Géneros Dramático
Géneros Dramático
Géneros Dramático
En arte y literatura, cuando hablamos del género dramático nos referimos al género
teatral, también llamado drama (del griego drama, “acción” o “actuación”). Este es un
género que se caracteriza por representar situaciones a través del diálogo y las
acciones de los personajes, ya sea en el texto escrito (el “guión” teatral) o en una
representación escénica (la “puesta en escena” teatral).
Sin embargo, a diferencia de otros géneros literarios y narrativos, los eventos del género
dramático ocurren en un presente continuo, frente a los ojos del espectador, y sin la
intermediación de un narrador de ningún tipo.
Aunque es común manejar los términos drama y teatro como sinónimos, muchos
especialistas señalan ciertas diferencias:
Drama: Se refiere específicamente a la parte escrita de este arte, o sea, a un género
literario, por lo tanto, es fruto de un dramaturgo.
Teatro: Involucra la parte actuada, o sea, un arte escénica en sí misma. Es decir que es
obra de un director teatral.
Sin embargo, ambos aspectos están unidos y son inseparables a la hora de pensar este
tipo de representación artística.
El género dramático tuvo sus orígenes en la antigüedad griega, específicamente en el
culto a Dionisos, dios del vino y de la alegría, cuyas celebraciones consistían en el
canto de himnos y, posteriormente, la representación de escenas mitológicas.
El teatro llegó a ser parte fundamental de la educación ciudadana griega, y sus grandes
dramaturgos como Tespis (c. 550-500 a. C.), Esquilo (c. 526-c.455 a. C.), Sófocles
(496-406 a. C.) y Eurípides (c. 484-406 a. C.) se inspiraron en los personajes y las
anécdotas de su tradición religiosa, para construir una obra vasta y profunda que en gran
medida sobrevive todavía.
Posteriormente, el drama fue heredado a Roma, cuyos grandes cultores del género
fueron Plauto (254-184 a. C.), Terencio (185-159 a. C.) y Séneca (4 a. C.-65 d. C.). Tras
un importante hiato durante el Medioevo cristiano, la tradición teatral fue retomada
en Europa durante los siglos XI y XII, en los que resurgieron la comedia escrita en latín
y la escenificación de pasajes del evangelio cristiano.
La primera obra teatral escrita completamente en español fue el “Auto de los Reyes
Magos”, pieza anónima escrita en el siglo XIII, de la que se conservan unos 147 versos
aproximadamente.
CARACTERÍSTICAS DEL GÉNERO DRAMÁTICO
El género dramático se caracteriza por lo siguiente:
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SUBGÉNEROS DRAMÁTICOS
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tiempo de la representación, que es el tiempo real que toma contar la anécdota, o sea, el
tiempo de duración del espectáculo, usualmente comprendido entre una y tres horas.
LOS PERSONAJES. Cada actor en escena le pone cuerpo a un personaje de la
anécdota, de acuerdo a lo contemplado en el guión. Los personajes pueden ser
protagónicos o secundarios, y pueden presentarse al público acompañados de disfraces,
o no. EL CONFLICTO. En toda obra dramática hay un conflicto que es la fuente de la
tensión en la historia, o sea, que genera suspenso y ganas de seguir contemplando la
obra (o seguirla leyendo). Dicho conflicto surge a partir de los deseos del protagonista y
su encuentro con la realidad del resto de los personajes.
ESTRUCTURA DE LA OBRA DRAMÁTICA
Las obras dramáticas pueden variar en cuanto a estructura, pero en general se
estructuran:
ACTOS: Son unidades amplias en que la obra se segmenta, separadas entre sí por un
descanso (entreacto) representado por una bajada del telón, oscuro o mecanismo similar.
ESCENAS: Son las unidades en que se divide cada acto, y que se corresponden con la
presencia en el escenario de ciertos personajes o elementos, puede tener 2, 3, 5 o hasta 7
actos o más, y cada uno de ellos un número diverso de escenas.
Por otro lado, hablando en términos narrativos, una obra teatral se divide, según la
visión aristotélica clásica, en tres segmentos claramente diferenciados: inicio, desarrollo
y desenlace.
Al inicio le corresponde la presentación de los personajes y del conflicto, generalmente
a partir de posturas contrarias que son ofrecidas al público.
