nada de lo tuyo pudo quedarme
ni siquiera como cuando soñaba;
es que mi corazón me engañaba
creyendo que eras capaz de amarme
.
prefiero la soledad al dejarme
porque el cariño que yo deseaba
solamente en mis sueños estaba
y era un solitario al despertarme
.
tan siquiera si odio puedes darme
mi alma rota siempre te preguntaba
y tu silencio solo contestaba:
¡de tu fracaso no quieras culparme!
.
tu te empeñabas en humillarme
pese que más y más te deseaba
es que mi corazón me engañaba
creyendo que eras capaz de amarme
.
Ahhh los corazones que engañan....¡¡¡
ResponderEliminarMuy triste.
ResponderEliminarBesos.
Uy que poema tan triste te mando un beso
ResponderEliminarAyyyy de esos engaños, de esas tristezas que suelen inspirarnos en momentos en que nada parece calmarnos y sólo las palabras sinceras que nacen sin mucha pre concepción logran darnos algo de consuelo! Son la fuente asegurada donde abrevan los poetas
ResponderEliminarUn abrazo!!