El documento resume las características del terapeuta según Carl Jung y describe los diferentes enfoques a la psicoterapia transpersonal según autores como Frances Vaughan y John Welwood. Jung destaca la congruencia ético-psicológica del terapeuta, una cosmovisión sólida y flexible, y el respeto y aceptación incondicional del paciente. Welwood identifica seis pasos en la psicoterapia centrada en la presencia: identificación prerreflexiva, reflexión conceptual, reflexión fenomenológica, atención plena, pre
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El documento resume las características del terapeuta según Carl Jung y describe los diferentes enfoques a la psicoterapia transpersonal según autores como Frances Vaughan y John Welwood. Jung destaca la congruencia ético-psicológica del terapeuta, una cosmovisión sólida y flexible, y el respeto y aceptación incondicional del paciente. Welwood identifica seis pasos en la psicoterapia centrada en la presencia: identificación prerreflexiva, reflexión conceptual, reflexión fenomenológica, atención plena, pre
El documento resume las características del terapeuta según Carl Jung y describe los diferentes enfoques a la psicoterapia transpersonal según autores como Frances Vaughan y John Welwood. Jung destaca la congruencia ético-psicológica del terapeuta, una cosmovisión sólida y flexible, y el respeto y aceptación incondicional del paciente. Welwood identifica seis pasos en la psicoterapia centrada en la presencia: identificación prerreflexiva, reflexión conceptual, reflexión fenomenológica, atención plena, pre
El documento resume las características del terapeuta según Carl Jung y describe los diferentes enfoques a la psicoterapia transpersonal según autores como Frances Vaughan y John Welwood. Jung destaca la congruencia ético-psicológica del terapeuta, una cosmovisión sólida y flexible, y el respeto y aceptación incondicional del paciente. Welwood identifica seis pasos en la psicoterapia centrada en la presencia: identificación prerreflexiva, reflexión conceptual, reflexión fenomenológica, atención plena, pre
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CURSO PENSAMIENTO Y PSICOLOGIA
TRANSPERSONAL
ANTONIO HERMOSILLA CANESSA
CLASE 4 CARL JUNG
El principal interés de mi trabajo no reside en el
tratamiento de la neurosis sino en el acercamiento a lo numinoso. Es, no obstante, así: el ingreso en lo numinoso es la verdadera terapia, y en la medida en que uno llega a la experiencia numinosa, se libra del temor a la enfermedad.
Carl G. Jung CARL JUNG
LAS CARACTERISTICAS DEL TERAPEUTA
Congruencia ético-psicológica: En otras palabras, el
médico tiene una tarea semejante a la que el paciente posee; esto es, ser una persona ajustada a la sociedad, por ejemplo, o en caso inverso, adecuadamente desajustada. Se trata de un compromiso ético considerable donde, en palabras del propio Jung, usted tiene que ser una persona tal como la que quiere influir sobre su paciente. Este requisito implica dejar de lado toda pretensión de autoridad o de superioridad por parte del terapeuta. Los dos protagonistas del encuentro terapéutico se encuentran en pie de igualdad ante el destino que darán al proceso curativo.
Cosmovisión sólida y flexible: Otro aspecto importante de
considerar en el terapeuta, es la necesidad de que tenga una cosmovisión, una weltanschaung, que le proporcione una imagen del mundo y de sí mismo para poder orientarse en la vida. Que tenga unas verdades en las que pueda creer y con las que pueda actuar, y que hayan demostrado su CARL JUNG
Respeto y aceptación incondicional del paciente: El
terapeuta debe adecuarse a las condiciones, características y expectativas que cada individuo trae. Esto requiere aceptar desde sus maneras de pensar hasta los aspectos más "sombríos" de su personalidad, pasando por su estilo opcional de vida y, en definitiva, por las decisiones que vaya tomando.
