Temario Historia de La Música - 3º ESO

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 19

MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

INTRODUCCIÓN

Algunos os preguntaréis aquello de: “¿para qué estudiar música, si yo no voy a ser
compositor, ni pianista, ni nada? ¿De qué me vale saber cuánto dura una corchea, qué
significa el término “presto” o qué es un regulador? ¿Qué diantres es un trovador? ¿Qué me
importa a mí saber quién era Mozart y, sin embargo, por qué lo tengo hasta en la sopa?”.

No os negaré que me resulta tarea ardua el intentar convenceros de por qué la


música y su conocimiento son tan importantes para el ser humano. Sin embargo, algo que
parece tan complejo se torna sencillo si uno trata de hacer un ejercicio de memoria y,
mientras lee estas palabras, intenta recordar todos aquellos momentos de su día a día en los
que le acompaña la música. Uno se levanta en muchas ocasiones con música; desayuna con
la música de la radio o la televisión; se dirige a su colegio, centro de trabajo, etc. y le
acompaña la música; va a comprar y las tiendas amenizan nuestra compra con música; uno
va a un bar a tomarse algo y hay música; nadie concibe una película sin una banda sonora
que resalte cada momento interesante, excitante o trepidante; hay música en los hospitales,
en los autobuses, en los ascensores de los hoteles, en el móvil, en las esperas de los teléfonos…

A pesar de este “bombardeo musical” al que estamos sometidos resulta curioso


pararse a pensar en qué aporta la música a nuestras vidas. La arquitectura dignifica nuestras
viviendas, lugares donde nos sentimos protegidos y cobijados; la medicina cuida de nosotros y
nos devuelve la salud perdida; la informática nos acerca el mundo a nuestras casas y esparce
información y conocimiento de manera inmediata. Pero… ¿y la música? Aparentemente no
aporta nada y, sin embargo, no hacemos prácticamente nada sin ella. De manera directa o
indirecta está ahí y hemos de aprender a disfrutarla.

En este curso trataremos de comprender y conocer mejor los “intríngulis” del mundo de
la música y, al mismo tiempo, descubrir que, efectivamente, hay aspectos que nos pueden
indicar si una música es mejor o es peor, si es buena o mala, sin que signifique esto que nos
pueda gustar más o menos una u otra. Pondré un ejemplo: creo que todo el mundo es capaz
de entender que una sinfonía de Mozart es técnicamente más compleja y de una mayor
calidad que cualquier canción de Bisbal y, sin embargo, nadie se pondría a bailar una
sinfonía de Mozart en una discoteca, yo el primero.

-------------------------------

La Historia de la Música comenzó en el mismo instante en que el hombre primitivo


descubrió que podía cantar o producir sonidos golpeando unos objetos contra otros o
soplando a través de la cavidad de los huesos de los animales. Pero no vamos a tratar aquí
de estas tempranas manifestaciones de la necesidad humana de la música. La Historia de la
Música de nuestra propia cultura occidental puede tratarse partiendo de las culturas en las
que la nuestra tuvo su origen: la judía, la griega, la romana. Sabemos por la Biblia que la
música ocupaba una parte muy importante en la vida del pueblo judío. En la Biblia
encontramos importantes referencias a los instrumentos musicales, al canto, a los
compositores - el rey David es uno de los más célebres compositores judíos y los Salmos su
obra más destacada -. Lo mismo podemos decir de la importancia de la música en Grecia y
Roma, sobre todo en el teatro con sus Coros y en las celebraciones, fueran religiosas o
profanas, con la danza y el baile - podemos recordar como fiestas características las
Bacanales, celebradas en honor de Baco o Dionysios.

Pero la Historia de la Música, propiamente dicha, comienza alrededor del siglo V


cuando el repertorio tradicional del canto eclesiástico, que solía transmitirse oralmente,
empezó a ponerse por escrito y a codificarse empleando signos. Luego toda la música escrita
en esta época, siglo V-VI, era música eclesiástica, ya que los monjes de los monasterios eran
casi las únicas personas que sabían leer y escribir, aunque no debemos ignorar que también
la música existía en las cortes y en los palacios de los nobles. Pero es con la música

1
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

eclesiástica, sin olvidar completamente la profana, con la que hemos de comenzar y la que
necesitamos comprender. Esa música procedente de las grandes catedrales góticas y de los
antiguos monasterios de Europa y conservada en los soberbios códices miniados concebidos
como lujosos regalos para Papas, reyes y príncipes.

EDAD MEDIA

Es el período más largo de la historia. Se considera Edad Media a la época que se sitúa
temporalmente entre los siglos V y XV. Para ser más exactos, las fechas concretas de su
ubicación cronológica son el año 476, con la caída del Imperio Romano de Occidente, y el
1492, año en que se descubre América, dando lugar a un nuevo orden del mundo y a un
cambio de mentalidad.

Tras la caída del Imperio Romano, la Iglesia fue la única institución superviviente del
Mundo Antiguo cuya autoridad permaneció indiscutible. Lo religioso impregnó todas las
manifestaciones políticas, culturales y religiosas de la época. Los monjes eran casi los únicos
depositarios de la cultura. Monasterios y catedrales guardaban y copiaban los manuscritos
(llamados códices) que transmitían el saber y educaban a la nobleza y el clero.

En los planes de la Iglesia, las artes y la música tenían como objetivo fundamental
hacer accesible la doctrina cristiana al pueblo, ya que la inmensa mayoría de los fieles no
sabían leer. Así pues, si bien en la Edad Media existía la música profana (no religiosa) que
impregnaba las calles de los incipientes pueblos y ciudades, se puede decir que la música
religiosa que fomentaba la Iglesia Católica era la primera manifestación musical con un
carácter, digamos, más académico y que daría lugar, con el tiempo, a la denominada
Música Clásica.

CANTO GREGORIANO

La música europea del medievo tomó como base el canto gregoriano. El nombre le
viene de su compilador San Gregorio Magno, Papa a comienzos del siglo VII. La intención de
esta música litúrgica era servir de vehículo a la palabra sagrada, la doctrina de la iglesia, y
como consecuencia debía ser sobria y natural, una música que invitase al recogimiento y a la
meditación religiosa, al contrario que la profana, más enfocada al entretenimiento y la
diversión sin ningún tipo de ejercicio intelectual.

El canto gregoriano es música a capella, es decir, música para voces sin


acompañamiento instrumental de ningún tipo, con texto en latín y monódica, o sea una
única melodía entonada por todos los cantores al mismo tiempo. El ritmo es libre, no sometido
a la rigidez métrica del compás.

En el siglo XI se establecen las reglas de su escritura musical (notación) y durante los


siglos XII y XIII se enriquece con nuevas aportaciones. Estos cantos litúrgicos tenían dos formas
principales:

- RESPONSORIAL: era una especie de estribillo con que los fieles respondía a
cada versículo de un salmo entonado por un solista. Hoy en día, en las celebraciones
eucarísticas aún se sigue utilizando este recurso, si bien ya no es cantado sino recitado.

