Lectura Complementaria El Manual de Liderazgo

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EL MANUAL DE LIDERAZGO:

26 LECCIONES FUNDAMENTALES QUE TODO LIDER NECESITA


JOHN MAXWELL

Reseña
El experto en liderazgo y prolífico autor John
Maxwell ofrece 26 lecciones perceptivas para
líderes tanto nuevos como experimentados.
Maxwell salpica su libro con grandes citas de líderes
famosos y con cálidas anécdotas personales que
ilustran sus lecciones. Explica por qué los líderes
deben aprender de sus experiencias y de otras
personas, por qué es necesario entender a las
personas que lideran y qué exige el liderazgo. Ofrece aforismos,
herramientas y fórmulas prácticas y sencillas. Los consejos alentadores de
Maxwell, aunque no son innovadores, son confiablemente sólidos.
Recomendamos sus valiosas lecciones a los líderes con experiencia y a los
líderes nuevos en igual medida.
En este resumen usted aprenderá

 Qué rasgos constituyen un liderazgo fuerte y


 Cómo aplicar las 26 lecciones para practicar el liderazgo.

Ideas fundamentales

 Para ser un líder que vale la pena es necesario enfocarse y trabajar


arduamente.
 Todos cometen errores. Los líderes inteligentes no cometen el mismo
error dos veces.
 Los líderes deben aprender constantemente. Con frecuencia,
aprenden de la experiencia, una excelente maestra. Lo que cuenta no
son sus experiencias en sí mismas, sino cómo las manejan.
 Los líderes deben determinar la acción apropiada y llevarla a cabo.
 El liderazgo exige estar listos, dispuestos y con la capacidad para
tomar decisiones duras y sacrificadas en tiempos difíciles y bajo
circunstancias complicadas.
 Los líderes necesitan las capacidades de la gente. Escuche
cuidadosamente para aprender lo que es importante para los
integrantes de su equipo.
 Los líderes no llegan a la cima solos. Necesitan ayuda. Cuando llegue
a la cima, ayude a otros a ascender.
 Nadie puede gestionar el tiempo; puede gestionarse a usted mismo
y la manera en la que usa el tiempo.
 Evalúe sus propósitos de manera objetiva con el fin de desarrollar
autodisciplina, paciencia y responsabilidad.
 No juzgue su capacidad de liderazgo juzgando su desempeño. Lo que
importa es el desempeño de quienes usted lidera.
Resumen

Conviértase en un líder fuerte

Cualquiera puede liderar, pero para convertirse en un líder de calidad es


necesaria una vida de aprendizaje. Algunos hallazgos en liderazgo
provienen de sus errores, que suele brindar lecciones valiosas. Absorba
estas lecciones y sus errores, sin importar lo difícil que puedan parecer en
el momento. Como dijo el poeta Archibald MacLeish: “Hay solamente una
cosa más dolorosa que aprender de la experiencia, y es no aprender de la
experiencia”.

Lecciones en liderazgo

Para ser un líder, debe tener valor, asumir riesgos y aceptar la


responsabilidad. Aplique estas 26 lecciones de liderazgo, no como teoría si
no como acción práctica y apropiada:

Si está solo en la cima, hay algo que no está haciendo bien – Los líderes no
llegan a la cima solos; necesitan ayuda. Los líderes deben reciprocar y
ayudar a los que lideran a subir también. El centro del liderazgo es la gente;
por lo tanto, desarrolle las capacidades de su equipo. Camine
rutinariamente por su oficina para interactuar en persona con los
integrantes del personal.

La persona más difícil de liderar es siempre usted mismo – Los líderes no


pueden siempre verse a sí mismos objetivamente. Para obtener una
evaluación honesta, haga una lista de sus objetivos primarios y clasifique
cada uno como cumplido o no cumplido. Lleve su lista a la gente que
admira, dígale que está evaluando a los postulantes de un empleo y pídales
que califiquen a la persona que usted ha clasificado. ¿Sus calificaciones se
corresponden con el juicio que usted tiene de sí mismo? Este ejercicio le
ayuda a desarrollar autodisciplina, paciencia y responsabilidad.

