas tambin es un hidrocarburo. Combinado con cloro o flor da lugar a anestsicos, a
productos usados en los extintores de fuego y a los freones que se emplean en refrigeracin.
Como dijo el qumico Sidgwick, la mente humana no llega a comprender toda la potencialidad de este
tomo que slo tiene seis protones, seis electrones y seis neutrones. Es imposible que se d por casualidad,
aunque ms no fuese, una sola de las propiedades de este tomo esencial para la vida.
Dios cre y abarca el tomo de carbono y todo lo dems, de manera perfectamente apropiada, en
beneficio de los seres vivientes.
De Dios es lo que est en los cielos y en la tierra. Dios todo lo abarca (Corn, 4:126).
En un esfuerzo por responder a esta pregunta se vertieron diversas teoras. Las investigaciones
demostraron que las distintas combinaciones de molculas dependen de las propiedades de los tomos que las
componen.
Los enlaces que se producen son muy importantes para la qumica orgnica, es decir, la qumica de los
seres vivientes, porque las molculas ms importantes que constituyen la vida se forman debido a su capacidad
para dar lugar a ese tipo de vinculaciones de las que hablamos. Tomemos el caso de las protenas. Las formas
complejas tridimensionales de las protenas, que son los ladrillos de lo viviente, se forman gracias a esos
enlaces. Esto significa que para la configuracin de la vida el enlace qumico dbil entre molculas es al menos
tan necesario como los enlaces qumicos fuertes entre los tomos. Por cierto, la intensidad de los mismos posee
un determinado valor.
Continuemos con el ejemplo de la protena. Molculas llamadas aminocidos se combinan para formar
protenas, resultando stas mucho ms grandes que sus componentes. Los tomos que integran las protenas se
vinculan por medio de enlaces covalentes, en tanto que los aminocidos de la protena se renen por medio de
enlaces dbiles para producir modelos tridimensionales. Las protenas pueden funcionar en los organismos
vivos, solamente si tienen estas estructuras tridimensionales. Si esos enlaces no existiesen tampoco existiran las
protenas y en consecuencia la vida.
El enlace de hidrgeno, que es del tipo dbil, juega un gran papel en la formacin de sustancias muy
importantes para la vida. Por ejemplo, las molculas que componen el agua --la base de la vida-- se combinan
por medio de enlaces de hidrgeno.
que se combinen los tomos de hidrgeno y oxgeno. El aumento de la temperatura eleva la energa y por lo
tanto la velocidad de las molculas, lo que lleva a un aumento del nmero de choques entre ellas. As se acelera
la reaccin. Sin embargo, normalmente no existe en el planeta la temperatura suficientemente elevada para
formar agua. El calor que se requiere al efecto estuvo presente durante la formacin de la Tierra. Fue entonces
cuando se origin el agua en la cantidad que tenemos hoy da.
Despus de eso se produce el proceso de evaporacin, condensacin en la atmsfera y precipitacin como
lluvia o hielo, pero no hay un aumento de la cantidad de la misma sino un ciclo perpetuo de cambio de estado.
enlaces de hidrgeno se descomponen con el agua en estado lquido, lo cual hace que los tomos de oxgeno se
junten ms entre s y den lugar a una estructura ms viscosa. En consecuencia el hielo, por el contrario, resulta
ms liviano.
Por lo comn, si se funde algn metal y dentro de lo fundido se arrojan pedazos slidos del mismo, van a
parar al fondo del recipiente de inmediato. Pero en el caso del agua y del hielo la cosa es distinta. Los icebergs
que pesan decenas de miles de toneladas flotan en el agua como corchos. Qu beneficio nos puede proveer esta
propiedad del agua?
Respondamos a la pregunta con el ejemplo de un ro. Cuando hace mucho fro no se congela todo el
afluente sino solamente la superficie. El agua alcanza su estado ms pesado a los 4C. Al llegar a esa
temperatura se precipita al fondo. El hielo se forma en la superficie como una capa y debajo de la misma el agua
sigue fluyendo. Puesto que a 4C distintos organismos permanecen vivos, all contina la existencia.
Esta propiedad singular que Dios le ha dado al agua hace posible la vida en la Tierra. El Todopoderoso
nos comunica en el Corn la importancia de esta gran bendicin brindada al ser humano:
El es Quien ha hecho bajar para vosotros agua del cielo. De ella bebis y de ella viven las matas (los
vegetales) con que apacentis. Gracias a ella, hace crecer para vosotros los cereales, los olivos, las
palmeras, las vides y toda clase de frutos. Ciertamente, hay en ello un signo para gente que razona
(Corn, 16:10-11).
el universo estn hechas a la medida para la vida humana. Los estudios revelan que todas las leyes de la fsica,
la qumica y la biologa actuales, como as tambin la atmsfera, el sol, los tomos, las molculas, etc., tienen
un orden determinado que es el necesario para sustentar la vida humana. El agua es apropiada para la vida hasta
tal punto, que no tiene comparacin con ningn otro lquido. Adems, la mayor parte de la superficie del planeta
est cubierta con agua en la cantidad requerida para que la vida exista. Es obvio que todas estas cosas no pueden
ser producto de casualidades, sino que en el universo hay un orden perfecto y un diseo que todo lo abarca.
Las propiedades fsicas y qumicas del agua que dejan con la boca abierta a cualquiera, revelan que este
lquido ha sido creado especficamente para la vida humana. Dios da vida a los pueblos a travs del agua y es
mediante ella que hace surgir todo lo que necesitan los humanos para mantener su existencia. Por medio del
Corn Dios convoca a la gente a meditar acerco de esto:
Y El es Quien ha hecho bajar agua del cielo. Mediante ella hemos sacado toda clase de plantas y
follaje, del que sacamos granos arracimados. Y de las vainas de la palmera, racimos de dtiles al alcance.
