Los Evangelios Como Trabajos Literarios
Los Evangelios Como Trabajos Literarios
Los Evangelios Como Trabajos Literarios
TRABAJOS LITERARIOS
• El cristianismo, como un movimiento, tiene su origen en la persona y obra de
Jesucristo, su Fundador y su Jefe. Con excepción de algunos datos fragmentarios, los
registros auténticos de su vida se conservan únicamente en los cuatro Evangelios, es
decir: Mateo, Marcos, Lucas y Juan, los cuales han sido reconocidos como canónicos
por la Iglesia Cristiana desde el mero principio de su historia.
• En este libro nos acercamos a los Evangelios tratándolos como cuatro obras separadas escritas en
diferentes tiempos, en diferentes lugares y para diferentes comunidades. Evidentemente, cuando
por primera vez se publicaron, más bien que haberlos estudiado como partes ensambladas en una
armonística, se leyeron separadamente, y cada uno de ellos fue considerado, en concepto de su
autor y de la audiencia, como la obra que contenía un relato completo para su propósito. desde el
principio de la iglesia en Pentecostés hasta la mitad del siglo II no se sabe que se haya publicado
alguna armonía de la vida de Cristo, y los Evangelios debieron haber circulado cada uno
independientemente del otro en las diferentes regiones del imperio romano.
• No pretenden los Evangelios darnos un relato exhaustivo de lo que Jesús dijo o hizo. Por el
contrario dos de ellos, cuando menos, niegan explícitamente tal posibilidad, y los otros dos
la niegan por implicación. Juan declara que “hizo Jesús muchas otras señales en presencia
de sus discípulos que no están escritas en este libro” (Juan 20:30), y Lucas reconoce que
“muchos han intentado poner en orden la historia de las cosas que entre nosotros han sido
ciertísimas” (Lucas 1:1). Mateo anunció que iba a escribir “el Libro de la generación de
Jesucristo” (Mateo 1:1), y Marcos tituló su trabajo como “Principio del Evangelio de
Jesucristo el Hijo de Dios” (Marcos 1:1). Cada evangelio contiene el material selectivo que
a juicio del autor cumple mejor su propósito, y cada uno se considera completo en el
sentido de que lo realiza.
EL PROBLEMA SINÓPTICO
• Sin embargo, existe una más estrecha relación, en contenido y forma de expresión, entre los
tres primeros Evangelios. En consecuencia se les ha llamado los Evangelios sinópticos, del
griego syn, que significa juntos, y optanoamai, que significa ver, puesto que se colocan en
un punto de vista común en relación con la vida de Cristo. Esta interrelación ha provocado
el surgimiento del problema sinóptico así llamado, que concretamente es el siguiente: Si los
tres evangelios sinópticos son totalmente independientes uno del otro en origen y
desarrollo ¿por qué se parecen tanto el uno al otro hasta concordar verbalmente con toda
exactitud en muchos lugares? Si, por otra parte, existe entre uno y otro un parentesco
literario, ¿cómo pueden considerarse obra de tres testigos independientes que testifican
los hechos y las enseñanzas del Señor Jesucristo? Ninguna de las alternativas de este
dilema puede con justicia suprimirse o menospreciarse.
• Un ejemplo concreto de la clase de pasajes que crean este problema lo podemos encontrar en
la curación del leproso descrita en Mateo 8:1-4, Marcos 1:40-45 y Lucas 5:12- 16. Los tres
relatan el mismo acontecimiento, puesto que la acción es semejante en los tres y la
conversación es casi idénticamente verbal. Cada uno principia con una frase diferente que
concuerda con el contexto general de la narración, pero las palabras de Jesús son casi las
mismas.
• ¿Cómo puede explicarse esta concordancia verbal? ¿Cómo pudo ser que tres diferentes
escritores que escribieron independientemente mostraran tan completo acuerdo en el lenguaje
que usaron?
• La solución propuesta : Se han propuesto muchas teorías para explicar todos estos hechos.
En general, pueden clasificarse de tres maneras: La teoría de la tradición oral, la teoría del
préstamo recíproco y la teoría de las fuentes documentales. Cada una de ellas tiene algún
mérito; pero no puede admitirse que las tres a un tiempo sean verdaderas.
• La teoría de la tradición oral: es la más antigua de las tres, ya que parece que fue la
fundamental suposición de los padres de la iglesia. Papías insistió en que Mateo registró los dichos
de Jesús escribiéndolos en aramaico (dialecto hebreo) y que cada uno, según su capacidad, los
interpretaba. Que Marcos había sido el escribano de Pedro y su intérprete y que escribió
cuidadosamente todo lo que recordaba pero que no lo puso necesariamente en el orden original en
que el Señor habló o actuó Ireneo(alrededor del 170) siguió la misma línea de pensamiento
llamando al Evangelio de Lucas una reproducción de la predicación paulina y atribuyendo el cuarto
evangelio al discípulo de Jesús que se recostó en su pecho en la noche de la Santa Cena.
