Justin Bieber - I'll Never Let You Go TERMINADA
Justin Bieber - I'll Never Let You Go TERMINADA
Justin Bieber - I'll Never Let You Go TERMINADA
Novela adaptada.
#____
Se convencía de que algún día llegaría a ser todo lo buena que sus padres
querían que fuera. Confiaba en que algún día llegaría ese tan esperado “Muy
bien ____”, tenía que llegar, ellos eran sus padres.
Desde que empezó a tocar el piano con tan solo 6 años, siempre había
intentado llamar la atención de sus padres con ello. Se cansaba de oír a todo el
mundo repitiendo: ¿Sólo 6 años? ¡Pero si es un bebé! ¡Qué bien toca! Había
recibido millones de halagos, pero nunca de quien hubiera querido recibirlos.
Ella no se consideraba especial, solo perseverante. No era buena, no de manera
innata al menos, pero si había conseguido ser la mejor a base de no rendirse.
Aunque de momento no le hubiera servido de nada.
Solía preferir no darle muchas vueltas a su situación familiar. Su familia llevaba
muchos años siendo una de las más importantes y ricas del país. Los Mahone
eran mundialmente conocidos, esta claro que en su círculo social, pero
conocidos mundialmente al fin y al cabo. Tenían muchas empresas y muchísimo
dinero, muchas de todas esas cosas que a ____ no le interesaban. No obstante
sabía que siempre iba a estar vinculada a ellas.
Por eso prefería pasar el verano sola en casa tocando el piano. En realidad
nunca estaba sola. Tenía 17 años y seguía teniendo niñera, pero no podía
quejarse de ello, Vanessa era su única amiga, era la única persona que la
alentaba y le demostraba que la quería. De no ser por ella nunca hubiera tenido
ni un ápice de confianza en si misma y tampoco es que Vanessa pudiera
conseguir mucho…
#Justin
El día era realmente agobiante. Y él castigado… para variar. Lo que más rabia
le daba es que a sus padres no les importaba, pero la cosa era no dejar que el
régimen dictatorial de esa mansión se tambaleara, aunque fuera a costa de que
el pequeño de la familia muriera de aburrimiento tirado en la cama. Calor desde
luego no pasaba, para algo existía el aire acondicionado. Pero el simple hecho
de pensar en lo bien que lo estarían pasando sus amigos en el club le ponía de
mal humor y le impedía disfrutar de cualquiera de los lujos de los que disponía
en su cómoda habitación.
- Pattie: (Abriendo la puerta sin tocar) ¿Puedes dejar de tocar las narices
Justin? La pelotita me esta poniendo de los nervios…
- Justin: (Dejando de tirar la pelota) Si alguien que yo me sé me dejara ir al
club…
- Pattie: ¡No seas insolente mocoso! Sabes que estas castigado con motivos…
Además, tienes una pista de tenis en el jardín, no sé que necesidad hay de
aporrear las paredes.
- Justin: (Resignado) Vale si… Ya he parado mamá.
- Pattie: Y no vuelvas a molestar en cuanto me vaya. Tu padre esta reunido en
la biblioteca y le tiene que estar molestando…
Y tras esa última advertencia salió de la habitación dejando otra vez a Justin
solo.
La noche anterior había llegado media hora tarde… ¡Media hora! Y ahora no
podía pisar la calle en todo el día. Tenía 17 años… No tendría que tener ni hora
para volver a casa, pero así era su vida… Horarios, toques de queda,
obligaciones. Sabía que sus padres estaban especialmente susceptibles porque
él había empezado a juntarse con un grupo de chicos que, a pesar de ser del
bendito club en el que sus padres habían querido que se relacionara desde que
tenía uso de razón, no eran del agrado de su familia. No se atrevían a prohibirle
que saliera con ellos porque podía suponer problemas entre familias.
Una vez Justin había oído a su nana decir que en las peluquerías de ricos
también se cotilleaba. En el momento no había sabido por donde coger la
frase… Ahora podía darle toda la razón.
De todas formas Justin no se dejaba manejar tan fácilmente. Como muy bien le
habían enseñado sus padres… Sabía mantener las apariencias, pero ¿cumplir al
pie de la letra todos los castigos que le imponían? ¡Nunca! A veces se sentía
mal pensándolo, pero nunca había cumplido ningún tipo de castigo en su
totalidad. Podía pasar tardes enteras en su habitación, o por casa sin hacer
nada concreto… Pero saber que estaba castigado le hacía sentir la imperiosa
necesidad de salir y siempre lo acababa haciendo. Consideraba que lo que
hacían sus padres con él no era ponerle los límites necesarios en un joven, eran
simplemente ganas de demostrar quien llevaba la batuta en ese concierto.
Dudaba mucho que en algún momento apareciera algo en su vida por lo que
llegara a enfrentarse a sus padres, pero con sus pequeñas rebeldías conseguía
sentirse algo mejor consigo mismo.
#ONE
- - - Justin
Puso cara de fastidio al leer el remitente del mensaje que acababa de recibir al
móvil. Desde luego cuando tenía que tenerlas todas en contra, ¡no faltaba ni
una! Llevaba meses detrás de esa chica y justo hoy venía a decidirse… Le
daban ganas de mandarla a tomar viento solo por inoportuna, pero en vez de
eso tendría que inventarse una excusa para poder posponer la salida… Al
menos hasta esa noche. Antes no iba a poder escapar, y decirle que estaba
castigado era algo que no pensaba hacer ni soñando.
Llegó la noche. Y como ya había hecho miles de veces, saltó al árbol que había
enfrente de su ventana y bajó sin ser visto. A veces pensaba que era imposible
que sus padres no supieran nada de sus escapadas, pero sabía que de
sospechar algo ese árbol sería la primera víctima.
- - - ____
Entró exasperada en su habitación. Ella no podía mostrar su enfado, no con sus
padres delante, no hacia ellos; por eso tenía que contenerse de dar un portazo
que dejara la puerta giratoria, aunque fuera eso lo único que sentía podía llegar
a quitarle algo de toda la bronca que había acumulado durante la cena.
Normalmente se aislaba de las aburridas conversaciones de sus padres y comía
lo más rápido posible para que le permitieran ausentarse. Se suponía que lo de
ausentarse de la mesa era una excepción, pero sus padres no parecían haber
notado que eso era lo que hacía ____ noche tras noche. Salvo esa vez. El tema
de conversación era ella, y muy amablemente le habían pedido opinión…
- Teresa: ¿Enserio no te interesa ningún chico ____ita?
¿____ita? Eso era todo demasiado surrealista. Nunca les había importado lo
más mínimo si su hija tenía amigos o no, si tenía pareja o dejaba de tenerla y
ahora…
#TWO
- Santiago: Tranquila ____… Entiendo que tus estudios sean la prioridad, pero
bueno… Para algo esta el verano. En el club se celebran muchas fiestas en esta
época. La mayoría de las chicas de tu edad ya están prometidas pero…
- Teresa: Santiago por favor…
- Santiago: Teresa, nuestra hija es bonita, no tendría porque quedarse soltera…
- Teresa: Pero si es una nena…
- Santiago: Es ya una mujer. Y como tal debe empezar a comportarse.
¡Ah perfecto! Resulta que hasta ahora había estado haciendo el papel de potus
en casa ¿o qué? Y ella sin saber que pertenecía al sexo femenino… Menos mal
que estaba su padre para informarla, sino ¿qué sería de ella?
La chica en cuestión no vivía muy lejos de él. Esa zona no era una urbanización
con todas las letras, pero había una considerable aglomeración de caserones y
mansiones de familias importantes en relativamente pocos kilómetros a la
redonda.
Paseaba de vuelta a casa cuando empezó a oír un piano. Se fijó en la gran casa
de la que salía el sonido. No tenía pinta de estar teniendo lugar ninguna fiesta…
Además dudaba que su madre no hubiera comentado nada de ser así. Se fijó
en las ventanas de la parte superior y solo una tenía la luz encendida. En
realidad era un balcón, y estaba abierto de par en par, por eso el sonido
llegaba tan bien a la calle.
Justin se quedó unos minutos escuchando. Fuera quien fuera parecía tocar con
mucha rabia. Nunca había oído un piano sonar así, le había costado reconocer
el instrumento fuera de las típicas piezas que se tocaban en las cenas de gala
que estaba acostumbrado a presenciar. Pero era un piano, no le cabía duda. Y
no solo no lo estaba tocando ningún inexperto, sino que era la primera vez que
consideraba que un bicho de esos emitía realmente música decente y no tristes
canciones de cuna.
Sin haberlo reflexionado mucho se vio subiendo por la enredadera que llevaba
hasta ese balcón, tras haber saltado la gran verja que rodeaba la casa. Llegó al
balcón y apoyó su espalda contra la pared. Se iba a meter en un buen lío si lo
pillaban. El angelito que debía estar durmiendo, allanando una morada ajena,
menudo papelón para los Bieber. Mejor que no lo pillaran.
Siguió quieto sin atreverse a asomarse. Esa música lo tenía muy entretenido.
Era realmente buena o al menos a él le gustaba. Aunque sobretodo le intrigaba
quien podía estar tocando algo así. Esa libertad de expresión no abundaba en
su mundo. Se asomó con cuidado de no ser descubierto y la vio.
#THREE
---
Justin se quedó totalmente alucinado con el grito que había pegado el padre de
la chica al entrar. No había podido verlo. Se había atrevido a asomarse lo justo
para observar a la virtuosa del piano, pero al ver la forma violenta en que se
abría la puerta, había vuelto a pegarse mucho a la pared, intentando casi
desaparecer, pero a la vez sin atreverse a irse. Algo le decía que ese hombre
podía comportarse de manera violenta y en ese caso no le iba a importar ser
visto.
La había observado durante pocos minutos, pero le había parecido una chica
especial. Desde luego tocaba muy bien el piano, y aunque no había podido
verla muy bien era una chica bonita. Era delgada y llevaba el pelo a la altura de
los hombros, un castaño algo cobrizo… Estaba sentada y no sabía como sería
de alta, pero aparentaba tener la misma edad que él, o quizá fuera algo
menor… con las chicas de ahora no se sabía.
Se arrinconó más en el balcón al notar que los pasos del hombre se acercaban
a él. Ya estaba, lo habían pillado… Podía rezar todo lo que se supiera que nada
lo iba a salvar de un verano de terror en una escuela militar. Cerró los ojos con
fuerza… pero no pasó nada. El hombre cerró las puertas del balcón y ni se
percató de la presencia del chico. Siguió gritándole a su hija…
- Santiago: ¡Encima con las ventanas abiertas! ¡Para que te oiga todo el
vecindario el ruido que metes! Molestas ¿lo sabías?
- ____: Papá yo…
- Santiago: ¿Tú qué? (Y poniendo los ojos en blanco) Tú eres una consentida…
eso pasa. Tu madre te deja hacer lo que te da la gana y claro…
____ no pudo con eso. Si tan mala hija era, al menos que apechugara con su
culpa, ahí las cosas se habían hecho a medias… Ella no era una pelota de ping
pong a la que mandar al otro lado de la mesa cuando les viniera bien.
- ____: ¡Joder lo siento! Tampoco…
- Santiago: (Atónito) ¿Cómo? No ____… A mí no me hablas así.
Justin repitió para sí mismo: ____. Así que ese era el nombre de la chica.
#FOUR
____ lloraba desconsolada y solo tocaba por camuflar su llanto. No tocaba nada
que pudiera llamar la atención de sus padres, así que sabía que no la iban a
molestar… Hasta que empezó a oír pequeños golpes en el cristal del balcón. No
dudó en levantarse a ver que pasaba. Abrió el balcón y salió a asomarse.
Justin al verla salir se acercó a ella y le tapó la boca con fuerza. La chica no
tardó en revolverse e intentar golpearle en sus partes, pero Justin ya había
previsto la situación y supo esquivarla. La chica era bastante más bajita que él,
al menos diez centímetros. La aferró con fuerza a su cuerpo y esperó a que
dejara de moverse.
____ movía los ojos con nerviosismo intentando ver al posible ladrón o
secuestrador… Cualquier cosa pasaba por su mente en esos momentos. Pero el
chico estaba colocado justo detrás de ella. Justin acercó su cara a la de ella y
sin destaparle la boca le susurró al oído.
- Justin: Antes de gritar dame dos minutos para que te explique quien soy…
Después haz lo que mejor te parezca ¿si?
____ negó con la cabeza. Toda la ropa del chico era de marca, pero entonces…
¿qué hacía en su balcón?
- ____: (Pasando de la mano del chico) Esto… ¿Te has fijado en donde te
metías?
- Justin: (Con media sonrisa) Sé que no vivo aquí. ¿Era esa la broma?
- ____: No bromeo. ¿Te has fijado en el cartel de la entrada? En la puerta.
#FIVE
Justin se quedó callado y serio. Estaba claro que ella esperaba alguna reacción
en especial al decir su apellido, pero a él le había resultado poco menos que
indiferente. Quizá era un apellido algo rimbombante, pero no más de los que
estaba acostumbrado a oír. ¿Qué pretendía decirle con él?
Justin se quedó más descolocado aún. Esta bien, no la conocía de nada, nada le
decía que no fuera exactamente igual al resto de chicas con las que estaba
acostumbrado a tratar. Una niñita presumida y malcriada, pero… ¿Por qué tenía
la impresión de que ella era diferente? ¿Por qué no podía entender esos aires
pretenciosos y la ofensa por no ser conocida?
Justin abrió mucho los ojos ante esa noticia. ¿Su padre tenía alguna clase de
enemigo? Esa era la primera noticia que tenía al respecto… Y no era un
enemigo suelto, era toda una familia.
____ se quedó callada. La ponía mal pensar en como le había gritado su padre
hace escasos minutos. Hubiera seguido llorando de no ser por la oportuna
intervención de Benja.
____ se rió y cuando Justin había pasado una pierna por encima de la
barandilla del balcón y se disponía a bajar…
____: (Acercándose y poniendo una mano sobre la suya) ¡Para! ¿No prefieres
bajar y salir por la cocina?
#SIX
- Justin: Me verían.
- ____: No tranquilo. De eso me ocupo yo. Y además… (Dijo asomándose al
balcón) ¿Cómo has burlado a Pumbe?
- Justin: (Aún medio colgado del balcón) ¿Perdón?
- ____: Hay un doberman dando vueltas.
- Justin: Jaja… No, he tenido la suerte de no cruzármelo y menos mal.
- ____: (Tendiéndole otra vez la mano) Entonces sube, te aseguro que la virgen
no se te va a aparecer dos veces en la misma noche. Porque no haberte
encontrado con Pumbe puedes considerarlo un milagro.
- Justin: (Una vez en el balcón) Por cierto… ¿Pumbe? Parece más nombre de
perro patada que de un doberman.
- ____: (Sonriendo) No podía estar más de acuerdo… Pero yo no tuve ni voz ni
voto. (Y entró a su habitación)
Justin sonrió algo más aliviado y siguió a la chica. El paseo por la casa hubiera
sorprendido a cualquier persona común y más si alguna de todas esas obras de
arte llevara su etiqueta con el precio. Pero para Justin era todo demasiado
familiar.
Justin le regaló una última sonrisa y salió de aquella enorme mansión. Aunque
fuera por la puerta del servicio.
---
Llegó a su habitación. Cuando ya había entrado y se disponía a cerrar la
ventana, alguien encendió la luz.
Los ojos del chico se abrieron como platos. Lo acababan de pillar in fraganti.
Empezó a pensar con rapidez, necesitaba una excusa antes de enfrentarse a
quien le hubiera descubierto, daba igual que fuera su padre o su madre.
#SEVEN
- camarera: (Acercándose y con gesto muy duro) Mira CHICO, más respeto
¿ok? Tengo nombre (Y se señaló una chapa que llevaba en la camiseta). Si
quieres lo usas y sino, abstente de dirigirte a mi ¿estamos?
Chaz la miró con odio, pero la chica se lo estaba pasando realmente bien.
Llevaba tres días trabajando allí y el morenito ese no había dejado de faltarle el
respeto en cada ocasión que había tenido. Se había hartado.
---
Abrió los ojos y lo primero que vio fue esa estantería llena de trofeos y
diplomas. Recordó la noche anterior y volvió a sentirse mal.
#EIGHT
____ sabía que no era lógico, pero su corazón mandaba en ciertas situaciones,
y desde luego entre Vanessa y su madre… Sabía que quien nunca la engañaría
era Vanessa.
Vanessa se quedó cohibida ante la situación. Apreciaba a ____ más que a nadie
en esa casa y odiaba que la ignoraran constantemente, pero no podía
enfrentarse a los señores… por mucho que le doliera mentirle a la pequeña.
Llegó el día de la fiesta de cumpleaños de su padre. ____ estaba muy nerviosa.
Ella normalmente en esas fiestas daba un par de vueltas y desaparecía hasta la
cena. En esa ocasión no solo no podía hacer eso sino que iba a llamar la
atención de todo el mundo tocando el piano. No era el primer concierto que
daba, eso no la ponía nerviosa, carecía de cualquier tipo de confianza en su
persona, pero no si de tocar el piano se trataba, salvo en esta ocasión; su
padre era el tribunal más duro al que podía haber soñado plantarse nunca. Y ya
no lo hacía por él… Ahora su único interés era demostrar que se tomaba el
piano en serio, y que realmente se merecía poder continuar profesionalmente
con él.
#NINE
- Pattie: Llegas tarde Justin. Sabes que en esta casa se cena a las ocho.
Justin miró su reloj algo sorprendido. Hubiera jurado que llegaba a tiempo. Al
comprobar la hora su rostro se tensó por la rabia… 20:03. Las cosas en esa
casa estaban cada vez más insoportables, pero sabía que era mejor contenerse
y no contestar.
Justin estuvo toda la cena moviendo las verduras en el plato. No tenía hambre
y el trato de su madre lo había dejado de muy mal humor. Como siempre sus
padres lo ignoraban. Él lo prefería así, pero sabía que si Nana veía que no había
probado bocado se iba a preocupar. A él no le gustaba hacerla sentir mal… A
veces parecía ella su verdadera madre, no solo por como se comportaba sino
por los sentimientos que despertaba en Justin.
Justin se levantó enfadado de la mesa. Para una vez que se le ocurría intervenir
en la conversación… ¡En menuda hora!
Se fue y pudo oír a su madre gritando en un último intento de que todo fuera al
ritmo que ellos marcaran, “Justin a tu habitación”. ¿A dónde iba a ir? A veces su
madre parecía un maniquí sin cerebro.
La imagen de la chica bailaba en su cabeza. La verdad es que tenía que ser una
persona muy agradable. Era el tipo de persona que le gustaba a Justin, le había
ayudado sin él pedírselo, y a pesar de la situación en la que se habían conocido,
no solo no había gritado, sino que tampoco había hecho excesivas preguntas.
Justin no creía que pudiera sentirse atraído por ella, eso a él siempre le pasaba
a primera vista, pero esa chica podía ocupar un buen papel de amiga. Había
sido tan agradable. Dentro de las inmensas similitudes que tenía con la gente
de su entorno, era lo más opuesto a él que había conocido nunca.
No entendía como una chica así necesitaba que le dieran una fiesta para
encontrarle marido. Sentía que eso a ella le iba a molestar mucho, aunque ella
debía haber accedido a que se diera esa fiesta en su honor.
#TEN
____ estaba haciendo muy mala sangre en esa fiesta. ¿De verdad creían que
era tan ingenua? Era imposible que todos sus amigos tuvieran solo HIJOS, no
había una sola chica de su edad en esa fiesta. Todos los jóvenes tenían entre
17 y 20 años, o al menos no aparentaban más. ____ tampoco se molestó en
conversar con ellos para averiguarlo. Estaba demasiado furiosa, no pensaba
que sus padres hablaran tan enserio en cuanto a que tenía que
comprometerse.
Intentó librarse de tener que tocar ante todo ese público, pero su padre no
quiso ni oír hablar del asunto. Parecía que estuviera en subasta y tuviera que
demostrar sus habilidades cual perro amaestrado.
Nunca había llamado la atención de los chicos, pero estaba claro que ser la
única chica soltera de esa fiesta le daba cierta ventaja. Estaba algo apabullada
entre tantos chicos que intentaban agasajarla, pero la única razón por la que no
había salido corriendo era justamente uno de esos chicos: Cory Roberts. Era
quizá el único chico que alguna vez en su vida había conseguido llamar su
atención. Era guapo pero no en exceso y era muy agradable. Sus padres eran
muy amigos de los Mahone, y a causa de eso había coincidido con él en
muchas ocasiones desde que tenía memoria. Siempre había dado por hecho
que tenía que tener muchas pretendientes y él solo la había tratado como una
amiga. Le sorprendió de sobremanera verlo en esa fiesta, y al igual que los
demás… totalmente pendiente de ella.
---
Justin llegó a la entrada de esa gran casa. Desde luego la impresionante
aglomeración de coches en las cercanías de la mansión le permitía hacerse una
idea de la magnitud de la fiesta…
Repitió lo mismo que hizo la primera noche que quiso acercarse a esa casa.
Ahora estaba advertido sobre Pumbe, pero confiaba en que con tanta gente
entrando y saliendo al jardín el perro estuviera bien atado.
Estaba en el balcón, pero no se atrevía a pasar a la habitación de la chica. Ella
no estaba, pero el balcón estaba abierto de par en par. No quería perturbar la
intimidad de la chica, prefirió esperar fuera. Tampoco hacía frío, y podía
entretenerse viendo a la gente entrar y salir al jardín. Había muchos de los
chicos de su clase y otros muchos conocidos del club.
_____ fue anunciada por su propio padre. Se sentó ante el piano y una sala
abarrotada de gente en el más absoluto de los silencios. Pensó en decir el
nombre de la pieza, pero estaba demasiado nerviosa como para hablar. Empezó
a tocar sin decir nada. Al terminar el silencio se transformó en un cálido
aplauso. _____ notó que sus mejillas se llenaban de color más de lo habitual.
No pudo evitar buscar con la mirada a su padre. Él charlaba animadamente con
un amigo y una copa en la mano, había poca gente que no aplaudía y él era
uno de ellos. Decidió acercarse a él. Algo tenía que decir, ella necesitaba que
dijera algo…
---
Notó que la puerta de la habitación se abría y se escondió un poco por si acaso
no fuera ____ quien estaba a punto de entrar.
Si era ella, pero antes de poder dar ni siquiera un paso, ella se bajó la
cremallera del vestido deshaciéndose de él.
Justin se quedó boquiabierto. ¿No se había fijado en que tenía las ventanas
abiertas de par en par? Pero que bonita era. La observó mientras ella se ponía
un pantalón de pijama y una camiseta de tirantes algo transparente. Estaba
demasiado sexy para el gusto de Justin. Había ido allí con la intención de hablar
con ella, no había pensado en ella como una chica realmente, sino como una
amiga. El hecho de ver como la chica se acercaba al balcón lo hizo salir de sus
pensamientos.
#ELEVEN
____ pegó un pequeño brinco y se tapó la boca para no gritar. Antes de poder
preguntarse que hacía allí otra vez ese chico, empezó a avergonzarse por su
vestimenta…
- ____: (Cruzando los brazos por debajo de su pecho en un vano intento por
taparse un poco) ¿Esto se va a hacer costumbre?
- Justin: (Con media sonrisa) ¿Te he molestado?
- ____: (Devolviéndole la sonrisa) No… pero… ¿me has visto?
- Justin: (Haciéndose el despistado) Si te he visto ¿qué?
- ____: Nada… déjalo.
- Justin: Veo que había fiesta. (Mirando de reojo al jardín)
- ____: Si. El cumpleaños de mi padre.
- Justin: (Alzando una ceja) ¿Segura?
- ____: Si… 45 años ¿por?
- Justin: Eso no ponía en la invitación.
- ____: ¿Invitación? (Y algo molesta) ¿Tú que pasa? ¿Además de allanar mi
balcón te dedicas a robar correo?
- Justin: No… Pero mis padres comentaron que…
- ____: ¿Tus padres? Perdona pero…
- Justin: (Poniendo los ojos en blanco) Ya… No se hablan con los tuyos. Lo sé,
pero me habían invitado.
- ____: ¿Y se puede saber por qué teniendo invitación no entras por la puerta
como todo el mundo?
- Justin: Porque no he venido a la fiesta. He venido a verte a ti.
____ sonrió con todo su esplendor y estuvo tentada de reírse. Justinla miraba
algo embobado. Esa chica le parecía más y más guapa por momentos.
- Justin: Oye… lo siento pero estoy muy perdido. Hoy he comprobado que no
me mentiste… Tenías que ver como se ha puesto mi padre cuando le he dicho
que te conocía.
- ____: (Con los ojos como platos) ¿Saben que estuviste aquí?
- Justin: (Negando agitadamente) No, no… Me matarían. Pero le he dicho que
te conocía. Me ha prohibido acercarme a ti (Y buscó los ojos de la chica que
miraban al frente)
- ____: (Girándose para mirarlo también) ¿Y qué haces aquí?
- Justin: ¿Qué dirían tus padres si te vieran conmigo?
#TWELVE
Justin la miró algo triste. Eso, exactamente eso le pasaba a él, pero… Sonaba
tan mal dicho en alto. ¿Cómo no iban a quererte tus propios padres? Eso
parecía una contradicción en si misma, pero él también lo tenía cada vez más
claro. Intentó cambiar de tema.
____ se rió mientras Justin la miraba satisfecho. Había conseguido que obviara
un poco el tema de sus padres, algo que claramente, le hacía mucho daño.
- Justin: ¿Y en el club?
- ____: Suelo ir con una chica.. Annie. No sé si la conocerás.
- Justin: ¡Si! Va a mi clase… bueno, ha ido hasta este año. Es muy buena chica.
- ____: Si… Pero no es como con mis amigas del colegio.
- Justin: Bueno… Con ellas compartes todo, es normal.
- ____: Ya… Pero se hace raro. ¿Sabes que es no tener nadie con quién hablar?
- Justin: Te entiendo.
- ____: A veces son tonterías pero… Hoy por ejemplo necesitaría que
cualquiera de ellas estuviera aquí.
- Justin: ¿Por?
- ____: ¡Bah nada! Una tontería como te he dicho.
- Justin: Suéltalo… (Y haciéndole cosquillas en un lateral) Te mueres de ganas..
- ____: Jajaja… ¡Para! Bueno. Pero tú no eres una chica.
- Justin: Eso ya lo sabía, gracias.
- ____: Lo siento. No quería ofenderte solo que…
- Justin: Es por un chico ¿no?
____ asintió algo avergonzada. ¿En qué momento había empezado a confiar así
en ese rubio? No sabía porque, pero se sentía extrañamente unida a él.
THIRTEEN
- Justin: Era una fiesta para encontrarte prometido. ¿Has encontrado a alguien?
¿Es eso?
- ____: (Con los ojos como platos) ¿Cómo? ¡No! Bueno. No tan así. No sé… hay
alguien que me interesa y bueno… me ha pedido una cita.
- Justin: ¿Y qué le has dicho?
- ____: Que prefería pensarlo. Es que me ha pillado enfadada con mi padre y a
punto de retirarme. No sabía que decir.
- Justin: (Asintiendo) Esta bien. Es mejor.
- ____: ¿El qué?
- Justin: (Sonriéndole) Las chicas difíciles sois más guapas. (Y antes de que
____ pudiera contestarle) Bueno… me tengo que ir. (Y se puso de pie)
- ____: ¿Vas a volver?
- Justin: ¿Me dejas?
- Justin: Entonces si… (Y le sonrió por última vez antes de descolgarse por la
enredadera que bajaba desde el balcón de ____).
---
No podía dormir. No paraba de dar vueltas en la cama. Tenía la ventana abierta
y había luna llena, la cual iluminaba de forma curiosa toda la habitación, pero
sabía que no era eso lo que le quitaba el sueño. ¿Por qué no le había
preguntado el nombre del chico? Conocía a la mayoría de los que estaban en
esa fiesta, y ahora la curiosidad lo estaba matando. Encima tendría que esperar
varios días a descubrirlo. No le había pedido su número ni nada y no quería
resultarle pesado visitándola dos días seguidos.
Le resultaba extraña esa “amistad”. Por un lado era una de las mil cosas que
hacía solo por llevarle la contraria a sus padres y por otro… Tenía la sensación
de que conocer a ____ había cambiado algo en él, aunque no supiera discernir
exactamente el que.
Al día siguiente volvió a salir pronto de casa para evitar cruzarse con sus padres
y que pudieran decirle algo por la discusión de la cena pasada. Acababa de
llegar al club cuando alguien se le acercó…
Justin le sonrió, aunque eso de “Justy” le había sonado peor que mal. La
verdad es que la chica lo había llamado un par de veces en los días que habían
pasado desde su cita, pero él había perdido el interés en ella.
#FOURTEEN
- Chaz: ¡Bieber! ¡Al fin! Venga vamos que te llevamos esperando un buen rato.
- Justin: (Encogiéndose de hombros y dirigiéndose a la chica) Lo siento, ya
hablaremos.
- Chaz: Yo no sé como te puedes haber cansado tan rápido de ella. Esta como
quiere.
- Justin: Si pero…
- Chaz: No, no. A esa rubia no se le pueden poner peros.
- Justin: Mira… Estas más de cinco minutos hablando con ella y te quieres
matar. Si no hablas de moda o zapatos parece que no entiende.
- Chaz: Jaja, no puedes ser tan exigente Justin. Las chicas están para lo que
estan, y no es hablar precisamente.
- Justin: En mi opinión es muy triste que haya descubierto todo lo interesante
de ella en menos de tres horas.
- Chaz: Y bueno… Tres horas no esta mal, con la mayoría de las mujeres
tardarías menos.
Justin se rió y decidió dejar el tema. Sabía que Chaz era un caso perdido. A él
le era suficiente con que las chicas accedieran a pasar con él la noche,
cualquier otra cosa que pudieran ofrecerle… le sobraba. Justin no es que fuera
un romántico, es más, en muchos aspectos coincidía con su amigo, y
normalmente era eso lo único que buscaba en las chicas, una noche; pero el
caso de Sara lo superaba, podía ser muy guapa, pero a Justin lo exasperaba
que fuera tan hueca.
Hacia mucho calor y los chicos estaban en la zona de la piscina. Hablaron de ir
a tomar algo y Justin pudo contar en segundos el tiempo que tardó Chaz en
ofrecerse él para ir a pedir todo a la barra.
- Chaz: ¡Chica!
Miranda estaba de espaldas a Chaz y se tomó unos segundos para coger aire y
calmarse un poco. Ese estúpido no paraba de molestarla. No había un solo día
de tregua, y encima ella no podía evitar entrar al trapo en cuanto el moreno
ese la provocaba. Hoy tenía un día malísimo, y allí estaba él para hacerlo peor
todavía. De no ser porque cada vez veía más en riesgo su puesto de trabajo,
hubiera saltado encima de él y le hubiera pegado con todas sus fuerzas.
Chaz se quedó algo cortado. Esperaba que ella volviera a intentar ponerlo en su
lugar. No se había dirigido a ella por su nombre y esta era la primera vez que
ella contestaba a algo que no fuera su nombre. ¿Le pasaría algo? Él se lo había
tomado todos los días como un juego pero… ¿podía ser que estuviera molesta?
¿Pero por qué le importaba? Chaz empezó a recitar lo que sus amigos le habían
pedido y la chica tomó nota parsimoniosamente.
Él la miraba con detenimiento. Realmente Justin tenía razón… era una chica
muy bonita. Estaba muy seria mientras servía todo lo que Chaz le había pedido.
No sabía porque le gustaba provocarla. Quizá fuera por como ella le contestaba
siempre, intentando dejarlo en evidencia y consiguiéndolo en la mayoría de las
ocasiones. Era como si hubiera descubierto un juego nuevo al que no se
cansara de jugar, pero se acaba de quedar sin compañera de juegos.
Chaz hizo un par de viajes hasta que llevó todo a las mesas. Cuando se llevaba
el último par de bebidas y aprovechando que la chica estaba cerca.
- Chaz: Gracias Miranda.
Para cuando ella levantó la vista él ya le daba la espalda y estaba a unos
metros de la barra… No pudo evitar sonreír. Desde luego ese chico no había ido
a estropearle el día, más bien al contrario.
---
- Annie: Así que Alex… No tienes mal gusto ¡eh! ____.
- ____: Pero bueno… Tendría que haberle contestado en el momento, ahora…
- Annie: ¿Qué? No, no… Lo mejor es hacerles esperar. Tú la próxima vez que lo
veas te acercas como quien no quiere la cosa y hasta que no sepas la hora y el
lugar de vuestra cita no te mueves.
- ____: Jaja… Desde luego, tú con los chicos eres única Anny.
- Annie: (Cambiando su gesto) Si vamos… Un hacha soy yo con los chicos.
- ____: ¿Zac sigue sin llamar?
- Annie: Pero me da igual ¡eh! Yo para él fui cosa de un día y él para mí
también. Solo me alegro de que no pasara nada.
- ____: ¿Nada qué? ¿No os habías liado?
- Annie: Jaja… ____, a veces eres igual de ingenua que una niña de 10 años.
Pues nada, de… Bueno, ya me entiendes ¿no? (Mirándola fijamente)
- ____: Si, si… Ya entiendo. Lo que pasa es que yo para esas cosas soy un
poco… paleta, por decirlo de alguna manera.
- Annie: Tú lo que eres es muy exigente. Que me parece bien, pero eres muy
guapa y muy simpática. La única razón de que no hayas besado todavía a
ningún chico es porque esperas al príncipe azul. Yo en cambio me dedico a
besar ranas. Alguna me dará la sorpresa ¿no crees?
#FIFTEEN
Cuando se dirigían a una mesa, ____ se giró hacia el grupo de nuevo, y Jutin
seguía mirándola. Ella amplió aún más su sonrisa. Si Annie supiera que esa
rana era lo más cercano que había conocido ____ de un Romeo.
---
- Annie: Me esta desesperando, enserio. Te juro que no te quita la vista de
encima.
- ___: Jaja, no seas exagerada. Dudo que este interesado en mi.
- Annie: ¿Por qué no?
- ____: Por lo que has comentado yo no soy lo que él busca en una chica.
- Annie: ____, eres guapa. Para Justin eso es motivo más que suficiente para
llamar tu atención. Y te aseguro que puede ser muy canso.
- ____: ¿Lo has tenido detrás?
- Annie: No. En realidad creo que soy la única amiga que tiene, en ese sentido
me cuida, pero realmente me desespera como trata a las mujeres. Su última
conquista fue mi vecina y ahora que él pasa de ella, ¿a que no sabes quien
tiene que aguantar a la descerebrada esa?
- ____: Jajaja… Me hago una idea. Así que es muy mujeriego.
- Annie: (Mirándolo de reojo) Y… lo hace porque puede. Hay que reconocer que
es muy guapo. Pero bueno, que esa cuadrilla en general. Cuanto más lejos
mejor. Son todos de mi curso y sé de lo que hablo. Justin antes no salía con
ellos. Y la verdad es que era un poco más sensato, pero todo se pega menos la
hermosura, o eso dicen.
- ____: De ese chico diría cualquier cosa menos que es sensato.
- Annie: No lo conoces ¿no?
- ____: No, no… pero se le ve.
Se giró y lo vio riéndose con Chaz. La verdad es que si era muy guapo, pero
que la forma en que se habían conocido le hiciera gracia, no quería decir que el
chico en cuestión hubiera conseguido llamar su atención. Y algo más original
que colarse en su balcón a media noche.. Dudaba que pudiera hacerlo nadie.
---
A la tarde Chaz buscó una excusa para ir al bar solo. Por alguna extraña razón
necesitaba comprobar cuan mal estaban las cosas con Miranda, intentaba
convencerse de que esa chica no le interesaba. Comprobó que las cosas habían
cambiado por completo, él intento ser amable, y ella fue lo más seca e
indiferente que le fue posible. ¿Por qué le importaba tanto? Al fin y al cabo no
era una chica más que le pudiera interesar… era una simple camarera.
Pero el bar estaba cerrado. Había uno de esos graciosos carteles de “Vuelvo en
5 minutos”. Chaz pensó que si alguno de los dueños veía aquello, el tiempo que
le quedaba a Miranda como empleada podía contarse en segundos.
Entró al bar y dio una vuelta buscándola. Pero estaba vacío. Iba a marcharse
cuando escuchó voces, en realidad solo escuchaba a Miranda pero no creía que
estuviera hablando sola. Se dirigió al almacén que es de donde provenían las
voces.
- Miranda: Vale si. Lo siento.
- Erick :…
- Miranda: ¿Y que hago? Erick yo…
- Erick: …
- Miranda: Vale… Perdón…
Chaz estuvo un rato oyendo la conversación. No se oía ninguna voz de hombre,
por lo que no era difícil deducir que estaba hablando por teléfono. Pero no
parecía la Miranda que él conocía. La chica que hablaba por teléfono era débil y
manejable. Fuera quien fuera con quien hablaba no solo no la dejaba
explicarse, sino que no paraba de hacerla pedir perdón, ¿qué tan malo había
hecho? Chaz se había perdido en sus pensamiento y no se dio cuenta que
Miranda ya no hablaba por teléfono. Al darse cuenta se volvió a asomar por la
rendija de la puerta, ¿por qué no salía?
Estaba de rodillas llorando en el suelo. ¿Por qué con Erick era todo tan difícil?
¿Por qué no podía entender que ella no podía dejar ese trabajo? No al menos si
quería poder empezar la universidad en octubre. Era un trabajo que le quitaba
muchas horas y encima le pillaba lejos de casa, al final casi vivía en el club,
pero merecía la pena. A pesar de que Erick acabara cortando con ella porque
no se veían, merecía la pena. Estaba tan concentrada en lamentarse y en su
propio llanto que se olvidó por completo de donde estaba y de las
responsabilidades que había dejado desatendidas.
Chaz se había acercado a ella y procuró tocarle el hombro con delicadeza, pero
Miranda se sobresaltó y se puso de pie automáticamente. Al verlo…
- Miranda: (Secándose las lágrimas de manera brusca) Si has venido a decirme
que vas a hacer que me echen… no te gastes, ya lo sé.
Chaz estaba algo desconcertado, volvía a ser la de siempre, la de siempre ante
él al menos. Pero ya no estaba seguro de querer solo malos tratos por parte de
ella. Sabía que estaba mal, daba igual como se pusiera, era obvio que el Erick
ese la había dejado hecha trizas con su discusión. Él quería consolarla pero…
nunca había hecho eso con nadie, cuando alguno de sus amigos se ponía de
bajón él hacía un poco el payaso y con eso despistaba la atención, pero…
¿consolar? Nunca, y a una chica… menos.
Dio un paso adelante y la distancia entre ellos pasó a ser mínima. Miranda no
reaccionó, ni se inmutó. Chaz acortó la distancia y la besó. No sabía consolar a
una chica pero se moría de ganas de besarla y confiaba en que eso no la
hiciera sentir peor…
#SIXTEEN
Algo le decía que podía fastidiarla mucho si la besaba, pero al tenerla delante y
sin la barra del bar de por medio. La sorpresa fue que Miranda no reaccionó
mal.
El beso en un principio la descolocó, pero ese chico era muy dulce, había algo
que.. Cerró los ojos y le acarició una mejilla. Él se sintió seguro con ese gesto y
la atrajo hacia él cogiéndola por la cintura. Miranda fue consciente del error que
estaba cometiendo y de forma delicada se separó de él, al fin y al cabo ella le
había seguido el juego.
- Miranda: (Retrocediendo para tomar distancia) Yo… Esto no debería haber
pasado.
- Chaz: Perdón, no quería…
- Miranda: No mira yo… Tengo novio, tendría que haberte frenado desde un
principio.
Chaz la miró algo serio. Estaba claro que por mucho que le hubiera seguido el
beso, separarse era solo una forma de rechazarlo. Con cualquier otra chica
hubiera intentado hacerse el gracioso y soltar algo eplan: “No importa que
tengas novio, no soy celoso”. Muchas habían accedido con poco más que ese
argumento, pero ella… Ella era distinta, y todavía no sabía ni siquiera porque la
había besado, ¿tanta lástima le había dado?
- Chaz: Vale… Bueno yo mejor me voy (Y se giró por completo para salir de ahí,
necesitaba alejarse de ella).
- Miranda: ¡Ey espera! (Chaz se giró) ¿Cómo te llamas? Mi nombre lo sabes
pero…
- Chaz: (Serio) Chaz, Chaz Somers.
Miranda le sonrió pero él salió sin decir una sola palabra. ¿Chaz? Ella había oído
a bastantes chicas hablar de él, al parecer era todo un rompecorazones. No
podía ser que se hubiera fijado en una simple camarera, no sabía la razón del
beso, pero desde luego no podía estar interesado en ella.
Se sentía estúpido, ¿en qué momento se le había desconectado el cerebro y se
había abalanzado sobre ella? Porque desde luego eso no lo había hecho en
plenitud de facultades. Debía alejarse de ella.
---
Varios días después ____ se encontraba en su habitación. Sola para variar y
muy pensativa. El día anterior había tenido lugar su primera cita con Alex, ella
no había tenido que esperar a acercarse, él realmente parecía muy interesado
en ella.
La cosa no había ido mal. ____ no era una experta en citas, pero con él se
había sentido muy cómoda, habían hablado de muchas cosas y la tarde se
había pasado relativamente rápido, así debía ser ¿o no? El problema había
llegado a la hora de la despedida. Todo había ido tan bien, que como se podía
presuponer, Alex intentó besarla. Ella ya se había planteado esa posibilidad, y
era algo que quería que sucediera pero… En el momento su reflejo fue
apartarle la cara.
- ____: (Girándose con una sonrisa) Así que vuelves a las andadas…
- Justin: (Entrando en la habitación de ____) ¿Siempre dejas el balcón abierto?
- ____: ¿Te crees que eres el único que me visita?
- Justin: (Riéndose) No, no…
- ____: Pensaba que te habrías aburrido de venir. Desde la fiesta no habías
vuelto.
- Justin: Ya bueno… No sabía que tuvieras tantas ganas de verme.
- ____: Ja, ja, ja… Eres un poco creído.
- Justin: No hagas caso a todo lo que diga Anny.
- ____: No si… Para saber eso no me hace falta hablar con Anny. (Y
levantándose de la butaca del piano) Ven, vamos fuera que si entran y te ven,
me matan.
- Justin: ¿No era que tenías al servicio de tu parte?
- ____: (Sonriendo) Si… Pero también tengo unos padres un poco molestos y si
me notan tranquila…
Justin salió al balcón y se sentó apoyado contra la pared para no ser visto en
caso de que alguien entrara sin avisar a la habitación de la chica. ____ lo imitó
sentándose a su lado…
#SEVENTEEN
No sabía que la había llevado a hacer esa confesión, como si él fuera a poder
hacer algo al respecto. Lo único que iba a conseguir era que se diera cuenta
que ella era un bicho raro y no una chica más.
---
Al día siguiente ____ había vuelto a quedar con Annie para ir al club. Ella no
hacía más que intentar saber como había ido la cita con Alex, pero ____ había
hablado bastante del tema con Justin la noche anterior y no quería contarle a
nadie más el hecho de que le había girado la cara al chico que supuestamente
le gustaba.
- ____: Mira, a la noche te llamo y te cuento como me ha ido con él hoy ¿si? Ya
te he dicho que no pasó nada. Pero cuéntame tú que tal con Zack ¿si?
- Annie: ¿De Zack? ¿Qué quieres que te diga? Que no ha dado señales de vida.
La verdad es que… ¡Bah! Da igual.
- ____: No Anny, cuéntame.
- Annie: (Sentándose en un banco para cortar el paseo) Y que… No fue cosa de
un día ____. O sea, si, porque él ha dejado claro que no quiere saber nada de
mí pero… No sé, con él me sentí tan bien. Hacia mucho que no estaba con
alguien así.
- ____: ¿Y no cabe la posibilidad de que haya alguna razón lógica por la cual no
te haya llamado?
- Annie: No… Razones lógicas hay los dos primeros días. Una semana después
es que pasa de ti, lo mires por donde lo mires. (Y mirando fijamente al frente)
¡Mierda! Esta ahí. Vamos ____, por favor. (Levantándose)
- ____: No pero para… Igual se acerca a hablarte o algo.
- Annie: No, no enserio. No quiero verle. Por favor vamos.
____ se levantó y complació a su amiga. Aunque pudo comprobar que Zack se
quedaba mirándolas mientras ellas se marchaban. Estaba claro que se hubiera
acercado de no ser por la repentina reacción de Annie. Una vez lejos…
- Annie: Lo que no sé, es que hace aquí. No lo había visto antes por el club. Y
su apellido… No me sonaba.
- ____: (Encogiéndose de hombros) Será un socio nuevo.
- Annie: No sé… Pero espero no empezar a encontrármelo a menudo.
---
____ tenía su segunda cita con Alex esa misma noche. La había invitado a
cenar a un restaurante bastante conocido. Ella había conseguido auto
convencerse con las palabras de Justin: “Sabes besar. Todo sabemos” ¿Por qué
no? El chico no había dicho ningún disparate, si todo el mundo puede sin que le
enseñen, ¿por qué ella tenía que hacerse tanto problema? Sólo debía seguir el
consejo de Justin… dejarse llevar, es más, pensaba seguir su otro consejo
también, y confesarle a Alex que nunca antes había besado a un chico. Si él no
esperaba mucho de ella, ella no podía decepcionarle, y si ella no podía tener
miedo a decepcionarle, la situación iba a ser menos tensa.
La velada fue como la primera vez, agradable y amena. ____ se lo había vuelto
a pasar muy bien con Alex, pero ya se estaban despidiendo en la puerta de
casa de ____ y estaba claro que él no pensaba ser rechazado dos veces por la
misma chica. ____ decidió dar un empujón a la situación…
#EIGHTEEN
---
Había estado el día anterior con ella, pero… Sabía que hoy era su cita con Alex,
y aunque quizá fuera solo por curiosidad quería saber como les iba. Quería que
ella se lo contara.
Nunca había entendido a las chicas en ese aspecto. Ese contarse todo con
detalle, hasta la mayor tontería. Pero desde luego, si hablar con el resto de las
chicas fuera como hablar con ____, no le extrañaba en absoluto.
Sus conversaciones con esa chica nunca eran comunes, aunque pensándolo
bien, tampoco sabía que era una conversación común con una amiga, salvando
a Annie, la cual era muy distinta a ____.
---
Estaba en su habitación dando vueltas. Se sentía idiota. Todo había sido un
desastre. O Justin se había reído de ella muy descaradamente, o era la única
persona en el mundo que no sabía besar. Porque estaba claro que el desastre
lo había provocado ella.
Se miraba fijamente al espejo. ¿Por qué se sentía tan rara? ¿Por qué no podía
ser una chica más? Con amigas, novios. Siempre se había cerrado tanto en sí
misma que ahora todo lo que se encontraba fuera de su burbuja era demasiado
extraño.
____ tragó con dificultad. ¿Tan evidente era? Lo miró buscando ese tono
burlesco en su mirada que le diera fuerzas para gritar y meterlo en un lío, pero
no lo encontró. Él la miraba serio. Incluso preocupado.
____ salió al balcón. Necesitaba aire y distancia con Justin. ¿Cómo podía
haberse puesto así? Fuera a reírse de ella o no, la viera como una chica extraña
o no. Él no había hecho nada, él no tenía la culpa de que a ella las cosas no le
salieran como quería. Él solo la había animado… o eso parecía.
Justin intentó sacar conjeturas antes de seguir preguntando. Estaba claro que si
se había dejado llevar, había besado a Alex pero… ¿qué podía tener eso de
malo?
- Justin: ¿Te arrepientes de haber seguido mi consejo?
- ____: No. bueno… Supongo que en algún momento iba a tener que pasar.
- Justin: ¿El qué?
- ____: Mi primer beso ha sido un fiasco.
#NINETEEN
Justin sonrió, aunque solo porque ella no podía verlo. Así que la pianista solo
estaba decepcionada, y no con él, con Alex. ¿qué tenía Justin que ver en ese
primer beso? Nada.
_____ volvió a girar para quedar de espaldas a él. Y sin saber muy bien la
razón del cambio que sentía dentro… empezó a hablar.
Justin intentó contenerse, pero no pudo evitar estallar en una sonora carcajada.
Esa chica le encantaba. Parecía tímida y reservada, pero luego era la persona
más directa y clara del mundo.
Justin la miraba incrédulo. ¿De verdad creía que todo había sido por ella o solo
quería hacerle sentir mal a él? Desde luego no lo iba a conseguir, él había
intentado apoyarla, lo que hubiera pasado con Alex ya no era cosa suya. Sin
embargo no le gustaba verla así. No sabía porque, pero verla triste si conseguía
hacerlo sentir mal.
Justin esperó un largo rato detrás de ella, pero _____ parecía tener claro que,
al menos por esa noche, todo tipo de conversación había quedado acabada. Él
no iba a dejar que se saliera con la suya, y sabía como hacerlo.
_____ no dijo nada. Solo lo miraba. Claro que estaba enfadada con él, él le
había hecho pensar que todo era fácil y bonito, y al final todo había sido un
desastre.
Justin entendió el silencio de _____. Le cogió la cara con delicadeza y la besó.
Al principio _____ se sorprendió tanto que estuvo a punto de separarse, pero
los labios de Justin intentaban saborear los suyos y ella se acabó dejando.
Ni rápido ni despacio, ni bruto ni delicado. Tampoco era un beso inocente, la
lengua de Justin no tardó en hacerse paso y buscar jugar con la de _____. Era
fácil seguirlo, sentía que sabía exactamente que hacer. Una de sus manos subió
hasta la nuca del chico y dejó que sus dedos se entremezclaran con los
mechones de él. Fue un beso largo…
Se separaron y _____ se encontró con una disimulada sonrisa por parte de él.
No era esa sonrisa triunfadora que tantas veces había visto, era tierna,
sincera… Ella estaba totalmente descolocada.
Sabía que si se iba en ese momento, todo quedaría como una anécdota entre
amigos. Ella se sentiría bien y eso era lo único que Justin buscaba. Si se
quedaba… Si se quedaba podía descubrir razones para ese beso que ni él
mismo se había planteado.
_____ se limitó a observarlo mientras bajaba hasta el jardín. Cuando llegó
abajo hizo una ridícula reverencia que consiguió arrancarle una sonrisa más a la
chica. Pero esta se borró de su cara en cuanto vio al doberman acercarse a
Justin.
No hizo falta pensar como ayudarlo. El perro no hizo amago en ningún
momento de atacar a Justin, al contrario, se dejó acariciar y _____ vio como
Justinsacaba algo de su bolsillo y se lo daba antes de irse. Quizá la rara no era
ella por no haber gritado la primera noche, quizá lo raro era lo fácil que se
hacia para todo el mundo confiar en Justin.
---
Entró en su habitación y se tumbó en la cama. No pensaba ni en dormir, ni en
cambiarse de ropa. Solo podía pensar en ella. No podía entender como se había
atrevido a besarla, así… sin decirle nada, sin previo aviso. Aunque después no
hubiera resultado tan mal el asunto-
Esa chica era realmente especial. ¿Cómo podía tomarse tan a pecho que su
primer beso no hubiera sido perfecto? Y lo más curioso. ¿Por qué aprovechaba
la mínima excusa para auto destruirse? Se dio cuenta, que a diferencia de
_____, él siempre optaba por culpar a los demás de todos sus problemas.
#TWENTY
- Annie: ¡Me pone enferma! Mira que le dije que estabas con Alex ¡eh! Pero
nada… no ha de parar.
- _____: (Girándose para mirar a su amiga) ¿Quién?
- Annie: ¿Quién va a ser? Justin. ¿No has visto cómo te sonreía? Y a mí por si
acaso ni me saluda.
- _____: No me ha sonreído.
- Annie: Jajaja… ¡Ay! _____… ¡Qué inocente eres! Has llamado su atención y
todas esas sonrisas y miraditas, se llaman flirtear. No tardará mucho en
acercarse. Se considera irresistible.
- _____: Anny. ¿Puedo contarte un secreto?
- Annie: ¡Al fin! Si. Por favor, cuéntame.
- _____: Justin no esta interesado en mí. Creeme.
- Annie: No es malo _____. Pero hazme caso en lo que digo.
- _____: No. Mira, sé que es un poco raro que nos miremos tanto y todo eso,
pero es que nos conocemos.
- Annie: (Sorprendida) ¿Y por qué no me lo habías contado?
- _____: (Con media sonrisa) Bueno… es que es una relación un tanto extraña.
- Annie: (Alzando una ceja) ¿Eso que quiere decir? Además… ¿Relación?
¿Tenéis una relación?
- _____: ¡No, no! Ha sido por llamarlo de alguna forma. Es que, bueno, hace ya
varios días, apareció en mi balcón.
- Annie: (Arrugando un poco la nariz) Apareció en tu balcón.
- _____: No sé por qué. Él dice que fue porque oírme tocar el piano llamó su
atención. Pero desde ese día ha venido varias veces más.
- Annie: ¿Se dedica a colarse en tu casa? No, si cuando le digo que perdió el
último tornillo.
- _____: (Sin mirar a su amiga) Es simpático.
- Annie: (Poniendo los ojos en blanco) No _____… Enserio, Bieber no te
conviene.
