El Viaje Del Heroe

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El viaje del héroe.

La vida nos está llevando allá.


vida/muerte, luz/oscuridad, terror/felicidad. Tales contrastes,
producidos bruscamente someten al espíritu a un fuerte shock no
racional, que libera de la propia identidad y hace que cada individuo
se comunique con una realidad superior. Se siente así situado en la
naturaleza, en la historia del cosmos, como si al fin lograra
comprender sin palabras el lugar del hombre en el mundo, el sentido
de su vida y su destino futuro en el más allá, del que la iniciación viene
a ser una especie de ensayo general. Un instrumento, en suma, para
liberar de incertidumbres y zozobras y aceptar la situación y el destino
del hombre en este mundo y en el otro.
La vida es un viaje: El viaje del héroe. Démonos o no cuenta, todos
debemos de realizar este mítico viaje, unos llegan hasta el final otros
solo alcanzan el primer escalón. Este viaje es el objeto de la vida y
porque no decirlo es un viaje arquetípico, queramos o no es una
condición sine qua non del ser humano, donde nada tiene que ver el
género. Entre los estudiosos del tema sobresale los escritos de Jhosep
Campbell en su famoso libro "El Héroe de las Mil Caras" donde nos
habla de las tres etapas del viaje del héroe El inicio, El nudo y el
desenlace, ahí es donde podremos ver en qué parte del camino nos
encontramos. Místicos y psíquicos nos dan la pauta, cómo también el
mito.
Así por ejemplo San Juan De La Cruz nos dice en su Subida al Monte
Carmelo:
"Toda la doctrina que entiendo tratar en esta Subida del Monte
Carmelo está incluida en las siguientes canciones, y en ellas se
contiene el modo de subir hasta la cumbre del monte, que es el alto
estado de la perfección, que aquí llamamos unión del alma con Dios.
Y porque tengo de ir fundando sobre ellas lo que dijere, las he querido
poner aquí juntas, para que se entienda y vea junta toda la sustancia
de lo que se ha de escribir; aunque, al tiempo de la declaración,
convendrá poner cada canción de por sí y, ni más ni menos, los versos
de cada una, según lo pidiere lamateria y declaración"
Como lo comenta Santa Teresa.
En su “Castillo Interior”
“Estando hoy suplicando a nuestro Señor hablase por mí,
porque yo no atinaba a cosa que decir ni cómo comenzar
a cumplir esta obediencia, se me ofreció lo que ahora
diré, para comenzar con algún fundamento: que es
considerar nuestra alma como un castillo todo de un
diamante o muy claro cristal, adonde hay muchos
aposentos, así como en el cielo hay muchas moradas.
Que si bien lo consideramos, hermanas, no es otra cosa
el alma del justo sino un paraíso adonde dice El tiene sus
deleites. Pues ¿qué tal os parece que será el aposento
adonde un Rey tan poderoso, tan sabio, tan limpio, tan
lleno de todos los bienes se deleita? No hallo yo cosa
con que comparar la gran hermosura de un alma y la gran
capacidad; y verdaderamente apenas deben llegar
nuestros entendimientos, por agudos que fuesen, a
comprenderla, así como no pueden llegar a considerar a
Dios, pues El mismo dice que nos creó a su imagen y
semejanza”.

Este viaje puede ser interno o externo. Como lo hemos visto en San
Juan de la Cruz o en Santa Teresa, como lo veremos en los periplos de
Gurdjieff que narra en su libro de cuarto camino.

Cuarto camino.

El cuarto camino es una filosofía para desarrollar la conciencia.


Estos 4 caminos ya eran conocidos en oriente y son prácticamente
referentes a la Yoga.
Empezando por el Hatha yoga (el fakir) el kundalini yoga (el artista),
el Nidra yoga (científico) y el Rajah yoga (el místico)

Pero aclarando oportunamente por Ouspensky el discípulo de Gurdjieff:


"Pero nosotros como occidentales necesitamos un procedimiento, de
acuerdo a nuestra idiosincrasia un sistema para despertar (a través
del autoconocimiento, atención consciente y del entorno, y sobre todo
«el recuerdo de sí»). Algo práctico, debido al modo de vida actual…
Cómo número uno sería el autoconocimiento, y una de las formas sería
la Psicología supra normal, pero como no hemos llegado a esto,
debemos buscar en la psicólogia normal… El sueño es la parte más
íntima y escondida que conduce a la puerta del alma. El otro nos habla
a través del sueño. Para la psique hay un más allá del tiempo y del
espacio. "Toda la mitología podía tomarse como una especie de
proyección de lo inconsciente colectivo".
Y Jung dice:
"La sombra no sólo consiste en tendencias moralmente desechable
sino que muestra también una serie de cualidades buenas, a saber:
instintos normales, reacciones adecuadas, percepciones fieles a la
realidad, impulsos creadores, etc"…Por ello, la integración de la
sombra es un auténtico conflicto moral pues la confrontación con la
sombra supone tener "conciencia crítica despiadada del propio
ser… Que la sombra se convierta en nuestro amigo o en nuestro
enemigo depende en gran parte de nosotros mismos... La sombra no
es siempre, y necesariamente, un contrincante. De hecho es
exactamente igual a cualquier ser humano con el cual tenemos que
entendernos, a veces cediendo, a veces resistiendo, a veces mostrando
amor, según lo requiera la situación. La sombra se hace hostil sólo
cuando es desdeñada o mal comprendida… Si la figura de la sombra
contiene valiosas fuerzas, y fuerzas vitales, tienen que ser asimiladas a
experiencias efectivas y no reprimidas. Corresponde al Yo renunciar a
su orgullo y fatuidad y vivir conforme a algo que parece oscuro, pero
que, en realidad, puede no serlo. Esto ha de requerir un sacrificio tan
heroico como la conquista de la pasión pero en sentido opuesto… El
conflicto surge debido a que, en principio, ignora el Yo si un impulso
de la sombra es positivo o negativo. Este es uno de los problemas más
conflictivos del proceso de individuación en esta primera fase del
camino de la integración de los arquetipos y de la búsqueda del Sí-
Mismo. "El reconocimiento de la sombra predispone a la modestia y
hasta al temor a la esencia insondable del ser humano" Con el
reconocimiento de la sombra el individuo comienza,
consecuentemente, a relacionarse con los demás de otra forma…
Todavía hoy debemos tener sumo cuidado para no proyectar nuestra
propia sombra de un modo harto vergonzoso, y estamos como
inundados por ilusiones proyectadas. Al representarse a una persona
suficientemente valiente como para desprenderse por entero de toda
proyección, en un individuo consciente de poseer una sombra
considerable. Tal hombre se ha cargado de nuevos problemas y
conflictos; se ha convertido en tarea seria para sí mismo, dado que no
puede decir ya que son los otros quienes hacen tal o cual cosa, ni que
son ellos los culpables, y que hay que combatirlos. Vive en la "casa del
autoconocimiento, de la concentración íntima. Sea cual fuera la cosa
que ande mal en el mundo, este hombre sabe que igual ocurre
también dentro de él mismo y si aprende solo a "componérselas" con
su sombra habrá hecho en verdad algo para el mundo… Habrá
logrado entonces dar respuesta a una ínfima parte, al menos, de los
enormes problemas que se plantean en el presente, buena parte de los
cuales oponen tantas dificultades en razón de hallarse como
envenenados por las mutuas proyecciones. ¿Y podrá ver claramente
quien no se ve a sí mismo ni aquellas oscuridades que,
inconscientemente, está transfiriendo en todas sus acciones? …
El rápido desarrollo de las ciudades, con su coordinación de esfuerzos,
favorecida por la extraordinaria división del trabajo; la creciente
industrialización de la tierra llana y el aumento de seguridad en la
existencia, han privado a la humanidad de muchas ocasiones para
desahogar sus energías afectivas La labranza de la tierra, con sus
variadas ocupaciones, que por su contenido simbólico proporcionan al
campesino un inconsciente satisfacción, desconocida del obrero de
fábrica y del empleado de oficina; la vida con la naturaleza, los
hermosos momentos en que el labriego, dueño y fecundador de la
gleba, empuja el arado sobre el campo o con gesto de rey desparrama
la semilla de la cosecha futura; la justificada angustia ante
los destructores poderes de los elementos: el gozo por la fecundidad
de la mujer, que le regala hijos e hijas, nuevas y mejores fuerzas para
el trabajo y aumento de bienestar. . . todo esto está muy lejos ya de
los hombres de hoy, habitantes de las ciudades, máquinas modernas
de trabajo. Hasta nos falta la más natural y bella de todas las
satisfacciones: el poder contemplar con pura alegría inmaculada la
venida de nuestra propia siembra, la "bendición" de los hijos. ¿Qué
satisfacción puede proporcionar todo esto? Penosamente se arrastran
los hombres hacia el trabajo (no hay más que observar los rostros en
el tranvía por lasm mañanas). Uno fabrica a diario la misma ruedecilla;
otro escribe cosas que nada le interesan. ¿Cómo maravillarse de que
cada ciudadano pertenezca a tantas sociedades como días tiene la
semana, y de que las mujeres acudan a sectas y círculos, donde un
héroe cualquiera de reunión pública sacia sus anhelos contenidos, esos
anhelos que el hombre satisface en el restaurant dándose importancia
y bebiendo cerveza "para tener buen humor" ...Estos intereses son una
especie de dioses que, cuando son reconocidos por muchos,
constituyen poco a poco una iglesia y agrupan en torno suyo un
ejército de creyentes. Llamamos a esto una organización. El Estado, el
ejército, el dinero, son trampantojos semejantes; de aquí la reacción
anarquista, que a su vez quiere echar al diablo para poner a Belcebú.
La enantiodromia, que siempre amenaza cuando un movimiento se ha
constituido en fuerza indudable, no ofrece solución alguna al
problema; es tan ciega en su desorganización como en su
organización…

Las historias del héroe siempre implican una suerte de viaje. Un héroe
abandona su entorno cómodo y cotidiano para embarcarse en una
empresa que habrá de conducirlo a través de un mundo extraño y
plagado de desafíos. Puede ser un viaje real (con un cambio de
espacio) o un viaje interior que ocurre en su mente, corazón y espíritu.
El héroe crece y sufre cambios, viaja de una manera de ser a la
siguiente: de la desesperación a la esperanza, de la debilidad a la
fortaleza, de la locura a la sabiduría, del amor al odio… Son estos
periplos emocionales los que atrapan al público y consiguen que una
historia merezca ser apreciada".