- ANTIFONAL: Es una frase musical que introduce a un salmo cantado


alternativamente por dos coros que, al término del salmo, vuelven a cantar la antífona
todos juntos. Este tipo de canto se sigue utilizando en algunas localidades,
generalmente rurales, donde las celebraciones eucarísticas aún se conservan tal y

2
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

como se desarrollaban hace siglos. Los feligreses se dividen en hombres y mujeres


(incluso separados físicamente en la iglesia) y así quedan establecidos los dos coros.

Aparte de las formas responsorial y antifonal, el gregoriano puede ser silábico (se
canta una nota en cada sílaba del texto), o floreando ciertas sílabas con varias notas
distintas, a veces muy numerosas; este estilo se llama melismático (por hacer un paralelismo,
como si fueran cantantes de flamenco que, sobre una misma sílaba, desarrollan varias notas).

LA MÚSICA PROFANA

La música religiosa representó durante toda la Edad Media el arte sabio y refinado.
Pero paralelamente a ella se desarrolló también una música profana, es decir, no religiosa.

Entre los siglos XI y XII aparecieron en el seno de la nobleza medieval los trovadores,
poetas-músicos que elaboraron una lírica profana o canción culta. Al igual que el gregoriano,
esta música quedó escrita, garantizándose su supervivencia hasta nuestros días. Las
diferencias entre esta lírica profana y el canto gregoriano son importantes. En primer lugar, la
mayoría de sus canciones son de tema amoroso. En segundo lugar, no emplean el latín, como
e el canto gregoriano, sino las nacientes lenguas vulgares como el francés, gallego,
castellano, etc. Su música tenía un ritmo más marcado que el gregoriano y se acompañaba
con distintos instrumentos.

La música de trovadores procedía de la región francesa de Provenza y se extendió


rápidamente por toda Europa. En la Península Ibérica destacan dos nombres importantes:
MARTÍN CODAX (Cantigas de Amigo) y el rey ALFONSO X EL SABIO (Cantigas de Santa María).

Los protagonistas de la canción popular durante la Edad Media fueron los juglares,
gentes de origen social humilde, que erraban de pueblo en pueblo, ganándose el sustento
con la prestidigitación o la exhibición de animales amaestrados, pero también con la música,
cantando cantares de gestas o música de trovadores. A diferencia de los trovadores, que
componen y cantan sus propias obras, los juglares sólo interpretan porque no tienen
formación ni facultades para componer. Es, por tanto, lógico pensar que los juglares tenían su
hábitat natural entre el pueblo llano, mientras que los trovadores eran los músicos que
frecuentaban las distintas cortes y palacios de reyes y nobles.

Además de los trovadores y los juglares, existían los goliardos. Eran clérigos, personas
de cierto nivel cultural, que habían abandonado la vida religiosa y vagabundeaban de un
lado a otro intentando sacar partido de su superioridad cultural. Cantaban y recitaban en
latín y en vulgar, y en su repertorio figuraba la poesía más refinada o dramática junto con las
canciones al vino, a las mujeres, contra los eclesiásticos, etc.

POLIFONÍA

Hasta el siglo IX toda la música practicada en Europa es monódica, pero a partir de


ese momento va a surgir un nuevo procedimiento revolucionario: la polifonía, esto es, música
compuesta de varias melodías que suenan simultáneamente.

El primer ejemplo conocido de polifonía fue la aparición del órganum, procedimiento


que consistían en añadir a una melodía gregoriana la misma melodía pero en otra altura (más
grave o más aguda), de tal manera que el oyente escuchaba dos melodías que se
desarrollaban en paralelo. La melodía gregoriana original era llamada VOX PRINCIPALES O
CANTUS FIRMUS, mientras la voz añadida se llamaba VOX ORGANALIS.

3
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

Hacia finales del siglo XI apareció el discantus, primera manifestación de relativa


independencia de la nueva voz con respecto al canto gregoriano. Una voz superior, llamada
discantus, improvisaba sobre el cantus firmus.

- ARS ANTIQUA

Llamamos Ars Antiqua a la forma de hacer música de los siglos XII y XIII, en los que se
parte de los primeros ensayos polifónicos hasta sentar las bases de la polifonía en su etapa de
plenitud.

El centro principal de creación fue Francia, y en especial la escuela de Notre Dame de


París y que tuvo como máximos representantes a los dos primeros compositores conocidos:
LEONIN y su sucesor PEROTIN.

Los géneros del Ars Antiqua son:

- ORGANUM: Se sigue cantando a pesar de ser una forma primitiva de polifonía,


pero se estanca la creación de nuevas obras.

- CONDUCTUS: El cantus firmus ya no será un canto llano, sino una melodía de


creación propia.

- MOTETE: Es el género principal en el cual las voces tienen casi total


independencia unas de otras creándose así una polifonía cada vez más compleja de
crear y de cantar e incluso de escuchar.

- ARS NOVA

Ars Nova, título de un tratado escrito por PHILIPPE DE VITRY, ha servido a la ciencia
musical moderna para llamar así a la música del siglo XIV y XV y, por extensión, a otras
manifestaciones artísticas de esa época.

Este periodo marca una ruptura con el periodo anterior ante todo en el ritmo, al
aparecer un sistema de escritura rítmica que permitía la independencia de cada una de las
partes de la polifonía. Fue entonces cuando comenzó a usarse la palabra "contrapunto"
aplicada la técnica de composición polifónica. GUILLAME DE MACHAUT será el mayor
representante de este nuevo estilo. Francia sigue siendo, al igual que durante el Ars Antiqua,
el foco de mayor interés musical.

Durante el Ars Nova, el organum y el conductus desaparecen y las innovaciones se


centran en los motetes y en los madrigales, nuevas canciones polifónicas que se iban
creando en distintas partes de Europa. En España, por ejemplo, nacerá el Villancico, de
carácter festivo y que no tiene nada que ver con lo que conocemos hoy como villancico. El
Villancico medieval era un tipo de canción polifónica (derivación del madrigal) que solía
tener temática amorosa o narraba acontecimientos de la zona. Las cantaban los villanos,
habitantes de las villas, de ahí su nombre. El principal compositor de Villancicos fue JUAN DEL
ENZINA.

EL RENACIMIENTO

A fines del siglo XV y en la primera mitad del siglo XVI se produjo en Europa un
extraordinario y completo desarrollo de las ciencias, las artes y las letras. Este fenómeno es
conocido como el Renacimiento. Este es uno de los momentos más brillantes y más

4
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

importantes de la historia: de los brillantes, porque los artistas crearon entonces obras
maestras, difícilmente superadas después, y de los más importantes, porque, así como los
descubrimientos marítimos de Cristóbal Colón y otros ensancharon el campo de la actividad
material, el Renacimiento ensanchó el campo del pensamiento y de la actividad intelectual.

Este período adoptó una visión nueva del mundo, que trajo consigo derivaciones y
resultados fecundos en el siglo XVI. Emerge una cultura y una visión del mundo centrada en el
hombre. Esta se orienta hacia los valores de la naturaleza y, así, indirectamente se fomenta el
espíritu aventurero que había de fructífera en los descubrimientos.

