Gordofobia Existencia de Un Cuerpo Negado
Gordofobia Existencia de Un Cuerpo Negado
Gordofobia Existencia de Un Cuerpo Negado
cr/derechoshumanos
Recibido: 26-8-2020 • Aceptado: 25-11-2020
Gordofobia: existencia de un
cuerpo negado. Análisis de las
implicaciones subjetivas del
cuerpo gordo en la sociedad
moderna
Resumen
El presente manuscrito tiene como finalidad propiciar la reflexión en torno a la construcción
social del cuerpo gordo, desde el análisis de la gordofobia como un elemento de aprendizaje
psicosocial que tiene como fin la categorización de la valía personal, propiciando un posicio-
namiento diferenciado para las personas cuyas corporalidades no están determinadas dentro
de las rígidas estructuras de la estética actual. Los aprendizajes sobre el cuerpo tienen efectos
diferenciados sobre la vida de las personas; la construcción de género, las enseñanzas sociales
y la influencia de la legitimación familiar del discurso discriminatorio son algunos de los me-
canismos por los que la gordofobia permea la autopercepción corporal e influye en la forma
en la que nos tratamos e interactuamos con los demás. Aceptar la diversidad corporal en la
región latinoamericana no solo tiene que ver con el reconocimiento de las formas de nuestros
cuerpos, sino también, con la aprobación de la herencia histórica de nuestro mestizaje. Siendo
esta una reivindicación pendiente que se ve asediada por la influencia de la moda, el mercado
y la mirada heteropatriarcal sobre el cuerpo.
Abstract
The present manuscript is intended to encourage reflection on the social construction of fat body,
from analysis of fatphobia as an element of psychosocial learning that aims at categorization
of bodies, promoting a differentiated positioning for people whose bodys are not determined
within rigid structures of current body aesthetic. Learning about the body has different effects
on people’s lives. The gender construction, social learning and family´s legitimization of
discriminatory discourse is some of the mechanisms by which fat-phobia permeates bodily
self-perception and influences the way we treat and interact with each other. Recognizing
Latin American body diversity not only has to do with recognizing the forms of our bodies,
but also has to do with recognizing and accepting the historical heritage of our blending. This
is a pending claim by fashion influence, the market and the heteropatriarchal look on the body.
Resumo
O presente artigo tem como objetivo incentivar a reflexão sobre a construção social do corpo
gordo, a partir da análise da fatfobia como elemento de aprendizado psicossocial que visa à
categorização dos corpos, promovendo um posicionamento diferenciado para pessoas cujos
corpos não são determinados dentro do rígido estruturas da estética corporal atual. Aprender
sobre o corpo tem efeitos diferentes na vida das pessoas. A construção de gênero, a aprendizagem
social e a legitimação familiar do discurso discriminatório são alguns dos mecanismos pelos
quais a gordura-fobia permeia a autopercepção corporal e influencia a forma como tratamos
e interagimos uns com os outros. Reconhecer a diversidade corporal latinoamericana não tem
apenas a ver com o reconhecimento das formas de nossos corpos, mas também tem a ver com
o reconhecimento e aceitação da herança histórica de nossa fusão. Esta é uma reivindicação
pendente por influência da moda, o mercado eo olhar heteropatriarcal sobre o corpo.
Introducción
Uno de los elementos sociales que ha emergido con gran fuerza a partir de los
avances médicos y tecnológicos está relacionado con la estética corporal. La
concepción del cuerpo desde parámetros físicos posiciona a los sujetos de forma
diferenciada dentro de las sociedades, donde los simbolismos asociados al cuerpo
potencian la aceptación y la admiración social.
La belleza corporal es un concepto que debe ser entendido desde la lógica capitalista
como un importante símbolo que “hace vender”. Por lo que la industria (sobre todo
de la moda y la perfección) ha necesitado “liberar y emancipar”, en una palabra
“redefinir” el cuerpo (Baudrillard, s. f. citado en Martín, 2002). Las trasformaciones
físicas son el resultado de un proceso de asimilación de la demanda social por la
construcción de figuras estilizadas, de modo que la lógica en la “venta corporal”
está relacionada no solo a parámetros heteronormativos, sino, además, a estructuras
sexistas y discriminatorias que relegan a las corporalidades disidentes a espacios
de ocultamiento y conmiseración.
