Estructura Fisica Del Agua
Estructura Fisica Del Agua
Estructura Fisica Del Agua
Desarrollo
Los enlaces O—H se forman por solapamiento de un orbital sp3 oxígeno (el
oxígeno presenta cuatro orbitales hibridos sp3, dispuestos según los vértices de
un tetraedro)y un orbital 1s del hidrógeno. Los átomos de hidrógeno de la
molécula de agua se localizan en dos vértices del tetraedro, mientras que los dos
pares de electrones del oxígeno que no participan en el enlace se localizan en los
otros dos vértices.
La carga neta de la molécula de agua es cero, no obstante una cierta polaridad
debido a la diferencia de electronegatividades entre el oxígeno (3,5) y el hidrógeno
(2,1). Esta diferencia de polaridad entre los átomos de oxígeno y hidrógeno
conlleva a la deformación de la nube electrónica del enlace, favoreciendo que los
electrones se encuentren más cerca del oxígeno que del hidrógeno, de esta forma
el oxígeno tiene una cierta densidad de carga negativa y el hidrógeno una cierta
densidad de carga positiva, formando un dipolo permanente.
Hibridación
Sistema disperso
Como ya se vió en la clasificación de la materia, cuando dos o más sustancias se
mezclan entre sí, sin que tenga lugar una reacción química, se forma una mezcla.
Las mezclas, son aquellos sistemas que no poseen composición química definida,
es decir, que están formados por dos o más componentes, donde los mismos
conservan sus propiedades características, mientras que las propiedades del
sistema son variables y dependen de la relación de las cantidades en las que se
encuentra cada uno de los componentes. Las mezclas, a su vez, se clasifican en
homogéneas y heterogéneas.
Una mezcla es homogénea, cuando presenta las propiedades iguales en todos los
puntos de su masa, y no se observa en la misma, superficies de discontinuidad,
cuando se la examina al ultramicroscopio. Las mezclas homogéneas se conocen
con el nombre de soluciones. Así, por ejemplo, la agitación prolongada en un vaso
de precipitados de una porción de cloruro de sodio con agua, dará lugar a la
formación de una solución de cloruro de sodio en agua. Los sistemas
heterogéneos se conocen también con el nombre de dispersiones, y se
caracterizan por poseer propiedades diferentes cuando se consideran al menos
dos puntos de su masa y además, presentan superficies de discontinuidad. Un
ejemplo común de mezcla heterogénea, lo constituye un trozo de granito,
claramente, se diferencian en el mismo sus componentes, cuarzo, feldespato y
mica. Cada una de estas partes representa a sistemas homogéneos, con
propiedades distintas, separadas entre sí, por límites bien definidos, conocidos
con el nombre de interfase, mientras que cada una de estas porciones
homogéneas se denominan fases. Resumiendo, es posible decir que los sistemas
homogéneos son monofásicos (formados por una sola fase), mientras que los
heterogéneos son polifásicos (dos o más fases).
Soluto
El soluto es la sustancia que se disuelve en una solución. Por lo general, el soluto
es un sólido (pero también puede ser una sustancia gaseosa u otro líquido) que se
disuelve en una sustancia líquida, lo que origina una solución líquida.
Ejemplos de solutos
Ejemplos comunes de solutos sólidos son el azúcar o la sal que, al mezclarse con
agua, forman una solución azucarada o salina respectivamente.
También hay solutos gaseosos, como el gas carbónico, que, al juntarse con agua,
forma una solución de agua carbonatada.
Asimismo, hay solutos líquidos como, por ejemplo, el ácido acético que, mezclado
con agua, produce vinagre.
Solvente
El solvente, también conocido como disolvente, es la sustancia en que se disuelve
un soluto, generando como resultado una solución química. Generalmente, el
solvente es el componente que se encuentra en mayor proporción en la solución.
