Planificación Estrratégica

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PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA

ADMINISTRACIÓN PARA LA
INFORMÁTICA

PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA

ESTUDIANTE: CARLOS MOISÉS


CERVANTES PEREZ

CATEDRÁTICO: MARÍA DEL ROCÍO


OJEDA LÓPEZ

CARRERA: INFORMÁTICA
PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA

Introducción

En el ámbito empresarial, la planificación y la administración estratégica son herramientas


fundamentales para asegurar la competitividad y la sostenibilidad de una organización.
Estas disciplinas no solo facilitan el logro de objetivos a corto y largo plazo, sino que
permiten a las empresas adaptarse a un entorno globalizado, caracterizado por la constante
evolución tecnológica y económica. La planificación estratégica surge como una necesidad
para guiar a las organizaciones en la toma de decisiones informadas, permitiéndoles
adaptarse a las amenazas y aprovechar las oportunidades del mercado. Por otro lado, la
administración estratégica evoluciona para integrarse en el núcleo de la gestión
organizacional, estructurando sus principios en torno a un análisis profundo del entorno
competitivo y de las capacidades internas.

Este ensayo examina la evolución de la administración estratégica y su impacto en la


planificación organizacional, explorando los modelos y herramientas claves que han
moldeado su práctica actual. Para ello, se analizan los conceptos y metodologías expuestos
en dos textos: Planificación estratégica, algunas reflexiones teóricas de José Alberto
Sánchez López, y Administración estratégica: evolución y tendencias de Juan Saavedra
González. Ambos estudios permiten identificar no solo los avances en estas disciplinas, sino
también sus aplicaciones prácticas y tendencias futuras.

Desarrollo

Evolución de la administración estratégica: Del origen militar al contexto empresarial

El concepto de estrategia, derivado del ámbito militar, se refiere a la coordinación de


recursos para alcanzar objetivos específicos. En sus inicios, la administración estratégica
adaptó este concepto al mundo empresarial, resaltando la importancia de aprovechar las
fortalezas internas para enfrentar las amenazas del entorno externo. La obra de Saavedra
González (2005) identifica esta adaptación inicial como la primera etapa de la disciplina, que
se remonta a los años 1960 y 1970. Durante esta época, surgieron las primeras teorías
sobre cómo gestionar las capacidades organizacionales de manera efectiva para responder
a un entorno cambiante, especialmente ante el estancamiento económico y la creciente
competencia mundial tras la Segunda Guerra Mundial​.

Para mediados de la década de 1970, figuras como Peter Drucker, Kenneth Andrews y
Alfred Chandler comenzaron a definir el marco de la administración estratégica,
enfocándose en la necesidad de alinear la estructura organizacional con la estrategia.
Chandler, por ejemplo, estableció que “la estructura sigue a la estrategia”, lo cual implica
que una empresa debe adaptar su organización interna en función de su estrategia para
asegurar el éxito. Con el tiempo, este principio ha guiado la implementación de estrategias
en muchas empresas, permitiéndoles adaptarse a nuevos mercados y demandas​.

Herramientas de análisis estratégico: Modelos esenciales

La administración estratégica se ha consolidado como una disciplina que emplea un


conjunto de herramientas y modelos para guiar a las organizaciones en la formulación de
PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA

sus estrategias. Uno de los modelos más influyentes es el de las cinco fuerzas de Porter, el
cual permite analizar el nivel de competencia en un sector industrial determinado. Este
modelo examina la rivalidad entre competidores, el poder de negociación de proveedores y
clientes, la amenaza de productos sustitutos y la amenaza de nuevos entrantes. El análisis
de estas fuerzas ofrece una visión completa de los factores que pueden afectar la
rentabilidad de una industria, ayudando a las empresas a formular estrategias competitivas
efectivas​.

Otra herramienta destacada es la Cadena de Valor, que desglosa las actividades de una
empresa en dos categorías: actividades primarias y de apoyo. Esta herramienta permite
identificar cuáles actividades agregan valor al producto final, ayudando a optimizar procesos
y a reducir costos. La Cadena de Valor ha sido fundamental para que las empresas diseñen
estrategias enfocadas en mejorar la eficiencia de cada etapa del proceso productivo y así
generar una ventaja competitiva sostenible​.

Además, la Matriz BCG (Boston Consulting Group) y el Cuadro de Mando Integral


(Balanced Scorecard) han sido muy útiles en la gestión estratégica. La Matriz BCG, por
ejemplo, permite evaluar la cartera de productos de una empresa y clasificar cada producto
según su cuota de mercado y el crecimiento del mercado, identificando cuáles deben recibir
más recursos y cuáles no. Por otro lado, el Balanced Scorecard ayuda a monitorear el
rendimiento organizacional en diversas áreas, como la satisfacción del cliente, el
aprendizaje y crecimiento interno, los procesos internos, y los objetivos financieros. Estas
herramientas contribuyen no solo al desarrollo de la estrategia, sino también a su
implementación y monitoreo, asegurando que las empresas mantengan el rumbo adecuado​.

