PSICOANALITICA
PSICOANALITICA
PSICOANALITICA
CARNE: 202205281
AÑO: 2022
LA TERAPIA PSICOANALÍTICA
Cada psicoanalista personaliza la terapia en función de las necesidades del paciente, pero la
mayoría de los terapeutas tienen en cuenta una serie de principios básicos, entre los cuales
se encuentran los siguientes:
La terapia psicoanalítica se plantea como una terapia a largo plazo que pretende conseguir
una reestructuración profunda y duradera de la psique del paciente, mediante
modificaciones relevantes de la personalidad y las emociones de la persona, para mejorar su
autoconocimiento y calidad de vida.
Los terapeutas usan el diálogo constante con el paciente y procuran que se sienta cómodo y
seguro, para que pueda expresar todo lo que siente mientras el terapeuta escucha con
atención.
El psicoanalista debe prestar atención a las reflexiones y los pensamientos en voz alta del
paciente. Para ello, usa diferentes técnicas y estrategias que le permiten detectar las causas
de sus preocupaciones y hacer emerger el inconsciente. Estas técnicas son:
La asociación libre: consiste en dejar que el paciente exprese todo lo que se le pase
por la cabeza sin censurar ni cortar sus pensamientos o recuerdos.
La transferencia terapéutica: es el proceso por el cual el paciente transfiere
emociones, sentimientos y creencias que tiene vinculados a personas importantes en
su vida hacia el terapeuta.
La interpretación: es el proceso de interpretar y sacar conclusiones de los
pensamientos y relatos del paciente.
La terapia psicoanalítica se desarrolla a partir de estas técnicas. Algunos de los
trastornos que se pueden tratar con la terapia psicoanalítica son la ansiedad, el
insomnio u otros trastornos del sueño, los problemas sexuales, la timidez o la baja
autoestima.
Ejemplo
Siguiendo con el caso de Marta, la terapia psicoanalítica la invitaría a preguntarse qué hay
en las entrevistas de trabajo que la pone tan nerviosa hasta el punto de bloquearla. Marta
podría llegar a conclusiones como que se siente amenazada cuando alguien la evalúa, que le
da miedo entrar en el mundo laboral, que teme fracasar, que en realidad no tiene mucha
vocación, que le preocupa tener una jefa, etc. Habría que pensar, elaborar y resolver todas
estas cuestiones detrás del síntoma «ponerse nerviosa» para que estos nervios terminaran
cayendo por su propio peso. Si Marta consigue relajarse con ejercicios y se convence de
que ella es capaz, quizás consiga hacer entrevistas. Pero si hay un conflicto interno que no
se ha parado a pensar, es posible que en unos años o en meses aparezca en ella otro
síntoma, como el insomnio o la ansiedad, que le estará recordando que hay algo que
necesita conocer de sí misma.
LA PSICOLOGÍA HUMANISTA
Por ejemplo
Una terapeuta humanista propondría a Marta pensar en cómo se siente, además de nerviosa,
cuando tiene una entrevista. Se daría cuenta con ella de que, por ejemplo, tiene miedo al
fracaso. Podría enseñarle la práctica Mindfulness, como medio para observar sus
pensamientos y sentimientos, liberarlos de todo juicio y desarrollar la paciencia para
aceptarlos e intentar cambiarlos. Rebajando su auto exigencia y su miedo al fracaso, Marta
podría experimentar la reducción de sus nervios en las entrevistas.