• Papías e Ireneo son los más antiguos testigos directos de la paternidad literaria de los evangelios y
su testimonio no debe rechazarse sin hacer un honrado intento para interpretarlo. En cada ejemplo
mencionado por ellos, dan por entendido que el escritor del evangelio poseía conocimiento personal
de las obras y enseñanzas de Jesús, o bien, que estaba reproduciendo el contenido de la
repetidamente escuchada predicación de algún personaje de autoridad apostólica. La teoría asume
hechos concernientes a Jesús habían sido reunidos, luego organizados, en seguida memorizados y
finalmente pronunciados en forma convenientemente fija.
• La segunda teoría es la de mutua interdependencia, es decir, que
dos de los evangelios contienen material prestado de un tercero. Sería inútil que en
esta breve reseña prestáramos atención a todas las conjeturas de orden que se han
propuesto. Si aceptáramos semejante teoría quedaría destruida la originalidad de dos
evangelios que hubieran copiado de un tercero. Es cierto que entre los antiguos no
había derechos de autor leyes que les estorbaran, y que se consideraba cualquier
documento escrito como libremente utilizable para los usos que a cada quien
conviniese; sin embargo, parece muy difícil creer que hubieran copiádose
irreflexivamente.
• La teoría más popular a la fecha es la hipótesis documentaria: que
pretende que Mateo y Lucas escribieron sus evangelios, tomando el de Marcos como base, y
demás una colección de los dichos de Jesús, a la que llaman “Q”, del alemán “Quelle”, que
significa “fuente”. Los escritores que se ocupan de los evangelios han observado que en
tanto que Mateo y Lucas divergen grandemente el uno del otro en cuanto a su contenido y al
orden en que lo consignan, el material que pertenece a Marcos lo reproduce cada uno, casi
en su totalidad. Aunque Mateo y Marcos ocasionalmente concuerden en contra de Lucas, o
aunque Lucas y Marcos concuerden en contra de Mateo, y Mateo y Lucas nunca concuerdan
en contra de Marcos. Estos resultados son precisamente los que debiéramos esperar como
consecuencia del uso que del Evangelio de Marcos hubieran hecho independientemente
entre sí Mateo y Lucas.
• El material de algunos discursos, como el Sermón del Monte, que se encuentra tanto en
Mateo como en Lucas, no aparece en Marcos. Sobre la base de que los dichos del Señor en
forma de colecciones se encuentran en los papiros de una época muy temprana, y de que el
uso de tal fuente correría paralelamente con el supuesto uso de Marcos, procedieron a
fabricar la otra fuente denominada “Q”.
• Ninguna de todas estas teorías tan rápidamente bosquejadas aquí ha demostrado ser
suficiente para explicar el origen de los Evangelios. Se necesitan mayores evidencias antes
de que se pueda dar respuesta a todas las cuestiones involucradas en este asunto. Sin
embargo, hay algunos cuantos hechos que nos parecen razonablemente ciertos:
• 1. El evangelio de Mateo nos proporciona los apuntes que Mateo tomó de la enseñanza de
Jesús con un argumento narrativo que con viveza y a veces verbalmente nos recuerda a
Marcos. La semejanza puede explicarse satisfactoriamente tomando como base una común
tradición y el contacto personal con los hechos, como también por la apropiación que se
hubieran hecho de una fuente escrita.
• 2. El evangelio de Marcos representa la línea principal de la predicación narrativa acerca de
Jesús. Es la creación literaria de un hombre que tuvo contacto con los apóstoles desde muy al
principio de la iglesia, y que la escribió cuando algunos de ellos al menos, todavía vivían. Su
contenido se conoció desde época muy temprana en una de dos formas: como narración o
como escrito.
• 3. El evangelio de Lucas representa el relato independiente, hecho por cierto viajero que
acompañaba a Pablo, y que lo escribió en la séptima década del primer siglo, utilizando en
su relato tanto la estructura narrativa de la predicación apostólica como también los
resultados de su propia investigación. Muchas de las parábolas y milagros consignados en
Lucas no son idénticos con los que consigna Mateo, y aún las enseñanzas de Jesús se
presentan arregladas con diferente orden. Si tanto Lucas como Mateo utilizaron a “Q” uno
de ellos ciertamente lo hizo con bastante libertad. O bien Mateo arregló el cuerpo de sus
enseñanzas en forma de tópicos como se encuentran en el Sermón del Monte (Mateo 5-7), o
bien Lucas las esparció a discreción por todo su evangelio. Es más razonable aceptar que
Lucas y Mateo se hayan conocido personalmente, o que Lucas haya formado su
reproducción de los dichos de Jesús en contacto directo con personas que los oyeron cuando
se pronunciaron por primera vez, o con los apóstoles que los predicaban.
TAREA
• Elaborar una tabla o cuadro comparativo de los 4 evangelios
sintetizando: autor, destinatarios, propósito, como presenta a Jesus,
estructura y división, aspectos relevantes o énfasis, versículo clave.