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Integrantes:
Adriana Barrera Loaiza
Silvia Alejandra Urías Miranda
Valía Daniela Peñuelas Camacho
Docente Facilitador:
Juan José Moran Llamas
Materia:
Seminario de Psicología Aplicada
Actividad. Estudio de caso
Grupo 01
Carrera De Psicologia
Culiacan, Sinaloa, A 13 De Diciembre Del 2024
Caso del documento En un club de tenis, un joven jugador presentó un episodio maníaco con síntomas como agresividad, delirios paranoides, alucinaciones, lenguaje desorganizado y deterioro en sus relaciones personales y desempeño deportivo. Este episodio no solo afectó su bienestar, sino también la cohesión y el clima emocional del equipo técnico y los compañeros.
El caso fue abordado desde el modelo de Bienestar Psicológico de Carol
Ryff, combinando estrategias de intervención individual y grupal. Se suspendieron temporalmente las actividades del deportista afectado, derivándolo a tratamiento psiquiátrico, y se implementaron talleres educativos y dinámicas grupales para los entrenadores y jugadores, fomentando la cohesión y el manejo de conflictos.
Síntomas identificados
1. Conductas agresivas y desafiantes.
2. Lenguaje incoherente y grandilocuente. 3. Delirios paranoides y alucinaciones. 4. Deterioro en actividades cotidianas y relaciones familiares. 5. Impacto en la cohesión grupal y el rendimiento del equipo.
Estrategias de apoyo y tratamiento alternativo
1. Terapias individuales para manejo emocional:
o Aplicar técnicas cognitivo-conductuales para el reconocimiento y manejo de pensamientos distorsionados. o Terapias basadas en mindfulness para reducir ansiedad y mejorar la regulación emocional. 2. Talleres grupales de integración y cohesión: o Dinámicas para mejorar la comunicación, la empatía y la resolución de conflictos dentro del equipo. o Entrenamientos para identificar y gestionar factores desencadenantes de estrés en entornos competitivos. 3. Apoyo al equipo técnico: o Formación continua en psicopatología para identificar señales de alerta. o Talleres para fortalecer la resiliencia y la toma de decisiones en situaciones complejas. 4. Desarrollo de redes de apoyo: o Fomentar un programa de involucramiento familiar para mejorar el entorno de apoyo al jugador. o Crear un espacio de mentoría donde jugadores con más experiencia ayuden a sus compañeros a manejar el estrés y los retos.
Conclusiones grupales
Este caso nos demuestra lo complicado, pero también lo importante, que
es atender los problemas de salud mental en el deporte. Lo que le ocurrió al jugador no solo afectó su vida personal, sino que también desestabilizó al equipo completo. Sin embargo, gracias a una intervención bien planificada, no solo se pudo ayudar al joven, sino que se logró fortalecer al equipo técnico y a sus compañeros, generando un ambiente mucho más positivo.
La pausa temporal en las actividades del jugador y su derivación a un
psiquiatra fueron decisiones necesarias para priorizar su bienestar. Pero lo más valioso fue el trabajo con el resto del equipo. A través de talleres y dinámicas grupales, todos aprendieron a manejar mejor las situaciones difíciles, a comunicarse de manera más efectiva y a trabajar juntos en lugar de enfrentarse. Además, el equipo técnico recibió herramientas para identificar problemas similares en el futuro y manejar los conflictos de manera más saludable.
El enfoque multidisciplinario fue clave aquí. Tener la colaboración de
psicólogos clínicos, deportivos y un psiquiatra permitió atender el problema desde todos los ángulos. Esto no solo ayudó al jugador, sino que también evitó que la situación se volviera más complicada, mejorando el ambiente del equipo.
Para los jugadores, esta experiencia fue un recordatorio de que la salud
mental es tan importante como el entrenamiento físico. El deporte puede ser demandante, pero también tiene que ser un espacio para crecer y sentirse bien, no un lugar que agobie. Aprender a cuidar su salud emocional no solo les ayudará a competir mejor, sino también a disfrutar más del deporte y de sus relaciones con los demás.
En conclusión, este caso nos enseña que la psicología deportiva no se
trata solo de ganar partidos o competencias, sino de cuidar a las personas. Apostar por el bienestar emocional de los deportistas y su equipo técnico es apostar por un futuro más saludable y exitoso para todos. Y aunque el camino no siempre es fácil, los resultados valen totalmente la pena. Esta experiencia nos deja un modelo claro para abordar situaciones similares y nos recuerda que, en el deporte y en la vida, lo más importante siempre será el bienestar de las personas.