LIZET VILLAVICENCIO ( CARTILLA DIGITAL)

INTRODUCCIÓN
El siglo XXI es considerado por muchos como la era de información y la comunicación,
pues la historia de la humanidad ha dado un gran salto en cuanto al uso de la tecnología y
las múltiples plataformas virtuales que tiene a su disposición para poder interactuar,
comunicarse, e incluso generar información y conocimiento.
Además de todos los beneficios que nos ofrece la tecnología, existen riesgos para todo
aquel que se ha convertido en navegante del nuevo mundo, conocido como el cibernauta.
Se debe reconocer la vulneración de los derechos fundamentales en las publicaciones de
contenidos que son difundidos a través de Internet, como la principal limitante en el
ejercicio de los derechos digitales que concluye dada al alto riesgo de vulneración de
derechos, en necesidad de regular los contenidos en el ciberespacio.
DESARROLLO
Definiciones generales:
SEXTING
El término “sexting” originalmente hace referencia a la combinación de sexo (sex) y
enviar textos por teléfono móvil (texting), sin embargo con el avance de la tecnología ya no
es posible delimitarlo al uso de teléfonos móviles sino que se ha permeado en
aquellos mensajes con imágenes como fotografías o videos sexualmente sugestivas
enviados a través de algún espacio virtual (Lounsbury, Mitchell y Finkelhor, 2011;
Marrufo, 2012; Menjívar, 2010; Wolak y Finkelhor, 2011).
El fenómeno del sexting llamó la atención de los investigadores recientemente a partir
de un caso en el que la exposición pública de la joven Jesse Logan de 18 años de edad,
llegó a ser causa de su suicidio en Cincinnati, Estados Unidos, durante el año 2008, después
de sufrir cyberbullying por parte de sus compañeros y acoso de desconocidos (Marrufo,
2012).
La práctica del sexting entre adolescentes se ha vuelto común a pesar de que ellos mismos
conocen los diversos riesgos y peligros de compartir imágenes de sí
mismos en redes sociales en las que no existe una verdadera privacidad, sin embargo
consideran que se encuentran inmunes a dichas consecuencias. Pues el envío de imágenes
sexualmente sugestivas tanto de desnudos como de semidesnudos se ha vuelto una práctica
considerada entre los adolescentes como común a su edad, que otorga una amplia
popularidad por la apreciación de la sensualidad por lo que es importante durante su etapa
de crecimiento y que no genera grandes problemas (Almansa et al., 2013).
  Derechos digitales reconocidos en Ecuador acorde a la problemática asignada.
En el Ecuador al regir la Constitución como la norma principal y al estar en concordancia
con los DDHH, tendrá la obligación de velar por los derechos de sus ciudadanos
especialmente los más vulnerables afirma (Vásquez, 2020):
Al encontrarnos en un Estado Constitucional de Derechos y Justicia, se debe garantizar los
derechos, sobre todo a los más débiles y desprotegidos; incluso se debe resaltar que el
Ecuador tiene una obligación internacional frente a los Instrumentos Internacionales que ha
ratificado, por esta razón se ha adoptado una serie de medidas legislativas, judiciales y
administrativas que están enfocadas en este caso a la protección de los menores y también
del resto de ciudadanos.
El sexting aún no está sancionado como tal en el COIP pero esto no significa que no
suceda, al contrario pasa con frecuencia pero pocas veces es denunciado por
desconocimiento ya que este tipo penal no está tipificado en sí pero es sancionado de
manera ambigua ya sea como delito de violación a la intimidad o pornografía infantil.
Integridad Sexual:
Sabiendo que la integridad personal se refiere a vivir en plenitud sin sufrir ningún daño, la
integridad sexual viene a ser a estar bien en este ámbito sin presiones, agresiones y acoso
ya que es un derecho como ser humano. “La Integridad significa actuar correctamente,
conforme a principios y vivir de acuerdo a los valores universales” (Durán, 2017).
Violencia de Género en el entorno Digital