El término Renacimiento, como su propio nombre indica, supone la consciente


imitación de las formas clásicas en las distintas facetas artísticas (arquitectura, escultura,
pintura…). Esa vuelta a lo clásico, sobre todo a Grecia y a Roma, no debe ser aplicado a la
música del mismo modo que se aplica a otras artes, ya que la música de los siglos XV y XVI no
supuso una ruptura con la tradición musical anterior, ni significó un intento de hacer renacer
esas formas procedentes de la antigüedad clásica, posiblemente provocado porque en
aquellos tiempos no había posibilidad de conocer elementos o características propias de
aquellas épocas remotas.

El Renacimiento se caracteriza, principalmente, por una progresiva pérdida de poder


por parte de la Iglesia. Las corrientes intelectuales y científicas (con nombres tan destacados
como Lutero, da Vinci, Galileo, Rafael, Tomás Moro, Miguel Ángel...) empezaban a dar
respuestas racionales y convincentes (y demostrables) a preguntas que, hasta ese momento,
había resuelto la iglesia. Esto hizo que la gente fuera perdiendo la fe y comenzó a extenderse
la sensación de que ya no era Dios el centro de todo, sino el hombre. Así es como nace el
Humanismo.

En términos musicales generales puede decirse que los siglos XV y XVI supusieron el
triunfo definitivo y la supremacía de la polifonía frente a la música monódica de la época
medieval. En esta época desaparecieron algunos de los instrumentos del periodo gótico y
pervivieron, sobre todo, aquellos que mejor se adaptaban a la polifonía. Predominaron los
instrumentos de teclado y de cuerda, como el órgano, el clavecín, el laúd y la vihuela (de
origen español) lo que facilitó la consagración de la música como acompañamiento de sus
creaciones (los trovadores se acompañaban de instrumentos de cuerda).

Durante estos dos siglos, el auge alcanzado por la música profana fue otra de las
innovaciones de la época. La música pasó a ser un arte no sólo cultivado por clérigos, como
en la Edad Media, y las canciones de corte popular, sobre todo el madrigal, fueron piezas por
las que se sintieron atraídos casi todos los compositores.

La división religiosa que el cisma protestante promovido por Martín Lutero había
marcado, dejó también su huella en la música. Entre los reformadores alemanes y
centroeuropeos se entendió que la música tenía una gran importancia para los actos
religiosos de la nueva Iglesia; así, y con la intención de crear un sentimiento comunitario entre
los fieles, los protestantes tendieron hacia una música coral, no necesariamente polifónica, y
de texto en lengua vulgar que podía ser cantada por el pueblo. Tendieron, como puede
verse, hacia formas dominadas por la sencillez, en las que lo importante es el texto y la falta
de dificultades para que pueda ser asequible a las masas no sólo en su escucha, sino también
en la propia interpretación, lo cual facilitaba la participación de los feligreses en la propia
eucaristía.

La respuesta católica a estos planteamientos musicales, se dio en el Concilio de Trento,


que pretendió regular la música religiosa de los católicos con formas en las que
predominaban la austeridad y la gravedad, renunciando, al menos en principio, a la
polifonía. La música polifónica no pudo ser finalmente rechazada (la intención era retroceder
al canto gregoriano) y las decisiones trentinas no fueron seguidas al pie de la letra. No
obstante, algunas de las recomendaciones de los obispos católicos sí dejaron su huella en la

5
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

música religiosa como, por ejemplo, las que insistían en la necesidad de que los textos
cantados debían resultar reconocibles y asequibles para los fieles, copiando así las ideas de
los protestantes.

El siglo XVI fue, por otro lado, el momento en el que la música instrumental despertó un
verdadero interés entre los compositores. La música de instrumentos sin presencia de la voz se
empleó, de manera especial, para el baile y su aparición estuvo muy unida al interés por la
música de las refinadas y cultas minorías de las cortes y de las familias más ricas de Europa.

LAS FORMAS MUSICALES

En esta época, las formas musicales más difundidas fueron el motete, la misa, la
canción, el referido anteriormente madrigal y el villancico (madrigal a la española). También
empezaron a tener su auge en toda Europa algunas danzas que, con el tiempo, pasarían a
denominarse lo que conocemos como “bailes de salón”, representados, principalmente, por
la pavana y la gallarda, y de gran aceptación por parte de la alta aristocracia.

Formas principalmente (pero no exclusivamente) vocales:

- Motete: surgido durante el Ars Antiqua y desarrollado a lo largo del Ars Nova, tiene
su época de máximo esplendor durante el siglo XVI. La estructura es la misma (para
3 ó 4 voces, sin instrumentos y de corte religioso) pero las polifonías son cada vez
más complejas y elegantes.

- Misa: tras el éxito de los motetes, la Curia eclesiástica se plantea hacer las misas
cantadas, de principio a fin. Se pretendía conseguir (y se consiguió) acercar la
palabra de Dios de una manera más atractiva y, por otro lado, que la analfabeta
población de la época memorizara más fácilmente los textos sagrados gracias al
efecto pedagógico de la música. Las misas eran polifónicas y, en numerosas
ocasiones, con acompañamiento instrumental.

- Madrigal: de carácter profano, surge también al final de la Edad Media, aunque su


apogeo se produce durante el Renacimiento. Sus temáticas eran mundanas y,
principalmente, su objetivo eran los amoríos y asuntos adyacentes. Su versión
española fue el villancico y en otros países recibía el nombre de chanson (Francia)
o ayre (Inglaterra).

- Canción: en esta época se comienza a acuñar este término para designar a un


texto cantado (generalmente poético o de cierta calidad literaria) acompañado
con instrumentos.

Formas instrumentales (principalmente, danzas):

- Pavana: de ritmo pausado, imitaba el baile del pavo en el momento del cortejo.
Era un baile grupal distribuido por parejas que se iban entrelazando.

- Gallarda: de ritmo ternario, solía interpretarse después de la pavana y era mucho


más viva. También representa a un animal, en este caso el gallo, y se bailaba
imitando sus eléctricos movimientos de cabeza y pies (patas).

Sin forma musical específica, la música instrumental se desarrolló enormemente en este


período. Pasó de prácticamente no existir a tener un lugar destacado dentro del panorama

6
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

musical. Especialmente, se extendieron las adaptaciones instrumentales de obras vocales ya


existentes.

LOS GRANDES MAESTROS DEL RENACIMIENTO

A lo largo del siglo XVI comenzaron a surgir los que podrían considerarse primeras
grandes figuras de la tradición musical occidental que ha perdurado hasta nuestros días.

Juan del Enzina vivió entre los siglos XV y XVI y en su producción destacaron las obras
de corte popular y profano, como los villancicos y las canciones (de tema pastoril) en los que
demostró un gran dominio de los recursos dramáticos y literarios. Su capacidad como músico
instrumental la desarrolló en madrigales cultos de tendencia italiana.

Tomás Luis de Vitoria (1548-1611). Se educó musicalmente en Roma, con Palestrina, a


quien igualaría como artista. Fue músico de Felipe II y creador de un estilo marcado por la
austeridad y los valores expresivos, que encajó perfectamente con el espíritu contrarreformista
del ambiente escurialense. Su obra polifónica la dedicó íntegramente a la música religiosa y
es uno de los pocos compositores de su tiempo que no se sintió interesado por la música
profana. Vitoria es, probablemente, uno de los músicos españoles más grandes de todos los
tiempos, incluso más que Melendi.