Al desarrollo le corresponde la complicación de la trama, conduciendo a los personajes
al enfrentamiento decisivo o a la situación límite, que es donde el relato alcanza su
punto máximo de tensión.
Al desenlace le corresponde la resolución del conflicto y la presentación de un nuevo
orden de las cosas, que resuelve las tensiones y brinda el fin de la obra.
GÉNERO DRAMÁTICO: SUBGÉNEROS
En la clasificación de los géneros literarios nos encontramos con tres grandes
nombres: la narrativa, la lírica y el género dramático (o el teatro). Pero, además de
estos tres grandes grupos, cada uno de los grandes géneros se dividen en otros subtipos
que se conocen como subgéneros
Género dramático: subgéneros
Así pues, los subgéneros del género dramático se dividen de la siguiente manera:
SUBGÉNEROS MAYORES
Son los subgéneros del teatro más clásicos e incluyen:
TRAGEDIA. Este tipo de teatro se centra en presentar los grandes conflictos que tiene
el ser humano desde un punto de vista trágico y apasionado. Los protagonistas suelen
ser dioses de la mitología, reyes o héroes que encarnan vicios y virtudes de la sociedad
y que están trágicamente marcados por su destino.
Es un subgénero que se caracteriza por presentar tramas muy intensas, que hablan
sobre la naturaleza del ser humano y que suelen tener un final triste y bastante
desolador. Los elementos más destacados de la tragedia son:
Tono grave, profundo y reflexivo
Personajes que deben luchar contra la fatalidad y la imposición del destino
Los dioses y seres mitológicos tienen una fuerte importancia
El hombre se enfrenta contra la naturaleza o contra seres superiores
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El final es siempre grave y fatalista
Esconden un trasfondo de reflexión social y de comportamiento humano
Los temas tratan sobre cuestiones importantes de la vida como el amor, el
respeto, los celos, la muerte, etc.
COMEDIA. Este subgénero presenta tramas más mundanas que tienen un toque
cómico y divertido. Los personajes son fácilmente reconocibles en la sociedad y suelen
encarnar a un tipo social, por tanto, representan arquetipos. El objetivo es hacer reír,
pero con un trasfondo crítico sobre la sociedad o las formas de gobierno.
La comedia es otro subgénero teatral que forma parte de los "mayores". A diferencia de
la tragedia, este tipo de texto se caracteriza por un tono mucho más ligero, en el que la
risa y las situaciones divertidas cumplen un papel muy importante. Aquí te dejamos
algunas características de la comedia:
El tono de la comedia es divertido y alegre
La temática es mucho más ligera y cotidiana. Suelen tratar de temas sociales
para hacer reflexionar al público desde un punto de vista divertido y amable
Los personajes son personas mundanas que forman parte de la sociedad
Se incluyen situaciones de enredo que enfatizan el toque humorístico de la trama
Suelen tener un final feliz
Los personajes encarnan un defecto o vicio humano y, con la obra, se ridiculizan
y se muestran con un tono jocoso. Son personajes arquetípicos
EL DRAMA, Otro de los subgéneros del género dramático más importantes y que
comparte elementos de la comedia y la tragedia pero con algunas diferencias; la más
importantes es que el personaje no es un ser mitológico sino que son personas comunes
y corrientes. El desenlace del drama, aunque tiende a ser trágico, no siempre lo es.
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Se presentaban de manera independiente
Los personajes eran de clases populares y representaban arquetipos muy fáciles
de reconocer
AUTO SACRAMENTAL
Estas piezas teatrales que tenían un trasfondo religioso y alegórico. El objetivo de estos
textos era difundir la palabra cristiana mediante representaciones de escenas bíblicas.