Los momentos definitorios definen su liderazgo – Winston Churchill,


primer ministro del Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial,
reunió a su país contra los nazis. Los momentos definitorios en la vida
demuestran quién es uno, a sí mismo y a los demás. Cómo se maneja a
durante estas situaciones depende de las elecciones que haga en los
momentos menos dramáticos. Elija las relaciones, las prioridades y la
actitud correcta.

Cuando lo pateen desde atrás, sabrá que está al frente – Cuando lidera, la
crítica viene incluida. Para manejar la crítica, es necesario que sepa quién
es usted. Sepárese de su posición como líder. Muchas personas critican
automáticamente a los líderes, sin importar quién son o qué hacen.
Desarrolle una piel gruesa. Deje de defenderse y ocúpese de su trabajo.

No trabaje ni un día de su vida – Llegue a este estado exaltado siendo


apasionado al ganarse la vida. Como el director ejecutivo de General
Electric, Jack Welch, quien demostró que la pasión y el entusiasmo impulsan
a los líderes fuertes e inspiran a sus seguidores. Si usted no es apasionado
en su trabajo al menos la mitad del tiempo, busque un empleo nuevo.

Los mejores líderes saben escuchar –Escuchar es difícil para cualquiera,


pero particularmente para los líderes. No puede liderar a la gente si no le
entiende. Para entender es necesario escuchar. Los grandes líderes deben
ser grandes aprendices. Escuchar es la manera ideal de conseguir
información nueva. Preocúpese por escuchar y aprender de otros. Busque
las ideas y opiniones de su entorno, incluyendo las de otros líderes en su
organización.

Entre en la zona y quédese allí – Los líderes inteligentes operan a partir de


sus fortalezas. Para mejorar, concentre sus esfuerzos en sus capacidades
más destacadas. Realice una auditoría informal para determinar sus
fortalezas primarias. Enfóquese en esas capacidades específicas y en lo que
está haciendo bien. A medida que haga su auditoría, considere si su trabajo
usa totalmente sus talentos especiales. Mencione tres tareas en las que
destaca. ¿Está pasando más o menos tiempo en ellas? Si no puede
enfocarse en sus capacidades centrales, busque un cambio para pasar más
tiempo trabajando desde sus fortalezas.

La primera responsabilidad de un líder es definir la realidad – Asegúrese


de tener los pies sobre la tierra y de estar en contacto con la realidad. Para
asegurar que usted ve el trabajo y la vida con claridad, sondee la realidad
en el núcleo de cada dilema. Determine si otros ven las cosas como usted.
Si los problemas existen ¿puede resolverlos? ¿Puede distinguir los
problemas que puede resolver de los que no? Pídales a otros –personas de
afuera en las que confía– que analicen la situación independientemente.

Para ver cómo le está yendo al líder, mire a la gente – Su desempeño


individual como líder no importa casi nada al lado del desempeño de la
gente que lidera. Los líderes son responsables de los logros y fracasos de
sus equipos. Muchos factores definen el desempeño de las organizaciones,
pero la única característica que tipifica a las organizaciones más
importantes es el liderazgo de calidad. ¿Su gente cree en usted como líder?
Si no es así, no está liderando realmente. En ese caso, debe revertir esta
situación de inmediato. Trabaje en el desarrollo de relaciones sólidas con
su equipo y gane su confianza.

No envíe sus patos a la escuela de las águilas – Así como los líderes
necesitan trabajar según sus fortalezas individuales, la gente que lideran
también debe hacerlo. No ubique a los empleados en trabajos que no son
para ellos. Si trata de transformar patos en águilas, se frustrará, y sucederá
lo mismo con sus patos y águilas. Cuando necesite cubrir un puesto de
gerencia, seleccione un candidato apto, alguien conocido por las
cualidades: adaptabilidad, discernimiento, perspectiva, servicio, inventiva,
madurez, entereza y responsabilidad.

Mantenga su mente en lo principal – El principio de Pareto dice que el 80%


de los efectos deriva del 20% de las causas. Para operar con mayor
eficiencia, asegúrese de enfocar sus esfuerzos en sus preocupaciones más
importantes. Deje los temas marginales a un lado. Realice una auditoría
personal para ver cómo pasa su tiempo. Revise su cronograma y listas de
prioridades de manera que se organice para hacer lo más importante
primero y delegar lo menos importante. Maneje su tiempo para trabajar
desde sus fortalezas, no desde sus debilidades.

Su mayor error es no preguntar qué error está cometiendo – Los errores


son la parte integral de la vida. Cada error que comente puede ser una
lección valiosa. Lo esperable es que se equivoque ocasionalmente. Cuando
lo haga, entienda lo que hizo mal y cómo evitar volver a hacerlo
nuevamente. Para evitar los errores, pregunte si está pasando por alto
algún elemento crucial de la situación y esté alerta respecto de los factores
que podrían salir mal. No se preocupe por lo que sabe; preocúpese por lo
que no conoce y haga todo lo que pueda para descubrir el conocimiento
que le falta.

No gestione su tiempo; gestione su vida – No piense que puede gestionar


el tiempo. Lo que puede hacer es gestionarse a sí mismo y cómo usted usa
su tiempo. Use esta fórmula para decidir qué tareas hacer: califique la
importancia de cada tarea de uno a cinco, en la cual 1 no es importante y 5
es crucial. Clasifique la urgencia de cada tarea de 1 (a principio de año) a 5
(este mes). Multiplique la importancia por la urgencia, por ejemplo: 5
(urgencia crítica) x 4 (próximo mes) = 20. Aborde cada tarea según el orden
de su puntaje. Primero haga la tarea con el puntaje más alto y continúe
hacia abajo.

Siga aprendiendo para seguir liderando – Cada líder necesita un plan


formal para su crecimiento. Lea muchos libros y periódicos, no solo de su
especialidad. Asista a conferencias. Haga del aprendizaje su empeño.
Convertir a su compañía en un lugar que alienta el aprendizaje y el
crecimiento es una responsabilidad central del liderazgo.

Los líderes se distinguen a sí mismos durante los tiempos difíciles – Los


eventos difíciles ofrecen oportunidades especiales para construir su marca
como un líder creíble y respetado, alguien que está dispuesto a tomar las
decisiones difíciles y asumir riesgos calculados. Tendrá más capacidad para
manejar esas decisiones difíciles si toma decisiones deliberadas, incluso
difíciles, sobre temas más pequeños que enfrenta diariamente. Ir a lo
seguro no es el trabajo de un líder. Saber cuándo poner todo en línea es un
aspecto importante del liderazgo.

La gente abandona a la gente, no a las compañías – Hasta el 65% de los


empleados se va de sus firmas porque no les gustan sus gerentes. Estos
supuestos líderes lastiman a quienes los rodean. Devalúan a los integrantes
de sus equipos. O no son confiables, son incompetentes o inseguros. No sea
el líder que otros tienen que evitar. Trabaje duro para que las relaciones
con sus empleados sean lo más satisfactorias posible. Todos los días,
demuéstrele a la gente de su equipo que merece su confianza como un líder
maduro y lidérelos con responsabilidad.

La experiencia no es la mejor maestra – Lo que más cuenta no son sus


experiencias, sino cómo las maneja. Para algunas personas la experiencia
es valiosa porque brinda nuevo conocimiento e introspecciones. Otros no
aprenden nada de sus experiencias. Lo que distingue a los que aprenden de
los que no es cuánto tratan de entender y reflejar lo que han atravesado.
Este paso vital –análisis reflexivo– transforma la experiencia en un
entendimiento nuevo. Conviértase en un verdadero estudiante de la
experiencia. Cuando algo significativo ocurra, registre el evento y lo que
aprendió de él. Piense cuidadosamente en el significado de cada paso.

El secreto para una buena reunión es el encuentro anterior a la reunión –


Reúnase antes con la gente importante que asistirá a una reunión decisiva
para asegurarse de que todos estarán trabajando desde el mismo lugar. Así,
tiene una oportunidad de asegurar la aceptación de lo que se hará en la
reunión principal. Estos encuentros previos también ayudan a mejorar su
influencia.