Las doce etapas del viaje del héroe (De Joseph Cambell)

ACTO I (Inicio)

1. El mundo ordinario: El héroe comienza en su vida cotidiana en su


mundo conocido. Todo le resulta familiar y estable. Se siente cómodo.
Concibe la vida de una manera determinada. En esta fase la audiencia
conoce al héroe, descubre sus ambiciones y limitaciones, y forma un
lazo de identificación y reconocimiento. Es el mundo normal del héroe
antes de que la historia comience.

2. La llamada de la aventura: En un momento dado, al héroe se le


presenta un problema, un desafío o aventura, y es entonces cuando
debe decidir si responde a la llamada o no. El héroe es desafiado a
llevar a cabo una búsqueda que cambia su rutina.

3. Reticencia del héroe o rechazo de la llamada: Por miedo al


cambio o a lo desconocido, o por apego a lo conocido, el héroe
rechaza la llamada. Prefiere seguir en su mundo cotidiano, en la
comodidad y en la familiaridad. Aquí el héroe duda o expresa temor.
Teme perder su estabilidad.

4. Encuentro con el mentor o la ayuda sobrenatural: El héroe


encuentra alguien o algo que le lleva a aceptar finalmente la llamada.
Recibe más información sobre la aventura o realiza algún importante
aprendizaje que le anima a responder al desafío. Con este encuentro,
el héroe hace contacto con una fuente de apoyo, experiencia o
sabiduría. Puede ser una persona o ayuda sobrenatural. Gracias a su
apoyo, el héroe gana seguridad y convicción, lo que lo hace aceptar el
llamado y se informa y entrena para su aventura o desafío.

ACTO II (Nudo)

5. El Cruce del primer umbral: A través del primer umbral, el héroe


abandona su mundo ordinario para entrar en un mundo diferente,
especial o mágico. Se adentra en lo desconocido y deja atrás lo
familiar. Este es el punto en el que la persona en verdad se
compromete con el campo de la aventura, dejando los límites
conocidos de su mundo y aventurándose hacia el reino desconocido y
peligroso, donde las reglas y los límites no están aún bien definidos.

6. Pruebas, aliados y adversarios: Mientras recorre su camino, el


héroe se enfrenta a una serie de pruebas, encuentra aliados en su
aventura y se topa con sus adversarios. Mientras lo hace, aprende las
reglas de ese nuevo mundo. Estas situaciones y personas ayudan al
héroe a descubrir lo que es especial sobre la aventura que ha
emprendido

7. Acercamiento a la Cueva Profunda: El héroe avanza en el camino


cosechando sus primeros éxitos. Supera las pruebas que se le van
presentando, hace nuevos aprendizajes y establece nuevas creencias.
Esta es la fase en la que el héroe se prepara para la batalla central de
la confrontación con las fuerzas de fracaso, la derrota o la muerte. El
héroe tiene éxitos durante las pruebas.

8. Prueba difícil o traumática (La Odisea o el calvario): El héroe se


enfrenta a su primera crisis en una prueba a vida o muerte. Es la
prueba más difícil, la crisis central de la historia en la que el héroe
enfrenta su o sus temores más grandes y prueba la muerte, ya sea
literal o metafóricamente. Es la crisis más grande de la aventura, pues
lo enfrenta a una opción de vida o muerte.

ACTO III (Desenlace)

9. Recompensa (Apoderarse de la espada o del cáliz): Tras su


encuentro con la muerte, el héroe se sobrepone a sus miedos y
obtiene a cambio una recompensa. Es el momento en el cual el héroe
disfruta los primeros beneficios de haber confrontado el miedo y la
muerte. ¿Qué conoce o experimenta esta persona ahora que está más
allá del bien y del mal, de lo masculino y femenino, de la vida y la
muerte? Esto es por lo que el héroe inició su viaje. Todos los pasos
previos sirven para preparar y purificar para este paso, ya que en
muchos mitos la recompensa es algo trascendente como el elixir o la
vida misma. Un regalo o bendición es dado al héroe basado en sus
habilidades y conciencia.

10. El camino de vuelta: Superada la gran prueba y ya


con el botín, el héroe emprende el camino de regreso al que fue su
mundo ordinario. Aquí es donde el héroe se compromete, ya sea
voluntariamente o no, a finalizar la aventura y deja (o es echado de) el
"Mundo Especial". Algunas veces el héroe no quiere volver a su
existencia previa y deber ser convencido de hacerlo. Algunas veces el
héroe debe escapar con la recompensa, si es algo que los Dioses han
estado guardando celosamente. Volver del Viaje puede ser tan lleno de
aventura y peligroso como fue ir en él. Así como el héroe puede
necesitar guías y asistentes para emprender la aventura, muchas veces
debe tener guía poderosos y rescatadores para traerlo de vuelta a la
vida de todos los días, especialmente si la persona está herida o
debilitada por le experiencia. O quizá el héroe no se da cuenta de que
es tiempo de regresar, que puede regresar, o que otros necesitan la
recompensa que el héroe ha descubierto. La mayoría de las veces el
héroe debe volver al mundo ordinario.

11. Resurrección del héroe: El héroe se enfrenta de


nuevo a una segunda prueba a vida o muerte en la que debe utilizar
todos los recursos y aprendizajes que recogió por el camino. Cuando el
héroe enfrenta el desafío que lo purifica, lo redime y transforma en el
Umbral A Casa. Para un héroe humano, contrariamente a los héroes
trascendentales como Jesús o Buddha, puede significar alcanzar un
balance entre lo material y lo espiritual. La persona se vuelve
competente y cómoda con ambos mundos, el interior y el exterior. Es
otra prueba donde el héroe enfrenta la muerte y debe usar todo lo
aprendido.

12. Regreso con el elixir: El héroe regresa a casa con la


recompensa y la utiliza para ayudar a todos en su mundo ordinario,
que ahora se ha transformado como resultado de su propia
transformación durante el viaje y comparte lo que ha ganado en su
búsqueda, lo que beneficia a amigos, familiares, a la comunidad y a su
mundo.

El mito es la imagen que formula el arquetipo.


Inconsciente colectivo, el arquetipo.
“La denominación es útil y precisa pues indica que los contenidos
inconscientes colectivos son tipos arcaicos o – mejor aún – primitivos.
Sin dificultad también puede aplicarse a los contenidos inconscientes
de la expresión “representations collectives”, que Levy-Bruhl usa para
designar las figuras simbólicas de la cosmovisión primitiva, en principio
se refiere casi a lo mismo. En las doctrinas tribales primitivas aparecen
los arquetipos. En una peculiar modificación. En verdad aquí ya no son
contenidos de lo inconsciente sino que se han transformando en
formulas consientes, que son transmitidas por la tradición, en general
bajo la forma de la doctrina secreta la cual es una expresión típica de
la transmisión de contenidos colectivos originariamente procedentes de
lo inconsciente”. C. G. JUNG (1875/1961)
Jung, desarrolló la teoría del "inconsciente colectivo", que sostiene que
las personas pueden perder su identidad personal en la masa. Pero el
inconsciente colectivo según Jung, es mucho más que eso, es la
esencia más profunda de la raza humana, es la que equivaldría a el
instinto en los animales, por lo tanto es innata e intrínseca en la
humanidad.

Jung estaba en desacuerdo con la teoría de su maestro Freud


que concedía una importancia fundamental a las motivaciones
sexuales en el surgimiento de las neurosis. En cambio, subrayó la
trascendencia del instinto religioso en el hombre y a causa de
estas ideas fue duramente criticado por los seguidores de Freud.
Freud no compartía todas las ideas de Jung, sobre todo como las
que se comenta a continuación. “Todos los hombres comparten
potentes energías psíquicas; son las raíces del Yo, el inconsciente
colectivo. Eso les pertenece a todos, es el patrimonio mismo de
la humanidad y se ramifica en cada alma individual”
Por eso Freud dijo de Jung “…C. G. Jung. Había una época en
que este autor no pretendía arrogarse la categoría de profeta”…
y hoy se le acusa de abandonar los métodos de la investigación
científica, y dedicarse a la brujería y al espiritismo, y lo apodan
"el brujo".
Tenemos que analizar detenidamente lo que es el Arquetipo.

Podemos empezar, con una anécdota de Jung en “respuesta a Job”:


“En octubre de 1913, encontrándome en el tren que le llevaba de
Zúrich a Schaffhausen, me sucedió este extraño hecho: una vez en el
túnel, perdí la conciencia de tiempo y de lugar, y desperté al cabo de
una hora oyendo anunciar al conductor la llegada a Schaffhausen.
Durante todo ese tiempo fui víctima de una alucinación, de un «sueño
de vigilia»:
Veía el mapa de Europa y veía cómo el mar la iba cubriendo país por
país empezando por Francia y Alemania. Poco tiempo después, todo el
continente se encontraba bajo el agua, a excepción de Suiza, que era
como una montaña muy alta que las olas no podían sumergir. Jung se
veía sentado sobre la montaña. Y, al mirar mejor alrededor de él, se
dio cuenta de que el mar era sangre: comenzó a distinguir sobre las
olas los cadáveres, los tejados de las casas, vigas medio quemadas...
Tres meses más tarde, en diciembre de 1913, se repite el mismo
«sueño de vigilia» a la entrada del mismo túnel. («Era como una
inmersión en el inconsciente colectivo», comprendería más tarde.)
Con estos hechos me preocupo y me pregunto si no estaré «haciendo
una esquizofrenia» (según el lenguaje de la época). Finalmente,
algunos meses más tarde, sueño lo siguiente: Me encuentro con un
amigo durante el verano en los mares del sur, cerca de Sumatra. Por
los periódicos nos enteramos de que Europa ha sido invadida por una
ola de frío terrible como jamás antes se había conocido. Decido partir
a Batavia y emboarme para regresar a Europa. Mi amigo me dice que
viajará en un velero de Sumatra hasta Hadhramaut y que luego
continuará su camino por Arabia y Turquía. Llego a Suiza. Y sólo se ve
nieve. Una viña inmensa se eleva en algún lugar con muchos racimos.
Me acerco y se pongo a coger racimos distribuyéndolos entre
desconocidos que le rodean pero que no puede ver...
-A su tercera repetición, el sueño llegó a inquietarme en el más alto
grado. Justamente preparaba una comunicación sobre la esquizofrenia
para el congreso de Aberdeen y me decía: «¡Hablaré de mí mismo!
Probablemente me volveré loco después de la lectura de la
comunicación ... ». El congreso tenía lugar en julio de 1914:
exactamente en el período en que en mis tres sueños me veía en los
mares del sur.
El 31 de julio, inmediatamente después de mi conferencia, me enteré
por los diarios de que la guerra acababa de estallar. ¡Por fin
comprendía! Y cuando al día siguiente el barco me dejó en Holanda,
no había nadie más feliz que yo. Ahora estoy seguro de que no me
amenazaba ninguna esquizofrenia. Había comprendido que mis sueños
y visiones procedían del subsuelo del inconsciente colectivo. Sólo tenía
que trabajar para profundizar y dar validez a este descubrimiento. Y es
a lo que me dedico desde hace casi cuarenta años”
Poco tiempo después Jung tuvo la alegría de recibir una segunda
confirmación a su sueño. Los diarios no tardaron en hablar de las
aventuras del capitán de barco alemán Von Mücke, que en un velero
había recorrido los mares del sur desde Sumatra hasta Hadhramaut y
después se había refugiado en Arabia para alcanzar desde allí
Turquía...”

