Julio Andrés Ruiz Cordero
Julio Andrés Ruiz Cordero
Julio Andrés Ruiz Cordero
Modalidad: Pasantía
DEDICATORIA
A mis abuelos, Carlos y Carmen por siempre creer en mí. Sus enseñanzas siempre me
inspirarán a perseguir lo que merezco.
A mis padres, Irma y Julio por apoyarme durante todo el camino para cumplir mis sueños.
AGRADECIMIENTOS
Gracias a Louisiana State University por recibirme y permitirme vivir una de las experiencias
más agradables y enriquecedoras durante mi formación profesional.
Al Dr. Javier Nevarez, al Dr. Thomas Tully, al Dr. Mark Mitchell, a la Dra. Kelly Rockwell, a
Jordan Padlo, a los estudiantes que formaron parte de los grupos de rotación y el resto del
personal del Veterinary Teaching Hospital de LSU. Les agradezco por recibirme y hacerme
sentir como en casa, por todas las enseñanzas y consejos, su asertividad, su confianza y
disposición para apoyarme con mi Trabajo Final de Graduación, por hacerme parte del grupo
y por todas las rondas después de la jornada laboral.
A la Dra. Alejandra Calderón por ser una excelente tutora y consejera durante el proceso del
Trabajo Final de Graduación. Agradezco mucho su gran disponibilidad, consejos y paciencia
durante el año.
A la Dra. Graciela Aguilar por su disponibilidad y todos los consejos que me permitieron
prepararme mejor para tener una excelente experiencia durante mi pasantía.
Al Dr. Randall Arguedas por su disponibilidad y por ser un ejemplo para los estudiantes y
médicos veterinarios que desean desenvolverse el área de la medicina zoológica.
A Diana, Irene y Estefanía. La universidad no solo me dio excelentes compañeras y futuras
colegas, sino amigas para el resto de mi vida. Gracias por motivarme siempre a perseguir mis
sueños profesionales. El camino no habría sido el mismo sin todos esos momentos que viví
con ustedes durante estos años. Gracias a Luis Diego por escucharme y apoyarme
enormemente durante todo el proceso de la pasantía. Gracias a todos los amigos que me
acompañaron durante este periodo y que siempre están ahí.
Gracias Universidad Nacional por formarme como médico veterinario y apoyarme a vivir esta
experiencia inigualable.
Agradezco a mis padres Irma y Julio, a mis hermanos José Pablo y Mariana y a mis abuelos
Carlos y Carmen, por siempre creer en mí, escucharme, aconsejarme y apoyarme durante toda
la carrera.
Gracias a todos los pacientes que me han enseñado tanto. Siempre serán la fuente de mi
inspiración para hacer lo que hago.
iv
ÍNDICE DE CONTENIDOS
5. CASO CLÍNICO.............................................................................................................................. 28
6. CONCLUSIONES ........................................................................................................................... 33
7. RECOMENDACIONES ................................................................................................................. 34
8. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ........................................................................................... 35
6. ANEXOS........................................................................................................................................... 39
vi
ÍNDICE DE CUADROS
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 1. Distribución porcentual de pacientes atendidos según clase animal. ....................................... 9
Figura 2. Distribución de casos atendidos de la clase Aves según su orden.......................................... 10
Figura 3. Distribución de casos atendidos la clase Mammalia según su orden. .................................... 10
Figura 4. Distribución de casos atendidos de pacientes de la clase Reptilia según su orden................. 11
Figura 5. Distribución de pacientes según lugar de procedencia. .......................................................... 11
Figura 6. Distribución de pacientes silvestres atendidos según clase. ................................................... 12
Figura 7. Distribución de casos atendidos de mascotas exóticas según clase........................................ 12
Figura 8. Especies que representaron la mayor cantidad de casos huérfanos atendidos........................ 13
Figura 9. Tortuga jeroglífica (P. concinna) al momento de ingreso. Sufre de una fractura de la segunda
escama costal y cuarta escama marginal izquierdas e involucramiento de la segunda placa costal
izquierda y exposición del mesodermo.................................................................................................. 28
Figura 10. Radiografías de tortuga jeroglífico (P. concinna) atropellado por un auto. A. Vista
dorsoventral. B. Vista laterolateral izquierda. C. Vista Craneocaudal. Las fracturas se encuentran
señaladas por flechas en cada una de las vistas. .................................................................................... 29
Figura 11. Lesiones de tortuga jeroglífica (P. conccina) después de finalizada la terapia de cierre
asistido por vacío y sulfadiazina de plata. A. Fractura izquierda. B. Fractura derecha. ........................ 31
Figura 12. Reparación de fracturas del caparazón de tortuga jeroglífica (P. conccina). A. Prótesis de
PLA cubierta con pegamento de uretano. B. Caparazón reparado tras pulir el excedente del pegamento.
