Algunas personas parecen mudas. Aparentemente sabemos muy poco de ellas o casi nada. Pero hay silencios que lo dicen todo. Momentos que habitan el instante. Palabras que expiran en forma de tinta en tentativa de poder expresar. Sentimientos que se rebautizan a través de una hoja en blanco. Quizás en un poema, puedas encontrarme.
Tenemos que tratar de conocernos a nosotros mismos para después, poco a poco, tratar de conocer al mundo y a los demás.
ResponderEliminarIrene no te puedes imaginar la alegría que me da volver a saber que estás ahí.
Un beso muy fuerte
UN PLANTEAMIENTO MUY CONCRETO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Querida Irene
ResponderEliminarTe echaba de menos,creo que nunca llegaré a conocer realmente el mundo...
Un Beso
Y es posible que no fuera muy descaminado.
ResponderEliminarUn abfrazo.
Cuanto tiempo Irene!!!
ResponderEliminarQue alegría volver a reencontrarme contigo y con tus letras.
Y no veas como me viene esta entrada, parece que la hubieses puesto para mi. Un gran maestro me dijo esta misma mañana algo muy parecido y ahora...
Estoy encantada de volver a leerte.
Mis mejores deseos para ti y un inmenso abrazo Irene.
Es muy cierto, el conocimiento del mundo comienza por lo mas pequeño "nosotros mismos". Bss
ResponderEliminarMuy interesante tu blog y tu entrada. Primero debemos conocernos nuestro interior para ver el mundo con otros ojos. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy interesante tu entrada.
ResponderEliminarHacia tiempo que no te leía, Irene.
Un cálido abrazo
Hola: después de mucho tiempo paso a leer y a estrujar todo lo bueno del blog.
ResponderEliminarEs cierto que es fundamental tener un carrir interno que nos posicione en la estabilidad de creer en nosotros. Ello es el verdadero sostén.
Un abraciño,