Amplitud cultural. Y por último, es necesario que el
terapeuta jungiano tenga también una preparación intelectual para comprender, en primer lugar, el lenguaje del inconsciente colectivo en su perspectiva histórica. Pero también, los recursos cognitivos suficientes como para valorar la situación social y cultural actual, que está influyendo sobre él y sobre su paciente. FRANCES VAUGHAN
Uno de los primeros acercamientos para intentar
dar forma de la psicoterapia transpersonal es el texto de Frances Vaughan, escrito en 1979 para la Journal of Transpersonal Psychology con el nombre “Psicoterapia Transpersonal: contexto, contenido y proceso”. FRANCES VAUGHAN CONTEXTO
“En un contexto transpersonal el terapeuta se da cuenta
de que, aún cuando ningún método determinado llevará necesariamente a un despertar transpersonal ni a una transformación personal, es mucho lo que se puede hacer apartando los obstáculos que impiden una vivencia semejante”
o vivencia en la cual un individuo trasciende las limitaciones de la identificación exclusiva con el ego o la personalidad. El contenido transpersonal incluye también los ámbitos mítico, arquetípico y simbólico de la experiencia interior, que puedan hacerse accesibles a la percepción por mediación de la imaginería y de los sueños” FRANCES VAUGHAN PROCESO
“La psicoterapia en el nivel del ego puede ser
considerada como una etapa del desarrollo interesada en la identificación. En esta etapa es probable que al cliente le preocupe intensificar la fuerza del yo, elevar la autoestima y desprenderse de pautas negativas y autoinvalidantes (…) Una segunda etapa del proceso del despertar transpersonal es la desidentificación. El trabajo en esta etapa corresponde al nivel existencial, donde el individuo se enfrenta a cuestiones básicas del significado y propósito de la vida, empieza a desidentificarse de roles, posesiones, actividades y relaciones. La resolución de este nivel implica una especie de muerte del ego que significa una mayor desidentificación respecto a las definiciones de uno mismo, tanto externas como internas” JOHN WELWOOD “Y es que el conocimiento convencional —que incluye el conocimiento proporcionado por la psicoterapia tiene lugar dentro del marco de la conciencia dividida. Como señala el fenomenólogo Peter Koestenbaum, «el conocimiento es dual y lo mismo ocurre con la intervención psicoterapéutica [...]”
“Durante miles de años, el deseo de liberarnos de las
estructuras terrenales que parecen atrapamos -el karma, el condicionamiento, el cuerpo, la forma, la materia o la personalidad ha sido una de las motivaciones fundamentales de la búsqueda espiritual. Tal vez por ello exista la difundida tendencia a utilizar la práctica espiritual como un modo de soslayar los conflictos emocionales y personales y los problemas no resueltos que nos abruman, una tendencia a la que denominé bypass espiritual y que consiste en tratar de eludir o trascender prematuramente las necesidades, los sentimientos y las tareas evolutivas básicas” JOHN WELWOOD
“Según la crítica de ciertos maestros espirituales -y también
según algunos practicantes de la meditación-, la psicoterapia es un paliativo, una forma de hacer más confortable la prisión del ego que no contribuye a corregir sino, muy al contrario, a consolidar el error del que dimana todo sufrimiento, la identificación con un yo separado que siempre trata de controlar o modificar su experiencia. Desde otra perspectiva, sin embargo, eran muchos los terapeutas que consideraban a la práctica espiritual como una forma de eludir los problemas personales que obstaculizan el logro de una vida más plena, rica y comprometida” JOHN WELWOOD
“Por esos carriles discurrió la elaboración de mi propio
enfoque terapéutico que hoy en día denomino «trabajo psicológico en un contexto espiritual» o «psicoterapia centrada en la presencia». Al proporcionarme un paso intermedio entre la reflexión psicológica convencional y el proceso más profundo de la meditación, este enfoque ha demostrado ser más congruente con mi experiencia meditativa que la terapia que antes practicaba. Se trata de un paso intermedio en la dialéctica mayor del despertar tal y como se despliega a través de la reflexión psicológica y de la presencia espiritual” JOHN WELWOOD
La “Psicoterapia centrada en la Presencia” o “Psicología del
Despertar” (Psychology of Awakening) identifica seis pasos del proceso psicoterapéutico.
