Los supremacistas islamistas siguen asesinando gente sin descanso por todo el orbe, y en esta ocasión también nos ha tocado la siniestra lotería de la muerte en la ciudad de Barcelona.
Este verano han hecho de las suyas en diferente medida toda clase de "istas" de éstos, y todos basurientos, ya sean religiosos o extremistas anticlericales, identitarios tribales, de raza o aldea según casos, progres iconoclastas inquisitoriales, animalistas, o de un sexo sobre otro, tanto da, el caso es que tratan de imponer su minoría sobre lo que ha dado en llamarse "mayoría silenciosa" de forma agresiva y demasiadas veces violenta, el caos y el arrasamiento neuronal parecen dominar el mundo si pasas demasiado rato en la red y das crédito a todo lo que se comparte y retuitea compulsivamente.
Luego es verdad que sales a la calle y la mayor parte de las personas y las cosas siguen siendo medianamente normales, cantan los pajaritos, y la constante sensación de acabóse y conspiración de todo y sobre todo, resulta tan paranóica como risible.
Con esto no estoy restando un ápice de gravedad a lo mucho de cierto que hay de base para preocuparse en nuestras sociedades, sino tratar de situarlo en su contexto y dimensión reales, pero temo que es batalla perdida porque nosotros no dominamos el invento de doble filo sino que es justamente al revés, y se nos está yendo de las manos si es que no ha ocurrido ya por lo que veo y leo (para que luego hablen de los robots inteligentes que se rebelarán contra nosotros en el futuro)
Contagiada por tal atmósfera apocalíptica y kafkiana, alguna que otra vez se me ha pasado por la cabeza si el Anticristo tiene que ser forzosamente una persona o pudiera referirse a otra clase de cosa, aunque aviso que no estoy nada versada en el tema y a lo mejor estoy sugiriendo una burrada...pero nada, tranquis que servidora no tiene intención de atacar pizzerías por muchos bulos para pirados que lleguen a sus ojitos, ni va a colar, al menos del todo, y en absoluto en lo que a mí respecta, que Putin es un tipo majísimo y adalid de derechos humanos por muchas trolas hasta en vídeo que nos quiera colar su inmenso aparato de desinformación o admiradores varios, todavía queda algún medio de información tradicional, por fortuna (en Rusia sólo lo que diga él)
No tengo muchas ganas de repetir lo que hace poco dije en otro post cada vez que se produce un atentado de los puercos barbachivos, sigue siendo válido y lo será; tampoco me apetece extenderme sobre la gentuza nazionanista, los del supremacismo cateto, que incluso en semejantes circunstancias han sido incapaces de dejar a un lado sus miserias, les importan una higa las víctimas a las que han olvidado en una lamentable manifestación donde no había ni una pancarta contra los asesinos y sí otras demenciales en otra especie de 14-M donde si no se cercó ninguna sede esta vez fue porque las autoridades al frente, dolosamente negligentes y clamorosamente incompetentes, eran justamente de esos mismos que portaban los mensajes que no culpaban a los asesinos en ningún caso, y que además se abrazaban a sus familiares, sino que culpaban a SM el Rey y al Gobierno que sí estaban donde debían pese a lo que digan otros, algunos de ellos muy exaltados de diferente signo que todo lo arreglan con muchos cojones y poco cerebro propugnando aquello que más desean los separatas y los yihadistas (que buscan fracturar la sociedad y dividirnos, aterrorizarnos, trasladar las culpas, enfrentar a la sociedad con sus instituciones y gobiernos, que metamos a toda una comunidad en un mismo saco, etc)
No me cabe duda de que se frotarán las manos leyendo en las redes fecales los exabruptos descerebrados de tantos, más allá de cualquier razonable y lógica indignación.
Sin embargo, aquí no se detecta tanto la cacareada y temida "islamofobia", como la más que obvia hispanofobia de aquellos mantenidos por el resto de españoles a los que desprecian, además de otras más compartidas y aceptadas socialmente en las que hoy no entraré porque no es el día.
Y sí, mantenidos, porque ellos no pueden pagar nada.
Ha llegado la hora de ser mucho más firmes contra estos mostrencos y de que la mayoría silenciosa catalana deje de una vez de serlo o no habrá vuelta atrás en el desafecto.
Lo único bueno del esperpento del pasado Sábado, por si no lo supieran ya todos en el extranjero- siempre hay tontucios y despistados como el NYT y la CNN a quien le meten doblados ministros que no existen- es que se han mostrado tal como son ante los ojos del mundo entero, y muchos han expresado su asco en las portadas más importantes.
Si les quedara un ápice de inteligencia, habrían aprovechado la ocasión para aparcar su soberbia suicida y salir del atolladero en el que están, pero comprobado queda que prefieren embestir paredes.
POSDATA: quería escribir unas cosas y han salido otras, pero eso pasa mucho.
Parece también que ahora es muy criticable que la gente ponga velitas y crespones negros, como si el duelo y la piedad tuvieran que ser sacrificados o no fueran compatibles con combatir el terrorismo, cada uno que lo lleve como quiera y como pueda y sepa, faltaría más.
O si hay que poner fotos de la masacre, o no, porque en algunos casos se utilizó morbosamente y con fines espurios la de un pobre niño ahogado, cierto; es opinable claro, yo me inclino por el no hacerlo, más allá del respeto a las víctimas y sus familias, es propaganda que desean los causantes y tampoco añaden nada que no sepamos o no suponga nuestra imaginación.
A los terroristas yihadistas se les atragantó la risa y el humo de la grifa cuando querían dar más miedito y sacaron al niño de la Tomasa y el personal se lo tomó a guasa.
La Tomasa debía ser la más tonta de su casa y de su pueblo, porque si hay que ser imbécil para que venga uno a lavarte el coco y te cuente milongas para que te suicides siendo hombre- que ya saben que todo son ventajas- qué decir de una mujer española libre y educada con derechos para que venga un atrasado de estos y te ponga un trapo en la cabeza, te enfunde en un saco negro y te lleve a sitios miserables para que hagas de coneja y te pases la vida pariendo borregos para la causa del Diablo.
Aunque se crean el colmo de la superioridad moral o racial, y el no va más de la inteligencia, todos los supremacistas tienen en común ser unos tarados, y las más de las veces tontos útiles de otro tarado que les supera en coeficiente.