............................................................................................................................................................... 32
Figura 13. Tortuga jeroglífica (P. conccina) al momento de su liberación en un lago de la ciudad de
Baton Rouge, Louisiana......................................................................................................................... 32
viii
LISTA DE ABREVIATURAS
RESUMEN
Se presentan los resultados de una pasantía de 320 horas realizada en el Servicio de
Medicina Zoológica del Hospital Veterinario de Docencia de Louisiana State University del 6
de mayo al 8 de julio de 2019. Durante este periodo, se participó en la atención de 250 casos,
de los cuales 177 fueron casos de animales silvestres (71%), 61 de mascotas exóticas (24%) y
12 de animales de centros de manejo de fauna silvestre (5%). Los pacientes correspondieron a
130 aves (52%), 95 mamíferos (38%) y 25 reptiles (10%). Se atendieron 85 pacientes
huérfanos y se participó en 13 cirugías.
Se participó en los exámenes físicos, sujeciones físicas y químicas y en la
interpretación de exámenes complementarios de diferentes especies de las tres clases, lo cual
es descrito en el presente documento. Además, se describe el lugar de trabajo, la casuística de
la pasantía y el caso de una paciente tortuga jeroglífica (Pseudemys concinna) silvestre que
sufrió dos fracturas en su caparazón, las cuales fueron reparadas.
x
ABSTRACT
Results from an intership at the Zoological Medicine Service from Louisiana State
University’s Veterinary Teaching Hospital during the period between May 6th to July 8th, 2019
are presented. During that period 244 cases were attended of which 177 were wildlife (71%),
61 were exotic pets (24%) and 12 wild animals in zoos and private collections (5%). The
patients attended were 130 birds (52%), 95 mammals (38%) and 25 reptiles (10%).
Physical exams, physical and chemical restrictions and complementary tests were
practiced in different species from the three animal classes mentioned, which are described in
the document. Additionally, there can be found a description of the place, statistics of the
cases attended and a case from a wild River cooter turtle (Pseudemys concinna) that suffered
a fracture in its shell, which was repaired.
1
1. INTRODUCCIÓN
1.1. Antecedentes
El territorio de Costa Rica comprende 51 042.8 km2, cifra que representa el 0.03% de
la superficie terrestre. A pesar de ser un país pequeño, tiene un alto valor biológico ocupando
aproximadamente el vigésimo puesto de las naciones más biodiversas con más de 90 000
especies descritas, representando el 4.5% de la biodiversidad del planeta (Obando 2007;
Aguilar-Orozco 2017). Cuando se trata de la cantidad de especies esperada por área, el
número incrementa superando las 500 000 especies, es decir, el 3.6% de las especies
esperadas en la Tierra; debido a esto, se considera el país con mayor densidad de especies en
el mundo (Obando 2007; Kohlmann 2011).
Considerando como ejemplo el subfilo Vertebrata del reino Animalia, en Costa Rica
se han descrito aproximadamente 857 especies de aves, 226 de reptiles, 183 de anfibios, 239
de mamíferos, 135 de peces de agua dulce y una gran cantidad de peces marinos; estimándose
28.2 especies de vertebrados (excluyendo peces) por cada 1000 km2 (Obando 2007;
Kohlmann 2011; Aguilar-Orozco 2017). Esto constituye el 79% de la cantidad de especies de
vertebrados esperada en Costa Rica. Este grupo ejemplifica la gran densidad de especies en el
país, la cual supera por mucho a la de Ecuador, el segundo país con mayor densidad de
vertebrados que cuenta con 9.2 especies/1000 km2 (Obando 2007; Kohlmann 2011).
Durante años, los zoológicos han albergado diversas especies de animales en peligro
de extinción con la intención de reproducir y reintroducir ejemplares en sus nichos originales
(Conde 2013). Estos centros han generado información científica sobre etología, patología,
tratamientos, genética y reproducción natural y asistida y mucha de esta información ha sido
utilizada en otros esfuerzos de conservación in situ (dentro de su hábitat) (Conde 2013).
Consecuentemente, se han creado redes de investigación entre gobiernos, zoológicos y
universidades y esta información se socializa con la población general gracias al fácil acceso a
los zoológicos, en donde además de compartir datos de sus investigaciones también educan al
público en otros temas de conservación (Conde 2013).