- ______: (Seria) No le llames Bieber por favor. Y tranquila, me gusta Alex… en
el aspecto en que tú estas pensando al menos, pero Justin es agradable.
- Annie: Bien, bien. Yo no digo nada, pero no te olvides que Justin es de los
que sale rana. Ahórrate el besarlo. (Y siguió andando sin darse cuenta que
_____ frenaba en seco ante ese comentario)
¡A buenas horas! Pero no importaba. Ese beso no había significado nada. Ellos
no se gustaban, eso no había sido por atracción. Había sido simplemente…
¿Qué había sido exactamente?
Desde luego… parecían dos locas. Decidió entrar a la pista de tenis y esperar a
que Annie volviera y le explicara exactamente a que había venido esa huída.
Pero no le hizo falta. Una vez en la pista se fijó en quien era el único chico
presente, el monitor de ese verano y el chico que había pasado olímpicamente
de su amiga, Zack.
_____ se dio cuenta que ese verano no iba a ser para nada como los
anteriores. En la primera semana, le habían pasado más cosas interesantes que
en toda su vida junta. Decidió no llamar ella también la atención y quedarse, al
fin y al cabo Zack no la conocía. Lo que tenía claro es que se había quedado
sola para hacer el ridículo en mini falda.
#TWENTY-ONE
Justin se rió negando con la cabeza. La verdad es que se le hacía raro pensar
en una chica que supiera negarse a su amigo, al menos de momento. Había
estado con todas las que se había propuesto, y alguna más. Pero era hablar de
Miranda y notaba como su amigo se ponía nervioso. Eso le hacía gracia.
---
Estaba secando vasos de forma monótona. Pensaba en su última discusión con
Erick. La verdad es que las cosas estaban cada vez más insoportables. Bastante
había hecho ella por esa relación como para ceder de nuevo y dejar su trabajo
solo porque él no la veía lo suficiente.
De repente se dio cuenta de que Chaz pasaba cerca del bar. Desde lo del beso
no lo había vuelto a ver por el bar. Desde luego ese chico le había creado un
problema extra. Sabía que no tenía nada que hacer con él, en realidad no
quería nada con él, pero… desde ese beso no sabía porque, parecía que su
relación con Erick le importara menos. Se comportaba diferente a la hora de
enfrentarse a él. Se envalentonaba como nunca había sido capaz de hacerlo, no
con él.
Se sentía un poco estúpida. Erick era su novio desde hacia mucho, había sido
su primer novio, su primer beso, su primer todo. Siempre había pensado que
pasaría con él el resto de su vida, y que de dejarla no iba a saber que hacer.
Chaz había conseguido cambiar eso. No quería reconocerlo pero quizá Erick no
fuera ese amor tan definitivo que siempre había creído.
---
____ entró al vestuario. Había estado buscando a Annie, pero no había ni rastro
de ella y ya no aguantaba ni cinco minutos más con esa ropa, a su parecer,
ridícula.
Annie se rió y siguió a su amiga. Tenía que olvidarse de Zack. No podía venir a
trastocarle su mundo, había sido solo un rollo más. Pues eso, ahí se iba a
quedar todo. ¿Qué importaba si ahora trabajaba en el club? Ese era su
territorio.
---
Se había ido a la azotea en su descanso de mitad de mañana. No le gustaba
mucho la gente del club. No es que no fueran agradables con ella ni nada
parecido, pero… Su sitio era el bar y detrás de la barra, fuera de ahí se sentía
muy fuera de lugar. Por eso su tiempo libre lo pasaba en la azotea del mismo
edificio donde estaba el bar. La azotea estaba acondicionada a modo de
solarium, había tumbonas, duchas. Pero nunca había visto a nadie del club
subir.
Estaba sentada en una de las tumbonas leyendo y con un botellín de agua. A
pesar de ser lo que hacía habitualmente, no se encontraba igual de a gusto que
otros días. El calor era especialmente agobiante ese día y había alguien abajo
con una risa extremadamente crispante que la estaba sacando de sus casillas…
Se levantó dispuesta a reírse de quien fuera que tuviera esa risa tan ridícula,
pero para su desconcierto, la imagen que vio no le hizo tanta gracia como
esperaba…
---
- Annie: Bueno.. Ya que Alex parece un tema tabú. Háblame de Justin…
- _____: (Mirándola de reojo) ¿De Justin?
#TWENTY-TWO
- _____: (Mirándola de reojo) ¿De Justin? ¿Qué quieres que te diga? Además,
Alex no es un tema tabú. Es un tema que no da de sí Anny, ya te he contado
todo lo que pasó millones de veces.
- Annie: Pues que aburrido es tu Alex si con dos citas no da ni para media hora
de conversación.
- _____: Jaja… Bueno, pero me lo paso bien con él.
- Annie: ¿Y con Justin?
- _____: ¡Qué pesada!
- Annie: Bueno, bueno Julieta. No te ofendas, es que a mi no se me cuelan
chicos por el balcón todos los días. Anda, dime qué te parece Justin.
- _____: (Encogiéndose de hombros) No sé. ¿Simpático?
- Annie: (Mirándola incrédula) ¿Te cae mal?
- ______: No. ¿Por?
- Annie: ¡Ay ____! Eres exasperante. No puede ser que te guste tan poco
cotillear. No pareces mujer.
- _____: (Riéndose) Igual eres tú la que tiene el problema. Justin es muy
simpático, no sé, tampoco le conozco mucho. Es muy buena persona ¿no?
- Annie: (Algo extrañada) Si. Malo no es, pero… Nunca hubiera pensado que
una chica nueva iba a definir a Justin como “buena persona”.
- _____: Es que me ayuda…
- Annie: (Alzando una ceja) ¿Te ayuda? ¿A qué?
- _____: (Encogiéndose de hombros) En lo que puede. Le gusta escucharme, o
eso parece.
- Annie: (Con los ojos muy abiertos) Lo tienes roto.
- _____: ¿Qué?
- Annie: A Justin. Que esta loquito por ti.
- _____: Enserio Anny… Cansas.
- Annie: No, no. Hablo enserio. ¿Justin buena persona? ¿Justin intentando
ayudar? ¡¿Justin ESCUCHANDO?! Ese no es Justin… creeme.
- _____: (Con una sonrisa disimulada) Bueno. Tampoco le conozco…
- Annie: ¿Cuántas veces ha estado en tu casa?
- _____: (Algo pensativa) Tres, creo.
- Annie: ¿Y de qué habláis?
- _____: No sé. Nada importante.
- Annie: Si. La paz mundial daba por hecho que no la ibas a conseguir desde tu
balcón.
- _____: (Resoplando) Hablamos de Alex, de nuestros padres. Poco más. Nunca
se queda mucho.
---
Llevaba un rato oyendo con atención la *beep* conversación. Ese chico tenía el
papel de Don Juan demasiado asumido. Aunque para el gusto de Miranda era
demasiado obvio. De todas formas, ahí solo contaba el gusto de la rubia
raquítica que tenía Chaz delante, y a ella si parecía convencerle la forma de
agasajar del chico.
Desde pequeña había sido muy metida y le encantaba molestar a la gente,
sobretodo cuando representaban esas empalagosas escenas que ella nunca iba
a llegar a entender. Esta ocasión no era diferente y en su mano izquierda tenía
la solución para estropear ese momento tan… ¿patético? Si hasta les hacía un
favor. No lo pensó más y desenroscó el tapón de su botellín de agua. Vació el
contenido intentando que le cayera a la chica en la cabeza, estropeando así en
unos segundos las horas de peluquería que la rubia había dedicado ese día.
Chaz se sobresaltó al notar que le salpicaba agua y más aún al ver a su
“amiga”, totalmente empapada. Miró hacía arriba por reflejo, mientras la rubia
le reventaba los tímpanos con los gritos. Solo vio parte de una melena oscura.
Sonrió al pensar que eso lo había hecho una chica. Otra enamorada, pensó.
Pero al bajar la vista y darse cuenta al lado de qué edificio estaban, su gesto
cambió… No podía ser ella.
- Chaz: ¿Estás bien?
- Luna: ¿Bien? ¿Tú me has visto? Esto es horroroso.
- Chaz: Bueno tranquila… Es agua.
- Luna: ¿Y podría ser peor?
Chaz sonrió al pensar varias cosas peores que el agua con las que estar
empapado. Pero decidió no decirlas en alto. De todas formas sabía que no iba a
conseguir que Luna se consiguiera afortunada de haber sido mojada solo con
agua.
- Chaz: Espera aquí un momento. Voy a ver quien ha sido.
- Luna: Me voy al vestuario. A secarme un poco.
- Chaz: (Asintiendo) Bien… Luego nos vemos.
Estaba bastante cabreado. Él intentado mantener distancias después de su
metedura de pata, y la camarera esa venía a tocarle los pies. Desde luego no
sabía con quien se estaba metiendo. Subió las escaleras lo más rápido que
pudo, nunca había estado en esa azotea; no sabía si tenía algo de uso para los
socios, ni cuantas salidas podía tener. Si no pillaba a la camarera ahí, no iba a
poder culparla de nada.
Miranda salió de la azotea con el libro y el botellín de agua vacío en las manos.
Intentaba no reírse para no parecer una loca, pero la escena había sido mucho
mejor de lo que hubiera imaginado en un principio. Al bajar el primer tramo de
escaleras se detuvo en seco. Él estaba ahí de pie, con los brazos cruzados en el
pecho y cara de muy pocos amigos.
#TWENTY-THREE
---
_____ estaba sentada en un banco. Había arrancado un par de hojas de un
arbusto y jugaba con ellas. No se había alejado mucho de Annie y Zack; el bar
estaba cerrado y prefería que su amiga pudiera encontrarla pronto…
_____ se rió y no quiso explicarle a que se refería con eso. Justin sabía de
sobra a que se refería Annie cuando calificaba a un chico de “rana”, pero lejos
de ofenderle, algo dentro de él saltó de alegría al pensar que Annie le había
dicho a _____ que él era un poco rana, eso quería decir que _____ había
planteado algún tipo de interés por él. Aunque su querida amiga se hubiera
encargado de hacerle mala fama.
---
- Chaz: ¿No piensas decir nada?
Habían pasado varios minutos mirándose fijamente. De no haber sido por la
tensión del ambiente eso hubiera pasado por un juego de niños.
- Miranda: ¿Tengo algo qué decirte?
- Chaz: ¿Perdón por empapar a tu chica quizás?
¿Su chica? ¿Tenía novia? Y lo que era peor. ¿Su novia era “eso”? No es que
tuviera una muy buena imagen creada de él, pero por lo poco que les había
oído hablar hubiera jurado que esa chica no podía ser nada serio. No daba la
sensación de saber mantener una conversación medianamente normal más de
cinco minutos seguidos. De repente le vino otra duda a la cabeza. ¿Por qué él
no había aprovechado a hablarle de su novia cuando ella le habló de Erick?
- Chaz: (Enfadado) ¿Lo vas a meditar mucho rato más? No tengo todo el día.
Espero una disculpa.
- Miranda: Perdona, pero no sé de que me hablas.
- Chaz: (Frunciendo el ceño) Mira… No te hagas la tonta. Luna no te ha visto,
pero yo si y te aseguro que ella no se conformaría con una simple disculpa.
- Miranda: (Con gesto serio) Insisto. No sé de qué me hablas.
- Chaz: (Empezando a subir los escalones que le faltaban hasta llegar a ella) Te
estoy diciendo que te he visto.
- Miranda: (Dando un paso atrás) Mantén las distancias, hazme el favor.
- Chaz: (Con media sonrisa) Así que era eso…
- Miranda: (Alzando una ceja) ¿Qué?
- Chaz: Te gusto.
#TWENTY-FOUR
A Miranda esa afirmación le pareció lo más creído y pretencioso que había oído
en su vida, ¿ese chaval era tonto o de verdad se creía lo que decía?
- Miranda: Me gustas lejos.
- Chaz: Jaja… Tengo que reconocer que pensaba que conquistarte iba a ser
más difícil.
Miranda abrió mucho los ojos. ¿Él se había planteado el conquistarla? ¿Y se
creía que ya lo había conseguido? Desde luego estaba jugando con fuego al
provocarla.
- Miranda: Mira mocoso, deja la tontería ¿si? Intenté ser educada para frenarte
el otro día, pero te merecías una bofetada.Todavía te la puedo dar ¿la quieres?
(Alzando su mano para enseñársela)
- Chaz: ¿No será que tú quieres otro beso? (Y siguió subiendo escalones)
- Miranda: (Adoptando el mismo tono del chico) Te tengo loquito, pero… Tú no
eres mi tipo, asúmelo.
Ahora fue Chaz quien se quedó totalmente descolocado. No es porque no
conociera a chicas creídas o pretenciosas, pero nunca había conocido a ninguna
que se comportara así. Tan... tan como él.
- Chaz: (Alzando una ceja) ¿Loquito? Mira nena. No me quiero imaginar a tu
novio, si es verdad que lo tienes claro, porque para que hayas conseguido
llamar su atención.
- Miranda: ¡No hables de Erick estúpido!
- Chaz: Erick… Suena a paleto de pueblo.
- Miranda: ¿Hablamos de a qué suena Chaz?
- Chaz: Suena mejor que Erick. De todas formas, que no te sulfures, que en
contra de los paletos no tengo nada. Lo que te quería decir es que no sueñes.
En la vida y que se te grabe eso: En la vida, conseguirías llamar la atención de
alguien como yo.
- Miranda: (Con media sonrisa) ¿Tan especial te consideras?
- Chaz: Simplemente estoy fuera de tu alcance.
- Miranda: Uy que pena. Por no ser una pija más de este club, me pierdo a una
joyita como tú.
- Chaz: Jaja… No es por no ser pija. Pero… ¿De verdad quieres saberlo?
- Miranda: (Alzando las cejas) Sorpréndeme.
- Chaz: Eres fría, borde, seria. No podrías conquistar a nadie ni aunque te lo
propusieras. Eres… ¿Cómo decirlo? Muy poco mujer.
Miranda se había quedado con la boca abierta, literalmente. ¿Cómo podía el
niñato ese atreverse a hablarle así? ¿Qué ella no era mujer? ¡Claro que era fría
y borde! ¡Con él que era un estúpido integral! Pero estaba claro que no sabía
quien era ella. Se acercó a él hasta casi tocar sus labios.
- Miranda: (Susurrando) ¿Poco mujer?
- Chaz: (Alejando un poco su cara) Eso he dicho. No podrías calentar ni…
- Miranda: ¿Es eso no? Buscas picarme para que te caliente a ti.
- Chaz: Jaja… No me hace falta ser tan retorcido. Si algo me sobra son chicas y
mejores que tú.
- Miranda: ¿A si?
Chaz asintió con la cabeza. Tenerla tan cerca estaba empezando a ponerlo
nervioso. Pero le encantaba hacerla rabiar y estaba claro que lo había
conseguido.
Miranda se acercó mucho a él y le puso una mano en la nuca. Chaz dio por
hecho que le iba a besar y no fue capaz de moverse ni medio centímetro, pero
ella desvió su cara.
- Miranda: (Hablándole al oído en un susurro) Te vas a arrepentir de lo que me
has dicho Chaz Somers. Voy a hacer que me desees como no has deseado nada
en tu vida, vas a soñar conmigo, vas a querer tenerme cerca a todas horas,
pero te aseguro que NUNCA vas a conseguirme.
Se alejó de él y siguió bajando las escaleras. CHaz se quedó bloqueado. Tardó
en girarse y la chica ya no estaba a su vista. Se llevó una mano a la nuca.
Parecía como si Miranda todavía tuviera allí su mano. La chica era de armas
tomar y ahora la iba a tener detrás todo el tiempo. O eso al menos le había
dado a entender. Pero se iba a llevar el chasco de su vida. Daba igual lo que
hiciera. Chaz tenía muy claro que no pensaba prestarle la más mínima atención.
Eso era un pique. Y a él no le iban a quitar la razón.
---
_____ y Justin siguieron hablando durante un buen rato. Desde luego tenía que
agradecerle que se hubiera acercado a ella. ¿Dónde se había metido Anny? No
podía ser que hubiera arreglado todo con Zack… ¿o si?
Pero Justin la cogió del brazo para frenarla. Fue en ese preciso instante cuando
____ vio algo distinto en él. No hubiera sabido decir el que, pero estaba
distinto, más guapo. Estaban muy cerca.
#TWENTY-FIVE
---
Se conocían hace mucho. Y siempre había sabido donde encontrarla cuando
nadie sabía dar con ella. Si la encontraba allí sabía que iban a pasar un buen
rato conversando. Él tenía que confesarle su reciente descubrimiento y ella solo
se encaramaba en ese árbol cuando algo no iba bien. Delante de los demás no
mantenían una relación muy estrecha, pero llevaban muchos años siendo los
mejores amigos.
Annie lo miró de reojo y torció un poco el gesto. En realidad quería estar sola.
Había dejado a la pobre ____ plantada porque realmente no quería hablar con
nadie, pero con Justin la cosa era distinta. Con él siempre podía hablar. Se bajó
del árbol y se sentó al lado de su amigo.
Justin esperó a que Annie siguiera pero la chica parecía haberse quedado
colgada…
- Justin: (Haciendo gestos con las manos) Y…
- Annie: No nada. Hemos hablado de tonterías y ha querido explicarme porque
no me llamó.
- Justin: (Con media sonrisa) Pero tú no les has dejado, ¿me equivoco?
- Annie: ¿Qué me iba a decir? Es que estuve muy ocupado. Es que se me murió
el canario. Que no, que no… Que ya me da igual. Me fastidió pero…
- Justin: Una cosa Anny… ¿De verdad solo te fastidió que pasara de ti o…?
- Annie: ¿O qué?
- Justin: O te gusta mucho el monitor.
#TWENTY-SIX
- Annie: Te hablo muy enserio Justin. Con ella no por favor. Sabes que me caes
muy bien, pero a ____ la quiero muchísimo y solo la veo en verano, no me
gustaría tener que verla hecha trizas la mitad del verano. Además Alex… (Y
frunciendo la nariz) ¿Alex es un desastre besando?
- Justin: Anny yo no quería bueno… eso, besarla. Pero la tenías que haber
visto. Confía muy poco en sí misma y creía que lo del beso con Alex había sido
todo su culpa.
- Annie: ¿Y te contó a ti que Alex besaba mal? A mi no me suelta ni prenda.
- Justin: Es que el tema la pone mal.
- Annie: Bueno. Pero sigo sin entender porque os acabasteis besando vosotros.
- Justin: Porque fue lo único que se me ocurrió para que dejara de decir que
besaba mal. Encima me quería culpar a mí… o no sé. Si la besaba, iba a poder
decirle que besaba bien.
- Annie: ¿Te das cuenta lo surrealista que es la que os traéis entre manos?
Justin la miró pero permaneció callado. La verdad es que la historia era mucho
más rara de lo que Annie podía imaginar.
- Annie: Bueno, bueno… Pero tranquilo, le caes bien. No sé, la verdad es que
me ha sorprendido como hablaba de ti. Te vas a reír, pero… Cuando me ha
contado que te conocía y lo que pensaba de ti. Le he dicho que tenías que estar
loquito por ella.
- Justin: (Muy serio) Si. Me estas matando de la risa.
- Annie: ¡Ey! Que yo no sabía que era verdad. No sé, es que…
- Justin: ¿Qué te dijo exactamente?
- Annie: ¿De qué?
- Justin: ¡De mí! Para que supieras que me pasaba algo con ella. ¿O sólo se lo
dijiste por joder?
- Annie: No, no. Es que no sé, ha dicho que eras simpático y así, pero luego ha
empezado a decir que parecías muy buena persona, que la ayudabas. Cosa que
empiezo a entender mejor, y que la escuchabas. Como comprenderás, esa
descripción de ti me ha chocado bastante.
- Justin: ¿Acaso no piensas lo mismo que ella?
- Annie: Jaja… Si, si. Por supuesto, pero daba por hecho que era la única.
- Justin: (Serio) ¿Y se puede saber por qué le dices que soy una rana?
- Annie: Jajaja, ¿te lo ha contado?
- Justin: Si… Y no me ha hecho gracia ¡eh!
- Annie: Y bueno. Tienes que reconocer que lo eres. No sé Justin, yo no creo
que te hayas enamorado de ____ y ella esta buscando algo así. Después de lo
que me has contado dudo que sea Alex esa persona pero…
- Justin: Anny… ¿Puedo pedirte un favor?
- Annie: Si.
#TWENTY-SEVEN
- Justin: No te voy a pedir ayuda con _____ , sé que es tu amiga y todo eso, y
te prometo que no le voy a hacer daño, pero… No le hables mal de mí, por
favor.
- Annie: Ey… que yo tampoco le hablo mal de ti.
- Justin: Da por hecho que soy un creído, un chulo. Y que ando cada día con
una, y recién me conoce. Eso lo ha sacado de ti Anny.
- Annie: Vale, vale. Prohibido hablar de ti ¿ok? Ni bien, ni mal.
- Justin: (Sonriendo) Gracias.
- Annie: Pero… ¿No puedes dejarla tranquila? Enserio… No sabes lo que es su
familia, solo con su padre tiene la cuota de hombres que le amarguen la
existencia cubierta.
- Justin: Solo déjame aclararme. Quiero saber si es solo una amiga o… algo
más. Pero te prometo que si no es para ir enserio con ella. No haré nada.
Mientras tanto… deja mi reputación tranquila.
- Annie: (Sonriendo) Nunca habías llegado a plantearte tener algo serio con
nadie.
- Justin: Me asusta más a mí que a ti. Creeme. Es que además… Es como si
fuera muy evidente, Chaz no hace más que joderme con ____ y eso que no
sabe nada. Solo por como la miro… ya se ha dado cuenta. Tú igual. Me parece
que la única que no se ha dado cuenta, es ella.
- Annie: ¿Y si ella esta igual?
- Justin: ¿Tú crees? Esta Alex ¡eh!
- Annie: Ya bueno, si. Piensan volver a quedar, pero… No sé, lo del beso.
- Justin: No creo. He estado hablando antes con ella y estaba normal, como si
nada hubiera pasado.
- Annie: ¿Eso te ha molestado?
- Justin: No. En absoluto. Me sentiría muy mal si cambiara algo. Hablar con ella
es divertido. Tengo claro que quiero que seamos amigos.
---
Había estado un rato buscando a Annie, pero parecía que su deseo de ser
tragada por la tierra había sido concedido. No estaba por ninguna parte, y a
Zack lo había visto en la pista con otro grupo así que… con él no podía estar.
Decidió irse a casa. No quería volver a ver a Justin por un rato tampoco. Había
salido corriendo como una niña, pero tenerlo tan cerca y con el recuerdo de su
beso tan presente. Se pasó un dedo por los labios, había intentado no pensar
en eso. Ella no tenía que pensar en él, pero… ojalá hubiera sido ese su primer
beso. Estaba pensando en que era exactamente lo que había sentido al tenerlo
tan cerca. Era muy guapo, pero eso nunca había llamado su atención…
____ sintió esa noticia como un golpe en todo el estómago. Tenía novia. ¿Cómo
no lo había dado por hecho? ¿Cómo no iba a tener novia un chico así? Pero lo
que peor le sentaba de toda esa situación. ¿Por qué la había besado? Ella se
estaba haciendo ilusiones con ese beso, como una idiota. Menos mal que la
novia había venido a darle la noticia. Aunque no iba a dejar que se saliera con
la tuya.
- ____: (Con una sonrisa fingida) Así que la novia. Me alegro por ti entonces.
Ahora… ¿me sueltas?
- Sara: Te vuelves a acercar a él y te vas a acordar de mi nombre Mahone.
-____: Vale. Veo que tú me conoces muy bien, ahora... No te ofendas, pero no
tengo ni la menor idea de quien eres, y si quieres que me acuerde de tu
nombre, vale con que me lo digas. Porque desde ya te aviso que lo que haga o
deje de hacer con Justin, es asunto mío.
- Sara: ¿Justin? ¿Desde cuando tienes tanta confianza con él?
- ____: (Sonriendo) ¿No es que estas acostumbrada a que le gusten todas?
- Sara: Ríete, pero estas advertida. No te vuelvas a acercar a él.
- ____: ¿Te digo la verdad? No tengo ningún interés en tu novio. Es más, estoy
interesada en otra persona. Así que si me haces el favor y le dices que deje de
perseguirme y buscarme… te lo agradecería.
Justin no pudo contestar nada, porque ____ se fue sin darle la menor
oportunidad. ¿Qué había pasado? Lo de Superman vale… Igual se había pasado
al meterse así a defenderla, estaba claro que era de esas chicas a las que les
gustaba hacer todo por si mismas, pero… ¿Romeo? ¿Qué había querido decir
con que ese papel le quedaba grande? Notó que la mano de Sara se
entrelazaba con la suya y eso lo sacó de sus pensamientos.
#TWENTY-EIGHT
Justin dio un paso atrás. No podía creerse que ____ hubiera dicho eso, pero…
Se lo había dicho a la cara, no quería saber nada de él. Y daba igual el beso,
daba igual todo. A ella le interesaba Alex.
---
Justin pasó el resto del día pensando en _____. Estaba claro que esa chica le
interesaba mucho, pensar que estaba enfadada con él y que no quería volver a
verlo lo estaba desquiciando. Pero esa noche hubo una gran cena de gala en su
casa, la cual le impidió visitar a ____. Necesitaba hablar con ella. Si se había
enfadado al enterarse de lo suyo con Sara. Eso quería decir que tenía
posibilidades, y sino, Sara le tenía que haber dicho algo más para hacer que se
enfadara. Fuera lo que fuera, necesitaba saberlo y arreglarlo.
---
Al día siguiente en el club…
- Justin: ¡Anny! ¡Espera Anny!
- Annie: (Girándose) ¿Qué quieres Justin? Llego tarde…
- Justin: (Alcanzándola) ¿A dónde vas? Te acompaño y te cuento.
- Annie: Tengo tenis. Si vuelvo a faltar a su clase, el subnormal ese se va a
creer que me tiene rota.
- Justin: Entonces soy breve. ¿Dónde esta ____?
- Annie: (Sonriendo) Te ha pegado fuerte ¡eh!
- Justin: (Algo desesperado) Anny…
- Annie: No ha venido. Ni va a venir. Lo siento, vas a tener que visitar el balcón
Romeo… jeje.
- Justin: (Extrañado) ¿No va a venir? ¿Ha pasado algo?
- Annie: Bueno, bueno… Tranquilo. Esta todo bien, pero se iba con sus padres a
no sé donde. ¡Ah! Y por cierto… No sé si te interesará. Pero Alex te esta
sacando mucha ventaja. Ayer quedaron y hoy repiten.
- Justin: (Con gesto triste) ¿Si?
- Annie: (Asintiendo) ¿Tienes ya claro que te pasa con ella?
- Justin: No lo sé. (Y golpeándose la frente) ¡Dios! Pero para cuando consiga
volver a verla. Si sigue a este ritmo va a estar prometida con el anormal ese.
- Annie: ¿Y por qué tanto interés en verla?
- Justin: Es verdad. Que tú no sabes. La estúpida de tu vecina, paró ayer a
____ a la salida, y no sé a cuento de qué, le contó que habíamos tenido algo.
Lo raro fue que ____ se enfadó mucho. Me dijo que no me quería volver a ver.
No sé, no entiendo nada.
- Annie: (Con gesto serio) Más te vale que no te acerques a ella hasta tener
claro que vas a ir enserio Bieber. Esta claro que a ella también le pasa algo
contigo. (Y mirando su reloj) Bueno, y me voy que ya no llego a la hora.
Justin resopló mientras veía como su amiga corría. Ojalá fuera verdad que ____
sentía algo por él. Todavía era pronto para atreverse a reconocerlo, aunque
fuera ante Annie, pero no dudaba que ____ le había tocado hondo.
#TWENTY-NINE
Se había quedado con las ganas de reírse un poco del pijo ese… Desde su
pequeño “enfrentamiento”, no lo había vuelto a ver ni de lejos. En el fondo,
mejor. Si tenía que darle una lección, no iba a dudar en hacerlo, pero prefería
mantenerse alejada de él.
Iba hacia el bar con una caja llena de botellas. Eso era lo único que no le
gustaba del trabajo. El ser la única encargada le obligaba a tener que cargar
con toda la mercancía y odiaba hacerlo.
Seguía su camino cuando oyó un grito de: ¡Cuidado! Y lo siguiente que notó fue
que alguien caía de lleno contra su espalda. Se fue hacia delante y paró la caída
con la caja, lo que supuso varias botellas rotas. Resopló antes de incorporarse,
ya que por muy mala suerte que hubiera tenido, eso no se lo habían hecho a
propósito… ¿O si? Eso se lo planteó al ver la sonrisa estúpida del ya famoso:
Chaz Somers.
- Chaz: (Medio riéndose) Perdona… Me la han pasado muy fuerte (Levantando
un balón de rugby que tenía en la mano)
Miranda ni se molestó en decirle nada. Le dirigió una mirada de repulsión y se
dispuso a coger de nuevo la caja, pero alguien se le adelantó.
Nunca había sido caballeroso precisamente. Pero la cara con la que ella lo había
mirado. Ese gesto había conseguido hacerlo sentir mal.
- Miranda: (Mirándolo desafiante) Nene… Yo trabajo, no estoy de juerga como
otros. A jugar a la plaza, hazme el favor.
- Chaz: Me dices donde dejo esto y me voy a “jugar”.
- Miranda: (Muy seria) Nadie te ha pedido que lo cojas. Déjalo donde estaba.
- Chaz: Insisto. Déjame ayudarte.
- Miranda: (Acercándose con mala cara) ¿Me has visto cara de Barbie? (Chaz
negó algo nervioso) Entonces dame la puñetera caja y vete a jugar… nenito.
Chaz no sabía como contestarle, por lo que se giró en redondo con la caja y se
encaminó hacía el bar. Hacía todo eso porque sentía haberla empujado, pero
pasaba de volver a enfrentarse a ella. El jueguecito empezaba a cansarle, ante
todo porque él siempre perdía.
Miranda lo miró sorprendida y resopló furiosa antes de seguirlo. Una vez en la
puerta del bar, ella abrió y le hizo paso a Chaz para que entrara la caja. Él la
apoyó en una de las mesas…
- Chaz: (A pesar de que Miranda esquivaba su mirada) De nada…
- Miranda: (Mirándolo con furia) Si, gracias también por el empujón.
Tras ese comentario entornó la mirada. ¿Por qué no se iba? Ya había hecho su
papel de “lord inglés” llevando la puñetera caja. Se frotó las manos
inconscientemente. Había conseguido frenar la caída, pero con toda la fuerza
del peso de Chaz y del suyo propio… La verdad es que se había hecho daño.
Chaz se dio cuenta y se acercó a ella. Miranda lo miraba con desconfianza, pero
seguía frotándose las palmas de la mano con sus dedos sin sospechar que eso
era lo que había llamado la atención del chico. Cuando estuvo cerca cogió las
manos de Miranda entre las suyas. Ella no solo no pudo evitarlo sino que la
dulzura del gesto del prepotente ese la dejó sin reflejos para apartarse. Ahora
era él quien la frotaba las palmas… Aunque para Miranda eso eran caricias.
- Chaz: (Con el ceño un poco fruncido) ¿Te duele?
- Miranda: Algo…
- Chaz: (Mirándole las manos) Igual te has hecho algo… (Y alzando la mirada)
¿Por qué no vas a la enfermería? Que te mire si…
Miranda se sorprendió a si misma tanto como a Chaz, pero lo que estaba
sintiendo al tenerlo tan cerca la hizo reaccionar. Se zafó de él con brusquedad…
- Miranda: (Señalándole la puerta) ¿Por qué no te vas?
- Chaz: (Sorprendido) Perdona yo… Es que igual tienes algo, el golpe…
- Miranda: Mira, no tienes cara de pasar lo 15 años, así que dudo mucho que
sepas algo de medicina. Estoy bien, no te preocupes y vete.
- Chaz: (Ofendido) ¿15 años? ¿Tú te has visto? Si yo tengo 15 años, tú estarías
en el parbulario…
- Miranda: Mira estúpido…
- Chaz: (Interrumpiéndola y con una sonrisa en la cara) ¿Así piensas conseguir
que solo piense en ti? Eres muy poco seductora ¡eh! Una camionera lo tendría
más fácil…
- Miranda: (Sonriendo y acercándose a él) Lo estas deseando ¿verdad?
- Chaz: ¿De qué hablas?
- Miranda: (Soltando una risa sarcástica) No te va el papel de despistado…
Sabes de qué hablo. (Y acercándose aún más para hablarle al oído) Te mueres
por tenerme así de cerca más a menudo…
Chaz giró un poco la cara y dejó su boca a muy escasos centímetros de la de
Miranda. Los dos estaban frente a frente y desafiándose con la mirada. Decidió
entrar en el juego.
- Chaz: No creas que esta forma tuya de ligar es original… Conozco a las chicas
como tú.
- Miranda: (Alejándose un poco) Tú que sabrás como soy yo…
- Chaz: (Con sonrisa triunfante) Eres muy evidente chiquita… (Y empezó a
acercarse a ella a la vez que Miranda retrocedía) Pero no sabes donde estas
parada.
- Miranda: Que tengas dinero no…
- Chaz: (Avanzando hacia ella) No hablo de eso… A mí me quieres dar una
lección porque te molesta como trato a las mujeres, te molesta ver que juego
con vosotras ¡eh!
- Miranda: (Frunciendo el gesto) ¿Lo reconoces? ¿Te gusta ser así?
- Chaz: Tú me ves como quieres verme… Me cogiste manía porque no te di las
gracias en un par de ocasiones, y después te molestó verme desplegar mis
encantos…
- Miranda: No seas engreído ¡Por favor! Me daba exactamente igual lo que
estuvieras haciendo con…
- Chaz: (Interrumpiéndola y ya muy cerca de ella) Luna (Y cogiéndola por la
cintura) Te cabreó verme tontear con ella cuando te había besado a ti ¿no?
Miranda se soltó de él de manera brusca y tragó con dificultad. La situación se
le estaba empezando a ir de las manos… Con Erick nunca había sentido algo
así, nunca había sentido esas incontrolables ganas que tenía de besar en ese
preciso instante a Chaz. Si volvía a acercarse tanto…
- Chaz: (Sonriendo divertido) Si… El discursito del otro día estuvo muy bien.
Ibas a conseguir que te deseara, que soñara contigo y no sé cuantas cosas
más… Dabas el pego de chica fuerte y liberada, pero…
- Miranda: (Con rabia) No soy lo suficiente mujer para eso ¿no?
- Chaz: Aparte de eso… Estas muy lejos de ser fuerte o liberada. Montas ese
paripé conmigo porque no nos conocemos, pero no te olvides que te oí
hablando con tu novio… Ahí comprobé que eres igual de fácil y sumisa que
cualquier otra de las pijas que vienen aquí a diario. No es el dinero lo que
cambia a las mujeres. No te confundas conmigo chiquita… No soy clasista.
- Miranda: No, eres machista que es mucho mejor.
- Chaz: (Guiñándole un ojo) No te enfades porque te haya calado tan pronto…
Ya te he dicho que el otro día casi diste el pego… Lo que pasa es que no sabías
con quien hablabas.
#THIRTY
Acaba de llegar a casa. Se dejó caer en la cama boca arriba. Odiaba esas visitas
a su abuela. Ella quería a su abuela, pero era demasiado parecida a sus padres.
Eso hacía que así como los padres de ____ no parecían padres en muchos
aspectos, su abuela tampoco.
Lo que peor le había sentado de esta visita a casa de su abuela era el hecho de
que cuando iba allí siempre era totalmente ignorada y sin nada que hacer, solo
podía pensar. Se había pasado toda la mañana pensando en Justin. ¿Por qué el
haber descubierto que tenía novia la tenía tan mal? Debería pensar en Alex, no
en él. Con Alex las cosas cada vez estaban mejor, en un rato volverían a verse
y el tema de los besos había mejorado gratamente.
---
Había estado varias horas en ese balcón esperando a que volvieran. Los había
visto llegar y sabía que ____ ya estaba en su habitación, pero el balcón estaba
cerrado y él no se atrevía a llamar. Se sentó apoyado en la pared. No sabía si
esperaba a que a ella sola se le ocurriera salir o si era todo por miedo a una
mala reacción ante su presencia. En ese momento se abrió el balcón…
---
Miranda se acercó mucho a él y le cogió la cara con una mano, pero haciendo
fuerza…
- Miranda: (Mirándole fijamente) Vuelve a decir que soy fácil y sumisa y te
aseguro que no lo cuentas…
Chaz intentó sonreír, aunque la forma en que Miranda le tenía cogido no se lo
permitía con comodidad.
- Chaz : No me das miedo…
- Miranda: Pues debería…
Chaz aprovechó la cercanía de Miranda y la cogió por la cintura atrayéndola
hacia si mismo.
- Chaz: ¿Y si te beso y cronometramos cuanto tardas en caer rendida? Serían
segundos…
- Miranda: (Revolviéndose en los brazo del chico) También son segundos lo que
tardo en dejarte sin día del padre… Así que no lo intentes.
Chaz sonrió ahora con todo su esplendor y la besó. Se estaba riendo de ella.
Quería demostrarle que a él no podía amenazarlo con tanta facilidad. Ni ella ni
sus posibles encantos significaban nada para él.
Ella intentó separarse con todas sus fuerzas, pero le fue imposible. Dejó de
oponer resistencia y Chaz empezó a disminuir la fuerza con la que la tenía
cogida al notarlo, empezaba a meter la mano por debajo de la camiseta de la
chica. Era él quien estaba cayendo rendido ante la morena. ¡¡PLAF!!
Chaz se llevó una mano a la mejilla. Le había girado la cara con semejante
bofetón… La miró muy enfadado, pero ella… Ella parecía a punto de llorar.
- Miranda: (Con lágrimas contenidas) ¿No tienes madre o qué imbécil? ¡Porque
no tienes ni idea de lo que es tratar con mujeres! ¿Por qué no dejas de
insultarme y atacarme? ¿Por qué te empeñas en hacerme sentir mal? ¿Qué te
he hecho? ¡Sabes que tengo novio y me besas! ¡TE ODIO!
Tras decir eso salió corriendo del bar… Chaz estaba totalmente descolocado.
Sentía que le faltaba el aire… No sabía si era el beso, la bofetada… o las
palabras de la chica, pero algo lo había dejado totalmente destruido.
---
- ____: ¿Qué haces aquí? Te dije que…
- Justin: Te dejara en paz, lo sé. Sara también me dio el recado.
- ____: (Levantando las cejas) Sara… tu novia supongo, ¿no?
- Justin: ¿Novia? Sara y yo no…
- ____: Mira… Llegas a negarme que es tu novia y te juro que la próxima vez
que vengas no tardaré ni cinco segundos en avisarle a mi padre.
- Justin: ¿Y si no lo niego me dejaras volver?
- ____: ¡No! (Y cerrando los ojos para calmarse) Enserio… Lo tuyo no es normal
¿No entendiste que no quiero volver a verte?
- Justin: ¿Por qué estas tan enfadada?
- ____: (Con los ojos como platos) ¿Y lo preguntas? ¡Me besaste Justin! Tienes
novia y me besaste…
- Justin: No pero… (Y perdiendo la calma) ¡Joder! Que Sara no es mi novia. No
sé de donde te habrás sacado eso per…
- ____: (Cortándole) Pues mejor que se lo aclares a ella, porque no se ha
enterado.
- Justin: Ella lo sabe. Si te lo dijo ella fue solo por fastidiarte.
- ____: ¡Vaya chorrada! ¿A mí por qué iba a molestarme que tuvieras novia?
- Justin: (Con media sonrisa) Te molestó.
- ____: (Muy seria) Estoy con Alex¿entendido? Tú para mí no…
- Justin: Yo para ti solo fui un beso ¿no?
- ____: No… Tú…
- Justin: (Acercándose) ____… Sé que debes pensar que no soy normal, y que
encima Anny apoyará esa teoría pero… No sé que me pasa contigo.
- ____: (Apoyada en la pared y con Justin delante) ¿Qué te pasa de qué?
- Justin: ¿Me dejas besarte?
- ____: No, yo… (Pero los labios de Justin ya estaban sobre los suyos)
Lo primero que pasó por la cabeza de ____ es que para qué narices preguntaba
si luego daba igual la respuesta. Después de eso no pensó nada más. Esta vez
no era solo el beso. Las manos de Justin estaban apoyadas en la cintura de
____ , notaba como movía con suavidad sus dedos, acariciando la piel de ____
con delicadeza. Era una caricia inocente, pero estaba haciendo sentir a ____ en
el cielo. Al separarse de él, lo primero que le vino a la mente fue: con Alex no
es así…
Justin la miró feliz. No sonreía, pero estaba feliz. ____ le había correspondido al
beso y él ya tenía claro que no solo era besarla lo que lo hacia sentir tan
extraño. Era ella en general, ella tenía algo especial, algo por lo que quería
estar a su lado.
____ lo miró algo desconcertada. No solo porque la hubiera besado sin previo
aviso, sino por todo lo que la había hecho sentir. Cuando pensaba que las cosas
con Alex iban a mejor, llegaba Justin y le demostraba que eso no era nada.
Porque lo que sentía con Alex , comparado a lo que sentía con Justin.No era
nada.
- Justin: (Mirándola con dulzura y acariciándole una mejilla) Me gustas mucho…
#THIRTY-ONE
____ lo miró seria. No. No quería creerle. Prefería pensar que estaba con esa
rubia histérica y que con ella solo quería jugar. En ese momento hubiera
preferido odiarle a sentir la bandada de mariposas que sentía en el estómago.
____ se quedó totalmente seria. Era la primera vez que le decían algo así. Y ya
no hablaba de chicos, podía hablar en general y decir que nunca nadie le había
dicho a la cara que la quería. Suponía que tenía que ser así, que sus padres la
tenían que querer, que sus familiares y amigos también. Pero nunca nadie se
había molestado en decírselo. Y ahora llegaba él y se lo soltaba así. La única
persona a la que tenía prohibido acercarse… y la quería.
- Justin: (Muy nervioso por su reciente declaración) ¿Tú… tú sientes lo mismo?
- ____: (Seria) Lo siento. Pero no.
- Justin: Pero te gusto. (Y mirando hacía la esquina del balcón donde habían
estado juntos minutos antes) Cuando te he besado…
- ____: (Intentando aparentar una calma que no encontraba por ninguna parte)
Justin. Tú y yo no podemos ser nada. Lo siento si…
- Justin: Si me has dejado hacerme ilusiones ¿no? A ti quien te gusta es Alex.
- ____: (Agachando la mirada) Lo siento.
- Justin: Deja de decir eso. Yo he sido sincero y tú has sido sincera. Esta todo
bien. (Se disponía a irse cuando ____ puso una mano en su hombro para
frenarlo)
- ____: No es por Alex.
Justin la miró sorprendido, pero no supo que decir. ¿No era por Alex?
¿Entonces él le gustaba?
- ____: Yo no sé exactamente que habrá pasado, pero tu familia y la mía se
odian. Que tú y yo… (Y cerrando los ojos con fuerza) Es una locura.
- Justin: ¿Da igual lo qué sintamos?
- ____: (Con gesto comprensivo) Lo que dices sentir estoy segura de que se
pasará pronto. Hay demasiadas chicas mejores que yo detrás de ti. Chicas a las
que tus padres no rechazarían.
- Justin: ¿Te planteas salir conmigo o con mi padre? ____ a mi lo que digan mis
padres no…
- ____: Pero a mi si. No tus padres, pero si los míos. He intentado toda la vida
ser la hija que esperaban y aún y todo me he quedado muy lejos de lograrlo.
No voy a acabar de hundir sus expectativas enamorándome de la única persona
con la que alguna vez me han prohibido que me relacione.
- Justin: ¿Entonces?
- ____: Entonces tú con Sara y yo con Alex. Lo que ha pasado en este balcón lo
olvidaremos pronto y… (Pero no fue capaz de seguir)
- Justin: ¿Y qué?
- ____: (Mirando al suelo) No vuelvas.
- Justin: Podemos ser amigos…
- ____: Pero no debemos.
- Justin: ¿Todo por qué me gustas? Si no te hubiera dicho nada…
- ____: (Mirándolo a los ojos) No puede ser Justin, no me voy a estar
arriesgando a que me arruinen mis padres la vida por que me vean contigo.
No… no merece la pena.
____ era la primera chica que le gustaba tanto y tan claramente desde un
principio lo rechazaba. ¿Cómo podía haberse hecho ilusiones con un beso que
él le había dado sin previo aviso? En realidad todo era un disparate. Ella solo
había intentado ser amable con él, por eso no lo echó de su balcón la misma
noche que se conocieron… y él nada más y nada menos que acosándola. De
repente no solo se sintió triste sino también muy idiota. Nunca había hecho el
ridículo así con nadie.
#THIRTY-TWO
Los días pasaron y no cambió nada. Justin no volvió a visitar a ____ y hasta se
alegraba de que ella se lo hubiera prohibido. Si siguieran siendo amigos tendría
que fingir alegría ante la relación de Alex y “su amiga”, y no se le ocurría un
sentimiento más contrario a lo que realmente sentía cada vez que los veía
pasar juntos o besarse. Porque la relación ya parecía más que formalizada, y la
parejita se paseaba ante los ojos de todos.
Justin miró a su amigo algo serio. Había alcanzado a reconocer que ____ le
gustaba, pero no pensaba admitir nunca el ridículo que había hecho “al darse a
conocer” y menos confesar que él ya se había declarado… y que ella ya lo había
rechazado.
---
____ andaba mirando al frente. Podía notar que Justin la miraba, pero no se
atrevía a girarse. Hacía ya bastantes días de la última vez que habían hablado y
desde ese día ____había pasado muchas horas sentada en el balcón. Era como
si estar ahí fuera lo único que le quedara de él y tenía que reconocer que lo
echaba de menos. Quizá fuera porque había sabido llegar en los momentos
oportunos, pero pensaba en las visitas de Justin y una extraña alegría le
recorría el cuerpo. Se arrepentía enormemente de haberle pedido que no
volviera a aparecer por allí, aunque después de lo último que habían hablado,
para ella lo mejor era mantener distancia. Con Alex todo iba bien. Y en el
momento en que ese pensamiento cruzo su mente entrelazo su mano con la de
él.
---
Esa misma noche había una fiesta en el club. Era para gente de entre 16 y 20
años, y se celebraba todos los meses una igual. El motivo, celebrar los
cumpleaños de todos los jóvenes del club que coincidieran en el mismo mes;
aunque al final era más bien una excusa para otra fiesta y otra borrachera para
muchos…
Esta primera fiesta del verano tenía a Annie entre sus anfitriones, pero a pesar
de ello ____ nunca asistía, ya que ella no tenía relación con el resto de las
amistades de Annie y siempre había tenido miedo de ir para quedarse sola, o ir
y que Annie se viera obligada a estar solo con ella.
Este año era distinto, porque quien se había mostrado realmente interesado en
que fuera, había sido Alex. Para ella lo de tener novio era nuevo y eso de que
alguien estuviera tan interesado en ella o en su sola presencia, también. Por
eso no tardó mucho en acceder a la insistencia del chico cuando ____ en un
principio se mostraba reacia a ir.
Llegó a la fiesta. Había quedado en encontrarse allí con Alex y con Annie
también pensaba encontrarse, a pesar de que, como otros años, ____ no
quisiera ser la prioridad de su amiga y por ello privarla de otras compañías.
A diferencia de la mayoría de las celebraciones que tenían lugar en el club, esta
no requería etiqueta. Iban todos arreglados, pero no más de lo que se podían
arreglar para un sábado de fiesta normal… Eso a ____ la hacía sentirse más
cómoda.
Al entrar buscó a Alex con la mirada, pero antes de llegar a él, detuvo su
mirada en Justin . Se reía mucho y estaba bebiendo algo. A diferencia de ella
que iba casi exclusivamente para estar con su novio y saludar a una de las
cumpleañeras, ya que se encontraba totalmente fuera de lugar, él estaba en su
medio. Vio a la famosa Sara en el mismo grupo que Justin y la rubia no perdía
oportunidad de acariciarle el hombro y hablarle al oído, no obstante ___
percibió que Justin no le prestaba mayor atención… O no le había mentido con
respecto a que no eran nada, o realmente utilizaba a las chicas de una forma
muy poco disimulada.
____ se giró algo extrañada, sabía quien era, pero ese tono irónico la descolocó
por completo…
- Justin: (Tendiéndole una mano a Annie) ¡Ey Anny! Ven, que te están
esperando…
____ miraba a Justin algo seria. No se molestaba en saludarla o mirarla, pero si
en tomarle el pelo… ¿qué le pasaba?
- Annie: (Algo incómoda por la tensión que había creado Justin) Esto… Justin
ahora voy.
- Justin: (Tirando de la mano de su amiga) ¡No venga! ¡Ven!
- ____: (Mirando a Annie con una sonrisa) Ve tonta… Por mi no te quedes…
- Annie: Pero no… Espero a que estés con Alex enserio…
- ____: No Anny… enserio, vete. Yo ahora voy donde Alex.
____ no quería mirar a Justin y eso le impidió percatarse del gesto de rabia que
se dibujo en su cara al oír el nombre de Alex…
Annie miró a ____ como para asegurarse de que quería que se fuera y acabo
siguiendo a Justin.
____ miró algo triste a Justin. Ese chico le había caído tan bien. Pero estaba
claro que no iban a ser ellos los que rompieran la tradición entre los Bieber y
los Mahone: odiarse.
#THIRTY-THREE
Esa chica llevaba ya muchas copas de más. Desde luego, de quien menos te lo
esperabas te llevabas la sorpresa. La había visto muchas veces por el bar con
otra rubiecita alta. Las dos eran siempre muy amables y a diferencia de otras
chicas del club no se daban esos aires de superioridad que tanto la
enfermaban. Era raro que estuviera sola. Quizá le pasaba algo. Decidió
ayudarla. Miranda se acercó al grupo de Justin y Annie. Buscaba a Annie con
cierta desesperación. El estado de ____ ya no era para acercarse a darle un
poco de conversación, era para que se la llevaran a casa directamente.
- Miranda: (Tocándole el hombro) Oye perdona. ¿Una chica rubia muy mona?
¿Sabes donde anda?
- Justin: Jajaja… Perdona. Si fuera una morena muy mona te tendría que
señalar a ti, pero… (Y mirando alrededor) Rubias monas hay bastantes.
- Miranda: (Algo sonrojada) Si. vale… Pues no sé… creo que llevaba algo verde,
pero no me he fijado mucho.
- Justin: Puede ser Annie. Ha salido fuera ¿por qué la buscas?
- Miranda: Es que hay una amiga suya ahí. No para de beber y esta cada vez
peor.
- Justin: (Mirando a donde Miranda le señalaba) ¿Quién?
- Miranda: (Señalando) Allí. Esta sentada, la de vaqueros y camiseta marrón.
- Justin: (Asombrado) ____
- Miranda: ¿La conoces?
- Justin: Si. Más o menos.
- Miranda: ¡Buf! Ayúdame a llevarla al bar o algo. Lleva toda la noche bebiendo
sola. Y solo la he visto acercarse a Annie.
- Justin: ¿Sola?
- Miranda: Si. Me ha parecido extraño. Tenía otra imagen de ella.
- Justin: (Mirando en todas las direcciones) Eso ha sido culpa del imbécil de su
novio.
- Miranda: ¿Su novio esta aquí?
- Justin: Si. Pero da igual, vamos a llevarla fuera. Dudo mucho que antes de
hoy supiera lo que es una borrachera,
- Miranda: Pues que semana de descubrimientos le toca. Hoy lo que es una
borrachera, y mañana lo que es una resaca.
- Justin: Jaja… Tienes razón.
- Miranda: Por cierto… ¿Cómo te llamas?
- Justin: Justin.
- Miranda: ¿Eres amigo de Chaz no?
Justin sonrió y asintió. Al parecer no era su amigo el único interesado.
Se acercaron a ____.
- Justin: Venga pianista. Se acabó el concierto. A casa. (Quitándole la última
copa de las manos)
- ____: (Balbuceando) No… A casa no…
- Miranda: Venga ____. Has bebido mucho. Venga, ¡levántate! Vamos fuera a
tomar aire.
- ____: Vale… Aire… (E intentó levantarse)
Pero no lo consiguió. Si ya sentada llevaba mucho rato viendo doble, levantarse
le hizo sentir que el suelo se le daba vuelta y casi se cae, de no ser porque
Justin la cogió a tiempo.
- Justin: ¡Bueno! Esta vuelta al aire. Así a casa no la puedo llevar. La matan.
- Miranda: Si pues… Yo no me puedo quedar fuera con ella. Me matan a mí si
no atiendo la fiesta.
- Justin: ¿En el bar se puede entrar? Es por darle un café o algo.
- Miranda: Esta cerrado, pero toma… (Y le dio un manojo de llaves) Llévala y yo
en cuanto pueda me escapo ¿ok? O si veo a su amiga te la mando.
- Justin: Tranquila. No te metas en líos. En cuanto este un poco mejor la
acompaño a casa y listo.
