Tutela Jimmy Armando Dorado F
Tutela Jimmy Armando Dorado F
Tutela Jimmy Armando Dorado F
Señor (a)
JUEZ CONSTITUCIONAL DE POPAYÁN (Oficina de Reparto).
E. S. D.
PARTE ACCIONANTE
La constituye, JIMMY ARMANDO DORADO FUENTES, identificado con cedula
de ciudadanía No. 1.061.088.703 de Florencia Cauca.
HECHOS
PRIMERO: El 21 de octubre de 2024, presente y radique a las 2:27 pm ante la
SECRETARIA DE TRANSITO Y TRANSPORTE MUNICIPAL DE POPAYAN, -
INSPECCIÓN, solicitud de aplazamiento de audiencia inicial programada para ese
mismo día 21 de octubre de 2024 a las 2:30 pm, por una presunta infracción al
código de tránsito; Anexo a mi solicitud y como prueba de justificación radique
incapacidad médica antes de la hora de la audiencia. (documentos que se anexan
a este escrito)
Ilustración 1
PROCEDENCIA DE LA TUTELA
POR LA PARTE CONTRA QUIEN SE OPONE
Es procedente la acción de tutela contra la entidad demandada, al tenor del inciso
final del artículo 86 de la Constitución política que establece: “…La ley establecerá
los casos en los que la acción de tutela procede contra particulares encargados de
la prestación de un servicio público o cuya conducta afecte grave y directamente
el interés colectivo, o respecto de quienes el solicitante se halle en estado de
subordinación o indefensión...”
POR LA AUSENCIA DE OTROS MECANISMOS JUDICIALES
Ante la inexistencia de otras acciones judiciales o administrativas previstas en
legislación que hagan eficaz la protección del derecho vulnerado, según lo dispone
el art. 86 cuando dice: “Esta acción solo procederá cuando el afectado no
disponga de otro medio de defensa judicial.”
COMPETENCIA
Es usted competente señor Juez Constitucional de Popayán al tenor del Artículo
37 del Decreto Numero 2591 de 1991 que manifiesta ”Son competentes para
conocer de la acción de tutela, a prevención, los jueces o tribunales con
jurisdicción en el lugar donde ocurriere la violación o la amenaza que motivaren la
presentación de la solicitud”, toda vez que la vulneración que motiva solicitud de la
presente acción ocurren en el Municipio de Popayán.
FUNDAMENTOS DE DERECHO
Fundamento la presente Acción de Tutela en el art. 29, 86, y ss. de la Constitución
Nacional y el Decreto Ley 2591 de 1991, y demás normas concordantes, decreto
2555 de 2010 y al decreto 2349 de 1965.
La Jurisprudencia, ha abordado situaciones similares a las del presente caso, y a
amparado los derechos constitucionales fundamentales, por lo que se presenta la
siguiente decisión tomada por el Tribunal Superior de Distrito Judicial de Bogotá,
de 22 de septiembre de 2022 en la tutela con radicación
11001220300020220199700, en la que dispone:
4. CONSIDERACIONES
(…) Veamos, la tutela es un mecanismo constitucional de carácter
excepcional y subsidiario, creado con el propósito de proteger los derechos
fundamentales de los miembros de la colectividad que resulten
amenazados o vulnerados por las acciones u omisiones de las autoridades
públicas o por los particulares en los casos expresamente señalados por la
ley.
En este orden, ella únicamente procede cuando el afectado no cuente con
otro mecanismo de defensa judicial ordinario, o si, aun existiendo, se utilice
como mecanismo transitorio para evitar un perjuicio irremediable.
Para que esta prerrogativa sea efectiva, es necesario que cada una de las
etapas procesales estén previamente definidas por el Legislador, como lo
prevé el artículo 29 de la Constitución Política; pues, de lo contrario,
quedaría sujeta a la voluntad y arbitrio de quienes tienen la misión de
solucionar los conflictos de los asociados y de resolver sobre la
interdependencia de sus derechos. Esta previa definición legal de los
procedimientos que constituyen el debido proceso, se denomina las “formas
propias de cada juicio”, y constituye, por lo tanto, en la garantía de
referencia con que cuentan las personas para determinar en qué momento
la conducta de los jueces o de la administración se convierte en ilegítima,
por desconocerse lo dispuesto en las normas legales (…)
La parte reclamante implora la protección de sus prerrogativas al debido
proceso y defensa, en conexidad con el principio buena fe, violentadas por
la autoridad accionada, al no tener como justa causa la incapacidad médica
allegada, antes del inicio de la audiencia virtual, a la cual ésta fue citada.