De Acuerdo a la definición de Gerhard Adler. Primer Presidente de la


Asociación Internacional de Psicología Analítica: el Inconsciente
colectivo es como la arena que rodea a un inmenso océano y en cada
generación se van depositando nuevas capas.
Así pasó con la mitología griega:
Un mito griego es un conjunto de variantes de un mismo relato, que
existen bien como textos escritos (prosa o verso), bien en forma oral
(o ambas a la vez) o en pinturas de vasos o artes plásticas en general,
ya sea todo a un tiempo o independientemente. Dicho relato habla de
lo divino o lo sobrenatural, o de lo heroico o de animales u hombres
paradigmáticos que viven en un tiempo indefinible para la cronología
humana. Cada vez que el relato es contado, surge una nueva versión o
variante que sostiene una cierta relación de antagonismo con las
anteriores versiones o con otros mitos, y adquiere así su lugar en un
sistema constituido por la proliferación de tales relaciones

Dice Daryl Sharp:

"...El inconsciente colectivo –antes de entrar en detalles-


parece estar constituido por motivos mitológicos o imágenes
primordiales, razón por la cual los mitos de todas las naciones
son sus verdaderos exponentes. De hecho, toda la mitología
puede considerarse una especie de proyección del inconsciente
colectivo... Por lo tanto, podemos estudiar el inconsciente
colectivo de dos maneras: en la mitología o en el análisis del
individuo.

De este modo, surge una conciencia que ya no está aprisionada


en el pequeño y extremadamente sensible mundo personal del
yo, sino que participa libremente en el mundo más amplio de los
intereses objetivos. Esta conciencia ampliada ya no es ese
quisquilloso y egoísta conjunto de deseos, miedos, esperanzas y
ambiciones personales que siempre deben de ser compensados o
corregidos por las contra tendencias inconscientes; más bien, es
una función de relación con el mundo de los objetos, que
conduce al individuo a una comunión absoluta, valedera e
indisoluble con el mundo en general."...

El inconsciente colectivo contiene toda la herencia espiritual de la


evolución de la humanidad, que nace nuevamente en la
estructura cerebral de cada individuo.
(Cf. Lexicon junguiano. Daryl Sharp)

No podemos soslayar, la existencia de cierto “inconsciente


colectivo” basado en los arquetipos o “instinto humano”. Cierto o
no, el criterio de Inconsciente Colectivo, explicaría muchas
incógnitas ¿por su comodidad, lo podemos tomar como válido?,
como siempre, la realidad no es tan simple, deberemos de
investigar múltiples factores, en primer lugar: Los mitos y como
en cierta forma son intrínsecos a la naturaleza humana, de cómo
se dan en lugares tan lejanos donde no existe comunicación o
contacto posible, así como en el caso del descubrimiento
“paralelo” de la agricultura, aventurándonos hasta podríamos
decir que “En el momento adecuado se producirá lo que tiene
que pasar, es nuestra condición humana” y tal como ocurre con
la cadena genética del ADN, hay factores que harán que se
“disparen, informaciones” que modificarán nuestra vida.
Pero porque empezamos hablando del inconsciente colectivo,
bueno porque más abajo veremos que lo que pareciera lógico
calificar como pistas de mensajes o claves ocultas, en realidad
tienen una explicación mucho más lógica y sencilla. Los
arquetipos como hemos visto arriba son ideas o normas de
conducta que son características de lo humano y que se repiten
en el tiempo y en todo lo ancho del mundo.

Así según Jung existen Arquetipos comunes generales y estos


son por ejemplo:

1. Ánimus y Ánima
El Ánimus es la vertiente masculina de la personalidad femenina, y
el Ánima es el arquetipo de lo femenino en la mente del hombre.
Ambas están relacionadas con las ideas que sea asocian a los roles de
género.
2. La Madre
Para Jung, el arquetipo de la Madre nos permite detectar conductas e
imágenes relacionadas con la maternidad tal y como la han ido
experimentando nuestros ancestros.
3. El Padre
El arquetipo del Padre representa para Jung una figura de autoridad
que ofrece una guía sobre cómo vivir la vida basándose en su ejemplo.
4. La Persona
El arquetipo de la Persona representa la vertiente de nosotros mismos
que queremos compartir con los demás, es decir, nuestra imagen
pública.
5. La Sombra
Al contrario de lo que pasa con la Persona, la Sombra representa todo
aquello de nosotros mismos que queremos que permanezca en
secreto, porque es moralmente reprobable o porque es demasiado
íntimo.
6. El Héroe
El Héroe es una figura de poder que se caracteriza por luchar contra la
Sombra, es decir, que mantiene a raya todo aquello que no debe
invadir la esfera social para que el conjunto no se vea perjudicado.
Además, el Héroe es ignorante, ya que su determinación le lleva a no
pararse a reflexionar continuamente acerca de la naturaleza de lo que
combate.
7. El Sabio
Su papel es revelarle al Héroe el inconsciente colectivo. De algún
modo, el arquetipo que recibe el nombre del Sabio arroja luz sobre la
senda del Héroe.
8. El Trickster
El arquetipo del Trickster, o el embaucador, es el que introduce las
bromas y la violación de las normas preestablecidas para mostrar hasta
qué punto las leyes que explican las cosas son vulnerables. Pone
trampas y paradojas en la senda del Héroe.

Tomando esto en cuenta podemos pasar al sig. Punto:

PSICOANÁLISIS DEL MITO


Nos embarcamos ahora en un apartado en el que profundizaremos
más en el mito del héroe a través del psicoanálisis, donde se intentan
encontrar sentido a los rasgos del héroe, para ello los padres del
psicoanálisis, Sigmund Freud, Otto Rank y J. Campbell, nos ayudaran a
entenderlo y como hacen uso de el para explicar circunstancias de la
realidad humana.
Las teorías psicoanalíticas de Freud son un gran valor para estudiar el
mito en general pero es su discípulo Otto Rank quien aplica sus ideas
al estudio concreto del mito del nacimiento del héroe entendiéndolo
como la primera manifestación visible del conflicto psicológico del niño
con el padre.
Y claro el imprescindible Jung. Que transfiere de la alquimia al
despertar de la conciencia: “En la Hermaneaseis Arquetípica La
alquimia consta de 3 fases: El Nigredo ennegrecimiento putrefacción
Saturno- Osiris Caput Mortuun, La Albedo blanqueamiento la
integración de los contrarios en el uno, el Mercurio, La Rubedo
enrojecimiento, es el logro de la totalidad Unus Mundus, el oro
Filosofal. Sal, Mercurio y Oro…He estudiado alquimia durante quince
años, pero no se lo dije nunca a nadie.
No quería sugestionar ni a mis pacientes ni a mis colaboradores. Pero
después de quince años de investigaciones y de observaciones, las
conclusiones se impusieron con una fuerza ineluctable: las
operaciones alquímicas eran reales, sólo que esa realidad no era física
sino psicológica.
El negro, Nigredo, es el estado inicial, o como propiedad de la prima
materia, del caos, o de la masa confusa, de antemano existente o
creada por descomposición (solutio, separatio, divisio, putrefactio) de
los elementos. Presupuesto el estado de descomposición, como sucede
en ocasiones, entonces se produce una unión de las contraposiciones
mediante la unión de lo masculino con lo femenino (coniugium,
matrimonium, coniunctio, coitus) y aparece la muerte del producto de
la unión (mortificatio, calcinatio, putrefactio) con el ennegrecimiento
correspondiente. Desde el Nigredo, el lavado (ablutio, baptisma)
conduce o directamente al emblanquecimiento, o el alma (anima) que
ha salido del cuerpo a causa de la muerte es reunida de nuevo con el
cuerpo muerto para dar vida a éste, o los muchos colores (omnes
colores, cauda pavonis) conducen a uno sólo, el blanco, que contiene
todos los demás. Con esto se alcanza la primera meta principal del
proceso, concretamente el albedo, tinctura alba, terra alba foliata, lapis
albus, etc., que ha sido tan sumamente elogiado por muchos como si
la meta se hubiese alcanzado en realidad. Es el estado plateado o
lunar, el cual, sin embargo, debe ser elevado hasta el estado solar. El
albedo es, en cierto modo, el crepúsculo; el rubedo es ya la salida del
Sol. La transición al rubedo constituye el amarillea miento (citrinitas),
el cual, como se ha mencionado, decae con posterioridad. Después
sale el rubedo directamente del albedo mediante aumento del fuego
hasta el grado máximo. Lo blanco y lo rojo son reina y rey, que
también pueden celebrar en esta fase sus nuptiae chymicae".
Freud estudiaba la histeria humana, decía que esas obsesiones y fobias
eran sustitutos de deseos rechazados por la presión de la sociedad,
esa histeria es un mecanismo de defensa del individuo en defensa de
su yo inconscientemente y sitúa como base de ese conflicto el que el
llamo “complejo de Edipo” (amor sexual o parricidio hacia uno de los
progenitores). Freud hizo uso del mito de Edipo para resumir y explicar
de forma simple sus teorías psicoanalíticas del ser humano y el
pensamiento humano, que trajo aparejado el revival del estudio mítico.
Apoyado en la hipótesis de A. Bauer (justificaba que el origen de los
mitos heroicos, reside en que todas las civilizaciones históricas
glorificaban a sus reyes y héroes míticos mediante relatos poéticos y
que los nacimientos de esos seres eran de gran similitud por que las
leyendas de todas esas culturas tenían un origen común ya que en
cierto momento de la antigüedad el pensamiento humano era idéntico
en todo lugar) y en las teorías psicoanalíticas de Freud respecto a los
mitos y sueños, Otto Rank, discípulo de Freud, indaga en el mito del
nacimiento del héroe con propósito de hallar rasgos comunes y a
través de ellos formular una leyenda modelo o patrón. De esta manera
analiza quince figuras del ciclo mítico de diferentes culturas tales como
Hércules, Gilgamesh, Moisés, Jesús, etc. Logra almacenar rasgos
comunes: padres de alta nobleza o reyes, concebidos en un contexto
difícil externo, profecías sobre el nacimiento, abandonados tras nacer y
recogidos por gente humilde o animales, descubren sus orígenes tras
la infancia y se venga de su padre.
A través del psicoanálisis Rank advierte la rivalidad sexual del héroe
durante la niñez con sus padres interrumpiendo su relación, esto
provoca fantasías y ensueños asexuados y posteriormente marcados
por descubrir el sexo (mal interpretado) buscan rebelarse y liberarse
de sus padres. En el mito del héroe Rank presenta a los padres como
los primeros oponentes de los héroes añadiendo a esto el mito de
Edipo (matando al padre y cometiendo incesto con la madre)
corroborando la idea psicoanalista; esta circunstancia que Rank estudia
en muchos mitos heroicos lo lleva a pensar en la existencia de una
especie de paranoia en el héroe que se concreta en la eliminación del
padre y su posterior unión con la madre. A partir de este hecho se
podría decir que los mitos heroicos equivalen a las ideas delirantes de
los psicóticos, quienes padecen delirios de persecución y grandeza, o
sea, los paranoicos, cuyo sistema delirante evidencia una estructura
semejante a la que hallamos en el mito del héroe; en suma, Rank
advierte en los personajes que dan forma al mito del héroe la
estructura delirante de los paranoicos.
Según la hipótesis rankiana, la formación de los mitos heroicos tiene
origen en el héroe mismo o más concretamente en su infancia. Pero
conviene recordar que los mitos no son elaborados por el héroe sino
que son el resultado de un pueblo de adultos y donde el impulso inicial
está dado por el asombro popular ante la aparición del héroe cuya vida
extraordinaria solo es concebible si ha tenido un nacimiento y una
infancia “maravillosa”. Por otro lado también destaca el
comportamiento asocial de los héroes, se le comprende entonces como
un rebelde, un renovador y revolucionario héroe, cutas acciones
estarán orientadas hacia la búsqueda de la libertad, hacia la
instauración de nuevos valores, y esa es la causa primordial por la que
el héroe se presenta como un ser condenado a la soledad.
Por último pero no menos importante debemos tener en cuenta las
importantes teorías psicoanalistas de J. Campbell sobre el mito del
héroe. Es uno de los pensadores que más ha profundizado la
interpretación psicoanalítica del mito del héroe reflejado en su clásica
obra El héroe de las mil caras, en ella Campbell explica que el título de
su libro se debe a que los héroes tienen una típica secuencia de
acciones heroicas.
Su tesis se centra en que, triunfando sobre sus más sombrías pasiones
(vemos una abismal diferencia de visión con los anteriores autores), el
héroe simboliza nuestra habilidad para controlar al animal irracional
que llevamos dentro. Pero la hazaña del héroe no se basa solo en la
liberación interior y la felicidad personal, sino en ponerse al servicio de
los demás, de ahí que su mayor mérito sea el que atañe a su defensa
de los valores éticos, por los que se sacrifica y llega a inmolarse. En
ese sentido el campo de acción de acción no es tanto el de lo
trascendente sino el del tiempo centrado en su aquí y ahora.
Campbell valora las formas míticas considerando que el mito establece
un vínculo entre nuestra conciencia despierta y el misterio del
universo, también que el mito nos ayuda a sacralizar la vida, ya que
nos hace ostensible la existencia de un plano invisible que fundamenta
lo visible. Lo que Campbell advierte sobre estos mitos es por un lado
que, el infierno y el paraíso habitan en nosotros y por el otro, que en el
fondo del abismo surge la salvación. Por lo cual considera que hay que
acercarse a los textos sagrados y a las culturas míticas porque ellos
revelan un camino hacia la salvación que ya ha sido experimentado por
unos personajes singulares a los que denominamos héroes y a los
cuales hay que emular.