Y (hemos hecho crecer) huertos plantados de vides, y los olivos y los granados, parecidos y diferentes.
Cuando fructifican, mirad el fruto que dan y cmo madura! Ciertamente, hay en ello signos para gente
que cree (Corn, 6:99).
molcula. Sin el permiso de Dios, ninguna fuerza, cualquiera que sea, podra juntar esos tomos en distintas
proporciones de modo que pasen a ser molculas de ozono o de oxgeno.
gratis respecto de las que tendremos en el ms all. Pero lo que se recibir debido a una vida llena de
ingratitud, desatencin y negligencia para con El, no ser ms que lo que con justicia nos mereceremos:
Y cuando vuestro Seor anunci: Si sois agradecidos, os dar ms (de Mi gracia). Pero, si sois
desagradecidos,... Ciertamente, Mi castigo es severo (Corn, 14:7).
CAPITULO 4
Hasta aqu hemos hablado acerca de los tomos y cmo es creada la materia de la nada. Dijimos que los
tomos son los ladrillos de todo, sea animado o inanimado. Es importante advertir esto ltimo, es decir, que
son los ladrillos de lo que tiene vida como de lo que no tiene vida. En consecuencia es muy sorprendente que
siendo partculas carentes de vida sean el componente bsico de lo viviente. Esto tambin es algo que los
evolucionistas nunca pueden explicar.
As como es imposible imaginar que pedazos de piedras se juntan para formar organismos vivos, del
mismo modo es imposible imaginarse tomos que se juntan por decisin propia para constituir organismos
vivientes. Pensemos en un amontonamiento de piedras y una mariposa. Las primeras son inanimadas y la
segunda animada. No obstante, al penetrar en su constitucin, nos encontramos con que unas y otra estn
integradas por las mismas partculas subatmicas.
El ejemplo que damos a continuacin puede servir mejor como explicacin respecto de la imposibilidad
de que la materia inanimada se transforme por s misma en materia animada: puede volar el aluminio? No.
Podr volar una mezcla de aluminio con gasolina y plstico? Por supuesto, tampoco. Esos elementos podrn
volar solamente si los juntamos de tal manera que constituyan un aeroplano. Pero, quin hace que el aeroplano
vuele? Las alas? El motor? El piloto? Nada de lo nombrado consigue por s mismo que el aeroplano vuele.
Es decir, para conseguir que vuele es necesario ensamblar distintas partes segn un diseo particular, pero
ninguna de ellas por separado tiene la capacidad de volar. Las caractersticas de cada uno de los componentes
son importantes, pero la capacidad para el vuelo slo se obtiene uniendo a todas ellas en un diseo especial. Los
sistemas vivientes responden al mismo principio. Una clula se forma por medio de la ordenacin de tomos
inanimados en un diseo muy especial. Las facultades de la clula, como las de crecimiento, reproduccin y
otras, son el resultado de diseos perfectos antes que propiedades de las molculas. Ese diseo pertenece a Dios,
Quien crea lo vivo a partir de lo inerte:
Dios hace que germinen el grano y el hueso del dtil, saca al vivo del muerto y al muerto del vivo.
Ese es Dios! Cmo podis, pues, ser tan desviados! (Corn, 6:95).
Slo Dios, el Sabio y Todopoderoso, puede dar vida a una substancia inanimada, es decir, crear vida. Los
sistemas vivientes poseen estructuras tan intrincadas que an no se ha descifrado plenamente cmo operan, a
pesar de los avances tcnicos modernos.
De todos modos, podemos comprender cierta realidad gracias a los progresos --especialmente del siglo
pasado-- asombrosos de la ciencia y tecnologa. Los seres animados poseen estructuras extremadamente
complejas. Cuando se present la teora de la evolucin a mediados del siglo XIX, la investigacin usaba
microscopios que daban la impresin de que las clulas eran amontonamiento de materia. Pero gracias al
microscopio electrnico y otros instrumentos de avanzada, se pas a saber que la clula, el ladrillo de lo
viviente, tiene una estructura muy complicada que slo se pudo formar como resultado de un diseo perfecto.
Lo ms importante es que los estudios modernos demostraron que es absolutamente imposible que la vida surja
espontneamente de la materia inanimada.
La fuente de la vida slo es la vida. Esto tambin ha sido comprobado experimentalmente 38. Se trata de
otro problema que los evolucionistas nunca pudieron resolver, motivo por el cual, en vez de presentar
evidencias cientficas, nos cuentan cosas que no equivalen ms que a cartn pintado, arreglos artificiales para
causar buena impresin. Plantean cosas ilgicas bajo el barniz de supuestos cientficos: dicen que la materia
tiene conciencia, capacidad y voluntad por s misma. Llegan al punto en que ni ellos mismos creen los absurdos
que plantean y eventualmente se ven forzados a confesar que no pueden dar una respuesta cientfica al
interrogante o problema principal:
Hubo un momento, antes de que se presente la vida, en que la Tierra era rida y totalmente desolada.
Actualmente nuestro mundo rebosa de vida. Cmo se produjo sta? De qu modo se constituyeron las
molculas orgnicas en base al carbono cuando la vida era inexistente? Cmo surgi la primera expresin
viviente? Cmo se desarroll esa primera manifestacin de lo viviente para llegar a producir existencias tan
elaboradas y complejas como nosotros, capaces de explorar el misterio de nuestro origen? 39.
El sorprendente arcano de la evolucin se centra ahora en cmo se ha originado y desarrollado la materia,
porqu ha tomado la forma que tiene y porqu se puede llegar a constituir en un conjunto de molculas vivas
complejas40.