Pier Luigi de Palestrina (1525-1594). Fue, sin duda, el compositor de más influencia de su
época. Protegido del papa Julio II dominó el contrapunto como ningún otro compositor de su
tiempo. Su fama llegó hasta la corte de Viena a la que fue llamado, pero donde no
cumplieron sus exigencias, por lo que regresó a Roma para trabajar, hasta su muerte, en la
Basílica de San Pedro. Disfrutó de fama y honores y, de su obra destacan sus misas y sus
motetes, marcados por la austeridad y una profunda religiosidad.

Claudio Monteverdi (1567-1643) marcó la transición entre la tradición polifónica y


madrigalista del siglo XVI y el nacimiento del drama lírico y de la ópera en el siglo XVII. Es la
figura más importante en la transición entre la música del Renacimiento y del Barroco. En el
año 1607 se estrenaría su obra más relevante, Orfeo, su primer drama musical, considerado la
primera ópera de la historia.

INSTRUMENTOS MÁS REPRESENTATIVOS DEL RENACIMIENTO

7
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

Viola da gamba Clavecín Órgano portativo

Laúd Vihuela de mano Vihuela de arco

Zanfoña (o zanfona) Flautas de pico Sacabuche

BARROCO

Según hemos comentado ya en clase alguna vez, el Barroco nace en torno al 1600,
cuando se comienzan a estrenar las primeras óperas de Jacopo Peri o Claudio Monteverdi.
Este nuevo género significará la apertura hacia otra manera de entender la música. Por el

8
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

contrario, el final del Barroco lo marcamos en el año 1750, año en el que fallece Johann
Sebastian Bach, el más grande compositor de este período.

Podríamos decir que el Barroco es una época de ruptura con los ideales de su época
pretérita, el Renacimiento, donde la obsesión por imitar los cánones clásicos de belleza se
convierte en el pan nuestro de cada día. Destrozando ese concepto clásico del equilibrio y la
proporción, el Barroco se muestra como una época donde lo que se fomenta es lo
recargado, lo retorcido, lo excesivo.

La sociedad sigue evolucionando y las fronteras de los países comienzan a quedar


establecidas. Las monarquías autoritarias van dando paso a las monarquías absolutistas,
donde el rey concentra en sus manos todos los poderes del estado (legislativo, ejecutivo y
judicial) y, además, manda en el ejército y en todas las instituciones del estado (incluida la
Iglesia). El rey considera que su poder es de origen divino (Dios ha delegado en él) y, por
tanto, sólo debe rendirle cuentas a Él.

En las incipientes ciudades se afianza un nuevo estamento, la burguesía


(comerciantes, artesanos…), que consigue ir enriqueciéndose y se establece como un puente
entre los acaudalados y privilegiados estamentos superiores (aristocracia y clero) y los
oprimidos y vilipendiados estamentos inferiores (campesinos, ganaderos…).

En el mundo cultural, el Barroco fue una época de gran fecundidad artística. La


aparición de la burguesía hace que los altos estamentos comiencen a ver peligrar su
hegemonía. Los burgueses son gente con dinero y que, cada vez más, se está empeñando en
formarse y cultivarse; es, por tanto, gente menos fácilmente manipulable y esto hace que “los
grandes” se tengan que espabilar y, a modo de golpe de autoridad y haciendo una especie
de “campañas publicitarias”, organizan grandes espectáculos y eventos donde la música
estará siempre muy presente. Nace así el mecenazgo, conociendo a los mecenas como
aquellas personas o instituciones que financiaban, de una u otra manera, a los artistas
(músicos, literatos, escultores, pintores o arquitectos).

Así, el desarrollo cultural dio lugar a grandes artistas en todos los campos y destacaron
gente como Lope de Vega, Cervantes, Moliere o Shakespeare en literatura; Velázquez,
Murillo, Zurbarán, Rubens o Rembrandt en pintura; Bernini, Borromini o Alonso Cano en
escultura.

En el terreno meramente musical el Barroco significará la racionalización de la música,


la búsqueda constante de la proporción y la aparición de normas y reglas que se convertirán,
con el paso del tiempo, en la base formal y estructural de la música. Por otra parte, los
compositores e intérpretes, más allá de formalismos, se van a preocupar de darle un sentido a
la música, que no sólo sea un entretenimiento o algo que forme parte de una ceremonia o
celebración; buscarán que la música trascienda más allá de la propia música y llegue al
terreno de las emociones, de los sentimientos. Aparecerán nuevas formas vocales como el
oratorio, la cantata y, sobre todo, la ópera. Además, se desarrolla definitivamente la música
instrumental surgiendo formas importantes como la fuga, la suite o la sonata. Como elemento
que nos ayudará a reconocer fácilmente la música del Barroco hay que mencionar la
aparición del bajo continuo como base musical del nuevo estilo, ejecutado al menos por dos
instrumentos: un instrumento grave de cuerda (viola da gamba, laúd grande o tiorba u otros),
que interpretaba la línea del bajo tal como lo escribía el compositor, y un instrumento de tecla
(clavicémbalo), que improvisaba armonías de acuerdo con la melodía.

En cuanto a los compositores, tendremos en cuenta a los tres más destacados: Johann
Sebastian Bach, Georg Friedrich Haendel (o Händel) y Antonio Vivaldi.

Comencemos el desarrollo del tema diciendo que hay un desacuerdo considerable


respecto a la fecha en que comienza el Barroco, siendo menor la controversia respecto a su
fin. También parece bien claro que el Barroco estuvo dividido en tres subperíodos, aunque

9
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

diversos autores no coincidan en la fecha de cada uno. Hoy en día se ha llegado a una
relativa convención:

1. Barroco temprano: 1.607 – 1.640. Como ya sabemos, el origen del Barroco lo


marca, en 1607, el estreno de la primera gran ópera, “Orfeo” de Claudio
Monteverdi. Este primer período se caracteriza por la hegemonía de estilos
monódicos en géneros como el madrigal (una especie de madrigal monofónico,
pero acompañado) y el aria para solista y las emergentes sonatas para solista y
sonatas en trío (formación instrumental para 3 instrumentos).

2. Barroco pleno: 1.640 – 1.690. El recitativo expresivo de los años anteriores pierde
parte de importancia, mientras que el aria lírica belcantista (el término “bel canto”
proviene de la técnica de canto utilizada en la ópera) cobra un mayor peso
expresivo. La estructura musical de las sonatas para solista y las sonatas en trío se
va fijando cada vez más y queda prácticamente estipulada.

3. Barroco tardío: 1.690 – 1750. Las nuevas tendencias hacia lo sencillo, sentimental y
natural surgen hacia 1.730 y conducen hacia el Clasicismo. El final de esta época
lo marca el fallecimiento del más grande compositor que existió en este período:
Johann Sebastian Bach.