LA AVENTURA DE MATRIX

Como arriba lo comentamos y después de tan gran introducción de los


arquetipos, hemos llegado al punto de hablar de un gran equivoco o
¿tal vez no?, de la cultura POP.
Primeramente tendremos que hablar del ensayo: “Cultura y simulacro”
(1981), uno, de los ensayos más populares del sociólogo-filósofo-
teórico cultural francés Jean Baudrillard. 'Cultura y simulacro', es uno
de los ensayos más populares del sociólogo-filósofo-teórico cultural
francés Jean Baudrillard.
"De hecho, incluso invertida, la metáfora es inutilizable. Lo único que
quizá subsiste es el concepto de Imperio, pues los actuales simulacros,
con el mismo imperialismo de aquellos cartógrafos, intentan hacer
coincidir lo real, todo lo real, con sus modelos de simulación. Pero
no se trata ya ni de mapa ni de territorio. Ha cambiado algo más: se
esfumó la diferencia soberana entre uno y otro que producía el
encanto de la abstracción. Es la diferencia la que
produce simultáneamente la poesía del mapa y el embrujo del
territorio, la magia del concepto y el hechizo de lo real. El aspecto
imaginario de la representación —que culmina y a la vez se hunde en
el proyecto descabellado de los cartógrafos— de un mapa y un
territorio idealmente superpuestos, es barrido por la simulación —
cuya operación es nuclear y genética, en modo alguno especular y
discursiva. La metafísica entera desaparece. No más espejo del ser y
de las apariencias, de lo real y de su concepto. No más coincidencia
imaginaria: la verdadera dimensión no concede posibilidad alguna ni al
fenómeno mismo de la muerte. Hiperreal en adelante al abrigo de lo
imaginario, y de toda distinción entre lo real y lo imaginario, no dando
lugar más que a la recurrencia orbital de modelos y a la generación
simulada de diferencias.
Disimular es fingir no tener lo que se tiene. Simular es fingir tener lo
que no se tiene. Lo uno remite a una presencia, lo otro a una
ausencia.
Pero la cuestión es más complicada, puesto que simular no es fingir:
«Aquel que finge una enfermedad puede sencillamente meterse en
cama y hacer creer que está enfermo. Aquel que simula una
enfermedad aparenta tener algunos sínto-mas de ella» (Littré). Así,
pues, fingir, o disimular, dejan intacto el principio de realidad: hay una
diferencia clara, sólo que enmascarada. Por su parte la simulación
vuelve a cuestionar la diferencia de lo «verdadero» y de lo «falso»,
de lo «real» y de lo «imaginario». El que simula, ¿está o no está
enfermo contando con que ostenta «verdaderos» síntomas?
Objetivamente, no se le puede tratar ni como enfermo ni como no–
enfermo, es decir, como un efecto donde se desvanecen los polos
adversos de la determinación, según una contracción, una retroacción
nuclear del viejo esquema polar que mantenía siempre una distancia
mínima entre causa y efecto, entre sujeto y objeto: precisamente la
distancia del sentido, el desvío, la diferencia, la menor separación
posible, irreductible bajo pena de resorción en un proceso aleatorio e
indeterminado del que el discurso ni siquiera puede ya dar cuenta,
dado que él mismo es un orden determinado.
Esta brecha es la que se desvanece en el proceso del código genético,
donde la indeterminación no es tanto la del azar de las moléculas
como la de la abolición pura y simple de la relación. En el proceso de
ordenamiento molecular, el cual «va» del núcleo ADN a la «sustancia»
que él informa, no hay ya puesta en camino de un efecto, de una
energía, de una determinación o de un mensaje. «Orden, señal,
impulsión, mensaje»: todo ello intenta volvernos la cosa inteligible,
pero por analogía, volviendo a transcribir en términos de inscripción,
de vector, de descodificación, una dimensión de la que nada sabemos
—puede que ni siquiera estemos ya ante una «dimensión», o quizá se
trate de la cuarta dimensión que, según la relatividad, se define por la
absorción de polos distintos del espacio y del tiempo. De hecho, todo
este proceso no podemos entenderlo más que en forma negativa:
nada separa un polo del otro, el inicial del terminal, se da una especie
de aplastamiento recíproco, de penetración de los dos polos
tradicionales el uno en el otro. Así pues, IMPLOSIÓN —absorción de la
manera radiante de la causalidad, del aspecto diferencial de la
determinación, con su electricidad positiva y negativa—, implosión del
sentido. Ahí es donde comienza la simulación. En cualquier dominio, ya
sea político, biológico, psicológico, donde la distinción de los dos polos
no pueda mantenerse, se penetra en la simulación, es decir, en la
manipulación absoluta.
No se trata de pasividad, sino de confusión entre lo activo y lo pasivo.
El ADN realiza esta reducción aleatoria del sentido a nivel de la
sustancia viviente. La psicología y la medicina se detienen ahí, frente a
una verdad de la enfermedad inencontrable en lo sucesivocribir en
términos de inscripción, de vector, de descodificación, una dimensión
de la que nada sabemos —puede que ni siquiera estemos ya ante una
«dimensión», o quizá se trate de la cuarta dimensión que, según la
relatividad, se define por la absorción de polos distintos del espacio y
del tiempo. De hecho, todo este proceso no podemos entenderlo más
que en forma negativa: nada separa un polo del otro, el inicial
del terminal, se da una especie de aplastamiento recíproco, de
penetración de los dos polos tradicionales el uno en el otro".
Los Wachowski debían de tenerlo bastantante fresco ya que para la
realizacion de la trilogía 'Matrix' se cuenta que era obligatorio leer este
ensayo y entendelo a cabalidad, de hecho parece haber sido creada
como una alegoría y estar atrapada en una falsa realidad, la ira que
proviene de tal existencia. "Cada mamífero en este planeta desarrolla
instintivamente un equilibrio natural con el ambiente que lo rodea,
pero los seres humanos no, con ustedes hay otro problema, ¿Sabe cuál
es? Ustedes son un virus, si, los humanos son un virus, son el cáncer
de este planeta. Ustedes son una plaga. Y nosotros la curación".
En 'Cultura y simulacro' se valía de la prosa de Borges para aterrizar
estos conceptos complejos, mientras que 'Matrix' inventó su propia
metáfora: bebés humanos sumergidos en líquido amniótico y
conectados, a través de cables más orgánicos que mecánicos, a una
gran fuente de energía que, a cambio, presenta para ellos un
simulacro sin aparentes fisuras. Sólo los más perspicaces, o los que
han sido "despertados" por un hombre con gafas de espejo redondas y
sin patillas, pueden darse cuenta de que el mundo en el que creen vivir
desde la infancia no es real, en el sentido más amplio del término, sino
una materialización de esa cuarta fase del simulacro que explicaba
Baudrillard, pero es de justicia reconocer que las ideas con las que
estamos jugando aquí también habían nutrido desde mediados de siglo
la prosa de Philip K. Dick y Frederik Pohl, por citar sólo a dos
tótems de la SF con ciertas dudas acerca de lo que veían sus ojos.
A Keanu Reeves sí le pareció interesante tener que leerse a
Baudrillard, así como ciertos textos seleccionados de Lacan y Dylan
Evans, antes siquiera de que los Wachowski le entregaran el guión,
pero Carrie-Ann Moss aparece en 'The Matrix Revisited', colosal disco
de extras incluído en casi todas las ediciones domésticas de la trilogía,
admitiendo que tuvo problemas con ello. Además, muchas de las ideas
de la película sobre cibernética y organización social parecen proceder
de otro libro, 'Out Of Control: The New Biology Of Machines, Social
Systems, And The Economic World', que Reeves también recuerda
haber tenido que leer.
La resistencia espera a un mesías, alguien que llegará para salvar a la
especie humana. Neo, el Elegido, sería como Jesús (hijo) y junto a
Morfeo (padre) y con Trinity (Espíritu Santo) parecen formar una
especie de Santísima Trinidad, como en la religión católica. Aunque es
el joven protagonista, sus acciones funcionan en conjunto con el resto
del trío, con lealtad indiscutible y una fe total los unos en los otros.
Seguidamente, uno de los miembros del equipo que parecía estar
muerto, consigue levantarse y disparar contra Cypher. Más adelante,
tal como Jesús, Neo muere, resucita y logra ascender a los cielos.