Como confiesan los evolucionistas a los que citamos, el propsito bsico de la teora de la evolucin es
negar que Dios cre lo viviente en particular y todo en general. Aunque la verdad de la creacin de cada cosa es
obvia y aunque se ha demostrado definidamente que cada particularidad es el producto de un diseo demasiado
perfecto para ser el resultado de la casualidad, los evolucionistas se hacen los distrados frente a dicha realidad y
se mueven en crculos viciosos de manera absurda.
Los cientficos evolucionistas, en vez de aceptar la verdad de la creacin prefieren hablar de las aptitudes
de la materia inerte y de cmo lo inanimado se transforma por s mismo en organismos animados. Mientras
cierran sus ojos a la realidad, se exponen sin saberlo a la vergenza. Es obvio que suponer que los tomos se
valen de alguna especie de don para autotransformarse en sistemas animados no tiene nada que ver con la razn
y la cordura.
Supongamos que los evolucionistas descubren un escenario en donde tomos inconscientes e inanimados
se transforman en organismos con vida y, lo que es ms importante, en personas con elevados niveles de lucidez
e inteligencia. Veamos uno de esos posible escenarios absurdos.
De alguna manera, despus del Big Bang los tomos pasaron a existir con fuerzas delicadamente
equilibradas. En una cantidad suficiente constituyeron el universo. Los que se dedicaron a nuestro planeta
formaron primero la corteza terrestre. Pero despus, de modo repentino, decidieron producir seres vivos! Para
eso dichos tomos se autotransformaron primero en clulas con estructuras muy complejas, luego stas se
reprodujeron por propia decisin mediante la divisin directa o indirecta y despus configuraron organismos
que empezaron a hablar y a or. El paso siguiente de esos tomos en su evolucin fue transformarse en
profesores universitarios que pasaron a observar mediante el microscopio electrnico y a pensar que todo ese
desarrollo se dio por casualidad. Otros tomos se juntaron para formar ingenieros que construyen puentes,
rascacielos, naves espaciales y satlites o investigadores que se especializan en fsica, qumica y biologa.
Atomos como los del carbono, el magnesio, el fsforo, el potasio y el hierro, no se formaron para producir una
masa oscura sino cerebros perfectos de una complejidad excepcional, cuyos secretos an no se han develado en
su totalidad. Esos cerebros empiezan a ver imgenes tridimensionales con una resolucin perfecta no lograda
hasta ahora por ninguna tecnologa. Otros tomos formaron comediantes que hacen rer a la gente con sus
bromas. Tambin produjeron msicos que alegran la vida de los dems y as sucesivamente.
Ustedes decidirn hasta donde llega la irracionalidad de fbulas como la relatada.
Podramos seguir enumerando otros logros, pero mejor nos detenemos aqu y nos volcamos a un
experimento para demostrar que tales embustes no se pueden concretar nunca.
Permitamos que los evolucionistas pongan dentro de un recipiente todos los tomos que consideren
necesarios para dar lugar a la vida. Admitmosles que agreguen all todo lo que creen necesario para que dichos
tomos se unan y formen materia orgnica. Y dejemos que se tomen todo el tiempo de espera que les parezca:
cien aos, mil aos, cien millones de aos..., para lo cual debern transferir el cuidado del recipiente de padre a
hijo. Algn da saldr de all, digamos, un profesor? Sin lugar a dudas, por ms que se espere, no saldr un
profesor ni nada con vida. Aunque en ese recipiente se reuniesen millones de fragmentos orgnicos, no
adquirirn de modo espontneo las caractersticas de algo vivo.
Veamos ahora si los tomos inconscientes pueden formar naturalmente las molculas de ADN --las
piedras angulares de la vida-- y las protenas.
El ADN (cido desoxirribonucleico), ubicado en el ncleo de la clula, contiene los cdigos que llevan la
informacin de todos los rganos y caractersticas del cuerpo. Ese cdigo es tan complejo, que los cientficos
recin lo pudieron descifrar hasta cierto punto en el decenio de 1940. Contiene toda la informacin del ser
viviente y puede autorreproducirse. Cmo es que una molcula formada por el ensamble de tomos puede
contener informacin y cmo se multiplica autorreplicandose, son cosas que permanecen sin respuesta.
Las protenas son los ladrillos de lo viviente y juegan un papel clave en muchas funciones esenciales.
Forman parte de la hemoglobina, la cual transporta el oxgeno a distintos puntos de nuestro organismo; estn
presentes en los anticuerpos, los que anulan el efecto de los microbios que se introducen en los organismos
vivos; participan en las enzimas, las que nos ayudan a digerir el alimento y convertirlo en energa. La frmula
que hay en nuestro ADN permite la constitucin de cincuenta mil tipos de protenas. Como es obvio, stas son
decisivas en grado sumo para la supervivencia de los seres vivientes. La sola ausencia de una de ellas lo
imposibilitara. En consecuencia, antes que nada podemos concluir que es imposible desde el punto de vista
cientfico que las molculas gigantes ADN y protena se formen espontneamente como resultado de algunas
casualidades.
