Formación de Las Yemas Pulmonares
Formación de Las Yemas Pulmonares
Formación de Las Yemas Pulmonares
Laringe
Las yemas bronquiales (5ta Semana) se agrandan dando a los bronquios principales
derecho e izquierdo. Después el derecho forma 3 bronquios secundarios y 2 en el
bronquio izquierdo, lo cual prefigura los 3 lóbulos del pulmón en el lado derecho y los 2
en el lóbulo izquierdo. Los pliegues pleuroperitoneales y pleuropericardiales acaban
separando los canales pericardioperitoneales de las cavidades peritoneales y
pericárdica. Los espacios restantes forman las cavidades pleurales primitivas. El
mesodermo que recubre el exterior del pulmón se convierte en la pleura visceral. La capa
del mesodermo somático, que reviste la pared corporal desde el interior, se transforma
en la pleura parietal. El espacio entre la pleura parietal y visceral es la cavidad pleural.
10 bronquios terciarios en el pulmón derecho y 8 en el izquierdo, creando así los
segmentos broncopulmonares. La ramificación está controlada por las interacciones
epitelio- mesenquimatosas entre el endodermo de las yemas pulmonares y el
mesodermo asplácnico que las rodea.
En el 7mo mes, Los bronquiolos no dejan de dividirse en canales cada vez más
numerosos y pequeños a esto se le llama periodo canalicular. Los bronquiolos terminales
se dividen para formar bronquiolos respiratorios. Estos acaban en sacos terminales
llamados alvéolos primitivos que están rodeados por células alveolares. Hacia el final del
7mo mes hay suficientes cantidades de sacos alveolares y capilares maduros para
garantizar un intercambio adecuado de gases. Las células que lo recubren conocidas
como células Alveolares de tipo I, tienen que entrar en contacto tan estrecho entre las
células epiteliales y a las endoteliales que erigen la barrera alveolocapilar. Antes de
nacimiento no existen alvéolos maduros. Al final del 6to mes, las células epiteliales
alveolares de tipo II, producen surfactante, líquido rico en fosfolípidos capaz de disminuir
la tensión superficial en la interfaz alveolar-capilar. Antes del nacimiento los pulmones
están llenos de un líquido que contiene alta concentración de cloruro, pocas proteínas,
algo de moco de las glándulas bronquiales y surfactante de las células epiteliales
alveolares (Tipo II). Aumenta principalmente en las dos semanas anteriores al nacimiento
(34 semanas de gestación). Una Parte de él entra en el líquido amniótico, migran por el
corion hacia el útero donde empiecen a producir proteínas para el sistema inmunológico,
entre ellas interleucina 1B. Esta proteína eleva la producción de prostaglandina que
causan contracciones uterinas. Los movimientos respiratorios del feto comienzan antes
del nacimiento y hacen que se aspire el líquido amniótico. Estos movimientos son
importantes porque estimulan el desarrollo de los pulmones y acondicionamiento de los
músculos respiratorios. Cuando las respiraciones empiezan en el momento del
nacimiento, se reabsorbe rápido por capilares sanguíneos y linfáticos. Queda depositado
como una delgada capa de fosfolípidos, que impide que aparezca un interfaz de aire-
agua. Sin la capa de grasa de surfactante, los alvéolos colapsarían durante la expiración
(Atelectasia). Se estimulan en el momento del nacimiento apenas existe 1/6 parte de los
alvéolos adultos. Los restantes se formarán en los primeros 10 años de la vida postnatal.
Consideraciones Clínicas