La violencia sexual digital es una de las formas en la que se puede desarrollar la violencia
de género, para ello es importante conocer este concepto. Según las (Naciones Unidas,
1979):
Todo acto de violencia de género que implique, o pueda tener
como consecuencia un daño físico, sexual o psicológico para la
mujer, incluso las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad,
tanto si se originan en la vida pública como en la privada.
En ecuador también existen las leyes que protegen, previenen y
sancionan este tipo de violencia como:
La Constitución de la República (2008), Ley contra la violencia a la mujer y a la familia
(1995), (COIP 2014), Plan Nacional para la
erradicación de la violencia de género hacia la niñez, adolescencia y mujeres (2015) y Ley
Orgánica Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (2018) todas
estas dadas con un mismo fin defender los derechos humanos de quienes por años han sido
violentadas.
Estos delitos están clasificados a partir del artículo 164 al 175 del Coip, pero a medida que
la sociedad ha ido acercándose más al uso de las nuevas tecnologías también es necesario
creas nuevas normativas que la regulen, tipifiquen y sancionen la práctica inadecuada de la
misma, las victimas principalmente son los
más vulnerables de la sociedad como niñas, niños, adolescentes y mujeres.
En las reformas que se hicieron al COIP en el 2020 y fueron publicadas en el registro
oficial el 24 de Diciembre del mismo año en la sección de delitos contra la integridad
personal se agregó el art 154. 1 sobre la instigación al suicido ya sea esta verbal, física,
digital o electrónica la cual es un avance haciendo referencia a estas dos últimas formas ya
que se está dando paso a entender que si existe violencia a través de los medios electrónicos
y digitales en Ecuador.
Problemática:
La práctica de sexting conlleva una serie de riesgos variados, y la infravaloración de dichos
riesgos hace de los adolescentes unos sujetos vulnerables (Pérez, 2010).
El Sexting supone la pérdida de privacidad, ya que los contenidos de temática sexual que
una persona genera y envía a otra y otras, pueden acabar en manos no deseadas, perdiendo
el control sobre su difusión. Uno de los problemas principales que conlleva el sexting,
además de la degradación personal y la pérdida de privacidad, es la aparición de ciertos
comportamientos delictivos como el grooming, el ciberbullying y la sextorsión.
Pérez (2010) define el como “el conjunto de estrategias desplegadas por un adulto para
ganar la confianza de un menor en Internet con el fin último de obtener concesiones
sexuales”. Según un estudio publicado en la revista Pediatrics el motivo más común para
practicar el sexting entre adolescentes es una relación sentimental. También lo son las
bromas y la voluntad de seducir. Una cifra importante de los menores que salían
haciendo sexting (31%) lo habían hecho en relación al consumo de alcohol o drogas.
Un 3% reconocía haberlo hecho debido a amenazas o chantaje.
Es importante señalar que el tipo de contenido que comparten las personas practicantes del
sexting generalmente corresponderá con una descripción textual o fonética de la actividad
sexual. Se incluye, también, el intercambio recíproco o unilateral de fotografías, vídeos de
desnudos o representaciones de sí mismo en posturas explícitas, sugerentes o sexualmente
provocativas. El resultado de esta práctica puede generar serios problemas que van desde la
pérdida de la privacidad y la merma de la imagen y el propio honor hasta la victimización
en el marco de una espiral de ciberbullying.
Amás de verse como un riesgo toda persona adulta puede realizar esta práctica pero se debe
tener siempre en cuenta, con quien se acuerda debe ser de total confianza y conocido, tratar
de que no se haga con extraños y más que se hayan contactado por Internet.
Entre las características del sexting están las siguientes:
