Clase 2 de Físca

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ESPACIOS CURRICULARES: FISICA

CURSO: 1 AÑO TODOS LAS DIVISIONES Y TURNOS

Docente: CAMINAL, ANALIA

Las actividades son OBLIGATORIAS, las puedes escribir o imprimirlas, debes contar con ellas en la
carpeta de clases RESUELTAS.

NO OLIVDES DE PARTICIPAR EN LOS FOROS DE CONSULTAS Y EN EL FORO DE


PRESENTACION DEL AULA VIRTUAL

TITULO: EL MÉTODO CIENTÍFICO.

https://youtu.be/_Ypd1jhAVzQ

OBJETIVO: el objetivo de este trabajo es que el estudiante, a través de la lectura de textos,


identifique los pasos más importantes del método científico. Favoreciendo la lectura comprensiva
y el pensamiento crítico.

ACTIVIDAD:

Lee los siguientes textos y responde:

Texto 1: LA VACUNA DE LA VIRUELA.

https://youtu.be/oXQ-uDnWNYA

El médico y biólogo británico Edward Jenner nació en Berkeley, condado de Gloucestershire el 17


de mayo de 1749. Con 21 años inició sus estudios en el Hospital San Jorge de Londres con el famoso
cirujano y anatomista John Hunter. En 1773 y tras rechazar el puesto de naturalista en la segunda
expedición del capitán Cook por el océano Pacífico, Jenner volvió a su pueblo natal para ejercer la
medicina. En aquella época, la viruela era una plaga infecciosa muy temida que azotaba
fundamentalmente a Europa y América, y para la que no había tratamiento ni forma de prevenirla.
Estaba causada por el Variola virus, aunque en aquella época no se sabía. El nombre de viruela
proviene del latín "varius" (de variado o variopinto), y se refiere a los abultamientos que aparecen
en la cara y en el cuerpo de una persona infectada. La infección provocaba gran mortandad y los
supervivientes quedaban marcados de por vida. Jenner observó que las vacas padecían una
enfermedad llamada Vaccina o viruela de las vacas, que produce erupciones en las ubres semejantes
a las que produce la viruela humana. En ocasiones, contagiaban la
enfermedad a las lecheras, en las que aparecían pústulas en las manos. Por fortuna, era una dolencia
de carácter benigno y los afectados no tardaban en recuperarse con muy pocas secuelas. Pero lo
que verdaderamente llamó la atención de Jenner fue que estas personas se volvían inmunes contra
la viruela humana. Jenner decidió probar ese conocimiento empírico y tuvo la idea de inocular a una
persona sana con la viruela de las vacas para conferirle inmunidad frente a la terrible enfermedad.
El 14 de mayo de 1796 extrajo pus de una pústula de la mano de Sarah Nelmes, una ordeñadora que
había contraído la viruela de su vaca lechera, y lo inoculó a un saludable niño de 8 años llamado
James Phipps. El pequeño desarrolló una leve enfermedad entre el 7º y el 9º día. Se formó una
vesícula en los puntos de inoculación, que desapareció sin la menor complicación. El 1 de julio,
inoculó al niño con la temida viruela, pero no enfermó. Jenner envió un informe a la Royal Society
de Londres, que lo rechazó. En 1798 publicó a sus expensas el libro “Investigación acerca de las
causas y efectos de la viruela vacuna” y comenzó una campaña en pro de su “vacuna”, que fue muy
discutida. Los científicos de la época, e incluso la Asociación Médica de Londres, se opusieron al
tratamiento de Jenner y, en muchas ocasiones realizaron críticas violentas e injuriosas. Incluso
desde los púlpitos se predicaba que la vacuna era una acción anticristiana. Finalmente, su
vacunación acabó imponiéndose, aunque hoy en día sus métodos de experimentación serían
inaceptables por contravenir los principios de la ética médica.

Responde:

1. Marca las palabras que desconoces y busca su significado.


2. ¿Qué observó Edward Jenner?
3. ¿Qué preguntas se formuló frente a lo observado?
4. ¿Cómo realizó sus experimentos?
5. ¿Qué logro con su investigación?

Texto 2: EL MARCAPASOS

El inventor que más vidas ha salvado en los últimos 50 años no fue un médico, sino un ingeniero.
Nacido en Buffalo (Nueva York) en 1919, Wilson Greatbatch nunca pensó en dedicarse a la sanidad.
Toda su carrera estaba dirigida a la electricidad, rama de la que era ingeniero. Pero -una vez más-
una casualidad puso a su alcance un descubrimiento que ha permitido revolucionar la cardiología.
Tanto, que en 1983 la Sociedad Nacional de Ingenieros Profesionales lo consideró uno de los
hallazgos del siglo. Según relató él mismo, estaba trabajando en un sistema para registrar los latidos
del corazón. Pero un error al elegir un componente produjo un fenómeno nuevo: una emisión
rítmica de impulsos eléctricos. El genio de Greatbatch fue darse cuenta de que ese patrón podía
identificarse con el de un corazón. Sumó dos y dos y, tras recordar las charlas con algunos médicos
en las que estos le explicaban que en el fondo el corazón es un motor que se alimentaba con
electricidad, se puso manos a la obra hasta que consiguió el primer marcapasos implantable. Este
se probó con éxito en perros en 1958. Lo patentó en 1962. Pero el ingeniero, que mantuvo su
inquietud intelectual hasta casi el final, como acreditan sus más de 325 patentes -algunas tan
dispares como una canoa alimentada por energía solar o algunos
biocombustibles-, no se quedó ahí. En esto no siguió el estereotipo del genio arruinado que solo se
ve reconocido después de muerto, y con los beneficios de su invento creó en 1970 una compañía,
Wilson Greatbatch Limited, que sigue operativa. Y con beneficios. Tampoco se desligó por completo
de los marcapasos. Tras solucionar problemas como la estanqueidad del aparato, se enfrentó a otro
que limitaba seriamente su utilización: para que el dispositivo fuera realmente útil debía tener una
vida larga, a ser posible más que la del paciente al que iba a ayudar. Y eso no era posible en aquella
época porque fallaba la fuente de alimentación, y es que las pilas de entonces apenas duraban dos
años. En 1972 llegó con la solución: la creación de baterías de yodo y litio con una larga vida. Con
ello se conseguía que el aparato funcionara sin que hubiera que reabrir al paciente para cambiarle
la fuente de alimentación. Estas pilas son las que se usan todavía hoy mayoritariamente en el sector.

ACTIVIDAD:

RESPONDE:

1. Marca las palabras que desconozcas y busca su significado.


2. ¿Qué observó Wilson Greatbatch?
3. ¿Qué se preguntó al analizar esa observación?
4. ¿Cómo probó su invento?
5. ¿Qué otros inventos se dieron después de esté?

 Registra las respuestas en tu carpeta de aula.

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