Prospectiva estratégica: Más allá de la planificación tradicional

La prospectiva estratégica se ha convertido en una de las tendencias más innovadoras en el


ámbito de la administración. Este enfoque se centra en anticipar futuros escenarios
posibles, permitiendo a las organizaciones adaptarse a un contexto de incertidumbre
constante. A diferencia de la planificación estratégica tradicional, que se enfoca en metas
concretas a corto y largo plazo, la prospectiva busca configurar futuros deseados y
prepararse para ellos, incluso cuando el contexto es incierto y volátil. La prospectiva es
especialmente útil en sectores tecnológicos y en industrias altamente competitivas, donde
los cambios son rápidos y disruptivos​.

Sánchez López (2021) menciona que la prospectiva estratégica incluye el análisis de


tendencias, alternativas tecnológicas y factores económicos y sociales que pueden influir en
el futuro de la organización. Este enfoque ayuda a las empresas a desarrollar un "escalón
prospectivo", donde cada logro estratégico alcanza una nueva etapa, alineada con el
escenario deseado. La prospectiva permite que las organizaciones no solo respondan a los
cambios, sino que también sean agentes proactivos en la configuración de su futuro,
anticipando posibles cambios en su entorno​.

Tendencias modernas en la administración estratégica: Estrategia dinámica y capital


intelectual

En los últimos años, la administración estratégica ha avanzado hacia enfoques más


dinámicos y flexibles. Este cambio ha sido impulsado por el crecimiento de la tecnología y la
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globalización, que han transformado la forma en que las empresas compiten. La "estrategia
dinámica" es una respuesta a estos desafíos, ya que permite a las organizaciones adaptar
rápidamente sus estrategias en función de los cambios del mercado. Esta estrategia implica
una capacidad constante de innovación y un enfoque en el aprendizaje continuo,
asegurando que las empresas mantengan su competitividad en un entorno en constante
cambio​.

Otra tendencia importante es la creciente atención al capital intelectual como fuente de


ventaja competitiva. En lugar de centrarse únicamente en los activos tangibles, las
organizaciones actuales valoran cada vez más los activos intangibles, como el
conocimiento, las habilidades y la cultura organizacional. Este enfoque permite que el
capital humano se convierta en un motor de innovación y productividad, fortaleciendo la
posición competitiva de la empresa. Además, la administración estratégica ha comenzado a
integrar principios éticos y valores, reconociendo que estos factores son esenciales para
construir una reputación sólida y fomentar la confianza de los clientes y colaboradores.

Conclusión

La planificación y administración estratégica han evolucionado de herramientas básicas de


planificación a complejas disciplinas que abarcan el análisis profundo del entorno, la
anticipación de cambios futuros y la gestión efectiva del capital humano. Hoy en día, estas
prácticas no solo ayudan a las empresas a definir y alcanzar sus metas, sino que también
les permiten ser ágiles y adaptarse rápidamente ante cambios inesperados en el mercado.
Las herramientas de análisis, como el modelo de las cinco fuerzas de Porter, la Cadena de
Valor, y el Balanced Scorecard, han sido fundamentales para estructurar la estrategia
organizacional, proporcionando una base sólida para la toma de decisiones.

La prospectiva estratégica y la estrategia dinámica representan un cambio significativo en la


administración moderna, permitiendo que las organizaciones no solo respondan al cambio,
sino que lo anticipen y lo lideren. Este enfoque asegura que las empresas no solo
mantengan su relevancia en el presente, sino que también estén preparadas para los
desafíos del futuro. La inclusión de valores éticos y la valorización del capital intelectual
fortalecen el compromiso de las organizaciones con una estrategia que va más allá de la
simple rentabilidad y se enfoca en la creación de un impacto positivo y sostenible.

En conclusión, la planificación y administración estratégica se han convertido en pilares


fundamentales para el éxito en un mundo empresarial complejo y en constante cambio. Con
herramientas y enfoques modernos, estas disciplinas ofrecen un marco integral para guiar a
las empresas hacia un futuro de éxito, sostenibilidad y adaptación constante a un entorno
en continua evolución.

Referencias

1. Saavedra González, J. (2005). Administración estratégica: evolución y tendencias.


Revista Economía y Administración, 64, 61-72.
2. Sánchez López, J. A. (2021). Planificación estratégica, algunas reflexiones teóricas.
Folletos Gerenciales, 25(1), 62-72.
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