Para determinar si la convocada, quebrantó los derechos fundamentales
aquí invocados, debemos recordar que los numerales 1°, 2° y 3° del artículo
372 del Estatuto Procesal Civil, dispone que a la audiencia inicial deberán
asistir las partes y sus apoderados cuando la presencia de éstos se
requiera, siendo distintas las consecuencias para unos y otros, según las
previsiones del numeral 4°5, y el numeral 3°, establece sin lugar a
equívocos, la forma como debe proceder el funcionario judicial frente a la
inasistencia de alguna de las partes a la audiencia: (…)
De conformidad con la norma trascrita, es claro que las partes o sus
apoderados, cuentan con tres (3) posibilidades:
1. Solicitar aplazamiento de la audiencia.
2. Presentar excusas por su inasistencia debido a hechos constitutivos de
fuerza mayor o caso fortuito, o
3. Probar una causal de interrupción o suspensión.
En el primer evento y sobre el cual se analizará la presente acción
constitucional, se requería que la parte interesada presente excusa previa a
esa actuación, en el que demuestre, así sea sumariamente, que hay una
justa causa para no asistir, aunque no se trata de fuerza mayor caso
fortuito, dado que la norma no restringe la excusa a tales posibilidades (…)
De la revisión del expediente, se evidencia que, en horas previas al inicio
de la audiencia virtual programado para el 24 de junio de 2022, el
representante legal de la parte demandada en el proceso de la causa y
aquí accionante, allegó al correo electrónico de la entidad accionada, la
incapacidad médica expedida el 22 de junio de 2022 anterior, mediante la
cual le daban cinco (5) días de incapacidad, dado el diagnostico de
“laringofaringitis”. (…)
Frente a esa situación, en la audiencia de junio pasado, la
Superintendencia de Industria y Comercio, negó la solicitud en comento,
(…)
Así las cosas; si bien es cierto, los jueces gozan de libertad para la toma de
decisiones en virtud del ordenamiento jurídico y la valoración de los medios
probatorios, haciendo que el fallador constitucional no pueda inmiscuirse en
sus pronunciamientos; es más cierto aún, que en eventos en los cuales la
autoridad judicial profiere una decisión ostensiblemente contradictoria o
desajustada a la normatividad o jurisprudencia vigente, da vía libre a la
intervención de esta particular jurisdicción, por cuanto, se afecta rectamente
el debido proceso, menoscabando el derecho a la defensa.
En el asunto, se avizora palmariamente la vulneración del derecho
fundamental al debido proceso, por cuanto, la incapacidad otorgada al
representante legal de Sole de Colombia S.A.S., se basa en un decaimiento
de salud; no siendo de recibo para la Sala, los argumentos dado por el
estrado enjuiciado, basados en “desconoce su NIT y número de teléfono
para ser contactados para validar su procedencia, así mismo, no se aporto
(sic) trascripción médica de su EPS”. (…)
A lo anterior se agrega, que la incapacidad otorgada, como medio de
prueba, el cual, se reitera, se extendido por persona habilitada, en
cumplimiento de su responsabilidad y desempeño de su función,
demostraba el no poder asistir a la audiencia, y por ende se debió atender
en forma positiva la excusa que asistía a la parte demandada para
solicitar el aplazamiento de la misma, en procura de no fustigar su
derecho a ser convocado, oído y vencido en juicio. (negrita fuera de
texto)
Por las razones expuestas, se otorgará la protección demandada, (…)
PETICIONES DE FONDO
Con base en los hechos señalados anteriormente, solicito comedidamente al
despacho tutelar los derechos fundamentales defensa y/o contradicción y al
debido proceso invocados, y se solicita:
1. Dejar sin efecto la audiencia celebrada el día 21 de octubre de 2024 “
audiencia inicial “ de impugnación de comparendo celebrada por la
secretaria de transito de Popayán – inspección de tránsito y transporte de
Popayán despacho a cargo de la Sra PATRICIA CERON.
2. Se dicte fecha y hora para la celebración de la audiencia inicial de
impugnación de comparendo dentro proceso contravencional expediente:
19001000000041226930 RAD- AU006243.
MEDIDA PROVISIONAL
De manera comedida y en virtud de lo dispuesto por el artículo 7o del Decreto
2591 de 1991, fundamentado además en la urgencia que el caso amerita, le ruego
al honorable Juez, que al momento de decidir sobre la admisión de la acción aquí́
ventilada, conceder la medida provisional con la que es instaurada la Acción de
Tutela y, en consecuencia de ello, se ordene a la entidad accionada que de
MANERA INMEDIATA, procedan a suspender el proceso contravencional que
cursa en mi contra por una supuesta infracción al código de tránsito, se solicita de
manera urgente pues ya se fijó audiencia de pruebas para el lunes 28 de octubre a
las 2.30 de la tarde.
Las medidas provisionales son órdenes preventivas que el juez de tutela puede
adoptar, de oficio o a petición de parte, y cuando lo considere necesario y urgente
para proteger el derecho mientras toma una decisión definitiva en el asunto
respectivo. Tienen por fin evitar que la amenaza sobre un derecho fundamental se
convierta en una vulneración o que la afectación se vuelva más gravosa, de
manera que un eventual fallo a favor del solicitante no sea ilusorio (art. 7, Dto.
2591 de 1991).