Las características de estas obras teatrales son:
Carácter alegórico
Temática religiosa
Se representan escenas o conceptos de la Biblia
El objetivo era exaltar la religión y difundir sus conocimientos
Actualmente, este género apenas se usa en el teatro contemporáneo
LA ÓPERA Y LA ZARZUELA
Es un subgénero teatral en el que se mezcla el texto literario con la música clásica. De
hecho, el nombre de "ópera" quiere decir "obra musical", por lo que nos encontramos
ante un género híbrido de los dos tipos de arte. Las características más destacadas de la
ópera son:
La trama explica una historia que puede ser trágica o cómica que se acompaña
de música en todo momento
Los actores son también cantantes de ópera
Cuentan con una puesta en escena muy llamativa que acompaña la obra
Suele incorporar una orquestra en directo con músicos que interpretan los temas
MELODRAMA
El melodrama es, también, un subgénero dramático que apareció en el XVIII y que,
hoy en día, tiene una gran importancia. Se trata de un tipo de texto literario
que combina la música y la historia y que suele contener elementos cómicos y
trágicos al mismo tiempo Las características principales son:
Mezcla el argumento con la música
El componente sentimental está muy exaltado porque quiere emocionar al
público
Suele tener un final feliz y relajado
Abundan las situaciones de enredos que ponen en peligro el bienestar del
protagonista
La música tiene una función emotiva: aparece en los momentos adecuados para
generar ese clima de tensión y emoción
LA TRAGICOMEDIA
La tragicomedia es un género dramático inscrito dentro de lo que llamamos drama, es
decir, la representación de un conflicto. Sus antecedentes están en la antigua Grecia,
donde se desarrollaba el drama satírico, cuyos elementos cómicos eran desarrollados por
el coro, y en algunas obras trágicas donde el héroe debe superar obstáculos, pero que al
final alcanza su objetivo, a veces con un tono levemente humorístico o con final feliz.
Este tipo de obras se denominaban comedia trágica clásica. Fue Plauto, autor romano
del siglo lll a. C, quien usó por primera vez el término tragicomedia, definiéndola como
un híbrido entre comedia y tragedia, en su obra Anfitrión.
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Este es un género que pretende hacer reír y llorar al público a partir de situaciones cuyos
cambios inesperados son lógicos y explicables, y donde el suspenso va en continuo
aumento, llegando por momentos al clímax con intensas emociones. En la tragicomedia,
la resolución o conclusión de la obra es consecuencia de los actos y de las situaciones
planteadas con bastante claridad y sin ambigüedades, donde los actos de los personajes
son verosímiles. La tragicomedia incorpora aspectos entretenidos de la existencia,
aunque los relaciona con la dimensión trágica del ser humano.
Mayormente, el aspecto cómico que ostenta una tragicomedia está dominado, por un
lado, por el sarcasmo, que consiste en una burla aguda por medio de la cual se quiere
dar a entender lo opuesto o expresar el profundo desagrado que genera algo.
Está íntimamente relacionado con la ironía, una burla fina y disimulada, que se
considera una crítica indirecta que se expone a viva voz. Por otro lado, el costado
cómico de la tragicomedia se refleja en la parodia, que normalmente recrea a un
personaje o a un hecho y que ridiculiza o resalta sus principales características, pero de
manera grotesca, de modo de hacerlas muy evidentes.
La Tragicomedia de Calisto y Melibea, nombre original de La Celestina, hizo popular el
término tragicomedia para definir las obras que no podían ser ubicadas dentro de los dos
grandes géneros conocidos (tragedia y comedia) al tener elementos trágicos y cómicos.
En efecto, en La Celestina, se aprecia el elemento trágico: dos jóvenes viven una intensa
historia de amor, pero ambos mueren finalmente.
El aspecto cómico se encuentra presente a lo largo de la trama: situaciones graciosas,
engaños divertidos y personajes con un lenguaje burlón.
Imitación burlesca de un género, de una obra artística o literaria, del estilo de un
escritor, o de los gestos o manera de ser de una persona. Renacimiento. Nombre de un
amplio Es otro de los subgéneros del género dramático más importantes y, como su
propio nombre indica, comparte elementos con la tragedia y con la comedia. El drama
también se conoce como tragicomedia y apareció en la Antigua Grecia, aunque el
subgénero se reavivó en España gracias a La Celestina de Fernando de Rojas.
LAS CARACTERÍSTICAS
Las más importantes de este subgénero del teatro son:
Mezcla la tragedia y la comedia
El sarcasmo es uno de los elementos principales de este tipo de obra
Personajes realistas y reconocibles en la sociedad
La temática sobre la que tratan estas obras son temas universales e importantes
como la justicia, el honor, etc.
Final contundente que puede ser positivo o negativo
El subgénero más cercano a la realidad del espectador y, por eso, consiguió un
enorme éxito movimiento cultural europeo entre la Edad Media y la Edad
Moderna.