Algunos zoológicos funcionan como centros de rescate, donde animales silvestres que
son encontrados, decomisados o presentan alguna condición de salud son atendidos y puestos
en libertad cuando su condición lo permite. Por el contrario, cuando los animales se
encuentran inhabilitados de volver a la vida en libertad, los zoológicos han servido como su
albergue. Este último aspecto es de gran relevancia en Costa Rica donde la interacción de
fauna silvestre con humanos es frecuente, provocando en algunas ocasiones que los animales
sufran accidentes como atropellos y electrocuciones, entre otros (Carvajal y Díaz 2015;
Jiménez et al. 2018).
Costa Rica cuenta con varios sitios que manejan fauna silvestre a lo largo del
territorio, entre los que destacan el Parque Zoológico Simón Bolívar, Centro de Conservación
Santa Ana, Centro de Rescate ZooAve, Zoológico La Marina, Centro Herpetológico de Santa
Ana, Centro de Rescate Las Pumas y La Ponderosa Adventure Park, los cuales manejan tanto
fauna autóctona como exótica. Todos ellos requieren de la colaboración de un médico
veterinario para asegurar el bienestar de sus ejemplares.
1.2. Justificación
quirúrgicos, terapéuticos, entre otras ramas necesarias para la atención de animales silvestres.
El éxito del médico veterinario en esta área se relaciona con la educación que el profesional
ha buscado luego de graduarse: trabajo con otros médicos veterinarios de la misma área,
educación continua, externados, internados y rotaciones en centros con alta casuística
(Aguirre 2009: Fallas-Paniagua 2012).
1.3. Objetivos
1.3.2.2. Emplear técnicas seguras de manejo y de sujeción química y física que faciliten el
trabajo con los pacientes de las diferentes especies silvestres a tratar para tener resultados
confiables y evitar causar lesiones en los animales y/o el personal.
2. METODOLOGÍA
El horario regular de atención del VTH es de 8:00 a.m. a 5:00 p.m. sin embargo,
atiende emergencias de mascotas exóticas durante las 24 horas. Los casos de vida silvestre se
atienden durante el horario regular con un límite de atención hasta las 10:00 PM. Los fines de
semana solo se atienden los pacientes internados y emergencias.
El horario de trabajo fue el horario regular del VTH en varias ocasiones la jornada se
extendió por la atención de pacientes y cirugías. Durante las mañanas se administraron los
tratamientos de los pacientes internados hasta las 8:30 a.m., seguido por una sesión de
discusión de casos con el clínico a cargo durante el día. Aproximadamente a las 10:00 a.m. se
iniciaba con la atención de citas programadas de mascotas exóticas hasta las 4:00 p.m. Los
pacientes silvestres se atendieron conforme llegaban al hospital. En caso de que los pacientes
requirieran de procedimientos especiales, estos se programaban durante el día, a excepción de
las emergencias que se atendían en el momento de llegada.
Las visitas a los centros de manejo de fauna de vida silvestre se hicieron de 9:00 a.m. a
4:00 p.m. en los días programados. Durante las visitas se atendieron casos en los centros, se
realizaron prácticas de métodos de anestesia remota con blancos inertes y se discutieron temas
relacionados a la práctica de la medicina zoológica.
ZMS utiliza el “The Purina Nutrition Center”, una sala donde se almacenan múltiples tipos de
alimento para las diferentes especies domésticas, exóticas y silvestres que el VTH atiende.
Dicha sala cuenta con alimentos para diferentes edades, dietas de prescripción y gran cantidad
de ingredientes para formar la dieta de los pacientes del ZMS.
2.2.2. Servicio de Medicina de Zoológico (ZMS)
2.4. Cronograma
Fecha Actividad
3. RESULTADOS
El total de pacientes atendidos durante la pasantía fue de 250. La clase con la que más
se trabajó fueron las aves con 130 casos (52%), seguida por mamíferos con 95 (38%) y por
último 25 reptiles (10%) (Figura 1).
Reptiles
25
10%
Aves
Mamíferos 130
95 52%
38%
30
Número de casos por órden
25
20
15
10
Órden
10
40
35
Número de casos por órden
30
25
20
15
10
Órden
18
16
14
Número de casos por órden
12
10
0
Testudines Squamata Crocodilia
Órden
Reptiles; 15; 9%
Zarigueya de Virginia
Conejo de Florida 11
Chara azul
Ardilla de la Carolinas 2
Vencejo de chimenea 2
3 32
Anade Real
Estornino común 4
Elanio de Misisipi
Gavilán aliancho 5
Otros
6
8 12
La revisión física de las aves se realizó como describen Coles (2007), Mitchell y Tully
(2009), Jones (2009), Miller y Fowler (2015) Doneley et al (2006) y Doneley (2016). En el
caso de los reptiles se realizó como lo indican Mitchell y Tully (2009), Mader y Divers
(2014), Miller y Fowler (2015) y Doneley et al (2018). Finalmente, en mamíferos, el examen
físico se realizó como describen Mitchell y Tully (2009), Quesemberry y Orcutt (2012),
Miller y Fowler (2015) y Johnson-Delaney (2017). En el Anexo 6 se puede observar un
formulario de revisión física en aves que describe los aspectos que se observaron durante la
revisión de estos pacientes. Todos los pacientes fueron observados por unos minutos antes de
ser manipulados.
La revisión física de los pacientes mamíferos se realizó de forma similar a la realizada
durante la práctica con especies menores domésticas con algunas excepciones según la
especie. En el Anexo 7 se puede observar un formulario donado por el Dr. Thomas Tully el
cual sirvió de guía durante la revisión física de pequeños mamíferos.
Durante la revisión física de los reptiles se observó que si el paciente presentaba
alguna descarga ocular, nasal u oral. También se observó el patrón respiratorio, su postura,
capacidad de locomoción y el estado neurológico. Se realizaron exámenes oftalmológicos
15
Cuadro 3. Descripción de las sujeciones físicas practicadas en aves durante la pasantía según orden.
Especímenes tranquilos pueden restringirse sosteniéndolos contra el piso colocando las piernas
alrededor del cuerpo del ave para mantener las alas plegadas, sosteniendo la cabeza y el cuello
utilizando ambas manos con cuidado de no lesionar la articulación atlanto-occipital. Debe de
tenerse cuidado de no apoyar el peso sobre el ave (Fowler 2008; Girgling 2013; Miller y Fowler
2015).
Su sujeción es similar a la descrita para aves columbiformes y passeriformes. Debido a que sus
Charadriiformes miembros inferiores pueden ser largos como el chortilejo colirrojo (Charadrius vociferus), es
▪ Familia necesario colocar un dedo de la otra mano en medio de ambos para evitar que se sobrepongan.
Charadriidae (Miller y Fowler 2015)
Se sujeta el ave utilizando el dedo índice y del medio para extender su cuello sin ejercer mucha
presión, y utilizando la otra mano para extender sus piernas. Se debe de tener cuidado de no
Columbiformes, ejercer presión sobre su cuerpo y no limitar su respiración. Cuando se manipula aves más
Passeriformes pequeñas pueden sujetarse de sus tibio tarsos, colocándolos entre el dedo índice y del medio,
y manteniendo el animal en su posición normal, dejando que el ave repose sobre los dedos del
Piciformes manipulador (Fowler 2008; Mitchell y Tully 2009; Jones 2009; Dorrestein 2009; Shury 2014;
Miller y Fowler 2015).
El ave se sujeta por la espalda evitando que agite sus alas. Con una mano se sujetan ambas
patas utilizando los dedos para sostenerlas. Posteriormente se levanta el ave, se coloca su
espalda contra una superficie firme y con una mano se sostiene del tórax sin ejercer mucha
presión. También puede colocarse bajo el brazo de la misma mano que sostiene ambas patas.
Galliformes Otra técnica utilizada en gallinas domésticas (Gallus gallus domesticus) consiste en traslapar
▪ Familia Phasianidae las alas del ave (Fowler 2008).
Con aves de mayor tamaño, se puede empujar su cuerpo contra el suelo con una mano (sin
ejercer mucha presión) sosteniendo un ala contra el cuerpo, y con la otra mano se mantiene la
otra ala plegada al cuerpo. Posteriormente con una mano se sujetan ambas patas y en dirección
caudal del ave (Fowler 2008; Shury 2014; Miller y Fowler 2015).
Gruiformes Su sujeción es similar a la descrita para las aves Pelecaniformes de la familia Ardeidae (Shury
▪ Familia Rallidae 2014; Miller y Fowler 2015).
18
El ave debe ser acorralada. Con los pelicanos se procede a tomar con una mano el pico cerrado
y luego con la otra mano se toma el cuerpo y las alas, se coloca por debajo del brazo y se evita
Pelecaniformes que despliegue sus alas con el brazo y el cuerpo (Miller y Fowler 2015).