- Miranda: (Alzando una ceja) ¿Te vas a perder la fiesta?
- Justin: (Mirando a ____ de reojo) Es que en parte esto es mi culpa.
Miranda no entendió nada, pero supuso que era mejor no seguir preguntando.
Justin cogió a ____ en brazos y salió con ella intentando que los vieran el
menor número de personas posible. Por suerte estaban cerca de la puerta.
---
Se sentía realmente mal. Si él no hubiera ido a llevarse a Annie. Lo había hecho
realmente con mala intención, pero jamás hubiera supuesto que Alex fuera a
dejarla de lado toda la noche. Él muriéndose de ganas de estar con ella y el
otro subnormal la tenía como novia y no le hacía ni caso.
Llegaron al bar y Justin soltó a ____ para poder abrir la puerta, pero ella no
dejó de abrazarse a su cuello. En el camino había parecido hasta dormida, pero
no lo estaba.
Consiguió atinar con la llave y abrir la puerta a pesar de tener a ____ colgando
del cuello.
La volvió a coger en brazos ya que ___ parecía totalmente incapaz de dar un
paso sin que se le enredaran las piernas, y Justin lo último que quería era verse
con ella en el suelo.
Justin se sintió mal. Nunca hubiera pensado que ____ era de las de
emborracharse para olvidarse de los problemas, pero si él hubiera dejado que
Annie estuviera con ____.. Había sido un idiota, se había acercado a ellas con
buena intención, solo con intención de saludar. Hacía tantos días que no la veía
de cerca. Pero el oír el nombre de Alex nada más acercarse lo había sacado de
quicio. Y ahora allí estaba ___, borracha como una cuba y rogando por no
quedarse sola.
Se olvidó del café y de lo que sería conveniente en esa situación. Cogió una de
las sillas cercanas y se sentó al lado de ____.
- Justin: Me quedo aquí cerca pero no te duermas ¿vale?
- ____: (Con los ojos cerrados y negando con la cabeza) Si te quedas no me
duermo.
- Justin: (Sonriendo) Bueno… Pero abre los ojos al menos. No soy tan feo.
- ____: (Con los ojos aún cerrados y sonriendo) Ya sé que no eres feo. Los
príncipes nunca son feos.
- Justin: Jajaja… Te ha dado fuerte con los príncipes ¡eh! (Y acariciándole la
cara) Dudo que conozcas a ninguno pero bueno.
- ____: Tú…
- Justin: Yo no soy príncipe. Mi padre se cree el rey del mundo, pero eso son
cosas suyas.
- ____: Solo te falta el caballo blanco.
- Justin: (Medio riéndose) Claro… Por eso sales con Alex ¿no? Él es un príncipe
completo, tiene caballo y todo.
- ____: Alex no…
- Justin: ¿No tiene caballo tampoco?
- ____: No es un príncipe.
Justin se quedó callado mirándola. Sinceramente pasaba de seguir hablando de
Alex. Prefería simplemente admirarla a ella.
~
Se había hecho tarde. Annie miró en el salón en que se celebraba la fiesta con
cuidado de no ser vista por el pretendiente al que poco antes había despachado
con sutileza. Buscaba a Justin, pero estaba claro que debía haber desaparecido
con alguna chica… Y ____ tampoco estaba, pero ella nunca se hubiera quedado
hasta tan tarde. Decidió irse.
Iba ajustándose la chaqueta mientras llegaba a la salida, cuando el
recepcionista la llamó.
- Recepcionista: ¿Annie Williams?
- Annie: (Girándose) Si… Soy yo.
- Recepcionista: (Sacando algo de debajo del mostrador) Tome… Han dejado
esto para usted.
- Annie: (Acercándose extrañada) ¿Para mí?
- Recepcionista: Si… Si usted es Annie Williams…
- Annie: Si, si… Soy yo. ¿Pero quién lo ha dejado?
- Recepcionista: Sólo sé que ha tenido que ser alguien del club, porque me han
dicho que no hacía falta revisarlo.
- Annie: Ya… (Y cogiendo el paquete) Bueno gracias.
Esperó a salir del club y se sentó en uno de los bancos de la entrada. No sabía
porque se había extrañado tanto al recibir el paquete, estaba envuelto en papel
de regalo, y aunque no coincidiera con la fecha exacta, ese día se estaba
celebrando su cumpleaños. ¿Qué tenía de extraño un regalo? Aunque fuera
anónimo…
Lo desenvolvió con cuidado. Nunca había sido de la creencia de que si no abrías
los regalos rompiendo el papel, te quedabas sin más regalos… Y es más, hasta
hace poco le gustaba guardar los papeles de regalo y los lazos. Al abrir la
pequeña cajita vio que se trataba de un colgante de plata con un cordón negro,
se trataba de un sol. Acto seguido se fijó en que debajo del colgante había un
papel doblado.
“Espero que te guste. Quería tener un detalle y más después del „favor‟ que me
has hecho esta mañana. Sé que este regalo no estará a la altura de lo que
acostumbrarás a recibir, pero es mi forma de decirte que eres un sol. Feliz
cumpleaños, aunque sé que tu día es la semana que viene… Un beso, Zack.”
Annie pasaba el dedo por el colgante y no podía parar de leer una y otra vez la
nota. Desde luego no sabía en que se basaba Zack para decir que estaba o no
a la altura de ella, pero ese regalo había superado todas sus expectativas…
~
- Justin: ____… (Y moviéndola un poco) Venga ____…
Justin la tenía cogida en brazos. Ella le decía que era como un príncipe. Acto
seguido él la estaba besando. Eso estaba mal, pero se dejaba llevar. Él
despertaba algo en ella que ni Alex conseguía despertar, no podía ser solo el
hecho de que Justin besara mejor que Alex, tenía que haber algo más, pero ella
no quería enamorarse, no podía enamorarse…
#THIRTY-FIVE
~
- Chaz: ¿Se puede saber por qué me has obligado a quedar hoy tan temprano?
- Justin: Porque eres el único que iba a acceder.
- Chaz: ¿Qué pasa? ¿Tengo cara de pringado?
- Justin: No… Pero te interesa la camarera y ella esta siempre desde primera
hora por allí (Y observó la reacción de su amigo de reojo).
- Chaz: Si me has hecho madrugar solo para reírte de mi te aseguro que me
vas a conocer cabreado.
- Justin: Madrugar dice… Son las 12 ¡eh!
- Chaz: Si bueno… Pero yo debería estar durmiendo.
- Justin: Anda, deja de quejarte.
- Chaz: No, para un momento (Y frenó su paso en seco) A mí o me dices a que
vamos tan temprano al club o me doy media vuelta ahora mismo.
- Justin: Tú vas solo para que yo no vaya solo.
- Chaz: Y tu vas para… (Mirando a su amigo fijamente)
- Justin: A hablar con alguien.
- Chaz: (Sonriendo con picardía) ¿Con la afortunada de anoche quizás?
- Justin: Y dale… Que ayer no estuve con nadie.
- Chaz: ¡Anda ya! Si desapareciste super pronto.
- Justin: Pero no estuve con nadie.
- Chaz: Conmigo o eres sincero o no vamos a llegar a ninguna parte ¡eh! De
momento de aquí no me muevo.
- Justin: (Resoplando) Si empiezas a andar te cuento que hice ayer y que voy a
hacer ahora.
- Chaz: (Andando) ¿Ves como hablando se entiende la gente? ¡Vamos! Empieza
a largar…
~
- Miranda: ¡Vaya! No esperaba encontrarme con ninguno de la fiesta de ayer
por aquí tan temprano.
- Annie: Jaja… Ya bueno, pero tengo clase de tenis. ¿Me pones un café?
- Miranda: Si, ahora mismo. De todas formas, yo soy tú y hubiera pasado de la
clase. Debes estar muerta. (Mientras preparaba la cafetera)
- Annie: No te creas. No suelo beber, y ayer me fui bastante pronto.
- Miranda: Podía aprender ____ de ti entonces.
- Annie: (Extrañada) ¿Cómo?
- Miranda: (Acercándose de nuevo a Annie con la taza) Si… ¿No se llama ____?
Una chica con la que sueles venir.
- Annie: (Asintiendo) Si, si… Pero no sé porque dices que tendría que aprender
de mí.
- Miranda: ¿No la viste?
- Annie: (Algo insegura de su respuesta) Si… ¿Ayer en la fiesta? Estuve algo
con ella. Luego anduvo con su novio.
- Miranda: Por cierto… Una pregunta, ¿su novio es un tal Justin?
- Annie: (Sorprendida) No, no… Para nada, su novio se llama Alex.
- Miranda: Ah… Vale, es que ayer ese chico me dejó un poco desconcertada.
- Annie: ¿Alex?
- Miranda: Justin.
- Annie: Vale… Ya me he perdido del todo. Explícame que le pasó a ____, que
te desconcertó de Justin y porque pensabas que era el novio de ____.
- Miranda: Jaja… Veo que no viste a tu amiga en su momento álgido.
- Annie: ¿____?
- Miranda: Se cogió el pedo del siglo.
Annie se limitó a abrir mucho los ojos como única respuesta. ¿_____ Mahone
borracha?
#THIRTY-SIX
- Miranda: Vale… Por tu expresión veo que no me confundía al pensar que eso
no le iba. Pues no sabes como acabó. Estuvo toda la noche bebiendo sola.
- Annie: ¿Sola?
- Miranda: Si… Te busqué, porque solo la había visto hablando contigo en toda
la fiesta. Y entonces me encontré con Justin, un encanto por cierto. Se ocupó
de ella y la llevó a casa.
- Annie: Menos mal… ¿Pero por qué pensabas que él era su novio? ¿Te lo dijo
él? Porque vamos… serán las ganas, el novio de ____…
- Miranda: (Cortándola) No, no… Él no me lo dijo, lo que pasa es que cuando le
dije que la chica llevaba toda la fiesta sola dijo algo como que era culpa de su
novio y después, cuando me extrañé de que se fuera a perder la fiesta por ella
me dijo que eso en parte también era su culpa.
- Annie: (Sonriendo) Ya… Entiendo.
- Miranda: ¿Así que el rubito va detrás de ____? Jaja… Ya me parecía raro
tanto altruismo por estos lares.
- Annie: Jajajaja, bueno… pero eso es secreto ¡eh! O eso cree él al menos.
- Miranda: ¿Y el novio de ____ es más guapo? Porque tiene que ser todo un
monumento.
- Annie: Jaja… La verdad es que no, pero es muy buen chico.
- Miranda: (Alzando una ceja) ¿Segura?
- Annie: Bueno… O eso hubiera dicho hasta ayer. Joder, ____ solo fue a la
fiesta por él y el muy imbécil no le hizo ni caso. Mira (Señalando con el dedo)
Es ese de ahí…
- Miranda: Bueno… Tampoco esta mal. (Y fijándose en la puerta) ¡Uy! Ahí viene
el otro pretendiente de tu amiga.
- Annie: (Fijándose en al puerta) Es muy buen chico. Pero acostumbra a jugar
con las chicas, y estoy segura de ____ es una más.
- Miranda: (Con los ojos como platos) O no…
En el momento que Miranda dijo eso fue porque vio como Justin se acercaba a
Alex y lo hacía levantarse tirando de su camisa.
Ese fue un golpe bajo tanto para Justin como para Annie. Quizás Alex tenía
razón y antes de mirar por hacer que él la cuidara, deberían cuidarla más ellos
primero.
#THIRTY-SEVEN
~
Chaz se había sentado en la barra y hacía ya varios minutos que Miranda le
había servido lo que había pedido. Ella daba vueltas limpiando y ordenando
cosas. Salvo Chaz y el grupo de Alex no había casi nadie en el local y todos
parecían servidos. De repente Miranda se le acercó…
- Miranda: Voy a preguntarte por Justin.
El gesto de Chaz se tensó. Justin le había contado que había sido Miranda quien
le había llevado hasta ____ y que algo habían hablado, pero lo último que se le
habría pasado por la cabeza es que Justin pudiera haber llamado la atención de
Miranda. Aunque tampoco le extrañaba. Desde luego había empezado con
mejor pie que él.
- Chaz: (Serio) ¿Y qué quieres saber de Justin?
- Miranda: (Algo cortada por la seriedad del chico) No bueno… Como casi mata
al chico ese…
- Chaz: (Mirando a Alex de reojo) Ya… Pero ¡Bah! Es un imbécil. De no ser por
los amiguitos que tiene, hubiera dejado que Justin le diera.
- Miranda: Si que esta enamorado entonces. (Sonriendo)
- Chaz: (Alzando una ceja) ¿Cómo?
- Miranda: Hombre… Si es capaz de pegarle al novio de ____ solo por haberla
dejado sola en una fiesta. O es de tomarse las cosas muy a pecho o…
- Chaz: (Sonriendo) Pobre rubio… Lo quiere disimular pero lo lleva tatuado en la
frente.
- Miranda: Jaja… Tranquilo, yo no digo nada.
- Chaz: Eso espero… (Y le guiño un ojo) Pero de todas formas, es normal que
se haya puesto así. No es que sea de tomarse las cosas muy enserio, pero ayer
con ____ se agobio bastante.
- Miranda: ¿Tan mal se puso? No sé yo la vi muy borracha pero…
- Chaz: No bueno… Lo normal en esos casos, pero esa chica lo trae de cabeza y
ayer acabó llorando y tal. Y encima llorándole por el anormal ese (Entornando
la mirada hacia Alex).
- Miranda: Entiendo… Pues pobre chico, la verdad es que me pareció un
encanto.
En ese momento el gesto de Chaz volvió a tensarse, ¿podía ser que se hubiera
fijado en Justin aun teniendo ella novio y sabiendo que a él le gustaba otra?
Pero Miranda siguió hablando sin fijarse en él…
- Miranda: Desde luego, ____ estaría mejor con tu amigo que con Alex…
- Chaz: (Volviendo a sonreír) Ya… pero lo tienen complicado.
- Miranda: Si ya… Cuando a las chicas se nos mete alguien en la cabeza…
- Chaz: Aparte… Sus familias tienen problemas desde siempre, y ni de coña
aceptarían que ellos fueran novios.
- Miranda: Ya bueno… Pero que tampoco se van a casar.
- Chaz: Ya, pero… Aquí así son las cosas. A mi ya me deben considerar un caso
perdido, 18 años y soltero… Casi estamos hablando de un delito.
- Miranda: Jajaja… Serás payaso… (Y se giró para atender a alguien que la
llamaba).
Chaz la miraba sonriente. Deseaba con todas sus fuerzas que Annie y Justin no
volvieran nunca y pudiera tener la excusa para quedarse más con Miranda.
Igual era simplemente porque no solía molestarse en hablar enserio con las
chicas o porque realmente nunca había conocido a una chica como ella… Pero
le encantaba su compañía.
~
- Annie: Bueno Justin… Pero hiciste lo que tenías que hacer. La cuidaste y eso
te lo va a saber agradecer. Lo de hoy…
- Justin: No, no, para. Dudo mucho que ____ pueda recordar absolutamente
nada de lo de ayer, así que ni se te ocurra contarle que se quedó conmigo.
- Annie: (Extrañada) ¿Por? ¿No es que te gustaría ser su amigo?
- Justin: Ella no quiere que seamos nada y yo no quiero que piense que soy un
pringado que va detrás de ella como un perrito faldero.
- Annie: ¡Venga ya Justin! Sabes que ____…
- Justin: Hablo enserio… No le cuentes nada.
- Annie: Lo siento… (Y le acarició una mejilla)
- Justin: (Alzando una ceja) ¿Qué sientes?
- Annie: Haberte hecho mala fama con ____. Esta claro que ella no es una más.
- Justin: (Con media sonrisa) Tranquila. Si aunque le hubieras hablado
maravillas de mí… Sus padres odian al mío y eso es lo que más cuenta para
ella.
- Annie: Bueno… ____ nunca ha sido muy valiente en cuanto al tema de
enfrentarse con su padre, supongo que le costaría mucho. De todas formas…
No vuelvas a hacer ninguna tontada como la de hoy, sabes que si esos te
cogen manía te van a partir la cara en cuanto tengan oportunidad.
- Justin: Tranquila. (Y mirando fijamente a su amiga) Ya he decidido que voy a
pasar de ella. Al principio tenía la estúpida idea de que no quería estar conmigo
solo por el tema de nuestros padres, pero…
- Annie: ¿Pero qué?
- Justin: Pero ayer me di cuenta de que esta muy pillada por Alex. Yo no tengo
nada que hacer… Así que paso
#THIRTY-SEVEN
- Annie: (Con media sonrisa) Somos de lo que no hay rubio. Los dos
enamorados de la primera persona que no nos hace ni puñetero caso.
- Justin: Jaja… ¿Y tú de quien estas enamorada?
- Annie: (Levantando un poco el colgante que llevaba puesto) ¿Te gusta?
- Justin: (Extrañado por el cambio de rumbo de la conversación) Si… ¿nuevo?
- Annie: Me lo regaló Zack por mi cumpleaños.
- Justin: Epa… Entonces si que te hace caso.
- Annie: No… Ahora creo que somos amigos. (Y torciendo el gesto) No sé,
suena muy mal.
- Justin: Desde luego, el Zackito ese es tonto.
- Annie: (Sonriendo) Y ____ también. Bueno, yo me voy que llego tarde. Luego
nos vemos ¿si? (Y mientras se alejaba) Y no te metas en líos hasta que pueda
verte.
~
Esa misma tarde Annie fue a visitar a ____. La había llamado por teléfono y le
habían dicho que estaba en cama, por lo que supuso que la resaca debía haber
sido más que considerable. Aunque eso ya le hubiera quedado claro tras el
relato de Justin.
____ giró su cara y se fijó en el balcón con una sonrisa… Se sentía mal por
haber dudado de Justin. Él que solo había sabido ayudarla desde que se había
presentado en su vida por primera vez y ella era incapaz de reconocerlo. ¿Por
qué le era tan complicado admitir que simplemente él la había cuidado más que
Alex?
- ____: (Sin mirar a Annie) Tendré que darle las gracias.
- Annie: (Sonriendo) Tendrás que esperar una semana.
#THIRTY-EIGHT
Unos días después nada había cambiado mucho. Justin seguía cumpliendo su
castigo por lo que ____ no había tenido oportunidad de disculparse. La relación
de Annie y Zack parecía bien definida por el término “amistad”, aunque a
ninguno de los dos les gustara mucho ese calificativo; pasaban más tiempo
juntos que un simple monitor con su alumna, pero tampoco demasiado. Y Chaz
y Miranda habían pasado a ser amables el uno con el otro, había un extraño
sentimiento que no les dejaba pasar de la simple amabilidad, algo que les decía
que podían descubrir algo que todavía no querían descubrir. Ademas Miranda
se ha hecho muy amiga de Ella, la hermana pequeña de Chaz aunque eso a su
tia Jordan no le guste, ya que para ella Miranda fue una extraña y ademas no
de su clase ya que Miranda era pobre y trabajaba en bar.
---
No había vuelto a pisar el club desde el día de la fiesta, salvo para ir a las
clases de tenis, pero sabía que Justin ya no estaba castigado y que podía
encontrárselo en cualquier momento, por eso ese día si quería pasarlo en el
club. Necesitaba darle las gracias.
Después de la fiesta, Alex le había pedido disculpas centenares de veces y
estaba más atento que nunca, pero ella ya no se sentía como antes. Había
aceptado sus disculpas y en teoría todo estaba mejor que nunca, pero ella no
podía parar de pensar en Justin. Ya era una semana sin verlo ni siquiera de
lejos. Quería convencerse de que solo necesitaba darle las gracias.
____ levantó la mirada al oír ese nombre, pero solo porque el recuerdo de
Justin confesándole que la quería le golpeó como una bofetada. ¿Seguiría
sintiendo lo mismo? En ese momento la imagen que cruzó por su mente fue la
de Sara. Enseguida descartó esa posibilidad.
Pero antes de que pudiera seguir dándole vueltas, Justin volvió a intervenir…
- Justin: Como amigos…
- ____: (Algo dudosa) Pero Justin… ¿Y tus padres? Nos pueden ver y…
- Justin: Decía fuera del club. No sé, hacer algo juntos. (Pero se arrepintió)
Bueno, que ha sido una tontería. No importa, además tú ya te ibas ¿no?
- ____: (Con media sonrisa) Me encantaría.
- Justin: ¿Qué? Digo… ¿Enserio?
- ____: Enserio.
- Justin: (Sonriendo) Entonces… ¿vamos?
- ____: Pero… Porque somos amigos. (Y viendo que Justin la miraba
desconcertado) Quiero decir que sigo estando en deuda contigo.
El chico le sonrió y giró la esquina sin decir nada. ____ se quedó apoyada en la
pared un momento. Sabía que tenían que tener cuidado con los padres de
Justin y además… Necesitaba recuperarse de esa sonrisa.
---
- Jeremy: ¿Y ahora a dónde va?
- Pattie: ¡Ay! Cariño, lleva toda una semana encerrado en casa. Déjalo un poco
a su aire.
- Jeremy: ¿Pero por qué estar a su aire siempre implica llevarme a mí la
contraria?
- Pattie: Tiene 17 años. Es la edad. Venga Jeremy, tú eras como él.
- Jeremy: (Mirando por donde se había ido su hijo) Eso es lo que me preocupa.
Que me recuerda a mí.
Después de ese comentario y mientras se estaba girando chocó con una joven
que se dirigía a la entrada muy distraída.
- Jeremy: (Sorprendido) Ay perdona. ¿Te he hecho daño?
____ dio un paso atrás por el impulso y levantó la mirada con intención de
disculparse. Pero no pudo decir nada. Eran los mismos ojos miel que había
tenido hace tan solo unos segundos justo delante…
____ pasó al lado de ellos y siguió su camino. Todo eso había sido muy raro, se
habían mirado como si los dos hubieran reconocido algo familiar en el otro. Ella
a pesar de conocerlos e identificarlos como los padres de Justin, no había
podido evitar quedarse prendada de esos ojos igual que le pasaba con los de
Justin, pero… ¿Y él? ¿Qué había visto él en ____ que lo había hecho bloquearse
de esa manera?
Casi se había olvidado de porque se iba del club en ese preciso instante.
Cuando alguien posó su mano en el hombro de ella. ____ dio un respingo algo
sobresaltada.
- Justin: (Sonriendo) Tranquila…
____ lo miró algo más relajada. El encuentro con sus padres la había dejado
tan descolocada que casi se olvida de él.
- Justin: Pensaba que venías detrás mía.
Ella lo miró un poco dubitativa, ¿contarle la escena que acababa de
protagonizar? Mejor que no.
- ____: (Con media sonrisa) Es que me he cruzado con alguien cuando iba a
salir.
- Justin: ¿Alguien conocido?
- ____: Algo así…
Justin le sonrió y desistió de sacar más detalles de la causa del retraso de ____.
Estaba a punto de hablar cuando ella se le adelantó.
- ____: ¿A dónde quieres que vayamos?
Él la miró sonriente. Tenía la sensación de que había forzado un poco la
situación, y si ya la sola presencia de ____ conseguía ponerlo nervioso, pensar
que ella estaba allí obligaba no ayudaba mucho, pero desde luego parecía que
ella se encontraba a gusto.
- Justin: ¿Me dejas llevarte a un sitio especial?
- ____: Me encantaría.
- Justin: Te advierto que hay que andar bastante.
- ____: No me importa. Te sigo.
#FORTY
#FORTY-ONE
- Justin: (Sonriendo) Jaja… Es que no tengo mucho que contar. No sé, soy
normal.
- ____: Jajajaja… Eso dependerá de a que llames tú normal.
- Justin: Bueno… La mayoría del tiempo al menos. No sé, iba al mismo instituto
que Anny, a mis amigos ya los conoces.
- ____: No. Bueno, de vista, pero no conozco a ninguno.
- Justin: Ya te los presentaré si quieres. Son un poco animales, te advierto.
- ____: (Sonriendo) Me vale con que me hables de ellos. ¿Quién es tu mejor
amigo?
Benja: Chaz supongo. Antes no salía con ellos. Mis padres me obligaban a estar
con mis vecinos (Haciendo una mueca de asco) Pero este año ya pasé de
hacerles caso. De todas formas Chaz siempre ha sido mi mejor amigo.
- ____: He oído a Anny hablar de él.
- Justin: (Poniendo los ojos en blanco) ¡Uy Anny! Cuando te hable de Chaz
creete la mitad de la mitad. A él y a mí nos tiene simpatía, pero nos hace
siempre muy mala fama.
- ____: Por algo será.
- Justin: Jaja… No, enserio. A Chaz te lo voy a presentar, lo que no te rías con
él, no te vas a reír con nadie.
- ____: ¿Y Anny?
- Justin: (Mirándola extrañado) ¿Qué pasa con Anny?
- ____: Háblame de ella.
- Justin: Pero si la conoces.
- _____: Ya, pero… No sé, quiero saber como la ves tú.
- Justin: (Sonriendo) Pues supongo que ella también lleva el cartel de mejor
amiga. Es especial.
- _____: ¿Especial en que sentido?
- Justin: No sé. Ella… Bueno, siempre se dice de la gente que es admirable que
sean tal cual son delante de todo el mundo y esas cosas. Anny… (Y tras
pensarlo un momento) Ella encaja siempre. Quizá la ves y piensas que es una
guapita de cara que no tiene dos dedos de frente, pero puedo decirte que ha
sido siempre la cerebrito de la clase. Es amiga de todo el mundo, porque habla
hasta con las paredes, pero a la vez es extremadamente tímida. (Y dándose
cuenta de que ____ lo miraba con curiosidad) Es que siempre he admirado eso
de ella, tiene tantas facetas distintas, que este donde este, encuentra su lugar.
- ____: (Con media sonrisa) Igual que tú entonces.
- Justin: ¿Yo? ¡Qué va! (Y suspirando) Yo muchas veces siento que sobro.
- ____: ¿Y qué dirías de mí?
- Justin: En cierto modo eres como Anny. Las dos tenéis muchas cosas buenas,
pero tú eres más selectiva.
- ____: (Mirándolo de reojo) ¿Qué quiere decir eso?
- Justin: No dejas que cualquiera se te acerque. Solo tratas con Anny y con
Alex. A Anny la conozco y Alex… Bueno, si le has escogido como novio debe ser
alguien que vale la pena.
- ____: (Interrumpiéndole) ¿Y tú? (Justin la miró) Digo… Contigo también
tengo trato.
- Justin: (Con media sonrisa) Un poco obligada, ¿no crees?
Ella estaba a punto de contestar cuando Justin volvió a intervenir.
- Justin: Ya casi hemos llegado. (Y señalando con la mano) Nos queda subir ese
tramo.
- ____: ¿A dónde me llevas exactamente?
- Justin: Este lugar me lo enseñó mi abuelo. Siempre vengo aquí cuando quiero
estar solo. (Y estirando su brazo) Dame la mano.
Ella obedeció y Justin la ayudó a subir una última pendiente que los separaba
de su destino. Un destino que todavía no se llegaba a ver. Llevaban cerca de
media hora andando a través del monte. ____ casi ni se había dado cuenta,
había estado muy pendiente de la charla con Justin. Si llegaba a tener que salir
sola de ahí, sería totalmente incapaz. De repente se sintió agobiada de calor.
Eran las peores horas de sol y ellos llevaban un rato andando. Estaba a punto
de dar la última zancada para terminar con la pendiente y perdió el equilibrio.
Por suerte Justin seguía teniéndola cogida por la mano y tiró de ella para evitar
que se cayera. El impulso llevó al cuerpo de ____ a chocar con el de Justin. Se
miraron a los ojos sin separarse, él todavía la tenía cogida de la mano.
#FORTY-TWO
Se acercaron al borde y la chica pudo comprobar que debían estar como a cinco
metros de altura.
- Justin: (Hablándole al oído) Hay profundidad suficiente.
- ____: (Girándose) ¿Cómo?
- Justin: Para tirarse ¿Te atreves?
- ____: Jaja… No, no. Además, no he traído bañador. (Empezó a ponerse muy
nerviosa)
- Justin: ¿Qué más da? ¿Has visto el sol que hace? En menos de diez minutos
te has secado. Venga…
-____: (Soltándose de la mano del chico) No Justin enserio.
- Justin: No pasa nada, de verdad. Me he tirado miles de veces.
- ____: Justin no insistas.
- Justin: ¿Te da miedo? (Y al no recibir respuesta alguna) Hazlo por mí.
- ____: Justin...
- Justin: (Sonriendo) Dijiste que me debías una.Te pido esto como favor.
- ____: Cualquier cosa menos esto, enserio.
- Justin: ¿Tienes miedo?
- ____: (Cerrando los ojos resignada) No sé nadar.
- Justin: Me tiro yo primero. No te va a pasar nada.
- ____: (Mirándolo a los ojos) Justin, no sé nadar porque me da pánico el agua.
- Justin: (Acercándose) Perdóname. Yo… buf, siempre te acabo molestando.
- ____: (Con media sonrisa) No tranquilo. El lugar es hermoso.
- Justin: Ven… (Tendiéndole su mano de nuevo) Vamos abajo.
Él volvió a guiarla y bajaron hasta el pie de la plataforma. Justin no había
querido pasar por allí antes para no destripar la sorpresa, pero ahora que sabía
que no iba a conseguir que ____ se tirara al lago, no importaba.
#FORTY-THREE
Justin estaba justo delante de ella. La tenía cogida de las manos y tal y como le
había prometido no iba a soltarla por nada del mundo. Sonrió al ver que ella
tenía sus labios apretados y los ojos fuertemente cerrados.
Soltó una de sus manos entre los desesperados intentos de ____ por evitarlo,
pero ella enseguida volvió a sentir la mano de Justin, esta vez en su rostro. La
suave caricia en la mejilla la hizo olvidarse por completo de donde estaba, solo
podía pensar en con quien estaba. Abrió los ojos lentamente. Él estaba ahí
delante sonriendo, con una mano fuertemente cogida a la de ____ y con la otra
acariciándole una mejilla, consiguiendo que lo que hasta hace unos minutos era
su mayor miedo, pudiera convertirse en algo mágico.
Tiró de ella y los dos salieron juntos del agua. Fueron segundos, pero fueron
esa clase de segundos en las que el tiempo se detiene y lo último que llegó a
sentir ____ en esos segundos fue miedo.
En cuanto salieron del agua ____ se abrazó al cuello de Justin. La magia del
momento no la había dejado sentir miedo, pero ahora se sentía embargada por
él.
Él sonrió y rodeó la cintura de ____ con uno de sus brazos mientras empezó a
acercarse hasta la orilla. Ella tardó un poco en darse cuenta de que ya hacía pie
y podía soltarse de él. Estaba temblando.
- Justin: (Cogiéndola de la mano y andando hacia la orilla) Estas helada…
Vamos al sol.
Llegaron a la piedra donde habían dejado sus cosas y ____ no había dicho
absolutamente nada.
- Justin: (Cogiendo su camiseta) Toma, quítate la tuya y ponte esta. (Y tras la
mirada de ____) Hasta que entres en calor al menos. Enseguida te secarás
tranquila.
____ cogió la camiseta que Justin le tendía y se dio la vuelta para que él viera
lo menos posible mientras ella se cambiaba. Pero en cuanto empezó a subir su
propia camiseta para quitársela Justin también se dio la vuelta. Tenía que verla
como una simple amiga, así que no quería ver de ella más de lo que vería de
una amiga. Empezó a ponerse nervioso.
- ____: (Poniéndose a su lado) Ya esta.
- Justin: (Cogiéndola de los hombros) ¿Estas mejor? (____ asintió) Lo siento.
No pensaba que… Bueno que lo fueras a pasar tan mal, yo…
- ____: (Cortándolo) No lo he pasado tan mal. No he sentido casi miedo.
- Justin: (Sonriendo) ¿Enserio?
- ___: Enserio. No sé… Supongo que el ver que no pasaba nada…
- Justin: Si algún día te vuelves a atrever, te enseño a nadar.
- ____: (Sonriendo) Lo tendré en cuenta.
Pasaron el resto de la tarde tumbados en la hierba, contándose secretos,
hablando de sus amigos. Al revés que debajo del agua, el tiempo pasó como un
suspiro.
~~~
- Justin: Gracias por la oportunidad.
- ____: Que dices… Me lo he pasado muy bien.
- Justin: (Alzando una ceja) ¿Lo dices enserio o por quedar bien?
- ____: (Sonriendo) Ya sabes que si. (Y mirando su reloj) Bueno… Pero voy a
tener que ir yéndome.
- Justin: Te acompaño.
- ____: No… Voy a llamar a mi padre para que me venga a buscar. Sino van a
saber que no he estado en el club.
- Justin: (Con media sonrisa) Bien. Entonces yo mejor entro. Para evitar
enfrentamientos y esas cosas.
- ____: Jaja… Si, mejor que no nos vean juntos.
- Justin: Bueno… entonces… Adiós, supongo ¿no?
- ____: Puede ser hasta pronto.
Él sonrió y se dirigió hacia la entrada del club. ____ lo miraba sonriente. Había
pasado una tarde realmente fantástica y desde luego le importaba muy poco
que fuera un Bieber, nadie conseguía hacerla sentir tan bien como Justin y solo
con estar a su lado.
FORTY-FIVE
- Jeremy: No me gusta tu actitud. Has estado castigado una semana por llegar
a las tantas de la mañana a casa. Y la primera tarde que sales la pasas borrado
del mapa, ¿qué esta pasando?
- Justin: ¿Para que me preguntas si luego nunca crees lo que digo?
- Jeremy: Me gustaría poder hacerlo. Pero sé que me mientes.
- Justin: Piensa que igual tú has hecho algo mal. Que igual hay alguna razón
por la que no te cuento donde estoy o con quien estoy en todo momento.
Su padre lo miró con gesto severo. Nunca le había gustado mucho la actitud de
su hijo con las mujeres, pero tampoco había sabido nunca como reprochárselo,
al fin y al cabo él había sido igual a su edad. Pero por una vez, deseaba que las
cosas fueran como siempre y que si su sospecha de que Justin había estado
con ____ era cierta, la tratara como hacía siempre con las chicas de su edad.
En el fondo siempre había sabido que no podía frenar a su hijo, que con
simples castigos él acababa siempre haciendo lo que le daba la gana, pero no
fue hasta que tuvo que prohibirle literalmente que se acercara a ____ Mahone,
cuando temió un acercamiento entre los dos jóvenes.
~~~
Sus padres la fueron a recoger y por suerte fue antes de que la pareja Bieber
saliera del club. De haberla visto sola esperando, el padre de Justin no hubiera
tenido ninguna duda de con quien había estado esa tarde su hijo.
- Teresa: (Una vez que ____ se había subido en el coche) ¿Qué tal la tarde
cariño?
- ____: (Algo nerviosa) Bien… normal.
- Teresa: ¿Has estado con Alex no? (Y sin esperar respuesta) Te ha llamado
Annie, pero ya le he dicho que no habías pasado por casa. (Y girándose un
poco para mirarla) ¿Te has mojado? (Y mirando a su marido) No me digas que
ha llovido y ni me he enterado.
- Santiago: (Con la vista fija en la carretera) No ha caído ni una gota. ¿Dónde
has estado ____?
- ____: (Nerviosa) No, es que… bueno, hacía mucho calor y me he mojado el
pelo. Por eso lo tengo un poco…
- Teresa: ¡Ah! Ya decía yo. Pero normal hija. Si habéis estado toda la tarde al
aire libre. Hoy ha hecho muchísimo calor.
____ tenía la vista fija en el retrovisor. Observaba a su padre. Estaba serio, era
lo normal en él, pero ____ se sentía mal. Sentía que con esa tarde lo había
defraudado por completo, aunque él no pudiera saberlo.
Su madre seguía hablando, en un inútil intento de hacer ese corto viaje en
coche, un momento familiar.
____ empezó a sentirse embargada por la culpa. ¿Por qué tenía que acercarse
a Justin si se lo habían prohibido tantas veces? Y lo que era peor… ¿Por qué
tenía que sentirse así con él? No solo defraudaba a su padre.Estaba
traicionando a Alex. Esa tarde con Justin había sido mil veces más especial que
cualquiera de sus citas con Alex y eso no estaba bien.
~
Evitó a toda costa volver a pisar el club en todo el fin de semana. Se había
propuesto ser amiga de Justin, pero no podía, simplemente porque no pensaba
en él como un amigo.
Había pasado todo el fin de semana con Alex, pero se había descubierto a si
misma pensando en Justin en los momentos más inesperados. Se había
levantado en sueños decenas de veces, y siempre con la misma escena… Justin
besándola. En sueños podía estar muy bien, pero una vez despierta, el
sentimiento de culpa le hacía tanto daño, que no merecía la pena.
Estaba desesperada. Cuanto más se proponía no pensar en Justin, más a
menudo aparecía él en su mente. Sobretodo su sonrisa, esa sonrisa…
El lunes no pudo escaquearse más de ir al club. Pero tenía muy claro que en
cuanto acabara la bendita clase de tenis, ella desaparecía de allí. Sin embargo
con eso fue suficiente.
Ya se había duchado y cambiado. Se dirigía hacia la salida relativamente
tranquila. No había visto ni a Justin ni a ninguno de su grupo por ahí. No tenía
porque encontrárselo. Pero entonces alguien tiró de su brazo.
Ahí estaba. Otra vez delante de él y lo peor de todo, había muy poco espacio.
- ____: (Muy nerviosa) ¿Qué… Qué quieres?
- Justin: (Sonriendo) Ahora es por tus padres ¡eh! Andan por aquí…
#FORTY-SIX
~
Chaz estaba apoyado en una pared. Su hermana tenía natación y tenía que
esperar a que saliera del curso. Faltaba cerca de media hora, pero a Ella la
ponía nerviosa que los que la conocían se quedaran mirándola, por eso él había
preferido estar fuera. Tampoco podía hacer planes con sus amigos y la cafetería
estaba cerrada, por lo que solo le quedaba esperar solo.
Pero entonces pasó ella cerca de la zona de las piscinas. Iba con un par de
cajas y en dirección al bar. No dudó en acercarse.
- Chaz: (Andando a su lado) ¿Te ayudo?
- Miranda: No hace falta, gracias.
- Chaz: (Quitándole el peso a Miranda) Te lo suplico.
- Miranda: (Sonriendo) Jaja… Bueno, si me lo suplicas… (Y terminó de soltar las
cajas) Qué raro tú tan solo ¿no?
- Chaz: (Andando) Estoy de niñera.
Miranda se giró y lo examinó con la mirada un momento. Él no sabía muy bien
que pretendía, pero se dejó observar.
- Miranda: (Sonriendo) Si quieres te la puedo cuidar por las tardes. Yo trabajo
esta semana de mañana.
- Chaz: (Sorprendido) ¿Qué? No, no… Tranquila, no hace falta. Y tus amigos?
Miranda agachó la mirada sonrojada. Se había ofrecido a cuidar a la niña por
las tardes porque ella trabajaba por las mañanas, ahora parecía que ella no
tenía vida social. Chaz se dio cuenta de que ella estaba incómoda.
- Chaz: Gracias enserio. Ella seguro que querrá verte, así que luego seguro que
vendré con ella.
Miranda le miró agradecida. Todavía le costaba verlo como el amable hermano
de Ella. No podía evitar verlo como el chico que se había reído de ella en varias
ocasiones y que la había besado sin su consentimiento.
~
Llevaban un rato los dos apoyados en la misma pared, uno al lado del otro y
muy cerca. Hablando de cosas sin la más mínima importancia. ____ hasta se
había olvidado de la bandada de mariposas que despertaba cada pequeño roce
de Justin sobre ella, pero para recordarlo no le hizo falta más que otro pequeño
roce.
Él cogió su mano derecha y la comparaba con su izquierda. Estaban hablando
de alguna tontería, no sabía ni como habían llegado hasta ahí, él le había
preguntado algo del piano y… Daba igual, tenía la mano de Justin sobre la suya
y nada más parecía existir a su alrededor.
#FORTY-SEVEN
____ salió como alma que lleva el diablo del bar. No podía seguir sintiéndose
así, no cuando era Justin quien despertaba todos esos sentimientos.
Andaba casi sin rumbo cuando lo vio. Alex caminaba hacia ella aunque no la
había visto, iba con varios amigos. Si él no podía hacer frente a la marea de
sentimientos que recorría el cuerpo de ____ en esos momentos, nadie iba a
poder luchar contra ella. Se acercó de forma decidida y antes de que él pudiera
ni siquiera saludarla, ella le había apartado de sus amigos cogiéndole de la
mano.
Lo miró con detenimiento tan solo un par de segundos. Le regaló una breve
sonrisa y se puso de puntillas hasta alcanzar sus labios y besarlo. Alex se
sorprendió de ver como ella tomaba la iniciativa, pero le gustó y no dudó en
seguir el beso.
____ sintió que Alex si podía decidir esa lucha que tenía lugar en su interior,
mientras se besaban no oía las palabras de Justin, no pensaba en él; solo
estaba Alex y sus manos rodeándola por la cintura. Se separó de él sonriente,
convencida de que todo podía solucionarse. Estar con Alex la haría olvidarse de
Justin. Pero sin apenas girar la cara, pudo ver a Justin.
Sus amigos no estaban muy lejos de Alex y de ella, y él la miraba fijamente, ni
triste ni alegre, ni serio ni sonriendo. Simplemente la miraba, y se sintió vacía.
Como si ese beso la alejara completamente de Justin y daba igual que estuviera
Alex o quien estuviera a su lado. Para ella era como si no hubiera nadie.
Justin le dio un golpe en el hombro a uno de sus amigos y se fueron de donde
estaban. ____ los observó marcharse y se abrazó un poco más a Alex. Él decía
algo de ir fuera. A ella le daba igual, solo podía pensar en Justin, en que estaba
enamorada, pero que eso daba igual.
~~~
Se puso justo en la puerta. Desde su conversación en el bar la llevaba todo el
día esquivando. ____ había comido con sus padres y Annie no se había atrevido
a intervenir, pero acababa de entrar al baño y ahora no se iba a ir sin decirle de
quien estaba enamorada. ____ fue a salir y se topó con Annie de bruces.
- ____: (Con media sonrisa) Estas en medio, ¿lo sabías?
- Annie: Si… (Mirando a los lados) Eso pretendía.
- ____: ¿Qué pasa?
- Annie: (Sonriendo) ¿Tengo que preguntarlo?
- ____: (Algo seria) ¿El qué?
- Annie: ¿De quién hablabas a la mañana?
- ____: (Resoplando) Anny…
- Annie: No me voy de aquí hasta que me lo digas. Si no querías que te
preguntara no haberlo confesado.
- ____: (Algo nerviosa y esquivando la mirada de Annie) De Justin.
- Annie: (Con los ojos como platos) ¿Qué? ¿De Justin?
#FORTY-EIGHT
Pasaron los días y las cosas no sufrieron muchos cambios. ____ y Justin se
evitaban a toda costa. Él intentaba aplicar ese dicho de “un clavo saca otro
clavo” y aunque estuviera muy lejos de ser algo medianamente serio o
importante, le estaba dando a Sara la oportunidad que, sin ser consciente de
ello, le había quitado por la aparición de ____ en su vida. Chaz y Miranda
tampoco habían vuelto a verse mucho. Él había inventado mil excusas para
mantener a Ella alejada del club y por tanto de la posibilidad de visitar a
Miranda. No quería verla ni plantearse que le pasaba con ella, porque desde el
beso, no podía pensar en otra cosa. Zack llevaba muchos días sin tener ninguna
excusa para acercarse a Annie, pero no podía sacársela de la cabeza. Se habían
acercado como amigos, pero ninguno de los dos sabía llevar ese rol con
naturalidad, por lo que volvían a ser solo profesor y alumna.
#FORTY-NINE
Llevaban días sin pisar el club por insistencia de ____, pero ese día era el
último para apuntarse a la fiesta de gala que se daba en el club y a la que su
padre la había obligado a asistir. No tener pareja la había librado de ello otros
años, pero éste la cosa era distinta.
~~~
Después de haberse apuntado, Alex insistió en que se quedaran por el club y a
____ no se le ocurrió ninguna excusa decente para persuadirlo de ir a otro
lado. Alex quería ir a saludar a sus amigos y ____ accedió sin mucho problema
cuando comprobó que no estaban en la cafetería, por la hora que era estaba
casi segura de que allí estaría Justin y lo último que quería era verlo.
Sin embargo, justo cuando pasaban por detrás de la cafetería se fijó en que en
un banco bastante lejano, pero que se encontraba en el camino que iban a
recorrer ella y Alex, estaban Justin y Chaz.
Llevaba toda la semana muy arisca con Alex. Era consciente de ello, pero no
podía evitarlo, el hecho de que se le acercara le hacía pensar automáticamente
en Justin y en como la había mirado tras verla besarse con Alex. De todas
formas en ese momento no se le ocurrió nada mejor que desviarlo un poco de
su camino y apoyarlo en una pared para besarlo.
Él se quedó totalmente sorprendido ante ese cambio de actitud, pero no le
molestó en absoluto. Realmente empezaba a estar un poco harto de la actitud
normal de ____.
Ella en ese momento prefería cualquier cosa a cruzarse cara a cara con Justin.
Pero empezó a sentirse muy incómoda. Quizá fuera por lo arisca y distante que
había estado todos esos días, o porque en el lugar donde estaban no podía
verlos nadie ya que era la entrada trasera del bar, que daba al almacén; pero la
cosa es que Alex se estaba comportando de forma mucho más pasional de lo
que era habitual en él. ____ no se atrevía a decir nada ni a separarse de forma
brusca, pero muy lejos de sentirse bien entre los brazos de Alex, se sentía
manoseada. Era muy desagradable. En el momento en que él empezó a besarle
el cuello intentó apartarse, pero él la ignoró. Empezó a asustarse. Se estaba
armando de valor para decir algo cuando él volvió a besarla en la boca. Ella
tenía sus manos en los hombros de Alex y no se atrevía a moverlas. De repente
la puerta del almacén se abrió y eso hizo que Alex se separara de ella. ____ dio
gracias al cielo por esa interrupción.
Miranda salió con varias cajas de plástico y las dejó al lado de la puerta. Fue
entonces cuando se fijó en la pareja. Sonrió disimuladamente y estaba a punto
de volver a meterse sin decir absolutamente nada cuando vio el gesto de terror
en la cara de ____. No se lo pensó ni dos veces.
- Miranda: (Acercándose un poco) ¿Tú eres ____ verdad?
- ____: (Asintiendo levemente) Si… ¿Por?
- Miranda: Te buscaba Anny hace un momento. Esta dentro.
- ____: (Alejándose de Alex) Ah, gracias. Ahora entro.
- Miranda: Si quieres pasa por aquí, así no das la vuelta.
- Alex: (Algo molesto por la interrupción) Ya irá luego. Dudo que sea algo
urgente.
- ____: (Sin atreverse a mirarlo) Gracias, entro por aquí si no te importa.
- Miranda: (Sonriendo) No para nada.
- Alex: Vale. Ahora va, que tengo que hablar con ella un minuto.
- Miranda: Si claro. Dejo abierto. (Y se metió al almacén)
- Alex: (Una vez que Miranda se había ido) ¿Se puede saber qué te pasa?
- ____: ¿A mí? Nada. Si yo solo…
- Alex: ¿Te crees que soy tonto? ¿Qué te pasa conmigo? Estas extremadamente
arisca y para un momento que…
- ____: Lo siento no… Me ha llamado Anny, no me pasa nada. Si quieres no
voy.
- Alex: Te intentabas apartar, ¿verdad?
- ____: (Sorprendida) ¿Qué?
- Alex: Hace un momento. Cuando nos besábamos.
- ____: ¿Lo has notado y has seguido?
- Alex: ¡Pero si has empezado tú!
- ____: Pero tú nunca eres así. (Y mirando al suelo) Estabas muy… No sé,
nunca eres así.
- Alex: ¿Te ha molestado? No he hecho nada del otro mundo. Eres mi novia.
- ____: Bueno, pero no sé… No estaba cómoda.
- Alex: No tienes 12 años _____.
- ____: ¿Y? Eso no quiere decir que…
- Alex: (Interrumpiéndola) Mira, ¿sabes qué? Paso de seguir discutiendo. No
quiero saber nada más de ti.
- ____: ¿Me… me estas dejando?
- Alex: Para estar así es mejor no estar.
_____ vio como Alex se iba. Estaba atónita. ¿La acababa de dejar por no
dejarse manosear? No entendía nada. Desde luego ese no era el figurín de
caballero que todo el mundo consideraba que era Alex. De repente ya no sabía
en que estaba pensando, pero las lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas
sin control ninguno y solo el hecho de que Miranda se acercó para abrazarla la
hizo ser consciente de donde estaba.
#FIFTY
~
Entre el tiempo que había pasado con Miranda y las vueltas que había dado
para distraerse, cuando llegó a casa habían pasado varias horas desde su
encontronazo con Alex. De todas formas se sentía alicaída. No sabía si era
realmente porque Alex la hubiera dejado, por el simple hecho de lo que había
pasado, o única y exclusivamente por Justin.
Iba a pisar el primer escalón para subir a su dormitorio cuando alguien la llamó
y la hizo girar.
- Teresa: ____, ¿dónde andabas?
- ____: Con Alex (Mintió)
- Teresa: Bueno, pues sube a cambiarte rápido. No vamos a llegar a la fiesta
sino.
- ____: (Empezando a subir las escaleras) No voy a ir a esa fiesta mamá.
Teresa se quedó callada y tardó en reaccionar antes de empezar a seguir a su
hija. Algo tendría que haber pasado con Alex para que ahora no quisiera ir a la
fiesta. Llamó a la puerta de la habitación.
- ____: (Desde dentro) Pase.
Teresa entró y vio a su hija tumbada en la cama mirando hacia el balcón y por
lo tanto de espaldas a ella. Se acercó y se sentó en la cama.
- Teresa: (Acariciándole el pelo) ¿Qué ha pasado ____?
____ se limitó a encogerse de hombros. No sabía que decir.
- Teresa: ¿Pero como vas a darle plantón a tu novio? Venga, ve a ducharte que
yo luego te ayudo a vestirte y peinarte.
- ____: No tengo novio mamá.
Teresa suspiró. Sabía que algo debía haber pasado y solo estaba esperando a
que fuera ____ sola quien accediera a contarlo.
- Teresa: ____ ¿Qué ha pasado?
- ____: Me ha dejado.
- Teresa: Pero… Algo habrá pasado ¿no? No te pongas tan triste cariño. (Y le
acarició el pelo).
- ____: No estoy triste.
- Teresa: (Extrañada) ¿Entonces?
- ____: Se… Se ha pasado mamá. No estoy triste.
- Teresa: ¿Cómo que se ha pasado? Ay… ____, a veces cuando nos enfadamos
decimos cosas que realmente no sentimos. No le tengas en cuenta lo que…
- ____: Pero es que…
- Teresa: ____, Alex es muy buen chico. Y a ti te gusta, sino no estarías así de
triste.
- ____: Pero si…
- Teresa: (Levantándose de la cama) Venga, dúchate y vístete. En un rato te
encuentras con Alex y ya verás como arreglas todo enseguida.
____ se quedó seria. Pero se dirigió al baño tal y como le había ordenado su
madre. Si ni su madre se dignaba a escucharla, ¿quién iba a hacerlo? Se metió
a la ducha y dejó que el agua le corriera por la cara sin pensar en nada durante
largo rato…
FIFTY-ONE
No quería ir a esa fiesta. No para encontrarse con Alex, no para hacer como
que no pasaba nada, como él seguramente pensara hacer delante de sus
padres. Entonces le vino la imagen de Justin a la mente. Que distinto sería todo
si ir a la fiesta significara encontrarse con él. Claro que estaba triste, pero no
por Alex, era la absoluta indiferencia de Justin lo que la tenía así. ¿Cómo no iba
a hartarse Alex? Ella llevaba toda una semana sin parar de pensar en otro. Por
mucho que intentara disimular eso tenía que notarse. ¿Y ahora que podía
hacer? Quizá pudieran tener algo a escondidas de sus padres, tal y como había
sugerido Annie. Se rió de su propia ocurrencia y se pasó las manos por la cara.
Él estaba acostumbrado a hacer lo que le daba la gana siempre que le daba la
gana. No iba a empezar a tener miramientos por ella, no por ella que le había
rechazado.
Llamaron a la puerta.
- ____: (Incorporándose) Adelante.
- Vanessa: Soy yo señorita ____. (Y pasando a la habitación) Me ha dicho su
madre que la ayude a peinarse y que me asegure de que va a la fiesta. Ellos ya
han partido.
____ asintió con los labios apretados. Estaba claro que no iba a librarse. Se
levantó y se sentó en la silla de su tocador. Tenía gesto triste y su pelo mojado
caía de forma desordenada sobre sus hombros.
Teresa se acercó a ella y empezó a desenredarle el pelo con suma delicadeza.
- Vanessa: ¿Pasa algo señorita ____?
- ____: (Sin mirar a Vanessa) No…
Vanessa suspiró y siguió arreglando el pelo de ____. Estuvo un rato secándolo
y después empezó a acomodárselo en un sencillo recogido.
____ le pasaba a Vanessa orquillas de manera distraída cada vez que veía la
mano de la mujer por encima de su hombro. Llevaba un rato dándole vueltas a
lo mismo…
- ____: Vanessa…
- Vanessa: ¿Si señorita?