“Resumiendo la secuencia que acabamos de describir
diríamos que existen los siguientes estadios: un primer movimiento del inconsciente, una posterior inmersión prerreflexiva en la experiencia (identificación), pensar y hablar acerca de la experiencia (reflexión conceptual), asumir directamente nuestra experiencia (reflexión fenomenológica), mantener la atención testigo sin identificarnos con la experiencia (atención plena), permanecer-presentes con-la-experiencia (presencia incondicional que conduce a la transmutación) y el posterior paso transreflexivo que supone descansar en la presencia abierta de la que emerge cualquier experiencia que no es otra que la vacuidad del puro ser (autoliberación)” JOHN WELWOOD
1.- La Identificación prerreflexiva
“La identificación es el pegamento que aglutina a la
conciencia con sus contenidos -pensamientos, sentimientos, imágenes, creencias, recuerdos, etcétera y nos lleva a concluir «éste soy yo» o «esto me representa». Pero, al establecer una identidad, nuestra conciencia se objetiva y se convierte en un objeto. Es como si, al mirar a un espejo, nos olvidáramos de nuestra experiencia más inmediata y nos confundiésemos con la imagen visual que vemos ante nosotros. En este sentido, la identificación es una forma rudimentaria de autoconocimiento, la mejor de que disponemos dadas las limitadas capacidades cognitivas de nuestra infancia” JOHN WELWOOD
2.- La Reflexión Conceptual
“El primer paso para liberamos de la prisión de la
identificación inconsciente consiste en hacerla consciente, es decir, reflexionar sobre ella. Es imposible pasar directamente de la identificación prerreflexiva a la conciencia no dual, pero podemos recurrir a la conciencia dividida como paso intermedio para reflexionar sobre la conciencia dividida, lo que el Buda asimilaba a quitarnos una espina utilizando otra espina”
“Existen terapias que se basan fundamentalmente en la
reflexión conceptual, terapias que no se centran tanto en el proceso global de la experiencia del cliente como en explicar o cambiar los contenidos problemáticos de su experiencia. Se trata de un enfoque relativamente tosco, en el sentido de que no alienta el contacto directo con la experiencia viva e inmediata y se contenta con la intermediación de constructos teóricos” JOHN WELWOOD
3.- La Reflexión Fenomenológica
“La reflexión fenomenológica consiste en dejar
provisionalmente de lado nuestras creencias conceptuales habituales para centrarnos de un modo más directo y relajado en nuestra experiencia. Se trata de un enfoque más sutil que la reflexión conceptual porque no impone ningún tipo de concepto o estrategia preconcebida sobre la experiencia. En cualquiera de los casos, los conceptos a los que recurre la reflexión fenomenológica son más "cercanos a la experiencia", emergen de ella, la describen y apuntan hacia lo que une siente y percibe directamente y, en consecuencia, disminuyen la distancia existente entre el observador y lo observado” JOHN WELWOOD
4.- La Reflexión Testigo o Atención Plena
“Existe un tipo todavía más sutil de reflexión que se presenta
durante los primeros estadios de la meditación de la atención plena en la que uno permanece continuamente atento al flujo de la conciencia, sin preocuparse de los contenidos concretos de la experiencia que vayan presentándose. Se trata de un enfoque en donde todavía se estrecha más la distancia existente entre el observador y lo observado, y en donde el sujeto renuncia a todo tipo de logro u objetivo (como la comprensión, el desarrollo, la articulación, la liberación o la resolución) que, en el contexto de la meditación, indicarían la existencia de una actitud mental y, en consecuencia, interferirían con el proceso de desidenlificación de todos los estados mentales” JOHN WELWOOD
5.- La Presencia Pura o Incondicional
“Aquí existe un conocimiento directo de uno mismo, el
reconocimiento directo y ajeno a toda reflexión de nuestra naturaleza esencial en tanto que ser puro. Cuando la atención se dirige hacia el exterior, la percepción es clara y penetrante, puesto que no se reviste de conceptos. En tal caso, el mundo no se ve como algo separado de la conciencia ni tampoco se ve menos vivido e inmediato que la conciencia. Por su parte, la conciencia tampoco se ve como algo subjetivo que se halle "aquí" separado de las apariencias. Y es que la conciencia y lo que en ella aparece emergen simultáneamente en el mismo campo unificado de la presencia” JOHN WELWOOD