• Familia Pelecanidae En el caso de las garzas primero se debe tomar el cuerpo de la misma manera, y luego se sujeta
con la otra mano la cabeza y cuello. Una vez que se tiene cuerpo del ave bajo el brazo, se utiliza
• Familia Ardeidae la mano libre para sujetar las piernas del ave desde los corvejones. Es importante recalcar que
es muy común que estas aves sufran de miopatía de captura tras ser manipuladas. Es necesario
utilizar lentes de protección al manipular garzas (Shury 2014; Miller y Fowler 2015).
En el caso de aves psitácidas pequeñas como la cotorrita celestial (Forpus coelestis), su
sujeción es similar a la descrita para aves passeriformes. En aves de tamaño medio y grande, se
sujeta la cabeza formando un anillo con los dedos pulgar e índice alrededor del cuello por
Psittaciformes debajo de la mandíbula. Con la otra mano se sujetan ambas patas pasando el dedo del medio
entre ambos miembros y presionando con los dedos índice y anular. Con aves de mayor tamaño
como lapas o guacamayos se puede se puede envolver en una toalla de tela para evitar que
despliegue sus alas (Fowler 2008; Mitchell y Tully 2009; Jones 2009; Girgling 2013; Shury
2014; Miller y Fowler 2015).
Suliformes Su sujeción es similar a la descrita para las aves Pelecaniformes de la familia Pelecanidae.
19
Se puede utilizar una bolsa de tela sobre la mano, capturar el animal con la palma de la
mano y deslizar la bolsa sobre el animal (Mitchell y Tully 2009; Miller y Fowler 2015).
▪ Petauro de azúcar También puede utilizarse el dedo pulgar y del medio para sostener su cabeza por los lados y
(Petaurus breviceps) colocar el dedo índice sobre la misma, cerrando el dedo anular y meñique sobre el cuerpo
del animal sin generar excesiva presión (Mitchell y Tully 2009).
▪ Rata doméstica Se agarra la piel que sobre del cuello del animal y se puede requerir dar soporte con la otra
(Ratus norvegicus domestica) mano en la parte trasera del animal (Girgling 2012; Shury 2014). También se puede agarrar
el animal formando un anillo con la mano alrededor del cuello (Mitchell y Tully 2009, ).
▪ Zarigüeya de Virginia Se toma firmemente la piel de la nuca del animal y de la base de la cola. También puede
(Didelphis virginiana) agarrarse firmemente del cuello justo debajo de la barbilla para restringir su movimiento
(Mitchell y Tully 2009).
Estos pacientes se capturaron utilizando una jaula trampa dentro de los recintos. Dichas
jaulas permitieron la restricción física del animal para la administración de anestésicos
previo a su examen físico. Por seguridad del personal se recomienda realizar sujeción
Primates química en primates que pesen más de 12 kg antes de entrar en contacto físico con el animal
▪ Familia (Shury 2014). Una vez que el primate se encuentre bajo los efectos de la anestesia, una
Cercophithecidae persona debe de tomar los brazos y colocarlos en la espalda del animal, sosteniéndolos
firmemente.
Al trabajar con especies del género Macaca, se debe de tener especial cuidado de no entrar
en contacto directo con mucosas, heridas expuestas y fluidos debido al riesgo de zoonosis
del virus del Herpes B, el cual resulta letal para el ser humano en la mayoría de los casos.
Debido a esto, se recomienda siempre que el paciente se encuentre bajo anestesia y utilizar
equipo de protección al realizar cualquier procedimiento con este tipo de animales (Shury
2014; Miller y Fowler 2015).
21
Cuadro 5. Descripción de las sujeciones físicas practicadas en reptiles durante la pasantía según orden.
mano se sujeta el cuerpo. Si se trata de una serpiente grande pueden necesitarse dos o tres personas
adicionales para sostener su cuerpo (Fowler 2009; Mitchell y Tully 2009; Girling 2012; Miller y
Fowler 2015). Existen ganchos para la sujeción de serpientes que se utilizan para presionar la cabeza y
así facilitar la sujeción cuando el animal es violento (Fowler 2009).
Tortugas de tamaño pequeño y mediano se pueden sujetar de los lados laterales del caparazón (Fowler
2008, Mitchell y Tully 2009). Animales de mayor tamaño como la tortuga de espolones africana
(Centrochelys sulcata) adultas pueden requerir que una o varias personas se apoyen en su caparazón
Testudines para evitar que el animal se mueva.
Si se requiere examinar los miembros, se pueden sujetar y extraer del caparazón aplicando fuerza
▪ Familia moderada en tortugas pequeñas y medianas; en tortugas mayor tamaño se puede requerir aplicar más
Chelydridae fuerza. En cuanto a la sujeción de la cabeza, se espera a que el animal extienda el cuello y rápidamente
▪ Familia se sujeta detrás de la cabeza y se extrae sin ejercer más fuerza de la necesaria (Fowler 2008; Miller y
Emydidae Fowler 2015).
▪ Familia
Testudinidae Con especies de tortugas lagarto se debe tener cuidado con la cabeza ya que pueden estirar su cuello y
▪ Familia herir al manipulador. Este tipo de tortugas se suelen sujetar de la cola dejando la cabeza hacia abajo o
Kinosternidae se toman de la porción anterior del caparazón cerca de la cabeza con una mano y con la otra mano la
porción caudal del caparazón sobre de la cola, prestando atención en todo momento a los movimientos
del animal (Fowler 2008; Mitchell y Tully 2009; Miller y Fowler 2015). Se debe evitar que la cabeza
de la tortuga esté hacia abajo por mucho tiempo para no interferir con la respiración y hemodinamia del
animal (Miller y Fowler 2015).
23
con linfoma o timoma por lo que se decidió realizar la CT la cual permitió comprobar la
presencia de la masa. El segundo caso en el que se utilizó CT fue en una nutria de río
norteamericana (L. canadensis) juvenil silvestre. El paciente fue lesionado cuando un
particular cerró una puerta con fuerza, presentando signos neurológicos compatibles con una
lesión en la sección lumbar de la medula espinal. Al realizarse las radiografías fue imposible
observar alguna lesión en la columna vertebral del paciente por lo que se decidió realizar una
CT, la cual comprobó que el paciente sufría de una fractura en la vértebra L3.
La fluoroscopia se realizó en una lora africana gris (Psittacus erithacus), hembra, de
aproximadamente 10 años. La sintomatología e historia del paciente y los hallazgos de las
radiografías realizadas previo a la fluoroscopia fueron compatibles con una infección por
bornavirus. Los hallazgos de las radiografías sugirieron dilatación del proventrículo y
dilatación difusa del intestino delgado por lo que se realizó la fluoroscopia para confirmar
dichas lesiones. Para esto se administró aproximadamente 6.8 ml de medio de contraste de
bario al 25% directamente al buche del paciente y se tomaron imágenes inmediatamente
después y luego a diferentes tiempos después de la administración: 1 min, 3 min, 5 min, 15
min, 1 h y 15 min, 2 h 15 min, 3 h y 15 min y 4 h y 30 min. El medio de contraste avanzó con
normalidad en el tracto digestivo del paciente. Los hallazgos de este estudio sugirieron que la
peristalsis ventricular del paciente era normal, al igual que la del intestino delgado. La
confirmación del diagnóstico del paciente se hizo por medio de un PCR.
Se practicaron tres laparoscopías y una endoscopía durante la pasantía. Las primeras
dos laparoscopías se realizaron en dos tortugas de espolones africanas juveniles (C. sulcata)
con el objetivo de determinar el sexo de los reptiles, cuyos resultados demostraron que se
trataba de un macho y una hembra. La tercera laparoscopía se realizó en un gavilán colirrojo
(B. jamaicensis) silvestre, macho, adulto, de manera exploratoria ya que hasta ese momento el
diagnóstico del paciente era inespecífico. Entre los hallazgos de dicha laparoscopía se
encontraron cambio de coloración del hígado (pálido), esplenomegalia (no identificada en
pruebas diagnósticas previas), hiperemia de la serosa intestinal e identificación del sexo del
paciente (macho).
La endoscopía se hizo en un ganso doméstico (Anser anser domesticus), macho,
adulto. Previo a la endoscopía se realizó una radiografía que demostraba la presencia de
numerosos cuerpos extraños circulares de apariencia metálica de aproximadamente 3 mm de
diámetro en el proventrículo del ave. Se realizó la endoscopía con el objetivo de extraer
dichos cuerpos extraños ya que se sospechó inicialmente que podrían estar encadenados; sin
embargo, el hallazgo confirmó que cada cuerpo extraño se encontraba aislado por lo que se
extrajeron unos cuantos para realizar un análisis de metales para descartar una intoxicación
por metales pesados.
26
5. CASO CLