Sistema Nervioso
Sistema Nervioso
Sistema Nervioso
El cerebelo es el órgano regulador de las actividades motoras. Tiene una importancia clave
en el control de la postura y el equilibrio y participa en el control del movimiento voluntario (junto
con los ganglios basales y el tálamo) coordinando la acción de los músculos y regulando su tono.
Además, modula las reacciones vestibulares y contribuye a la normalidad de la bipedestación y
de la marcha, gracias a la constante recepción de informaciones acerca de la situación inmediata
del aparato locomotor.
Planifica, corrige, secuencia, coordina y predice las actividades motoras, en especial en
lo que se refiere al aprendizaje motor y no motor y al proceso de adquisición de las habilida-
des motoras.
El cerebelo actúa como un dispositivo de corrección de errores para la realización de movi-
mientos dirigidos hacia objetivos concretos, comparando la intención con la actuación.
Su función es esencial para el control de las actividades musculares muy rápidas y su pérdida
origina movimientos no coordinados y ralentizados.
Definición Sindromática
Se define como un conjunto de signos y síntomas provocados por la alteración anatómica o
funcional del cerebelo, es una condición que afecta el control de este sobre el movimiento está-
tico y dinámico, provocando pérdida de la fuerza, debilidad muscular, temblor intencional y alte-
raciones de la marcha.
Existen dos síndromes principales, según su topografía:
Prueba de dedo a nariz: se le pide al paciente que toque su propia nariz y el dedo de la mano
del explorador de forma rápida y alterna. Debe tocar el dedo y después la nariz. Los pacientes
con patología cerebelosa pasan su objetivo (hipermetría).
Prueba de talón a rodilla: con el paciente acostado en decúbito supino se le pide que deslice
el talón de una extremidad inferior hacia abajo por el borde anterior de la tibia comenzando
en la rodilla. En pacientes con enfermedad cerebelosa el talón oscila de un lado a otro.
Movimientos alternos rápidos: Estos movimientos se pueden realizar con las extremidades
superiores e inferiores. Se pide al paciente que prone y supine la mano sobre las piernas
rápidamente. La alteración de la realización de estos movimientos se llama adiadococinesia.
Marcha: el paciente camina en línea recta para que lo exploremos marcha. Después podemos
explorar la marcha en puntillas, en talones y que camine con marcha de tándem (un pie colo-
cado delante del otro). Un paciente con ataxia cerebelosa caminará con una marcha de base
amplia, con los pies muy separados, haciendo que el paciente se tambalee de lado a lado
(marcha de borracho).
Metodología diagnóstica
Diagnóstico diferencial
Ataxia laberíntica: en ella la pulsión y el nistagmo son de dirección fija. El paciente presenta caídas
frecuentes. El signo de Romberg es positivo (caída hacia el lado del laberinto lesionado).
Ataxia sensitiva: por déficit de sensibilidad profunda. El paciente tiene marcha taconeante, con
la mirada fija en el piso y el signo de Romberg también es positivo.
Ataxia frontal: es una marcha “imantada”, esto es con pasos cortos y pegados al piso.
Tomado de Guia de práctica clínica (GPC catálogo de guías) Instituto Mexicano de SS IMS 600-13.
Síndrome meningoencefalitico
Manifestaciones clínicas
Típicamente este síndrome se caracteriza por manifestarse con cefalea la cual suele ser intensa,
persistente, progresiva, Holo craneana, aunque en ocasiones frontooccipital, se exacerba con cam-
bios de decúbito, posición o rotación de la cabeza y no cede con analgésicos convencionales.
Otra manifestación característica son las contracturas musculares que se exteriorizan en el
examen físico, por posiciones o actitudes particulares, como es el opistótonos, rigidez de nuca y
del raquis evidente a través de las maniobras de Kernig y Brudzinski, que dan lugar a dichos
signos respectivamente.
Otros signos y síntomas que suelen acompañar este síndrome son la fiebre, la fotofobia, la
algiacusia, convulsiones, deterioro de la conciencia, entre otros.
Etología
Infecciosa
Micoticas Criptococo
Inflamatorias
Hemorragicas
Neoplasicas
Irritativas (Febriles)
Diagnóstico
Debemos sospechar este síndrome en aquellos pacientes que se presenten con cefalea y
contractura muscular del raquis asociado con otro de los síntomas descriptos.
La valoración el examen físico neurológico es de suma importancia, no solo para encontrar
hallazgos característicos a este síndrome como lo son el signo de Kernig y Brudzinski, sino tam-
bién para descartar otras entidades patológicas.
Ante la sospecha clínica debemos realizar estudios complementarios que nos ayuden a con-
firmar el diagnóstico.
Algoritmo diagnóstico
Estudios complementarios
(TAC de encéfalo simple)
(Si se excluye lesión ocupante de espacio y no hay signos de hipertensión Endo craneana)
Referencias