La Industria Maritima

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LA INDUSTRIA MARITIMA

El transporte marítimo ha sido históricamente una pieza clave de la logística internacional.

Pero en los últimos años las nuevas tendencias del comercio electrónico y la distribución

geográfica de la fabricación de productos a nivel mundial han aumentado todavía más la

importancia del transporte marítimo en todo el mundo. Algunos estudios apuntan a que

en la actualidad concentra entre el 80% y el 90% de la logística internacional.

El transporte marítimo se encarga del traslado de grandes cargas en buques, por vía naval.

Desde la década de los años 60 se utilizan para la estiba contenedores, una solución que

facilita el transporte de grandes cargamentos disminuye el coste de almacenamiento y

facilita la monitorización de la mercancía. Esta ha sido una de las claves de la gran

popularización del transporte marítimo para la logística internacional en las últimas

décadas.

La logística marítima es una de las más demandadas a nivel mundial. Se calcula que la

mayoría de las transacciones comerciales se desarrollan por mar. Por esta razón, es

importante tomar en consideración las características del transporte marítimo para que

todas las empresas puedan adaptar su cadena de desarrollo de acuerdo con los aspectos

principales.

Transporte y tráfico marítimo internacional:

Actualmente, el tráfico marítimo es realmente elevado y alcanza el 80 o el 90 por ciento

del comercio mundial. De hecho, en España las cifras rondan el 80 o el 85 por ciento de las

importaciones, mientras que en cuanto a exportaciones el número se queda en el 50 por


ciento. Una de las principales claves del éxito del transporte por barcos es la enorme

cantidad de ventajas que se pueden encontrar en este tipo de operaciones.

Los tipos de embarcaciones y contenedores que se utilizan se adaptan a prácticamente

cualquier tipo de producto, y es uno de los medios de transporte más sostenibles que se

pueden encontrar. De hecho, este tipo de transporte también es capaz de proporcionar

precios realmente competitivos si se comparan con otros medios como puede ser el de

carretera a gran escala. El gasto de mover toneladas es mucho menor cuando se hace de

forma marítima.

Además, también se dispone de diferentes opciones como puede ser el fletamento o

grupaje en tráfico regular. En este último se han hecho muchos avances, por lo que es muy

posible optimizar el espacio disponible en el contenedor para transportar la máxima

mercancía posible. De esta forma, el transporte marítimo es capaz de abordar grandes

volúmenes de carga. Cada uno de los tipos de embarcación consta de diferentes aspectos

positivos.

El tráfico regular incluye cualquier tipo de carga a través de contenedores, aunque en la

mayoría de los casos son productos de consumo o de tipo industrial. Además, puede llevar

a cabo escala en diferentes puertos a un precio competitivo. En cambio, el tipo fletamento

está más orientado a grandes volúmenes de carga con unas condiciones fijas antes del

inicio de la operación.

Algunas de las pocas desventajas son la necesidad de combinar diferentes tipos de

logística desde que sale del almacén hasta que llega al punto de destino, especialmente
con la inclusión del transporte terrestre. Además, los tiempos para llevar a cabo las

diferentes operaciones suele ser alto.

El transporte marítimo tiene entre sus características numerosas ventajas que explican

por qué es el medio favorito de las empresas de todo el mundo:

 Gran capacidad. Los buques de carga son capaces de transportar grandes tonelajes.

La capacidad de los más grandes está muy por encima de la de cualquier otro tipo

de transporte.

 Coste reducido. Capaz de transportar grandes cantidades de mercancías a nivel

internacional, el transporte marítimo tiene un coste más reducido. Si lo

comparamos por ejemplo con el transporte aéreo, su precio es entre 4 y 6 veces

inferior.

 Versatilidad. Existen muchos tipos de buques, capaces de adaptarse a cualquier

tipo de carga. Los veremos en el siguiente punto.

 Amplia oferta. Al regirse por el principio de libre competencia, en el transporte

marítimo existe una amplia oferta.

 Seguridad. La logística marítima se rige por estrictas políticas y protocolos de

seguridad. Las pérdidas de carga son pocas y disminuyen cada año.

Tipos de transporte marítimo


Como decíamos, la logística marítima es muy versátil. En la actualidad existen numerosos

tipos de transporte marítimo que se suelen diferenciar por el tipo de carga y su capacidad.

Estos son algunos de los más habituales:

Bulkcarriers

Llamados también buques graneleros, son usados para el transporte marítimo de carga a

granel como minerales, fertilizantes, etc.

Portacontenedores

Desde que empezara a popularizarse el uso de contenedores en los años 60, este tipo de

buque se ha consolidado como el más utilizado para el transporte de mercancías por vía

naval. Son buques de gran tamaño, modernos y de última generación. En la actualidad

incluso existen algunos que navegan con cero emisiones.

Buque de carga general

En este caso no permite el uso de contenedores. Suele utilizarse para el transporte de

carga seca y cuenta con sus propias grúas para la carga y descarga de las mercancías.

Buque frigorífico

Gracias a su capacidad de refrigeración y a su mayor velocidad de navegación es la

solución ideal para el transporte de mercancías perecederas, como ciertos tipos de

alimentos.

Buques para cargas Heavy Lift


Suelen utilizarse en grandes proyectos industriales por su capacidad para transportar

cargas extremadamente pesadas.

Buques Roll on – Roll off

Están diseñados específicamente para el transporte de vehículos rodados: coches,

camiones, maquinaria, etc. Por este motivo cuentan con elementos de inmovilización para

asegurar este tipo de mercancías.

Ventajas del transporte Marítimo

Una de las principales claves del éxito del transporte por barcos es la enorme cantidad de

ventajas que se pueden encontrar en este tipo de operaciones.

Capacidad y volumen de almacenaje. El barco es el medio de transporte que ofrece una

mayor capacidad para trasladar grandes cargas de mercancías. No tiene comparación con

la capacidad de almacenamiento de un tren, un avión o un camión.

Es el medio más económico. Un buque portacontenedores casi siempre parte cargado al

máximo de su capacidad, lo que significa que el coste es el mínimo para cada uno de los

contenedores. Si no necesitas un contenedor completo para tus mercancías, puedes

compartirlo con otros importadores o exportadores.

Es seguro y fiable. Los buques dependen menos que los aviones de las condiciones

meteorológicas, así que sus salidas y llegadas no suelen verse retrasadas por la

meteorología.

Tipos de carga transportada vía marítima


Atendiendo a la definición, esta modalidad de transporte marítimo es «el movimiento de

mercancías por mar, con fines comerciales utilizando buques como medio de transporte «.

Es el medio más masivo utilizando en la importación y exportación de mercancías a nivel

mundial. El transporte naval es la modalidad de transporte que se realiza en el agua,

utilizando como vehículo algún tipo de barco. Existen dos variantes fundamentales: el

transporte marítimo, que se realiza en el mar y canales marítimos, y el transporte fluvial,

que se desarrolla en ríos y canales fluviales.

El transporte marítimo, ya sea en contenedor marítimo, Ro-Ro o mediante fletamento, es

una alternativa versátil y flexible para mover cualquier clase de mercancía, ya sean

alimentos perecederos, maquinaria pesada, graneles, líquidos y hasta mercancías

peligrosas.

La mayor parte de toda la carga entregada en el mundo se transporta por mar. Las

características técnicas de los buques de carga permiten transportar petróleo crudo,

productos derivados del petróleo, productos de la industria química, gas condensado,

materias primas, equipos, automóviles, ganado y muchos otros tipos de carga.

Operaciones portuarias de petróleo crudo

Son muchas las sustancias y elementos presentes de la naturaleza, de entre las cuáles

muchas son utilizadas por el hombre con múltiples propósitos.


Algunas de ellas son sirven de alimento, otras de materia prima para elaborar productos o

incluso como combustible. Y entre los combustibles, uno de los más valorados hasta el

punto de ser también denominado “oro negro” es el petróleo.

El petróleo es un aceite mineral de color muy oscuro o negro, menos denso que el agua y

de un olor acre característico. Está formado por una mezcla de hidrocarburos

acompañados de azufre, oxígeno y nitrógeno en cantidades variables. El petróleo se

encuentra sólo en las rocas sedimentarias.

El petróleo se origina a partir de una materia prima formada fundamentalmente por restos

de organismos vivos acuáticos, vegetales y animales que vivían en los mares, las lagunas,

las desembocaduras de los ríos y en las cercanías del mar. Estos restos fueron atacados en

los fondos fangosos por bacterias anaerobias que consumieron su oxígeno dejando

únicamente moléculas de carbono e hidrógeno llamadas hidrocarburos.

Actualmente, el tráfico marítimo de crudo de petróleo y sus derivados sigue siendo un

tráfico relevante, tanto desde un punto de vista geoestratégico como a nivel de volumen

transportado. Dado el desequilibrio regional en términos de reservas, producción y

consumo, se genera, por tanto, un importante tráfico marítimo, pero también una

necesidad de la industria de optimizar los procesos con el objetivo de minimizar los costes

y dar una respuesta eficiente en términos logísticos.

En 2023, el consumo mundial de productos derivados del petróleo creció un 2,4 %, a

menor ritmo que en 2022 pero dos veces más rápido que durante el período 2010-2019.

La mayor parte del aumento en el consumo mundial de productos del petróleo está
relacionada con el fin de las restricciones relacionadas con el COVID en China, donde se

incrementó un 8,4 % (casi el doble de su tendencia de 2010-2019), y con la recuperación

del sector de la aviación mundial.

El consumo de productos del petróleo aumentó a un ritmo más lento que en 2022 en EE.

UU. (1,2 %, debido al aumento del tráfico por carretera), en India (5,1 %), en Arabia Saudí

(3,7 %) y en Canadá (0,5 %), pero repuntó en Rusia (2,7 %) y en Brasil (4,7 %) y se aceleró

en Irán (1,2 %).

El lento crecimiento económico contribuyó a reducir el consumo de productos derivados

del petróleo en la UE (2,9 %, con un 5,9 % en Alemania), en Japón y en Corea del Sur (un 4

%, respectivamente). Se mantuvo estable en México (0,4 %), cayó en África (1,1 %, con un

descenso del 2,3 % en Egipto), pero repuntó en Australia (6,5 %, debido al aumento del

tráfico).

Derivados del petróleo

Los derivados del petróleo son todos aquellos productos que han sido procesados en una

refinería y en los que el petróleo actúa como principal materia prima. Los más conocidos

son, probablemente, aquellos que se emplean para obtener energía.

El plástico es uno de los derivados del petróleo que posee mayor demanda a nivel

mundial. Los cauchos, gomas y el látex, son derivados del petróleo obtenidos a través de

procesos petroquímicos. Estos son utilizados en actividades cotidianas como el uso de

automóviles, zapatos, sillas, teléfonos, entre otros.


Los productos derivados del petróleo se utilizan en toda la industria alimentaria. La goma

de mascar contiene cera de petróleo y muchos productos, como patatas fritas y bocadillos,

utilizan colorantes y otros aditivos que contienen productos derivados del petróleo. El

aceite mineral se puede utilizar para ayudar a mantener frescos los productos horneados

envasados durante períodos más prolongados.

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