El ADN se compone de una serie de nucletidos y la protena de una serie de aminocidos, ordenados en
ambos casos segn una secuencia especial. Es materialmente imposible que las molculas de ADN o de
protenas de miles de tipos distintos se ordenen de modo casual en la secuencia necesaria para la vida. Los
clculos de probabilidad revelan que la posibilidad de que las molculas de protenas ms simples logren la
secuencia correcta es igual a cero. (Para ms informacin ver el libro de Harun Yahya El Engao del
Evolucionismo). Adems de esa imposibilidad matemtica tambin existe un importante obstculo qumico para
que dichas molculas se formen por casualidad. Si la relacin entre el ADN y la protena fuese el resultado del
paso del tiempo, del azar y de procesos naturales, entonces habra una especie de tendencia qumica a que
ambos reaccionaran del modo que lo hacen cidos y bases. En tal caso, si la casualidad hubiese jugado
realmente un papel, ocurriran variadas reacciones qumicas naturales al azar entre diversos fragmentos de ADN
y protenas y los seres vivos que vemos hoy da no se hubiesen formado.
De existir dicha tendencia natural a que fragmentos de ADN y protena reaccionen, sera posible
entonces que una mezcla de tiempo transcurrido, azar y leyes qumicas originen vida como producto de algn
tipo de mezcla de molculas? No, para nada. Todo lo contrario, porque el problema es que todas esas reacciones
naturales son las de peor tipo en lo que a sistemas de vida concierne. El ADN y la protena, abandonados al paso
del tiempo, al azar y a sus tendencias qumicas, reaccionan de un modo que destruye lo viviente, evita cualquier
tipo de desarrollo de vida41.
Como vemos, es absolutamente imposible que el ADN y las protenas, que de ninguna manera se
constituyen accidentalmente, den lugar a la vida al quedar librados, sin control, a sus propias tendencias. El
filsofo contemporneo Jean Guitton se ocup de dicha imposibilidad en su libro Dios y la Ciencia, al decir que
la vida no pudo haberse formado como resultado de las casualidades:
Qu casualidad hizo que ciertos tomos se aproximen para formar las primeras molculas de
aminocidos? A travs de qu casualidad esas molculas se juntaron para formar una estructura
extremadamente compleja llamada ADN? Hago estas simples preguntas como las hizo el bilogo Franois
Jacob: Quin prepar los diseos de la primer molcula de ADN para proporcionar el primer mensaje que
condujo al nacimiento de la primera clula viviente?
Si uno se contenta con asumir el desarrollo a travs de las casualidades, esa pregunta, al igual que muchas
otras, queda sin respuesta. A eso se debe que en los ltimos aos los bilogos comienzan a cambiar sus puntos
de vista. Los principales investigadores no se contentan con repetir como loros las leyes darwinistas, sino que
presentan teoras nuevas sorprendentes. Las mismas se basan en la idea de que en el proceso se encuentra
involucrado un principio de organizacin aparentemente superior a la materia 42.
Como expresa Jean Guitton, la ciencia ha llegado a un punto tal gracias a los descubrimientos realizados
en el siglo XX, que han podido establecer cientficamente que la teora de la evolucin de Darwin no tiene
ninguna validez. El bilogo norteamericano Michael Behe se ocupa de esto en su conocido libro La Caja Negra
de Darwin:
La ciencia ha hecho enormes progresos en la comprensin de cmo opera la qumica de la vida, pero la
elegancia y complejidad de los sistemas biolgicos a nivel molecular han paralizado los intentos de la ciencia
por explicar sus orgenes. En la prctica nadie ha podido dar razn del origen de sistemas biomoleculares
complejos tan especficos, y mucho menos de cmo se desarrollaron. Un gran nmero de cientficos ha
afirmado a modo de chanza que en la prctica ya disponen de esas explicaciones o que ms tarde o ms
temprano aparecern, pero en la literatura cientfica profesional no se puede encontrar nada que respalde esas
aseveraciones. Lo ms importante es que hay razones apremiantes --basadas en las estructuras de los sistemas-para pensar que una explicacin darwinista del mecanismo de la vida se comprobar siempre difcil de
aceptar43.
As como todo el universo fue creado de la nada, tambin los seres vivientes que en l residen fueron
creados de la nada. As como nada proviene de la nada por casualidad, est claro que la materia inanimada no
pudo combinarse y formar seres vivos por casualidad. Slo Dios, Poseedor de poder, sabidura y conocimiento
infinitos, tiene potestad para hacer esas cosas:
Vuestro Seor es Dios, Que ha creado los cielos y la tierra en seis das. Luego, se ha instalado en el
Trono. Cubre el da con la noche, que le sigue rpidamente. Y (ha creado) el sol, la luna y las estrellas,
sujetos por Su orden (al servicio de los seres humanos). No son Suyas la creacin y la orden? Bendito
sea Dios, Seor del universo! (Corn, 7:54).
CAPITULO 5
EL PODER DEL ATOMO
Ahora sabemos como los tomos --los ladrillos de todo lo animado e inanimado en el cosmos-- son los
elemento que constituyen la materia de una manera extraordinaria. Segn lo que hemos examinado, esas
partculas extremadamente pequeas tienen una organizacin interna perfecta. Pero lo milagroso del tomo no
termina all, pues tambin alberga una energa tremenda.
Esa potencia oculta en el tomo es tan grande, que su descubrimiento posibilit al ser humano construir
grandes canales para unir ocanos, cavar tneles que atraviesan montaas, producir climas artificiales, y llevar a
cabo muchos proyectos similares provechosos. Sin embargo, mientras por una parte esa fuerza oculta en el
tomo sirve a la humanidad, por otra parte plantea un peligro muy grande, al punto que debido a su utilizacin
inadecuada decenas de miles de personas perdieron la vida en unos pocos segundos en Hiroshima y Nagasaki
durante la Segunda Guerra Mundial. Hace poco ocurri un accidente en la central nuclear de Chernobyl en
Rusia, que provoc la muerte o lesin de una gran cantidad de gente.
Antes de dar una informacin detallada sobre los desastres que caus la energa del tomo en Hiroshima,
Nagasaki y Chernobyl, veamos resumidamente la naturaleza de esa potencia del tomo y cmo se presenta.
