BIOLOGIA

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 4

Las 3 Leyes de Mendel

Gracias a toda la información que obtuvo de sus experimentos postuló tres


importantes leyes que nos ayudan a entender la genética. Sin embargo, este
reconocimiento lo obtuvo muy posterior a publicar su trabajo en 1858 ya que, a
pesar de que realizó copias escritas a mano para todos los científicos reconocidos
de la zona, nadie supo valorar sus leyes y Mendel, el padre de la genética, se
murió sin saber la gran aportación que había hecho a la ciencia en general y a la
genética en particular. Fue en 1900 cuando se redescubrió su trabajo y se
pusieron en valor sus leyes:

1. Primera Ley de Mendel (principio de la uniformidad)

Si se cruzan dos líneas puras, los descendientes de la primera generación serán


iguales entre sí tanto a nivel fenotípico (apariencia) como a nivel genotípico
(alelos). Asimismo, todos los descendientes serán iguales en apariencia (fenotipo)
a uno de los progenitores. El fenotipo estará determinado por el alelo dominante.

El alelo dominante se representa en mayúscula y el recesivo en minúscula.


Veamos un ejemplo para el carácter color (A > a; el alelo “A” (amarillo) domina
sobre el alelo “a” (verde)). En la figura 4 podemos ver la explicación representada
de forma visual.

Figura 4. Cruce de líneas puras


permite postular el principio de la uniformidad. Al cruzar un parental
homocigoto dominante (planta de guisante amarillo) con un homocigoto recesivo
(planta de guisante verde) obtenemos una primera generación (F1) homogénea.
Todos los descendientes son heterocigotos y presentan el fenotipo dominante
(amarillo). En la línea de los gametos podemos ver los distintos alelos que
presentan los parentales. Al combinarlos obtenemos los genotipos heterocigotos.

2. Segunda ley de Mendel (principio de la segregación)

Defiende que los alelos del mismo locus segregan (se separan) dando lugar dos
clases de gametos en igual proporción, mitad de los gametos con el alelo
dominante (A) y mitad con alelo recesivo (a).

Esta conclusión la obtuvo al autofecundar la F1 (heterocigotos) procedente del


cruce de dos parentales de líneas puras que difieren en un carácter (Figura 1) y
obtener una segunda generación de descendientes (F2) de los cuales ¾ de los
fenotipos coinciden con el fenotipo del parental homocigoto dominante (amarillo) y
¼ lo hace con el fenotipo del parental homocigoto recesivo (verde).
La segregación de los alelos en la producción de los gametos asegura variación
genética en la descendencia. En la figura 5 podemos ver la explicación
representada de forma visual.

Figura 5. Cruce entre la primera generación permite postular el principio de


la segregación.

Al cruzar un parental heterocigoto (planta de guisante amarillo) con otro


heterocigoto (planta de guisante amarillo) obtenemos una segunda generación
(F2) heterogénea. ¾ de los descendientes presenta el fenotipo dominante
(amarillo) y ¼ de los descendientes presentan el fenotipo recesivo (verde). En la
línea de los gametos podemos ver los distintos alelos que presentan los
parentales. Al combinarlos obtenemos ¼ de homocigotos dominantes, ½ de
heterocigotos y ¼ de homocigotos recesivos.

3. Tercera Ley de Mendel (principio de la combinación independiente)

Esta ley la propuso realizando cruces entre parentales que deferían en dos
caracteres. Mendel concluyó que diferentes rasgos son heredados
independientemente unos de otros, no existe relación entre ellos, lo que significa
que el patrón de herencia de un rasgo no afectará al patrón de herencia de otro
(siempre y cuando los genes no estén ligados).

Para comprobar el principio de la segregación realizó retrocruzamientos o


cruzamientos de prueba. Esto consiste en cruzar los heterocigotos de la F1 (AaBb)
con el parental recesivo (aabb).

Mediante este cruce se puede comprobar el tipo y la proporción de gametos que


producen los heterocigotos ya que el fenotipo de los descendientes de este cruce
coincide con los gametos producidos por el heterocigoto de la F1 dado que el
parental recesivo únicamente produce gametos de tipo recesivo. Visualicemos
esta ley cruzando plantas que difieren en el color (A = amarillo; a = verde) y la
forma del guisante (B = liso; b = rugoso) (Figura 6).
Figura 6. Cruce líneas puras que difieren en dos caracteres permite postular
el principio de la combinación independiente.

Al cruzar un parental homocigoto dominante (planta de guisante amarillo liso) con


un homocigoto recesivo (planta de guisante verde rugoso) obtenemos una primera
generación (F1) homogénea. Todos los descendientes son heterocigotos y
presentan el fenotipo dominante (amarillo liso). En la línea de los gametos
podemos ver los distintos alelos que presentan los parentales. Al combinarlos
obtenemos los genotipos heterocigotos.

También podría gustarte