LA MÚSICA VOCAL PROFANA

Sin duda, el cambio más significativo en la música barroca está en la aparición de la


ópera, un nacimiento que se produce como respuesta a la necesidad de los compositores e
empezar a contar cosas y plasmar algunas de las grandes preocupaciones del ser humano
(los celos, la traición, el amor, la confianza…). Los madrigales habían ido desarrollando hacia
dramas líricos donde ya se plasmaban algunas de estas inquietudes, pero no es hasta finales
del siglo XVI cuando un grupo de artistas e intelectuales residentes en Florencia conocidos
como la “Camerata Fiorentina” da forma a todo este cúmulo de expectativas creando las
primeras óperas, buscando en ellas lo que ellos pensaban que debía ser el auténtico objetivo
de la música: conmover al oyente y hacer brotar en él todo tipo de sentimientos. Además,
con la ópera conseguían unificar distintas facetas artísticas (poesía, música, teatro, danza,
pintura…) dando lugar a lo que ellos llamaron “la obra de arte total”.

La primera ópera conocida es “Dafne” (1597), de Jacopo Peri y otra obra suya,
“Eurídice” (1603), es la primera ópera que se conserva íntegra. No obstante, la primera ópera
representativa de este género y, por tanto, la que se toma como referencia, es “Orfeo”
(1607), de Claudio Monteverdi. Como vemos, la ópera surge en Italia pero, en muy poco
tiempo, el nuevo género se hará poderoso en las grandes capitales europeas. A este rápido
desarrollo ayudó también la creación de los primeros teatros públicos en los que, de una u
otra manera, todo aquel que pudiera permitírselo podía acudir a ver distintos espectáculos. A
pesar de ser un dato que suele pasar desapercibido, hemos de darle una gran importancia,
ya que la aparición de estos teatros públicos abría las puertas de la cultura a todo aquel que
quisiera cultivarse y formarse.

Formalmente, la estructura de la ópera solía estar dividida en las siguientes partes:

- Obertura: es la parte inicial e instrumental donde se presentan, por parte de la


orquesta, algunas de las melodías que van a ir sonando a lo largo de la ópera.

10
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

- Recitativos: como su nombre indica, son partes más bien recitadas, no tanto
cantadas. En ellas, los protagonistas van relatando acciones de la historia. Lo
importante en un recitativo es lo que se dice en él, no cómo se dice.

- Arias: son momentos donde lo que se busca es el lucimiento de los papeles


principales. La transmisión de emociones y la demostración de la técnica vocal
quedan por encima de la importancia del texto.

- Coros: en los que cantan un numeroso grupo de personajes (protagonistas,


secundarios, figurantes…).

- Interludios: son partes únicamente instrumentales que se intercalan entre las arias,
recitativos… y donde, normalmente, se aprovechaba para dar descanso a los
protagonistas, realizar algún cambio de decorado o darle un momentáneo
protagonismo a la orquesta.

LA MÚSICA RELIGIOSA

Ya durante el Renacimiento decíamos que la Iglesia iba perdiendo presencia en las


calles e influencia sobre las personas. Esto hizo que, poco a poco, la propia música religiosa
fuera perdiendo relevancia dentro de la sociedad. Si bien, los oficios religiosos seguían
desarrollándose como hasta entonces, bien es verdad que la aparición de nuevas formas
dentro de la música profana hará que, tanto católicos como protestantes, se aprovechen de
las innovaciones para crear nuevas formas más actuales y acercarse de nuevo al pueblo. Así,
y bajo la influencia de la recién creada ópera, surgen nuevas formas musicales dentro de la
música religiosa:

- Coral: de corte protestante, es un canto empleado en las ceremonias religiosas.


Normalmente está compuesto para cuatro voces mixtas y puede acompañarse de
instrumentos.

- Oratorio: estructuralmente es exactamente igual que una ópera con la gran


diferencia de la temática (textos religiosos sacados de la Biblia) y que éste no se
escenifica ni representa.

- Cantata: si bien nace en el ámbito profano, poco a poco se hará fuerte en


terrenos religiosos. Se trataban de cantos a varias voces y podría decirse que fue la
versión modernizada de los motetes y los madrigales.

- Pasión: eran oratorios en los que, únicamente, se narraban la pasión y la muerte de


Jesús. Los compositores creaban sus obras musicales a partir de los textos de los
Evangelios.

LA MÚSICA INSTRUMENTAL

Durante el Barroco la música para instrumentos desbancó la hegemonía de la música


vocal, hasta entonces indiscutible. Ello se debió, por una parte a la necesidad de dar
acompañamiento instrumental a la monodía acompañada propia del nuevo estilo y, por otra,
al perfeccionamiento técnico de los instrumentos, que pudieron competir en belleza con la
voz. Así, durante la segunda mitad del siglo XVII, se impusieron el violín y su familia, la cuerda,

11
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

como base del conjunto instrumental, un conjunto instrumental que, por otra parte, se iba
desarrollando para dar paso a las primeras orquestas.

No cabe duda de que gran parte de la culpa de este desarrollo instrumental la


tuvieron los conocidos “luthiers”, constructores de instrumentos que, guiados por las
necesidades expresivas de los propios compositores, evolucionaron las características
técnicas de los instrumentos e, incluso, idearon otros. Durante el Barroco, se terminaron de
desarrollar muchos instrumentos de cuerda (guitarra, violín, violonchelo…) gracias, sobre todo,
al buen hacer del gran Antonio Stradivarius, y se comenzaron a desarrollar los primeros pianos,
obra de Bartolomeo Christofori.

Durante este siglo, la música instrumental dio lugar a distintas formas musicales que
fueron evolucionando hasta alcanzar su perfección en el siglo XVIII. Las principales fueron:

- La fuga: de un solo movimiento y en estilo contrapuntístico, habitualmente a tres o


cuatro voces, la fuga sigue un plan complejo en la que un tema inicial (o tema
principal) es progresivamente iniciado en otras voces (líneas melódicas), de tal
manera que se da la sensación de que unas voces persiguen (melódicamente) a
otras. Bach, en el siglo XVIII, llevó esta forma a su culminación.

- La suite: se trata de una colección de danzas que forman una sola obra. Se
organizan de dos en dos, haciendo alternar una danza viva con otra más
reposada. Cuatro danzas se consideraban de aparición obligada en la suite:
alemanda, courante, zarabanda y giga, siendo lo habitual insertar entre ellas
danzas opcionales (gavota, pavana, gallarda, minué y otras).

- La sonata: la palabra “sonata” surgió en Italia en el siglo XVII para referirse a la


música destinada a ser interpretada con instrumentos, frente a la “cantata” que,
lógicamente, era cantada. La más característica era la “trío sonata”, para dos
instrumentos, habitualmente violines, y bajo continuo a cargo de viola da gamba o
violonchelo y clave, es decir, cuatro ejecutantes. La sonata se dividía,
generalmente, en 3 movimientos contrastantes: Rápido (Allegro), Lento (Adagio),
Muy Rápido (Presto).

- El “concerto grosso”: un concierto tiene la misma estructura musical que una


sonata con la diferencia que éste está destinado para ser interpretado por toda la
orquesta.

INSTRUMENTOS DEL BARROCO

En esta época se siguen utilizando instrumentos de otras épocas como el sacabuche, la


trompeta y la trompa (ambos sin pistones). La nueva creación es la familia del violín, nacido
de la evolución de otros instrumentos. Los más usuales son:

Cuerda

12
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

Frotada: Violín y viola (soprano, tenor [da gamba] y bajo, predecesores de viola,
violonchelo y contrabajo).
Punteada: Clavicémbalo y guitarra.
Percutida: a comienzos del XVIII se empiezan a desarrollar los primeros prototipos de
pianoforte, que era como se llamaban en un primer momento.

Viento

Madera: Oboe y fagot. El clarinete no surge hasta mediados del XVIII.


Metal: Sacabuche, trompa y trompeta (ambas sin pistones).
Mixto: Órgano.

Percusión

Timbal: este instrumento tiene forma de semiesfera con un parche.

LOS GRANDES MAESTROS DEL BARROCO

JOHANN SEBASTIAN BACH

Bach nació en Eisenach (Alemania), en 1685. Trabajó sin descanso durante toda su
vida y podemos decir, sin miedo a equivocarnos, que se trata del compositor más influyente
de la historia de la música. Su legado nos ha dejado no sólo innumerables obras de una
calidad insuperable sino, además, los pilares estructurales y formales de la música actual.

Tuvo veinte hijos, fruto de dos matrimonios, de los cuáles siete estudiaron música y
entre los que destacaron, fundamentalmente, tres: Johann Christian, Karl Philippe Emmanuel y
Wilhelm Friedemann.

Entre su producción vocal destacan las Cantatas, de las que escribió más de
trescientas. La más destacada y conocida es la Cantata 147.

Relacionadas con las Cantatas están las Pasiones, entre las que destaca como obra
maestra “La Pasión según San Mateo”, para dos orquestas, dos órganos, dos coros y solistas.
Las Pasiones, estructuradas sobre un texto libre basada en el relato evangélico, se
interpretaban durante la Semana Santa. Dentro del ámbito religioso compuso también otra
obra fundamental como “Oratorio de Navidad”.

Entre su obra instrumental destacan los dos libros de “El clave bien temperado”, piezas
contrapuntísticas para desarrollar la técnica. Pertenecen también a esta categoría las suites,
para clave o para violonchelo, y las magistrales “Variaciones Goldberg”, que desarrollan
treinta variaciones.

Bach fue un virtuoso del órgano, y compuso para este instrumento más de ciento
cincuenta corales luteranos, destinados al uso litúrgico, y otras muchas obras habitualmente
emparejadas en preludio y fuga, género éste último, en el que destacó especialmente y que
llevó a su máximo punto en el libro “El arte de la fuga”.

Entre la música orquestal destacan los seis “Conciertos de Brandemburgo”.

GEORG FRIEDRICH HAENDEL (ó Händel)

Nació en Halle (Alemania), también en 1685 (como Bach), pero en 1712 se estableció
definitivamente en Londres, donde gozó durante su vida de gran fama y reconocimiento. La

13
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

sombra de Bach en Europa era demasiado alargada y eclipsaba el talento y brillantez de


Haendel, por lo que decidió trasladarse a Inglaterra.

En la música vocal, Haendel tiende en sus composiciones a la homofonía y al acorde


propios del Clasicismo, al contrario que Bach, quien se mantiene fiel al contrapunto en todo
momento. Con el declinar del éxito de la ópera italiana en Londres, Haendel se orientó hacia
un nuevo género, el oratorio, con texto en inglés sobre temas bíblicos, mucho más cercanos al
público inglés que los artificiosos argumentos mitológicos cantados en italiano. De entre los
veintiséis oratorios que compuso destaca “El Mesías”, el más famoso y a la vez el más típico,
porque no relata una historia, sino que desarrolla una serie de meditaciones sobre la vida de
Cristo y su mensaje. Seguramente, conocerás el famoso “Aleluya”, perteneciente a este
oratorio. También fue un reconocido compositor de óperas, entra las que destaca, por
encima de todas, “Rinaldo”

La música instrumental de Haendel resulta de importancia secundaria frente a su


producción operística o sus oratorios. Sin embargo, entre su producción instrumental destacan
la “Música acuática” y la “Música para los Reales fuegos artificiales”, ambas en forma de suite
para orquesta y destinadas a fiestas reales al aire libre.

ANTONIO VIVALDI

Compositor y violinista italiano. Hijo de un violinista consagrado de la capilla de San


Marcos en Venecia, da sus primeros pasos musicales a muy temprana edad.

Una vez ordenado sacerdote, es nombrado maestro de violín del Orfanato de la


Piedad, cuya orquesta de señoritas se convierte en uno de los mejores conjuntos
instrumentales de la época, dirigidos por el “petre rosso” (el cura rojo), nombre con el que se
conocía a Vivaldi por el color de su pelo. Se le conoce principalmente por sus obras
instrumentales, entre las que destacan varios conciertos con violines solistas pero, además,
compuso para otros instrumentos conciertos y música de cámara, además de óperas.

Su estilo de forma clara, impulso rítmico y flujo de ideas musicales influyó en el lenguaje
concertístico de J.S. Bach y otros compositores posteriores. Compuso unas 770 obras, entre
ellas destacan 46 óperas y 477 conciertos de los que se conservan 443. De estos casi 500
conciertos, cabe reseñar, de manera muy especial, una de las grandes composiciones de la
historia de la música: “Las cuatro estaciones”, dividida en cuatro conciertos, uno por cada
estación.

Como decíamos antes, en 1750 fallece Johann Sebastian Bach. Dado que este
compositor es el gran referente del Barroco, se considerará esta fecha también como el
momento de la “muerte” del Barroco.

CLASICISMO
Se entiende por Clasicismo el período que va desde la mitad del siglo XVIII (1750)
hasta, aproximadamente, la primera treintena del siglo XIX (1830). En este tiempo se sientan
las bases de lo que se conocería después como Siglo de las Luces o Ilustración.
El Clasicismo recupera alguna de las máximas del período clásico fijándose en algunos
de los elementos de la tradición greco-romana como la elegancia, proporción, equilibrio,
sencillez, armonía, etc.
Como ya hemos visto, la música va dejando de ser, poco a poco, propiedad exclusiva
de la iglesia y de los mecenas, es decir, va perdiendo su orientación sagrada o religiosa y va
disminuyendo, paulatinamente, la protección y manutención de los príncipes o arzobispos
sobre los compositores.