Ejemplos de solventes
El solvente más común es el agua, pues actúa en gran cantidad de sustancias
como disolvente. Así, en una solución de agua azucarada, el agua es la sustancia
que disuelve el azúcar Un ejemplo de solvente distinto del agua sería el hierro
fundido que, al ser mezclado con carbón, da como resultado, al solidificarse, una
sustancia conocida como acero.Un caso de solución gaseosa, por otro lado, sería
el aire, en cuyo solvente predomina principalmente el nitrógeno, y en el que se
encuentran otras sustancias como el oxígeno y, en menor proporción, el argón.
Temperatura
Por norma general, la velocidad de reacción aumenta con la temperatura porque al
aumentarla incrementa la energía cinética de las moléculas. Con mayor energía
cinética, las moléculas se mueven más rápido y chocan con más frecuencia y con
más energía. El comportamiento de la constante de velocidad o constante de
rapidez/coeficiente cinético frente a la temperatura
=In[A](Ea) (1-1)
(R) (T2-T1)
Esta ecuación linealizada es muy útil y puede ser descrito a través de la ecuación
de Arrhenius:
Dónde:
K es la constante de la rapidez
A es el factor de frecuencia
Ea es la energía de activación necesaria
T es la temperatura
Al linealizarla se obtiene que el logaritmo neperiano de la constante de rapidez es
inversamente proporcional a la temperatura, como sigue: la hora de calcular la
energía de activación experimentalmente, ya que la pendiente de la recta obtenida
al graficar la mencionada ley es: , haciendo un simple despeje se obtiene
fácilmente esta energía de activación, tomando en cuenta que el valor de la
constante universal de los gases es 1.987cal/K mol. Para un buen número de
reacciones químicas la rapidez se duplica aproximadamente cada diez grados
centígrados.
Presencia de un catalizador
Los catalizadores aumentan o disminuyen la rapidez de una reacción sin
transformarse. Suelen empeorar la selectividad del proceso, aumentando la
obtención de productos no deseados. La forma de acción de los mismos es
modificando el mecanismo de reacción, usando pasos elementales con mayor o
menor energía de activación.
Existen catalizadores homogéneos, que se encuentran en la misma fase que los
reactivos (por ejemplo, el hierro III en la descomposición del peróxido de
hidrógeno) y catalizadores heterogéneos, que se encuentran en distinta fase (por
ejemplo la malla de platino en las reacciones de hidrogenación).
Los catalizadores también pueden retardar reacciones, no solo acelerarlas, en
este caso se suelen conocer como retardantes o inhibidores, los cuales impiden la
producción.
Los catalizadores no modifican la entalpía, la entropía o la energía libre de Gibbs
de los reactivos. Ya que esto únicamente depende de los reactivos. Positivo:
acelera la velocidad Negativo: disminuye la velocidad.
La teoría de las colisiones es una teoría propuesta por Max Trautz en 1916 y por
William Lewis en 1918, que explica cualitativamente cómo ocurren las reacciones
químicas y por qué las velocidades de reacción difieren para diversas reacciones.
Para que una reacción ocurra las partículas reaccionantes deben colisionar. Solo
una cierta fracción de las colisiones totales causan un cambio químico; estas son
llamadas colisiones exitosas. Las colisiones exitosas tienen energía suficiente
(energía de activación), al momento del impacto, para romper los enlaces
existentes y formar nuevos enlaces, resultando en los productos de la reacción. El
incrementar la concentración de los reactivos y aumentar la temperatura lleva a
más colisiones y por tanto a más colisiones exitosas, incrementando la velocidad
de la reacción. Cuando un catalizador está involucrado en la colisión entre las
moléculas reaccionantes, se requiere una menor energía para que tome lugar el
cambio químico, y por lo tanto más colisiones tienen la energía suficiente para que
ocurra la reacción. La velocidad de reacción por lo tanto también se incrementa.
Para que un sistema alcance el equilibrio químico debe tener como condición que
el proceso ocurra a una temperatura y presión constante en un sistema cerrado en
el que ninguna sustancia pueda entrar o salir.
Manifestándose generalmente como características: