Garbancito es un ser pequeñito, el cual un día se escondió en una lechuga para poder así devorar, poco a poco por dentro, a la vaca que se lo tragara. En su última hazaña perdió su pequeña libreta. Por lo poco que he podido leer y entender, entre sus múltiples aficiones está la de escribir microrrelatos.
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2 de octubre de 2013
Él y ella y un instante (REC)
A grandes zancadas sobre las olas se acercó a ella. Las palmeras se apartaron cuando llegó a la orilla. Tímidamente le ofreció un caramelo. Ella enrojeció y entre varias muecas le sonrió. Chupó el caramelo que era de fresa y se lo devolvió al momento. Él también probó el pegajoso dulce. Ella puso cara de asco al vérselo meter en la boca. Él lo escupió sobre las nubes azules al ver su grimosa cara. Entonces retrocedió sobre el mar de olas y se dirigió hacia la isla del tesoro en donde sin más miramientos desapareció para siempre bajo la cascada helada.
24 de enero de 2013
El mapa del tesoro (REC)
Mientras suelto las pastillas en las hierbas altas que indicarán el comienzo, voy pensando por dónde dejaré el resto. Tal vez las suelte por el camino que bordea el río de jarabe que sube por el bosque de sobres. Pasará por el acantilado del viento de aerosoles y bordeando la cueva del silbido continuo donde habita el ogro de bata verde. Si quiere entrar para atajar, que tenga cuidado con él y con las jeringuillas del techo. Cuando atraviese los algodones de la montaña de azúcar, dejaré escondido su medicamento, ese que guardaba bajo la almohada de sabor a anís que tan feliz le hacía al verme.
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