La Fisin
Es una reaccin en la que se fragmenta el ncleo del tomo, que existe como tal gracias a la fuerza ms
potente del universo, es decir la fuerza nuclear fuerte. El principal material usado en la fisin es el uranio
porque tiene uno de los tomos ms pesados. En otras palabras, su ncleo cuenta con una cantidad muy grande
de protones y neutrones.
En los experimentos de fisin los cientficos disparan un neutrn a gran velocidad al ncleo del tomo de
uranio. Se trata de algo interesante. Despus de que el neutrn fue absorbido por dicho ncleo, ste se convierte
en muy inestable. Esa inestabilidad significa la aparicin de una cantidad distinta de protones y neutrones en
el ncleo, lo que le produce un desequilibrio estructural que lo lleva a fragmentarse y a emitir cierta cantidad de
energa con el objetivo de recuperar la armona perdida. Eso se traduce en que el ncleo empieza a eyectar sus
componentes a gran velocidad.
En estos experimentos el uranio fue bombardeado con neutrones acelerados en mecanismos especiales
llamados reactores y de acuerdo a una medida muy precisa, porque deben golpearlo inmediatamente y en un
punto determinado. Por ese motivo los experimentos se realizan tomando en cuenta todas las probabilidades, sin
dejar nada librado al azar. Se calcula con gran precisin la cantidad de uranio a utilizar, la de neutrones para
bombardearlo, la duracin del disparo y la velocidad a la que los ltimos son lanzados.
Despus que estn hechos todos esos clculos, y el medio circundante preparado, se produce el
bombardeo. Es necesario que por lo menos se fragmente uno de los ncleos de esa masa de tomos de uranio
para que de all se desprendan dos o tres neutrones muy potentes y a gran velocidad. Entonces comienza una
reaccin en cadena al chocar esos neutrones con otros ncleo de uranio. Cada nueva fragmentacin repite el
proceso sealado y eso hace que se libere una gran cantidad de energa.
Fue esa divisin de los ncleos lo que caus los desastres de Hiroshima y Nagasaki y la muerte de cientos
de miles de personas. En el momento inmediatamente despus de la detonacin de la bomba atmica arrojada
sobre Hiroshima por los norteamericanos en 1945 durante la Segunda Guerra Mundial, murieron unas cien mil.
La lanzada sobre Nagasaki produjo al momento de la explosin cuarenta mil muertos. La radiacin y potencia
energtica liberada de los ncleos arras reas residenciales muy grandes y dio origen a muchos desrdenes
genticos y fisiolgicos irreparables en quienes sobrevivieron. Muchos de stos perdieron la vida poco despus.
Otros que siguieron procreando pasaron los daos genticos adquiridos a su descendencia.
Si nuestro planeta, la atmsfera, todo lo animado e inanimado, incluidos nosotros, est compuesto de
tomos, qu es lo que impide que nos veamos envueltos en reacciones nucleares como las de Hiroshima y
Nagasaki en cualquier momento y lugar?
Los neutrones son creados de tal manera que al estar libres en la naturaleza --sin vnculo con un ncleo-sufren una descomposicin llamada desintegracin beta. Eso hace que ninguno de ellos ande vagando
libremente. En consecuencia, los que son usados en las reacciones nucleares deben ser obtenidos por mtodos
artificiales.
Esto deja en claro que Dios, el Creador del universo, hizo todo con una medida precisa. Si los neutrones
en estado libre no se descompusiesen, la Tierra no sera ms que un cuerpo celeste esfrico e inhabitado donde
tendran lugar reacciones nucleares interminables. Dios cre el tomo con esa potencia colosal en su interior y
la mantiene bajo control de una manera fenomenal.
La Fusin
La fusin nuclear, lo contrario a la fisin, es el proceso por medio del cual se juntan dos ncleos livianos
para formar uno ms pesado y se libera la energa de enlace. Pero es muy difcil lograr esto de manera
controlada porque los ncleos tienen carga positiva y se repelen con gran vigor si son obligados a unirse. Por lo
tanto hay que usar una fuerza de una potencia tal que supere la de repulsin y los fusione. La energa cintica
requerida es equivalente a una temperatura de 20-30 millones de grados 44. Se trata de una temperatura
extraordinariamente elevada y no existe prcticamente ningn material slido que pueda tolerarla o contener las
partculas que se involucran en esa reaccin. Es decir, excepto el corazn de la bomba atmica, no se encuentra
en la Tierra de forma natural algn dispositivo en el que se pueda llevar a cabo esa fusin.
Pero en el sol esa reaccin tiene lugar de manera permanente. All el hidrgeno se fusiona y se convierte
en helio. En esa conversin se consume materia que se libera como energa, la cual llega hasta nosotros sin
cesar bajo la forma de calor y luz. Segundo a segundo el sol convierte 564 millones de toneladas de hidrgeno
en 560 millones de toneladas de helio. Las restantes 4 millones de toneladas de materia se convierten en energa.
Ese tremendo suceso que da lugar a la energa solar, tan esencial para la vida en nuestro planeta, viene
ocurriendo sin pausa desde hace millones de aos. Lo dicho nos plantea un interrogante. Si en cada segundo el
sol pierde 4 millones de toneladas de materia, cundo se consumir totalmente? Si asumimos que el astro ha
estado produciendo energa en esa proporcin durante tres mil millones de aos, la masa perdida hasta ahora
sera de 400 mil trillones de toneladas, lo que es igual a unas cinco milsimas de su masa total actual. Esto es
equivalente a que en tres mil millones de aos una piedra de cinco kilogramos pierda un grano de arena, lo cual
nos dice que la masa del sol es tan enorme que debera pasar muchsimo tiempo antes de que se consuma.
