Novela
Novela
Novela
Eduardo Mendoza, junto a Juan José Millás, Julio Llamazares, Javier Marías e incluso
Manuel Vázquez Montalbán forman la generación del 68.
Novela poemática o lírica. Este tipo de novela intenta difuminar las fronteras con
el género lírico. Prevalece el tono subjetivo y manifiesta una tendencia a la
concentración máxima. En este tipo de obras no existe imitación de la realidad y los
personajes suelen ser impenetrables. Abundan los relacionados con los sueños y
son constantes las referencias a mitos y la utilización de símbolos. El lenguaje que
se utiliza es más sugerente que expositivo. Estas novelas están protagonizadas por
personas de mediana edad habitualmente desconcertadas o angustiadas, que
viven en un espacio urbano actual y cuyos problemas íntimos son: la soledad, el
amor, la incomunicación… En ocasiones se difuminan las fronteras entre la vida
real y la fantasía para desconcertar e implicar al lector, por esto, podemos decir
que se trata de textos poemáticos. Y destacan títulos como: La isla de los jacintos
cortados de Gonzalo Torrente Ballester, Mazurca para dos muertos y Madera de
boj de Camilo José Cela, Los santos inocentes de Miguel Delibes o La lluvia
amarilla de Julio Llamazares que narra el abandono de los pueblos a
través de un largo y emocionado monólogo. Su trabajo como novelista es conocido
a partir de la obra que le daría renombre, Luna de lobos (1985), donde aportó
soluciones poéticas al campo narrativo con una historia que versa sobre la sufrida
existencia de los maquis surgidos de la Guerra Civil Española; una epopeya
anónima contada mediante un lenguaje de hondo calado poético. De hecho, en
toda su producción ha hecho gala de un acentuado tratamiento lírico del lenguaje,
unido a una proximidad personal a la naturaleza y al mundo rural, de carácter casi
romántico.
La Guerra Civil fue terrible y cruel. Los campos de batalla de Brunete, Teruel o los ríos Ebro o
Jarama se convirtieron en escenarios de muerte. También las ciudades fueron bombardeadas
indiscriminadamente. Las cunetas y las tapias de los cementerios fueron utilizados como
paredones de fusilamiento. El fin de la contienda no significó el fin de la violencia porque los
vencedores desarrollaron una intensa política de represalias.
Decenas de miles de españoles tuvieron que exiliarse. Algunos no regresaron jamás y otros,
prolongaron su calvario en los campos de concentración nazis.
Algunos casos ejemplifican esta situación, como el asesinato de Federico García Lorca, el exilio
de Antonio Machado o el encarcelamiento y muerte de Miguel Hernández en la cárcel, víctima
de tuberculosis.
El tema de estas novelas es la propia sociedad española: la dureza de la vida en el campo, las
dificultades de la transformación de los campesinos en trabajadores industriales; la
explotación del proletariado y la frivolidad de la vida burguesa. El estilo de la novela realista es
sencillo, tanto en el lenguaje como en la técnica narrativa, se pretende llegar a un amplio
público. Los contenidos testimoniales o críticos son más importantes.
Juan Goytisolo, nació en Barcelona y empezó su carrera en los años 50, dentro
del realismo social y el compromiso político con obras como Juego de manos o Duelo
en el paraíso.
Sin embargo, a partir de Señas de identidad da entrada a formas narrativas
experimentales como el uso de puntos de vista diferentes, la narración en segunda
persona o la ruptura de la temporalidad lineal. En esta obra trata de recuperar sus
propias raíces en un país con el que ya no se siente identificado a través de un exiliado
que vuelve a España. Este desarraigo se puede ver también en Juan sin Tierra. Otras
obras suyas revelan su interés por la cultura árabe como En los reinos de taifa.
LA NOVELA DESDE PRINCIPIOS DEL SIGLO XX HASTA
1939:TENDENCIAS, AUTORES Y OBRAS REPRESENTATIVAS
El escritor granadino Ángel Ganivet, que afirmó que la crisis de fin de siglo de
España habría sido causada por un problema colectivo fundamental: la abulia.
Esta situación se agudiza en 1898, cuando España perdió sus últimas colonias, se desató
un auténtico colapso en el que la derrota ante Estados Unidos se interpretó como
síntoma definitivo de los males que aquejaban al país.
Características.
En sus obras hay un escaso interés por el marco espacial y temporal, aparecen
muy pocas descripciones, se convierten en obras abstractas.
Unamuno también se sintió atraído por el tema de la lucha entre hermanos, por la
historia bíblica de Caín y Abel. Este motivo fratricida sirve de base a su novela Abel
Sánchez (1917).
Tras La tía Tula (1921), Unamuno publica San Manuel Bueno, mártir (1930). En esta
obra aparecen todos los motivos que, recurrente e insistentemente, habían ido
apareciendo en sus novelas anteriores: la lucha agónica del individuo en este mundo, el
creer y el aparentar creer, la soledad, los problemas de la fe, la vida como sueño...
Cuenta la historia de un cura de pueblo que ha perdido la fe, pero que aparenta tenerla
para que sus feligreses mantengan intactas sus creencias religiosas y, por tanto, la
esperanza en una vida mejor.
En cuanto a los ensayos, en ellos muestra su preocupación por España y lo que él llama
intrahistoria, que es la vida cotidiana de personajes que nunca aparecerán en los libros
de historia: medita sobre el tiempo pasado y el incierto futuro debido a la crisis
existencial del momento. Entre sus reflexiones aparece constantemente la idea de Dios y
de la muerte.
Escribe ensayos como En torno al casticismo, Por tierras de España y Portugal o Vida
de Don Quijote y Sancho.
Otros ensayos son Del sentimiento trágico de la vida o La agonía del cristianismo….
Podemos destacar como temas más importantes: el amor, en sus comienzos, un amor
refinado, afrancesado; la muerte, la religión, la España rural, Galicia, con sus leyendas y
tradiciones que conviven con la brutalidad y el abuso del poder, hechos históricos como
La guerra carlista…
José Martínez Ruiz, nació en Monóvar (Alicante). Durante la Guerra Civil, se trasladó a
París y murió en Madrid. Su obra se caracteriza por el carácter autobiográfico.
Su producción literaria engloba diversos géneros, incluso lo que él llamó novelas tienen
muchas características propias de los ensayos y de los artículos, pero aún así se pueden
extraer una serie de características comunes:
Pasó de criticar todo la que tenía relación con la iglesia a ser un católico, firme,
limpio y tranquilo en su vejez, según sus propias palabras.
Obsesión por la muerte como fin ineludible del hombre. Obsesión por el tiempo
y la fugacidad de la vida.
Primera etapa (1900-1912) Trilogías:1.- La lucha por la vida (La busca. Mala Hierba.
Aurora roja); 2.- La tierra vasca (- La casa de Aizgorri. - El mayorazgo de Labraz. -
Zalacaín el aventurero). 3.- La raza: (- La dama errante. - La ciudad de la niebla. - El
árbol de la ciencia); 4.- El mar: (Las inquietudes de Shanti Andía-El laberinto de las
sirenas- Los pilotos de altura).
Apoyan las reformas sociales y políticas con amplitud de miras y apertura a las
influencias externas.
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