Sentirse una persona gorda configura un estado mental propiciado desde la cons-
trucción de patrones culturales que sobrevaloran la delgadez corporal y que la
legitiman dentro de las diversas interacciones sociales, de modo que la adheren-
cia a los aprendizajes relacionados con el peso, el color, el tamaños y las formas
correctas, aceptadas y validadas en una sociedad repercuten de forma directa o
indirecta en la relación establecida entre los sujetos, sus esquemas mentales y el
cuerpo real en el que se habita.
La teoría del aprendizaje plantea que el individuo va adquiriendo una conducta desde
su niñez, por medio de observación e imitación; estas observaciones comienzan en
el entorno más cercano que es el de la familia y van externalizando a otros contextos
como lo es la escuela y los grupos pares (Darling y Cumsille, 2003).
De este modo, establecemos una relación direccional entre los aprendizajes deri-
vados de los mensajes de aceptación o rechazo corporal emitidos por el sistema
social, las figuras primarias y el círculo cercano, con relación al cuerpo propio y
al ajeno. Estos mensajes se dan de forma consciente o inconsciente a través de
las construcciones simbólicas de la gordura en sociedad, el lenguaje verbal y no
verbal, se expresa, además, a través de silencios, patrones conductuales, relaciones
sociales, chistes, entre otros.
Los mensajes tácitos o directos relacionados con el cuerpo impactan de forma di-
ferenciada el proceso de construcción del yo de mujeres y hombres en esta etapa,
independientemente, del país en el que viva, dado que la educación sexo-genérica
les posiciona de manera desigual de cara a las exigencias sociales demandadas
sobre el cuerpo para unas y otros dentro de nuestros países.
Sin embargo, en la vida adulta, la relación con el cuerpo no dista mucho de las
experiencias adolescentes. Múltiples son los ejemplos de casos de acoso laboral
que incluyen de forma explícita comentarios despectivos asociados a las habili-
dades profesionales de los sujetos medidos desde parámetros gordofóbicos; y es
que pareciera que llamar gorda a una persona constituyera una ofensa planificada
con el objetivo de lastimar.
Estamos tan habituados a reconocer que la gordura corporal está mal, que se nos
complica aceptarnos gordos, o determinarlo en el otro, de modo que empleamos
diminutivos que buscan suavizar un hecho ineludible: el cuerpo gordo es negado,
pues admitir su existencia propicia la tolerancia de una diversidad física que no es
atractiva a la mirada heteropatriarcal, que no aporta significativamente al sistema
económico, pues se parte de la noción del organismo enfermo que necesita ser
atendido y que por ende, no es suficientemente capaz de cumplir con las exigen-
cias productivas actuales y además, que no tiene un espacio positivo dentro de
las representaciones sociales, pues la gordura, en todas sus formas, se encuentra
Si bien, existe una tendencia global por homogenizar los patrones corporales desde
la construcción de una realidad donde solo importan los cuerpos delgados, prin-
cipalmente desde nuestro contexto geopolítico, es necesario reflexionar sobre la
intencionalidad con la que estos mensajes son emitidos, pues responden a intereses
económicos y políticos de carácter dominante que son trasmitidos y legitimados
a través de múltiples medios, siendo la educación formal y no formal el principal
canal de difusión y herencia de los estándares de comportamiento y vinculación
de los sujetos consigo mismos, su círculo primario y su entorno.
Conclusiones
El uso de la imagen del cuerpo gordo está adscrito a una categoría indeseada, el
físico no delgado, salido del molde estético dominante, establece carencias de
Por último, es necesario enfatizar en que son los aprendizajes asociados al cuerpo
los que determinan la relación que los sujetos establecen con él. De ahí que exista
una responsabilidad ineludible en los procesos educativos que se desarrollan en
el ámbito privado, en las familias con niñas, niños y adolescentes, y aún más sig-
nificativos dentro de los procesos educativos en el nivel institucional.
Referencias
Álvarez, C. (2014). La cerda Punk. Ensayos desde un feminismo gordo, lesbiko, antika-
pitalista y antiespecista. Trio Editorial. https://n9.cl/hdd1
Darling, N. y Cumsille, P. (2003). Theory, measurement, and methods in the study of family
influences on adolescent smoking. Addiction. (98) 1. 21-36. https://bit.ly/3oXXZEM