Sea un conector, no se dedique solamente a escalar – Los líderes son


personas que buscan escalar por naturaleza, son ambiciosos, agresivos y
competitivos. Recomendar a los líderes nuevos que no asciendan es una
pérdida de tiempo. En cambio, debe explicar cómo los líderes deberían
trabajar para labrar su camino hacia la cima haciendo un gran trabajo y
estableciendo conexiones significativas a lo largo del camino. Tales
conexiones aseguran la lealtad de aquellos cuya ayuda necesitará para
liderar efectivamente.

Las elecciones que haga, lo hacen a usted – Las elecciones que hace definen
quién es usted, qué es importante para usted y los valores que representa.
Después de su decisión, sus resultados dependerán del camino
seleccionado y de sus consecuencias. Cada elección lo cambia. Tome sus
decisiones con cuidado y evite aquellas que contradicen sus valores.

La influencia debe ser prestada pero nunca dada – Los líderes ganan
influencia a lo largo del tiempo. La influencia es un bien valioso. Maneje su
influencia para ayudar a aquellos que no la tienen, como hizo Martin Luther
King Jr. durante la era de los derechos civiles. Tenga cuidado cómo consume
su influencia. Trate este bien intangible como algo que usted presta, no que
regala. Asegúrese de obtener una buena ganancia de esta transacción.

Por todo lo que consigue, hay algo que deja – Para liderar, es necesario
tomar decisiones difíciles. Durante la guerra civil de EE.UU., los asesores del
presidente Abraham Lincoln le advirtieron que no agregara otros 500.000
soldados al ejército de la Unión. Dijeron que de hacerlo, su reelección sería
imposible. Lincoln respondió que las tropas adicionales eran esenciales para
el éxito de la guerra. Siga el rumbo que eligió con valentía.

Los que empiezan el viaje con usted suelen no terminarlo con usted –
Como líder, sus relaciones con los integrantes del equipo deben ser
importantes para usted. Sin embargo, cuando la gente se vaya, no lo tome
como algo personal. Así es la vida. Siga seguro en su liderazgo.

Pocos líderes son exitosos a menos que mucha gente quiera que lo sean –
La próxima vez que mire una película, preste atención a los créditos al final.
Pasarán docenas de nombres; cada persona contribuyó en algo con la
película a su forma. Sin esas colaboraciones, la película no existiría. El
liderazgo sigue la misma dinámica. No puede ser un líder efectivo sin la
ayuda de otras personas, incluidas las personas que usan el tiempo de
manera eficiente, a los que les encanta colaborar, los que inspiran su
pensamiento y muchos más.

Solo hay respuestas para las preguntas que plantea – La gente suele
rehusarse a preguntar porque no quiere mostrarse mal informada. En
realidad, los que saben, lo respetan cuando hace preguntas inteligentes.
Pida las respuestas que necesita. Hacer las preguntas correctas y aprender
las respuestas correctas es crucial para su éxito. Antes de recurrir a las
preguntas para obtener la información que necesita, considere su marco de
trabajo. Pregúntese si está haciendo lo que debe hacer para ser un buen
líder. Recuerde: primero lo primero.

La gente resumirá su vida en una oración; elíjala ahora – Una vez que se
vaya, ¿Cuál será su legado? Empiece a pensar en ello ahora. Solo tiene una
oportunidad de crear su legado diariamente a través de sus acciones.
Absorba y viva estas lecciones para asegurarse de que está siguiendo el
camino correcto. Elija cómo la gente lo recordará.

Aplicación práctica

Para los líderes novatos: ahora que estudió las 26 lecciones de liderazgo,
póngalas en práctica en su vida. Esto es esencial para su desarrollo del
liderazgo. Sea completamente intencional en este proceso. Trabaje duro en
ello. Siempre siga aprendiendo. Para los líderes experimentados: muchas
de estas lecciones reflejan lo que usted ya sabe. Transmítalas para ayudar
a los líderes jóvenes a desarrollar su potencial total.

Sobre el autor

John C. Maxwell es un autor de best sellers, instructor y orador. También


escribió Buenos líderes hacen grandes preguntas y A veces se gana, a veces
aprendes entre otras exitosas obras.

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