Uso de medios tecnológicos: Ésta en si este es el instrumento
principal para que se de esta clase de prácticas que se desarrollará en las distintas apps de
uso común en la actualidad por ejemplo las de mensajería instantánea como WhatsApp y
las redes sociales como Facebook, Instagram y Twitter.
Carácter sexual y/ o erótico de los contenidos: El carácter sexual
hace referencia a las conductas y comportamientos sexuales
explícitos mientras que el erotismo insinúa llevar a cabo un acto de tipo sexual.
Origen: el origen del contenido y producción sexual puede ser
propia o ajena es decir que puede ser protagonizado por la persona que realiza el sexting o
no.
Identificabilidad: esta característica involucra directamente al o la
protagonista de la foto, video o texto erótico.
Edad: la edad es un factor determinante en esta práctica ya que
estudios realizados los más vulnerables son los adolescentes.
Consentimiento: Aunque en el sexting puede haber la voluntariedad de la víctima al enviar
contenido erótico/sexual a
otro, muchas veces no llega a ser así ya que hay algún tipo de
presión o chantaje del otro individuo para obtener este contenido.
Naturaleza Privada: Supone que el contenido y producción como
fotos, videos y textos que están involucrados en el sexting son de
carácter privado es decir quien los envía confía en el receptor.
Influencias y Presiones Sociales: Aquí tiene directamente que ver
las presiones sociales y cánones estéticos. Normalmente el
hombre es el sujeto activo en esta práctica, ya que ejerce cierto
tipo de presión sobre la persona que quiere que le envíe el
contenido de carácter sexual, siendo la mujer el sujeto pasivo o víctima.
CAUSAS
Las influencias y modelos sociales son claves para que se caigan en estas actividades.
La exploración de la sexualidad, la diversión y excitación
El vacío de atención y supervisión, y la falta de presiones normativas y sanciones legales
La exhibición de relaciones sexuales o desnudos por personas no profesionales, comunes,
abundan en la Red.
El “desnudeo” es algo común, hasta cierto punto normalizado.
Desconocen las consecuencias que para su vida puede llegar a tener el hecho de que esa
imagen comprometida sea de dominio público.
La natural falta de percepción del riesgo que acompaña a la adolescencia y el espíritu
transgresor desencadenan ciertos desafíos. En algunos casos resulta simplemente divertido,
en otros, sirve para coquetear o dar otro contenido a una relación.
EFECTOS
Al ser el sexting una actividad personalísima de cada individuo, según la cual dentro de su
autonomía de voluntad y sentidos define el tipo y forma en que se desenvolverá su vida
privada, naturalmente el grado de afectación a este derecho
provendrá, de manera mayoritaria, de las relaciones sostenidas con otros particulares, ya
sea con la persona con la que está sosteniendo sexting o con un tercero ajeno a esta
relación.
Existirá afectación al derecho a la vida privada en la práctica del sexting cuando cualquiera
de los intervinientes, o un tercero, realiza acciones de coacción, amenazas, violencia o
chantaje, con la finalidad de privar del libre consentimiento a una persona para sostener
sexting, anulando, consecuentemente, el control de la libertad de decisión del ser humano
para determinar la persona con la cual sostendrá relaciones íntimas de carácter no coital.
Existirá vulneración al derecho a la vida privada cuando cualesquiera de los sujetos
intervinientes en su actividad de sexting, o un tercero ajeno a esta acción, revela, reproduce
o difunde, a título oneroso o gratuito, los mensajes, fotografías,
audios o vídeos de naturaleza sexual creados y compartidos por alguno de los individuos
intervinientes.
La principal afectada de estos actos de difusión, reproducción, grabación y revelación del
contenido o conversaciones íntimas hacia el público ha resultado ser la mujer, debido a que
el entorno social y cultural actual es aún muy sexista.