Aunque solo surja la confirmación, la película da varias pistas sobre el
carácter mesiánico del protagonista. Es curioso observar que, cuando
trabaja como hacker, Choi le agradece el trabajo, diciendo: "Eres mi
salvador. Mi Jesucristo". Cuando finalmente es llamado para que entre
a la cocina, donde el Oráculo está haciendo galletas, Neo confiesa que
no sabe si es o no el Elegido. Ella le responde señalando una placa que
está situada sobre la puerta, con la inscripción "Temet nosce", una cita
griega que significa "conócete a tí mismo".
Con todo, la historia comprobable del Oraculo de Delfos comienza en el
siglo XVI, cuando unos arqueólogos encontraron restos de un
santuario dedicado a la antigua diosa de la tierra Gaia. En el siglo X a.
C., Gaia fue sustituida por un nuevo y poderoso dios traído por los
Dorios: Apolo, el dios de la razón, la luz, la música y las profecías. Sin
embargo, la sustitución no fue sencilla ya que, Apolo tuvo que matar
una pitón que guardaba el santuario de Gaia. No obstante, en recuerdo
de la serpiente y de Gaia, Apolo eligió una mujer para ser su suma
sacerdotisa, Pitia, conocida también como Sibila. En La Eneida, libro
VI, para que Eneas pueda ir de ida y vuelta al Hades en aras de ver a
su difunto padre, tuvo que probar su “origen divino, a quienes Júpiter
hizo objeto de su amor”, como le advirtió Deiphobe, la Sibila de
Cumae. Para tal efecto, ella, poseída por Apolo, le indicó que uno de
los requerimientos que tenía que cumplir, además de sepultar a su
amigo que sibilinamente predice morirá [Miseno] y ofrecer ovejas
negras en sacrificio, era menester buscar en el oscuro bosque la rama
dorada de un árbol roble que solo puede encontrar con la ayuda de un
par de palomas, “las aves de su madre” Venus (Virgilio 224). La rama
dorada de quercus, –según se ha interpretado por Sir James Frazer—
al ser el árbol de Júpiter (Frazer 147), simboliza el antiguo linaje de los
reyes Silvios del Alba Longa, predecesores de los reyes de Roma, de
quienes Eneas fue su mítico ancestro y fundador.
Esta reflexión sobre la condición humana, el conocimiento y la
conciencia parece ser el mensaje principal de la película de las
hermanas Wachowski.
Los Wachowski escritores del libreto. Debían de tenerlo bastante
fresco. Porque la trilogía 'Matrix' fue creada, como una alegoría de una
falsa realidad y la ira que proviene de tal existencia. "Cada mamífero
en este planeta desarrolla instintivamente un equilibrio natural con el
ambiente que lo rodea, pero los seres humanos no, con ustedes hay
otro problema, ¿Sabe cuál es? Ustedes son un virus, si, los humanos
son un virus, son el cáncer de este planeta. Ustedes son una plaga. Y
nosotros la curación". 'Cultura y simulacro' se valía de la prosa de
Borges para aterrizar estos conceptos complejos, mientras que 'Matrix'
inventó su propia metáfora: bebés humanos sumergidos en líquido
amniótico y conectados, a través de cables más orgánicos que
mecánicos, a una gran fuente de energía que, a cambio, presenta para
ellos un simulacro sin aparentes fisuras. Sólo los más perspicaces, o los
que han sido "despertados" por un hombre con gafas de espejo
redondas y sin patillas, pueden darse cuenta de que el mundo en el
que creen vivir desde la infancia no es real, en el sentido más amplio
del lotérmino, sino una materialización de esa cuarta fase del simulacro
que explicaba Baudrillard, pero es de justicia reconocer que las ideas
con las que estamos jugando aquí también habían nutrido desde
mediados de siglo la prosa de Philip K. Dick en su famosa obra "Los
Robots Sueñan con Ovejas Electricas?" y Frederik Pohl, por citar sólo a
dos tótems de la SF con ciertas dudas acetrca de lo que veían sus ojos.
A Keanu Reeves sí le pareció interesante tener que leerse a
Baudrillard, así como ciertos textos seleccionados de Lacan y Dylan
Evans, antes siquiera de que los Wachowski le entregaran el guión,
pero Carrie-Ann Moss aparece en 'The Matrix Revisited', colosal disco
de extras incluído en casi todas las ediciones domésticas de la trilogía,
admitiendo que tuvo problemas con ello. Además, muchas de las ideas
de la película sobre cibernética y organización social parecen proceder
de otro libro, 'Out Of Control: The New Biology Of Machines, Social
Systems, And The Economic World', que Reeves también recuerda
haber tenido que leer.
La resistencia espera a un mesías, alguien que llegará para salvar a la
especie humana. Neo, el Elegido, sería como Jesús (hijo) y junto a
Morfeo (padre) y con Trinity (Espíritu Santo) parecen formar una
especie de Santísima Trinidad, como en la religión católica. Aunque es
el joven protagonista, sus acciones funcionan en conjunto con el resto
del trío, con lealtad indiscutible y una fe total los unos en los otros.

Seguidamente, uno de los miembros del equipo que parecía estar


muerto, consigue levantarse y disparar contra Cypher. Más adelante,
tal como Jesús, Neo muere, resucita y logra ascender a los cielos.
Aunque solo surja la confirmación, la película da varias pistas sobre el
carácter mesiánico del protagonista. Es curioso observar que, cuando
trabaja como hacker, Choi le agradece el trabajo, diciendo: "Eres mi
salvador. Mi Jesucristo". Cuando finalmente es llamado para que entre
a la cocina, donde el Oráculo está haciendo galletas, Neo confiesa que
no sabe si es o no el Elegido. Ella le responde señalando una placa que
está situada sobre la puerta, con la inscripción "Temet nosce", una cita
griega que significa "conócete a tí mismo".

Con todo, la historia comprobable del Oraculo de Delfos comienza en el


siglo XVI, cuando unos arqueólogos encontraron restos de un
santuario dedicado a la antigua diosa de la tierra Gaia. En el siglo X a.
C., Gaia fue sustituida por un nuevo y poderoso dios traído por los
Dorios: Apolo, el dios de la razón, la luz, la música y las profecías. Sin
embargo, la sustitución no fue sencilla ya que, Apolo tuvo que matar
una pitón que guardaba el santuario de Gaia. No obstante, en recuerdo
de la serpiente y de Gaia, Apolo eligió una mujer para ser su suma
sacerdotisa, Pitia, conocida también como Sibila. En La Eneida, libro
VI, para que Eneas pueda ir de ida y vuelta al Hades en aras de ver a
su difunto padre, tuvo que probar su “origen divino, a quienes Júpiter
hizo objeto de su amor”, como le advirtió Deiphobe, la Sibila de
Cumae. Para tal efecto, ella, poseída por Apolo, le indicó que uno de
los requerimientos que tenía que cumplir, además de sepultar a su
amigo que sibilinamente predice morirá [Miseno] y ofrecer ovejas
negras en sacrificio, era menester buscar en el oscuro bosque la rama
dorada de un árbol roble que solo puede encontrar con la ayuda de un
par de palomas, “las aves de su madre” Venus (Virgilio 224). La rama
dorada de quercus, –según se ha interpretado por Sir James Frazer—
al ser el árbol de Júpiter (Frazer 147), simboliza el antiguo linaje de los
reyes Silvios del Alba Longa, predecesores de los reyes de Roma, de
quienes Eneas fue su mítico ancestro y fundador.

Esta reflexión sobre la condición humana, el conocimiento y la


conciencia parece ser el mensaje principal de la película de las
hermanas Wachowski.

El mito de La Diosa Madre.

Para Jung, el arquetipo de la Madre nos permite detectar conductas e


imágenes, de la madre primordial o “madre tierra” de la mitología; de
Eva y María, la nación, de un bosque o del océano. Sin embargo, hay
dos aspectos del arquetipo maternal: El aspecto terrible del Dragón
Tiamat, o el dragón mítico de Nibelungo de Parsifal: “Aún sé más
cosas de él: dio muerte él solo a un dragón y se bañó en su sangre; su
piel se volvió tan dura como si fuera de cuerno. Ningún arma puede
herirlo, como se ha comprobado muchas veces”. “En la reconstrucción
realizada, el poema de la creación contiene en siete tablillas su tema
es la victoria del dios ordenador, Marduk, contra las fuerzas del caos,
encabezadas por Tiamat.

Derrota y Muerte de Tiamat.

El señor salió emprendió la marcha;


Hacia Tiamat, enfurecida, enderezó su rostro,
Entre sus labios mantenía un conjuro
Una hierba para destruir veneno llevaba apretada
en su mano.
Entonces a sus lados formaron círculos los dioses,
A su lado formaron círculos.
El señor Marduk se aproximó para escudriñar el
interior de Tiamat.

