hasta pronto

sábado, 30 de junio de 2012 a las 16:11
La primavera atesorada en una botella a la deriva. Y junto a los últimos vestigios del naufragio, vuelve a llevárselo el mar. Sigo remando. El océano es inmenso, pero nuestro mundo pequeño. Quién sabe.

Que tengas una buen día.

Y hasta pronto.
:)

ceniza

viernes, 29 de junio de 2012 a las 13:37
El sueño ha vuelto. Le ha faltado el tiempo. Hacía meses que la ligereza no me despertaba.

El cielo está gris. Every cloud has a silver lining. Y es más cierto que nunca: hoy cae ceniza. Motitas plateadas que lo cubren todo. Recuerdos difusos que se deshacen al contacto con cualquier cosa material. Pero brillan antes de desaparecer.

Continuará. Quedan muchos episodios.

sabía a lo que me arriesgaba

jueves, 28 de junio de 2012 a las 4:06
Dicen que sientes con más intensidad cuando eres joven. Cuando el corazón aún bombea con fuerza y los ojos brillan. Antes, le he enseñado el poema entero. "Ésta es tu parte". La primera, siempre la primera. Se la ganó. ¿Y el resto? "El resto es simple poesía", le he dicho. Simple poesía. Unos versos cortos, de tres meses, jóvenes y vigorosos, que me duelen como una dulce fragancia de alcohol, primaveral, pero de alcohol, sobre una herida en carne viva. Pero, al fin y al cabo, ¿qué serán tres meses en una vida de ochenta años? Quizás entonces sea un corte imperceptible, que no deja cicatriz; sin embargo, hoy es devastadora lluvia de lágrimas sobre la piel. La noche es larga y la adicción fuerte, pero peor lo pasará él cuando supere las suyas. Mis neuronas intactas, las suyas maltrechas. Mi corazón maltrecho, el suyo intacto. Complementos imperfectos de un pasado perfecto, que se expresa en una palabra, y no en dos. Las dos palabras han perdido su significado, su tonalidad. Antes eran una habitación luminosa, diáfana, la luz del sol sobre las sábanas, la vida color de rosa. Hoy son ocho letras escritas en una pantalla, pronunciadas inconscientemente entre el frenesí o las lágrimas. Inhabitable.

¿Dónde está mi hogar? ¿Dónde está? A veces me encuentro, desorientada, a los pies del solar donde solíamos vivir todos. Hoy solo hay ruinas. Lo construí sobre arena. Lo sembré con minas. No tengo donde dormir. Nadie que me abrace y acompase su respiración con la mía. Que se despierte antes que yo y me mire, y haga del amanecer una sonrisa. O un suspiro. Suave brisa.

Sigo mirando fotos antiguas, recortes de una vida. Ya llegará el sueño.

Silencio

miércoles, 27 de junio de 2012 a las 1:27
Concentración. Esta vez no hago esfuerzos por hacerme la dura. Y pasada la medianoche, como de costumbre, flojeo. Me gusta. Acudo en silencio. Y en silencio se ha ido. Y me doy cuenta de lo silencioso del día entero. No había reparado. Es ensordecedor. No está ahí. ¿Desde cuándo no está?

Paradójicamente, borrar una cosa tiene más significado que dejarla ahí. La indiferencia no es un arma, es la ausencia de armas. Es una bandera blanca y un adiós. Cualquier acción tiene significado, incluso el borrar. Eso me acelera el ritmo cardíaco. Hay significado. Hay una acción. Una voluntad. No caerá en la indiferencia, la llama no se apagará por el tiempo y el desgaste. Antes de que se acabe la reserva de gas, le han tirado agua encima.

Apaga mi sed. Apaga mi llama. Pero el combustible va a seguir ahí, en alguna parte escondido. La llama volverá a prender alguna vez. Hay esperanza.

22 de junio, adiós

domingo, 24 de junio de 2012 a las 22:26
Pinceladas de una primavera contigo:
nuestro refugio en la corona,
compañía que no es radio,
una voll dam en domingo,
un par de besos y helados.

parecía la luna y era una antena parabólica.
delicatessen a las 20.50,
tumbada y atónita
ante tu espalda despierta.

vuelvo

jueves, 21 de junio de 2012 a las 11:49
Hemos empezado por el final.

Creía que no escuchaba, pero el inconsciente siempre escucha. Todos hacemos cosas diferentes cuando creemos que nadie nos ve. No había manera de dormir, un año más. Otra mentira que no sé si me conduce a la libertad o me ancla más en la niñez.

La cama desierta me ha echado. El amante invisible se ha hecho fuerte y me ha relegado al sofá. Despertar con el amanecer a destiempo. Después, cuando el día ya no es hostil, vuelvo.

Siempre vuelvo.

rescate

sábado, 9 de junio de 2012 a las 16:42
El mundo se iba a pique aquel verano, igual que mi vida. Las malas noticias goteaban desde el techo y formaban unas horribles manchas, viscosas y nauseabundas. Parecía que los cimientos eran de arena -ya se sabe que no hay que construir con material barato- y que la casa, mi hogar tal y como lo conocía, se derrumbaría en un corto lapso de tiempo.

Y no se me ocurrió otra cosa que salir al balcón, poner los pies a remojo y sentarme a que me diera el aire.  Era fresco, y se me puso la piel de gallina mientras escuchaba la voz del interlocutor de radio anunciando un rescate. No sé si por el frío del aire, de las palabras o del futuro. Todo se quedó helado en ese momento. Un rescate. Miré al cielo, por si llovían billetes. Pero no.

Entonces sonó mi móvil y tu nombre apareció en la pantalla. Ese fue mi rescate. Mi tesoro llovido del cielo.

a ninguna parte

a las 2:21
Es un juego de niños. Como cuando tirabas semillas al aire y te reías al ver a los murciélagos sobrevolar tu cabeza a la caza de un falso mosquito. Una ilusión. Vemos lo que queremos ver. Aunque los murciélagos son ciegos. Unas veces vemos lo que queremos ver, otras veces no vemos lo evidente. Nadie invierte todos sus ahorros en un viaje a ninguna parte. Venga de donde venga, si te embarcas, es un engaño. Acabarás allí, en ninguna parte. Y tan dificil como encontrar el camino de ida es encontrar el de vuelta.

Oasis

viernes, 8 de junio de 2012 a las 2:52
Tengo todo lo que quiero aquí. Ahí fuera se perdió lo superfluo, y lo importante lo llevo dentro. La brisa me saborea, el sol me llueve y yo canto a la sombra de un plátano frondoso y fuerte. El tiempo se enreda con mi voz y no llega a ningún sitio. Pero yo sé que hablo, y me oigo, aunque no veo mi piel arrugarse. No dará tiempo, aunque aquí no exista. Un día la realidad me arrancará de cuajo de mi espejismo. Y solo podré ver dunas teñidas de ocre en el ocaso de mi sonrisa indeleble.

pantalla

domingo, 3 de junio de 2012 a las 0:36
Se dice en un suspiro y se teclea en ocho letras. Podría mirarlo cien veces. La impresión sería la misma. Mi cara también. Y al final, dos puntos y un paréntesis.

espalda

sábado, 2 de junio de 2012 a las 0:52
Hoy la vergüenza me la guardo. No se quedará arrugada en el suelo de ninguna habitación. Espalda al aire para mi y para nadie más, aunque la haya exhibido más de 10 horas. Y ahora, sobre la mesa, llegan vibraciones a mis dedos. Pero todo es fruto de mi imaginación y mis ganas. Suena mal, pero los pensamientos de mi sucia mente bailan a ritmo de drumnbass esta noche.

Imperfectamente | Powered by Blogger | Entries (RSS) | Comments (RSS) | Designed by MB Web Design | XML Coded By Cahayabiru.com