- ____: ¿Se puede dejar de querer a alguien en una semana?
- Vanessa: (Sonriendo y mirando a ____ a través de su reflejo) Si se quiere de
verdad eso es imposible señorita.
- ____: ¿Y cómo sabes si es verdad? Digo… Si te dicen que te quieren. ¿Cómo
sabes que no te están mintiendo?
- Vanessa: Usted lo habría notado señorita.
____ le regaló una media sonrisa al espejo, aunque claramente estuviera
dirigida a Vanessa. La mujer acabó de peinarla y la ayudó a maquillarse
disimuladamente. Cuando dio el último toque de colorete sobre ella, la miró a
los ojos y le dijo.
- Vanessa: Nunca dudes cuando alguien te diga que te quiere ____, aunque
parezca repentino, a ti es muy fácil quererte.
____ sonrió ampliamente por primera vez en muchas horas y la abrazó sin
pensarlo dos veces. No sabía si era el halago de Vanessa, o el simple hecho de
que la hubiera tuteado, pero sus palabras habían conseguido hacerla sentir
mejor.
~
Daba vueltas en círculo con las manos apoyadas en su nuca. Estaba
incomodísimo con ese traje y Sara encima se estaba retrasando. Se aflojó la
corbata y se soltó el primer botón de la camisa. Eso era un agobio, ya le daba
igual lo que le pudieran decir sus padres.
- Annie: (Acercándose por atrás) Que poco duras arreglado Bieber.
- Justin: (Sonriendo) Ya ves… Esto de andar elegante no es lo mío.
- Annie: ¿Esperando a Sara?
- Justin: (Asintiendo) ¿Y tú a Chaz?
- Annie: Es peor que una chica.
- Justin: Mujer, compréndelo, tiene que estar guapo para ti.
- Annie: Si tanto le cuesta que hubiera empezado antes a arreglarse…
#FIFTY-TWO
Justin se limitó a reírse. Al poco llegó Chaz, también vestido con un incómodo
traje.
- Chaz: (Moviendo los hombros de manera nerviosa) Con lo bien que me
quedan los vaqueros y me hacen ponerme esto.
- Annie: Si bonito, buenas noches.
- Chaz: (Poniendo los ojos en blanco) Perdona…
- Annie: (Enhebrando su brazo en el de Chaz) Pero estas muy guapo.
- Justin: ¡Ey! ¿Y a mí no me dices nada?
- Annie: (Con el ceño fruncido) Ya te dirá Sara.
- Justin: Estas pesadita ¡eh!
- Annie: No la soporto y lo sabes.
- Justin: Pero eso da igual. Mientras la soporte yo ¿no? En eso consiste.
- Annie: Si claro, hasta que la dejas tirada, que entonces me toca a mí.
- Justin: (Sonriendo y pellizcándole la mejilla) Si te encanta.
Annie movió la boca dispuesta a contestar cuando alguien desde detrás de
Justin habló dirigiéndose a ella. Justin se giró y Chaz se soltó bruscamente de
Annie.
- Miranda: Perdonar… Anny, ¿podemos hablar un momento?
- Annie: Si claro. (Y mirando a Justin y Chaz) Ahora vengo, pero si viene Sara,
no me esperéis, te la llevas. (Y se alejó un par de pasos con Miranda).
- Miranda: No quería molestarte, pero… ¿Has visto a ____?
- Annie: (Negando) No. Supongo que no tardará en venir, he visto a su novio al
entrar. ¿La necesitas para algo?
- Miranda: No. Veo que no sabes lo de esta tarde.
- Annie: (Alzando una ceja) ¿Lo de esta tarde?
- Miranda: Alex ha dejado a ____.
- Annie: (Abriendo mucho los ojos) ¿Qué? ¿Seguro que no ha sido ella?
- Miranda: No. El muy cerdo se ha portado fatal. No sé, yo sin querer los he
interrumpido, estaban detrás del bar, bueno… ya sabes, a lo suyo.
- Annie: (Sonriendo) Si… Ya sé.
- Miranda: Mira, yo no he visto nada, pero les he oído hablar y luego ____ me
ha contado un poco y vamos… Que el tío ese la estaba presionando, o al menos
se estaba pasando. Ella quería que parara y el otro a lo suyo, para que quede
claro.
- Annie: (Con los ojos como paltos) ¿Alex?
- Miranda: (Asintiendo) El mismo. No sé, han discutido y él la ha dejado. No
creo que tu amiga venga. Sinceramente la he visto muy mal.
- Annie: (Cerrando los ojos) Lo mato. A ese lo mato. (Y mirando a Miranda) Y
parecía tonto…
- Miranda: Bueno… No quiero parecerte una chismosa, pero es que me había
quedado preocupada, no sé pensaba que igual vería a ____ por aquí.
- Annie: No tranquila. Buf, muchas gracias. A ver si consigo escaparme para ir a
verla. Aunque lo dudo.
- Miranda: Bueno, yo me voy. A ver si consigues animarla.
- Annie: (Sonriendo) Vale si, ya te contaré. Gracias de nuevo.
Se quedó un momento parada y vio como Miranda se alejaba. Después se giró
y se dirigió hacia Chaz y Justin.
#FIFTY-THREE
~
Llevaba un rato mirándose en el espejo de su armario. Se había puesto el
vestido que su madre le había elegido para esa ocasión. Era uno de los tantos
vestidos que sus padres le traían de regalo después de sus largos viajes por
Europa. Estaba sin estrenar, pero llevaba meses en el armario.
Era de un color rojo apagado. Se ajustaba a su pecho, pero la falda, a la altura
de sus rodillas, tenía cierto vuelo, aunque a ella le resultara incómodamente
rígida. Se fijó una vez más en los finos tirantes del vestido y se giró hacia su
tocador, donde su madre había dejado disimuladamente a la vista un collar de
perlas. No pudo evitar sonreír. Ella no iba a ponerse eso. Abrió el armario y se
agachó un poco para escoger los zapatos. Escogió unos tacones demasiado
altos para su gusto, pero que combinaban a la perfección con el color de su
vestido. Se volvió a erguir y respiró profundamente. Lo último que deseaba era
volver a ver a Alex en ese día, y eso era lo primero a lo que sus padres la
empujaban. Volvió a pensar en Justin. Con los ojos cerrados se admitió a si
misma que a él no le importaría encontrárselo, más que eso… A él si deseaba
verlo. Abrió los ojos algo sobresaltada. Alguien tenía sus manos apoyadas en
sus hombros. Cerró la puerta del armario lentamente y allí vio su reflejo.
Al ver que ella permanecía seria y no mostraba el más mínimo signo de alegría,
soltó rápidamente sus hombros. De repente volvió a sentirse idiota. ¿Qué hacía
él ahí cuando a ella le había prometido distancia? ¡Anny! Menudos consejos le
daba esa chica. No se dio cuenta de la forma exagerada en la que se tensó su
cuerpo. Dejó sus puños cerrados y colgando casi inertes a los dos lados de su
cuerpo. ____ seguía observándolo desde su reflejo. Al final atinó a sonreír.
- Justin: (Al rato de tenerla rodeada con su brazo y sin haberse movido) ¿Estás
bien?
- ____: (Levantando un poco la vista y mirándolo fijamente a los ojos) ¿Puedo
besarte?
#FIFTY-THREE
~
Llevaba un rato mirándose en el espejo de su armario. Se había puesto el
vestido que su madre le había elegido para esa ocasión. Era uno de los tantos
vestidos que sus padres le traían de regalo después de sus largos viajes por
Europa. Estaba sin estrenar, pero llevaba meses en el armario.
Era de un color rojo apagado. Se ajustaba a su pecho, pero la falda, a la altura
de sus rodillas, tenía cierto vuelo, aunque a ella le resultara incómodamente
rígida. Se fijó una vez más en los finos tirantes del vestido y se giró hacia su
tocador, donde su madre había dejado disimuladamente a la vista un collar de
perlas. No pudo evitar sonreír. Ella no iba a ponerse eso. Abrió el armario y se
agachó un poco para escoger los zapatos. Escogió unos tacones demasiado
altos para su gusto, pero que combinaban a la perfección con el color de su
vestido. Se volvió a erguir y respiró profundamente. Lo último que deseaba era
volver a ver a Alex en ese día, y eso era lo primero a lo que sus padres la
empujaban. Volvió a pensar en Justin. Con los ojos cerrados se admitió a si
misma que a él no le importaría encontrárselo, más que eso… A él si deseaba
verlo. Abrió los ojos algo sobresaltada. Alguien tenía sus manos apoyadas en
sus hombros. Cerró la puerta del armario lentamente y allí vio su reflejo.
Al ver que ella permanecía seria y no mostraba el más mínimo signo de alegría,
soltó rápidamente sus hombros. De repente volvió a sentirse idiota. ¿Qué hacía
él ahí cuando a ella le había prometido distancia? ¡Anny! Menudos consejos le
daba esa chica. No se dio cuenta de la forma exagerada en la que se tensó su
cuerpo. Dejó sus puños cerrados y colgando casi inertes a los dos lados de su
cuerpo. ____ seguía observándolo desde su reflejo. Al final atinó a sonreír.
Se giró lentamente y bajó su vista hasta la mano derecha de Justin, cerrada en
un puño con fuerza y haciendo que tuviera una postura muy poco natural.
Ninguno de los dos decía nada. Ella acercó su mano hacia el puño cerrado de
él, lo envolvió con su mano y Justin aflojó la fuerza. Él miró también hacia sus
manos, ahora juntas, pero se cruzó con la mirada de ____, la cual solo quería
volver a ver sus hermosos ojos miel. Cuando Justin abrió su mano del todo,
____ entrelazó sus dedos con los de él y dio un paso al frente, apoyando su
mejilla en el hombro del chico. Justin se sentía algo torpe, pero llevó su otra
mano hasta la espalda de ____. Ella lo imitó, rodeándolo también con el brazo
que le quedaba libre. Se fundieron en un abrazo casi sin quererlo, o quizá
queriéndolo mucho, pero sin haberlo buscado.
- Justin: (Al rato de tenerla rodeada con su brazo y sin haberse movido) ¿Estás
bien?
- ____: (Levantando un poco la vista y mirándolo fijamente a los ojos) ¿Puedo
besarte?
#FIFTY-FOUR
Ella estaba seria. ¿Qué iba a decir? ¿Qué no? Eso sonaba muy mal. No podía
poner a un chico que conocía desde hacía tan solo unas semanas por delante
de sus padres. Pero decir que si era sepultar una tercera oportunidad con él. Y
dicen que a la tercera va la vencida, ¿y si Justin no volvía a interesarse por ella?
¿Podría ella olvidarse de él? Se estaba acribillando a preguntas que no
conseguía responder y entonces notó otra vez la mano de él en su mejilla.
- Justin: (Acariciándole la cara con el pulgar) No hace falta que digas nada. Sé
que tus padres nunca van a dejar de ser lo más importante.
Pero en ese preciso instante dejaron de serlo. En ese momento, su amor por
Justin pasó a ser más importante que el respeto a sus padres. Y al darse cuenta
puso su mano sobre la que Justin tenía en su rostro.
- ____: Nos van a querer separar a toda costa.
- Justin: (Algo dudoso) Pero para que nos separen…
- ____: Tenemos que estar juntos (Y sonrió).
Él se movió un poco y quedó sentado lo más cerca posible de ____. La miró
fijamente a los ojos y le dio un tierno beso en los labios.
- Justin: (Tras separarse) No tienen porque saberlo tampoco. Yo nunca les he
presentado una novia a mis padres. (Y sonriendo) Bueno… Tampoco he tenido
nunca novia. Y los tuyos… No querrán conocerme así que…
- ____: (Sonriendo) No me atrevía a pedirte eso.
- Justin: ¿El qué? ¿Mantenerlo en secreto?
____ asintió. Justin le cogió la cara con las manos y le sonrió con dulzura.
- Justin: Haría cualquier cosa por estar contigo. (Y volvió a besarla).
Ella llevó sus manos al cuello de él y volvió a dejarse llevar por los besos de
Justin. Se sentía realmente bien, y todo porque estaba con él. Justin se separó
un poco y la recorrió con los ojos, como si hasta ese momento no lo hubiera
hecho.
- Justin: Estas muy guapa. (Y mirándola a la cara) ¿Ibas a ir a la fiesta?
Ella asintió algo sonrojada. Definitivamente las palabras sonaban mejor con la
voz de Justin.
- Justin: Entonces vamos. Tus padres te van a echar en falta.
- ____: Me gustaría estar contigo. En la fiesta no podríamos ni hablar. Llévame
a otro sitio por favor.
Justin sonrió. A él también lo iban a echar en falta… y seguramente eso le
supondría un castigo… y estaba Sara, pero todo le dio igual. Ella quería estar
con él. #FIFTY-FIVE
#FIFTY-SIX
Al día siguiente ____ bajó las escaleras de su casa con una sonrisa tan
contagiosa que su madre no se atrevió a decirle absolutamente por no haber
asistido la noche anterior a la fiesta del club. ____ pasó cerca de ella y le dio un
beso en la mejilla. La madre se quedó atónita pero intentó actuar con
normalidad.
- Teresa: ¿Un buen despertar?
- ____: (Mirando a las flores que su madre acomodaba en un jarrón) El mejor…
Teresa le acarició una mejilla sonriendo y le tendió una de las rosas que había
cortado del jardín para poner en el jarrón. ____ le sonrió y se fue hacia la
cocina. ____ pasó por la cocina solo para despedirse de Vanessa e irse al club.
Cogió la bolsa de deportes que Vanessa siempre le preparaba con tanto mimo y
salió de casa casi sin darse cuenta que no había soltado la rosa ni por un
instante. Una vez fuera de casa la olió y sonrió.
La noche anterior había sido la mejor de su vida. Ya no se creía eso de que
Justin siempre apareciera en el momento adecuado, con él daba igual el
momento o el lugar. Habían paseado durante horas por la ciudad. Habían
bailado sin música, habían reído, se habían besado… sobretodo se habían
besado. Y esa noche también había soñado con él. Pero ya nada la agobiaba.
No se sentía mal al reconocerse enamorada de él, ni se apuraba al soñar con
sus labios, ni se sentía culpable por desear verlo cuanto antes.
Siguió su camino hacia el club totalmente distraída. Había quedado con Annie y
llegó muy pronto, por lo que busco algo en lo que entretenerse. Pasado un
rato…
- ____: (Tocándole el hombro por detrás) Lo siento.
- Annie: (Girándose) ¿Cuándo has entrado? He llegado hace como un cuarto de
hora.
- ____: Yo poco antes. Estaba dando una vuelta para hacer tiempo.
- Annie: Ah bien. Bueno, ¿vamos?
- ____: Si. Pero es pronto ¿no? Digo… La clase empieza en un rato.
- Annie: ¡Bah! Pero vamos yendo.
- ____: (Encogiéndose de hombros) Como gustes.
~~~
- Chaz: (Secándose el pelo con una toalla) ¿Y por qué tanto empeño en hacer
deporte?
- Justin: Porque es la única excusa para que me dejen salir de casa.
- Chaz: ¿Otra vez castigado Justin?
- Justin: (Encogiéndose de hombros) Y… Ayer me borré de la fiesta, y Sara
debió montar una de impresión.
- Chaz: Jaja… Si… Pobre Anny, se pegó toda la noche huyendo de ella.
- Justin: (Abriendo la taquilla) Ya… me pasé, pero decirle: Oye, que me voy con
la chica que me gusta. Pues tampoco me parecía plan.
- Chaz: (Asintiendo) Si… Bien no suena. Bueno, ¿y qué tal con ____?
Pero Justin no contestó. Chaz no le veía la cara porque la puerta abierta de la
taquilla se la tapaba.
- Chaz: (Golpeando la puerta) ¡Ey! ¡Que te hablo!
- Justin: (Cerrando la taquilla con una sonrisa) Bien. Con ella muy bien. (Y
mirando a su amigo) Luego nos vemos.
- Chaz: ¿A dónde vas?
Pero no obtuvo respuesta. Justin se fue del vestuario casi corriendo. Sabía que
Annie y ____ tenían tenis a la una. Dudaba que ____ fuera a ir, pero lo que
había encontrado en su taquilla le despejaba esa duda. Si se daba prisa
conseguiría estar con ____ antes de que empezara su clase. Recorrió la
cafetería y alguno de los sitios por donde acostumbraba a verlas juntas. Al final
fue hasta las pistas de tenis, tenían que estar allí y no se equivocó. Estaban las
dos sentadas en un banco y una tercera chica estaba sentada en el suelo justo
delante de ellas. Las tres vestían con ropa de tenis y reían al unísono. Justin se
detuvo al encontrarlas y esperó unos segundos a que su respiración se calmara
antes de seguir andando hacia ellas. Vio como Annie le daba un codazo a ___ y
ella se giraba para mirarlo. Sonrió y se levantó dejando su raqueta en el banco.
- ____: (Una vez enfrente de Justin) Hola.
- Justin: ¿Qué tal has empezado el día?
- ____: Muy bien, ¿y tú?
- Justin: Seguro que mejor que tú (Y levantó un pequeño trozo de papel
blanco) ¿Solo lo crees?
- ____: (Algo sonrojada) ¿Y tú?
- Justin: (Acercándose un poco más) Yo estoy seguro..
- ____: Te quiero. (Y acortó la distancia hasta besarlo).
Él la cogió por la cintura e intentó alargar ese beso lo más posible. ____ colocó
sus brazos alrededor del cuello de Justin y se separó un poco, solo para mirarlo
a los ojos.
- Justin: Nunca me habían regalado una rosa.
- ____: Me alegra haber sido la primera.
- Justin: Vamonos.
- ____: ¿A dónde?
- Justin: No sé, por ahí… Yo puedo llegar un poco más tarde a casa sin liarla
mucho.
Ella sonrió y se separó de él para acercarse a Annie. Por un lado se sentía
sumamente tonta, pero por el contrario le encantaba sentirse así, le encantaba
la sensación de querer tanto a alguien, y a pesar de todas sus inseguridades,
no necesitaba más de lo que ya tenía para creer en Justin. Era todo tan fácil. Si
se olvidaba de su apellido al menos si.
- ____: Anny, me voy con Justin.
- Annie: (Torciendo el gesto) Menos mal que esto consistía en hacerme
compañía ¿no?
- ____: ¿A qué te refieres?
- Annie: Al tenis, ____, al tenis… Bah, vete anda.
____ sonrió y se dio media vuelta para ir donde Justin . Todo iba bien y nadie
podía estropear eso. Sin embargo y aunque ____ de verdad quería creer que
nadie podía estropear lo bien que se sentía en ese momento, se fueron a la
zona más alejada y menos concurrida del club, evitando así poder ser
sorprendidos. Justin se sentó al pie de un árbol y ____ le imitó. No dudaban de
que se querían, pero todavía les faltaba mucho por conocer al uno del otro. No
fue hasta que no se vio sentada a su lado cuando fue consciente de que por
muy nuevo que fuera todo eso para ella, para él no era igual.
- ____: (Mirando alrededor) ¿Siempre traes aquí a tus conquistas?
- Justin: (Frunciendo el ceño) ¿Perdón?
- ____: (Mirándole a los ojos) ¿Me vas a decir que no ha habido más
conquistas?
- Justin: Eso de conquistas suena muy mal. Lo sabes ¿no? ¿Tú a dónde ibas con
Alex?
- ____: No quería que sonara mal. Ni quiero hablar de Alex, ya sabes que he
tenido con él, y no hay más, ahora… a mí me gustaría saber más de ti.
- Justin: (Apoyándose en el tronco del árbol) No sé que quieres que te cuente.
Aquí en particular no he estado con nadie. Pero en el club si, bueno, ya conoces
a Sara.
- ____: Si… La conozco. Justin… ayer… Bueno, dijiste algo que creo que lo
dijiste sin más, porque no creo que me hayas querido mentir.
- Justin: ¿Con qué?
- ____: (Mirándole seria) ¿Nunca has tenido novia?
#FIFTY-SEVEN
- Justin: Tú.
- ____: ¿Y Sara?
- Justin: No ella… Bueno, tampoco quiero que te hagas una idea mala de mí
pero… Con ella…
- ____: Ya, tranquilo. Entiendo lo que teníais (Y mirándole algo insegura)
Porque es pasado ¿no?
- Justin: ¿Ves? Ya estas pensando cualquiera.
- ____: Yo no soy celosa.
- Justin: (Abriendo mucho los ojos) ¿Qué me quieres decir con eso?
- ____: ¡No! ¡Vamos ni loca! O sea… No, no es lo que has pensado. Yo no
estaría contigo si hay otra, me refiero a que… No te pregunto todo esto por
celos, es por curiosidad.
- Justin: (Con media sonrisa) ____, con Sara hubo lo que hubo, y si, en pasado.
Empezó la misma noche que te conocí. No sé, es una chica guapa y bueno…
Llamó mi atención, pero siempre me pasa lo mismo, en cuanto las conozco ya
no quiero pasar tiempo con ellas, por eso no he tenido novia antes. Contigo eso
es lo distinto, tú llamaste mi atención, te conozco y sigues haciéndolo y si hay
algo que deseo es pasar tiempo contigo, no me preguntes porque, porque no lo
sé, pero me gustaría estar todo el rato contigo, me gusta como me siento a tu
lado.
En ese momento fue ella la que sonrió. Le acarició la mejilla con una mano y se
acercó para besarle.
~~~
Llevaban un rato calentando cuando alzó la vista y se fijó en quien se acercaba
a la pista. El color se fue de su cara en segundos y la única persona que se
percató de eso fue Zack. La miraba preocupado ya que parecía que pudiese
caerse redonda al suelo en cualquier momento, además, tenía la vista fija en un
punto, decidió mirar él también en esa dirección. Un hombre de unos 40 años
se acercaba a la pista, se le veía serio y muy elegante, ¿sería su padre? Volvió a
mirarla y ahora si pudo darse cuenta de que la rubia no sabía donde meterse.
El hombre serio llegó hasta la pista y le hizo señas para que se acercara, ¡A ÉL!
- Zack: Hola, ¿puedo ayudarle en algo?
- Santiago: Si… Mi hija esta a puntada en este grupo de tenis, y querría pedirle
que la dejara salir unos minutos, es importante que hable con ella.
- Zack: Si claro, ahora le aviso.
- Santiago: No, pero… (Mirando hacia las chicas) La cosa es que no la veo. Mi
mujer me ha dicho que había venido.
Zack se giró hacia Annie y vio que la joven seguía con el mismo gesto de terror
dibujado en el rostro. Algo no iba bien y ese no era su padre- Tenía que pensar
rápido.
- Zack: Si bueno… Dígame el nombre y le diré si ha venido o…
- Santiago: ____ Mahone.
Zack entendió todo. Había visto a ____ irse con un chico cuando él iba hacia las
pistas, y ella era la única chica con la que veía a Annie fuera de las clases.
Estaba claro que ese hombre no podía saber que ____ no había ido a clase y
menos el motivo. Se dijo a si mismo que estaba haciendo bien, que le estaba
haciendo un favor a Annie, nada más.
- Zack: ¡Ah claro! Perdone, es que ha ido a buscar algo de material que nos
faltaba…
- Santiago: Ya… ¿Y tardará mucho?
- Zack: No, pero no se preocupe, mando a alguna chica a buscarla y que la
ayude con lo que le he mandado traer…
- Santiago: Esta bien. La esperaré en la cafetería.
- Zack: (Sonriendo) Perfecto.
Mientras el padre de ____ se iba, Zack se acercó a Annie.
- Zack: Vale… No estoy seguro, pero creo que después de esto me debes una.
Dime que ____ esta en el club, por favor.
- Annie: Si, si. Esta en el club.
- Zack: Pues vete a buscarla y que vaya a encontrarse con su padre a la
cafetería. Si le pregunta porque no estaba en clase que diga que había ido a
por algo al almacén.
- Annie: (Sonriendo) ¿No le has dicho que ha faltado?
- Zack: No…
- Annie: ¡Te debo una enorme!
Zack se limitó a sonreír y le hizo un gesto para que fuera a buscar a su amiga.
~~~
Cuando ya estaba delante del bar estuvo a punto de darse media vuelta, pero
entonces uno de sus amigos lo alcanzó…
- Chris: ¡Ey Chaz! Os he visto antes a Justin y a ti, pero no sé donde os habéis
metido. Entras ¿no?
Vale, eso era de ayuda. Si no iba solo la situación no era tan descarada. Al fin y
al cabo, ¿por qué no iba a poder él pasar un rato en el bar?
- Chaz: Si vamos. Yo también os estaba buscando (Mintiendo), Justin me ha
dejado tirado por su novia.
Entraron juntos y Chaz se concentró en buscar a sus amigos con la mirada.
Luego la buscaría a ella, luego hablaría con ella, pero no podía dejar evidencia
de cuales eran sus prioridades. Para su desgracia, él era ese tipo de personas
que las pocas veces que planifican algo. Todo el universo se confabula para que
no pueda cumplir esos planes. Dio un paso más…
- Miranda: ¡Ay perdona!
Chaz iba mirando al frente y cogió a la persona que se le había cruzado en el
camino por puro reflejo. Cuando vio que era ella soltó su codo como si
quemara.
- Miranda: (Mirándole ruborizada) Lo siento… Iba… Distraída, he mirado para
atrás y bueno… Yo…
- Chaz: (Serio) No importa.
Siguió andando hasta alcanzar a Diego que ni siquiera se había dado cuenta de
que perdía a Chaz por el camino. En cuanto se alejó de ella se arrepintió de
haber sido tan brusco. Quería hablar con ella, quería que fueran amigos… no
volver a llevarse mal. Aunque en ese momento decidió que no iba a planear
nada. #FIFTY-EIGHT
Llegó corriendo y se detuvo a unos metros de ellos. Los podía haber encontrado
en una situación comprometida. A Justin lo había pillado más de una vez en
situaciones así, pero esta vez era distinto. Él estaba sentado al pie de un árbol y
ella tenía la cabeza apoyada en sus piernas. Simplemente hablaban y reían, y
Annie solo alcanzaba a ver como Justin le acariciaba el pelo o la frente cada
tanto. Era una imagen realmente mágica y le fastidió tener que ser ella quien
rompiera esa magia.
~~~
Llegó a la cafetería y no podía evitar temblar. Su padre le imponía mucho
respeto, demasiado quizá. Y el hecho de que pudiera sospechar algo de su
relación con Justin la tenía consumida por los nervios. Respiró profundamente
antes de entrar y notó como Annie le apretaba el antebrazo amistosamente.
- ____: (Girándose hacia ella) Reza porque no haya sido Jusitn lo que lo ha
traído aquí.
- Annie: (Acercándose y dándole un beso en la sien) No es eso. Estoy segura.
Entró en el bar y vio que para su desgracia su padre se había sentado justo al
lado de los amigos de Justin. Volvió a rezar. Zack la había salvado, pero si
alguno de los amigos de Justin hacía un comentario, todo sería para nada.
- ____: (Pasándole el brazo por los hombros y besándole la mejilla) Hola papá…
- Santiago: (Con media sonrisa) ¿Qué tal el día ____?
Desconcertante, pero decidió ahorrarse la opinión. Se sentó en una silla que
estaba justo de frente a él y de espaldas a los amigos de Justin, si no la había
visto aún, quizá no cayeran en ella.
- ____: Bien… Normal supongo.
- Santiago: Necesitaba hablar contigo de la noche de ayer, pero no quería que
tu madre estuviera presente. Se disgustaría.
Lo sabía. Lo sabía todo. Se dio cuenta que podía olvidarse de volver a ver un
piano por lo que le quedaba de vida. Sin embargo hubo algo que borró esa idea
de su mente enseguida, ¿no volver a ver a Justin? Bajó las manos de la mesa y
las apretó entre sus piernas, le había empezado a temblar de una forma que no
iba a pasar inadvertida para su padre.
- Santiago: (Muy serio) ¿Qué pasó con Alex?
_____ simplemente lo miraba. No sabía que contestar. No quería mentirle
más…
- Santiago: No le vi con ninguna intención de ir a buscarte. Por eso no querías
ir ¿verdad?
Empezó a no tener tan claro que pretendía su padre. ¿Esperaba a que ella le
mintiera a la cara para poder tomar peores represalias? Volvió a escoger el
silencio.
- Santiago: Hija, sé que son tus asuntos personales y no quiero inmiscuirme,
pero… (Y cerrando los ojos) Si el cretino ese te ha hecho algo…
Y en ese momento un globo de tranquilidad estalló en su pecho. Era todo tan
nuevo para ella que le había costado reconocer la situación. ¡Su padre estaba
preocupado! ¡Preocupado por ella! No pudo evitar sonreír, aunque eso
desentonara con el rostro serio de su padre.
- ____: (Poniendo una de sus manos sobre la de su padre) Puedes estar
tranquilo, no me ha hecho nada. Bueno… Justo ayer me dejó, por eso no quería
ir al baile. No podía ir con él.
- Santiago: (Con media sonrisa) No quiero verte mal por algo así. Ayer podías
haber ido, vi a Annie con el hijo de los Somers y no son pareja ¿verdad?
____ negó con una sonrisa.
- Santiago: Lo siento. Ayer no me gustó la actitud de Alex, pero sé tan poco de
lo vuestro. Solo quiero que estés bien ¿si?
- ____: (Sonriendo) Estoy bien.
El padre de ____ se levantó y se acercó a ella. Le puso una mano en el hombro
y le besó la cabeza.
- Santiago: Me tengo que ir. No le hables a tu madre mucho de esto. No quiero
que te presione.
- ____: Gracias…
El hombre sonrió y se alejó hacia la salida. ____ apoyó la cara en sus manos
mientras ponía los codos sobre la mesa, sonreía aún sin creerse lo que le
acababa de pasar. ¿Iba a ser así de perfecto todo el día?
#FIFTY-NINE
~~~
Subió a la azotea. Como hacía siempre. Llevaba un libro en la mano, pero se
tumbó en una de las hamacas y cerró los ojos. No paraba de pensar en él, y ya
empezaba a dolerle la cabeza. Desde ese triste beso no habían vuelto a dirigirse
la palabra. Y hoy había podido comprobar que estaba enfadado, muy enfadado.
Lo peor de todo es que no le faltaban motivos. Ella le había provocado, ella
había deseado tanto ese beso que se había olvidado de todo lo demás, pero no
podía olvidarse de Erick. Sacudió la cabeza, Chaz era el chico malo, y ver al
chico malo haciendo de bueno siempre hace que quieras un beso. Era eso.
Sonaba estúpido pero era eso.
- Chaz: Hola.
- Miranda: (Abriendo los ojos e incorporándose) Hola… Yo… Estoy en mi
descanso.
- Chaz: (Sentándose a los pies de hamaca que ocupaba Miranda) Ya… Lo
imaginaba. ¿Qué haces?
- Miranda: (Enseñándole el libro) Leer… A veces.
- Chaz: (Extendiendo una mano) ¿Puedo?
- Miranda: Si claro, toma.
Él cogió el libro y lo miró con atención. Ella mientras tanto lo miraba a él. ¿No
estaba enfadado? No se fiaba. Quizá quisiera hacerle pagar el desplante de
después del beso. Sacudió la cabeza. ¡Tenía que dejar de pensar en ese beso!
- Chaz: No lo he leído, pero la autora es buena.
- Miranda: (Sorprendida) ¿Tú lees?
- Chaz: (Sonriendo) Si… Desde los 6 años más o menos. Ya sabes: „Mi mamá
me mima‟ y esas cosas, pero eso me aburrió enseguida.
- Miranda: (Totalmente roja) Lo siento, no quería insinuar que…
- Chaz: Tranquila. (E inclinándose hacia atrás hasta apoyar sus codos) No creías
que leyera porque no me pega ¿no?
- Miranda: No… Supongo.
- Chaz: ¿Y qué me pega?
- Miranda: (Sonriendo) Salir con chicas.
- Chaz: Jajaja… No puedo ocupar todo mi tiempo con eso. Sois interesantes,
pero no tanto.
- Miranda: (Dándole con el libro en la pierna) ¡Oye!
- Chaz: Es tu culpa, me tiras de la lengua.
- Miranda: (Sonriendo) Puede ser… Bueno, ¿y a parte de leer y salir con chicas?
- Chaz: Lo que la mayoría supongo, me gusta la música, el fútbol, salir con mis
amigos…
- Miranda: Dedicarle tiempo a Ella…
- Chaz: (Asintiendo) Dedicarle tiempo a Ella… ¿Y tú?
- Miranda: Más o menos lo mismo, cambia el fútbol por… no sé, cualquier cosa
me gusta más que el fútbol.
- Chaz: Jajaja… Mujeres… ¿Eres hija única?
- Miranda: No… tengo un hermano pequeño. Pero no es tan rico como Ella.
- Chaz: ¿Cuántos años tiene?
- Miranda: Cumple 9 en un par de meses. Y es insoportable.
- Chaz: Habría que preguntarle a él por ti.
- Miranda: ¡Ja! Que soy la mejor hermana del mundo te dirá… Y que se atreva
a decir otra cosa.
Chaz echó la cabeza para atrás en medio de una carcajada y Miranda se sintió
completamente cómoda. El chico malo volvía a hacer de chico bueno, y no le
importaba tenerlo de amigo.
~~~
Se sentó en la misma mesa que ella y la miró sonriente. No hacía falta
preguntar para saber que estaba todo bien.
- Annie: ¿Qué tal con tu padre?
- ____: (Sonriendo) Muy bien. Estaba preocupado por mí. Le he contado lo de
Alex, y todo genial.
- Annie: ¿No le ha importado?
____ negó con el gesto. Estaba realmente feliz.
- Annie: Bueno, entonces cuéntame de Justin. (Y mordiéndose el labio inferior)
Se os ve genial. ¡Qué envidia!
#SIXTY
Decidió mirar dentro por si su padre aún seguía ahí, pero vio a Annie sola. Se
giró y se dio cuenta de que ____ casi corría, pero prefirió hablar primero con
Annie.
- Justin: ¿Se puede saber qué le has hecho?
- Annie: (Con los ojos como platos) ¿Yo?
- Justin: Ha salido como alma que lleva el diablo y ni me ha mirado. Estaba
contigo ¿no?
- Annie: Si, estaba. Y de repente se ha levantado y se ha ido. Dejándome
SOLA. Yo que sé que bicho le ha picado.
- Justin: ¿No os habéis enfadado?
- Annie: ¡Qué va! Hablábamos de ti y de la tilinga esa (Señalando hacia Sara).
- Justin: (Llevándose las manos a la cara) ¡Ay Anny! ¿Para qué le hablas de
Sara?
- Annie: ¡Pero que no he dicho nada malo! Solo la he llamado pesada.
- Justin: ¿A ____?
- Annie: ¡A Sara idiota!
- Justin: Bueno, me voy a buscarla. Algo le pasa…
- Annie: Luego me cuentas ¿no?
- Justin: Si, si la pillo a tiempo si.
Salió rápido del bar y siguió el camino que la había visto tomar minutos antes.
Fue con prisa, recorriendo con la mirada los posibles desvíos, hasta que la vio.
Estaba sentada en un banco. No le había visto. Se acercó a ella intentando
calmarse. No estaba acostumbrado a preocuparse así por nadie, y el hecho de
pensar que le pasaba algo hacía que se le encogiera el estómago.
#SIXTY-ONE
Bajaban las escaleras todavía conversando y riendo. Ninguno de los dos lo dijo
pero se hubieran pasado horas juntos, aunque hubieran sido solo sentados
hablando. Habían descubierto que podían hablar de casi cualquier cosa…
- Chaz: (Sacudiendo levemente la cabeza) Tres años… ¿No es mucho tiempo?
- Miranda: Jajaja… ¿Cuánto ha durado tu relación más larga?
- Chaz: (Algo pensativo) ¿Un mes? No recuerdo haber celebrado nunca un mes
de relación con una chica, así que…
- Miranda: Bueno, eso tampoco es normal…
- Chaz: Vale, tú por exceso y yo por defecto. Esta claro que somos diferentes.
Pero… ¡Tres años! Es imposible aguantar tanto con la misma persona.
- Miranda: No lo es… Tienes todo lo bueno, ya la conoces, ya sabes que le
gusta, que no, de que cosas puedes hablar y de cuales no. Y la otra persona
también te conoce a ti…
- Chaz: Vale… aburrimiento 100%. ¿No discutís nunca?
- Miranda: Jajajaja… A todas horas. A ver… piensa en una amistad y no en una
novia, ¿no crees que ganan valor con el tiempo?
- Chaz: Me parece que vas a conseguir que jubile a Anny como mejor amiga…
Nuestra relación lleva tiempo estancada…
- Miranda: (Pegándole en el hombro) ¡Serás payaso!
- Chaz: (Sonriendo) Lo justo… Has dicho que discutís mucho, ¿no vale de nada
que os conozcáis tanto?
- Miranda: No… No por conocernos hemos cambiado. A él hay cosas de mí que
le molestan y viceversa igual, nos las toleramos todo lo que podemos. Pero
bueno, vamos a dejar de hablar de mi y Erick porque debes estar harto…
- Chaz: No, no… Tomo nota enserio. En la vida me hubiera imaginado que
mantener una novia así… ¿formal? (Mirándola divertido), pudiera requerir tanto
esfuerzo.
- Miranda: Jaja… ¿Y tú que te esperabas?
- Chaz: Lo de las películas supongo.
- Miranda: ¿Lo de las películas? ¿Eres aficionado alas películas románticas o
que?
- Chaz: No… Pero bueno, esperaba algo así… Conocer a alguien, enamorarme y
quedarme tonto…
- Miranda: ¿Quedarte tonto?
- Chaz: Si… Bue, no te creas, a Justin le ha pasado ¡eh! Yo me parece que voy
a esperar…
- Miranda: Jajaja… ¿Y por qué dices que se ha quedado tonto?
- Chaz: Porque habla a todas horas de ____ como un tonto, se la queda
mirando como un tonto y cuando no, va detrás de ella como un tonto… Es
simple.
- Miranda: Tú lo simplificas todo demasiado…
- Chaz: Pues fíjate que yo creo que tú lo complicas en exceso…
En ese momento estaban en la puerta del bar. Ella le sonreía, llevaba un
montón de rato sin parar de reír, y de repente se dio cuenta que lo hacía como
una tonta. Quizá Chaz no estuviera tan desencaminado…
- Chaz: Bueno, tengo que buscar a mis amigos… Ya hablaremos ¿si?
- Miranda: Si claro… Cuando quieras.
La cogió de un hombro y le dio un beso en la mejilla antes de irse. Comprobó
que definitivamente, estaba tonta perdida.
~~~
Se volvió a sentar donde estaba hasta antes de que él llegara. Y respiró
profundamente. Todo eso era tan nuevo… Nunca había sentido tantas cosas
por alguien, nunca nadie le había demostrado que pudiera sentir tantas cosas
por ella. Estaba demasiado acostumbrada a que sus palabras rebotaran contra
las paredes como para ser consciente del daño que podían causar. Decidió
buscarlo, no podía dejar que él se enfadara con ella, no él que la quería más
que nadie. ____ no sabía si Justin la quería mucho o poco, pero tenía claro que
nadie la quería como él.
Iba hacia el bar cuando se encontró con los amigos de Justin. Él no estaba con
ellos. Se armó de valor…
- ____: (Alzando la voz) ¡Chaz!
El joven se giró y la miró un poco extrañado. Ella le hizo un tímido gesto para
que se acercara.
- Chaz: Hola.
- ____: Hola. ¿Has visto a Justin?
- Chaz: Hace un rato. Se ha ido creo.
- ____: ¿Sabes a dónde?
- Chaz: (Negando con la cabeza) No, solo me ha dicho que quería estar solo.
Estaba molesto. ¿Habéis discutido?
- ____: Si. Algo así. Bueno, gracias.
- Chaz: No hay de que y a ver si encuentras a Justin.
Ella le sonrió y siguió su camino. Esa era su intención: encontrarlo.
~~~
Iba riéndose con varias amigas cuando oyó su nombre. Se giró intentando
mantener la calma, no había dudado ni un segundo en quien la había llamado…
- Annie: Chicas, luego os alcanzo ¿si?
Se acercó a él con una sonrisa disimulada, no quería parecer eufórica, pero
tampoco podía permitirse el lujo de ser borde, al fin y al cabo ese día le había
hecho un favor bastante importante…
- Annie: (Una vez a su lado) Hola…
- Zack: ¿Todo bien con ____?
- Annie: (Sonriendo) Si, si… Todo bien. La has salvado de una muy gorda.
- Zack: Tenías que haberte visto la cara al ver a su padre… Era un poema.
- Annie: Jaja… Ese hombre impone mucho. Y creeme que la hubiera matado de
no ser por ti.
- Zack: Bueno, somos amigos ¿no? Para eso estamos.
- Annie: Si… amigos claro.
Zack la miró fijamente y ella se puso nerviosa en el instante. Intentaba adivinar
algo más en esa sonrisa contenida. Esa chica era un misterio, desde que se
conocían había sido todo tan extraño que no había tenido oportunidad de
conocerla realmente. La veía a diario y no aún no sabía a qué atenerse con ella.
- Zack: Por tu cara diría que eso de amigos no te suena muy bien…
Se puso roja a la velocidad de la luz. ¿Qué había querido decir con eso? Claro
que lo de „amigos‟ no le sonaba bien, pero él no tenía porque saberlo…
- Annie: No te entiendo… ¿Por qué no iba a querer ser tu amiga?
Decidió jugarse por completo. Al fin y al cabo, si no salía bien, había
comprobado que les era muy sencillo ignorarse. Necesitaba saber hasta donde
podía aspirar con ella.
- Zack: Pues a mí se me hace difícil…
- Annie: ¿Por?
- Zack: ¿Tú sueles tener ganas de besar a tus amigos?
El cambio de la conversación había sido tan radical, que le estaba costando
asimilarlo, ¿ese era Zack? No tuvo tiempo de pensar mucho, porque lo que le
quedo claro es que él pensaba besarla. Notó su mano en la mejilla y cerró los
ojos cuando la distancia ya era casi inexistente. Algo quedaba claro… Zack
sabía besar.
~~~
Le pegó una patada a una rama y siguió andando. Estaba furioso. Sentía como
la rabia le llegaba a cada rincón de su cuerpo y a él nunca le pasaba eso. Se
había acostumbrado a pasar de todo, era muy raro que algo le pudiera hacer
perder el control de esa manera. Llegó a su destino y se dejó caer en la hierba.
Miró hacia el lago fijamente y respiró varias veces para intentar relajarse. Todo
parecía mágico, pero había durado tan poco. Se sentía tan bien con ella que no
hubiera querido separarse de su lado en semanas, pero no había pasado ni un
día y ella ya lo había echado de su lado.
Oyó pasos a su lado y giró la cabeza. Era ella…
- Justin: ¿Cómo has sabido que estaba aquí?
Ella se había quedado de pie a varios metros de él y lo miró con atención.
Estaba enfadado, muy enfadado y no se molestaba en ocultarlo. Se sentó
manteniendo esa exagerada distancia.
#SIXTY-TWO
~~~
Llevaban un rato en silencio, andando uno a la par del otro, hasta que llegaron
al punto en que no se podían arriesgar a seguir juntos por miedo a que les
vieran.
- Justin: (Acercándose a ella y acariciándole la mejilla) ¿No te dirán nada? Se ha
hecho muy tarde...
- ____: Eres tú el que esta castigado y hoy no debería haber salido de casa.
Él le sonrió y juntó su frente con la de ella. Cerró los ojos permaneciendo así.
Le encantaba todo lo que ____ le hacía sentir. Volvió a separarse un poco.
- Justin: Creo que mi padre sospecha sobre lo nuestro.
- ____: (Alejándose un poco de él) ¿Qué?
- Justin: (Cogiéndola de la mano) Tranquila. Esta paranoico. No nos ha visto, ni
muchísimo menos.
- ____: ¿Entonces?
- Justin: No lo sé. Pero ayer me lo insinuó. No te preocupes, en cuanto le diga
nombre y apellido de la chica con la que he estado hoy, se le pasará la neura.
- ____: (Sobresaltándose) ¡Justin! ¿Cómo le vas a decir...?
- Justin: (Volviendo a acercarse a ella) ¡Ey! No te preocupes. Hablaba de decirle
un nombre que no fuera el tuyo. Sus sospechas son muy vagas. En cuanto crea
estar seguro de que ayer estuve con Sara por ejemplo y no contigo... No estaré
castigado.
Ella le miró triste, pero no se atrevió a decir nada.
- Justin: (Suspirando) Es por Sara... ¿no?
Ella negó rápidamente. Esta vez no era así.
- Justin: (Acariciándole el cuello) ¿Entonces? Yo solo quiero despistar a mi
padre. No pienso...
- ____: (Cortándole) Solo es que me gustaría que le valiera con mi nombre. Me
gustaría que no me odiara.
- Justin: (Con media sonrisa) No te odia. A ti no te conoce, sería imposible
odiarte.
- ____: Odia mi apellido.
- Justin: Y tus padres el mío. Tú tampoco podrás decir nunca que sales
conmigo.
- ____: Pero no me importa. (Se acercó aún más a él y lo abrazó apoyando la
cara en su pecho) Me da igual que tus padres me odien a mí, y me importa aún
menos lo que sientan mis padres por ti. Yo te quiero.
Justin sonrió y apoyó su barbilla en la cabeza de ____ mientras le acariciaba la
cintura.
- Justin: Y yo a ti.
El verano siguió su curso y todo iba en la misma línea. Justin y ____ se seguían
viendo a escondidas de sus padres pero a los ojos de todos los demás, después
de su primer tropiezo como pareja, nada había vuelto a enturbiar la relación.
Annie y Zack entraron en un extraño juego en del que ninguno de los dos se
molestó en aclarar las reglas, pero que los dos llevaban adelante, eran amigos
pero no se comportaban exactamente como tal. Y por último Chaz y Miranda,
seguían compartiendo ratos juntos, aunque ninguno de los dos estaba seguro
de que eso fuera lo más correcto.
~~~
Un día cerca de la hora de cerrar, se estaba desarrollando una escena que se
había convertido en habitual. Chaz acompañaba a Miranda detrás de la barra,
más molestando que ayudando.
- Miranda: (Dándole en la mano) ¡Qué no toques eso!
- Chaz: (Levantando las manos y riéndose) Vale, vale…
Justin se limitó a reírse, como hacía siempre. Vivían discutiendo de broma, pero
cada día se llevaban mejor. Sabía de sobra que su amigo estaba hasta el cuello
por Miranda, y de no ser porque conocía de la existencia de Erick, hubiera
apostado porque Miranda estaba igual.
- Miranda: (Mirando a Justin) ¡No te rías tanto! Y saca a tu amigo de aquí
(Volviendo a darle a Chaz en la mano) ¿Vas a dejar de marearme? Estate
quieto.
- Justin: (Aún riéndose) No, no. Todo tuyo.
- Chaz: (Chasqueando la lengua) Venga chicos… No os peleéis, que os quiero
mucho a los dos.
- Miranda: ¿Y por qué no quieres a Justin un poco más de cerca? Desde el otro
lado de la barra por ejemplo…
- Chaz: Jajaja, ¿y perderme de aprender a ser camarero? No, gracias.
- Justin: Hacéis un buen equipo enserio.
- Chaz: (Pasándole el brazo a Miranda por los hombros) ¿A qué si? Lo que pasa
es que yo hago todo el trabajo…
- Miranda: (Pegándole en las costillas con el codo) Tendrás jeta… Molestar no
es trabajar.
- Chaz: ¡Molestar dice! (Y mirándola a los ojos) Ahora en serio, reconoce que
con lo desértico que esta esto, te morirías del aburrimiento de no ser por
nosotros…
Miranda lo miró de reojo y luego miró a Justin, quien seguía muy divertido con
la situación y le guiñó un ojo.
- Miranda: Esto no esta desértico, esta tranquilo, que no es lo mismo…
- Chaz: Jaja, ¡venga ya! Si falta solo una de esas bolas de paja…
Ella había intentado mantener la seriedad con la que había hecho su última
afirmación, pero los tres estallaron a la vez en una sonora carcajada. La verdad
es que no había un alma en el bar, y llevaba así varias horas. En el fondo daba
gracias a haberse hecho amiga de Chaz, que él y Justin le hicieran compañía
cuando el bar estaba así de vacío se había convertido en lo habitual. Sin
embargo la sonrisa se borró de su cara en un segundo. Justin y Chaz seguían
riéndose, pero no tardaron en darse cuenta de la seriedad de ella.
- Chaz: ¡Ey! ¿Qué pasa? (Y pasándole la mano por delante de la cara) ¿Has
visto un fantasma?
Justin miró en la dirección en la que miraba Miranda. Un chico alto se acercaba
al bar. Estaba claro que Miranda lo conocía…
- Justin: ¿Quién es el tipo ese? No me suena del club…
Chaz alzó la vista a la vez que Miranda se alejaba un poco de él y salía de la
barra.
- Miranda: Ahora vengo…
Salió del bar con la vista clavada en el chico que se acercaba. Justin y Chaz la
siguieron con la vista.
- Justin: (Mirando a Chaz) ¿Tú sabes quién es? (Vio como su amigos asentía
con la vista fija en ellos) ¿Y me lo vas a decir?
- Chaz: Es Erick. El novio de Miranda.
- Justin: (Volviendo a mirar al chico, Miranda aún no estaba a su lado) Ah… No
sabía que lo conocieras.
- Chaz: No lo conozco, pero ella lleva una foto de los dos en la cartera. Y no
tiene mucha pinta de niño de 9 años, así que no puede ser su hermano…
Observaron a la pareja en silencio durante unos minutos. #SIXTY-THREE
- Chaz: (Mirando a Justin) ¿Sabes qué? Vamos a hablar de algo porque paso de
estar mirando a Miranda y al cantamañanas ese. (Justin le miró con media
sonrisa) Si. Es lo que estas pensando. Paso de ver a Miranda en actitud
cariñosa con nadie. Me da igual que sea su novio.
Justin los miró de reojo antes de contestarle a su amigo, pero el gesto le
cambio por completo.
- Justin: Vale, mira, porque creo que la actitud no es precisamente cariñosa.
Chaz alzó la vista y vio como Erick cogía a Miranda por los hombros de forma
bastante brusca. Ella se zafó y siguió delante de él. No podían oír nada de lo
que hablaban, pero estaba claro que era una discusión intensa. Erick volvió a
coger a Miranda de los hombros…
- Chaz: Este memo, ¿de qué va?
- Justin: (Levantándose) Vamos anda.
Salió del bar y al ver que Erick no soltaba a Miranda, empezó a correr.
- Justin: Mejor que la sueltes.
Erick no la estaba cogiendo con fuerza, pero al ver a Justin la soltó de forma
brusca y se dirigió a él.
- Erick: ¿Algún problema?
- Miranda: (Poniéndose en medio) ¡Para Erick!
- Erick: (Cogiéndola otra vez de los hombros) ¡Solo quiero que me digas por
quien!
Justin iba a separarlos, pero antes de poder hacer nada Chaz se había acercado
y empujó a Erick con todas sus fuerzas. Quedaron apartados de Justin y
Miranda.
- Chaz: No la vuelvas a tocar, ¿entendido?
- Erick: (Mirando a Miranda) Ya decía yo que no podía ser por el rubio ese…
Y sin añadir nada más le dio un puñetazo a Chaz en la cara.
- Justin: (Acercándose para sujetar a Erick) ¿Pero tú estas tonto? (Y lo empujó
con fuerza)
- Miranda: Ya vale, ¡por favor!
- Erick: ¡No vale! Hasta que no me digas quien de estos dos subnormales es el
que te ha comido el tarro. No es normal que te defiendan tanto.
Chaz tenía una mano en la parte de la cara donde había recibido el golpe. El
labio le sangraba ligeramente, pero eso no impidió que la forma en la que Erick
se dirigió a Miranda le sacara de quicio. Se acercó a él y le devolvió el mismo
golpe que minutos antes había recibido. Justin volvió a meterse entre los dos a
tiempo de que Erick no siguiera la pelea.
- Chaz: Lo normal es defenderla SUBNORMAL, y no hacer lo que haces tú…
- Erick: (Mirando a Miranda con media sonrisa) ¿Así que es el pijo este?
- Miranda: ¡Erick vete por favor!
Ella se mantenía a cierta distancia. Justin seguía de pie entre los dos, dispuesto
a evitar que volvieran a pegarse, aunque la atención de Erick se había centrado
en Miranda y pasaba de Chaz.
- Miranda: (Llevándose las manos a la cara) ¡Dios Erick! ¡Eres ridículo! No hay
nadie. Te lo dije, simplemente. No daba para más. Ellos ni siquiera son mis
amigos, son socios del club. (Y sacudiendo la cabeza) No sé porque te explico
nada.
Los dos chicos la miraban a ella. Justin era el único que seguía temiendo que
Erick y Chaz se enzarzaran en una pelea. Chaz había sentido las palabras de
Miranda peor que el puñetazo de Erick en la cara. „Ni siquiera son mis
amigos…‟. Oyó que Justin amenazaba a Erick con llamar a un seguridad si no se
iba en ese preciso instante, y luego notó que se alejaba. Sin embargo no podía
apartar su vista de Miranda. Ella se había equivocado, el único ridículo ahí era
él. Tenía intención de irse, pero Miranda se le acercó.