“El "Midrash": Viene del verbo darâs, que en hebreo bíblico significa
buscar, inquirir, investigar, estudiar; por consiguiente, el sustantivo
midrás designa el resultado de tal estudio o investigación”
De todas las figuras del Midrash, Lilith es la más claramente “Babalón”.
Y es en el Midrash rabínico probablemente basado en leyendas más
bien primitivas, que encontramos la amplia descripción de Lilith (Lilit,
Malkah ha-Shadim).
En aquel entonces los rabinos empezaron con referencias bíblicas la
primera creación del hombre como un ser “bisexual” –“masculino y
femenino”. De esta forma Él (Dios) lo creó (el primer humano) Génesis
1:1. Algo similar a lo propuesto por Aristóteles en el famoso banquete
de Platón, un ser dual más tarde dividido en dos y que después
permanecería para siempre en búsqueda de su otra mitad. Sin
embargo surge la cuestión de la posterior creación de Eva: si la mujer
fue creada a partir de Adán, ¿qué le pasó a la mujer creada antes de
Eva tras su creación?
De acuerdo con el Midrash, ella, Lilith,
creada con Adán se rehusó a atender sus
exigencias, a someterse a él y al fin huyó
de él usando el “Nombre Inefable”. Adán
se quejó a Dios de su soledad y se siguió
la creación de Eva y luego la “caída” y la
expulsión del Edén. Al acusar a Eva de lo
ocurrido se separó de ella y estuvo
durante algún tiempo con Lilith pero al fin
volvió a Eva. Durante este período Lilith
generó numerosos hijos que se
convirtieron en demonios y cuando se
reconciliaron Adán y Eva, Lilith se convirtió
en Reina de los Demonios.
En algunas versiones ella era la mujer de
Samael y en otras permaneció solitaria. Las fuentes rabínicas no
presentan a Lilith de manera favorable (aunque Adán no se salió tan
bien así).
Ella era vista como arquetipo de la mujer mala. Feministas modernas,
especialmente feministas judías, intentaron mostrar a Lilith como una
mujer ideal rechazando los intentos de un Adán dominador. Como la
“otra mitad” literalmente, Adán como un todo incluye Lilith. Adán-Lilith,
“andrógino hermafrodita es la unión en forma original de la
humanidad”.
La leyenda no dice si este ser humano dual fue unificado lado a lado o
por las espaldas. Si fue por las espaldas, Lilith se convirtió
automáticamente en la sombra de Adán. Con las dos mitades divididas,
en vez de tratarla como igual intentó dominarla y al perder Lilith, Adán
perdió también la mitad de su propio Self. Por causa de la historia
anterior, disimuladamente, mientras dormía Adán profundamente,
surge Eva, la “Madre de todos los vivientes”.

La serpiente (según algunos la


propia Lilith) hizo con que la
segunda Lilith, Eva, condujera a
Adán a alcanzar el
Conocimiento del bien y del mal
y de esa manera convertirse en un ser humano espiritualmente
consciente. Sólo en el siglo XX ha sido posible que Lilith (oscurecida
por la niebla de la demonología de miles de años) fuera revelada
contemporáneamente como la primera mujer en la tierra igual al
hombre y libre en espíritu. Hace poco que se extinguieron las hogueras
de las brujas haciendo que volviera Lilith como amplificación de los
mitos lunares ligados a las temáticas sexuales. Hablemos de la culebra,
el símbolo fálico por excelencia, este ofidio es representación del
poder sexual y así lo sugiere este pasaje bíblico y de la imagen mística
de la serpiente en el árbol del conocimiento, la kundalini subiendo
hasta alcanzar la iluminación final.
A partir de Freud y Jung su abordaje ha cambiado, ya no siendo
comprendida “como una divinidad exclusivamente arcaica sino
analizada como un arquetipo del alma dividida, llevada nuevamente al
más originario arquetipo de la “Gran Madre Ourobórica bivalente que
refleja la represión parcial de los instintos y la censura de las funciones
sexuales” El Ouroboros está integrado por la unión de dos serpientes
que simbolizan lo masculino y lo femenino dando forma a un
círculo que es tanto lo eterno como un sugestivo cero; la
serpiente o dragón superior es el espíritu universal que todo lo anima
pero todo lo mata y es capaz de asumir todas las formas de la
naturaleza. Todo y nada al mismo tiempo -cero y falo-. Al separarse, el
cero o infinito se rompe iniciándose la serie: aparecen dos, que luego
son tres y después cuatro… Sicuteri (1980), al escribir sobre Lilith-la
Luna Negra, resalta los estudios de Freud, Jung, Neumann y Hillman
después que Jones, Silbere y Abraham, unos de los pioneros del
psicoanálisis, abrieron paso para el análisis de los mitos.
El binomio Lilith-Eva es mencionado por los psicoanalistas “dentro del
tema consciente de conflictos instintivos indicando las vías para una
nueva conducción de las funciones reprimidas”, mientras que los
psicólogos profundos enfrentaron más extensamente, según Sicuteri,
“Toda la mitología lunar partiendo del análisis del arquetipo que, en la
separación se hace presente con dramática lucidez”. En los últimos
decenios Lilith afloró a la consciencia de una manera tan enfática que
penetró definitivamente en los hábitos de masa como “imagen
folclórica de recuperación del feminismo y síndrome de la
emancipación de la mujer”. Se han desbloqueado las censuras
culturales con respecto al mito de Lilith.
El gran escritor Borges (1996) nos habla de una Lilith que en la
imaginación popular ha asumido la forma de una mujer alta, silenciosa,
de negras y sueltas melenas: “Porque antes de Eva fue Lilith, se lee en un
texto hebreo. Su leyenda inspiró al poeta inglés Dante Gabriel Rossetti (1728-
1882) la composición de Eden Bower. Lilith era una serpiente; fue la primera
esposa de Adán y le dio glittering sons and radiant daughters (hijos
resplandecientes e hijas radiantes). Dios creó a Eva, después; Lilith, para vengarse
de la mujer humana de Adán, la instó a probar el fruto prohibido y a concebir a
Caín, hermano y asesino de Abel. Tal es la forma primitiva del mito, seguida por
Rossetti. A lo largo de la Edad Media, el influjo de la palabra layil, que en hebreo
vale por noche, fue transformándolo. Lilith dejó de ser una serpiente para ser un
espíritu nocturno. A veces es un ángel que rige la generación de los hombres;
otras es demonios que asaltan a los que duermen solos o a los que andan por los
caminos. En la imaginación popular suele asumir la forma de una alta mujer
silenciosa, de negro pelo suelto”. Layil (Noche) y en la Edad Media se
convirtió en un La Gran Madre, la vieja mujer del Oeste, la imagen
arquetipo de la Humanidad. “Espíritu nocturno”. Ora ángel, ora
demonios que asaltaban a los solitarios y/o andantes.
En la Kabbala (Judy Weinberg) Lilith es un “ser independiente” creado
con materiales iguales a los de Adán y en el Zohar se aborda el
tema de la bisexualidad de Adán y el origen de su nombre:
"Hagamos al hombre" logran esto: a los seres inferiores, derivados de un lado del
mundo superior, Dios les reveló el secreto de cómo formar el nombre divino
"Adán", en el cual se acompasan lo superior y lo inferior, en la fuerza de sus tres
letras: alef, dalet y mem. Una vez que las tres letras hubieron venido hasta el
mundo inferior, fue percibido en su forma, completo, el nombre de Adán para
comprender en un nombre al varón y a la hembra. La hembra estaba pegada al
costado del hombre y Dios le envió al hombre un sueño profundo y él se recostó
en el sitio del Templo. Dios entonces le cortó a la hembra y la atavió como a una
novia y la guio hasta él, como está escrito: "Y tomó uno de sus costados y llenó el
espacio con carne" [Gen: 2: 21]. En las Antiguas Escrituras, he visto que se dice,
que aquí la palabra "uno" significa "una mujer", es decir, la original Lilith que se
acostó con él y concibió de él. Pero hasta ese momento ella no fue ninguna ayuda
para él y está escrito: "Pero para Adán no se encontró una ayuda" [Gen. 2: 20].
La imagen de una Lilith “asesina de niños” no tiene fundamento en el
Talmud y parece recordar más bien al demonio babilónico Labartu o
Lamashtu.
Por el otro lado, María Lionza una diosa madre Venezolana, es una
prostituta sensual, una seductora que atrae a los hombres como la
Lorelei teutónica. Este último es un aspecto del mito amazónico básico
de Yara, Uyara o Wauyara, la mujer bella de los ríos y de la selva, la
deidad acuática que atrae a los hombres hasta su palacio subfluvial.
De la misma forma compleja, María Lionza es una diosa de los bosques
y praderas, "la doncella de los animales" y de la naturaleza salvaje que
es al mismo tiempo una diosa de la fertilidad, patrona de la vegetación
que otorga la fertilidad a los campos y a los humanos. Sobre su
desarrollo mitológico cabe recordar que María Lionza era una india
caquetío de ojos claros que según la leyenda debía pertenecer a las
serpientes y espíritus acuáticos
“De los numerosos idolillos (ver, Las Venus Paleolíticas) recogidos en
las sepulturas, se ha podido deducir el culto común en todas las
regiones mediterráneas a una diosa madre que simboliza la
fecundidad, “La Venus de Willendorf, esculpida en piedra calcárea
apenas tiene 110 mm de alto, se trata de una mujer totalmente
desnuda, de proporciones macizas, con pecho muy voluminoso y
descansando sobre su vientre que es prominente; caderas muy
amplias y salientes; partes genitales detallas cuidadosamente, lo cual
contrasta con el resto de los caracteres que apenas están esbozados;
la cabeza cubierta con una especie de cofia, los rasgos de la cara no se
indican; brazos doblados sobre el pecho, muslos y piernas cortos y
adiposos, sin pies” (Cf. Juan Comas. 1962).
“No hay duda actualmente sobre el significado de estas muestras de
arte primitivo; eran fetiches, imagines que el hombre atribuía poderes
mágicos, pensando con la representación objetiva y exagerando los
aspectos sexuales y genéticos se adquiría poderes sobre la fertilidad”
(Cf. El Desnudo al Óleo; ed. Parranón).

Y la otra: La naturaleza, la simpática, el aspecto inmortal (la Bella


Virgen y Madre del Héroe Solar, Son numerosos los que han
pretendido derivar de la constelación de Virgo, que asciende al Este el
24 de diciembre en el punto más bajo en el solsticio de invierno, el
nacimiento del Héroe Solar). Sería entonces confundir causa y efecto.
Tiene su arquetipo eterno manifestado en La Doncella del Este. La
Artemisa de Creta, Cibeles, La Triple Madre Celta, Epona, Isis, y
Artemisa de Éfeso. O en América a Tonantzin, Cuautlicue o varias más.
Para Karl Kerenyi, Carl Gustav Jung, Erich Neumann o el mismo Joseph
Campbell, lo femenino en su carácter de Gran Madre es "Virgen", un
principio creador independiente del hombre personalizado, el poder y
la riqueza de lo femenino aparte, más allá, del "principio masculino".
“Esas Vírgenes-Madres no son siempre lo que ha explicado el psico-
análisis moderno, como está muy bien demostrado por Erich Neumann
en su obra Ursprungsgeschichte des Bewusstseins (Origen de la
historia de la Consciencia).
En todas partes del mundo antiguo, Virginidad significa sencillamente
no pertenecer a un hombre personalmente.
La VIRGINIDAD es sagrada en esencia, no por su estado de
inviolabilidad física sino porque es un estado psíquico abierto a Dios.
(El término común de virgen era aplicado también a la doncella, así
Plantón, Pitágoras, Alejandro el Grande, etc., nacieron de una Virgen).
El nombre de virgen ha sido siempre aplicado a la mujer no casada;
tenemos pues que entenderlo en nuestro lenguaje actual como célibe.
La designación de esta constelación con el término de Virgen es
únicamente una proyección en el cielo de la Virgen Arquetipo.

CONCEPCIÓN VIRGINAL
Y para cubrir con el prestigio de lo sagrado, tal exigencia de pureza,
los mitólogos cristianos recurrieron al mito de la Inmaculada
Concepción de María y de la Virgen María, considerada mujer casta
que renunció al contacto con su esposo, y a pesar de no conocer varón
concibió virginalmente a su hijo Jesús (Luc. 1, 34).
La iglesia celebra la fiesta de la "Inmaculada Concepción" / de la
"Purísima" / de la "Concepción de la Virgen", Madre de Dios, el 8 de
diciembre, en la que se conmemora, que Ana en su "Concepción
Inmaculada", quedó embarazada virginalmente de María. Aunque las
explicaciones de los mitólogos cristianos no aciertan a compaginar si la
"Inmaculada Concepción" conmemora el hecho de que la Virgen María
fue concebida virginalmente por su madre Ana o fue concebida "sin
pecado original". Y celebra como fecha de la "Natividad de María" el 8
de septiembre, nueve meses después de ser concebida.
Además la iglesia celebra la "Concepción virginal de Jesús" el 25 de
marzo, y celebra como fecha de la "Natividad de Jesús", cuando María
lo da a luz virginalmente, el 25 de diciembre (nueve meses después).
En ambos casos se insiste en la idea de la concepción sin presencia
de varón y la iglesia interpreta sin contacto carnal. Pero existe un error
en considerar, que en época arcaica, el ser madre virgen significara:
sin contacto sexual, sin relación sexual.
En época arcaica existía una creencia en muchas regiones del
universo hasta época histórica, que creía que las mujeres tenían hijos
siendo "parthenii" / "vírgenes", es decir, que se desligaba la sexualidad
de la reproducción, que se creía asexuada, suponían que la madre sola
creaba al bebé; de ahí su gran importancia y no se creía que el varón
las fecundase. Creencia que parece absurda, pero que pervivía hasta
hace poco en muchísimos pueblos primitivos, antes del contacto con la
civilización occidental (más adelante aportaremos citas que lo
atestiguan). De ahí que se afirmara que tenían hijos de forma virginal,
a pesar de tener relaciones sexuales.
Y este hecho era reflejado en mitos históricos en todos el universo
que hablaban de DIOSAS VÍRGENES, Diosas Madres que tenían
descendientes sin conocer varón, de forma milagrosa, sin que el
Principio masculino estuviese presente, de manera virginal (Virgo). [En
cada momento histórico, la humanidad proyectaba en el panteón sus
creencias y la estructura de su sociedad. A este respecto expone
Güichol y Sierra en (1989, 48): "Y como, desde los primitivos mitos, los
hombres crearon á (sic) sus dioses á imagen suya,..."... "es claro que,
en las primeras sociedades humanas, el estado social y las
ocupaciones tribales dieron carácter á las concepciones
religiosas,..."..."Así, respecto de la organización social, según expone
Braga, donde prepondera el régimen de la maternidad, el dios es un
fetiche femenino, la Tierra-Madre, que saca de sí los dioses y las
cosas; donde prepondera el régimen de la paternidad, el dios es
masculino,..."].
Y si en estas mitologías se creía que la Diosa tenía hijos "sin
necesidad de varón", era porque (se creía) se Autofecundaba: era
hermafrodita: la Diosa era Padre y Madre, tenía tal grado de
Autonomía que se Auto concebía, se Procreaba, se Engendraba a sí
misma, se Reproducía (asexualmente). Que implica la creencia en la
preeminencia del Principio femenino y la falta de importancia y
consideración del masculino.
Y además, estas Diosas de los panteones politeístas que eran
consideradas Madres Vírgenes, tenían relaciones sexuales promiscuas,
eran infieles a sus esposos Divinos y tenían innumerables amantes,
símbolo de la total libertad sexual femenina propia de la sociedad
matriarcal, y se entregaban asimismo a los mortales.
De hecho, fue en Efeso, luego del incendio de su templo por los godos
e introducido el cristianismo, donde ese culto temeroso que se le daba
a Diana, fue rápidamente suplantado por el que se brindó a María,
como madre de Dios en lo que se creía la casa donde había habitado.
Ya no la virgen estéril dispensadora de muertes repentinas, sino la
dadora de vida. Así la llamaron crudamente los efesios a María: 'la que
pare a Dios': 'Deípara', en latín o 'zeotókos', en griego. Literalmente,
pues, 'la paridora de Dios' o, más finamente dicho: la madre de Dios.
Es desde la humilde morada de la Virgen en Efeso que este título de la
Virgen, 'teotokos', se extendió rápidamente a todo el mundo
grecorromano.
No es extraño pues que, cuando Nestorio, un monje medio racionalista
elevado al patriarcado de Constantinopla, por entonces capital del
imperio romano de Oriente, teólogo sutil que había sido preparado en
las prestigiosa facultad de Teología de Antioquía, pretendió, allá por el
año 430, corregir este título afirmando que era equívoco hablar de una
madre de Dios y que era mejor llamar a María, en vez de zeotókos,
cristotocos, es decir, madre de Cristo, el mismo pueblo fue el que
protestó tumultuosamente.
En verdad, aunque el pueblo que protestaba no lo sabía, las
afirmaciones de Nestorio vulneraban no solo un título mariano sino la
doctrina sobre Cristo.

“Todavía existían en la Iglesia grandes vacilaciones para expresar el


cómo de la encarnación. Algunos hablaban de una especie de
disolución de lo humano en lo divino, como Apolinar; otros de una
unidad substancial lograda por la mezcla de la naturaleza de Dios con
la del hombre. Ambas afirmaciones disparatadas, porque en un caso si
lo humano se disolvía en lo divino Jesús dejaba de ser verdaderamente
hombre y en el otro, si se mezclaba lo divino con lo humano, amén de
lo absurdo que es pensar que ello fuera posible, introduciría en Dios un
cambio, una mutación incompatible con su perfección y eternidad.
Nestorio por eso hablaba solo de una conjunción, o de una habitación
de lo divino en lo humano, u, otras veces, de una superposición, a la
manera de un vestido que se ciñera fuertemente al cuerpo. Claro, esto
destruía la unidad de Cristo, acababa con la intuición de los autores del
nuevo testamento, que estaban convencidos de que señalando a
Jesús, también se estaba señalando a Dios. Así se anulaba la realidad
de la encarnación y, en consecuencia, se hacía imposible para el
hombre alcanzar lo divino.
Pero, si la encarnación no era lo que afirmaba Nestorio, ni tampoco
una mezcla, ni una especie de unificación substancial de lo divino y
humano a la manera como el alma se une con el cuerpo, ¿como
afirmar la unidad de Cristo al mismo tiempo que la distinción de sus
naturalezas humana y divina? Siguiendo a San Cirilo de Alejandría,
gran adversario de Nestorio, Efeso la llamará unidad realizada 'de
modo inefable e incomprensible' y sostendrá -puliendo su vocabulario-
que esta unión se hace no en la substancia o en la naturaleza, sino en
la hipóstasis, es decir en el fundamento metafísico de la persona, de
tal manera que permaneciendo la diferencia substancial de sus
naturalezas humana y divina, "ese encuentro -dice Éfeso- nos ofrece
un solo Señor, un solo Cristo, un solo Hijo.
"Es así", termina Cirilo en palabras que aprueba el concilio de Efeso,
"que no dudaron los santos padres (de la Iglesia) en llamar madre de
Dios -zeotókos- a la santa Virgen, no porque la naturaleza del Verbo o
su divinidad tomaran de la santa Virgen el principio de su ser, sino
porque de ella se formó aquel sagrado cuerpo animado de un alma
racional, al que se unió hipostáticamente el Logos que se dice
engendrado según la carne."