El contenido puede salir del equipo donde fue tomada o del canal de conversación en donde
fue enviada, ya sea por pérdida del dispositivo, acceso de terceros al mismo (cracking), por
envío intencionado por alguna de las partes o por hackeo de los contenidos a través de la
red.

Los contenidos que uno mismo ha generado pueden acabar en manos de otras personas
desde el momento en que salen de manos de su autor. Una vez que se envía algo, se pierde
el control sobre su difusión.

La exposición de contenidos de carácter sexual de un usuario de forma pública en internet

genera inevitablemente afectaciones psicológicas, pues puede provocar humillaciones,
burlas y acoso sobre el afectado por parte amigos, conocidos e incluso desconocidos.

 Medidas tomadas por el estado para solventar dichas problemáticas

En la actualidad, uno de los problemas sociales más críticos que se pueden
evidenciar en el Ecuador y en todo el mundo es el caso de niños, niñas y adolescentes que
son acosados con pornografía, amenazas a través de las redes sociales. Esto se da, porque
existe la posibilidad de mantener una comunicación con mayor facilidad con los niños
menores de edad a través de internet, representando las redes sociales una herramienta de
comunicación natural y permanente para niños y adolescentes.
Según Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información
(MINTEL) “en el Ecuador como en cualquier otra parte del mundo existen niñas y niños
que a diario son víctimas de acoso por medio de las redes sociales que utilizan” (2019, pág.
34), si bien, a través de estas existen personas de su mismo medio o desconocidos que les
envían contenidos pornográficos que despierta en los menores la curiosidad por el deseo o
el placer sexual.
En el Ecuador, debido a que la mayor parte de los menores se encuentran ajenos ante
dicha problemática, y, por cuanto, es deber del Estado garantizar la protección y la
integridad de los menores de edad tal y como lo señala el numeral 4 del artículo 46 de la
Constitución de la República, en donde se establece que el Estado adoptará medidas que
aseguren a las niñas, niños y adolescentes como: “la protección y atención contra todo tipo
de violencia, maltrato, explotación sexual o de cualquier otra índole, o contra la negligencia
que provoque tales situaciones” (Asamblea Nacional, 2008).
Esto significa que el estado ecuatoriano está llamado a ser el primer protector de los
derechos de este grupo de personas, y a grantizar que los mismos sean cumplidos y no
vulnerados. El ordenamiento jurídico ecuatoriano ha sido muy débil frente a los delitos
infantiles en redes sociales, considerando que los bienes jurídicos protegidos en este delito
son fundamentales de los niños, niñas y adolescentes, afectando así su desarrollo
directamente.
Según el Juez de Garantías Penales Dr. Raúl Salgado “la difusión de sexting no se
encuentra tipificada en nuestro ordenamiento jurídico, para establecer sanciones a esta
práctica misma que deberá ser proporcional en estos casos a la violación a la intimidad”
como un delito, asimilado o analógico al tipo penal
establecido en el artículo 178 del Código Orgánico Integral Penal, mismo que
expresamente indica que: “La persona que, sin contar con el consentimiento o la
autorización legal, acceda, intercepte, examine, retenga, grabe, reproduzca, difunda o
publique datos personales, mensajes de datos, voz, audio y vídeo, objetos postales,
información contenida en soportes informáticos, comunicaciones privadas o reservadas de
otra persona por cualquier medio, será sancionada con pena privativa de libertad de uno a
tres años.” (COIP, 2014, art.178).
Como lo mencione anteriormente, aunque el término sexting no este tipificado así tal cual,
en el ordenamiento jurídico, los elementos de esta acción que se hallan descritos en el
artículo mencionado, se pueden ajustar a la acción y consecuencias de la realización del
sexting, de ahí su pertinencia en poderse aplicar esta tipificación del COIP mencionada.
El estado ecuatoriano aún tiene el deber de sancionar estos delitos, ya que ocasiona
perjuicio en los bienes jurídicos de la persona, como el de la intimidad, el del buen nombre,
el de honor, incluso el de la imagen que se ven vulnerados con estas prácticas. Esta
situación es tan grave dado a que la difusión ilegal del contenido, las consecuencias que
acarrea esta problemática puede llegar a ser entre otros: la extorción, el bullying, el
deterioro de la integridad por los calificativos y ataques que reciben las víctimas, viéndose
al punto de tener graves problemas psicológicos, emocionales e incluso llegar al suicidio.
Así mismo al existir una protección de derechos, debe haber una reparación integral a las
víctimas, que han sufrido con algún tipo de afectaciones y vulneraciones mencionadas en
sus derechos humanos, así como en sus bienes jurídicos. Y muy claro está, en la
Constitución ecuatoriana en el artículo 78, a base de lo mencionado establece la reparación
integral de las víctimas de estos tipos de delitos.
Con la existencia del delito, el estado es el encargado de establecer una reparación efectiva
a favor de la víctima, de acuerdo al artículo 77 del COIP, que en su parte pertinente señala
“la reparación integral radicará en la solución que objetiva y simbólicamente restituya, en la
medida de lo posible, al estado
anterior de la comisión del hecho [...] constituye un derecho y una garantía para interponer
los recursos y las acciones dirigidas a recibir las restauraciones y compensaciones en
proporción con el daño sufrido”.

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