6.- La Autoliberación
“Aquí no es preciso recurrir a ningún tipo de antídoto, ni la
comprensión conceptual, ni la reflexión, ni el «paso hacia atrás», ni el desapego, ni la atención testigo. Cuando uno está completamente presente en el pensamiento, en la emoción o en la inquietud, todo se relaja y se vuelve transparente al fundamento mismo de la conciencia. La autoliberación no es un proceso dialógico sino la realización «directa con el corazón» de la vacuidad del ser. De este modo se posibilita el conocimiento íntimo de la realidad, como dice Nishitani cuando escribe que «las cosas sólo nos revelan su esencia [talidad] cuando renunciamos a la circunferencia y saltamos al centro», un «conocimiento del no-conocimiento» que representa una apertura y una conexión plena con las cualidades autorreveladoras del yo, del mundo y de los demás” JOHN WELWOOD
“El entrenamiento terapéutico rara vez enseña al profesional
a permanecer abierto y atento a lo desconocido. Por esto, cuando los terapeutas no saben bien qué hacer o qué decir, suelen sentirse incómodos y en seguida echan mano a su arsenal de técnicas o no tardan en desviar la atención de sus clientes hacia un terreno más seguro y familiar, desaprovechando así las posibilidades creativas que les proporciona el momento presente”
“Los terapeutas suelen cerrar inadvertidamente la
experiencia de sus clientes situándola en casilleros conocidos. Si el terapeuta, por ejemplo, no puede permitir que su cliente permanezca abierto al espacio más amplio de su ser, si no puede dejar que esa apertura siga su propio ritmo o la interpreta convencionalmente, el cliente puede regresar rápidamente a su vieja identidad conocida. Hay ocasiones en las que el cliente puede abrirse a un sentimiento que el terapeuta se resista a experimentar. En tal caso es necesario que el terapeuta esté dispuesto a aventurarse en territorio desconocido porque, en caso contrario, se verá obligado a dar un paso atrás, ofrecer una MATERIALES PARA EL DEBATE
Para S. Grof la psicoterapia transpersonal debiese hacerse cargo de
las “Crisis Transpersonales”. Estas son definidas como: “Emergencias espirituales que pueden tener lugar de manera espontánea sin el concurso de ningún factor desencadenante y también pueden ser disparadas por el estrés emocional, el agotamiento físico, la enfermedad, un accidente, una experiencia sexual especialmente intensa, el parto, las drogas psicodélicas y diversas prácticas meditativas”. Todas estas experiencias conllevan inusuales estados de conciencia, cambio perceptual, emocional, cognitivo y psicosomático.
Según D. Lukoff la “Emergencia Espiritual” puede ser diagnosticada y
tratada, es por ello que luego de una ardua pelea logro introducirla en el DSM IV como “Problema Religioso o Espiritual”: “Esta categoría puede usarse cuando el objeto de atención clínica es un problema religioso o espiritual. Los ejemplos incluyen el malestar que implica la pérdida o el cuestionamiento de la fe, los problemas asociados con la conversión a una nueva fe, o el cuestionamiento de los valores espirituales que pueden o no estar necesariamente relacionados con una iglesia organizada o con una institución religiosa” MATERIALES PARA EL DEBATE
¿La Psicología Transpersonal, y más
específicamente la psicoterapia transpersonal, pueden trabajar temáticas o problemas que trasciendan las Emergencias Espirituales o los Problemas asociados a una conversión religiosa o espiritual? REFERENCIAS
Vaughan, F (1979). “Psicoterapia Transpersonal: Contexto,
contenido y proceso”, pp: 281 – 293, en Walsh, R y Vaughan, F (1991) Más allá del Ego: Textos de Psicología Transpersonal. Barcelona, Kairos.
Recuero, M (2007). Los modelos terapéuticos de Carl Jung y
de Carl Rogers. Ediciones PUC, Santiago.
Welwood, J (2002). Psicología del Despertar. Barcelona,
Kairos.
Lukoff, D (1998). “From Spiritual Emergency to Spiritual
Problem. The Transpersonal roots of the new DSM IV category”, en Journal of Humanistic Psychology. Vol. 38, Nº 2.