- Miranda: (Acercando la mano hacia la herida del labio de Chaz) Gracias.
- Chaz: (Cogiéndole la muñeca antes de que pudiera tocarlo) No hay de qué.
Sabes que me pierde hacer de héroe.
Ella no entendió nada. Simplemente lo vio alejarse hacia el bar. Giró la cara
para mirar a Justin, quien simplemente torció el gesto.
#SIXTY-FOUR
Llevaban un rato andando de la mano cuando Justin miró el reloj. Por nada del
mundo quería que ____ tuviera problemas con sus padres, y se les estaba
haciendo tarde.
- Justin: ____ ya lo siento. Si hubiera sabido que…
- ____: (Besándole la mejilla) No seas tonto. Miranda y Chaz necesitaban
hablar. (Y negando con la cabeza) Todavía no me puedo creer que de verdad
dijera algo así. Yo también hubiera jurado que esta colada por él.
- Justin: Yo ahora mismo solo espero que tus padres no se enfaden mucho.
- ____: (Parándose delante de él y sin dejarle andar) ¿Por qué te preocupas
tanto?
- Justin: ¿Cómo que por qué? No quiero que te castiguen ni nada por el estilo.
- ____: (Sonriendo) Pues no me van a castigar, así que tranquilo.
- Justin: ____… Tampoco me gusta que tu padre este enfadado contigo, ni que
te grite. Yo no puedo defenderte de esas cosas.
- ____: No importa.
- Justin: Pero te hacen mal.
- ____: Mis padres seguían en el club cuando nos hemos ido. Así que no le des
más vueltas.
Volvió a sonreírle y le dio un beso rápido antes de volver a cogerle la mano
para seguir andando. No tardaron en llegar al punto del que Justin no podía
pasar. Volvieron a detenerse, pero esta vez no dijeron ninguno de los dos una
palabra. ____ le rodeó el cuello con los brazos y le besó. Estaban cerca de la
casa de uno de los vecinos de ____. Siguieron besándose mientras Justin
apoyaba la espalda en la verja de entrada.
- Justin: (Acariciándole la mejilla) Odio separarme de ti, pero me encantan
estas despedidas.
- ____: (Sonriendo y tras darle otro beso) A mi también.
Siguieron besándose, pero de repente un foco de luz los obligo a separarse,
Justin estaba de frente al foco y no fue capaz de abrir los ojos. ____ se giró
haciendo visera con su mano y comprobó que eran los faros de un coche que
estaba muy cerca de ellos.
- Santiago: ¡____!
Sintió que el corazón se le paraba en el mismo momento en que consiguió
reconocer a la persona que la había llamado. Justin apretaba su mano en un
inútil intento de reconfortarla. Sabía que lo más inteligente hubiera sido soltarse
y alejarse de él, pero en ese momento tenía la horrible sensación de que era la
última vez que iban a estar tan cerca.
- Santago: ____, sube ahora mismo al coche.
Justin estuvo a punto de soltarle la mano, pero ____ siguió aferrada a él.
- ____: Papá, yo te puedo explicar…
- Santiago: (Subiendo el tono de voz) ¡He dicho que subas al coche!
Los ojos se le llenaron de lágrimas y el nudo de su garganta se hizo demasiado
doloroso como para poder articular ningún sonido. No sabía que hacer, tenía
que obedecer, pero lo último que quería era dejar a Justin solo en ese
momento. El padre de ____ se hartó de esperar y se acercó hasta ellos para
coger a ____ del brazo y arrastrarla hasta el coche. Justin apretó las manos en
puño para contenerse, por mucho que le enfadara la situación, sabía que lo
mejor para ____ era que él se mantuviera en el molde. Una vez que había
cerrado la puerta del coche, el padre de ____ se volvió a acercar hasta Justin.
- Santiago: Por tu bien, espero no volver a verte cerca de mi casa, y mucho
menos cerca de mi hija, porque te aseguro que no vuelves a verla ni en pintura.
Mantuvo la mirada del adulto sin siquiera inmutarse, pero las palabras habían
conseguido hacerlo temblar de miedo por dentro. Cuando el hombre se subió al
coche y arrancó, Justin le pegó una patada al suelo. Todo se había ido a la
mierda, y el solo hecho de imaginar no ver más a ____ le resultaba
insoportable.
~~~
Llevaban un rato sentados el uno enfrente del otro. Chaz no dejaba que
Miranda se le acercara mucho, así que él se había curado la herida y ahora
sujetaba un trapo con hielo en el golpe. Estaba convenciéndose de que no
había vivido una situación más ridícula en toda su vida cuando Miranda se
decidió a romper el silencio.
- Miranda: Lo siento…
- Chaz: (Sin mirarla) Deja de decir eso ¿si?
- Miranda: Pero es que es verdad. (Y poniéndose en cuclillas delante de él) No
sé porque estas tan molesto. Erick nunca me había tratado así, si eso es lo que
te preocupa.
- Chaz: (Mirándola a los ojos) ¿Vas a seguir con él?
- Miranda: No estoy con él. Por eso estaba tan alterado. Ayer me vino a buscar
y… bueno, cortamos.
Siguió mirándola fijamente mientras pensaba en sus palabras. Miranda ya no
tenía novio. Esa noticia le hubiera puesto pletórico tan solo una hora antes,
pero ahora… le daba igual. Le tenía que dar igual. Después de todas las horas
que habían compartido conversando Miranda no lo consideraba ni siquiera un
amigo. Era de estúpidos que siguiera haciéndose cruces por una chica que
jamás iba a fijarse en él.
- Chaz: Mira… me tengo que ir. (Miranda se puso de pie al ver que él se movía
y Chaz se levantó también).
- Miranda: Chaz… ¿pero qué te pasa?
- Chaz: (Girándose para mirarla) ¿Y qué más da?
- Miranda: (Acercándose) ¿Cómo que qué más da? Claro que da, quiero saber
porque estas tan enfadado.
- Chaz: No somos amigos ¿no? No te conviene preocuparte por cada uno de tus
clientes. No te darían las horas del día.
De repente se dio cuenta de que era lo que había hecho mal. Y no pudo evitar
alegrarse al pensar que algo así le afectaba tanto a Chaz. Ojalá y fuera solo un
cliente más. Hasta se hubiera conformado con que fuera solo un amigo, pero
para ella el moreno se había convertido en mucho más.
- Miranda: (Al ver que Chaz se iba) No, para, para… (Y se acercó a él hasta
cogerle del brazo) Perdóname ¿vale? Solo quería que Erick se fuera y os dejara
en paz. Somos amigos Chaz.
Chaz se sintió aún más ridículo. Que ella supiera el motivo de su enfado le
hacía sentirse aún más estúpido.
- Chaz: Vale… En serio, no importa. (Pero Miranda no le soltaba el brazo) Me
voy que…
- Miranda: ¿Tú también me consideras una amiga?
La miró a los ojos. O eso quería, pero no pudo evitar mirarle los labios. Estaban
cerca, y normalmente no estaban tan cerca sin Justin o alguna de las chicas de
por medio. Normalmente no se daba el lujo de sentir tantas ganas de besarla.
Cerró los ojos con fuerza y se concentró en la pregunta. Cuando antes
contestara y fingiera que todo estaba bien, antes podría irse de allí y poner
distancia entre los dos.
- Chaz: Tranquila. Sabes que… (Se rascó la nuca nervioso) Sabes que tanto
Justin como yo te consideramos una amiga. Nos caes muy bien.
- Miranda: ¿Crees que Justin también se habrá enfadado por mi comentario?
- Chaz: (Alzando una ceja) ¿Justin? ¿Por qué iba a tener que enfadarse él?
- Miranda: Bueno… Igual que tú, ¿o no?
Él no se dio cuenta de cómo estaba metiendo la pata, solo sabía que Justin no
pintaba nada en esa conversación, que de no ser por todo lo que Miranda le
hacía sentir a él, nadie en su sano juicio se enfadaría por un comentario tan
estúpido.
#SIXTY-SIX
Oyó como la voz de su madre y Vanessa se alejaba por el pasillo. Salió del baño
pocos minutos después. Entró en su habitación y empezó a dar vueltas
nerviosa. No podía sacarse de la mente la idea de que su padre llamara al de
Justin y él también tuviera que pagar las consecuencias de todo ese asunto. Se
sentó en la butaca del piano, pero no fue capaz ni de levantar la tapa. No podía
dejar de pensar en Justin. Tendría que estar asustada por la reacción de su
padre, o temer el peor de los castigos, temer por ejemplo que no a dejaran
cumplir su único sueño; sin embargo no podía dejar de pensar en Justin. Algo
pequeño dio contra el cristal. Fue un sonido casi imperceptible, pero se levantó
a comprobar si había sido solo cosa de su imaginación. Abrió la puerta del
balcón y al girar la cara hacia la izquierda lo vio apoyado en la pared. Alzó las
dos cejas sonriendo y ella se largó a llorar. Se le descompuso el rostro al ver
como reaccionaba ella, pero antes de poder hacer nada, ella le abrazó con
todas sus fuerzas, aunque fue solo para seguir llorando. Se sintió a salvo. Daba
igual toda la angustia que le había creado su padre con los gritos, mientras él
estuviera ahí para abrazarla y contenerla, todo estaría bien.
#SIXTY-SEVEN
- Chaz: (Apretándose la cara con las manos) Mierda, mierda y ¡MIERDA!
- Annie: (Abriendo mucho los ojos y mirando al otro chico) ¿Y a este qué le
pasa?
- Chaz: (Resoplando) Que ayer los pillaron a él y ____ en pleno asunto.
- Annie: (Sorprendida) ¿Qué? ¿Quién os vio?
- Justin: Su padre.
- Annie: ¿Y crees que por eso no ha venido hoy?
- Justin: Estoy seguro, es que… ¡Mierda! Soy idiota.
Justin estaba sentado en el suelo y Annie se agachó para quedar a su altura. Le
apoyó la barbilla en el hombro y le pasó una mano por la espalda.
- Annie: Tú no eres idiota, así que deja de decirlo.
- Justin: No sabes lo mal que estaba ayer. No paraba de llorar.
- Annie: ¿La viste después de que os pillaran?
- Justin: Claro. Me colé en su casa.
- Annie: Retiro lo de antes, si que eres idiota. ¡Joder Justin!
- Chaz: Bueno… Haya paz. Anny, no creo que un sermón surta mucho efecto.
- Annie: (Poniéndose de pie y mirando a Chaz) Pero estas conmigo ¿no?
- Chaz: Y… la verdad es que…
- Justin: (Levantándose también) ¿Qué? ¿Se supone que me tenía que haber
ido a casa tan tranquilo cuando ella se había quedado con el energúmeno ese?
- Annie: El „energúmeno ese‟, es su padre, y sabes de sobra que no le haría
nada. Justin, me parece muy bien que te preocupes por ella, pero igual lo que
teníais que hacer es dejar de tentar a la suerte.
- Justin: ¿Y qué hago? ¿No verla? Esta claro que no la van a dejar pisar la calle
en lo que queda de verano.
- Chaz: A ver… Tranquilízate, porque estas como loco. Anny tiene razón, si es
verdad que vuestros padres se van a tomar TAN a la tremenda veros juntos, no
os podéis dejar ver juntos, es simple.
- Justin: Si. Cojonuda tu simpleza. No la veo y punto pelota, ¿puedes pensar lo
que dices? Para acabar haciéndole caso a mi padre no os pido consejo.
- Annie: Justin, para llevarle la contraria a tu padre no vengas a amargarle la
existencia a ____. Que de momento es la única que paga los platos rotos.
- Justin: (Resoplando) No es eso, pero…
- Anne: (Poniéndole una mano en cada hombro) Mira, yo no sé que pasa entre
vuestros padres, pero la movida debe ser seria. A mi madre le comenté que tú
al fin te habías echado novia, y cuando le dije que era ____ casi se infarta. No
me quiso contar nada, pero tiene que ser algo gordo.
- Justin: (Soltándose de Annie) ¡Joder! Me tocan los pies. ¡Ni que fuéramos
gemelos y nos hubieran separado al nacer!
- Chaz: No lo digas dos veces…
- Justin: (Cerrando un puño con fuerza y señalando con la otra mano hacia el
bar) ¿Por qué no te vas mejor a saludar a tu novia? Y me dejas en paz que no
estoy de humor.
- Chaz: Bueno, baja revoluciones. Si no te gusta lo que te decimos no nos pidas
opinión. No se acaba el mundo Justin, pero reconoce que habéis metido la
pata. Si al padre de ____ se le da por preguntar, cualquiera del club podría
decirle que os ha visto juntos. Si tan seria es la movida que se traen vuestros
padres. Eso deberíais haberlo tenido en cuenta.
- Annie: (Poniéndose entre los dos) Bueno, bueno… Que corra el aire. Uno, no
os alteréis. Y dos (Mirando a Justin), yo voy ahora a casa de ____ y te llamo
con lo que sea ¿si?
- Justin: Bien. Llámame en cuanto puedas.
- Annie: ¡Que si! (Y alejándose de los chicos) Y cambiar de tema porque si
llegáis a pelearos no os vuelvo a dirigir la palabra en lo que os queda de vida.
- Chaz: (Cuando Annie ya se había alejado) Bueno… ¿Me acompañas al bar?
- Justin: (Frunciendo el ceño) ¿A hacer de sujeta velas?
- Chaz: (Dándole en el hombro) ¡Anda vamos! Que siempre hemos estado los
tres.
- Justin: Pero eso, éramos tres, no una pareja y yo.
- Chaz: Camina…
Justin puso los ojos en blanco y le siguió, de todas formas no tenía muchas
opciones.
~~~
Llevaba horas tocando el piano, no quería llamar la atención de nadie. Solo
quería que le respetaran un rato su espacio y la dejaran estar sola. Había
hablado con su padre antes de comer y ya estaba todo bien. Cerró los ojos y se
concentró en no perder el compás. Todo estaba bien. Había hecho lo mejor.
Empezó a temblarle el labio inferior, volvería a llorar en cualquier momento.
Llevaba todo el día igual. Se concentró en tocar. Su padre no podía verla
llorando. No si quería que siguiera creyendo en su palabra. Llamaron a la
puerta y antes de poder contestar habían abierto. Era Annie. La rubia cerró la
puerta tras ella y se acercó a ____, la cual había dejado de tocar el piano y se
miraba fijamente las manos.
SIXTY-EIGHT
~~~
Llegó al club algo distraída. Su única intención era buscar a Justin y contarle un
poco sobre ____, la había visto tan mal que ya no le parecía tan mala idea que
Justin se colara en su balcón para hacerle una visita. Fue su risa lo que la puso
sobre aviso. No tenía ganas de verle. Después de la clase de tenis había tenido
suerte porque Justin y Chaz habían ido a buscarla enseguida, pero si la veía…
Torció el gesto, ¿qué estaba haciendo? ____ tenía razón, si no quería verle
más, lo que tenía que hacer era decírselo, todo lo demás era ridículo. Pasó
cerca de él tomando aire para saludarlo, pero se sorprendió al ver como él
agachaba la mirada mientras hablaba por el teléfono móvil. Se sorprendió tanto
que se quedó quieta mirándolo. Él colgó y se giró en redondo sin reparar en su
presencia… ¡Pero la tenía que haber visto! Empezó a andar en la misma
dirección que él y le tocó el hombro en cuanto estuvo lo suficientemente cerca.
Frunció el ceño cuando el se paró pero evitó girarse para mirarla. Pasó a su
lado y se plantó delante de él con los ojos muy abiertos. No entendía
absolutamente nada.
- Annie: ¿No me reconoces o algo así?
- Zack: (Poniendo los ojos en blanco) ¿Quieres algo?
- Annie: ¿Hola? ¿No me saludas?
- Zack: Tú a mi tampoco.
- Annie: Bueno, ahora…
- Zack: Ahora me iba.
- Annie: ¿Estas enfadado?
- Zack: ¿Debería?
Soltó aire intentando calmarse. No sabía si „debería o no estar enfadado‟, pero
sabía que motivos no le faltaban.
Había ido todo tan rápido que ni ella sabía que le pasaba o le dejaba de pasar
con él. Si, era un chico mono, y la había traído de cabeza unas semanas, pero
ahora que él le hacía caso… Había perdido el encanto. No se entendía ni ella
misma. Nunca había sido caprichosa, no con respecto a los chicos al menos…
Cuando alguno no le había interesado muy en serio, lo había sabido desde el
principio y con Zack no había sido así. La brusquedad de Zack la sacó de sus
pensamientos.
- Zack: Si tienes algo que decirme hazlo. No tengo todo el día.
- Annie: No… Yo… (Encogiéndose de hombros) Solo quería saludarte.
- Zack: Muy bien. Me doy por saludado.
Lo observó girarse y sin darle tiempo a más, volvió a frenarlo.
- Annie: ¿Esto es por qué no pude quedar ayer?
- Zack: Esto es porque me tratas como se te canta, cuando se te canta. No sé a
qué estas acostumbrada, pero no soy marioneta de nadie. ¿Quieres hacer cómo
que no nos conocemos? Perfecto, pero entonces no me molestes cuando este
aburrida (Y mirando la mano que Annie todavía tenía sobre su antebrazo),
como ahora.
Ella apartó la mano como si quemara. No podía haber sido más claro. Zack se
dio la vuelta y lo vio llegar hasta la entrada. Hasta unos minutos antes, estaba
convencida de que no quería volver a verse con él. Y ahora esa le parecía una
idea absurda. ¿Qué narices le pasaba? Chasqueó la lengua molesta, si no se
entendía ella misma, ¿quién iba a hacerlo?
#SEVENTY
Se giró para irse y empujó sin querer a Chaz y Miranda. Su amigo estiró el
brazo para frenarlo, pero fue inútil.
- Chaz: Te juro que la mataría.
- Miranda: (Pasándole el brazo por la cintura) Tranquilo, ella…
- Chaz: Ella nada. Ha ido de mosquita muerta y mírala. (Y mirando a Miranda)
Te aseguro que Justin estaba dispuesto a todo por ella.
- Miranda: (Asintiendo) Lo sé. Yo tampoco la entiendo.
- Chaz: Creo que… Debería ir con él.
- Miranda: No creo. No ahora mismo al menos. Déjalo un rato solo y luego…
Luego seguro que esta más receptivo.
- Chaz: (Dejándose caer en el banco) Es buen tío. No se merecía algo así. En
serio.
- Miranda: Ya lo sé. Yo no…
- Chaz: No… Lo digo porque… Él igual no se ha tomado a las chicas muy en
serio hasta ahora. Yo tampoco. Pero esto era distinto, „la pianista‟ no era una
más… No sé como se la va a sacar de la cabeza.
- Annie: ¡Chicos! ¿Y Justin?
- Chaz: (Alzando la vista) Tú tienes la culpa de todo.
- Annie: ¿Perdón?
- Chaz: Anny, no te hagas la tonta. Tú seguro que lo sabías, hablaste con
____… (Y llevándose las manos a la cabeza) ¡Qué idiota! Y yo diciéndole a
Justin que tú estabas nerviosa por el monitor…
- Annie: (Mirando a Miranda) ¿Con qué le has dado en la cabeza?
- Chaz: (Poniéndose de pie) No te hagas la graciosa. Sabías perfectamente que
a ____ le importaba un pimiento Justin , pero no fuiste capaz de decírselo.
- Annie: ¿Qué? ¡Eso es mentira! ¿Por qué iba a decirle semejante barrabasada?
- Chaz: ¿Mentira? Pues lo ha tenido que ver con sus propios ojos.
- Annie: Mira… O empiezas a explicarte o no te sigo.
- Miranda: ____ ha llegado hace un momento con Alex de la mano. Justin los
ha visto.
- Chaz: Si, y luego se estaban abrazando. Todo delante de él. La muy cínica ni
siquiera le quitaba la vista de encima a Justin.
- Annie: _____ y Alex… (Y llevándose una mano a mejilla) ¿Dónde esta Justin?
- Chaz: Mira… te aconsejo que te mantengas alejada, porque tal y como lo
conozco te va a tirar con lo primero que encuentre.
- Annie: (Mirando a Chaz enfadada) Si lo conocieras TAN bien, deberías saber
que no debe tener fuerzas ni de insultar ahora mismo. (Suspirando) ¿Me crees
capaz de hacerle daño a propósito?
- Chaz: Te callaste Anny. Solo querías guardarle un secreto a tu amiguita, pero
lo has hecho papilla con eso. Y no se te ocurra negarme que lo sabías.
- Annie: Es cierto… Algo sabía. Pero en primer lugar, no me imaginaba que iban
a venir a pavonearse al club, y en segundo lugar, pensaba que Justin y ella
tendrían oportunidad de hablarlo antes… Si Justin hablara con ella…
- Chaz: ¿Qué? ¡Ni lo sueñes! Que no se le acerque ¡eh! Te hablo en serio,
bastante la ha liado ya. Que no pretenda que Justin la perdone o algo así.
- Annie: (Resoplando) ¡No hables si no sabes! Si Justin hubiera hablado con ella
antes, quizá le hubiera quitado esa estúpida idea de la cabeza.
- Miranda: (Alzando las dos manos) Juro que intento seguiros, pero da la
sensación de que habláis cada uno de una pareja.
- Annie: ____ no ha dejado de querer a Justin… Chaz, te aseguro que esta igual
de enamorada que él.
- Chaz: ¿Y se lo demuestra achuchándose con Alex en público?
- Annie: ____ y Alex deben estar saliendo.
- Chaz: ¡Ja! Mejor me lo pones. ¿En que cultura eso de poner los cuernos es
una muestra de afecto?
- Annie: ¡Dios Chaz! ¡Déjame explicarme! ____ esta con Alex porque no le
queda otra. Su padre se puso como loco, y lo único que le quedó fue esto…
Mientras sea la novia de Alex , el tema de ____ y Justin queda enterrado. Los
padres de Justin no se van a enterar y van a dejar a tu amiguito disfrutar del
verano en paz.
- Chaz: Vaya chorrada…
- Miranda: ¡Muy bien! (Aplaudiendo) En eso estáis de acuerdo.
- Chaz: Si… Pero el daño ya esta hecho.
- Annie: Pues habrá que repararlo. Tenemos que hacer que hablen.
- Chaz: Justin no va a mover un dedo. Todo esto no creo que cuele Anny…
- Annie: ¿Por qué no?
- Chaz: Reconoce que había formas más sencillas de salir de este embrollo que
no liándose con su ex.
- Annie: ¿Se te ocurre alguna?
- Chaz: (Entrecerrando los ojos) Eso no quiere decir que no la haya.
- Annie: Bueno, si Justin no esta por la labor de hacer nada, será ____ la que lo
haga. Hablaré con ella, pero necesito que me tengáis localizado a Justin.
#SEVENTY-ONE
~~~
Llegó al bar y sonrió al ver a Chaz en compañía de Justin sentados en la barra.
Se acercó a ellos y abrazó a Justin por atrás. Él supo a que venía el gesto de su
amiga y dejó escapar media sonrisa mientras le acariciaba una de las manos
que ella tenía sobre su tripa.
~~~
Entró al almacén y notó que la puerta se cerraba. Se había agachado para
coger las botellas, por lo que se puso de pie, y oyó la cerradura girar. ¿Le
habían encerrado? Se acercó a la puerta para comprobarlo, pero antes de llegar
a coger el pomo…
- ____: Justin
Cerró los ojos y notó como el corazón le martilleaba con fuerza. No quería
hablar con ella. No quería ni siquiera volver a verla.
~~~
- Annie: ¿No crees que te has pasado con lo de encerrarlos?
- Chaz: ¿Has visto el bar? No pueden salir gritándose de todo.
- Annie: Pero querrán hablar no…
- Miranda: No… Justin no la quiere ver ni en pintura.
- Annie: (Seria) ¿Os lo ha dicho?
- Miranda: Solo ha dicho eso. Que ____ ya no existía para él, y que no quería
hablar del tema. Luego ha estado normal.
Chaz la miró torciendo el gesto y ella rectificó.
- Miranda: Bueno… Como lo has visto tú. Bien del todo no, pero mal…
Tampoco.
- Annie: Si esta tan enfadado no sé si ha sido buena idea encerrarlos. Si no
quiere hablar con ella… Al fin y al cabo las cosas no van a cambiar.
- Chaz: (Apoyándose en la puerta) No… Ahora los dejamos. Si se tienen que
matar… que se maten.
~~~
Seguía mirando hacia la puerta cuando escogió algo que decir.
- Justin: Dime que la otra puerta esta abierta.
Ella se dio cuenta de que si podía salir de ahí, iba a hacerlo sin escuchar una
sola de sus palabras, por lo que decidió mentir.
#SEVENTY-TWO
~~~
- Miranda: Vale… Se lo ha tomado muy mal. Chaz mejor ábrele. Esta claro que
no van a hablar.
- Chaz: No. Aguantemos un poco más, va a acabar cediendo (Y mirando a
Annie), espero que tu amiga tenga algo bueno para decirle.
- Annie: Eso espero yo también.
~~~
- Justin: ¡Miranda! O haces que me abran o empiezo a romper todo.
____ seguía detrás de él sin atreverse a acercarse más. Apretaba los labios
para no llorar. Nunca había visto a Justin así. Ni siquiera lo había visto alguna
vez realmente enfadado. Habían tenido una discusión al principio, pero
comparada con eso no había sido nada. Era siempre tan tranquilo, que incluso
parecía tímido, nunca dejaba a la luz sus sentimientos de esa manera. Y verlo
tan enfadado no era nada agradable.
~~~
- Miranda: Venga… Fuera coñas, Chaz dame la llave.
- Chaz: Un poco más…
- Miranda: ¿No le has oído? Piensa arramblar con el almacén. ¡Chaz por favor!
- Chaz: No va a hacer nada.
- Annie: Si rompe algo lo pagamos nosotros. Un poco más solo Miranda… En
serio.
- Miranda: En cuanto oiga que algo se rompe abro. Y si no, entro por detrás.
- Chaz: Vale… pero danos una o dos botellas de margen. Igual con eso se
calma.
~~~
Al darse cuenta que lo ignoraban deliberadamente se alejó un poco de la puerta
y miró a su alrededor que era lo primero que podía tirar al suelo y que hiciera
ruido. Que ___ lo abrazara desde atrás hizo que se quedara totalmente quieto.
No quería tenerla cerca…
- Justin: Suéltame.
- ____: (Con la cara apoyada en su espalda) No hagas nada.
- Justin: Estoy muy cabreado ____. Déjame en paz.
Se separó de él y lo hizo girar hasta que se encontraron frente a frente. Le
cogió la cara con las manos. Él tenía los ojos llenos de lágrimas y ella sabía que
era la única culpable.
- ____: Lo siento. Creeme que lo siento muchísimo. No te tenías que haber
enterado así.
- Justin: Da igual como me enterase. Pensaba que…
- ____: Esto estaba hecho para que terminara mal Justin. Sabíamos que
nuestro padres…
- Justin: No. Nuestros padres no tienen nada que ver. Tú has escogido a Alex,
eso es todo.
Ella seguía con la cara de él entre sus manos. Se moría por besarlo, pero no
podía complicar más las cosas. Por ella… y por él. Sobretodo por él.
- ____: ¿Crees de verdad que hay algo que escoger? Tú eres el único que me
importa. Ni Alex, ni mis padres… Justin ni yo. Solo me importas tú.
- Justin: ¿Entonces? ¿Qué hacías con Alex? ____, cuando os he visto…
- ____: Tiene que ser así. (Se le empezaron a escapar lágrimas) No quiero que
tu padre te haga nada. No quiero que se entere de que alguna vez hubo algo
entre nosotros.
Cogió las manos de ____ y las apartó de su cara.
- Justin: (Sin soltarle las manos) ¿Me quieres?
Ella apretó los labios para contener más lágrimas y mirándole fijamente a los
ojos asintió. Esa pregunta había sido muy sencilla, que le quería era de las
pocas cosas que tenía claras.
No le dio tiempo a decir ni hacer nada. Él la cogió por la cintura y la acercó
hasta besarla. Y fue como si todo lo demás desapareciera. Siempre había
sabido que renunciar a Justin sería difícil, pero en ese momento fue consciente
de que le iba a ser simplemente imposible.
SEVENTY-THREE
- ____: Es un disparate.
- Justin: No me importa.
Sonrió y se acercó aún más a él para besarlo. Justin la abrazó y le siguió el
beso olvidándose de todo. Ya tendría tiempo de pensar en Alex y en el hecho
de que su relación con ____ pasaba a la clandestinidad.
- ____: (Separándose un poco de él) Tengo otra cosa que decirte.
- Justin: ¿Mala?
- ____: (Negando) No me voy a ir a estudiar a Francia.
- Justin: (Separándose de ella) ¿Ha sido tu padre? ¿Es por qué nos vio?
- ____: (Cogiéndole la mano) No, no. Mi padre no sabe nada. Yo lo había
pensado. Bueno, lo acabo de decidir en realidad.
- Justin: No lo entiendo.
- ____: (Con media sonrisa) No podría irme. (Y alejándose de él para sentarse
en una caja) Ni me acordaba de eso, me lo recordó Anny el otro día. En ese
momento decidí que llamaría para rechazar la plaza en cuanto pudiera.
- Justin: (Agachándose delante de ella) Pero… ¿por qué? Si es tu sueño ¿no?
Dijiste que la otra opción era estudiar derecho. Eso no te va nada.
- ____: (Sonriendo) Ya… Pero no podría irme. No ahora.
- Justin: No tienes que hacer esto por mí. Tú y yo… Bueno, será un coñazo, es
cierto, pero nos llamaremos y nos veremos siempre que podamos. No será
mucho más difícil que a partir de ahora.
- ____: No es lo mismo. El día que hablé con Anny… (Mirándole a los ojos) No
paraba de pensar en ti. En si mis padres llamarían a los tuyos, en si eso podía
ser motivo suficiente para que tu padre… Estaba ahí lo de París. Y no me
importó Justin, ni siquiera me acordé de ello hasta que no me lo mencionó
Anny. Te has convertido en lo único importante, y si tú quieres estar conmigo,
yo no puedo irme a ninguna parte.
- Justin: ¿Sabes que me gustaría?
____ negó sonriendo.
- Justin: Poder llevarte lejos de aquí. No sé… A algún lugar donde pudiéramos
estar solo tú y yo. Sentirme siempre como me siento ahora mismo.
- ____: (Juntando su frente con la de él) Ojalá existiera ese lugar.
- Justin: No sé porque te quiero tanto. Lo digo enserio, no tengo la menor idea
de qué paso el día que te conocí, pero me encanta.
Le rodeó el cuello con los brazos y le besó con toda la delicadeza que fue
capaz. Intentando demostrarle con un gesto hasta que punto correspondía ella
sus palabras.
Oyeron una tos fingida a su lado y se separaron algo sorprendidos. Vieron que
la de la tos había sido Annie, y que Chaz y Miranda los miraban desde la
puerta.
- Chaz: A los bomberos les podemos decir que no vengan ¿no? No tienes
intención de prender fuego el almacén ni nada por el estilo.
- Justin: No te hagas el gracioso.
Se puso de pie y le tendió una mano a ____ para que se levantara de donde
estaba sentada. Acto seguido la rodeó por la cintura.
- Justin: Sé que tengo que daros las gracias… a los tres.
- Chaz: Mira que bien. Para las culpas éramos solo Anny y yo, ahora, para las
gracias te suma a ti también, ¿has visto? (Mirando a Miranda de reojo).
- Miranda: ¿Qué? ¿Yo no he ayudado?
- Annie: Bueno… Siento ser el cable a tierra, pero ____ ya han pasado los 45
minutos.
- Justin: (Girándose hacia ____) ¿Tienes que irte?
- ____: (Asintiendo) Me esperan para comer.
- Justin: A la noche nos vemos… ¿Si?
- ____: (Sonriendo) Si. Ven si puedes.
Se inclinó para besarla y le sonrió mientras ella y Annie salían por la puerta del
almacén.
- Chaz: (Frunciendo el ceño) ¿Todo en orden?
- Justin: Todo en orden.
- Chaz: ¿Y ALex?
- Justin: (Suspirando) Ahora os cuento…
~~~
Llevaban solo unos días juntos, pero ya se habían hecho cierta rutina, y parte
de ella era que Chaz llevaba a Miranda a casa por las noches. Eso por lo menos
les dejaba un poco de tiempo para ellos, ya que con Miranda todo el día
trabajando, por mucho que se vieran, nunca estaban solos.
- Chaz: (Separándose un poco de ella) ¿Tienes que subir ya?
- Miranda: (Mirando el reloj) Debería…
Sin embargo se volvió a acercar para besarlo.
- Chaz: (Volviendo a separarse) Odio esto. Pero me tengo que ir.
- Miranda: (Sonriendo) Por Justin.
- Chaz: Si. Lo mataría, pero se lo prometí. Si a sus padres se les da por llamar y
no estamos ninguno de los dos en casa…
- Miranda: Tranquilo (Y lo volvió a besar).
- Chaz: (Mordiéndose el labio inferior) Odio a Justin. Recuérdame que se lo
diga.
- Miranda: (Riéndose) Se lo diré yo por parte de los dos.
Abrió la puerta del coche y salió. Tras cerrar la puerta, Chaz bajó la ventanilla y
ella se apoyó en el cristal.
- Miranda: Hasta mañana…
- Chaz: Te llamo cuando llegue a casa. Si esta el teléfono ocupado mejor, así
no tengo que mentir por el tonto de Justin.
- Miranda: Vale.
Dio un paso hacia atrás y saludó con la mano mientras vio como el coche de
Chaz se alejaba.
~~~
Llegó a su habitación y cerró la puerta. Se fue directa a mirarse al espejo y
sonrió. Se tapó la boca con las manos, pero sus ojos seguían reflejando incluso
más alegría de la que mostraba con la sonrisa. La tarde había sido una especie
de tortura leve, porque sabía que habría días peores, días sin sus padres como
compañía. Sin embargo como se habían dado las cosas con Justin la tenía
sumamente contenta. Nunca se hubiera imaginado que todo eso tenía alguna
posibilidad de salir medianamente bien, y cuando Annie le había contado lo mal
que estaba Justin, había sentido que lo perdía por completo, y esa sensación
era la peor del mundo. Se tumbó en la cama mirando hacia el balcón. Esperaba
que Justin pudiera ir. Había aguantado toda la tarde con Alex solo pensando en
que Justin iba a ir a verla a la noche. Sabía que no estaba bien. Que todo había
pasado de repente a no importarle lo suficiente, ni siquiera sus padres. ¿Por
qué no se planteaba ni por un segundo que problema podían tener sus padres
con los Bieber? ¿Por qué para ella no era una alerta roja que su padre odiara de
semejante manera al padre de Justin? En el fondo daba lo mismo… Porque
fuera lo que fuera, Justin no tenía nada que ver, y ella solo lo veía a él, no veía
a un Bieber cuando lo miraba. Era simplemente Justin, y a la vez Justin lo era
todo.
#SEVENTY-FOUR
Estaba uno de los seguridades dando vueltas. Cuando la vio le sonrió y siguió
su recorrido. ____ esperó ahí asomada hasta que se perdió de vista.
- ____: (Aún apoyada en la barandilla y girándose hacia Justin) Ya esta.
- Justin: (Llevándose una mano al pecho) Casi me da algo. No me ha pillado
por poco. Y encima al saltar he hecho ruido y se ha quedado mirando. Pensaba
que subía, te lo juro.
- ____: (Sonriendo mientras se agachaba) Tranquilo. Ya se ha ido. Y confía en
que si no he gritado es porque no hay nada raro en mi balcón.
- Justin: Que iluso… (Y se acercó a ella hasta besarla).
- ____: (Separándose un poco) ¿Entramos? No vaya a ser que siga dando
vueltas.
Él asintió y aceptó la mano que ella le tendía para levantarse. Entraron en la
habitación y ella cerró el balcón.
Cuando volvió a mirar a Justin, se dio cuenta que él se había acercado hasta
una pared donde había estantes con trofeos y diplomas. Se acercó a él y apoyó
su barbilla sobre el hombro de él. Permaneció en silencio mientras Justin
miraba con atención.
- Justin: ¿Los has conseguido todos tocando el piano?
- ____: Alguno de los diplomas son por el expediente.
Justin sonrió y se giró un poco haciendo que ella se separara.
- Justin: Así que eres una empollona. (Ella puso los ojos en blanco y se giró
pero él la abrazó) No te creas que me sorprende.
- ____: (Sin mirarle) ¿Y tú?
- Justin: No… para nada. Bueno, he ido bien siempre, pero sin más. La de las
notazas es Anny.
- ____: Lo sé. Por eso a mis padres les parece tan buena compañía. Bueno…
Por eso y porque mi padre y su madre son muy amigos.
Se giró hacia él con una sonrisa.
- ____: Es raro… Pero siempre me ha dado la sensación de que mi padre solo
esta contento de verdad cuando esta con la madre de Anny.
- Justin: (Abriendo mucho los ojos) ¿Qué insinúas?
- ____: ¡No! (Y pegándole en el hombro) No, no era eso. Lo digo porque ellos
se conocen de toda la vida. Siempre han sido amigos y es como que pueden
hablar de muchas cosas. No sé, cuando esta ella, es distinto. Sonríe.
- Justin: Pues… Esto te va a chocar, pero… Mi padre también es muy amigo de
la madre de Anny.
- ____: Bueno… Porque son de la misma edad. Si han vivido siempre aquí,
tienen que conocerse a la fuerza.
- Justin: No… pero… (Y sonriendo) Es que la madre de Anny siempre bromea
con lo mismo. Dice que somos como ellos de jóvenes. Bueno… bromeaba, que
últimamente no la veo nunca, pero antes iba más a casa de Anny, y siempre
me decía que le recordaba a mi padre de pequeño y esas cosas.
- ____: ¿Eres muy parecido a tu padre?
- Justin: (Alejándose de ella y sentándose en la cama) Supongo que si.
(Encogiéndose de hombros) Al menos eso dice todo el mundo. No es difícil.
Somos los dos rubios y de ojos miel.
- ____: (Sentándose a su lado) Vanessa me dijo que eras igual que él.
- Justin: ¿Conoce a mi padre?
- ____: Eso parece. ¿Sabes? El problema esta claro que es de tu padre con el
mío. Eso de que nuestros abuelos o bisabuelos… Quiero decir… Esa tontería de
los apellidos no cuela. Se conocían. Y empiezo a creer que eran amigos.
- Justin: Hombre… Sería difícil que la madre de Anny fuera amiga de los dos
cuando ellos se odiaban ¿no?
- ____: (Negando) No entiendo que pudo ser tan grave.
- Justin: No habrá sido nada grave. Se habrán peleado por dinero. Alguno le
habrá estropeado un negocio a otro o algo así. Mi padre al menos… es así de
profundo.
- ____: ¿Tú podrías pelearte con Chaz por algo así?
- Justin: (Sonriendo) Chaz va a estudiar ingeniería, los negocios se la
repanpinflan tanto como a mí.
- ____: ¿Pero… podrías?
- Justin: ¡Ey! Es Chaz… Él y yo no nos peleamos. Nada más allá de dos días al
menos. (Y tumbándose en la cama) Además esta Anny. Enfadarme con Chaz
siempre implica que Anny se enfade conmigo.
- ____: Tiene que haber algo que no pudieras perdonarle. ¿Qué sería?
- Justin: ¡Buf! Mil cosas, como a los demás, pero la diferencia es que sé que él
no me las haría. Mentirme en algo gordo, engañarme. No sé, robarme a la
novia (Y se rió), pero él nunca me haría nada de eso. Ni yo a él.
- ____: (Sonriendo y tumbándose a su lado) Me dais envidia. Ni siquiera con
Anny tengo una relación así.
- Justin: Anny nunca te haría nada malo. Te quiere más que a Chaz y a mí
juntos, y eso es bastante.
- ____: Ya lo sé. Pero no es la misma relación.
- Justin: (Alzándose sobre un codo y mirando a _____ a la cara) Nunca he
entendido porque tus padres te mandaban a un internado. Eres la hija perfecta.
¿Conmigo que hubieran hecho?
- ____: (Sonriendo) En mi internado no hay chicas conflictivas ni nada de eso.
(Encogiéndose de hombros) Mi madre estudió allí. Conocían el centro.
- Justin: (Negando) No te esfuerces. No lo entiendo.
Estuvo a punto de preguntar si no la echarían de menos todos los meses que
ella pasaba fuera, pero no quiso hacer pensar a _____ en esa respuesta.
Observó su cara con detenimiento mientras la acariciaba con una mano. Menos
mal que habían acabado el instituto, y aunque estuviera mal pensarlo, menos
mal que ella no quería irse a Francia. Todo un curso sin verla podía ser
insoportable. Se inclinó sobre ella y la besó, pensando en que más les valía
aprovechar el tiempo que tenían.
#SEVENTY-FIVE
~~~
Notó que algo le salpicaba la cara y se giró sorprendido.
- Chaz: ¡Joder Miranda!
- Justin: (Pasándose la mano por la cara para limpiarse) ¿Se puede saber qué
te pasa? Me has empapado.
- Chaz: (Molesto) No he sido yo. Es esta. (Y mirando a Miranda) ¡Qué no sé que
le pasa!
- Miranda: (Acercándose a ellos y golpeando la mesa) „Esta‟ tiene nombre.
- Chaz: ¿Me vas a decir que te pasa?
Justin se sorprendió al ver como Miranda se limitaba a fruncir el ceño y giraba
en redondo sin contestarle a Chaz. Miró a su amigo esperando una respuesta.
- Chaz: (Negando con la cabeza) No me preguntes. No tengo ni idea. Lleva
todo un día sin hablarme, y ayer vine a buscarla y se había ido.
- Justin: Hombre… Esta molesta por algo.
- Chaz: ¿No me digas?
- Justin: Bueno, tampoco la tomes ahora conmigo.
- Chaz: (Resoplando) Mejor me voy. Cuando me quiera decir que tan grave le
he hecho, ya me lo dirá.
Se levantó mientras dejaba algo de dinero en la barra y se fue del bar. Justin
los miró a él y Miranda alternativamente. Ella fingía ignorarlo mientras
enredaba con la máquina de café, pero le observó marcharse de reojo.
~~~
Llevaba un rato apoyado en la marquesina esperando sin éxito. Estaba
enfadado. Muy enfadado. Sin embargo había decidido que tenía que hacer algo.
Su relación con ella era diferente, y era diferente en todos los sentidos. Se
sentía incapaz de estar tranquilo si las cosas no iban bien. Y de la actitud de
Miranda eso era lo único que tenía medianamente claro: algo no iba bien. Oyó
pasos y levantó la vista. En la media hora que llevaba ahí esperando no había
pasado absolutamente nadie, ya estaba de noche, y siendo verano eso
implicaba que
era bastante tarde. Era ella. La forma en que lo miró solo le confirmó lo que ya
sabía: algo no iba bien. Pero
seguía sin saber él que. Se sentó lo más lejos de él que pudo y le ignoró.
- Chaz: ¿Vamos a estar así mucho tiempo?
Mica seguía ignorándole.
- Chaz: ¡Joder Miranda! Tengo un límite. Y lo estas rozando.
Que se mantuviera el silencio le puso aún más nervioso. Se acercó hasta ella y
se arrodillo delante, tenía que mirarla a los ojos.
- Chaz: Lo siento. No quería gritarte, pero por favor… Dime qué te pasa.
- Miranda: No es de tu incumbencia.
- Chaz: ¿Cómo no va a ser de mi incumbencia? Solo estas así de arisca
conmigo, algo ha pasado… pero no sé él que. Y aunque no fuera solo conmigo,
tú me importas.
- Miranda: (Sonriendo) Vete a la mierda anda.
Chaz resopló y se giró al oír un autobús acercarse. Miranda se levantó y el
autobús paró. No dudó en seguirla.
Ella seguía ignorándole. Solo volvió a mirarle cuando él se sentó a su lado.
- Miranda: ¿Puedes dejarme en paz? Te lo digo en serio.
- Chaz: Vale. Estas enfadada y no quieres hablar con nadie, ¿es eso?
- Miranda: ¿No soy clara? No quiero hablar contigo.
- Chaz: ¿Y eso hasta cuando? Miranda, esto es desesperante.
- Miranda: Para siempre. No quiero hablar contigo, quiero que me dejes en paz.
No es tan difícil de entender.
- Chaz: ¡Soy tu novio! ¿Cómo quieres que entienda todo eso?
- Miranda: (Entrecerrando los ojos) No seas cínico. No somos nada.
- Chaz: ¿Hola? ¿No somos nada? ¿Pero qué narices te pasa?
- Miranda: (Bufando y girándose para mirarlo) Éramos Chaz. Éramos algo. Ya
no. Es simple. Y te agradecería que me dejaras en paz en serio. Bájate en la
siguiente parada porque vas a acabar muy lejos del club.
- Chaz: (Sonriendo) Es broma.
- Miranda: (Seria) No, no es broma. Hazme caso, bájate.
- Chaz: (Cogiéndole la cara para obligarla a mirarlo) ¿Me estas dejando?
#SEVENTY-SIX
Se levantó a la vez que le daba al botón de parada. Chaz se movió lo justo para
que ella pudiera salir. Se quedó mirándola seriamente. No tenía ni la menor
idea de que había hecho que Miranda pensara tan mal de él, pero no tenía el
menor sentido. Desde que estaba con ella no había nadie. Simplemente no
trataba con otras chicas. Se pasaba el día al lado de ella, ¿de dónde se había
sacado que tonteaba con nadie? ¿En qué se basaba para decir que podía
cansarse de ella?
~~~
Cuando el autobús volvió a cerrar las puertas se reclinó sobre el asiento. Con
ella tenía que ser diferente, tenía que ser mejor, pero había acabado siendo lo
mismo de siempre, solo que él nunca había terminado tan desolado.
Miranda se llevó las manos a la boca y observó durante largo rato como Lana y
Annie se reían y no paraban de hablar. Ahora la veía como una niña. Días atrás,
colgada del cuello de su novio, la había visto como una amenaza, se había
sentido insignificante. A ella no le iban silbando por la calle… A él si se le
tiraban al cuello.
Ahora se sentía idiota. Había estado celosa de una niña. Una niña sin ninguna
mala intención. Había metido la pata hasta el fondo con su novio. Bueno, con
Chaz, porque ella le había dejado muy claro que no eran nada.
#SEVENTY-SEVEN
Estaba decidido a encontrar algo. No podía ser todo „sin más‟, tenía que haber
una razón, y él quería saberla. ____ y él merecían saberla.
Cerró el libro de golpe y torció el gesto. Ni bueno ni malo. No tenía más que
una fecha. Dejó los libros como estaban y se sentó en el escritorio de su padre.
Abrió varios cajones y revisó por encima. Había cartas formales, papeles,
alguna invitación para fiestas. Nada importante. Abrió los cajones del otro lado
y todo parecido, salvo el
último. El último cajón tenía una caja fuerte. Sonrió. Su padre iba de duro, pero
hacía años que había descubierto que la contraseña que utilizaba
absolutamente para todo, no era ni más ni menos que la fecha de nacimiento
de su hijo. La caja no se podía sacar del cajón. Se sentó en el suelo y giró la
rueda hasta haber
completado su fecha. Sonrió al oír el „clic‟ que habría la caja. Había sido
demasiado fácil.
Todo lo que había eran papeles antiguos. En una ocasión Chaz había
conseguido abrir la caja fuerte de su padre, y se había sorprendido al encontrar
solo su testamento, aunque lo había leído y se había quedado mucho más
tranquilo al saber que todo quedaba en manos de Ella y él, nada para su tía.
Justin había esperado algo así. No un testamento. Le hubiera dado muy mala
espina que su padre se preocupara de esas cosas cuando ni siquiera tenía 40
años, pero algo del estilo, papeles legales o algo así. Sin embargo, eran cartas.
Cartas personales. Había varios papeles sueltos, y luego había un fajo de cartas
atado con una cinta roja. Sacó el fajo de cartas y lo miró por encima. Todas
tenían como destinatario a su padre, y claro que tenían años. La dirección era
la de la Academia militar. Debajo había otros papeles. Los sacó con cuidado,
eran partituras de piano. En realidad no tenía ni idea de música, pero había
visto las partituras de ____ y esas eran del estilo. Eran canciones con letra.
Leyó un poco y le pareció demasiado cursi, o quizá un poco triste, aunque la
canción intentaba lo contrario: animar. Siguió mirando en la caja fuerte. Había
fotos viejas. En la primera reconoció a
Anabelle, la madre de Annie. Sonrió al pensar en cuanto se parecía a la Annie
de ahora, su madre no era rubia, pero las dos tenían la misma cara divertida.
Pasó a la siguiente foto y volvía a estar la madre de Annie, pero esta vez
acompañada. Un chico moreno y alto la abrazada mientras ella sacaba la
lengua. Sonrió hasta el preciso momento en que reconoció al otro chico, era el
padre de ____. Quizá ahora estuviera algo más fuerte y su gesto no fuera tan
agradable, pero era él. Pensó si
realmente no habría pasado algo entre Anabelle y Santiago en un pasado, en
esa foto desde luego parecían pareja. En la siguiente foto salían los tres. La
madre de Annie entre los dos chicos y un poco de puntillas para estar a su
altura. Tenía razón Anabelle. Esa imagen le recordaba mucho a su amistad con
Annie y Chaz.
Además, estaba seguro que de buscar un poco, encontraría una foto
terriblemente similar.
Sentía cada vez más curiosidad por el motivo que podían tener sus padres para
odiarse tanto. Odiarse tanto cuando habían sido TAN amigos. En la siguiente
foto solo reconoció a su padre. Salía con una mujer morena. Era guapa, pero
sumamente sencilla. Tenía el pelo largo y negro, con un flequillo recto que le
tapaba las cejas.
Por la postura que tenían daba la sensación de que su padre la había forzado a
ponerse delante de la cámara, pero los dos salían sonriendo, ella incluso
parecía reír. Se sintió bien al ver a su padre tan relajado. Debía ser alguna
antigua novia, al menos la tenía cogida como si lo fuera. Pasó a la siguiente
foto. Otra vez la mujer morena, pero sola. Salía de perfil y era evidente que no
tenía idea de que la estaban fotografiando. La miró con atención y se sintió
extraño. Se sintió extraño porque ese perfil le recordó terriblemente a alguien.
Los pómulos, la nariz, tenía un aire a ____.
Sacudió la cabeza. Se estaba volviendo loco. Eso le pasaba por haberse pasado
toda la tarde mirándola sin poder acercarse a ella. Pasó a la siguiente foto y no
tardó en darla vuelta. Podía ver fotos de las ex novias de
su padre, pero verlos besándose era otra cosa. Estaba claro que esa foto no
había sido ninguno de los dos conscientes de que se la sacaban. La última foto
hizo que le costara tragar. Era otra vez la mujer morena sola, pero estaba vez
si era consciente de que la fotografiaban. Miraba directamente a la cámara y
sonreía.
#SEVENTY-EIGHT
Acomodó las fotos y las volvió a meter en la caja. Cogió el fajo de cartas y
volvió a mirarlo, pero estaba vez prestando atención al remitente, y su intuición
no le fallo, era ella. Lo pensó mucho. Sabía que era invadir su intimidad, pero
algo superior a él le hizo soltar la lazada y sacar la una de las cartas del sobre.
Recorrió las líneas a toda prisa, leyendo por encima, hasta que algo llamó su
atención.
“A veces pienso que me voy a volver loca, y lo peor es que el sitio no esta mal.
No sé, me lo imaginaba peor, pero no estas tú. No hay el más mínimo rastro de
nada relacionado contigo, y eso consigue desquiciarme. Sé que antes de todo
esto llevábamos semanas sin vernos y que suena absurdo que ahora te extrañe
hasta este límite, pero es así. No tengo fotos tuyas. No pude cogerlas,
quedaron debajo de la tabla suelta. No tengo a Vanessa para que vaya a hablar
con Nana. Sé que tengo las cartas y que antes no las tenía, pero todo esto
parece mucho más drástico que estar encerrada en mi habitación. A veces creo
que van a conseguir de verdad que no nos volvamos a ver más, y no te haces
una idea del daño que me hace pensar cosas así. Tú me dirías que fuera
optimista. Me harías reír, sino por gusto a la fuerza. Echo de menos hasta tus
cosquillas. Estoy sonriendo mientras escribo esto último, pero las sonrisas
últimamente no me duran mucho.”
“¡No les entiendo! ¡Soy incapaz! ¿Cómo estas? Por favor, sé sincero. No sé si
mis cartas te van a seguir llegando. Anabelle dice que habla contigo a diario. No
sabes la envidia que me da. Si no fuera porque es imposible que me olvide de
nada relacionado contigo... Te diría que casi no recuerdo tu voz. ¿Hace cuanto
no hablamos? No quiero ni pensarlo. No lo pienses tú tampoco. Vuelvo al
principio, ¿cómo estás? Eso debe ser mucho peor que lo mío. Aquí… Bueno, hay
normas estrictas, pero el ambiente no es del todo desagradable. Jeremy, nunca
creía que tu padre fuera capaz de tanto. Yo ya estoy lejos, ¿qué sentido tiene
alejarte a ti también? Anabelle dice que es porque yo estoy a punto de volver.
