Tecnicas de La Logoterapia
Tecnicas de La Logoterapia
Tecnicas de La Logoterapia
logoterapia
VIKTOR FRANKL
OBJETIVO DE HOY
Conocer las distintas técnicas de la
logoterapia, para argumentar la validez de
sus conceptos en el ámbito de la vida
cotidiana.
Ya conocemos el objetivo de la
logoterapia. Pero este método, ¿cómo
se aplicaría en nuestra vida cotidiana?
cotidiana?
Vimos el caso de la película Patch Adams, donde
esta persona mediante la risoterapia, ayuda a
sus pacientes. Pero en estricto rigor, la
risoterapia no sería un método terapéutico…
¿Por qué no lo es?
No puede considerarse una terapia, ya que no cura
por sí misma enfermedades, pero en ciertos casos
logra sinergias positivas con las curas practicadas. Se
trata, en general, de que las sesiones de risoterapia
se practiquen en grupo, aprovechando el contagio de
persona a persona, ya que reír en grupo no es lo
mismo que hacerlo solos.
En la logoterapia, existen 3 técnicas entre las
más importantes:
1. La intención paradójica
2. La derreflexión
3. Diálogo socrático
1. La intención paradójica
Una paradoja es "una declaración en apariencia verdadera
que conlleva a una auto-contradicción lógica o a una
situación que contradice el sentido común. En palabras
simples, una paradoja es 'lo opuesto a lo que uno considera
cierto’.
Mediante esta técnica, se instruye al paciente a que intente
reírse de su propio sufrimiento y de esta manera afronte el
temor que le provoca la expectativa de fallar.
Por ejemplo:
Bajo este enfoque se le pide a la persona con insomnio
hacer exactamente lo contrario a lo que intenta. El paciente
de insomnio dice: "me acuesto y trato de quedarme
dormido, pero por más que intento no lo logro“. En la
terapia, con la intención paradójica, se le dice a la persona:
"acuéstese y trate lo más que pueda de mantenerse
despierto". Por alguna razón, la atención invertida le
permite dejar la batalla por dormir puesto que la orden le
dice: manténgase despierto. Dejando de luchar, el sueño
llega más rápido.
2. La derreflexión
La derreflexion busca precisamente evitar la autobservación
compulsiva, haciendo que el paciente se ignore a sí mismo.
Pero para ignorar algo, se necesita que actué prescindiendo
de eso y se dirija a otra cosa. Y en la medida en que logre
poner en primer plano en su consciencia un objetivo que
pueda restituir a la vida su plenitud de sentido, como para
que valga la pena vivirla, pasan a segundo plano su persona
y sus dificultades, generalmente con un sentido de humor.
Por ejemplo:
El caso de un hombre casado que padeció por mas de 20 años una
idea compulsiva que radicaba en un temor por volverse homosexual,
su obsesión principal era que “Temía tocarle el pene de algún
hombre que se encuentre en su cercanía de forma involuntaria, y
que este hecho lo impida presentarse nuevamente en sociedad”
Consejo de V. Frankl: “Tendría que aprovechar cada situación que se
le presentara para tocarle el pene a quien se le cruce y demostrarle
de una buena vez a todo el mundo lo cuan homosexual podía
volverse, además que debía tratar de hacerlo con tal convicción que
definitivamente quede anulado por la sociedad”
3. El diálogo socrático
Surge de Sócrates y consiste en ayudar al interlocutor a sacar
verdades que existen en su propio interior. El terapeuta no induce,
manipula o impone su visión, tan solo promueve el
autoconocimiento.
El diálogo verdadero es cara a cara: te escucho mientras te observo,
me dejo sentir por lo que me dices, y entonces recibo la información
de contenido y forma de lo que me expresas.
El diálogo es la forma propia de la enseñanza socrática en la que el
terapeuta pregunta más que responder. Cuando un terapeuta
plantea una pregunta simple, toda la responsabilidad del
descubrimiento está en el paciente.
Por ejemplo:
T (terapeuta): Dime ¿qué es lo que te T: Veo que mueves tus manos y tus
ocurre? piernas, ¿qué es lo que sientes?
C (consultante): no me siento bien, me C: no lo sé
siento infeliz, inseguro de mi mismo
T: ahí si tenemos un problema, ¿si tú
T: ¿y qué es lo que sientes con todo
eso, emocionalmente? no lo sabes, quién?
C: me da pena, me siento triste C: Bueno, siento ansiedad
T: ¿y cómo es sentirte triste? T: ¿qué te pone ansioso?
C: me pongo a llorar, me encierro en C: acabar luego mi carrera universitaria
mi cuarto, me siento abatido.
Actividad
Deben elaborar un ejemplo para cada técnica
de la logoterapia, especificando el problema del
paciente y la sanación que propones, de
acuerdo a la técnica correspondiente.