El Edén.
Tal parece que seguimos con el estigma de las palabras que dijo Dios a
Adán.- Del fruto de ese árbol no comerás-, pero a diferencia del valor
de Eva, tal parece que nosotros no queremos comer del árbol del
conocimiento y no podemos sepultar nuestros temores y estamos
condenados a vivir con todos nuestros miedos e ignorancia.
De la tradición Judía nos viene el mito del jardín del edén, donde por
principio de cuentas existe dos versiones dadas en la Biblia, Génesis 1
y Génesis 2, razón por lo que los teólogos han discutido tratando de
entender por qué se contradicen en varios aspectos, pero lo que
parece que han olvidado es precisamente la dualidad, porque si vemos
que mientras en el Génesis 1, nos dice que “Entonces dijo Dios:
Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza;
y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las
bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la
tierra.
Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y
hembra los creó”. Vemos que Dios creo al hombre y la mujer al mismo
tiempo y sin embargo en el Génesis 2 nos dice: “Y Jehová Dios hizo
caer un sueño profundo sobre Adán, y este se quedó dormido.
Entonces tomó una de sus costillas y cerró la carne en su lugar; y de la
costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer y la trajo al
hombre. Y dijo Adán: Esta es ahora hueso de mis huesos y carne de mi
carne; esta será llamada Varona” Estas dos versiones han dado origen
a muchos mitos como el de Lilith, como ya lo hemos venido analizando
más arriba. Y se cuenta en el Génesis, que en el Edén todo era dado y
que el Varón y la Varona no pensaban y lo único que tenían que hacer
era estirar la mano para tomar el fruto del árbol que quisieran comer y
solamente de pensarlo da flojera, todo el día y todos los días de
mundo eran iguales, tal vez con una sonrisa estúpida permanente en
la cara, porque sin conocimiento, ahora podemos pensar
(afortunadamente) la mente seria como la de un idiota, un loco o un
retrasado mental. Queramos o no, muestro cerebro trabaja noche y día
permitiéndonos pensar, y es ahí donde reside la verdadera libertad, El
uso de la razón, la inteligencia, la ciencia y hasta la intuición, nos
harán libres, no solo es proclamar la libertad para alcanzarla, hay que
luchar por ella todos los días, porque por definición libertad significa:
“facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera u otra o
no obrar, por lo que es responsable de sus actos”. Por eso es facultad
individual de cada uno de nosotros, alcanzarla. La lucha por la libertad
es inherente al hombre.
En la antigüedad existió la esclavitud, es más todavía en el siglo
antepasado existía en forma oficial y hoy no somos libres de elegir,
castigar o quitar a los que nos gobiernan administrativamente o
económicamente, para eso todavía habrá de esperar muchísimo
tiempo. Hay otras formas de libertad, como la espiritual y la
intelectual, esta para unos es todavía más difícil de conseguir, puesto
que es subjetiva y existen discrepancias ya que unos se sienten
perfectamente bien con la iglesia a la que pertenecen o con lo que los
alimenta espiritualmente otros se sienten controlados, manipulados,
maniatados y luchan por esta causa, se podría decir contra corriente,
son torturados, reprimidos y hasta muertos por esta causa. De ahí
nacen los mártires, Freud decía “No podemos conocer la vida privada
de los héroes y artistas para saber su salud mental” (Cf. Introducción
al psicoanálisis). Debe de haber luchadores por la libertad que sean
sanos mentales, pero ciertamente serán la minoría, las conquistas
sociales se dan por los intereses de la mayoría y no por sacrificios
inútiles, como se nos lo ha hecho creer, por eso la libertad es un mito
y es nuestro deber desmitificarla. Por contra, San Agustín define la
libertad como la "capacidad de elegir el bien", y pone un ejemplo para
demostrarlo: En el Cielo seremos plenamente libres y, sin embargo, allí
no podremos hacer el mal.

La libertad, así entendida, podríamos definirla como "capacidad de


elección propia". Porque nadie más que nosotros es dueño de nuestra
mente, nadie nos obliga a pensar en determinada cosa (aunque a
veces parezca que sí) pero no es lo mismo pensar en la comedia, el
fútbol o el sexo que en la fusión nuclear, en la teoría de las cuerdas o
un concierto, claro que no debemos de cargarnos a un solo lado, pero
tampoco debemos de practicar la pereza mental, porque seguramente
que la gente que tiene el poder económico o cultural no está en mala
condición mental y sus mentes son fuertes, podría decirse que son
atletas mentales.
Y qué decir de los países llamados del primer mundo, donde tienen
acaparada la tecnología y la ciencia para su beneficio, “pero esa es
otra historia” ya que de lo que estamos hablando es de “el mito del
edén”
Como ya hemos dicho arriba, la historia de la creación del hombre no
solo es propiedad de los hebreos, tampoco la del castigo, en la
mitología griega el creador del hombre es Prometeo y al querer que
este tuviera un gran poder le entrega el fuego, robándolo a los dioses.
Recibiendo tremendo castigo de Zeus, este lo ató a una columna con
cadenas he hizo que un buitre le comiera las entrañas por el día y
estas le crecían de noche, por toda la eternidad, hasta que Hércules lo
salvó. Lo dice Nietzsche “el mito parece murmurar en nuestro oído que
la sabiduría..., es una abominación contra la naturaleza” (Cf. Historia
de la tragedia Federico Nietzsche)
“porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de dios es
abominación” (Juan 7,32)
Según nos refiere Octavio Paz, Lucifer (Isaías 14,12) significa “el
portador da la luz”, y tal vez por eso en el mito del Edén, es el que
enseño al hombre, mejor dicho a la mujer, que podíamos razonar.

Bien pero después de haber dado un periplo por el Uno y la separación


al dos podemos pasar al tres o sea al hijo y más adelante al viaje del
Héroe

JESÚS
En los tiempos de la dominación romana sobre el pueblo de Israel,
existían una enorme cantidad de seudo-profetas, que se auto
nombraban Mesías. Por eso no es de extrañar que surgiera uno nuevo
con el nombre de “Jesús”, con la diferencia, podemos afirmar, que
detrás de él, había un gran grupo de personas; empezando por 12
“apóstoles” (Cf. Lucas 9-10), pero que en realidad debe de haber sido
un grupo bastante numeroso, preparado y documentado en teología, y
en mitología antigua, con el firme propósito de reformar la religión de
Israel o ¿tal vez fundar una nueva religión?, ¡no creo que este allá sido
el caso!, ya que solo se desviaban de algunos preceptos de la antigua
religión hebrea. Como el guardar el sábado y la individualización de los
ritos.
Pero con esto vasto para que los lideres israelitas buscaran la muerte
de Jesús.
Y para poderle convencer a los romanos, que esto sucediera. Fue
necesario acusarlo de conspiración, y denunciar que se proclamaba
rey, e hijo de dios.
Recordemos que entre los romanos “con lo que esto significa”: el tema
de dios era como “dice” Virgilio el poeta latino: “El pensamiento
Romano y deslumbrado de su grandeza, donde el Cesar era Dios, bajo
la inscripción de “Cesar Dios Verdadero”
Este “dicho” que se encontraba impreso en los denarios y guiaba sus
vidas, “su ciudad era eterna y ellos los dueños del mundo”.
Paradójicamente los impulsores finales, para la universalidad de la
religión cristiana fueron precisamente los romanos y no los judíos, que
hasta la fecha no reconocen a Jesús como el Mesías.
Y ¡Nos podemos preguntar por qué no lo hacen!, son varios puntos,
pero entre los más significativos están: La de no haber cumplido los
“requisitos” para ser considerado como el Mesías; la de no haber
liberado al pueblo hebreo, etc.
Ahora demos un rápido recorrido a las enseñanzas de Jesús.
Los principios básicos del cristianismo son cuatro: el amor, el perdón,
la fe y muy alejada de la vida diaria, el sacrificio.
Prácticamente seria paralizante llevar a cabo el sacrificio, porque se
nos dice: quien quiera la gloria deberá de renunciar todo, y seguir a
cristo, deberá de dejar a su familia y a todo lo “mundano”. ¿Pero, que
no. esto implicaría la parálisis de toda actividad humana, comercial y
tecnológica?

Según san Pablo, la “misión” de Jesús se refiere a la reconquista del


Edén y el perdón del pecado original por su Redención. La buena
nueva es el perdón de los pecados y sobre todo del pecado original; el
que cometió Adán y Eva, y que gracias al sacrificio de Jesús en la cruz,
por su martirio, muerte y resurrección, así como con la institución del
bautismo, se nace de nuevo y se limpia el pecado original. La
interpretación popular del bautismo que lava el "pecado original", lo
que enfatiza la idea de purificación.
Pero aquí hablamos otra vez del pecado original que fue la
desobediencia y más que eso, fue el querer ser como Dios el comer del
árbol del conocimiento.

El rito bautismal fue instituido por Jesús, y puede entenderse


claramente de sus palabras a Nicodemo.
En Juan 3,3 Jesús dice a Nicodemo:
“-En verdad, en verdad te digo que el que no nace de nuevo no podrá
ver el reino de Dios. Dijo Nicodemo – ¿Cómo puede un hombre nacer,
siendo viejo? ¿Puede acaso volver al seno de su madre y nacer de
nuevo?.
Jesús respondió -En verdad, en verdad, te digo que el que no nace de
agua y de Espíritu no puede entrar en el reino de Dios. Lo nacido de la
carne, carne es, y lo nacido del Espíritu, Espíritu. No te extrañes que te
diga: Os es necesario nacer de nuevo. El viento sopla donde quiere y
se oye su ruido, pero no se sabe de dónde viene y a dónde va; así es
todo el que nace del Espíritu.
¿Qué, es lo que esto quiere decir? Aquí Jesús nos enseña el bautismo,
y la fuerza del espíritu santo, ¿pero, donde podemos encontrarlo y qué
es este espíritu?, les dice Jesús a los apóstoles, “el espíritu de verdad,
el cual el mundo no puede recibir, porque no lo ve, ni lo conoce, pero
vosotros lo conoceréis porque mora en vosotros y está en vosotros...
os conviene que yo me vaya; porque si no me fuese, el espíritu no
vendría a vosotros, más si me fuere, os lo enviaré... y habiendo dicho
esto sopló, y les dijo: recibid el Espíritu santo... porque muchos son los
llamados, más pocos escogidos”. Por eso, parece ser que el espíritu
santo solo es dado directamente a los apóstoles, más Jesús dijo,
“quien crea en mí, tiene la vida eterna”, “la gloria está dentro de
vosotros” (Cf. Lucas 12) para encontrarlo no debemos de buscarlo
fuera, sino dentro de nosotros, hallando a Jesús, “yo estaré en ellos,
como ellos en mi”, así las enseñanzas de Jesús nos muestran el camino
y toda su vida debe de tomarse como una enseñanza “Yo soy el
camino y la verdad, nadie llega al padre si no es por mí”.
“Así que dentro las enseñanzas de Jesús, podemos ver misticismos
antiguos, como el renacimiento, por medio del agua. Esta verdad
simbólica que aparentemente ha perdido su efectividad al enfrentarse
con la ciencia, es re-creada en el sacramento, pues cada vez que un
niño es sometido al rito del bautismo, para los cristianos se está
llevando a cabo realmente un acto de purificación. La interpretación
popular es la del bautismo que lava el "pecado original", lo que
enfatiza la idea de purificación, pero esta solo es una interpretación
secundaria, pues la verdaderamente importante es el símbolo del
renacimiento”. (Cf. Joseph Campbell, El Héroe de las mil caras, pag,
227-229)

El evangelio de San Marcos aplica al sacrificio de Cristo todos los


modos
de acción (8:31, 8:35). Aquí ya no tenemos al clásico héroe
mitológico, vengativo, dotado de una fuerza descomunal y apoyado
por los dioses a hacer la guerra. Se describe a Jesucristo como una
persona dotada de virtudes distintas, cargado de benevolencia y
dispuesto a componer la maldad del mundo inspiradas por la piedad al
prójimo y el perdón al ser humano. Y con su muerte en la cruz, la
redención de todos los hombres. (San Pablo)

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