¡Dios mío! Pero si me faltan meses! Odio que controlen las llamadas. Desearía
poder oírte. Antes he estado hablando con Santiago. Es un optimista nato. No
es que vea el vaso medio lleno, lo ve hasta los topes. Me asegura que cuando
tú vuelvas de la academia será todo distinto. Quiero creerle. Te aseguro que es
lo que más deseo. Poder estar contigo y que dejen de manejarnos la vida.”
Volvía a estar firmada con un „te quiero‟. Parecían palabras sinceras, parecía
que estaba enamorada de su padre con toda su alma, pero lo peor de todo es
que se sentía extremadamente identificado con esa carta. Quizá él no estuviera
en su situación, quizá su relación con ____ todavía fuera infinitamente más
llevadera, pero casi sentía la misma angustia solo con leer sus palabras. Lo más
difícil de todo era asimilar que su padre había estado en la misma situación que
él. Se quedó sentado en el suelo, apoyado contra el escritorio y con las cartas
en las manos. No tenía la menor idea de que hacer.
Metió todo en la caja fuerte cuando se dio cuenta que el tiempo que llevaba en
el despacho de su padre ya era excesivo, pero dudo en cerrarla. La respuesta
no solo la buscaba por él, la buscaba también por ____. Y estaba claro que ella
no podría creer solo en sus palabras, no cuando dijeran semejante disparate.
Cogió las cartas y rezó para que a su padre no le diera por controlar la caja
antes de la noche siguiente. Volvió a coger la partitura y se quedó pensativo.
Quería saber como sonaba. Cerró la caja fuerte teniendo en las manos el fajo
de cartas y la partitura. Se levantó y miró el resto del despacho. No debía
notarse que había estado ahí.
~~~
- Annie: Ya… Mortal. Cuando me dijo que era por Lana, casi me da algo.
- ____: (Riéndose) Pobre Miranda, se debe estar queriendo morir.
- Annie: (Mordiéndose el labio inferior) Me imagino. Por eso no le he dicho nada
Chaz aún. Pero bueno, si va ella y se disculpa no creo que tarden mucho en
arreglarlo. Como se entere por otra persona que el ataque de celos de Miranda
fue por Lana...
- ____: La perdonará igual.
- Annie: No te creas. No sabes lo mal que lo ha pasado. (Sonriendo) Ahora que
están los dos así, tengo que decirte que le pega más a Justin estar tan
enamorado.
- ____: ¿Y eso por qué?
- Annie: No sé. Es una de esas personas que no tiene maldad, supongo que se
veía venir que cuando se enamorara fuera así.
- ____: (Suspirando) Y a falta de chicas… Tuvo que ser de mí. (Y se sentó en
un banco).
- Annie: (Sentándose a su lado) No seas así. Justin esta feliz contigo, creeme.
Da igual Alex, o vuestros padres. Contigo es otro. Además… Tú le correspondes
y eso al menos le deja sentirse seguro. Chaz esta igual que él, pero a cada paso
que da, piensa que va a meter la pata y Miranda tampoco lo pone fácil.
- ____: Miranda no quería hacerle daño. Yo creo que están sufriendo los dos
por igual.
- Annie: Si, lo sé. ¿Sabes qué pasa? Chaz se esta agobiando demasiado con
todo esto. Pasó de repente a ocupar el lugar de un novio que había durado tres
años, y él no sabeque es una relación de más de dos semanas. Además lo ve a
Justin, y eso lo agobia más, porque Justin tampoco tenía idea de donde se
metía, pero de momento la ha salvado mejor.
- ____: (Sonriendo) ¿Eso te lo ha dicho Chaz?
- Annie: (Asintiendo) Si. Ayer por la noche lo llamé. No le dije que ya no
pensaba lapidarlo porque sabía que no había hecho nada, pero me hice la
buenita.
- ____: ¿Hablaste con Justin? Ayer no vino.
#SEVENTY-NINE
~~~
Había estado toda la mañana distraída. Después de descubrir que había dejado
a su novio por el motivo más absurdo que se le podía pasar por la cabeza. No
había vuelto a concentrarse en nada, y la tarde se le había hecho interminable.
Desde la noche anterior en el autobús, no había vuelto a verlo.
Levantó la vista y vio que la prima de Chaz se dirigía hacia la barra. Pidió un
refresco y a Miranda no se le escapó que la miraba con clara curiosidad. Le
sirvió con una sonrisa. No había razones para ser desagradable.
- Lana: (Cogiendo el vaso) Eres Miranda ¿no?
- Miranda: (Asintiendo) ¿Anny te ha hablado de mí?
- Lana: (Negando) Soy prima de Chaz.
- Miranda: Ya… Me lo dijo Anny. ¿Él te ha hablado de mí?
- Lana: (Sonriendo) El día que llegue me dijo que tenía novia, pero ese mismo
día discutisteis y me dijo que nos presentaría cuando se aclarara todo. (Bajando
la vista) Sé que las cosas no están bien, pero tenía curiosidad por conocerte. (Y
volviendo a mirarla) Ela también me habla de ti.
- Miranda: No pasa nada. Yo también quería conocerte. No conozco a nadie de
la familia de Chaz.
- Lana: ¿Conoces a Jordan?
Miranda asintió.
- Lana: Entonces te queda poco. Solo mis padres.
- Miranda: ¿No sois más?
- Lana: (Negando) Bueno… Yo si tengo más familia, pero por parte de mi
padre. Mi madre solo tenía una hermana, la madre de Chaz. Sabes que…
- Miranda: Si. Lo sé que murio. ¿Y el padre de Chaz no tiene más hermanos?
- Lana: No. Solo Jordan. Por eso me da pena que me dejen venir tan poco.
Además, antes con la tía Claudia era distinto.
- Miranda: ¿Te dejaban venir más?
- Lana: (Asintiendo) Mi madre y la tía se llevaban muy bien. Yo venía mucho y
Chaz y Ela iban más a casa.
- Miranda: ¿Y ahora por qué no?
- Lana: ¿Chaz no te ha contado nada?
- Miranda: (Negando) Y no te sientas obligada a contarme tú tampoco. Estoy
siendo demasiado cotilla.
- Lana: Es por la tía de Chaz. No se llevaba bien con Claudia.
- Miranda: (Con media sonrisa) No me sorprende.
- Lana: A mi si. Era imposible llevarse mal con Claudia. Mi madre dice que era
la persona más buena del mundo.
- Miranda: ¿Y por qué crees que se llevaban mal?
- Lana: Porque nosotros no somos ricos supongo. (Encogiéndose de hombros)
A mí Jordan no me cae tan mal, pero tampoco trato mucho con ella. Mi madre
dice que es un bicho.
- Miranda: Yo creo que estoy de acuerdo con tu madre.
- Lana: ¿La conoces?
- Miranda: ¿A Jordan? Si… No mucho, pero si.
- Lana: (Sonriendo) ¿Ahora me dejas a mí ser un poco cotilla?
- Miranda: (Devolviéndole la sonrisa) Adelante.
- Lana: ¿Desde cuándo conoces a Chaz?
- Miranda: De este verano. Desde que empecé a trabajar en el club.
- Lana: Es muy guapo ¿a qué si?
- Miranda: (Riéndose) Mucho.
- Lana: ¿Tú crees que volveréis? Me da una pena. Me habló de ti muy contento
y enseguida… Bueno, que supongo que tendrás tus motivos, mejor…
- Miranda: (Suspirando) Si te cuento algo. No es bueno. Vas a comprobar que
soy muy, muy tonta, ¿seguirás siendo así de simpática conmigo?
- Lana: Bueno… Lo intentaré. (Y riéndose) Suelta lo que sea.
- Miranda: Le dejé porque le vi abrazado con otra.
- Lana: Ya… Algo así me contó. Pero él dice que…
- Miranda: (Asintiendo) Lo sé. Y no miente. Yo me equivoqué. (Lana alzó las
cejas sorprendida) Pero ahí esta el problema (Señalando su gesto de sorpresa)
Nadie se sorprende de que pueda haber estado con otra. Pero si de que no
mienta.
- Lana: Chaz es… Bueno, yo no hablo mucho con él de esos temas. Tú eras la
primera chica que tenía intención de presentarme. Pero… Bueno, esto me da un
poco de vergüenza. Pero hace un par de años, Anny y yo estuvimos un par de
semanas siguiéndolos todo el rato a él y a Justin.
Miranda empezó a reírse, pero Lana siguió hablando.
- Lana: Tiene una explicación. Anny quería que yo me desenamorara.
- Miranda: (Frunciendo el ceño) ¿Cómo? No…
- Lana: De Justin. Tenía 13 años y ya había tenido un novio, así que me creía
en condiciones de ser la novia del amigo de mi primo mayor. Lo reconozco era
un poco pava, y plasta también. Justin debía estar frito de mí, por eso el plan
de Anny. A ella no le hacía falta seguirlos para saberse su vida al dedillo.
- Miranda: (Sonriendo) No… Los coge de las orejas y listo.
- Lana: Tienes razón. La cosa era que yo me diera con la pared en las narices.
Y por eso me hizo ver como Justin trataba a las chicas. Darme cuenta de cómo
es Chaz fue de rebote.
- Miranda: Yo también lo he visto tratando con chicas.
- Lana: Entonces tienes que haberte dado cuenta que no tiene nada que ver a
como te trata a ti. Pero es normal que… no sé, desconfíes. Y es normal que lo
hagamos todos. En cierto modo él se lo ha buscado
#EIGHTY
- Lana: Entonces tienes que haberte dado cuenta que no tiene nada que ver a
como te trata a ti. Pero es normal que… no sé, desconfíes. Y es normal que lo
hagamos todos. En cierto modo él se lo ha buscado.
- Miranda: Eras tú.
- Lana: (Alzando una ceja) ¿Qué?
- Miranda: Fue contigo con quien le vi abrazado.
- Lana: (Abriendo los ojos como platos) Esto… ¿Esto es por mi culpa?
- Miranda: (Sacudiendo las manos) No, no. Es MI culpa. ¿Ves que soy tonta?
- Lana: (Con mediar sonrisa) No creo que te cueste mucho arreglar el
malentendido.
- Miranda: ¿Sabes si esta en el club?
- Lana: (Asintiendo) Cuando ha venido se iba con sus amigos a jugar a fútbol.
Tenían reservada la pista para un par de horas creo.
- Miranda: (Sonriendo) Bien…
- Lana: ¿Hablarás con él?
- Miranda: Lo intentaré.
~~~
Llevaba un rato en el balcón cuando notó que se encendían las luces de la
habitación de ____. Se asomó lo menos posible y comprobó que _____ estaba
sola en la habitación.
Golpeó con los dedos en el cristal y ella se giró con una sonrisa.
- ____: (Aún sonriendo) No sabía si vendrías.
- Justin: (Inclinando un poco la cara) ¿Me perdonas no haber venido ayer?
- ____: (Acercándose a él) Claro.
No se había equivocado. Vanessa solo quería darle una bandeja con la cena. Se
extrañó un poco de que no le dejara entrar en la habitación para acomodarla
en algún sitio, y que insistiera en cogerla ella misma, pero no preguntó nada.
____ esperó con la bandeja en las manos a que Vanessa cerrara la puerta.
Cuando se giró Justin la miraba con la barbilla apoyada en la cama.
#EIGHTY-ONE
Se acercó un poco a ____ y le acomodó el pelo detrás de la oreja sin que ese
gesto la interrumpiera. Dejó su mano en el cuello de ella y la acarició con
suavidad. No quería pensar en que hubiera algo capaz de separarlos, porque el
simple hecho de pensarlo le angustiaba. Y en todo esto, no había parado de
pensar desde que había leído las cartas de la madre de ____, desde que había
leído unos sentimientos que le eran tan fáciles de
comprender. Necesitaba compartir eso con alguien. Ya no era solo el hecho de
que ____ tuviera el mismo derecho que él a saber la verdad. Ahora lo hacía
buscando apoyo. Quería que _____ conociera sus miedos, aunque ella no
pudiera hacer nada, al menos quería saber que él también tendría algo parecido
a esas cartas si conseguían separarlos. Descubrir lo dura que podía ser la
realidad le hacía necesitarla a su lado más que
nunca.
#EIGHTY-TWO
~~~
Había llegado al aparcamiento con el temor de que él ya se hubiera ido, pero
por suerte ahí estaba todavía el coche. No quería esperar más para aclarar
todo, y no era algo que pudieran hablar por teléfono. Se apoyó en el capó del
coche y miró el reloj. Hacía tres horas que Lana le había dicho que Chaz y sus
amigos se habían ido a jugar a fútbol. Era bastante tarde. No podía tardar
mucho más. Oyó risas en el aparcamiento y alzó la vista. Eran ellos. Chaz se fijó
en ella nada más salir de club, ya los separaban pocos metros cuando Miranda
se puso de pie. Era una sorpresa que Miranda lo estuviera esperando en su
coche.
#EIGHTY-THREE
~~~
Había estado un buen rato pensando si hacerlo o no. Pensando en todo lo que
le había contado Justin, y en lo poco que encajaba con lo que ella sabía de la
historia de su madre. La cuestión es que allí estaba. De pie en una silla y
revisando las cosas que su madre tenía en los estantes más altos del armario.
Se mordió el labio inferior y se bajó de allí. No había nada. Ni en el armario, ni
en el tocador, ni en ninguno de los cajones de la habitación. Nada de nada.
#EIGHTY-FOUR
Bajo las escaleras con parsimonia. No paraba de darle vueltas a ese asunto.
Nunca. Nunca nadie había comentado algo parecido. Ella dedicaba su vida al
piano ¿y nadie había sido capaz de decirle que su madre también sabía tocar?
Ni su abuela, ni su padre… Ni ella misma. Algo no encajaba. Levantó la tapa del
piano del cuarto de estar y acarició un par de teclas con cuidado de no hacerlas
sonar.
~~~
- Annie: (Girándose hacia él) ¿Sabes qué? Mejor no.
- Justin: (Alzando una ceja) Vas a tener que darme una excusa.
- Annie: Has dicho que no puedo estar a malas con todo el mundo ¿no? (Justin
asintió y ella siguió hablando) Entonces lo arreglo con Chaz y listo.
- Justin: (Riéndose) No seas niña. ¿No era que crees en la liberación de la
mujer y todas esas pamplinas? ¡Adelante! Pídele una cita.
- Annie: (Frunciendo el ceño) No son pamplinas.
- Justin: (Negando con una sonrisa) No te atreves.
- Annie: ¿Te crees que tengo cinco años? Ya no me pico con algo así.
- Justin: (Encogiéndose de hombros) Solo digo la verdad. Dices que los de tu
edad somos unos inmaduros, pero con los mayores no te atreves.
- Annie: ¡Y lo sois! ¡Mira a Chaz!
- Justin: Te miro a ti que te tengo más cerca. Sois iguales.
- Annie: ¡Oh! Habló. Salta dos veces un balcón y se cree Romeo. (Apuntándole
con el índice) Es la primera novia que tienes así que no pretendas sentar
cátedra.
- Justin: (Cruzándose de brazos) Tú tampoco puedes hablar mucho del tema
¡eh bonita!
- Annie: Muy bien. ¿Quieres que le pida una cita? Le pido una cita. (Y
girándose) Lo que me faltaba por ver, Justin dándome lecciones a mí… ¡Venga
ya!
Se rió con todas sus fuerzas. Annie estaba como una cabra, pero lo importante
era que había conseguido picarla. No sabría nada de relaciones, ¿pero de
conseguir que Annie se enfadara o hiciera lo que él quería? De eso podía
escribir un par de tratados. La observó con los brazos cruzados y la sonrisa en
la cara. Zack estaba hablando con una chica morena que estaba desde hacía
poco al cargo de la piscina de los niños.
Había que reconocer que la rubia tenía valor.
Tomó aire cuando estaba solo a dos pasos de ellos. Daba igual que él se negará
al hecho de salir con ella en si, pero al menos tenía que conseguir mantener la
conversación lejos de la lapa de la socorrista.
#EIGHTY-FIVE
~~~
Encontrar la llave no había sido difícil. Al fin y al cabo para algo había dado
vuelta la casa poco antes… Estaba en el joyero de su madre, pero ahora el
asunto estaba en qué hacer con ella. Tumbada encima de su cama llevaba casi
una hora. No paraba de jugar con la llave entre sus dedos y seguía sin decidir
qué hacer. ¿De verdad quería encontrar algo que le confirmara la disparatada
historia que le había contado Justin? ¿Quería descubrir que su madre le había
mentido toda la vida sobre algo tan sencillo como que sabía tocar el piano? Y
no solo su madre… todos. Todos lo sabían y nadie nunca había mencionado
nada; estaba claro que lo que también conocían era el motivo por el que lo
había dejado en su momento.
Se levantó de la cama y se dirigió hacia el salón. Quería ver esas partituras con
sus propios ojos. Sería algo entre su madre y ella, pero si reunía valor le exigiría
una respuesta por todas sus mentiras. Movió la butaca y se sentó con las
piernas cruzadas delante de ella. Suspiró y apoyó la llave en la butaca. Se tomó
un minuto para respirar y tranquilizarse y volvió a coger la llave. La metió en la
cerradura y levantó la tapa en cuanto oyó el clic
característico. Se frotó la nuca en cuanto vio el contenido. Llevaba un rato
pensando solo en las partituras, pero no había solo partituras. Es más, lo único
que se veían era un montón de sobres y una cinta de casete. No tardó en coger
algunos de los sobres y comprobar que si había partituras abajo, pero ya no le
interesaban tanto. Aún con las cartas en una mano, cogió la cinta con la otra.
Apoyó la espalda en una de las patas del piano y leyó la etiqueta que
identificaba la cinta: „Mi voz‟.
#EIGHTY-SIX
____ no sabía si sonreír o llorar ante las cosas que estaba oyendo. ¿Su padre
enamorado de la madre de Annie? ¿Entonces por qué había acabado con su
madre? ¿Por qué había terminado todo tan fuera de lugar?
“…En cualquier momento me quedo sin cinta. Llevo aquí casi una hora, pero me
quedaría un par más. Nada más princesa, que no olvides mi voz… Ni nada
relacionado con nosotros, porque de momento es lo único que tenemos, pero
tranquila porque si esto fuera un cuento, terminaríamos dándonos un atracón
de perdices. Vamos a poder sacar esto a delante, confía en mí. Te quiero.”
#EIGHTY-SEVEN
Habían pasado varios días desde que ____ había encontrado la cinta con la voz
del padre de Justin, y el resto de cartas. Las había leído todas y cada una de
ellas, y todas y cada una de ellas era una prueba indiscutible de cuanto se
habían amado sus padres. Cuando veía a sus padres no podía evitar pensar en
todo lo que ahora sabía de ellos. Si hubieran sido una pareja feliz
hubiera podido pensar que todo el asunto de las cartas había sido un episodio
adolescente, pero cada vez estaba más convencida que sus padres no eran
simplemente dos adultos serios y formales, sino dos personas infelices.
El asunto es que solo quería olvidarse del tema, porque no quería seguir
pensando que ella era la prueba viviente de la infelicidad de sus padres, así que
no había comentado el tema con nadie. Ni siquiera con Justin.
Estaba con los ojos cerrados y de cara al sol, pero al pensar en él lo miró. Era
el primer día que pasaban solos desde que su padre los había pillado. Justin
había insistido en ir al lago con intención de que ella volviera a meterse en el
agua, pero no lo había conseguido.
En ese momento él se dirigía hacia ella pasándose las manos por el pelo
mojado.
____ cerró los ojos y se volvió a tumbar. No tardó en notar que Justin se
tumbaba a su lado y empezaba a dibujar círculos en su vientre con los dedos
mojados.
- ____: (Sin abrir los ojos y conteniendo la sonrisa) Estas frío.
Él ignoró el comentario y pasó a apoyar la palma completa mientras se
acercaba lo suficiente para besarla. Ella no tardó en responder al beso y llevar
una de sus manos hasta su nuca mientras le acariciaba la cintura con la otra.
Justin se movió con delicadeza para quedar encima de ella. Las manos de ____
ahora le recorrían la espalda, y no habían dejado de besarse ni por un segundo.
No fue hasta que no notó que sus piernas estaban entrelazadas cuando fue
consciente de a que punto de intimidad estaban llegando. Sin poder evitarlo
todo su cuerpo se tensó. Justin era tierno y delicado, y eso le demostraba con
cada caricia, ella se sentía mejor entre sus brazos que en ningún otro sitio, pero
aún no estaba preparada para llegar más allá.
~~~
Desde luego si no quería que lo encasillara solo como uno más, empezaba muy
bien… Siendo igual de impuntual que Chaz. Miró el reloj por enésima vez.
Llevaba solo cinco minutos esperando y ya estaba cardiaca. De todas formas,
verlo no mejoró su estado. Iba guapísimo. Solo lo había visto una vez sin el
uniforme del club, y ya ni se acordaba de que le había visto puesto en esa
ocasión. Ahora llevaba una camiseta roja y unos vaqueros, nada especial, pero
Annie tampoco podía imaginárselo con algo que le quedara mejor. Ella se había
propuesto no arreglarse demasiado, pero el look „no me lo he pensado mucho‟
le había llevado más tiempo del que le hubiera llevado ponerse sus mejores
galas y pintarse como una puerta. Cuando estuvo lo suficientemente cerca la
saludó de forma totalmente desenvuelta. Annie no supo si estaba crispada por
el retraso o porque él se mostrara tan… normal.
- Annie: Llegas tarde…
- Zack: (Mirándose el reloj) Lo siento no…
Ella se dio media vuelta sonriendo y empezó a andar.
- Annie: Te aseguro que no desearías ser Chaz en estos momentos.
Zack también sonrió y empezó a seguirla, aunque le costó un poco ponerse a
su paso sin correr.
- Zack: ¿La he fastidiado tan pronto?
- Annie: (Mirándole de reojo) Un poco…
Se metió las manos en los bolsillos y la siguió, aunque ella ni siquiera le miraba.
- Zack: Supongo que eso te da derecho a decidir a donde vamos.
Annie giró la cara para mirarlo y sonrió mientras seguía andando. Quizá
comportarse normal con él no le iba a costar tanto como había pensado en un
principio.
~~~
Cerró el bar algo extrañada. Chaz no la había ido a buscar, y estaba casi segura
de que le había contado que ese día cerraba varias horas antes por el asunto
de la fiesta. Se acomodó el bolso y se dirigió a la entrada.
Aunque no podía evitar mirar en todas direcciones, esperando que Chaz
apareciera corriendo y disculpándose en cualquier momento. Sin embargo a la
vez sabía que eso no iba a pasar. Desde que se habían reconciliado, él no
parecía sentirse igual de cómodo con ella, era como si constantemente
intentara medir sus muestras de afecto. Por suerte, nada más cruzar la entrada
lo vio. Y no le hacía falta escuchar una excusa, la escena se explicaba por si
misma.
#EIGHTY-EIGHT
~~~
Llevaba un rato sin parar de reír. En el rato que llevaba con él no había hecho
sino comprobar que Zack era una persona muy divertida además de agradable.
Ella no terminaba de sentirse cómoda, pero era por esa sensación de no saber
como tratarlo. Habían estado durante bastante rato sentados juntos en un
banco, hablando de todo un poco, de qué solía hacer él durante el inverno, de
qué pensaba hacer ella al año siguiente…
Annie había sentido unas ganas apenas contenibles de besarlo, pero se había
contenido. No sabía exactamente por donde enfocar esa cita con él… Las ganas
de besarlo estaban ahí, pero a la vez se sentía como con cualquiera de sus
amigos.
Ahora estaban sentados uno frente al otro, cenando en una hamburguesería del
pueblo. Zack le había dicho que no vivía muy lejos de ahí.
- Zack: (Tocándose la barbilla) ¿Tengo algo?
- Annie: (Sacudiendo un poco la cabeza) No, no… Te miraba porque…
Pero fue incapaz de seguir la frase. Se había quedado embobada mirándole
porque no paraba de pensar en pajaritos, sin embargo no podía explicarle eso.
- Zack: No siempre hay un motivo para todo.
Y mordió su hamburguesa sin mirarla. Annie sonrió y fijó su vista en su vaso
durante un momento. Si quería confundirla lo estaba consiguiendo. Por mucho
que se hubiera tomado en serio el consejo de Zack de no etiquetarlo ni como
amigo ni como algo más… Siempre había tenido claro que eso era una cita. No
eran amigos, se suponía que se gustaban, pero de repente empezaba a dudar
de eso. A ella le gustaba Zack, pero quizá eso no fuera recíproco. Al pensar en
eso le costó tragar. Y deseó tener algo para decir y que eso la distrajera de sus
pensamientos. En ese momento alzó la vista y se dio cuenta de que llevaban
varios minutos en silencio… Y para nada había sido un silencio incómodo.
#EIGHTY-NINE
~~~
Habían cenado y visto una película con la compañía de Ela. Miranda adoraba a
los niños en general, y Ela era alguien que se hacía querer con facilidad. No era
quizás la cita perfecta con Chaz, y menos después del mal comienzo que habían
tenido, pero había merecido la pena pasar la noche con ellos. Chaz volvió a
entrar en el salón sonriendo y se sentó junto a ella en el sofá.
- Chaz: (Pasándole un brazo por encima de los hombros) No se ha dormido,
pero bueno… Esta escuchando música, no creo que tarde mucho.
- Miranda: ¿Y Lana?
- Chaz: Se fue ayer… Hoy viajaba mi padre así que…
- Miranda: ¿No exagera un poco tu tía con eso de que no este sola con Jordan?
- Chaz: No… Hace bien. Nunca ha tenido la oportunidad, pero de quedarse a
solas con Lana, Jordan sería capaz de soltar cualquier burrada. Y Lana todavía
es chiquita.
Sin darle oportunidad a preguntar nada más empezó a besarle la mejilla y pasó
a su cuello con delicadeza. Desde que habían vuelto no habían tenido una
oportunidad así. Giró un poco la cara buscando poder besarlo en la boca. Él le
siguió el beso mientras a la vez llevó una mano a su hombro y empezó a
bajarle la chaqueta lentamente. Ella le ayudó terminando de deshacerse de la
chaqueta y acabó tumbándose con él encima. Notó la mano de Chaz en su
costado y tuvo que romper el beso para reírse mientras se retorció
involuntariamente.
Cuando consiguió calmarse Chaz la miraba con media sonrisa pero a la vez con
el ceño fruncido.
- Miranda: (Aún medio riéndose) Me hacías cosquillas.
- Chaz: (Entornando la mirada) Serás payasa…
Y entonces empezó a hacerle cosquillas enserio. Miranda intentaba zafarse,
pero antes de conseguirlo Chaz había dejado de hacerle cosquillas y se reía con
la cara enterrada en su cuello. Ella mantuvo la sonrisa y le acarició la nuca.
Chaz alzó la vista y la miró con una ternura infinita antes de volver a besarla.
Miranda sabía que ni siquiera con Erick se había sentido nunca así, pero en ese
momento se dio cuenta de que él estaba igual.
La luz del salón estaba apagada, pero la del comedor iluminaba lo suficiente
como para que ellos no estuvieran del todo a oscuras. Miranda le acariciaba a
Chaz la espalda por debajo de la camiseta, y mientras tanto no
paraban de besarse. Ella no había tenido oportunidad de decirle que también lo
quería, pero sabía que en cualquier momento se le iba a escapar, porque no
podía pensar en otra cosa.
~~~
Desde que habían hablado y habían vuelto a estar juntos, la relación se había
tornado algo distante. Al menos Miranda notaba a Chaz distante, pero ese día
parecía el de siempre y a ella no se le ocurría nada que pudiera desear más. Le
cogió la cara con las manos y le obligó a separarse un poco. Él la miró
sonriendo y cuando Miranda estaba a punto de decirle que ella también lo
quería. Alguien encendió la luz de golpe y se vieron obligados a mirar en
dirección a la puerta.
#NINETY
Los dos se habían puesto de pie lo más rápido que habían sido capaces y Chaz
había dado un paso por delante de ella casi inconscientemente, para protegerla.
Habían permanecido en silencio ante los gritos de Jordan, aunque a Miranda le
parecía que se estaba sacando de quicio la escena, sabía como era la tía de
Chaz y lo último que hubiera deseado era empeorar la situación. Pero si
pensaba que no se podía tornar peor… se equivocó.
Salió de casa y cuando bajó los escalones de la entrada se dio cuenta de que
Miranda estaba justo a la salida. Apoyada en la valla del garaje. Se acercó a ella
lentamente y le acarició un hombro. Cuando ella le miró sintió que le estrujaban
el estómago. Tenía el rostro bañado en lágrimas. Antes de ser capaz de
reaccionar ella le abrazó con todas sus fuerzas, y él no dudo en responder al
abrazo.
#NINETY-ONE
Ya era de noche y acababan de salir del sitio donde habían cenado. Al no estar
sus padres en casa, ____ no tenía problema con el horario, pero Justin no
podía decir lo mismo.
- Justin: (Cogiéndola de la mano) No importa. No van a hacer más que gritar
un poco.
- ____: (Situándose delante de él y obligándolo a frenar) Justin. No seas así.
¿Qué te cuesta ser puntual y ahorrarte problemas?
- Justin: Van a pasar días hasta que nos podamos estar así otra vez. Tus padres
llegan mañana ¿no?
- ____: (Asintiendo) Para la hora de comer supongo.
- Justin: (Cogiéndola por la cintura) Pues eso… Hoy quiero aprovechar el día
completo.
A ella no le hacía gracia que por unas horas más juntos, él tuviera que aguantar
el mal humor de su padre durante días, y menos la idea de no verlo ni siquiera
en su balcón a causa de un castigo. Pero en ese momento, que pudo rodearle
el cuello con los brazos y besarle con una sonrisa, sintió que merecía la pena
cualquier cosa por alargar ese momento. Así que no dijo nada cuando Justin
tiró de ella hasta el banco más cercano, donde se sentaron uno frente al otro.
~~~
Salieron del restaurante y les dio la mano a los dos hombres con los que
acababa de estar cenando y discutiendo de negocios durante horas. No podía
borrar la sonrisa de su cara, pero deseaba que eso terminara cuanto antes. Al
subirse al coche se aflojó la corbata y se soltó un botón mientras resoplaba con
fuerza. Su trabajo le gustaba cada vez menos. Si es que eso era posible.
Sacudió la cabeza y decidió no pensar sobre el asunto. Tenía que dedicarse a
su empresa así que pensar en lo poco que le gustaba no servía de mucho. Se
rascó la nuca y metió la llave en el contacto, pero antes de girarla vio algo que
no lo dejó reaccionar. Su hijo con una chica… Y no cualquier chica, sino ____
Mahone. Los observó durante largos minutos sin ser capaz de reaccionar. No
era capaz de salir del coche y llevarse a Justin por las malas, ni era capaz de
apartar la vista de ellos.
Estaban sentados uno en frente del otro y hablaban. Estaba muy lejos de poder
oír o entender que se decían, pero la forma en que se miraban no dejaba lugar
a dudas. Nunca había visto a su hijo mirar nada ni a nadie con tanta dulzura.
Por si quedaba lugar para alguna duda, la joven se inclinó hacia delante y besó
a Justin en los labios de forma casi fugaz. Él se rió y cogió la cara de ella entre
sus manos mientras hacia que se juntaran sus frentes. No era necesario que
nadie se lo explicara. Por mucho que lo catalogaran como una persona fría e
insensible, podía ver de lejos que su hijo estaba enamorado. Aunque fuera
simplemente por lo dolorosamente cercana que le resultaba la escena. Dudó
otra vez, pero arrancó el coche y se fue de allí. Ya pensaría en su hijo y en lo
que había visto más tarde, de momento solo quería evitar que una batalla de
recuerdos le inundaran y le hicieran el mismo daño que le habían hecho tantas
otras veces.
~~~
Llevaban un rato andando por un camino de cemento. Según tenía entendido
Zack eso era una ruta de peregrinos, pero no tenía la menor idea de a donde
podía llevar. Como había hecho hasta el momento, permaneció en silencio
cuando Annie se salió del camino y se adentró en el bosque. No tardaron
mucho en llegar a un claro, aunque con lo entrada que estaba la noche, no
sabía como no se habían perdido. En cuanto Annie le soltó la mano y se detuvo,
él aprovechó para mirar a su alrededor, en busca de cualquier cosa que le diera
una pista de por qué estaban allí. Sin embargo no vio nada. Era solo un claro
más en el bosque. Cuando volvió la vista hacia Annie, se asustó al no verla,
pero enseguida se dio cuenta de que se había tumbado en la hierba. Tenía la
vista fija en el cielo.
Zack miró al cielo, pero no vio nada, por lo que optó por imitar a Annie y
tumbarse a su lado. Seguían en silencio, y eso empezaba a resultarle gracioso.
Ella seguía mirando al cielo fijamente, pero él tenía la cara girada hacia ella. Se
sorprendió cuando Annie rompió el silencio.
- Annie: (Señalando al cielo con su mano izquierda) Ahora…
Zack giró la cara lentamente y vio los primeros fuegos artificiales de la noche.
Sonrió y volvió a mirar a Annie con intención de decir algo, pero al verla sonreír
a ella también, se dio cuenta de que eso hubiera roto la magia. No sabía si era
por Annie, por el lugar donde estaban, o por el hecho de que estaban viendo
estallar los fuegos sin oír el más mínimo ruido… Pero tuvo la sensación de que
era el momento más especial que había presenciado nunca.
#NINETY-TWO
Después de unos minutos, volvió a mirar a Annie y se dio cuenta de que ella lo
miraba a él fijamente.
- Annie: Este sitio lo descubrió Chaz. (Zack sonrió y ella miró al cielo otra vez)
Hasta no hace mucho, Justin, Chaz y yo solo nos veíamos en la feria del pueblo
y en clase, porque a Justin no le dejaban salir con los amigos de Chaz, y yo
nunca he salido con ellos como grupo. (Y riéndose) Imagínate la gracia que les
hacía que yo me
escondiera cuando empezaban los fuegos.
- Zack: ¿Y por eso buscó Chaz este sitio?
- Annie: Un año me enfadé con ellos y no quise encontrármelos en la feria.
(Mirando a Zack) Les acusé de preferir estar en el baile ligando que conmigo, y
todo porque se habían hartado de perderse los fuegos por mi tontería… (Volvió
a mirar al cielo) Me trajeron aquí casi a rastras, pero cuando vi que se veían los
fuegos y no se oía nada… Casi me largué a llorar. (Y mirando a Zack con una
sonrisa) Y yo nunca lloro.
Se rió al recordar el momento y sacudió la cabeza. Sabía donde estaba
exactamente la diferencia entre los que ella consideraba sus únicos amigos y
cualquier otro chico que se hubiera cruzado en su camino.
- Annie: Me protegen. (Zack la miraba con atención, aunque Annie había vuelto
a clavar la vista en el cielo) Cuando estoy con ellos no tengo que preocuparme
por nada, porque sé que ellos… No sé, miran por mí.
- Zack: No son los únicos que pueden hacer eso.
- Annie: Pero son los únicos de los que yo lo espero.
- Zack: (Incorporándose sobre un codo para mirarla a la cara) Eso se llama
confiar.
- Annie: Confío en ellos entonces.
- Zack: Me gustaría que confiaras en mí también. (Annie no apartó su mirada
de la de él, pero permaneció en silencio) Aunque no como amigo.
- Annie: (Con media sonrisa) ¿No pides mucho?
Él le devolvió la sonrisa y se inclinó sobre ella para besarla. Llevaba toda la
noche evitándolo, primero necesitaba saber que esa cita no iba a acabar como
la noche que se conocieron, y ahora sabía que podía conseguir cambiar eso. No
había sabido como tratar a Zack en toda la noche, se había sentido cómoda
hablando con él, se había reído… Pero había tenido la constante sensación de
estar metiendo la pata, hasta ese momento. Nunca había tenido una relación
importante y eso era ni más ni menos lo que Zack le estaba pidiendo. Sumarle
a todo lo que el moreno la hacia sentir, una confianza incondicional como la
que depositaba en sus amigos era darle todo. Sin embargo no dudó ni por un
segundo de que él era la persona adecuada.
Permaneció con los ojos cerrados a pesar de que Zack había dejado de besarla.
Notó como le acariciaba la mejilla y volvía a tumbarse a su lado, aunque esta
vez mucho más cerca.
- Zack: (Cogiéndole una mano y hablándole al oído) Abre los ojos… El final es lo
mejor.
Annie abrió los ojos y miró al cielo completamente iluminado. Y mientras se
hacía consciente de la mano de Zack entrelazada a la suya, supo que confiaba
en él desde mucho antes de llevarlo a ese lugar.
~~~
Llegó a casa y aún no había conseguido olvidarse de la imagen de su hijo con
____.
Entró en su habitación y todavía no había visto ni a Justin ni a su mujer. Solo
Nana había salido a su encuentro para saber si iba a querer cenar. Colgó la
chaqueta y se sentó en la cama con los ojos cerrados. Con todas las chicas de
su edad que había en el club… Y tenía que irse a fijar en ____. Diría que no era
más que la incesante
necesidad de su hijo de llevarle la contraria, pero lo había visto con ella… Había
visto como la miraba. Por desgracia nada de lo que él hubiera dicho nunca
influía en lo que su hijo sentía por esa chica.
La puerta de la habitación se abrió y lo sacó de sus pensamientos. Era su
mujer, con esa sonrisa inamovible.
- Pattie: ¿Acabas de llegar? (Y acercándose a él) ¿Qué tal la cena?
- Jeremy: (Aflojándose la corbata para sacársela) La verdad que no sé… No les
he visto nada convencidos.
- Pattie: (Masajeándole los hombros) Es muy raro que hayan querido reunirse
contigo para decir que no. (Y besándole en la mejilla) Estoy segura de que
saldrá como quieres que salga.
Él dejó escapar media sonrisa y la besó en los labios.
- Jeremy: Te quiero.
Pattie le sonrió e intensificó el masaje en los hombros. Él cerró los ojos y bajó
la cabeza. Hacía mucho tiempo que los „te quiero‟ no tenían mucho sentido
dichos por él. Habían dejado de tenerlo en el momento en que pasó a decirlos
intentando auto convencerse en lugar de hacerlo de forma espontánea. Y en
días como ese, en que los recuerdos de su amor adolescente le hacían el mismo
daño que veinte años atrás… Cambiaba cualquier palabra dirigida a su esposa
por un „te quiero‟, todo con la única intención de convencerse de que era eso lo
que sentía. La voz de su mujer lo sacó de sus propios pensamientos.
- Pattie: Justin me ha llamado hace un momento para decirme que se quedaba
a dormir a lo de Chaz.
- Jeremy: (Abriendo los ojos y separándose de su mujer) ¿Y le has dejado?
- Pattie: (Algo desconcertada) Si… ¿Por qué no iba a hacerlo? Me ha dicho que
habían cenado ya y que iban a ver una película o algo así. Que mañana a
primera hora estaba aquí.
Siguió mirándola fijamente, pero en su mente solo podía ver una y otra vez
como se repetía la escena que él no debía haber presenciado aquella noche.
~~~
Llegaron riéndose y se dejaron caer sobre la cama. Justin levantó un poco la
cabeza apoyándose en su codo, y observó a ____ reírse con ganas. Ella le miró
risueña y le acarició la mejilla con el dorso de la mano. Se acercó lentamente
hasta besarla. Llevaban juntos todo el día y había sido mágico. Todos sus
momentos juntos eran
perfectos, pero días como ese eran insuperables. Se acomodó sobre ella y
siguieron besándose. Se dejó llevar y empezó a acariciarle el vientre por debajo
de la camiseta. #NINETY-TWO
Después de unos minutos, volvió a mirar a Annie y se dio cuenta de que ella lo
miraba a él fijamente.
- Annie: Este sitio lo descubrió Chaz. (Zack sonrió y ella miró al cielo otra vez)
Hasta no hace mucho, Justin, Chaz y yo solo nos veíamos en la feria del pueblo
y en clase, porque a Justin no le dejaban salir con los amigos de Chaz, y yo
nunca he salido con ellos como grupo. (Y riéndose) Imagínate la gracia que les
hacía que yo me
escondiera cuando empezaban los fuegos.
- Zack: ¿Y por eso buscó Chaz este sitio?
- Annie: Un año me enfadé con ellos y no quise encontrármelos en la feria.
(Mirando a Zack) Les acusé de preferir estar en el baile ligando que conmigo, y
todo porque se habían hartado de perderse los fuegos por mi tontería… (Volvió
a mirar al cielo) Me trajeron aquí casi a rastras, pero cuando vi que se veían los
fuegos y no se oía nada… Casi me largué a llorar. (Y mirando a Zack con una
sonrisa) Y yo nunca lloro.
Se rió al recordar el momento y sacudió la cabeza. Sabía donde estaba
exactamente la diferencia entre los que ella consideraba sus únicos amigos y
cualquier otro chico que se hubiera cruzado en su camino.
- Annie: Me protegen. (Zack la miraba con atención, aunque Annie había vuelto
a clavar la vista en el cielo) Cuando estoy con ellos no tengo que preocuparme
por nada, porque sé que ellos… No sé, miran por mí.
- Zack: No son los únicos que pueden hacer eso.
- Annie: Pero son los únicos de los que yo lo espero.
- Zack: (Incorporándose sobre un codo para mirarla a la cara) Eso se llama
confiar.
- Annie: Confío en ellos entonces.
- Zack: Me gustaría que confiaras en mí también. (Annie no apartó su mirada
de la de él, pero permaneció en silencio) Aunque no como amigo.
- Annie: (Con media sonrisa) ¿No pides mucho?
Él le devolvió la sonrisa y se inclinó sobre ella para besarla. Llevaba toda la
noche evitándolo, primero necesitaba saber que esa cita no iba a acabar como
la noche que se conocieron, y ahora sabía que podía conseguir cambiar eso. No
había sabido como tratar a Zack en toda la noche, se había sentido cómoda
hablando con él, se había reído… Pero había tenido la constante sensación de
estar metiendo la pata, hasta ese momento. Nunca había tenido una relación
importante y eso era ni más ni menos lo que Zack le estaba pidiendo. Sumarle
a todo lo que el moreno la hacia sentir, una confianza incondicional como la
que depositaba en sus amigos era darle todo. Sin embargo no dudó ni por un
segundo de que él era la persona adecuada.
Permaneció con los ojos cerrados a pesar de que Zack había dejado de besarla.
Notó como le acariciaba la mejilla y volvía a tumbarse a su lado, aunque esta
vez mucho más cerca.
- Zack: (Cogiéndole una mano y hablándole al oído) Abre los ojos… El final es lo
mejor.
Annie abrió los ojos y miró al cielo completamente iluminado. Y mientras se
hacía consciente de la mano de Zack entrelazada a la suya, supo que confiaba
en él desde mucho antes de llevarlo a ese lugar.
~~~
Llegó a casa y aún no había conseguido olvidarse de la imagen de su hijo con
____.
Entró en su habitación y todavía no había visto ni a Justin ni a su mujer. Solo
Nana había salido a su encuentro para saber si iba a querer cenar. Colgó la
chaqueta y se sentó en la cama con los ojos cerrados. Con todas las chicas de
su edad que había en el club… Y tenía que irse a fijar en ____. Diría que no era
más que la incesante
necesidad de su hijo de llevarle la contraria, pero lo había visto con ella… Había
visto como la miraba. Por desgracia nada de lo que él hubiera dicho nunca
influía en lo que su hijo sentía por esa chica.
La puerta de la habitación se abrió y lo sacó de sus pensamientos. Era su
mujer, con esa sonrisa inamovible.
- Pattie: ¿Acabas de llegar? (Y acercándose a él) ¿Qué tal la cena?
- Jeremy: (Aflojándose la corbata para sacársela) La verdad que no sé… No les
he visto nada convencidos.
- Pattie: (Masajeándole los hombros) Es muy raro que hayan querido reunirse
contigo para decir que no. (Y besándole en la mejilla) Estoy segura de que
saldrá como quieres que salga.
Él dejó escapar media sonrisa y la besó en los labios.
- Jeremy: Te quiero.
Pattie le sonrió e intensificó el masaje en los hombros. Él cerró los ojos y bajó
la cabeza. Hacía mucho tiempo que los „te quiero‟ no tenían mucho sentido
dichos por él. Habían dejado de tenerlo en el momento en que pasó a decirlos
intentando auto convencerse en lugar de hacerlo de forma espontánea. Y en
días como ese, en que los recuerdos de su amor adolescente le hacían el mismo
daño que veinte años atrás… Cambiaba cualquier palabra dirigida a su esposa
por un „te quiero‟, todo con la única intención de convencerse de que era eso lo
que sentía. La voz de su mujer lo sacó de sus propios pensamientos.
- Pattie: Justin me ha llamado hace un momento para decirme que se quedaba
a dormir a lo de Chaz.
- Jeremy: (Abriendo los ojos y separándose de su mujer) ¿Y le has dejado?
- Pattie: (Algo desconcertada) Si… ¿Por qué no iba a hacerlo? Me ha dicho que
habían cenado ya y que iban a ver una película o algo así. Que mañana a
primera hora estaba aquí.
Siguió mirándola fijamente, pero en su mente solo podía ver una y otra vez
como se repetía la escena que él no debía haber presenciado aquella noche.
~~~
Llegaron riéndose y se dejaron caer sobre la cama. Justin levantó un poco la
cabeza apoyándose en su codo, y observó a ____ reírse con ganas. Ella le miró
risueña y le acarició la mejilla con el dorso de la mano. Se acercó lentamente
hasta besarla. Llevaban juntos todo el día y había sido mágico. Todos sus
momentos juntos eran
perfectos, pero días como ese eran insuperables. Se acomodó sobre ella y
siguieron besándose. Se dejó llevar y empezó a acariciarle el vientre por debajo
de la camiseta.
NINETY-THREE
____ se miraba en el espejo del baño. Estaba tan convencida de lo que quería
que le daba miedo. A penas un par de meses antes ni siquiera había recibido su
primer beso, y ahora se estaba planteando ni más ni menos que su primera
vez. El miedo no era por él... Justin era lo más seguro que había tenido nunca
en su vida, pero... ¿y ella? ¿Iba a saber ella como comportarse? Por suerte o
por desgracia él también era nuevo en eso. Cogió el cepillo y se lo pasó por la
melena un par de veces sin apartar la vista de su reflejo. Eso no iba a mejorar
su aspecto... Pero estaba muy nerviosa.
Se dirigió hasta su habitación y abrió la puerta con todo el cuidado que le fue
posible. Él estaba sentado en la cama de espaldas a ella. ____ pensó que o
miraba el suelo o jugaba con algo que tenía entre sus manos. Dio un par de
pasos y él empezó a girarse.
- ____: No espera. No te gires.
- Justin: (Volviendo a darle la espalda, pero esta vez mirando al frente) ¿Qué
pasa?
- ____: Nada. pero espera un momento.
- Justin: ¿Vanessa estaba durmiendo?
A ____ le costó entender la pregunta. Estaba demasiado nerviosa.
- ____: Si, si...
Ni siquiera había pasado por su habitación, pero no tenía dudas de ello. Se llevó
las manos temblorosas al primer botón de su blusa y tardó un segundo en
hacer algo. Empezó a desabrocharlos uno a uno.
- Justin: ¿Esto es una especie de broma?
- ____: No... Es... Nada, solo espera un momento ¿si? No gires la cara por nada
del mundo.
- Justin: Bien, bien... ¿Hablar tampoco puedo?
- ____: Mejor no.
Eso ya lo descolocó del todo. ¿Qué estaba haciendo ____ que él no podía ver?
Imposible, nada. No se estaba moviendo. ¿Entonces había llevado algo a la
habitación? Empezó a ponerse nervioso. No tenía ni idea de que pretendía ____
teniéndolo de espaldas a ella y en silencio, pero sospechó que ponerlo nervioso
era una de sus pretensiones.
Ella se acabó de quitar la blusa e hizo lo propio con los piratas que llevaba
puestos. Al pensarlo se dio cuenta de que nunca se vestía de forma especial
cuando quedaba con Justin. Se miró en el espejo de su tocador. Se veía
totalmente ridícula, pero supo darse cuenta de que por primera vez, sus nervios
no los despertaba el miedo, sino un raro sentimiento de anticipación. En el lago
se había sentido apurada, pero ni una sola de las caricias de Justin la había
incomodado. Avanzó hacia la cama y se puso de rodillas en ella. Justin seguía
sin hacer
absolutamente nada. Ella terminó de cruzar la cama para acercarse a él. Justin
la notaba a escasos centímetros, pero ella no decía nada.
- Justin: (Casi en un susurro) ¿Qué haces ____?
Ella le rodeó la cintura con los brazos y empezó a besarle el cuello con
delicadeza. Todavía no había hecho nada que le pudiera dar pistas a Justin de
qué pretendía exactamente. Él apoyó sus manos sobre las de ____ y cerró los
ojos mientras notaba sus besos.
- Justin: ¿Puedo girarme ya?
- ____: (Hablándole al oído) Cuando quieras...
Justin se giró con una sonrisa, pero sus ojos se abrieron desmesuradamente a
medida que comprobó la poca ropa que llevaba ____. Empezó literalmente a
temblar. La miró al rostro y comprobó que estaba sonrojada, eso le hizo
sonreír. Se acercó un poco más y ella dejó de estar de rodillas para sentarse a
su lado. Le acarició los labios con el dedo índice y ella automáticamente cerró
los ojos. Él se dedicó a observarla. Siguió acariciándola solo con un dedo; los
labios, la barbilla, el cuello... Se acercó aún más a ella y por fin la besó. ____ se
entregó a ese beso con toda su alma, llevó sus manos a la nuca de él y se
tumbó en la cama arrastrándolo
a Justin también. Sentía cada caricia de Justin como si fueran directamente en
el corazón. Eran delicadas y cálidas. Desde que se había quitado la ropa, solo
con Justin acariciándola dejó de sentirse ridícula. Llevó ella sus manos a
acariciarle a él la espalda por debajo de la camiseta. Él se incorporó, quedando
sentado a horcajadas encima de ella y se quitó la camiseta. Aprovechó para
mirarla por completo otra vez. Por muy similar que fuera esa situación a la que
habían vivido en el lago, esta vez era distinto, daba más miedo, pero a la vez
era mejor.
Liberó a ____ de su peso y se tumbó a su lado. Ella le besó en el hombro y
empezó a acariciarle el pecho, ahora también desnudo. Buscó su boca para
besarle y acabó acomodándose encima de él. Las manos de Justin pasaban de
sus piernas a su espalda y ella tampoco dejaba de acariciarle. Decidió dar otro
paso. Se incorporó un poco y bajo la atenta mirada de Justin estuvo a punto de
desabrocharse el sujetador. Sin embargo él se lo impidió.
- Justin: (Sentándose con ____ sobre sus piernas aún) No... Para.
- ____: (Nerviosa) Vale... No... Bueno, yo no sé como...
- Justin: (Cogiéndole la cara entre las manos) No, no. No has hecho nada mal...
Solo es que...
- ____: (Apoyando su frente en la de Justin) ¿Qué?
- Justin: No sé si puedo... Yo... No quiero fastidiar tu primera vez ____.
- ____: No podrías aunque quisieras.
- Justin: Sabes que yo nunca... (Y cerrando los ojos) Estoy demasiado nervioso,
no pensaba que pudiera ponerme tan nervioso por nada.
____ le besó con suma delicadeza en los dos párpados. Y de la misma forma le
besó las mejillas y la comisura de los labios.
- Justin: ____...
- ____: (Hablándole al oído tras besarle la sien) Eres perfecto Justin. Y haces
que todo lo sea...
Él permaneció con los ojos cerrados mientras ella le regalaba suaves besos y le
acariciaba el cuello y la cara.
- ____: Esto es como besar. Todos sabemos besar... Tú me lo dijiste.
No pudo resistirse más y atrapó la boca de ____ con la suya. Se dejó caer en la
cama con ella encima y no quiso pensar en que iban a llegar hasta el final,
simplemente iban a dar un paso más...
~~~
Se despertó al día siguiente y al abrir los ojos y ver esa estantería llena de
trofeos y diplomas le costó situarse. Había pasado la noche con ____. Giró la
cara hacia el otro lado y la contempló profundamente dormida. Cuando ____ le
había sugerido que les dijera a sus padres que se iba a quedar a dormir en lo
de Chaz, en ningún momento se le había pasado por la cabeza que su noche
pudiera terminar así. Se había imaginado durmiendo con ella… si, pero nada
más.
#NINETY-FOUR
Cogió las partituras que estaban en el atril de la tapa y tras pasar la primera,
vio que las demás eran todas composiciones de ____.
- ____: ¿Quieres que te enseñe a tocar?
El hecho de que ____ le abrazara a la vez que le decía eso fue lo único que
evitó que Justin saltara del susto.
- Justin: (Girando un poco la cara) ¿No estabas dormida?
- ____: Estaba (Y apoyó la cara sobre el hombro de Justin) Lo de tocar iba en
serio.