En ese sentido, el juez puede suspender la aplicación del acto concreto que
amenace o vulnere el derecho, o en general, dictar cualquier medida de
conservación o seguridad encaminada a protegerlo o a evitar que se produzcan
otros daños como consecuencia de los hechos realizados.
No obstante, es necesario que existan razones suficientes que sustenten la
necesidad de dictarlas, ya que su decreto es excepcional. Por tanto, se debe
“analizar la gravedad de la situación fáctica propuesta, junto con las evidencias o
indicios presentes en el caso”. Concretamente, según la Sala, la procedencia de
las medidas provisionales está supeditada al cumplimiento de estas tres
exigencias:
(i) Que exista una vocación aparente de viabilidad. Significa que debe
“estar respaldada en fundamentos (a) facticos posibles y (b) jurídicos
razonables”, es decir, que tenga apariencia de buen derecho (fumus boni
iuris). Este requisito exige que el juez pueda inferir, al menos prima facie,
algún grado de afectación del derecho. Aunque en la fase inicial del
proceso “no se espera un nivel de certeza sobre el derecho en disputa, sí
es necesario un principio de veracidad soportado en las circunstancias
fácticas presentes en el expediente y apreciaciones jurídicas razonables
soportadas en la jurisprudencia de la Corte Constitucional”.
Para el caso concreto, de las pruebas anexas, específicamente de la normatividad
transcrita es fácil colegir que la norma aplicable es la contenida en la ley 1437 de
2011, articulo 180 No 3 que establece que.
3. Aplazamiento. La inasistencia a esta audiencia solo podrá excusarse
mediante prueba siquiera sumaria de una justa causa.
Cuando se presente la excusa con anterioridad a la audiencia y el juez la
acepte, fijará nueva fecha y hora para su celebración dentro de los diez (10)
días siguientes, por auto que no tendrá recursos. En ningún caso podrá
haber otro aplazamiento.
El juez podrá admitir aquellas justificaciones que se presenten dentro de los
tres (3) días siguientes a la realización de la audiencia siempre que se
fundamenten en fuerza mayor o caso fortuito y solo tendrán el efecto de
exonerar de las consecuencias pecuniarias adversas que se hubieren
derivado de la inasistencia.
En este caso, el juez resolverá sobre la justificación mediante auto que se
dictará dentro de los tres (3) días siguientes a su presentación y que será
susceptible del recurso de reposición. Si la acepta, adoptará las medidas
pertinentes.
Por lo anterior, y del material probatorio obrante en el plenario se tiene que fue
radicada por el suscrito excusa medica de incapacidad antes de la apertura de la
diligencia, por tal motivo existe vocación de buen derecho.
(ii) Que exista un riesgo probable de afectación a derechos fundamentales
por la demora en el tiempo (periculum in mora). Debe existir “un alto grado
de convencimiento de que la amenaza de perjuicio irremediable es cierta, y
que el daño, por su gravedad e inminencia, requiere medidas urgentes e
impostergables para evitarlo”. Es decir, la medida provisional procede
cuando la intervención del juez es necesaria para evitar un perjuicio “a un
derecho fundamental o al interés público, que no podría ser corregido en la
sentencia final”.
En efecto, para la acción de tutela que nos ocupa, de continuar con el proceso con
la actual vulneración, y proceder a continuar con la etapa de pruebas haciendo
caso omiso a mi imposibilidad de defensa en la audiencia inicial por mi situación
médica se configurará una vulneración mayúscula de derechos fundamentales
pues el trámite contravencional avanzará y será́ mucho más difícil retrotraer las
actuaciones, están en riesgo los derechos fundamentales del debido proceso,
defensa por la aplicación caprichosa y ajustada a la ilegalidad del servidor público
inspectora de tránsito.
(iii) Que la medida no resulte desproporcionada. La medida no debe
generar un daño intenso a quien resulta directamente afectado por ella.
Este requisito exige una ponderación “entre los derechos que podrían verse
afectados y la medida”, con el fin de evitar que se adopten decisiones que,
aunque tengan algún principio de justificación, “podrían causar un perjuicio
grave e irreparable a otros derechos o intereses jurídicos involucrados”.
Es así, que, no resulta en absoluto desproporcionada la medida de suspender
inmediatamente el trámite contravencional. pues se haría inicialmente por 10 días
mientras la acción se estudia de fondo, no obstante, en esos 10 días, de
finiquitarse la etapa procesal de pruebas si se vería consumado el daño, por tanto,
de acuerdo a las reglas de la sana crítica, es viable el decreto de la medida
provisional y reiterar la solicitud.
Para concluir, es necesario indicar que soy parte directa dentro del proceso
contravencional, que el motivo de la petición era de aplazamiento por mi situación
de incapacidad certificada por un profesional de la salud. Que estas audiencias se
pueden actuar en propia causa. Que no tengo apoderado judicial y por mi
situación médica ni siquiera pude delegar uno.
PARTE ACCIONANTE:
Para efectos de notificación al correo electrónico: [email protected]
Cordialmente: