Sun Tzu
Sun Tzu
Sun Tzu
El arte de la guerra es un libro escrito por el general y estratega militar Sun Tzu
hace aproximadamente 2.500 años en la antigua China.
Algunas de las enseñanzas fundamentales del libro son que lo ideal es vencer
sin luchar y que la guerra se basa en el engaño y la confusión del enemigo.
Asimismo, se destaca la importancia de saber ajustarse a las condiciones, ser
capaces de defender las ventajas, aprovechar las oportunidades y tener claridad
de visión y un sólido liderazgo.
Capítulo 1: La evaluación
Es importante combatir los planes del enemigo y, ante todo, no permitir una
alianza entre adversarios. La mejor estrategia de guerra es generar impacto en un
estado y no arruinarlo.
Nunca se debe atacar con cólera y con prisas. Para ello se necesita una buena
planificación y coordinación.
Así que, es importante conocer los defectos del adversario. En este sentido hay
que preparar a los comandantes para que establezcan una buena base de
defensa y que no comentan errores. También, hay que saber detectar las
oportunidades para derrotar al enemigo.
Capítulo 5: La firmeza
Este capítulo explica cómo todo buen líder es capaz de vencer al enemigo si crea
una percepción (fuerza del ímpetu) favorable para su ejército. El combatiente
inteligente consigue su victoria sin recurrir a la fuerza.
De este modo, se debe fingir desorden para distraer a los adversarios. Sin
embargo, para conseguir despistar al enemigo, antes hay que planear un orden.
Solo así se puede crear un desorden artificial. Al igual que si se quiere fingir
cobardía primero hay que conocer la valentía y, si se pretende aparentar debilidad,
antes hay que conocer la fuerza.
Un buen guerrero hace que el enemigo llegue el último al campo de batalla. Solo
de esta forma sus combatientes estarán en una posición descansada, mientras
que los adversarios llegarán agotados.
En la guerra hay que ser sutil, discreto y silencioso e intentar aparecer en los
lugares críticos para atacar al adversario donde menos se lo espere.
En una batalla solo será capaz de vencer aquel que tenga una aptitud favorable al
cambio y pueda adaptarse al enemigo, ya que en un conflicto no hay
circunstancias fijas y permanentes.
En una batalla es muy importante conocer las condiciones del terreno para poder
maniobrar y luchar. El arte de la guerra también radica en ser capaz de movilizar
enormes masas de hombres.
El autor también indica que si el enemigo se acerca con palabras humildes puede
que esté tramando algo. Nunca hay que confiar en el adversario aunque proponga
una tregua.
En este capítulo Sun Tzu menciona seis maneras de ser derrotado, que se pueden
producir si un general no está lo suficientemente preparado:
Así, Sun Tzu distingue entre nueve “tipos de terreno”: de dispersión, ligero, en
clave, de comunicación, de intersección, difícil, desfavorable, cercado y mortal.
Este capítulo explora el uso de las armas y los cinco tipos de ataques que hay
mediante el fuego. Así el autor enumera que se puede quemar:
1. Personas.
2. Suministros.
3. El equipo.
4. Almacenes.
5. Armas.
El libro de Sun Tzu esconde una profunda filosofía que sienta sus bases en
el engaño como arma más poderosa para vencer en la guerra.
Sin embargo, hoy en día sus indicaciones son aplicadas en los más diversos
campos de la actividad humana, no solo para la estrategia militar, sino también
para la política, la diplomacia, los negocios, la gestión de conflictos, los deportes y
la vida cotidiana.
Descubramos, mediante el análisis de sus frases, por qué la obra sigue siendo un
manual clave para muchas disciplinas y algunos de sus mensajes más
representativos.
Esta frase contenida en el primer capítulo alude a que uno de los aspectos claves
del arte de la guerra es manejar el arte del engaño.
Los que consiguen que se rindan impotentes los ejércitos ajenos sin luchar son los
mejores maestros del arte de la guerra.
Esta enseñanza de Sun Tzu forma parte del tercer capítulo y se refiera a que la
maestría suprema en el arte de la guerra consiste en vencer al enemigo sin luchar.
Para ello, expone que, antes de entrar en la guerra, existen algunas cosas que se
debe intentar, principalmente, tratar de desmantelar la conspiración y los planes
del enemigo, y luego disolver sus alianzas. El siguiente paso sería, entonces,
atacar al ejército.
Con estas palabras Sun Tzu concluye el tercer capítulo. Con ellas se refiere a
la importancia del general conocer sus ventajas y desventajas, sus
fortalezas y debilidades, para así dominarlas, saber ocultarlas y sacar
provecho de ellas.
La planificación de la estrategia
Contenido en el capítulo cuarto, este enunciado alude a que la batalla debe ser
consecuencia de la organización y la estrategia. Quienes carecen de este tipo de
planificación están condenados a la derrota.
La posición y la organización
Los buenos guerreros hacen que los adversarios vengan a ellos, y de ningún modo
se dejan atraer fuera de la fortaleza.
Esta frase, al inicio del capítulo seis, refiere varios factores fundamentales en
relación con el posicionamiento estratégico en el campo de batalla.
En esta sentencia del capitulo nueve, Sun Tzu habla de la importancia del
liderazgo para la victoria.
Se calcula que vivió alrededor del siglo V a.C. Pese a que su nombre de
nacimiento era Sun Wu, hoy en día lo conocemos por lo que en realidad es su
título honorífico, Sun Tzu, que en español traduciría ‘Maestro Sun’. Su filosofía
sobre la guerra ha tenido una enorme influencia a lo largo de la historia.