- Justin: (Riéndose) No, no… Soy nulo para la música. Ya bastante torturé a mis
padres practicando con la flauta para el colegio.
- ____: Esto es más fácil.
Y mientras decía eso estiró sus mano por debajo de los brazos de Justin y tocó
unos compases desconocidos para Justin.
- ____: Intenta repetir lo que he hecho con la mano derecha.
Él hizo lo que le pedía, y aunque para él no tenía nada que ver con lo que
acababa de oír, vio como ___ le sonreía, le corrigió una nota y le hizo repetirlo,
pero esta vez ella tocó con su mano izquierda el trozo que faltaba. Y esa vez si
sonó bien. Él sonrió y ____ le besó en la mejilla también sonriendo.
- ____: Ahora tienes que practicar.
- Justin: (Riéndose) Si… Yo creo que con un par de décadas conseguiré tocar la
canción entera.
Ella frunció el ceño, pero no pudo evitar reírse. En ese momento la puerta de la
habitación se abrió, pero sus risas taparon el poco ruido que hizo la persona
que abrió la puerta, y no fueron conscientes de que los
observaban.
~~~
No había podido dormir en toda la noche. Cada vez que cerraba los ojos se le
aparecía la imagen de Justin con ____, o lo que era peor… Pensaba en Teresa.
Teresa… Hacía años que no pensaba en ella. Años en los que ni siquiera se
había molestado en odiarla. Odiaba a Santiago… por habérsela jugado, y odiaba
a ____… por todo lo que significaba, pero a Teresa nunca había sido capaz de
odiarla, y nunca sería capaz de hacerlo mientras penar en ella significara
recordar los mejores momentos de su vida. Se giró lentamente y pasó el brazo
alrededor de la cintura de su mujer, que aún dormía plácidamente. Cerró los
ojos e intentó relajarse para la última media hora de sueño que le quedaba,
pero en lugar de eso recordó la primera vez que se había
acercado a Pattie. Había visto en ella el polo opuesto a Teresa. Era rubia, alta y
con el pelo corto. Al menos físicamente nada podría recordarle a Teresa cuando
mirara a su mujer. Y pronto descubrió que eran opuestas en muchos más
aspectos. Pattie nunca borraba la sonrisa de su cara, era imposible saber
cuando se encontraba
mal por algo… Ella siempre parecía feliz. En cambio el gesto alicaído de Teresa
era quizá lo primero que había llamado su atención. No era una persona triste,
pero no regalaba sonrisas a cualquiera, por eso Jeremy tenía aún ese recuerdo
tan vívido de las pocas veces que la había visto sonreír. Entre ellas, el día que
le había prometido amarlo siempre. A pesar de que le había mentido como
nunca lo había hecho nadie, recordaba esa sonrisa casi igual de bien que
recordaba su primer beso con ella.
~~~
Desde el día en que había pasado la noche con ____, su padre no le dirigía la
palabra. Estaba claro que él ese detalle no lo sabía, porque su madre estaba de
lo más encantadora, e incluso le había preguntado por la supuesta película que
había visto con Chaz. Incluso le había dicho que ignorara el mal humor de su
padre, que lo que lo tenía preocupado eran los negocios. Sin embargo Justin no
podía ignorarlo. Nunca habían estado así, y el problema no eran los negocios,
porque con su madre estaba mejor que nunca. Su padre simplemente hacía
como si él no existiera; ni le hablaba, ni le miraba, ni le gritaba… Si se lo
hubieran contado hubiera dicho que era lo mejor que podía haberle pasado
nunca, pero ahora de repente echaba en falta poder entrar al despacho de su
padre y hablar de cualquier cosa, o que en la mesa le preguntara que había
hecho durante el día.
~~~
Entró a casa y vio a Nana acomodando la mesa del comedor. Se acercó a ella
para saludarla y de paso contar para cuantos comensales estaba poniendo la
mesa.
- Justin: ¿Sólo cuatro? (Preguntó extrañado).
- Nana: Eso me ha pedido su padre antes de irse.
- Justin: ¿Y no te ha dicho quien viene?
- Nana: No, no ha hecho ningún comentario al respecto.
- Justin: (Frunciendo un poco el ceño extrañado) Que raro. (Y tras darle un
beso en la mejilla a Nana) Pues nada, subo a cambiarme.
Mientras subía, siguió pensando en quien podía ser el invitado. Era extraño que
su padre no le dijera a Nana exactamente quien venía a casa, sobretodo porque
todos sus amigos solían venir con una larga lista de condiciones a la hora de
atenderlos. Entró en su habitación mientras se quitaba las zapatillas y las tiraba
hacia un rincón cuando se dio cuenta de que no había ningún traje al pie de la
cama. La que supuestamente era una típica cena de negocios estaba
volviéndose cada vez menos típica.
~~~
Annie sonrió al ver que Miranda y Chaz se encaminaban juntos hacia la entrada,
y se giró en redondo para ir hacia las pistas de tenis, donde Zack debía estar
terminando con su último grupo del día. Esa rutina se le hacía agradable. Desde
que Chaz y Justin tenían novia, a penas pasaban tiempo con ella, pero ahora
que ella tenía a Zack, empezaba a no echarlos tanto en falta. A pesar de que
Zack se pasara todo el día en el club trabajando, en todas sus horas libres la
buscaba y pasaban tiempo juntos.
Antes de llegar a la zona de las pistas vio a Zack saliendo de una de ellas, por
lo que decidió sentarse a esperarlo. Salía con un par de alumnas y a pesar de
que no se escondían en el club, Annie prefería ser lo más discreta posible, tanto
para evitarle problemas a Zack, como para evitar que sus padres descubrieran
la relación por terceros.
#NINETY-SIX
Llegaron hablando hasta donde estaba ella y en cuanto Zack se detuvo, las dos
mujeres que lo acompañaban se despidieron y siguieron de largo.
- Annie: (Con media sonrisa) ¿Ligando?
- Zack: Ellas están casadas, pero me estaban hablando de sus nietas y…
(Añadió siguiendo la broma).
- Annie: (Poniéndose de pie y pegándole en el hombro) Calla anda.
- Zack: (Riéndose) Es increíble lo rápido que te enfadas.
Ella empezó a caminar en la misma dirección que habían tomado las mujeres
ignorando a Zack y su risa.
- Zack: (Alcanzándola y rodeándole la cintura con un brazo) Vamos Anny…
No obstante, antes de que ella pudiera replicar algo, su móvil empezó a sonar.
- Annie: ¿Si?
Zack y ella siguieron andando abrazados, mientras Annie hablaba por teléfono
con su madre, cosa que a Zack no le costó mucho adivinar. De repente lo miró
con una sonrisa que llenaba todo su rostro y se soltó de él para empezar a
saltar como una loca. Él la observaba entre asombrado y sonriente, y por suerte
no tuvo que esperar mucho a que ella colgara y pudiera explicarle el motivo de
su alegría.
- Annie: (Acercándose nuevamente a él para abrazarlo) ¡Me han cogido! ¡Me
han cogido!
- Zack: (Riéndose) ¿Pero dónde? Anny pareces loca.
- Annie: (Separándose de él pero con la sonrisa inamovible) En la universidad.
La prueba que te dije que no iba a pasar ni de casualidad… (Dio una palmada y
empezó a reírse) Pues la he pasado. (Y llevándose las manos a la cara) No me
lo creo, no me lo creo…
Y mientras la volvía a invadir un ataque de risa, abrazó a Zack con fuerza. Él se
quedó algo desconcertado. Había hablado con ella de esa prueba de acceso,
pero la había visto tan convencida de lo mal que le había salido, que ni siquiera
se había planteado la idea de pensar en que ella se pudiera ir… Ahora solo les
quedaba un mes… Porque después Annie se iría a estudiar a la otra punta del
país. Le devolvió el abrazo con fuerza, pero fue incapaz de alegrarse por ella, y
eso le hizo sentirse aún peor.
~~~
Ella caminaba mirando fijamente al suelo. No hacía falta conocerla mucho para
notar que estaba sumamente nerviosa.
- Chaz: No es para tanto. (Comentó sin detenerse).
- Miranda: (Alzando la vista) ¿No es para tanto?
- Chaz: Quiero decir… Va a estar mi padre. No es enfrentarnos a Jordan así por
las buenas.
Miranda resopló largamente y se detuvo en seco. Había hablado mucho de esa
cena con Chaz, y a pesar que en un principio se había negado en redondo… Allí
estaba.
- Chaz: (Deteniéndose delante de ella) ¿Qué pasa?
- Miranda: Que creo que esto es innecesario. Vamos a pasar por una situación
horriblemente tensa para nada.
- Chaz: (Algo molesto) Hombre… „Horriblemente tensa‟ creo que es exagerar un
poco. Sé que mi familia no es ninguna maravilla pero…
- Miranda: (Poniéndole una mano en el hombro) Sabes lo que quiero decir. Es
pronto para las presentaciones, haces esto solo por tener algo que compense al
mal rato del otro día... Y no sé si es lo acertado.
- Chaz: Solo quiero que te conozcan. Necesito que al menos mi padre te
conozca. Sé como es mi tía, sé todo lo que le debe haber contado de ti, y
también sé que daría igual todo lo que yo dijera, pero en cuanto te conozcan...
Chaz cerró los ojos con fuerza y se rascó la nuca algo inquieto.
- Chaz: ¿Sabes? No importa… Ya… Ya veré que digo. No tienes que venir. (Y
mirándola a los ojos) No quiero obligarte a venir.
- Miranda: (Con media sonrisa) Sabes que no te haría eso. Pero eso no quita
que tenga miedo de que salga mal.
- Chaz: No va a salir mal.
Y sonriendo levemente volvió a besarla antes de reemprender su camino.
~~~
Se había duchado y se estaba terminando de vestir cuando su madre le tocó la
puerta y le avisó de que su padre estaba al caer. Se miró al espejo y torció un
poco el gesto, se le hacía raro poder vestirse como le diera la gana para una
cena con algún amigo de su padre. Deseó no estar metiendo nuevamente la
pata, porque a pesar de que dudaba que las cosas se pusieran peor… Tampoco
creía ser capaz de soportarlo.
Oyó la puerta de entrada y acto seguido la voz de su padre, por lo que salió
corriendo de la habitación y empezó a bajar las escaleras al trote. Paró antes
del último tramo y tomó un poco de aire para terminar de bajar a un ritmo
normal. Al llegar al recibidor se sorprendió de encontrarse solo con sus padres,
y en lo que estaba muy lejos de ser una conversación agradable. Susurraban,
pero los aspavientos de su madre no dejaban lugar a dudas, estaban
discutiendo acaloradamente. No pudo oír de qué hablaban hasta que no estuvo
bastante cerca de ellos.
- Pattie: No entiendo que te propones, ¿cómo no vas a consultarme algo así?
- Jeremy: No creí que fuera necesario. Es como una más de la familia.
- Justin: ¿Pero qué pasa? ¿Quién es como una más?
Y como si hasta ese momento no se hubieran dado cuenta de que Justin estaba
presenciando la conversación, en cuanto le oyeron intervenir los dos se
quedaron callados. Su padre lo miró por primera vez en días y le regaló media
sonrisa, mientras su madre solo miraba a su marido con gesto serio, como si
esperara a que pronunciara las siguientes palabras.
- Justin: (Algo nervioso) ¿Qué pasa? ¿Quién ha venido?
Su madre se cruzó de brazos mientras seguía esperando a que Jeremy
contestara a esa pregunta, Justin dirigió la vista hacia él instintivamente, pero
al momento oyó a Nana dirigiéndose a ellos desde su espalda y la respuesta de
su padre fue innecesaria.
- Nana: Ya he acomodado a la señorita Luciana en su habitación.
Justin frunció el ceño sin entender nada, ¿Luciana? ¿Lucy era el invitado
fantasma? Se giró hacia su madre y comprobó que seguía mirando a su padre
con gesto serio, mientras él se limitaba a agradecer a Nana y a preguntar por la
cena.
- Jeremy: Lucy pasará aquí el resto del verano.
- Justin: ¿Qué?!
Miró a su padre fijamente y no obtuvo ninguna otra respuesta, ya que la
siguiente en entrar en escena fue la propia Luciana. Justin no podía apartar la
vista de su padre, había algo de todo eso que estaba relacionado con él… pero
no conseguía entender por qué.
#NINETY-SEVEN
~~~~
Estaba secando los vasos de manera automática, obligándose a no pensar en
nada. De unos días a esta parte ir a trabajar se había convertido en un
auténtico suplicio. Estar en el club solo la hacía pensar en Chaz, y desde el día
de la cena no sabía absolutamente nada de él. A pesar de que hacía ya casi una
semana que habían cenado en su casa.
- Annie: ¡Ey Miranda!
- Miranda: (Girándose algo sobresaltada) Ah… Hola.
- Annie: (Alzando una ceja) Menos mal. Te he saludado… Te he pedido un
café… Y parecía que hablaba con la cafetera.
Miranda dejó el trapo que tenía en la mano y se acercó a la cafetera para hacer
el café de Annie. Cuando estuvo listo se lo puso delante y se excuso.
- Miranda: Estoy muy distraída, lo siento.
- Annie: (Frunciendo un poco el ceño) ¿Por Chaz? Llevo días sin verlo.
- Miranda: ¿Tú tampoco? (Y algo molesta) Pensaba que solo yo tenía la suerte
de ser ignorada.
- Annie: ¿Qué ha pasado?
- Miranda: Que NO ha pasado. Pasa que esto es un desastre, pero en lugar de
hablar conmigo… Me evita.
- Annie: Cuando dices „esto‟, te refieres a la cena con su familia ¿no?
- Miranda: (Negando levemente) Me refiero a nosotros…
- Annie: (Torciendo el gesto y acariciándole una mano) Hace unos días te
hubiera dicho que estabas equivocada y que esperaras un poco, que seguro
que todo tenía una explicación. Pero ahora mismo estoy harta de jugar al
escondite con Zack. Solo quiero que venga y me diga lo que le pasa ya. Sea lo
que sea.
- Miranda: (Sacudiendo las manos) ¿Pero qué comen? Zack por lo menos es
algo mayor… Yo pensaba que eso arreglaba algo.
- Annie: (Sonriendo) Nada… ¿Y sabes qué? Es mejor pasar. Si algo he
descubierto con Justin y Chaz en todos estos años, es que lo peor para que te
hagan caso es estar pendientes de ellos. (Y mirando por las cristaleras) Otro
desaparecido…
Justin pasó corriendo al lado del bar y entró dándose toda la prisa posible.
- Justin: ¿Se lo has dicho?
Preguntó dirigiéndose a Annie.
- Annie: Si… Hola a ti también, hace mucho que no nos vemos.
- Justin: (Chascando la lengua fastidiado) Venga Anny…
- Annie: Se lo he dicho. Esta en los columpios de detrás de la cubierta, pero ella
también estaba con Alex y con sus padres. Así que no tendrá mucho tiempo.
- Justin: (Sonriendo) Vale, gracias. (Y tras darle un beso en la mejilla) Hasta
luego Miranda.
- Miranda: (Una vez que Justin se había ido) Vale… Supongo que esto confirma
que invisible no me he vuelto. A ver si a tu otro amigo también se le ocurre
aparecer, porque la esta liando no sabe como.
- Annie: Tranquila… Aparecerá.
~~~~
Hacía casi una semana que no sabía absolutamente nada de Justin. Entre que
ella había pasado más tiempo con Alex que nunca y que Justin no había ido a
verla ni una sola noche. Ese era el primer día que tenía noticias de él. Annie le
había dicho que iba a estar con sus padres en el club, pero que si ella podía
escaparse un momento, él
también lo haría. Annie la había ido a buscar, y con esa excusa había podido
escaquearse con facilidad. Pero llevaba un rato sola, ya que si Annie se hubiera
quedado con ella, Justin no las hubiera encontrado nunca. Se había sentado en
uno de los columpios y se balanceaba muy poco. Se moría de ganas de ver a
Justin y la espera se le estaba haciendo eterna.
- Alex: ¿A quién esperas?
Aunque la persona le había hablado desde atrás. No tardó en reconocer la voz,
y casi sintió que el corazón se le paraba.
- ____: (Girándose) ¿Qué haces aquí Alex?
- Alex: Pensaba que estabas con Anny.
#NINETY-EIGHT
Habían vuelto del club hacia ya casi una hora. Y no podía dejar de pensar en
Alex y en ____. Nunca le había preguntado a ____ por sus citas con Alex.
Siempre había preferido no saberlo, si la besaba, si la abrazaba… Pero verlo no
había hecho otra cosa que despertar una gran curiosidad en él. Había dado
siempre por hecho que ella tenía que pasarlo mal. Que no le hacía ninguna
gracia pasar tiempo con Alex… Y que incluso le caería igual de mal que a él. Sin
embargo, desde que habían vuelto del club no paraba de repetirse que Alex
había sido el primer chico que le había gustado, ¿por qué no iba a resurgir eso
pasando tanto tiempo con él?
Oyó el ruido del flash y supo que Lucy andaba cerca. Desde que había llegado
no paraba de sacar fotos, vivía pegada a su cámara. Se giró un poco solo para
cerciorarse de que no era él el objetivo en ese momento. Ella miraba una foto
en la pantalla mientras andaba hacia él. Justin volvió a girarse y optó por seguir
ignorándola.
Era lo que llevaba haciendo una semana. Su padre se había propuesto que la
llevara a todas partes con él, así que Justin había tomado la férrea
determinación de no salir de casa, salvando la comida de ese día, que había
sido impuesta por su padre. A Lucy no parecía importarle. Daba igual cuanto la
ignorara, ella seguía con su
sonrisa inamovible y su cámara de arriba abajo. La relación que tenían ahora no
había variado mucho de la que tenían de pequeños. No se caían muy bien y
simplemente se ignoraban, a pesar de todos los intentos de sus padres porque
fueran amigos.
#NINETY-NINE
Se giró otra vez al oír el ruido de la cámara y esta vez no estuvo tan seguro de
no formar parte del cuadro.
- Justin: (Algo molesto) ¿Por qué no te vas a otra parte a sacar fotos?
Ella no solo siguió ignorándole sino que volvió a sacarle otra foto. Esta vez, de
frente.
- Justin: (Girándose por reflejo) ¡No me saques fotos!
- Luciana: (Acercándose) Si… La verdad es que sales mejor de espaldas.
Justin la miró molesto y se dio cuenta de que hablaba mientras miraba la
pantalla de la cámara.
- Justin: ¿Por qué no le sacas fotos a mi padre? Él te invitó, así que estará
encantado de posar.
Luciana sonrió y volvió a sacarle otra foto. Única y exclusivamente por
fastidiar.
Resopló y enterró la cara entre las rodillas. Llevaba cerca de una hora sentado
en el jardín, y no tenía fuerzas ni para discutir con Lucy, por mucho que ella lo
provocara.
- Lucana: ¿Qué te pasa?
No levantó la cara, pero se dio cuenta de que se había sentado a su lado. Más
que nada por la cercanía de su voz.
- Justin: Nada…
- Luciana: Mira… Sé que no somos amigos. Pero quieras o no, nos conocemos.
Se diferenciar entre el Justin normal, el Justin enfadado y el de ahora.
- Justin: (Levantando la cara) Pues no se te da tan bien, porque al Justin de
ahora lo que le pasa es que lo tienes muy harto.
- Luciana: El Justin de ahora esta triste. Y no es que me importe… Pero como
he notado que no hablas con nadie, quizá te vendría bien.
- Justin: ¿Y qué sabrás tú como estoy?
- Luciana: Sé que después de hablar con Anny te has quedado lo
suficientemente contento como para que te diera igual tener que comer
conmigo… Y sé que después de lo que supuestamente ha sido ir al baño, has
vuelto casi llorando.
- Justin: He vuelto sofocado… Eso es todo. Y si tengo que mentir es porque no
me da la gana de ir contigo a todas partes.
- Luciana: Mira… (Y le pasó la cámara a Justin) Me gusta la fotografía, no es
que le tenga mucho cariño a este lugar (Explicó mientras Justin miraba algunas
de las fotos que ella había sacado en los últimos días). Siguió pasando fotos y
llegó a una de un niño pequeño. De apenas 4 ó 5 años.
- Justin: ¿Quién es? (Preguntó alzando la vista).
- Luciana: (Mirando la foto con una sonrisa) ¿Me vas a contar tú por qué estas
triste?
- Justin: (Suspirando) Tengo novia… Pero es una historia complicada.
- Luciana: (Apoyando la cara en una mejilla) ¿Te has peleado con ella?
- Justin: (Negando) Nuestros padres no quieren que estemos juntos… Y lo
mantenemos en secreto. (Lucy asintió levemente) Y antes iba a encontrarme
con ella. Pero estaba con su novio. Quiero decir su otro novio… Supuestamente
solo… Boh, no lo sé.
- Luciana: Lo del otro novio es para tapar lo vuestro ¿no?
- Justin: (Encogiéndose de hombros) Se supone.
- Luciana: (Señalando la foto que Justin todavía tenía ante sus ojos) Es el hijo
de mi novio (Justin abrió mucho los ojos) No sé de que te extrañas… De
pequeña siempre te ganaba.
- Justin: (Riéndose) ¿Cuántos años tiene?
- Luciana: Cinco recién cumplidos.
- Justin: (Poniendo los ojos en blanco) Tu novio, no el niño.
- Luciana: Ah… Jajaja, 21, recién cumplidos también.
- Justin: (Frunciendo el ceño) Pensaba que sería mayor…
- Luciana: (Suspirando) Ya… Según mi padre si fuera mayor no habría
problemas. Pero como tuvo que dejar de estudiar para cuidar de Mark.
- Justin: ¿Por eso estas aquí? Quiero decir…
- Luciana: Si. Por muy mal que te caiga a ti no es que sea una paria social. Mi
padre quiere tenerme alejada de él.
- Justin: (Sonrojándose) No quería decir eso, pero… Pensaba que mi padre te
había traído aquí por mí. Quiero decir, para fastidiarme el verano a mí, pero veo
que es al revés.
- Luciana: (Negando levemente) No… Tú padre fue quien llamó al mío. Esto
también debe tener algo que ver contigo.
Justin resopló y se frotó la frente. Volvía a estar en el principio, sin tener ni idea
de qué diantre le pasaba a su padre con él.
Se había pasado toda la tarde hablando con Lucy, y la verdad es que llevaba
días sin pasar un rato tan agradable. Él le había contado toda su historia con
____, y había oído como la historia de ella no era mucho más fácil. Además, lo
había convencido de ir a casa de ____, cosa que tenía muy claro que no
hubiera hecho por iniciativa propia. Al menos no ese día. La escena de ella y
Alex abrazados cuando tenía que estar esperándolo a él, seguía repitiéndose
una y otra vez en su cabeza.
#100
~~~~
Se plantó justo detrás de él, con los brazos en jarras. Estaba ya muy harta de
ser esquivada.
- Zack: (Girándose) ¡Anny! (Y dando un paso atrás por la sorpresa) Podías
avisar.
- Annie: Si… Cuando todavía me faltan cien metros para llegar a ti ¿no? Así te
da tiempo a esconderte.
Zack puso los ojos en blanco y suspiró. La había estado evitando a propósito
desde que había descubierto que Anny se iba a ir a estudiar tan lejos, pero
nunca hubiera pensado que ella se lo iba a tomar tan mal.
- Annie: Que faltaras ayer a clase ya fue el colmo. ¡Eres el monitor!
- Zack: (Alzando una ceja) ¿No os avisaron?
- Annie: ¿Y qué? ¡Faltaste!
- Zack: (Sorprendido) Tenía que hacer un trámite.
- Annie: Ya…
- Zack: (Con media sonrisa) Ey… Hablo en serio. No faltaría al curso solo para
no verte.
- Annie: Bueno… Pero llevamos sin hablar casi una semana. Y cada vez que
consigo hablar contigo, te escabulles en un segundo.
- Zack: Es por la universidad.
- Annie: (Frunciendo el ceño) ¿Tienes problemas?
- Zack: No… Bueno, al menos no con la mía, pero con el hecho de que la tuya
este a mil kilómetros de distancia… Algunos.
Annie relajó su rostro lentamente y miró a Zack a los ojos, se había imaginado
lo peor durante toda la semana. Y él simplemente estaba preocupado. De
repente fue consciente del detalle de todos los kilómetros que los iban a
separar a partir de septiembre. Cosa que ni siquiera se había planteado hasta
entonces.
- Annie: ¿Quieres que lo dejemos?
- Zack: (Abriendo mucho los ojos) No, no. Quiero decir… ¿Tú quieres eso?
(Preguntó frunciendo el ceño).
- Annie: No, pero… Me has estado esquivando e igual era porque…
- Zack: Para nada. Lo que pasa es que… Tú estabas tan contenta. Y yo no era
capaz de sentir lo mismo. Por eso elegí mantenerme un poco al margen, no
quería amargarte el momento.
- Annie: Zack… Yo… No es que no haya pensado en lo nuestro. Quiero decir, si,
es exactamente eso, he estado contenta, pero porque no había caído en la
cuenta. No quiero que pienses que me da igual ni nada por el estilo.
- Zack: Ayer pensaba pedir el traslado de expediente. Por eso falte al trabajo.
(Annie abrió la boca para decir algo, pero él no la dejo) Pero al final no lo hice.
- Annie: Mi carrera no esta aquí, yo no…
- Zack: No es por eso. Creo que es mejor esperar. Y también tiene que ser algo
hablado. No llevamos nada. Y a pesar de que este contigo como no he estado
con nadie… Ni tú ni yo podemos cambiar nuestra vida por completo por el otro.
- Annie: (Tomando aire) Zack… Si esto se va a acabar dentro de un mes. Quizá
prefiero que se termine ahora.
- Zack: (Acercándose a ella y cogiéndola de las manos) Yo lo que quiero es que
aguantemos un años viéndonos poco. Cuando no vengas tú, iré yo, pero no
quiero seguirte y que eso sea una carga para ti.
- Annie: (Sonriendo) Voy a poder tener dos novios (Y se rió ante la cara de
Zack).
- Zack: Eso será hasta que mate yo al otro.
Y todavía entre risas Annie se aferró a Zack para abrazarlo con fuerza.
- Zack: Siento haber estado así de raro. Pero tenía que pensar sobre esto.
- Annie: (Con la cara sobre su hombro) Y me alegro de que lo hayas hecho. Yo
no soy buena haciendo planes.
Zack se rió y la besó en la mejilla. Iba a ser duro no verla, pero estaba seguro
de que iba a merecer la pena.
~~~~
Estaba cerca de la hora del cierre, e instintivamente miró hacia la puerta.
Seguía sin saber absolutamente nada de Chaz. Vivía con el móvil apagado, y a
casa no se atrevía a llamarlo, ni siquiera Justin o Annie sabían nada de él. O al
menos no quería pensar que le estaban mintiendo con respecto al tema. Tenía
tan claro que cuando se vieran no iba a quedar nada por decir, que no
deseabamás que encontrarse con él. Comprobar con sus propios ojos que todo
se había ido al garete.
#102
Al llegar había pensado que lo que necesitaba Miranda eran unos días. Que en
cuanto supiera donde y qué había estado haciendo, podría perdonarle. Sin
embargo ella seguía sin querer saber absolutamente nada de él. Después de
todo el fin de semana sin conseguir hablar con ella por teléfono, había ido al
club el lunes decidido a no moverse de ahí hasta no hablar con ella, pero
Miranda había faltado al trabajo. Y el martes.Simplemente lo había ignorado.
Había intentado explicarse a pesar de no recibir la más mínima señal de
atención, pero ella solo le había hablado para amenazarlo con dejar el trabajo
sino la dejaba tranquila. Llevaba toda la tarde tumbado en la cama. Sabía que
había hecho mal en irse, al menos mal al irse como se había ido, sin avisar y sin
haberla llamado ni un solo día, pero en el momento era lo que había
necesitado. Por mucho que se arrepintiera de eso ahora, no había tenido tan
claro en un principio que toda la culpa fuera de su tía y su padre. Se había
alejado convencido de que le hacía falta apartarse un poco de Miranda. Pero
solo había conseguido echarla de menos. Se giró en la cama y observó
atentamente una foto que tenía en la mesilla de noche. Salían él y su madre.
Recordó todas las veces que su madre le había tomado el pelo con las chicas y
como le había amenazado con contarle anécdotas abochornantes a la primera
novia que se le ocurriera llevar a casa. Sonrió pensando en lo diferente que
hubiera sido la cena si quien hubiera encabezado la mesa hubiera sido su
madre en lugar de su tía.
Iba a volver a enterrar la cabeza en la almohada cuando oyó la puerta de su
cuarto abrirse.
- Ela: ¿Coco puedo entrar?
- Chaz: Si claro.
Ela se acercó lentamente, y cuando estuvo situada cerca de él, lo observó con
atención.
- Ela: La tía me ha dicho que estas llorando por tu novia.
- Chaz: (Con media sonrisa) No estoy llorando enana.
- Ela: Pero estas triste (Insistió).
- Chaz: Un poco.Pero eso no es malo.
- Ela: ¿Es por Miranda? (Chaz asintió) ¿Te ha hecho algo?
- Chaz: (Sonriendo) Ven aquí anda.
Y se movió para que Ela pudiera subirse a la cama al lado de él.
- Chaz: Miranda y yo nos hemos peleado. Por eso estoy triste, pero no ha sido
culpa de ella.
- Ela: Yo no quiero que estés triste.
- Chaz: Es bueno Ela. (Y acariciándole la cara) ¿Sabes? La tía de pequeño
siempre me llamaba llorica, pero mamá me decía que es mejor llorar y sentirse
mal que no sentir nada.
- Ela: A mí también me dice llorica cuando me caigo.
- Chaz: Pues tú no tienes que hacerle caso. Si algo te duele tienes que llorar, o
acabarás siendo como la tía.
- Ela: ¿Ella no llora?
- Chaz: (Negando lentamente) ¿A qué a ti te gusta reírte?
- Ela: (Sonriendo) Si. Pero no cuando me haces cosquillas.
- Chaz: (Frunciendo el ceño) Mentirosa. (Y besándole la frente) Para saber
reírse hay que saber llorar Ela. Por eso no es malo llorar. La tía no llora, pero
tampoco se ríe nunca.
- Ela: (Abrazando a su hermano) Buenas noches tato.
Y mientras su hermana lo abrazaba se dio cuenta que la peor traición para con
ella, sería dejarla sola con su tía. Fuera como fuera iba a convencer a su padre
para no irse a estudiar fuera.
- Chaz: Duerme bien pequeña.
~~~
Desde que se había ido dejando a ____ y Alex solos, no había querido
encontrarse con nadie. Llevaba sentado al pie de ese árbol horas. No podía
dejar de pensar en como estaban siendo las cosas los últimos días. Él y ____
parecían haber pasado su mejor momento y desde ahí todo iba cuesta abajo.
No había un día sin una mala noticia. Sin una conversación poco agradable. Y
eso que apenas se veían. Y ahora estaban enfadados. Enfadados y no sabían
cuando podrían volver a verse. Era imposible no empezar a estar muy harto.
Deseaba no quererla tanto, no quería sentir como se le retorcía algo por dentro
cada vez que recordaba como Alex la había
cogido por los hombros, deseaba ser capaz de pasar de todo eso, de no pensar
en ella aunque fuera durante cinco minutos.
- Lucy: (Saltando un arbusto) ¡Al fin! Ya me veía volviendo sola. Iba a ser
divertida la escena… „No, el nene se me ha perdido‟.
- Justin: (Girándose con media sonrisa) ¿Cómo me has encontrado?
- Lucy: Me quedaba esta zona, o empezar a mirar dentro de los contenedores.
(Y tras sentarse a su lado) ¿Llevas mucho aquí?
- Justin: Más o menos desde que nos hemos separado.
- Lucy: ¿No habías quedado con ____?
- Justin: (Asintiendo) Y al parecer con Alex también.
- Lucy: (Torciendo el gesto) Uh… ¿Y los has dejado solos?
- Justin: Sobraba alguien, y él no estaba dispuesto a irse.
- Lucy: Pero…
- Justin: ¿Sabes qué? Me ha venido bien. Empiezo a estar un poco harto de
todo esto.
- Lucy: Justin…
- Justin: (Mirándola a los ojos) Al menos antes sabía que ella no me iba a fallar,
sabía que… solo era yo, no lo sé… (Resoplando) ¿Además de mis padres y los
suyos ahora tengo que cuidarme de que no me la quite Alex? Lo siento… Soy
incapaz.
#103
- Lucy: No, no eres incapaz. (Y pasándole el brazo por encima de los hombros)
Es normal que este asunto te canse. Pero sabes de sobra que Alex no tiene
nada que hacer. Ella ha luchado por ti, tanto como tú por ella. No la conozco,
pero te aseguro que merece la pena luchar por alguien que te quiere como ella
a te quiere a ti.
- Justin: Hay caminos más fáciles.
- Lucy: (Riéndose) Si. Lo fácil sería que nos enamoráramos tú y yo, pero eso no
tendría ni pies ni cabeza.
- Justin: ¿Por qué no? Nos llevamos bien.
- Lucy: (Sonriendo) Si. Ahora.
Justin la miró totalmente serio y ella le apretó levemente el hombro intentando
reconfortarlo.
- Lucy: Venga Justin… No te puedes rendir ahora. El tal Alex es un completo
cretino, yo lo sé, tú lo sabes y ____ también, lo que pasa es que os viene bien
tenerlo de vuestra parte y ella es consciente de ello.
- Justin: Ya no es solo Alex…
Luciana intentó decir algo más, pero se dio cuenta que quizá lo mejor era hacer
que Justin olvidara el tema, estaba claro que al día siguiente iba a volver a
estar deseando ver a ____.
- Lucy: (Dándole una palmada en la espalda) Vamos…
- Justin: (Alzando una ceja) ¿A dónde?
- Lucy: A cualquier sitio. Según mis cálculos llevas demasiadas horas aquí.
Y en cuanto se hubo incorporado le tendió las dos manos a Justin para ayudarlo
a él a levantarse.
- Lucy: (Volviendo a saltar el seto) Tengo que reconocer que me alegro de que
ahora me hables.
- Justin: (Con media sonrisa) Y yo que siempre creí que eras tímida.
- Lucy: (Sorprendida) ¿Yo tímida? Eres tú el que siempre ha sido tan elocuente
como una piedra.
- Justin: (Sonriendo) Me caías mal.
- Lucy: Pues menos mal que has madurado.
Justin se rió ante el comentario, pero la siguió sin añadir nada más. La verdad
que su reciente amistad con Lucy era todo un descubrimiento.
Supo darse cuenta que lo último que necesitaba Justin era volver a casa y estar
con sus padres, por lo que estuvieron dando vueltas por el club durante
bastante rato.
- Justin: No te creo.
- Lucy: (Indignada) ¡Te lo juro!
- Justin: (Riéndose) Chaz no me haría eso.
- Lucy: Tuviste suerte de que no me gustara, porque te habrías pasado todo el
verano más solo que la una. No paraba de tirarme los trastos.
- Justin: ¡Pero si teníamos 12 años!
- Lucy: (Alzando las manos) ¡Y yo qué sé! El precoz era tu amigo no yo.
- Justin: (Riéndose con más ganas) La verdad es que no sé de que me extraño.
Es Chaz. (Y guiñándole un ojo) ¿De verdad no te gustaba?
- Lucy: Por favor… Era amigo tuyo, con eso ya las tenía todas en contra.
Además, solo me hablaba cuando tú no estabas, el resto del tiempo se reía de
mí.
- Justin: Me acuerdo de ese verano. Fue el último año que Chaz vino de
vacaciones conmigo.
- Lucy: Cierto.
- Justin: Recién ahora volvemos a estar en el mismo grupo.
- Lucy: Pero nunca habéis dejado de ser amigos ¿no?
- Justin: Qué va… Antes nos veíamos menos, pero Chaz siempre ha sido mi
mejor amigo.
- Lucy: Haces bien. ¿Sabes? Ese año intenté que te insultara. Pero ni
prometiéndole un beso accedió a decir nada malo de ti.
- Justin: (Abriendo mucho los ojos) Pero tú no eras una niña, eras una víbora.
- Lucy: ¡Oye! Me vivías martirizando. Que tu amiguito te llamara tonto no era
nada comparado con los bichos que me metíais en la cama.
- Justin: Boh… Eran de plástico exagerada.
- Lucy: ¿De plástico? Los gusanos no eran de plástico bonito. Casi me muero
del asco.
Justin se llevó las manos a la cara y empezó a reírse mucho más fuerte de lo
que lo había hecho hasta el momento. Mientras Luciana ponía los brazos en
jarras y lo miraba con gesto serio.
- Justin: Nos pegamos la tarde entera juntándolos.
- Lucy: Os podíais haber ahorrado la molestia.
- Justin: También me acuerdo que cuando jugábamos a la botella y decíamos
que éramos hermanos.
- Lucy: Creo que fue la primera vez que nos pusimos de acuerdo en algo.
- Justin: No sé porque nos llevábamos tan mal la verdad.
- Lucy: Porque nos obligaban a estar juntos, y tú siempre has ido en la
dirección opuesta a la que te marcaban.
~~~
Y literalmente se sintió morir. Tenía la vista clavada en la escena, ni siquiera
era capaz de parpadear, pero a pesar de todo deseaba con toda su alma que
no fuera real. Lo que se había convertido en el eje de su vida durante las
últimas semanas se acababa de desmoronar ante sus ojos, o al menos ella
acababa de descubrirlo.
Antes de que ninguno de los dos pudiera verla, o de que le fuera imposible
seguir controlando las lágrimas, salió corriendo.
104
Luciana empujó a Justin lentamente en cuando fue consciente de lo que estaba
pasando. Cerró los ojos y dio un paso atrás. No entendía nada.
- Justin: (Llevándose las manos a la cara) Lo siento… (Y mirándola) Lo siento,
lo siento… No sé que me ha pasado, yo no…
- Lucy: Justin, yo no…
No sabía que decir. Lo había pasado bien con él, pero en ningún momento creía
haberle dado pie para lo que acababa de pasar.
- Justin: No… Ha sido mi culpa. No sé que… (Y volviendo a llevarse las manos a
la cara) Jo der, lo siento…
En ese momento se acercó alguien corriendo.
- Annie: Aquí estáis… Bien.
- Justin: (Nervioso) Anny… ¿Qué tal?
- Annie: (Mirando alrededor) Bien… ¿Y ____?
- Justin: ¿____?
- Annie: Si. (Y resoplando) Llevo un cuarto de hora cuidando al monigote de
Alex y estoy harta. ¡Qué plasta es el pobre!
- Justin: ____ no ha venido aquí.
- Annie: (Extrañada) ¿Cómo que no? Si me ha dicho que os había visto aquí y
que tenía que hablar contigo. Debe llevar toda la tarde sin poder despegarse de
Alex.
- Justin: (Negando levemente) No…
- Annie: Si. Te lo juro. Hace como diez minutos que ha salido del bar hacia
aquí. No se puede haber perdido.
Justin miró a Luciana nervioso y empezó a mirar alrededor.
- Justin: Tiene que estar por aquí.
- Annie: Hombre… De camino al bar no esta, acabo de venir y me la habría
cruzado. ¿En serio no la habéis visto?
- Lucy: Llevamos aquí un rato… Y no ha pasado.
- Annie: Pues ha tenido que pasar. No hay muchos sitios entre la entrada y el
bar. Y os había visto antes. Me extraña que no os haya encontrado.
- Justin: Anny por favor. Llámala. Que te diga donde esta.
- Annie: (Alzando una ceja) ¿Habrá vuelto con Alex?
- Justin: ¡Anny llámala!
-Annie: (Sacando el móvil del bolsillo) Va, va… Tranquilo.
Justin empezó a pasarse las manos por la cabeza mientras miraba hacia todas
partes rezando porque apareciera en cualquier momento. Luciana mientras
tanto no apartaba la vista de Annie, el hecho de que se mordiera el labio
inferior mostraba lo nerviosa que estaba.
- Annie: (Encogiéndose de hombros) Me ha colgado.
- Justin: ¿Pero te ha dicho algo?
- Annie: No, no… Ha rechazado la llamada. Directamente.
Annie volvió a marcar y esperó, pero esta vez el teléfono le dio apagado.
- Annie: Ahora lo apaga. Genial. ¿Esta es tonta? ¿Y qué le digo yo al memo de
su novio?
- Justin: Anny… Olvídate de Alex. Llámala a casa, por favor, o ve a ver si esta
allí. Yo voy a recorrerme el club.
- Annie: Bueno… Tranquilo, que perderse no se habrá perdido. Se habrá
cruzado con alguien y…
- Justin: No Anny, no lo entiendes. Hazme caso.
- Annie: (Mirándolo seriamente) ¿Qué ha pasado?
- Justin: Nos hemos besado.
- Annie: (Alzando las dos cejas y mirando mal a Lucy) ¿Os habéis besado?
¿Vosotros?
- Justin: Yo la he besado a ella en realidad. Y por lo que has dicho, ____ tiene
que habernos visto.
- Annie: (Muy seria) Te dije que no le hicieras daño. Te lo pedí por favor…
- Justin: Anny, ahora…
- Annie: ¡No! Anny, nada. No voy a ayudarte. Y aunque no me vayas a hacer
ningún caso… Aléjate de ella.
Se dio media vuelta y se alejó de la entrada para alejarse lo más posible de
Justin y Lucy. Si ____ los había visto debía estar destrozada. No podía creer
que Justin se la hubiera jugado así.
~~~
Llevaba varias calles corriendo y llorando sin parar. Los había visto separarse,
pero había conseguido salir del club sin que ellos la vieran a ella. Tenía que
haber vuelto con Annie y Alex, pero en esos momentos no se sentía ella. No se
cansaba de correr. Y tampoco parecía poder parar de llorar. La imagen de
Justin besando a aquella chica se repetía una y otra vez en su mente, y en cada
ocasión le hacía más daño en el corazón. No podía pensar. No en nada que no
fuera el dolor que sentía en ese preciso instante. Un dolor tan agudo que
parecía imposible que no fuera físico. Para cuando quiso darse cuenta se
encontraba en la puerta de su casa, pero ni siquiera a eso le presto atención.
Solo quería llegar a su cuarto y dormir, dormir para despertar de lo que solo
podía ser una pesadilla.
Entró en casa andando, pero sin poder contener las lágrimas. De repente sentía
que no era nada, que sin Justin todo perdía el poco sentido que había cobrado
en las últimas semanas. Volvía a ser la chica frágil y vulnerable.
- Teresa: ¿____? (Preguntó desde el salón).
Ella ignoró la llamada e intentó subir las escaleras corriendo, pero sin darse
cuenta de que su padre bajaba justo en ese momento, por lo que tropezó con
él y calló de rodillas.
- Santiago: (Agachándose) ¿____ estás bien? (Y al ver que estaba llorando)
¡Teresa! ¡Teresa ven!
- Santiago: (Abrazándola) ____ por favor… ¿Qué te pasa?
Sin embargo ella solo le correspondió el abrazo, sin ser capaz de dar ninguna
explicación.
- Teresa: ¿Pero qué ha pasado?
- Santiago: No lo sé. Venía mal. Ha tropezado, pero no ha sido para tanto. (Y
hablándole a ____ al oído) Por favor cariño, dime que te pasa…
- ____: (Sollozando) Justin…
- Santiago: ¿Qué pasa con él ____? ¿Te ha hecho algo?
- ____: (Abrazándose más fuerte a su padre) No me odies papá.
- Santiago: (Apoyando la barbilla sobre la cabeza de ____) Yo nunca te voy a
odiar, pero necesito saber que te pasa cariño.
Y mientras sentía que su hija lo abrazaba sin dejar de llorar cerró los ojos y la
acunó para que se calmara.
105
~~~
Había contado todo. A su padre y a su madre. Y a pesar de lo que podía haber
esperado, no la odiaban, ni le habían gritado. Simplemente la habían consolado,
sobretodo su padre. La había abrazado y le había pedido que no llorara. Por
primera vez en mucho tiempo había sentido que les importaba de verdad.
Aunque lo último que deseaba en esos momentos era estar sola, se había
hecho la dormida para que ellos se pudieran ir a dormir tranquilos. Solo
deseaba que al día siguiente siguieran siendo igual de comprensivos. O la
pesadilla solo incrementaría. Intentó concentrarse en su respiración para
quedarse dormida, pero antes de conseguirlo oyó un ruido proviniendo del
balcón. Se giró en la cama, pero no vio nada.
Se levantó y salió. Al verlo deseó no haber salido. No estar ahí tan cerca de él.
____ le dio la espalda, pero él se acercó aún más y la abrazó. Ella soltó el aire
lentamente y permaneció totalmente quieta. Por un lado tenía ganas de gritar,
de enfadarse. Pero por otro el hecho de que él fuera a buscarla era lo único
que había
deseado desde que el corazón le había estallado en mil pedazos. Tenía los
brazos cruzados sobre el pecho y justo debajo de los suyos se apoyaban los de
Justin. Notaba como su pecho la arropaba, y por muy enfadada que quisiera
estar supo que mientras Justin estuviera ahí, nada había terminado.
- Justin: (Hablándole al oído) Necesito que me perdones. Te quiero ____.
Trató de controlar las lágrimas, pero una vez más fue incapaz. Sin embargo no
estaba sola, por lo que se giró y abrazó a Justin con todas sus fuerzas.
El hecho de que ella lo abrazara así tenía que haberlo tranquilizado, eso era
una buena señal, pero saber que ella lloraba así por su culpa no lo iba a dejar
sentirse tranquilo en mucho tiempo.
- Justin: (Acariciándole el pelo) Lo siento ____. No quería hacerte daño.
Creeme que lo siento.
- ____: (Entre sollozos) Yo también lo siento Justin. Lo siento mucho.
- Justin: (Separándola delicadamente) No es tu culpa. He sido yo el que ha
metido la pata. No tienes que pedirme perdón.
Sin embargo ____ repitió que lo sentía y cerró los ojos para seguir llorando.
Justin no entendía nada, pero la besó en la frente y volvió a abrazarla. Casi sin
haber terminado de rodearla con sus brazos, la puerta de la habitación de ____
se abrió, y ella dio un paso atrás algo sorprendida.
~~~
No paraba de repetirse que era su culpa. Que él se lo había buscado, que él era
el que había metido la pata… Sin embargo había algo que no podía cambiar, y
era el hecho de que ____ había sido la que había decidido poner fin a la
relación, ____ era la que había destapado todo sabiendo que eso solo podía
significar una cosa… No volver a verse. Tenía ganas de llorar, pero no tenía
fuerzas. Estaba a unos segundos de la que sin duda sería la peor bronca que
hubiera recibido nunca, pero le daba igual. En ese momento no se le ocurría
ninguna diferencia entre su casa y la academia militar. En ese momento la
diferencia solo podía haberla marcado ____. Y ella había decidido salir de su
vida.
El padre de ____ abrió la puerta del coche y esperó a que Justin bajara. Cerró
la puerta tras él y lo siguió sin decir una sola palabra. „Voy a hablar con tu
padre‟ había dicho, y a él no se había tomado la molestia de decirle
absolutamente nada más. Tocó el timbre de la puerta principal y esperó. En
unos segundos nada de todo eso
tendría solución posible.
#106
La cara de Nana al abrir la puerta no pudo ser otra que la sorpresa. Hacía años
que no veía al hombre que estaba detrás de Justin. Y la última vez que lo había
visto ni siquiera lo habría calificado de hombre.
- Nana: Santiago…
- Santiago: (Serio) Necesito ver al padre de Justin.
- Nana: (Con media sonrisa) Si claro… Pasa. (Y cogiéndole la mano a Justin)
Pasa cariño.
Benja apretó casi inconscientemente la mano de Nana y ella lo miró con
preocupación. Le pasó la mano por la frente al ver la mala cara que tenía.
- Santiago: Le aseguró que el niño esta perfectamente.
Nana lo miró extrañada y volvió a mirar a Justin, que ahora tenía su vista fijada
al pie de las escaleras, donde se encontraba su padre.
- Jeremy: (Sin llegar a gritar pero con tono severo) Sal de mi casa.
- Santiago: (Acercándose a él) Antes vamos a hablar.
- Jeremy: Tú y yo no tenemos nada que hablar.
- Santiago: Te equivocas. Vamos a hablar de cómo vas a mantener a tu hijo
alejado de mi casa y de mi hija.
Jeremy entornó la mirada pero no contestó nada. Miró a Justin y como toda
respuesta observó como bajaba la mirada.
- Jeremy: Repito que tú y yo no tenemos nada que hablar. Lo que haga o deje
de hacer con mi hijo no es asunto tuyo.
- Santiago: (Con media sonrisa) Oh si… Si que lo es. Lo es desde el momento
en que mi hija llega rota en llanto a casa y todo es por culpa de tu hijo.
- Justin: ¡No todo es mi culpa! (Exclamó molesto) Si nos dejarais…
- Santiago: (Girándose molesto) Si… Para ser todo un Bieber solo te faltaba
esto, echar la culpa a los demás.
- Jeremy: (Obligando a Santiago a girarse) No le hables así a mi hijo.
- Santiago: Entonces mantenlo alejado de mi hija.
- Jeremy: Mira… No sé porque habrá llegado la caprichosa de tu niña llorando a
casa, pero desde luego no tienes ningún derecho a acusar a mi hijo y a venir a
insultarme a mi propia casa.
- Pattie: (Entrando en el salón) ¿Pero qué…?
- Santiago: (Interrumpiendo a Pattie) Pensaba que odiabas a toda mi estirpe
Bieber. No deberías mostrarte tan tranquilo cuando te digo que tu único hijo
anda detrás de _____. Yo al menos no voy a hacerlo, y te advierto que es la
primera y la última vez que me tomo la molestia de traértelo a casa. Si lo
vuelvo a encontrar rondando mi
casa no voy a ser tan comprensivo.
- Justin: Quiero a ____. ¿Por qué no puede dejarnos arreglar nuestros
problemas solos?
- Santiago: (Dirigiéndose hacia la salida) Aléjate de mi hija. No voy a repetirlo.
Justin vio como se marchaba el padre de ____, y notó el aplastante silencio que
inundaba la habitación. La mano de Nana sobre su hombro era lo único que lo
unía al entorno, porque él solo podía pensar en que no iba a volver a ver a
____, y eso no dejaba sitio para nada más.
~~~
Habían pasado ya varios días desde la fatídica noche en que todo se había
venido abajo. Y absolutamente nada había cambiado. Sabía que Chaz lo había
llamado varias veces, y que incluso Annie había ido a verlo. Pero no tenía ganas
de nada. Su padre no se había molestado ni en formularle un castigo, aunque
tampoco hubiera
hecho falta, porque desde la visita del padre de ____, Justin ni siquiera se
había movido de la cama. Cada vez que Luciana o su madre entraban en la
habitación, él se hacía el dormido y de momento ninguna de las dos había
insistido en hablar con él. Que pasaran los días sin saber nada de ____ era
difícil, pero que pasaran los días sin tener ninguna esperanza de verla o hablar
con ella era prácticamente insoportable. Y todo por un estúpido beso. Un
estúpido segundo en el que había conseguido tirar todo por la borda.
~~~
Desde esa noche ____ solo había hablado con ella para pedirle que no dejara
que nadie la visitara. Ni Alex, ni Annie… No quería ver absolutamente a nadie.
Teresa sentía que no dejaba de observarla. Y todo porque le daba la sensación
de que era imposible que nadie aguantara tanto sufrimiento como el que
reflejaba el rostro de
____. Se pasaba el día en su habitación tocando el piano, y solo algún día había
bajado un rato al jardín. Con los pies metidos en el agua había llegado a pasar
horas.
Santiago también pasaba todo el día en casa. Intentaba acercarse a su hija
todo lo que le era posible, pero a pesar de que ella recibiera los gestos con
sonrisas, era imposible no darse cuenta de que solo deseaba estar sola.
- ____: (Sentándose a su lado en el sofá) Mamá…
- Teresa: (Con media sonrisa) ¿Si?
- ____: (Mirándola a los ojos) ¿Cuándo va a dejar de dolerme?
- Teresa: (Acariciándole la cara) Cariño. Siempre que alguien nos falla cuesta…
- ____: (Negando lentamente) No me refiero a eso. Me duele pensar en no
volver a verlo. Y a cada día que pasa solo me duele más. Y a veces siento que
ya no puedo más, pero sigue doliendo. (Volvió a mirarla a los ojos) A ti también
te pasó. Y necesito saber cuando va a dejar de ser así.
Teresa abrió la boca sorprendida y se acercó a su hija para abrazarla. No tenía
ni idea de qué sabía su hija o cómo lo sabía, pero lo único que no se sentía
capaz de decirle es que esa era una herida que seguía doliendo.
~~~
Ni siquiera estaba segura de que él fuera a encontrar el lugar. Había intentado
tanto proteger su identidad que no podía estar segura ni de que él fuera a
entender el mensaje, hacía años que no iba a ese lugar. Además, a pesar de
que lo entendiera, nada le aseguraba que fuera a querer asistir a la cita. Si no
lo había querido hacer en el pasado, no tenía porque estar por la labor en el
presente. Se pasó las manos por la cara por enésima vez. Le había mentido a
su marido a la hora de salir de casa, pero no quería que absolutamente nadie
supiera donde iba a estar, y mucho menos con quien. Miró a su alrededor una
vez más. Esa pequeña plazoleta llevaba intacta casi veinte años. En el pasado
había sido un sitio mucho más resguardado, pero ahora que habían demolido
casi todos los edificios que la rodeaban era un lugar bastante expuesto.
