Ya sabéis amigos, que esta niña que nos acompaña desde hace tiempo sentada en la luna no tenía nombre y os propusimos buscarle uno... un nombre que la identificara y que nos ayudara a contar su historia... una historia que estamos soñando y de la que hoy queremos adelantaros algo...
Todo sucedió una noche cualquiera, la noche en la que la luna dejó de crecer y no volvió a ponerse como un queso de bola. Los astrónomos no encontraban la respuesta...
Fue entonces cuando descubrieron a la niña allí sentada. Al preguntarle, ella contestó: "Me llamo Catalina y me gusta soñar cuentos, para luego contárselos a la luna"...
Desde ese día se la conoce como "Catalina, la niña que cuenta cuentos a la luna".
Continuará......
PD: gracias Ro.