14
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

La música del Clasicismo se vuelve cosmopolita, universal; es decir, se populariza


gracias al nacimiento de lo que hoy llamamos “público”. En este periodo asistimos al
nacimiento de la música como espectáculo comercial; muy tímidamente al principio, se va
extendiendo la práctica del concierto público, no ya la habitual sesión cortesana para
divertimento de un poderoso y sus invitados, sino la ejecución independiente de ópera o
música sola promovida por un empresario y a la que acude quien tiene interés en ello y dinero
para pagar su entrada. Ya en el Barroco esto estaba cambiando pero, hasta ahora, la música
se había interpretado en lugares muy restringidos (castillos, iglesias, catedrales, palacios, etc.).
Con el Clasicismo la música se termina de popularizar; se dan conciertos públicos en las
principales ciudades europeas, destacando entre ellas París, Leipzig, Viena o Berlín
El contrapunto denso que el periodo Barroco había usado en sus obras va siendo
desplazado por un estilo más fluido, más amable y más natural, en el que la melodía ocupa el
lugar más destacado. Este contrapunto irá desapareciendo como tal de las composiciones,
pero no desaparecerá una de las esencias de su existir: la imitación. La música se hace más
simple y sencilla, dejando de lado aquellos excesivos adornos y complicaciones propias del
Barroco. En suma, la música del Clasicismo es una música más popular, sencilla, inteligible y
placentera para todos. El término que mejor le conviene es el de música galante: exquisita,
uniforme, fácil, civilizada y elegante.
Son numerosos los músicos que representan esta nueva tendencia. Nosotros, sin
olvidarnos de quienes son considerados como el puente o la transición desde el Barroco al
Clasicismo, nos detendremos en las dos figuras más representativas de este período: Franz
Joseph Haydn y Wolfgang Amadeus Mozart.
Sin embargo, no conviene olvidarse de que el puente o la transición entre el Barroco y
el Clasicismo lo realizaron varios compositores, entre los que destacan, por encima de todos,
dos de los hijos de Johann Sebastian Bach. Éstos son: Wilhelm Friedemann Bach y Johann
Christian Bach.
CARACTERÍSTICAS GENERALES DEL CLASICISMO
Fue la conocida como Escuela de Mannheim la que comenzó a desarrollar nuevas
maneras de entender la música. Una serie de compositores, entre los que destacó Joseph
Stamitz, proponen un modo de hacer música más sencillo y basado en la naturalidad, así
como en el orden y el equilibrio, alejados de la pomposidad auditiva del Barroco. Partiendo
de las propuestas de la Escuela de Mannheim, van surgiendo las siguientes características:
Los compositores clásicos tomaron como modelo compositivo las melodías simples
y periódicas.
La orquesta se convierte en “un instrumento” alejado ya de la tiranía del bajo
continuo y comienza a explorar la graduación de intensidades y de planos sonoros.
La línea del bajo se convirtió en algo menos activo de lo que era el bajo continuo y
sí más en una base para los acordes sucesivos, quedando como un discreto y sutil
acompañamiento. Se reducen el número de instrumentistas en la orquesta y el
papel de los metales es meramente testimonial.
Los compositores del Clasicismo adoptaron preferentemente la estructura formal
de la sonata (3-4 tiempo o movimientos) por resultar el más adecuado y atractivo
para su música instrumental. Esta misma estructura la utilizaron en diversas formas
musicales (sonata, sinfonía o concierto)
Los compositores comenzaron a escribir en una amplia gama de ritmos musicales.
Se comienzan a utilizar en las partituras las indicaciones de tempo: lento, adagio,
moderato, allegro, presto…
Aparecen las indicaciones de intensidad: pianísimo, piano, mezzopiano,
mezzoforte, forte o fortíssimo.

15
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

FORMAS MUSICALES
SONATA
Tras haberse introducido poco a poco en la música barroca, la sonata continúa su
andadura en el nuevo período. Como bien sabemos, se trata de una composición
instrumental en varios movimientos. Según su plantilla instrumental, se distinguen en la época
clásica:
Sonata solista: para un solo instrumentos (violín o piano); sonata a dúo: para
violín, flauta o violonchelo y piano.; o sonata a trío, el cuarteto y otros
conjuntos musicales de cámara.

La sonata clásica comprende 3 ó 4 movimientos:

1er movimiento, poderoso e intelectual. Rápido y con toques dramáticos e


intensos, a veces tiene una introducción lenta.
2º movimiento, lento y lírico. A veces tiene forma de variaciones.
3er movimiento (opcional), con carácter de danza (Rondó, Giga, Minué…).
4º movimiento, como final brillante, generalmente con mucho brío. Una
gran explosión de fuegos artificiales.

SINFONÍA
Heredera directa de lo que fue el concerto grosso, la sinfonía, en su forma clásica, es
una obra en 3-4 movimientos para orquesta, según el modelo de la sonata. En la sinfonía
preclásica desaparece el bajo continuo, las cuerdas cimentan su posición de permanencia y
los instrumentos de viento asumen funciones de acompañamiento. El estilo es sencillo.
La sinfonía clásica está presente sobre todo en la obra de Haydn y de Mozart.
Beethoven supera el concepto del género. Amplía la forma (fortalece los desarrollos,
incorpora la coda…) y agranda la orquesta. En la novena sinfonía introduce por primera vez
un coro y solistas vocales, entonando la "Oda a la alegría" de Schiler.

CONCIERTO
Ya hemos visto que el concertó grosso se desarrolla hacia la sinfonía. Esto ocurre,
principalmente, porque el público se decanta por la forma del concerto solista, en la que la
orquesta mantiene una dura pugna con un instrumento solo (sobre todo, el piano o el violín).
Ya sabemos que se estructuraban en 3-4 movimientos, al igual que la sonata o la sinfonía. Los
movimientos iniciales y centrales de los conciertos son de índole cantable, muy líricos y con
tiempo para que tanto solista como orquesta presenten sus “armas”, mientras que los
movimientos finales son virtuosísticos y juguetones.
Además del concierto solista existen dobles y triples conciertos (p.ej: concierto para
violín, violonchelo y piano con orquesta) pero eran menos usados.

ÓPERA

Gluck y Mozart serán los culpables de que la ópera dejara de ser terreno casi exclusivo
de las clases más pudientes. Cambian las rígidas reglas musicales operísticas y la acercan al
pueblo llano.
Frente a la denominada ópera seria (con tintes dramáticos, temas trascendentales y
grandes coros y orquestaciones) surge la más liviana ópera buffa (“burla”, en italiano), que en
lugar de hablar de dioses, emperadores y divinidades varias, cuenta cosas del carnicero, la
cerillera o el sereno y, además, se eliminan los coros, determinadas partes instrumentales y

16
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

algunas arias que alargaban la obra y resultaban, en ocasiones, un poco densas. Otra opción
era que en las óperas buffas se ridiculizaran las grandes trascendencias de las óperas serias.

INSTRUMENTOS EN EL CLASICISMO
Sin duda, la gran innovación del Clasicismo es el avance del piano, tanto por su
desarrollo técnico como por la masiva aceptación del público. Inicialmente llamado
pianoforte (por su capacidad de emitir sonidos tanto piano como forte, al contrario que su
predecesor el clave), fue inventado por Bartolomé Cristófori, a principios del siglo XVIII,
precisamente ante la necesidad expresiva de los compositores que veían cómo el
clavicémbalo no respondía a sus expectativas sonoras. A finales del siglo XVIII, el piano había
desbancado totalmente al clave.
Los instrumentos de cuerda no sufrieron modificaciones importantes, habían quedado
ya bastante perfeccionados a lo largo del Barroco, incluida la guitarra, que va sustituyendo a
laúdes, cítaras y tiorbas.
Los numerosos cambios en el diseño de los instrumentos de viento dieron como
resultado mejoras importantes en relación con la versatilidad y el timbre:

Se empezaron a introducir llaves para tapar los orificios de los instrumentos de


madera (oboes, flautas traveseras…).
Trompas y trompetas incorporaron pronto tonillos, llaves, pistones...