~~~
„Hablar de nosotros es una pérdida de tiempo, pero hablar de nuestros hijos es
necesario. En el lugar de siempre a las nueve. T.‟
#107
~~~
Chaz llamó a la puerta del despacho de su padre y pasó en cuanto este le dio
permiso. Sabía que tenía que hacer las cosas bien si quería que le prestara
atención.
- Martin: (Dejando un bolígrafo sobre el escritorio y reclinándose sobre su silla)
¿A qué viene tanta ceremonia?
- Chaz: Quiero hablar contigo.
- Martin: (Haciendo un gesto hacia la silla) Bien… Siéntate.
- Chaz: (Tras haberse sentado) Quiero hablar contigo de la universidad.
- Martin: ¿Qué tenemos que hablar con respecto a ese tema?
- Chaz: Quiero quedarme aquí.
- Martin: (Suspirando y apoyándose en el escritorio) No me canses Charles. Ese
tema ya esta más que hablado.
- Chaz: Qué va. Pero si nunca me escuchas.
- Martin: ¿Y qué tengo que escuchar? ¿Qué Miranda se queda aquí y por eso no
te quieres ir? (Volviendo a coger el bolígrafo que tenía en la mano) Tienes que
poner tus vistas un poco más lejos del final del verano hijo.
- Chaz: (Tragando con dificultad) No estoy con Miranda. Y ella se va fuera. Así
que no tiene nada que ver. Nunca ha tenido nada que ver con esto.
El padre de Chaz volvió a alzar la vista y lo miró con renovado interés, ¿qué
otro motivo podía tener su hijo para no querer dejar la ciudad?
- Chaz: No quiero dejar sola a Ela.
- Martin: (Resoplando) Pareces un disco rayado. ¿Pero por qué no dejas de
decir tonterías? Tu hermana nunca va a estar sola. Mira… Me parece muy bien
que seas así de protector con ella, pero ni tú dependes de ella, ni ella depende
de ti. Para ella quizá si sea lo mejor tener a su hermano mayor lo más cerca
posible, pero ahora mismo tienes que mirar por tu futuro, e ir a estudiar fuera
es lo mejor para eso.
- Chaz: Papá por favor…
- Martin: (Frunciendo el ceño) No te entiendo Charles… Y si no me dices el
verdadero motivo de porque quieres quedarte a estudiar aquí, creo que nunca
voy a hacerlo.
- Chaz: Cada vez que te lo digo acabamos discutiendo. No quiero que Jordan
cuide de Ela. (Y poniéndose de pie) Vale… Yo igual no me puedo hacer cargo
de ella a todas horas, tú tampoco. Pero que al menos cada día tenga un rato
con uno de nosotros. Sé que piensas que es una tontería, pero no lo es. Ela lo
necesita, y tú no te estas dando cuenta.
- Martin: Charles, yo sé que…
- Chaz: No, no sabes nada. Jordan es tu hermana y das por hecho que por eso
tiene que ser buena. Pero si de verdad confiabas en mamá piensa en cuando
ella estaba viva… Y no recordarás un solo momento en que yo o Ela nos
quedáramos solos con Jordan.
- Martin: Cuando tu madre estaba aquí no era necesario que nadie os cuidara.
- Chaz: No es eso papá. Son cosas como que grita. (Encogiéndose de hombros)
Grita por todo, se mete con nosotros, vive de mal humor. No le gusta estar con
otra gente. Sé que es tu hermana, y yo seguramente vaya a querer a Ela
aunque sea igual que Jordan, pero eso no significa que sea la persona
adecuada para cuidar de una niña de seis años.
- Martin: ¿Qué has querido decir con que se mete con vosotros?
- Chaz: (Suspirando) Son tonterías. Lo sé, pero no me parece justo que en
lugar de ayudar a Ela a lavarse las manos o cambiarse de ropa, la llame tonta
cuando lo hace mal. Y tampoco es justo que la llame llorica si se cae… Y…
- Martin: (Atónito) Charles…
- Chaz: Ela solo necesita que alguien le diga todos los días que Jordan no
siempre tiene razón. Y no porque quiera que se revele, sino porque no quiero
que este triste. (Apoyándose en el escritorio) Papá, piensa cuando te ha hecho
falta gritarle a Ela. (Alejándose) Yo si… Yo contesto mal, dejo las cosas
desordenadas, y no me quejo cuando me grita. ¿Pero Ela?
- Martin: ¿Por qué nunca me has planteado este tema así? Si tu tía realmente
es tan mala para tratar con niños, como no…
- Chaz: Porque mientras yo estuviera no iba a pasar nada. Pero si a Ela podía
pasarle algo más injusto después de perder a mamá… Eso sería quedarse sola
con Jordan.
~~~
Estaba tumbado sobre la cama, mirando por la ventana. La luna brillaba en
todo su esplendor, sin una sola nube que le hiciera sombra. Los días seguían
pasando y el hecho de que no iba a volver a saber nada de _____
seguía siendo una realidad igual de dolorosa. Cerró los ojos cuando notó que
alguien se sentaba a su lado en la cama, pero supo que era tarde.
- Pattie: (Acariciándole la frente) No has querido hablar conmigo desde que
paso todo Justin. Y estoy muy preocupada.
Él abrió lentamente los ojos, pero volvió a fijar su vista en el cielo sin decir
nada.
- Pattie: (Acariciándole el pelo) ¿Por qué no me dijiste quién era tu novia?
#108
~~~
Entró en el despacho sin llamar y cerró dando un gran portazo.
- Jeremy: (Alzando la vista) ¿Pero qué pasa?
- Pattie: (Enfadada) Fue a propósito ¿verdad?
- Jeremy: ¿De qué hablas?
- Pattie: Lo sabías. Sabías quién era la novia de Justin, y por eso trajiste a Lucy,
¿verdad? Es mentira que su padre quisiera separarla de no sé que mala
compañía. Trajiste aquí a esa cría solo para arruinarle la vida a tu hijo.
- Jeremy: (Poniéndose de pie) Pattie, cálmate.
- Pattie: ¡No! No voy a calmarme. (Y frotándose la cara con las manos) ¿Cómo
no me di cuenta antes?
- Jeremy: Antes que nada… Nada de esto es mi culpa, si Lucy vino aquí por
iniciativa mía o porque su padre me lo pidió no tiene…
- Pattie: ¿Importancia? ¿Vas a decir que no tiene importancia? ¡Vives! ¡Vives
persiguiéndolo! Nada de lo que hace te parece que este bien y todo porque has
querido mantenerlo alejado de lo que tú fuiste de joven. Sus amigos, su novia…
Has querido digitarlo todo y como no has podido le haces creer que hace todo
mal.
- Jeremy: ¡No era tan difícil! Le dije que no se acercara a ella.
- Pattie: (Apoyándose en el escritorio) Se enamoró de ella. ¿No te suena de
nada?
- Jeremy: (Bufando) Por favor… No tiene ni 18 años. En unos días…
- Pattie: ¿En unos días? Estuviste dos años en una Academia Militar por ella. Y
Justin ya lleva una semana sin moverse de la cama por su hija. No tienes
derecho.
- Jeremy: Yo quería evitar esto. Sabía que esto terminaría así, pero él se cree
más listo que yo y vive llevándome la contraria.
- Pattie: No tengo ninguna duda de que Justin es más listo que tú. Esta
sufriendo como no lo ha hecho nunca, pero ni por un segundo se arrepiente de
querer a ____. Ese es tu problema, nunca dejaste el pasado atrás. Vives
arrepintiéndote de haber amado a Teresa y eso solo te hace tenerla
constantemente presente, a ella y a su traición.
~~~
Cuando lo vio entrar por la puerta no estuvo totalmente segura de que fuera él,
pero para cuando se sentó en uno de los taburetes de la barra no le cabía
ninguna duda. De todas formas decidió ignorarlo. Que el padre de Chaz hubiera
decidido pasarse por el bar no la incumbía en absoluto. A pesar de que lo
intentaba no le resultó nada fácil. Había pedido un café y lo estaba tomando en
el mismo sitio, nada fuera de lo común, pero sin embargo, ella no se sentía
cómoda. Tenía la sensación de estar siendo observada, y a pesar de que ahora
podía darle igual lo que pensara ese hombre de ella. No conseguía que fuera
así.
Pasó cerca de una hora, y cuando en el bar no había más que una pareja
sentada en una de las mesas, el hombre se dirigió a ella.
- Martin: Creo que te debo una disculpa.
- Miranda: (Girándose hacia él lentamente) ¿Me habla a mí?
- Martin: (Con media sonrisa) Si. Creo que no hay nadie más cerca.
- Miranda: (Algo cohibida) No sé porque…
- Martin: Mi hermana y yo avergonzamos a Charles cuando te invitó a cenar. Yo
debí darme cuenta de que Jordan se estaba comportando mal, pero…
- Miranda: (Extrañada) ¿Chaz le ha pedido que venga a disculparse?
- Martin: ¿De verdad os gusta llamarlo así?
- Miranda: (Sonriendo) ¿Chaz? (Encogiéndose de hombros) A él le gusta…
- Martin: (Sacudiendo la cabeza) A mi nada, pero bueno… Y con respecto a si
me ha mandado él, no.
- Miranda: Bueno… Gracias por las disculpas, pero tampoco…
- Martin: Intentó decírmelo, pero no le presté atención. Creía que era otro
intentó de echar tierra sobre su tía. Pero me ha hecho darme cuenta de que
estaba equivocado con respecto a Jordan.
Miranda no sabía que decir. No podía decir que no pasaba nada cuando la tía
de Chaz si había sido grosera e insultante con ella, pero tampoco se sentía con
derecho a darle la razón al padre de Chaz cuando se estaba disculpando.
- Martin: Tengo que admitir que no fue por ti por lo que me he dado cuenta de
todo, pero espero que no sea tarde para la disculpa.
- Miranda: ¿Ha pasado algo?
- Martin: ¿Con Jordan? (Miranda asintió levemente) No… Bueno, le he prestado
más atención a su relación con Ela… Y Charles tenía razón. Al ver eso pensé
que también debía tenerla con respecto a ti. (Tras un rato de silencio) ¿Ha
tenido Jordan algo que ver en el hecho de que rompieras con él?
- Miranda: No… (Frunciendo el ceño) ¿Él le ha dicho eso?
- Martin: Ojalá me dijera algo… No. No suelta prenda. Solo sé que habéis roto,
y que desde eso no sale de casa. Se limita a dormir y hablar con Ela.
Miranda se giró hacia la maquina de cafés y fingió limpiarla. No se sentía
cómoda hablando de un tema así con el padre de Chaz, y prefería no tener que
decir nada.
109
~~~
Llevaba horas tocando el piano, y no conseguía cansarse. No paraba de pensar
en Justin, en cuanto le gustaba a él oírla tocar el piano y en lo difícil que se le
hacía recordar la última vez que había tocado para él. Se sintió observada y se
dio cuenta de que su madre estaba apoyada en el umbral de la puerta.
- Teresa: Es increíble lo bien que tocas.
- ____: ¿A ti cómo se te daba?
- Teresa: (Negando con el gesto) No yo no…
Pero no tardó en darse cuenta de que su hija no solo conocía su pasado
amoroso.
- Teresa: (Con media sonrisa) No tan bien como a ti.
- ____: ¿Alguien te pidió que lo dejaras?
- Teresa: No… (Y sentándose al lado de ____) Lo hice por mí misma. Tocar me
traía demasiados recuerdos. (Y acariciándole el pelo) Pero nunca fui tan buena
como tú. Espero que no lo dejes nunca.
- ____: Pienso en Justin constantemente. Aunque no toque el piano.
- Teresa: No puedo decirte que eso vaya a cambiar. Quizá no lo haga nunca.
- ____: Mamá, ¿qué pasó entre el padre de Justin y tú?
~~~
- Anabelle: No podía decirte nada. Entiéndelo.
- Santiago: (Suspirando) Ya da igual.
- Anabelle: La verdad es que me sorprendí mucho cuando Anny me dijo que
estaban juntos. Ella estaba ilusionada, son sus dos mejores amigos.
- Santiago: (Sonriendo) Hasta tu hija se repite en la historia.
- Anabelle: Pero es la versión mejorada. Tendrías que verla con Chaz y Justin, a
ella no le habría pasado lo que a mí.
- Santiago: Tú hiciste todo lo que pudiste. Como nosotros.
- Anabelle: Yo podría haber hecho más.
- Santiago: Mira… Jeremy era un capullo, y sigue siéndolo. Eso no lo podías
cambiar tú en el pasado, ni lo voy a poder cambiar yo ahora. (Y llevándose las
manos a la cara) Solo me gustaría…
- Anabelle: ¿Qué?
- Santiago: Que desapareciera. Él, su hijo, su mujer. No tener que
encontrármelos cada dos pasos. No tener que cuidar a ____ de Casanova
junior.
- Anabelle: (Riéndose) ¿Casanova junior? No me hagas reír Santiago. Tú eras
peor que Jeremy. Sabes que cuando conoció a Teresa…
- Santiago: Si… Lo sé.
- Anabelle: A veces creo que temes por ella y no por ____.
- Santiago: (Alzando la vista) Claro que temo por ella. Tengo miedo de que en
cualquier momento se cruce con él y se vuelva tan loca de amor como la
primera vez.
- Anabelle: Santiago…
- Santiago: Es cierto. Y él también, es un idiota integral, pero sé que la quería.
- Anabelle: (Cogiéndole las manos a Santiago) Teresa no te haría eso.
- Santiago: No es por mí. La quiero ¿vale? Pero nunca ha sido amor. Lo único
que he hecho desde que Jeremy se fue a la Academia Militar ha sido cuidarla.
Le costó mucho dejar de llorar por él, y no quiero que eso vuelva a repetirse.
- Anabelle: Teresa no volvería a enamorarse de él. Es una mujer inteligente
Santiago. No deberías preocuparte.
- Santiago: A veces creo que nunca ha dejado de amarlo.
- Anabelle: ¿Y qué piensas hacer? ¿Tener a ____ encerrada de por vida?
- Santiago: No. Sabes que no puedo hacer eso. Por eso he quedado contigo…
- Anabelle: ¿Qué pasa?
- Santiago: Ana, en dos días Teresa, ____ y yo nos vamos a París.
Anabelle soltó las manos de Santiago lentamente y lo miró atónita. Era la
primera noticia que tenía. Y solo faltaban dos días.
- Santiago: Es lo mejor. ____ podrá entrar en el conservatorio que desea, y
Teresa y yo podremos olvidarnos de los Bieber de una vez por todas.
~~~
No sabía si los motivos que la habían llevado allí eran los más acertados, pero
el hecho de que el padre de Chaz hubiera sido tan amable con ella, le hacía ver
las cosas desde otra perspectiva. Quizá aguantar a la tía gruñona fuera solo
una anécdota más de lo que podía ser toda su historia con Chaz. Quizá sí
hubiera una diferencia entre
ella y el resto de chicas. Quizá él la necesitara realmente.
Era algo tarde, pero cualquier otro día iba a ser a la misma hora, así que había
decidido que cuanto antes, mejor. Llamó a la puerta algo nerviosa.
- Jordan: (Abriendo la puerta) ¿Qué haces aquí?
Miranda se quedó paralizada. Si ya bastante nerviosa la ponía tener que
enfrentarse a Chaz, en ningún momento había querido imaginarse que fuera a
ser Jordan quien le abriera la puerta…
#111
Y volvió a ser la joven de 20 años que solo podía anhelar el lugar que otra
ocupaba. Mientras el teléfono de su escritorio estaba descolgado, y sobre su
escritorio vibraba el teléfono móvil, él se limitaba a dar vueltas alrededor de su
oficina. Intentado una vez más dejar el pasado atrás, intentando olvidar la
frustración de un amor no correspondido… Intentando convencerse de que
amar a Teresa era un error que nunca volvería a cometer.
~~~
Oyó como susurraban su nombre y dio por sentado que solo podía ser una
imaginación, pero el hecho de que se repitiera la hizo mirar en todas
direcciones. Descubriendo que quien la llamaba era ni más ni menos que
Luciana. No dudó en acercarse a ella, a pesar de que verla solo la dejara pensar
en que ella seguía
constantemente al lado de Justin, mientras ella solo iba a verlo una última vez.
- Lucy: Anny me ha llamado y me ha dicho lo que pensabas hacer. Creo que ya
sabes quien soy… (Aventuró algo nerviosa).
- ____: Lo sé.
- Lucy: Anny solo creyó que no te vendría mal algo de ayuda, y como no ha
podido hablar con Justin…
- ____: ¿Le pasa algo?
- Lucy: (Con media sonrisa) Le pasas tú. (Y ladeando la cabeza) Vamos… El
padre de Justin no esta, pero no sé cuanto puede tardar.
- ____: ¿Y su madre? (Mientras la seguía).
- Lucy: Tal y como están las cosas no diría nada, pero si no nos ve mejor.
~~~
Recordaba perfectamente ese edificio. Había estado una sola vez en toda su
vida, pero no había sido un momento que fuera a olvidar con facilidad. Cuando
descubrió que el padre de Jeremy no pensaba dejarlo volver de la Academia,
supo instantáneamente que solo ella podía cambiar eso. Ese día prometió no
volver a acercarse nunca más a Jeremy, aunque nunca había tenido intención
de llevar a cabo esa promesa, el destino había hecho el resto. Volvió a girar el
pomo del mismo despacho que había abierto dieciocho años atrás, aún
sabiendo que repetía el gesto que había sepultado su felicidad.
Al notar que la puerta se abría se giró lo más rápido que pudo. En teoría solo él
y el guarda jurado quedaban en el edificio. Pero como si con todas las veces
que había pensado su nombre en esa noche la hubiera invocado… Fue Teresa
quien apareció al otro lado de la puerta. Hubiera deseado ser grosero o brusco.
Mostrar una vez más todo su desprecio hacia ella, pero no fue capaz. Al tenerla
delante sintió que nada más era necesario, volvió a creer que con que ella
decidiera estar a su lado todo iba a estar bien.
~~~
Quedándose a unos pasos de la puerta, Lucy le indicó cual era la habitación de
Justin. ____ no dudó en acercarse y abrirla. Se quedó de pie en el umbral y
tuvo que hacer un esfuerzo para no sucumbir a las ganas de llorar. Podía ver a
Justin dormido, a solo unos pasos. Se acercó hasta la cama y se arrodilló en el
suelo al lado de su cara. Lucy le había dicho que seguramente se hiciera el
dormido al oírla entrar, ya que era lo que hacía con ella y con su madre, pero
en esta ocasión estaba realmente dormido. ____ tragó el nudo que las lágrimas
contenidas estaban creando en su garganta y le acarició el rostro con
delicadeza.
Abrió los ojos lentamente y le costó enfocar la imagen. Pero en cuanto
reconoció a ____ al lado de su cama se incorporó de inmediato.
- Justin: ____…
Ella intentó decir algo, pero Justin notó que le temblaba el labio inferior. Se
puso de pie para estar a su lado y tentativamente levantó una mano para
acariciarle la mejilla. No tenía ni idea de qué hacía ____ allí, pero el hecho de
que recibiera su caricia cerrando los ojos y acercando la cara a su mano, le hizo
recordar algo que había sabido desde un principio, y es que ella, igual que él,
nunca iba a desear estar lejos. La acercó hacia si y la abrazó con fuerza,
acariciando su espalda y apreciando como nunca que ella le devolviera el
abrazo con la misma intensidad.
~~~
- Jeremy: No deberías estar aquí.
Fueron las primeras palabras que consiguió decir tras lo que parecieron horas
de silencio.
- Teresa: Lo sé. Lo sé mejor que nadie.
- Jeremy: (Dando un paso atrás) No sé que haces aquí.
- Teresa: Tengo algo que decirte. Algo que llevo muchos años sin atreverme a
reconocer.
- Jeremy: No hay nada que…
- Teresa: Te quiero. Siempre te he querido.
Las palabras sonaron simples, pero cayeron sobre la habitación con una fuerza
incalculable. Ni él estaba preparado para oír algo así, ni ella para decirlo.
Volvían a estar frente a frente, y con uno de sus mayores temores convertidos
en realidad.
- Teresa: Cometí el mayor error de mi vida solo porque te quería.
Jeremy permaneció en silencio. Reuniendo fuerzas para echarla, para callarla…
para no oírla; pero a la vez deseando que cada una de sus palabras fuera
cierta.
- Teresa: Pensé que se pasaría. Pensé que Santiago y ____ conseguirían
hacerme olvidar lo que tú y yo fuimos una vez. Pero a pesar de todo lo que los
quiero a ellos…
- Jeremy: ¡Calla! (Rugió dándole la espalda y llevándose las manos a la cabeza)
- Teresa: A pesar de todo he llegado aquí y he comprobado que todo sigue
igual. Que por muy profundo que hayas conseguido que sea tu odio. Lo que
fuimos sigue siendo lo único que da sentido a mi vida.
- Jeremy: No sé que pretendes. Pero es muy tarde. Fue muy tarde a partir del
momento en que me traicionaste.
- Teresa: Yo nunca…
- Jeremy: (Volviéndose hacia ella) ¡Te casaste con mi mejor amigo! (Respiraba
agitadamente) La mujer que amaba se casó con mi mejor amigo a pesar de
haberme jurado amor eterno. (Negando levemente) Tenía 20 años y me
destrozaste. ¿Cómo tienes el valor de…?
- Teresa: (Con los ojos bañados en lágrimas) No ibas a volver. No ibas a volver
a menos que tu padre me viera definitivamente apartada de tu vida.
- Jeremy: (Mascullando) Mientes.
- Teresa: Era solo hasta que volvieras. Íbamos a contártelo todo y… (Sin poder
controlar las lágrimas) Tú tenías que sacarme de todo eso. Santiago confiaba
en ti. Pero nunca nos escuchaste.
Y las ganas de creer que toda su historia no había sido una farsa fueron más
fuertes que el hecho de que todo lo que decía Teresa parecía totalmente
absurdo. Y de repente, el hecho de que ella estuviera llorando parecía lo único
que necesitaba solución en su vida. Por lo que se acercó lentamente a ella y
cogiéndole la cara con las dos manos la besó como si nunca hubiera pasado el
tiempo, como si ella nunca hubiera sido capaz de traicionarlo, como si su amor
volviera a ser lo único importante. Y aunque era tarde, muy tarde… Se dio
cuenta que siempre lo iba a necesitar a su lado. Aunque eso nunca pudiera
suceder, siempre iba a necesitar de Jeremy algo más que una historia pasada.
~~~
Estaba sentado en una esquina de la cama, mientras ella daba vueltas por su
habitación y observaba con atención cada pequeño detalle, preguntándole a
Justin por cada cosa que llamaba su atención. Él contestaba y seguía
observándola sonriente. Tenerla tan cerca era lo único que había deseado
fervientemente durante muchos días.
- ____: (Frunciendo un poco el ceño) ¿Te ríes de mí?
- Justin: (Sonriendo) Para nada… Me encanta que estés aquí.
#112
~~~
Podían haber sido minutos… O horas. No lo sabía, mientras sus labios habían
estado unidos a los de ella había sido como sentirse fuera de su cuerpo. Como
volver a ser el joven de 20 años que en una ocasión solo había podido pensar
en ella día y noche.
- Jeremy: (Separándose lentamente de ella) Teresa…
- Teresa: (Cerrando los ojos ante la caricia en su mejilla) Te echo de menos
cada día. Exactamente como cuando estaba encerrada en aquel internado, paso
las noches soñando con que todo va a terminar y tú vas a estar ahí
esperándome.
Sintió las ganas de protegerla que había sentido la primera vez que la vio. La
primera vez que habló con ella y sintió que era su alma gemela, el momento en
el que descubrió que nunca podría estar bien si ella no lo estaba antes.
- Jeremy: (Abrazándola) No puedo creer que este pasando esto.
- Teresa: (Con la cara apoyada en su pecho) Iba a pasar… Si volvíamos a estar
cerca tenía que pasar. Nuestro amor siempre estuvo por encima de todo…
incluso de nosotros.
Él agachó la cara y volvió a buscar sus labios. No sabía cuanto podía durar ese
sueño, pero iba a sacar de él todo lo que pudiera. Iba a dejar de sentirse
desgraciado cada minuto que ella decidiera regalarle. Y cuando el nombre de
Santiago le vino a la mente, supo que ninguno de los dos lo estaban
traicionando, porque era imposible que él no supiera a quien amaba Teresa. A
quien había amado siempre.
~~~
Aprovechó que Justin había salido de la habitación para dejar la nota sobre la
almohada.
En el momento en que él volvió a entrar en la habitación, ella se acercó a él
para evitar que viera la nota antes de tiempo.
- Justin: (Ladeando un poco la cabeza) No hay moros en la costa…
- ____: (Sonriendo y acercándose) Ojalá pudiera quedarme.
- Justin: (Acercándose a ella y cogiéndole una mano) Ojalá… Pero nos veremos
pronto, no te preocupes. Muy pronto (Y sonrió ampliamente).
Tuvo que hacer un gran esfuerzo para poder tragar y mantener la sonrisa a la
vez, pero él le facilitó la tarea inclinándose para besarla. Una vez en la puerta
no pudo evitar la tentación de abrazarlo. Abrazarlo sabiendo que
iba a ser la última vez que lo haría.
- Justin: (Tras besarla brevemente) Nos vemos pronto.
- ____: (Con una mano entrelazada a la de él) Te quiero.
- Justin: (Sonriendo) Lo sé. Y yo también te quiero.
- ____: (Volviendo a acercarse a él) No lo olvides nunca, Justin, te quiero.
Y lo besó. Lo besó para despedirse, y deseando que algún día, cuando
consiguiera perdonarla, fuera capaz de recordar ese beso.
~~~
Tenía las manos de él entre las suyas y no sentía que nada más hiciera falta. Él
la miraba a los ojos sin rencor, y eso parecía ser suficiente.
- Jeremy: ¿Por qué tengo la sensación de que en cuanto te vayas todo va a
volver a ser un desastre?
- Teresa: Porque así es todo cuando no estamos juntos.
- Jeremy: ¿Y nuestros hijos? (Negando levemente) Es inverosímil… Los vi juntos
y nos estaba viendo a nosotros.
- Teresa: Tienes que apoyar a Justin. Va a necesitarte cuando sepa que ____
se va del país.
- Jeremy: ¿Y qué voy a decirle? ¿Qué no se va a recuperar nunca? ¿Qué a
pesar de estar casado y ser padre seguirá pensando en ella de forma
enfermiza?
- Teresa: (Acariciándole la cara) Jeremy lo siento. Solo he pensado en mí al ir a
buscarte. Tú tienes una mujer y…
- Jeremy: (Poniéndole un dedo en los labios) Lo necesitaba. Necesitaba saber
que sigues siendo mía. Saber que amarte como te amo no esta mal. Aunque
todo esto haya sido solo una despedida.
~~~
Volvió a su habitación y se sentía fuera de sí. Dio un puñetazo al aire
controlando las ganas de gritar de alegría.
Se dejó caer sobre la cama y sonrió abiertamente. Con ____ estaba todo bien.
Y si con ella estaba todo bien lo demás no importaba. Además, ahora sabía que
su madre lo apoyaba. Si habían podido sacar la relación adelante cuando los
cuatro padres estaban en contra, ahora tenía que ser posible, no fácil… Pero si
posible. Al acomodarse en la cama vio el pequeño sobre encima de la
almohada. Se apresuró a cogerlo, solo podía ser de ____. Dentro había solo
una breve nota:
„No importa todo lo que digan nuestros padres, sabes que esto siempre ha sido
amor. Esto siempre ha estado al margen de su historia, y quiero que sepas que
voy a amarte siempre, digan lo que digan y pase lo que pase. Siempre tuya,
____.‟
Leyó la nota varias veces, pero a pesar de que no decía nada malo, un extraño
sentimiento le recorrió el cuerpo, como si no todo estuviera bien… Como si
hubiera algo que él desconociera. Miró el reloj y tardó menos de cinco minutos
en tomar la decisión. Iría a verla. Necesitaba quedarse tranquilo, necesitaba
saber que esa nota
simplemente significaba que lo iba a querer siempre.
#113
La última maleta que tenía que haber hecho antes de irse a dormir seguía
abierta sobre su cama. Debía meter todos los objetos personales que quisiera
llevarse con ella, lo demás iría con el resto de la mudanza. Miró a su alrededor
y nada de lo que veía le era realmente necesario. Hubiera querido tener algo de
Justin, pero solo conservaba recuerdos. Lo más valioso de lo que tenía en esa
ciudad lo llevaba siempre con ella. El hecho de que amaba locamente a Justin y
todos los momentos que habían compartido nunca la abandonarían. Cogió una
foto que colgaba de la pared de ella y Annie varios años atrás. A ella también la
iba a echar de menos, esa forma exaltada de vivir la vida momento a momento,
sus múltiples ofensas por falta de atención. Y sobretodo a la Annie amiga, esa
que nunca había dudado en darle la mano o en ofrecerle su hombro para llorar.
Se sentó en la cama con la foto entre las manos y se dio cuenta de cuanto
significaba no volver a verla. Ni a ella, ni a Justin. Ni siquiera a Chaz o a
Miranda.
Alzó la cabeza al oír un leve golpe contra el cristal y vio como Benja se
asomaba levemente por el balcón.
- ____: (Levantándose) ¿Qué haces aquí?
- Justin: (Acercándose a ella sonriente) ¿Estás bien?
- ____: (Sonriendo) Igual que hace media hora. (Y acariciándole la mejilla)
Acabamos de vernos…
- Justin: Lo sé, pero esa nota… (Y frunciendo el ceño levemente) ¿Te vas de
viaje?
____ giró la cara y vio las maletas cerradas cerca del armario y la que le
quedaba por terminar encima de la cama. Cerró los ojos y soltó el aire
lentamente.
- ____: Si.
- Justin: (Alejándose un poco de ella para mirarla a la cara) ¿Cuándo?
- ____: Mañana. (Y antes de que él pudiera seguir preguntando) A París.
- Justin: ¿Tiene algo que ver con el conservatorio?
____ asintió levemente, y Justin volvió a mirar las maletas. No sabía como
reaccionar.
- Justin: Bueno, pero…
- ____: Me voy para siempre Justin.
- Justin: (Dando un paso atrás) ¿Cómo para siempre?
- ____: Mi padre solo quiere… (Y tomando aire) La nota era una despedida
Justin.
La sonrisa de su rostro terminó de desaparecer. Durante unas pocas horas
había creído que la tenía de vuelta, que tenía una nueva oportunidad. Pero en
lugar de eso la perdía para siempre.
- ____: (Acercándose a él y cogiéndole la cara) Perdóname por favor. No quería
irme sin verte, por eso…
- Justin: Podías habérmelo dicho. Si mañana…
- ____: Lo sé. Pensaba hacerlo pero… Una vez a tu lado no he tenido valor.
- Justin: (Abrazándola) ____…
- ____: (Con la cara en su hombro) No quiero irme Justin. Lo último que deseo
decirte es adiós.
- Justin: (Separándose un poco de ella) Entonces no te vayas.
- ____: Mi padre no va a cambiar de parecer. Esta decidido a…
- Justin: Nos vamos nosotros. Esta noche.
- ____: Justin no…
- Justin: (Asintiendo) Si. Si salimos en unas horas tendremos tiempo de estar
lejos para cuando se den cuenta de que nos hemos ido. Son unos meses ____,
no podrán manejar nuestra vida cuando seamos mayores de edad.
____ lo miró a los ojos sin saber como decirle que eso era un disparate.
Mientras a él la idea lo conquistaba cada vez más.
- Justin: No quiero que nos separen. No así.
- ____: (Separándose aún más de él) Lo siento. No puedo.
- Justin: Ya…
- ____: (Volviendo a acercarse a él) Enserio cariño. En cuanto lo pienses un
poco verías que…
- Justin: (Dando un paso atrás) Yo me iría contigo. Yo haría cualquier cosa solo
porque no me separaran de ti.
- ____: Justin, esto es una locura. Nos encontrarían en nada, ¿y entonces qué?
- Justin: Tú quieres irte.
- ____: No. Yo no quiero irme.
- Justin: Me dijiste que no ibas a ir a ese conservatorio, pero al final…
- ____: (Volviendo a acercarse) No Justin, esto no tiene nada que ver con…
- Justin: (Subiendo el tono de voz) Me hiciste creer que yo era más importante
pero nunca…
- ____: ¿Cómo puedes creer que no eres más importante tú? Me importas más
que nada.
- Justin: (Encogiéndose de hombros) Mientes. Nunca he estado por delante de
tu precioso piano. Ni siquiera por delante de tus padres. Nunca.
- ____: No lo crees. Estas diciendo todo esto, pero…
- Justin: (Respirando entrecortadamente) No tenías que haber venido hoy. No
tenías ningún derecho a hacerme creer que…
Y en ese momento la puerta de la habitación se abrió de golpe. Los padres de
____ estaban al otro lado. La madre cerró los ojos momentáneamente y Justin
supo que estaba sintiendo pena por él.
Santiago empezó a acercarse hacia Justin, pero Teresa lo detuvo cogiéndolo del
brazo.
- Teresa: Santiago no…
- Justin: (Mirando a ____) Querías despedirte ¿no?
- ____: No Justin, yo…
- Justin: Adiós.
Y ante la mirada atónita de los padres de ____, salió corriendo de la habitación
sin decir nada más.
____ cerró los ojos y se dejó caer sentada en la cama, sin poder contener por
más tiempo las ganas de llorar.
Teresa le hizo un gesto a Santiago para que las dejara solas y se acercó
lentamente a ella. ____ se tapó la cara con las manos y siguió llorando.
#114
~~~
Oyó el piano sonar y mirando la copa que tenía en la mano llegó a pensar que
se había pasado de la raya, pero el mismo trozo de melodía se repetía una y
otra vez. Salió de su despacho y se dirigió hacia el salón. Vio a Justin y supo
que nunca iba a poder decirle nada que amainara el dolor que sentía en ese
momento, así como nunca hubo nada que pudiera apaciguar el suyo.
- Jeremy: (Acercándose a su hijo) No sabía que supieras tocar.
Justin lo miró por encima del hombro y acto seguido bajó la tapa del piano y se
levantó. Dispuesto a irse a su habitación sin dirigirle una sola palabra a su
padre, sin embargo este lo paró cuando pasó por su lado.
- Jeremy: Justin…
- Justin: (Molesto) Ese es todo el daño que me hacía (Señalando el piano), has
querido separarme de ella para que no me hiciera daño, pero no tenías ni idea
de cómo era lo nuestro. Ahora puedes estar contento. Porque no queda nada.
Observó a su hijo subir las escaleras enfadado y siguió sin saber que decir, era
imposible que su historia no pesara sobre la de él. Era imposible que no hubiera
sentido miedo por Justin después de lo que había sido su propia experiencia.
Por muy equivocado que hubiera estado.
~~~
Había llamado a Annie solo para despedirse por última vez. Solo para distraerse
del hecho de no poder pensar en otra cosa que no fuera Justin.
- ____: Anny… No puedo irme.
- Annie: Es duro ____, pero…
- ____: No puedo por él.
- Annie: Justin lo va a entender. Ahora estará enfadado. Pero ya verás como en
unos días va a estar ingeniándoselas para llamarte.
- ____: No es suficiente Anny.
- Annie: Pero no puedes hacer otra cosa ____.
- ____: Anny… Tienes que hablar con él ahora.
- Annie: Pero ___…
- ____: Llámale y dile que me iré con él. Que haré lo que haga falta.
- Annie: ____… Es una locura, no…
- ___: Por favor Anny…
~~~
Había pasado cerca de media hora desde que Justin se había ido a su
habitación. Era tarde, sin embargo él seguía dando vueltas por el salón, sin
poder dejar de pensar en su despedida con Teresa. En todo lo que había
descubierto esa noche. Y todo lo que implicaba.
- Pattie: (Atándose el cinturón de la bata) Deberías ir a dormir.
- Jeremy: (Girándose hacia ella) Estoy desvelado.
Su mujer miró la copa que llevaba en la mano sin aprobación y se acercó a él
para quitársela.
- Pattie: Ya… Y te has propuesto quedarte inconsciente a base de alcohol.
Jeremy observó como su mujer dejaba la copa sobre uno de los muebles y se
volvía hacia él nuevamente.
- Pattie: Jeremy…
- Jeremy: (Con media sonrisa) Ya esta. Tranquila.
- Pattie: ¿Qué esta? Sabes que yo…
- Jeremy: (Acercándose a ella y cogiéndole las manos) Sé que harías cualquier
cosa por mí.
Ella asintió levemente y estrechó aún más fuerte las manos de su marido.
- Jeremy: He estado con ella. Hoy.
Pattie no pudo evitar que el miedo la invadiera. Teresa había sido una fantasma
constante en su matrimonio, y aunque el tiempo había ayudado a alejarlo cada
vez más, la historia de Justin y ____ lo había traído de vuelta. Era imposible no
tener miedo de alguien que no necesitaba estar cerca de su marido para ocupar
todos sus pensamientos. Se conmovió ante el gesto de su esposa y le acarició
una mejilla en un intento de reconfortarla.
- Jeremy: Creo que he conseguido dejar el pasado atrás.
- Pattie: No sé que quieres decirme con eso Jeremy, pero…
- Jeremy: Siempre pensé que en el momento que dejara de odiarla, todo
volvería a ser como antes. Que volvería a pensar en ella a todas horas, que
simplemente desearía tenerla a mi lado… Costase lo que costase. (Y negando
levemente) Pero no es así.
Abrazó a Pattie haciendo que apoyara la cabeza en su pecho y continuó
hablando.
- Jeremy: He dejado de odiarla y me siento bien. Al fin me siento bien para ser
el marido que te mereces. (Sintió que ella intensificaba el abrazo y sonrió)
Siento mucho por todo lo que te he hecho pasar.
- Pattie: (Aún abrazada a él) Te quiero. Te quiero lo suficiente como para que
no me importe que una parte de ti vaya a ser siempre de ella, pero necesito…
- Jeremy: Te quiero.
Y pudo sonreír mientras se inclinaba para besarla, porque por primera vez en
mucho tiempo supo que no estaba fingiendo. Amaba a su mujer. La amaba por
ser la madre de Justin, la amaba por estar siempre a su lado, la amaba por ser
simplemente como era. Y todo eso no tenía nada que ver con lo que una vez
había sentido por
Teresa, algo que siempre llevaría con él, algo que no iba a morir nunca.
~~~
Había decidido ir a buscarla a su casa porque quería darle la oportunidad de
arrepentirse. A pesar de que en el momento en que Annie lo había llamado
para decirle que ____ estaba dispuesta a irse con él se había sentido la persona
más feliz del mundo. No quería que lo hiciera por obligación, no quería que se
sintiera presionada.
Justin le sonrió al verla salir de su casa. Esperó a que ella se le acercara y la
besó en los labios.
- Justin: Perdóname.
- ____: (Sonriendo) Estaba asustada. Eso es todo.
- Justin: ____… Si no quieres…
- ____: (Poniéndole un dedo en los labios) No. Ni lo digas. Estoy segura de lo
que estoy haciendo. (Y mirándolo a los ojos) De verdad.
Justin asintió y la tomó de la mano para dirigirse hacia donde Annie y Chaz los
esperaban con el coche. Contaban con un par de horas hasta que los padres de
____ fueran a despertarla. Para entonces estarían lo suficientemente lejos
como para que no dieran con ellos.
~~~
Desde que se habían alejado de Chaz y Annie, un silencio abrumador se había
cernido sobre ellos. No era incómodo, pero era imposible de ignorar. Miró por
enésima vez a Justin de reojo. Estaba concentrado en conducir, y nadie hubiera
dicho que pudiera tener ningún tipo de preocupación, aunque ella sabía que así
era.
Volvió a preguntarse quien le habría enseñado a conducir, y a temer que los
pararan antes de llegar a su destino, ya que él no tenía permiso de conducir y
siendo menores, lo primero que harían sería avisar a sus padres. Miró la hora
en el salpicadero del coche. Siete y tres minutos.
- ____: Deben estar a punto de despertarme.
Justin giró la cabeza un segundo hacia ella y acto seguido miró también la hora.
- Justin: (Mirando a la carretera) ____ si…
- ____: No. (Atajó ella) Es solo que… Sé hace real. (Y sonriendo de forma
tranquilizadora) Pero eso es bueno. Si la realidad es que estoy contigo, es
bueno.
~~~
En el momento que vio a Vanessa dirigirse hacia ellos con el gesto serio, supo
que algo no iba como debía. Dejó la taza de café sobre la mesa.
- Teresa: ¿Y _____?
- Vanessa: La señorita no… (Y respirando profundamente) La señorita _____ no
esta.
Santiago levantó la vista del periódico y miró extrañado a la mujer.
- Santiago: ¿Cómo que no esta? (Y mirando a su mujer) ¿Ha salido al jardín?
Teresa negó levemente y cerró los ojos a la vez que suspiraba largamente.
____ se había fugado. Con Justin. No tenía ninguna duda al respecto.
- Santiago: Teresa…
- Teresa: Se ha ido Santiago. Y se ha ido con Justin.
~~~
Se había levantado mientras su marido aún dormía profundamente. Como
muchas otras veces, sintió la
necesidad de ir a ver que Justin estaba bien. Sin embargo se encontró con que
él no estaba. A pesar de que todo le decía que esa vez era distinto, se quedó
sentada en el salón. Esperando a oír cualquier tipo de ruido para comprobar si
Justin había vuelto. Pero pasaban las horas y la casa estaba sumida en el más
absoluto de los silencios. Cuando a las siete y media de la mañana sonó el
teléfono, tuvo la confirmación de que esa vez, nada tenía que ver con las
anteriores. Esa vez Justin no iba a volver a escabullirse entre sus sábanas para
que no descubrieran que había salido. Entró en la habitación sin ningún tipo de
consideración ante su marido que aún
dormía. Abrió las puertas del armario con fuerza y dejó que los cajones
golpearan al cerrarse. Fue el portazo del baño lo que hizo que Jeremy levantara
la cabeza y preguntara aún algo dormido.
- Jeremy: ¿Pattie estas bien?
~~~
Debía haber supuesto que las vagas evasivas que le había dado a su madre
cuando le preguntó si sabía algo de la fuga de Justin y ____ no iban a servir de
nada. Y allí estaba, en el coche con su madre, terriblemente indignada y
sepultadas por un silencio insoportable, de camino a casa de Chaz. Eran casi las
nueve de la mañana y ella no podía parar de rezar porque ____ y Justin
hubieran llegado ya a su destino. En cuanto llegaron, se encontraron con todos
precariamente reunidos en la puerta de la casa. Y como se había temido Annie,
Chaz era el centro de todas las miradas. Al acercarse, Santiago fue el primero
en caer en la presencia de ellas.
epilogo
15 años después…
Entró en casa y observó con desconfianza el tranquilo entorno. Un silencio así
solo podía significar que la casa estaba sola. Dejó la maleta en la entrada y se
asomó a la cocina. No había nadie. Llegó hasta su habitación y abrió la puerta.
- Miranda: Shhh…
Chaz sonrió y se acercó a ella despacio. Movía la cuna lentamente mientras
acariciaba el vientre de su bebé. Sin embargo, Miranda no le dejó terminar de
acercarse.
- Miranda: (Susurrando y dejando de mover la cuna poco a poco) Vamos fuera.
Obedeció sin dudarlo y la siguió mientras ella salía de la habitación. Llegaron al
cuarto de estar y no tardó en darse cuenta de que a pesar de que llevaba una
semana fuera de casa, no era un agradable recibimiento lo que le esperaba. Vio
como ella cogía su bolso de un perchero y se giraba hacia él con la menos
simpática de todas sus expresiones.
- Miranda: Voy a recoger a Hannah. Tu hermana ha tenido que hacerse cargo
de ella.
- Chaz: Miranda, sabes que…
Pero antes de poder terminar de explicarse, ella se dio la vuelta y con un
sonoro portazo salió de casa. Cerró los ojos y miró al techo mordiéndose el
labio inferior. Sabía que no se había tomado bien el retraso del vuelo, pero no
hubiera esperado que se lo hubiera tomado tan mal. No tardó en oír el llanto de
Patrick, por lo que se dirigió hacia la habitación.
- Chaz: (Cogiendo al bebé en brazos y sonriendo) No debería hacer esto y lo
sabes.
Patrick tenía ya seis meses, y aún no habían conseguido que durmiera toda una
noche del tirón. Se habían propuesto ignorarlo cuando se despertaba llorando,
pero para Chaz era imposible, y más de una noche había comprobado que si
Miranda lo creía dormido a él, se levantaba a acunar al bebé. Había tenido un
viaje de nueve horas de avión y no había conseguido dormir nada, por lo que
se tumbó en la cama con Patrick. Ninguno de los dos tardó en quedarse
dormido.
~~~
Salió de la clínica con una sonrisa dibujada en el rostro. No podía mentirse y
decir que no había soñado mil veces con ese momento, sin embargo nada
podía compararse con la realidad. La noticia de que iba a ser madre la
embriagaba por completo. Su padre no iba a poner muy buena cara. Zack y ella
ni siquiera estaban casados.
Se habían conocido cuando ella tenía solo dieciocho años, pero desde entonces
había llovido mucho. Su primer intento de relación a distancia había sido un
completo fracaso, y habían pasado años sin saber el uno del otro. A pesar de
todo, su vuelta definitiva a la ciudad hace cuatro años, había supuesto su
reencuentro con él y había comprobado eso de que el primer amor nunca se
olvida. Sin embargo, no fue Zack en quien pensó cuando la idea de empezar a
difundir la noticia cruzó su mente.
~~~
Se había levantado más temprano que nadie, y desde entonces no paraba de
sonar el piano.
- Justin: Cariño… Llevas horas aquí, ¿por qué no descansas un rato?
- Effy: Es que no me salé (Contestó con un mohín), y el abuelo llegará pronto.
- Justin: (Riéndose) Al abuelo le parecería que suena perfecto así.
- Effy: (Gritando) ¡Mamá! ¡Ven!
Justin le besó la cabeza negando levemente. No solo le ignoraba
deliberadamente sino que en breves ____ se sumaría al concierto. Se encaminó
hacia el jardín mientras Effy seguía llamando a su madre. Vio a ____ apoyada
en un árbol, lo suficientemente lejos de la casa como para que los gritos de Effy
fueran imperceptibles, por lo que se acercó a ella.
- Justin: (Acariciándole el cuello) Te llama tu hija.
- ____: (Frunciendo el ceño) ¿Pasa algo?
- Justin: Quiere ayuda con una partitura creo…
- ____: (Sonriendo) Como tus padres sigan visitándonos tan a menudo, va a
ser una virtuosa del piano antes de cumplir los 8 años.
- Justin: Ha salido a ti, así que lo hubiera sido de todas formas.
- ____: (Alejándose de él) Pelota…
Al poco de que ____ se sentara al lado de Effy, el timbre de la puerta de
entrada sonó y Justin pasó cerca de ellas para atender. Eran sus padres.
- Pattie: Cariño… (Y se acercó a Justin hasta abrazarlo).
- Justin: Hola mamá (Saludó mientras la besaba en la mejilla, y mirando a su
padre) Pasar, Effy esta peleando con alguna canción nueva para sorprenderte.
- Jeremy: Tengo ganas de verla… ¿Y ____?
- Justin: (Haciendo un gesto hacia la sala) Con ella.
Nada más entrar en el cuarto de estar, la pequeña interrumpió lo que estaba
haciendo y salió corriendo hacia sus abuelos paternos. Justin se alejó
levemente y los dejó disfrutar de la bienvenida de su nieta. Se acercó a _____ y
le apoyó las manos en los hombros. Ella puso sus manos sobre las de él
mientras contemplaba la escena.
- Pattie: (Acercándose a ellos) Cualquiera diría que llevan solo tres semanas sin
verse.
- ____: (Sonriendo) Tiene locura con su abuelo. En París no paró de hablar de
él. Papá estaba celoso.
- Pattie: ¿Qué tal están tus padres?
- ____: Bien. Muy bien. Quieren que vayamos más a menudo. Como siempre.
- Pattie: Lo entiendo. Ni Jeremy ni yo aguantaríamos viendo a la pequeña solo
tres veces al año.
- Justin: (Sonriendo) Claro, porque sin verme a mí todo bien…
- Pattie: (Frunciendo el ceño) No seas payaso.
Effy se acercó con Jeremy de la mano y obligó a todos a alejarse del piano para
que ella pudiera sentarse a tocar. En ese momento sonó el teléfono móvil de
Justin, por lo que se apartó un poco para atender. Cuando volvió se acercó
primero a ____.
- Justin: Era Anny… Quiere que nos veamos urgente, ¿te importa?
- ____: (Sonriendo) Para nada. ¿Vendrás a comer?
- Justin: (Asintiendo) Si. Le he dicho que estaban mis padres, pero ha insistido
en que sería solo un momento. Me tiene que decir algo importante parece ser.
- ____: (Acariciándole la mejilla) Tranquilo en serio… (Y tras besarle en los
labios) Ve.
Sonrió inconscientemente. Cuando de jóvenes habían decidido darlo todo solo
por estar juntos nunca se había planteado realmente su vida con ella. Una vida
con hijos, una vida con ella como esposa. Pero la realidad era que no había
podido resultar más perfecto. Pasaba el tiempo, pero él seguía sintiendo que
mientras _____
estuviera a su lado, todo estaría bien. Se despidió de sus padres y se fue
tranquilo. Años atrás nunca hubiera dejado a _____ sola con sus padres. No
cuando ellos habían pasado de odiarla por su apellido a responsabilizarla de que
su único hijo se hubiera ido de casa. Pero las cosas habían cambiado.
~~~
Llegó a la plaza donde los había citado y los vio sentados uno al lado del otro
en un banco. Justin echó la cabeza para atrás y rió con ganas. Como siempre
que hacía cuando pasaba más de cinco minutos hablando con Chaz, como
seguramente ella estuviera haciendo si pudiera seguir la conversación. Podían
haber cambiado en aspecto, pero seguían siendo sus dos mejores amigos.
Vestían pantalones de vestir y camisas de manga corta, nada que ver con los
vaqueros desgastados y las camisetas de estridentes colores que hubieran
llevado quince años
atrás. Pero seguían siendo los mismos. Se acercó a ellos con paso más seguro
que nunca, y sonriendo.
- Chaz: (Poniéndose la mano de visera) Y apareció… ¿Lo de la espera ha sido
por darle emoción al asunto?
- Annie: (Frunciendo el ceño) Lo de la espera ha sido porque aparcar en esta
zona es imposible.
- Justin: (Riéndose) Anny… Omite lo de esta zona, lo imposible para ti es
aparcar.
- Annie: Ja, ja… Todavía me voy sin contaros nada.
- Chaz: ¡Ey! Que el que te ha vacilado ha sido él. A mí no me dejes con la
intriga, que luego a ver quien convence a Miranda de que no le estoy ocultando
algo.
- Annie: ¿Preparados?
Los dos se miraron tentados de reírse pero antes de poder hacerlo la rubia
siguió hablando.
- Annie: Me voy a casar.
Se giraron hacia ella a la vez y la miraron sorprendidos, aunque la noticia no
fuera una gran sorpresa por lo predecible que era.
- Justin: ¡Enhorabuena! Al fin se decidió el monitor…
- Annie: (Negando) Mejor dicho… No me voy a casar, voy a proponerle que nos
casemos.
- Chaz: (Abriendo mucho los ojos) ¿Cómo?
- Annie: Pues pidiéndoselo. Ponerme de rodillas espero que no sea necesario.
- Chaz: ¿Pero por qué? Quiero decir…
- Annie: Sois los primeros en saberlo.
- Justin: Bueno… Estáis muy bien juntos. A mí me parece muy buena idea.
- Annie: No. Lo del matrimonio no. Bueno… En realidad si, eso también, pero
hay más.
- Chaz: (Frunciendo el ceño) No…
- Annie: (Asintiendo risueña) Si!
- Justin: ¿Qué?
- Chaz: (Más sorprendido aún) Esta embarazada.
Justin volvió a girarse hacia ella con el rostro desencajado. Ella seguía de pie
delante de ellos, sonriendo como nunca la había visto sonreír, y evidentemente
esperando una reacción. Se levantó y la abrazó con fuerza. Consiguiendo
reaccionar para sonreír.
- Justin: Vas a ser una madre perfecta.
- Annie: Teníais que ser los primeros en saberlo.
- Chaz: (Poniéndose de pie también) El monitor te va a odiar por esto.
- Annie: (Separándose de Justin) No creo… (Y encogiéndose de hombros) Y
sino ya se le pasará.
Chaz sonrió y se acercó a ella para darle un beso en la frente.
- Chaz: Enhorabuena!
- Annie: (Sonriendo) Gracias.
Y se abrazó a los dos con fuerza. Siempre podría contar con ellos, y ellos
siempre podrían contar con ella. Siempre estarían a su lado.
Fin