Recin en el siglo XX hemos descubierto la composicin del sol y lo que sucede en su interior. Hasta
entonces nadie saba de cosas como las explosiones nucleares, la fusin y la fisin. Se desconoca de qu modo
el sol produca energa, aunque nos la estuvo enviando durante millones de aos.
Pero lo realmente curioso es que nuestro planeta est colocado a una distancia del sol tan particular, que
estamos a salvo de su radiacin destructora a la vez que recibimos la energa que nos resulta provechosa. Es
decir, el sol fue ubicado a la distancia correcta y posee las dimensiones apropiadas para que se desarrolle la vida
sobre la Tierra, especialmente la humana.
Las increbles reacciones nucleares que tienen lugar en ese astro inmenso se vienen produciendo hace
muchos millones de aos de un modo muy delimitado y en perfecta armona con los procesos en nuestro
planeta. Para comprender cun extraordinariamente controlado y delicado es el equilibrio que opera en el sol,
pensemos en que nosotros ni siquiera podemos manejar correctamente una simple central elctrica nuclear.
Ningn cientfico y ningn equipo tecnolgico fue capaz de prevenir el accidente nuclear que ocurri en el
reactor de Chernobyl en Rusia en 1986. Se dice que el impacto de esa desgracia perdurar durante 30-40 aos.
Aunque los especialistas han cubierto los sectores contaminados con una capa enormemente gruesa de
hormign para tratar de impedir ms daos, posteriormente se inform que haba escapes de gases muy
peligrosos para la vida humana. Y la ciencia se muestra impotente frente a ese tipo de amenazas.
Sucede que nos encontramos frente a la soberana y poder infinitos de Dios, Quien controla cada tomo
del universo as como las subpartculas que los integran. En un versculo cornico se expresa la potestad y
soberana de Dios sobre lo que El crea:
En cualquier situacin en que te encuentres, cualquiera que sea el pasaje que recites del Corn,
cualquier cosa que hagis, Nosotros somos testigos de vosotros desde su principio. A tu Seor no se Le
pasa desapercibido el peso de un tomo en la tierra ni en el cielo. No hay nada, menor o mayor que eso,
que no est en una Escritura clara (Corn, 10:61).
La masa que estalla y el aire del entorno forman una bola de fuego extremadamente caliente e
incandescente como el sol o ms an. El calor que radia es lo suficientemente potente para quemar toda la
materia combustible en un rea de 4-5 kilmetros de dimetro. Esa radiacin tambin puede causar daos
irreparables al sentido de la visin. En ese momento y alrededor de la bola de fuego se genera una onda
expansiva a altsima velocidad.
- Seis segundos despus de la explosin...
La onda expansiva golpea la tierra, produce los primeros daos mecnicos y presiona con gran potencia la
masa de aire. Esa intensidad va decreciendo con el aumento de la distancia al centro de la explosin. A un
kilmetro y medio de ese punto la presin agregada es el doble de la atmosfrica normal. La posibilidad de que
la gente quede con vida bajo semejante peso es del 1%.
- Trece segundos despus de la explosin...
La onda expansiva se propaga a lo largo de la superficie terrestre y es seguida por la explosin que crea el
reposicionamiento del aire enviado por la bola de fuego. Esta explosin tambin se propaga a lo largo de la
superficie terrestre a una velocidad de 300-400 mil kilmetros por hora.
Entre tanto la bola de fuego se ha enfriado y su volumen decreci. Por ser ms liviana que el aire
comienza a elevarse. Ese movimiento hacia arriba causa que en la tierra se invierta la direccin del viento y
provoque una corriente de aire potente hacia el centro, aunque inicialmente era desde el centro de la explosin
hacia el exterior.
- 30 segundos despus de la explosin...
Mientras la bola de fuego se eleva, su forma se distorsiona y toma la apariencia de un hongo.
Dos minutos despus de la explosin...
La nube con forma de hongo llega a una altura de doce mil metros, el lmite inferior de la estratosfera. El
viento que sopla a esa distancia dispersa el hongo y sus contaminantes (mayormente radiactivos), a los que
esparce por la atmsfera. Por tratarse de partculas pequesimas pueden dirigirse a las capas atmosfricas
superiores. Antes de caer sobre la superficie terrestre pudieron haber dado la vuelta al planeta varias veces. Es
decir, se dispersan por todo el mundo.
Debido a que una de esas partculas o rayos viaja a elevada velocidad dentro de la materia, colisiona con
gran fuerza con los tomos o molculas que encuentra en su camino. Ese choque puede ser un desastre para la
delicada estructura de la clula, la que puede morir o, si se recupera del golpe, comenzar a crecer de un modo
descontrolado --a lo que se llama cncer-- semanas, meses o aos ms tarde.
La radiacin es muy intensa en un rea de mil metros a la redonda del lugar de la explosin. Quienes
sobreviven pierden casi todos sus glbulos blancos, se les presentan heridas en la piel y mueren debido a las
hemorragias en un perodo que va desde unos das a dos o tres semanas. El efecto sobre los que estn ms
alejados del epicentro de la detonacin es variable. Quienes quedan expuestos a los rayos dainos emitidos por
la bola de fuego a una distancia de 13, 16 y 22 kilmetros, sufren quemaduras de tercer, segundo y primer grado
respectivamente. Se experimentan menos problemas digestivos y de hemorragia pero despus aparecen otros
desrdenes funcionales: prdida del cabello, quemaduras en la piel, anemia, esterilidad, abortos, nacimientos de
bebs tullidos o deformados, etc. En estos casos tambin es posible que se mueran en un perodo que va desde
los diez das a los tres meses. Incluso bastante despus pueden presentarse problemas en la visin, leucemia y
cncer. Uno de los ms grandes peligros de la explosin de la bomba de hidrgeno (otra bomba nuclear de
enorme potencia destructora debido a la fusin de los ncleos de varios istopos de hidrgeno al formarse los
ncleos del helio) es la entrada al organismo de polvo radiactivo a travs de la respiracin, la digestin y la piel.
Ese polvo provoca los desrdenes antes mencionados, segn el grado de contaminacin.
Todo eso es causado por tomos que no podemos ver a simple vista. Los tomos pueden formar vida o
destruirla, propiedad que nos exhibe lo impotentes que somos y la superioridad de Dios, el Creador de todo.
CONCLUSION
Con su cuerpo constituido por tomos, respira tomos presentes en el aire, come tomos en los alimentos
y bebe tomos al tomar agua u otro lquido. Su visin no es otra cosa ms que la colisin que se produce en sus
ojos de los electrones de los tomos con los fotones. Y qu sucede con lo que se siente al tocar algo?
Sencillamente, las sensaciones son formadas por los tomos en su piel que repelen a los tomos de lo que se
quiere agarrar o palpar.
En verdad, casi todos saben hoy da que el cuerpo humano, el planeta, el universo, en resumen, todo,
consiste en tomos. No obstante, es posible que muchas personas, hasta ahora, no se hayan puesto a pensar en el
sistema con el que funciona eso a lo que llamamos tomo. Y si lo hicieron, es casi seguro que no hayan sentido
la necesidad de investigarlo porque se les ocurri que se trata de algo que concierne solamente a los fsicos. Sin
embargo, nosotros vivimos totalmente vinculados a ese sistema perfecto a lo largo de toda nuestra existencia. Se
trata de un sistema tal, que cada uno de los trillones de tomos que tiene el silln en el que nos sentamos, posee
un orden sobre el que se puede escribir muy mucho. El slo detallar cmo se forma un tomo, su estructura,
cmo opera y la energa que de all se puede derivar, llevara bastantes pginas. Y en la medida en que avance la
tecnologa y el conocimiento a nuestra disposicin, aumentar el volumen de lo redactado.
Entonces, cmo se form ese orden? No puede ser que las partculas que se esparcieron alrededor del
Big Bang hayan formado los tomos debido a una decisin repentina y que luego, por casualidad, se haya
constituido un ambiente apropiado para que se transformen en materia. Por cierto, es imposible explicar un
sistema as por medio de lo fortuito. Todo lo que usted ve a su alrededor y hasta el aire que le resulta invisible,
consiste en tomos, los cuales cuentan con una interrelacin muy compleja.
Quin puede dirigir el movimiento entre ellos? Lo puede hacer usted? Si piensa que su cuerpo consiste
esencialmente en tomos, cul de ellos dirige a cul? Ser posible que los tomos de su cerebro, que no se
diferencian de los del resto del cuerpo, controlen a los dems? Si asumimos que esos tomos son los
directores, entonces debemos responder algunas preguntas:
Si todos los tomos que constituyen el cerebro son los directores, cmo y basado en qu toman sus
decisiones?
De qu modo los tomos del cerebro cooperan entre ellos?
Por qu ni uno solo de los trillones de esos tomos se opone a las decisiones tomadas?
Cmo se comunican esos tomos entre s?
Al considerar estos interrogantes resulta obviamente ilgico decir que los trillones de tomos del cerebro
son los directores.
Se podra decir entonces que slo uno de ellos es el director y todos los dems le obedecen? Si se cree
esto, se presentan otras preguntas:
Cul tomo es el director y quin lo eligi?
En que lugar del cerebro est ese tomo director?
En qu se diferencia de los dems?
Por qu el resto de los tomos obedecen al director de modo incondicional?
Antes de responder a estas preguntas digamos algo ms: el supuesto director est compuesto de otras
partculas. Entonces, por qu y bajo qu pretexto las mismas se juntan para constituir al tomo director?
Quin controla a esas partculas? Puesto que hay otra voluntad que las dirige, hasta qu punto es correcto
sostener que el tomo que constituyen es el director?
Al llegar a este punto queda inevitablemente desaprobado el supuesto de que uno de los tomos que
integran nuestro cerebro pueda ser el mandams. Cmo es que la incontable cantidad de tomos que existen
en el universo siguen viviendo en completa armona, incluidos los que constituyen la gente, los animales, las
plantas, la tierra, el aire, el agua, los planetas, el espacio, etc.? Cul de esos innumerables tomos ser el
director si a su vez est integrado por muchas subpartculas? Suponer cosas as o atribuir todo a la casualidad y
negar la existencia de Dios, el Creador de los Mundos, no es ms que negar Sus signos injusta y altivamente, a
pesar de estar convencidos de ellos (Corn, 27:14).
Pensemos simplemente que el ser humano formado por cierta disposicin de los tomos en diversas
combinaciones, nace, se alimenta de tomos y crece en tomos. Despus lee un libro hecho de tomos en un
edificio o departamento construido con tomos. Luego recibe un diploma de ingeniero nuclear fabricado con
tomos. Incluso puede dar conferencias y decir que esos tomos se presentaron por casualidad y llegaron a
formar un sistema extraordinario de modo azaroso. De ser as, de dnde deriva la voluntad, la conciencia y la
inteligencia de las que se vale para la exposicin que hace?
En casi todas las pginas de este libro se repite una y otra vez que es imposible que los tomos que
integran las cosas animadas e inanimadas se hayan formado ellos mismos por casualidad. Lo que podemos decir
a esos que an piensan que el azar es el generador de los fenmenos mencionados, a pesar de todo lo dicho, o
que las cosas con sus formas actuales son el producto del mecanismo de prueba y error, no es para nada
distinto a lo que el profeta Abraham (P) dijera a los incrdulos:
No has visto a quien disputaba con Abraham sobre su Seor porque Dios le haba dado el
dominio? Cuando Abraham dijo: Mi Seor es Quien da la vida y da la muerte. Dijo (su interlocutor,
Nemrod segn la tradicin): Yo doy la vida y doy la muerte. Abraham dijo: Dios trae el sol por
Oriente; trelo t por Occidente. As fue confundido el infiel. Dios no dirige al pueblo impo (Corn,
2:258).
NOTAS
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2. Stephen Hawkings A Brief History of Time A Readers Companion (Editado por Stephen Hawking;
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4. H. P. Lipson, A Physicist Looks at Evolution, Physics Bulletin, vol. 138, 1980, p. 138.
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10. Hugh Ross, The Creator and the Cosmos, How Greatest Scientific Discoveries of the Century
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11. Michael Denton, Natures Destiny: How The Laws of Biology Reveal Purpose in the Universe,
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12. Paul Davies, The Accidental Universe, Cambridge: Cambridge University Press, 1982, Prefacio.
13. Jean Guitton, Dieu et La Science: Vers Le Mtaralisme, Paris: Grasset, 1991, p. 62.
14. Jean Guitton, Dieu et La Science: Vers Le Mtaralisme, Paris: Grasset, 1991, p. 62.
15. Jean Guitton, Dieu et La Science: Vers Le Mtaralisme, Paris: Grasset, 1991, p. 62.
16. Umit Simsek, Atom, (El Atomo), Yeni Asya Yayinlari, p. 7.
17. Taskin Tuna, Uzayin Otesi (Ms All del Espacio), Bogazici Yayinlari, 1995, p. 53.
18. Jean Guitton, Dieu et La Science: Vers Le Mtaralisme, Paris: Grasset, 1991, p. 62.
19. Taskin Tuna, Uzayin Otesi (Ms All del Espacio), Bogazici Yayinlari, 1995, p. 52.
20. David Filkin, Stephen Hawkings Universe: The Cosmos Explained, Basic Books, Octubre 1998,
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21. Richard Feynman, The Character of Physical Law, The M.I.T. Press, Marzo de 1967, p. 128.
22. Richard Feynman, The Character of Physical Law, The M.I.T. Press, Marzo de 1967, p. 129.
23. Jean Guitton, Dieu et La Science: Vers Le Mtaralisme, Paris: Grasset, 1991, p. 5.
24. Martin Sherwood and Christine Sulton, The Physical World, Oxford University Press, 1988, p. 81.
25. Martin Sherwood and Christine Sulton, The Physical World, Oxford University Press, 1988, p. 82.
26. Martin Sherwood and Christine Sulton, The Physical World, Oxford University Press, 1988, p. 79.
27. L. Vlasov, D. Trifonov, 107 Stories About Chemistry, 1977, p. 117.
28. L. Vlasov, D. Trifonov, 107 Stories About Chemistry, 1977, p. 118.
29. David Burnie, Life, Eyewitness Science, London: Dorling Kindersley, 1996, p. 8.
30. Nevil V. Sidgwick, The Chemical Elements and Their Compounds, vol. 1, Oxford University Press,
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32. Structure of Matter, The Time Inc. Book Company, 1992, p. 76.
33. P. W. Atkins, Molecules, Scientific American Library, p. 115.
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40. C. D. Darlington, Evolution for Naturalists, (NY, John Wiley, 1980), p. 15.
41. Dr. Gary Parker, Impact N 62, Agosto de 1978.
42. Jean Guitton, Dieu et La Science: Vers Le Mtaralisme, Paris: Grasset, 1991, p. 38.
43. Michael Behe, Darwins Black Box, Free Press, 1996, p. x.
44. Thma Larousse, Tematik Ansiklopedi Bilim ve Teknolji (Enciclopedia de la Ciencia y la
Tecnologa), p. 300.
Con su cuerpo constituido por tomos, respira tomos presentes en el aire, come tomos en los
alimentos y bebe tomos al tomar agua u otro lquido. Su visin no es otra cosa ms que la colisin que se
produce en sus ojos de los electrones de los tomos con los fotones. Y qu sucede con lo que se siente al
tocar algo? Sencillamente, las sensaciones son formadas por los tomos en su piel que repelen a los
tomos de lo que se quiere agarrar o palpar.
En verdad, casi todos saben hoy da que el cuerpo humano, el planeta, el universo, en resumen,
todo, consiste en tomos. No obstante, es posible que muchas personas, hasta ahora, no se hayan puesto a
pensar en el sistema con el que funciona eso a lo que llamamos tomo. Y si lo hicieron, es casi seguro que
no hayan sentido la necesidad de investigarlo porque se les ocurri que se trata de algo que concierne slo
a los fsicos.
Sin embargo, nosotros vivimos totalmente vinculados a ese sistema
perfecto a lo largo de toda nuestra existencia. Se trata de un sistema tal, que cada uno de los
trillones de tomos que tiene el silln en el que nos sentamos, posee un orden sobre el que se puede
escribir muy mucho. El slo detallar cmo se forma un tomo, su estructura, cmo opera y la energa que
de all se puede derivar, llevara bastantes
pginas.
En este libro se relata lo inverosmil que resulta la suposicin de que un tomo, el ladrillo de todo
lo animado e inanimado, se pueda
originar de manera espontnea, a la vez que se demuestra el carcter sin tacha de la creacin de
Dios.