Cambio Climátoco - Impacto Sobre El Istmo de Panamá
Cambio Climátoco - Impacto Sobre El Istmo de Panamá
Cambio Climátoco - Impacto Sobre El Istmo de Panamá
El uso de combustibles fósiles genera emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y lluvia
ácida a la atmósfera, que producen graves daños sobre los ecosistemas. El cambio climático se
constituye en una de las principales amenazas al futuro de la humanidad. Los daños que el cambio
climático puede ocasionar a nuestro país y al mundo en general implican:
Al conocerse los objetivos del Protocolo de Kioto, la reducción de las emisiones de GEI tomó
un valor económico. Para ayudar a los países a identificar sus objetivos de emisión, y para apoyar
al sector privado y a los países en desarrollo a que contribuyan a los esfuerzos de reducción de las
emisiones, los negociadores del Protocolo de Kioto consideran en su artículo 12 la figura del
Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL). El propósito del mecanismo para un desarrollo limpio es
ayudar a los países en desarrollo a lograr un desarrollo sostenible y contribuir al objetivo del
Protocolo, así como ayudar a los países industrializados a dar cumplimiento a sus compromisos
cuantificados de limitación y reducción de las emisiones, contraídos en virtud del Protocolo.
El propósito del mecanismo para un desarrollo limpio es ayudar a los países en desarrollo a
lograr un desarrollo sostenible y contribuir al objetivo del Protocolo, así como ayudar a los países
industrializados a dar cumplimiento a sus compromisos cuantificados de limitación y reducción de
las emisiones, contraídos en virtud del Protocolo.
A nivel mundial, se ha observado que en los últimos 100 años el nivel medio del mar se ha
elevado de 10 a 20 cm, con un ritmo de aumento de 1-2 mm/año, lo que conduce a un aumento
de 10 veces más de lo observado en los últimos 3,000 años. Este aumento puede estar relacionado
con un aumento de 0.6 +/- 0.2 ºC en la temperatura media mundial de la capa inferior de la
atmósfera desde 1861, condición que podría considerarse como uno de los factores que ejerce
mayor influencia en los cambios climáticos.
En la actualidad, es posible observar los efectos relacionados con el cambio climático, a través
del calentamiento de las temperaturas de la superficie del mar, la fusión del hielo de los mares,
una mayor evaporación y cambios en la red alimentaria marina. En tanto que para el año 2100 los
modelos proyectan que los niveles del mar se elevarán otros 9 a 88 cms, a raíz de la expansión
térmica del agua oceánica en proceso de calentamiento y una afluencia de agua dulce de los
glaciares e hielos en proceso de fusión. Sin embargo, la velocidad, magnitud y orientación del
cambio en el nivel del mar habrá de variar según el lugar y la región, en función de las
características que presenta la línea de costa, los cambios en las corrientes oceánicas, las
diferencias en las pautas de mareas, la densidad del agua del mar, así como los movimientos
verticales de la propia Tierra
Aunado a lo anterior, en las últimas décadas las costas se han modificado y urbanizado
intensamente, lo que las hace aún más vulnerables a un aumento en el nivel del mar. Condición
que resulta en que los países en desarrollo, que cuentan con economías e instituciones más
débiles, queden expuestos a los riesgos más graves.
Según registros locales, en las costas panameñas del mar Caribe, el ascenso del nivel del mar,
para el periodo 1909-1984, registró una tasa de 1.3 mm/año (Cubit, 1985), cifra comparable con
los valores observados a nivel global. Además, se pronostica un incremento en un orden de
magnitud, para los próximos 50 a 100 años, con lo cual se estima que el ascenso del nivel del mar
sufrirá un aceleramiento significativo durante el próximo siglo (Wigley y Raper, 1992).
En la actualidad, Panamá, se prepara para hacerle frente al Cambio Climático elaborando una
Estrategia Nacional al 2050, la cual busca establecer una hoja de ruta que nos conduzca hacia una
economía baja en carbono con acciones de mitigación y adaptación.
Para poder mitigar el cambio climático es necesario contar con políticas y medidas nacionales
que procuren el desarrollo y acceso a tecnologías limpias en los sectores productivos humanos
considerados como las fuentes de emisión de GEI: Energía, Industria, Transporte, Agricultura,
Ganadería y la Generación de desechos. Así como también, acciones que incidan en la gestión
sostenible de los ecosistemas forestales, quienes tienen la capacidad de absorber carbono en su
biomasa aérea, suelo y productos y almacenarlos, de forma permanente, siempre y cuando no
sean intervenidos o sean objetos de impactos naturales.
Las precipitaciones en Panamá son por lo general altas, pero difieren de una vertiente a otra.
En la vertiente del Caribe, las precipitaciones son en promedio de 3,000 mm anuales, por lo que
prácticamente no existe estación seca, y en la vertiente del Pacífico, son de 1,500 mm anuales, con
una estación seca muy marcada de diciembre a marzo. (ANAM, 2010).
Los sectores que más emiten GEI en el país son el sector Energía y el sector Agricultura,
Silvicultura y otros usos de la tierra. Desde el año 2004, el país ha establecido incentivos para
fomentar sistemas de generación eléctrica a partir de fuentes renovables y limpias como la Ley No.
45 de 2004 e incentivos específicos para tecnologías eólicas y solares por medio de Ley No. 44 de
2011 y Ley No. 37 de 2013, respectivamente.
El sector transporte, genera la mayoría de las emisiones de GEI del sector energía, y el
principal consumidor de derivados de petróleo y el aumento del parque vehicular en un 33% entre
los años 2005 y 2010.
Los tres gases de efecto invernadero que más se emiten es el CO2, seguido del metano (CH4) y
el Oxido Nitroso (N2O). A medida que transcurren los años, la proporción del CO2 en las emisiones
totales se está incrementando. El sector que muestra el 100% de las absorciones, es el sector
AFOLU, reflejando emisiones de 4,083, 5,445.9 y 3,199.7 t CO2 para 2005, 2010 y 2013
respectivamente.
Para que los agricultores logren ser más competitivos y enfrentar los desafíos que se
presentan frente al cambio climático se deben buscar alternativas como el uso de materia
orgánica (compost), la diversificación de la producción en las fincas de los pequeños y medianos
productores; en el caso de la ganadería, establecer árboles en los sistemas de producción
tradicional, el establecer pastos mejorados. La producción ganadera genera emisiones
provenientes de la fermentación entérica y emisiones de metano (CH4) y óxido nitroso (N2O),
resultado de los sistemas de gestión de estiércol del ganado.
El sistema digestivo rumiante de los vacunos constituye una fuente importante de CH4 en las
emisiones nacionales de GEI. Una gestión sostenible de estiércol del ganado tiende a producir
menos emisiones de metano que la fermentación entérica. Las emisiones más significativas se
asocian con las operaciones de gestión de animales confinados, en la que el estiércol se maneja
por medio de sistemas en líquido.