Estas innovaciones produjeron importantes transformaciones en la orquesta:

Flauta dulce se sustituyó por flauta travesera.


Los clarinetes se aceptaron como miembros de la sección de viento madera.
El fagot, que en ocasiones reforzaba el bajo continuo, se separó de él y se unió
a la sección de viento madera.

LOS COMPOSITORES

Ya hablamos anteriormente que los grandes iniciadores de esta nueva época que se
dio en llamar Clasicismo fueron algunos de los hijos de Bach. No obstante, seríamos injustos si
nos olvidáramos de algunos otros como Doménico Scarlatti (gran desarrollador de la técnica
para instrumentos de tecla), Christoph Gluck (junto con Mozart, el que acercó la ópera al
gran público), Niccolo Paganini (el mismísimo diablo disfrazado de violinista) y Juan
Crisóstomo Arriaga (el “Mozart español”, fallecido cuando tan sólo contaba con 20 años)

Pero, sin duda, los tres grandes representantes de este corto período de la historia de la
música son, por orden cronológico, Haydn, Mozart y Beethoven.

FRANZ JOSEPH HAYDN (1732-1809)


De origen austríaco, es quizás el más representativo de la
música del Clasicismo. Solía trabajar al servicio de un príncipe o
persona poderosa de la nobleza o la iglesia, obligado a componer
cualquier música que le fuera solicitada, aunque en unas
condiciones de trabajo inmejorables para un músico de la época.
Asentó la sonata como forma fundamental de la música
instrumental y desarrolló esta estructura al máximo con distintos
tipos de agrupaciones instrumentales. De hecho, se le considera el
padre de la sinfonía (compuso 104) y también el del cuarteto de cuerda (83).

17
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

Fue uno de los músicos más viajeros de la época y esto le permitió no sólo ser
conocido allá por donde pisaba sino que, además, se iba instruyendo con las distintas
técnicas compositivas que se empleaban en las distintas partes de Europa.
Se dice que Haydn fue un devoto católico con unas fuertes creencias y que, a
menudo, recurría a su rosario cuando tenía problemas durante la composición, una práctica
que, por lo visto, habitualmente le resultaba efectiva.
Mantuvo una estrecha amistad con Mozart y fue profesor de Beethoven.
Entre sus obras más destacadas, obviamente, se encuentran varias de sus sinfonías
(“Sinfonía Londres”, “La Sorpresa”, “La gallina”…), algunos de sus cuartetos y los oratorios “La
Creación” y “Las Estaciones”.

WOLFGANG AMADEUS MOZART (1756-1791)


Este austríaco, nacido en la ciudad de Salzburgo, es
considerado, sin ningún género de dudas, el gran genio de la
música. Todo lo que podamos decir de Mozart será vana
palabrería por ser, junto a Johann Sebastian Bach, el más grande
músico de todos los tiempos. El gran teólogo alemán Karl Barth
escribió: “Cuando en el cielo Dios reina como Dios, suena música
de Bach; cuando en el cielo hay fiesta (y el cielo es una fiesta
permanente), hay música de Mozart. Mozart es la gracia de Dios. Su
música no parece escrita por mano de hombre, sino por los
ángeles. Su existencia ha sido uno de los regalos más grandes que
Dios le ha hecho a la humanidad.”

Como casi todos los grandes genios, tuvo una vida breve (tan sólo 35 años), pero
intensísima. Niño prodigio primero, luego genio musical, recorrió todas las cortes europeas
desde los seis años junto a su hermana Nannerl. Puede que fuera la excesiva rigidez y
protección de su padre, así como ese constante contacto con un mundo de adultos lo que
no le permitiera crecer y madurar como perdona y comportarse como un niño hasta su
muerte. También es posible que por haber vivido rodeado de opulencias, renegara de ellas.
Se rebeló pronto contra el sistema de patronazgo y mecenazgo, es decir, trabajar al servicio
de un príncipe, un noble o algún alto cargo eclesiástico. Trató siempre de vivir del éxito o
fracaso de sus obras.
A pesar de que su vida era bastante desordenada, dada su naturaleza caótica e
inmadura, fue un trabajador incansable y su producción musical es francamente notable,
pese a su temprano fallecimiento. Fue un versátil compositor y escribió en casi todos los
grandes géneros, incluyendo sinfonías, óperas, conciertos para instrumentos solos, música de
cámara (entre la que se encuentran cuartetos y quintetos de cuerda) y sonatas para piano. Si
bien ninguno de los géneros mencionados eran nuevos, el concierto de piano fue casi
desarrollado y popularizado por Wolfgang.
Compuso más de 600 obras, entre las cuales destacan las óperas Don Giovanni, Las
bodas de Fígaro o La Flauta Mágica, las sinfonías nº 40 y 41 (conocida como Júpiter), los
conciertos para piano o violín, las Misas o su grandioso Réquiem (una de las obras más
monumentales y estremecedoras jamás compuestas), así como pequeñas obras para distintos
instrumentos y agrupaciones instrumentales.

LUDWIG VAN BEETHOVEN (1770-1827)

18
MÚSICA – 3º E.S.O.

Profesor: Mario López Santos

Trabajó como artista libre, es decir, como un profesional cuyas obras se publican y
venden en el mercado libre y que escribe para un público en general, para la posteridad, sin
seguir los dictados de un patrón que lo tenga a su servicio. Fue el gran culpable de la
liberación de la rigidez en las que habían caído las formas clasicistas, abriendo la música a la
libertad formal, que se convertiría posteriormente en una de las características del
Romanticismo.
Su obra es básicamente instrumental, aunque compuso obras vocales: sólo una ópera,
Fidelio, y su grandiosa Misa Solemnis.
Obras instrumentales más importantes: sonatas y conciertos para piano, cuartetos y sus
9 sinfonías.
El compositor Ludwig van Beethoven nació en la ciudad de Bonn, Alemania. Su padre
deseaba que el niño se convirtiera en un niño prodigio y comenzó a forzarlo en sus estudios de
piano y a castigarlo cuando no estudiaba todo el tiempo que su padre consideraba
necesario. En el año 1786 conoció a Wolfgang Amadeus Mozart con ocasión de visitar la
ciudad de Viena. De Mozart recibió unas pocas lecciones, así como de Haydn o de Salieri, el
eterno rival de Mozart. Para esa época, en torno al año 1792, el joven músico ya comenzaba
a sentir los síntomas de la enfermedad que lo acompañaría el resto de su vida y que puede
llegar a ser la peor tragedia para un compositor y pianista: la sordera. Su sentido del oído
comenzaba a deteriorarse paulatinamente y sin pausa.
Entre 1785 y 1815 compone casi toda su gran obra incluyendo 5 conciertos para piano
y orquesta, 32 sonatas para piano, seis cuartetos y algunos tríos y las sinfonías (incluidas las
famosas 5ª y 7ª).
A partir de 1816 compone más de un centenar de obras pero es un período en el cual
su sordera se agudiza notablemente casi hasta el punto de no escuchar nada. De esta época
es su famosa 9ª sinfonía. En1827 fallece en la ciudad de Viena, Austria.

19

También podría gustarte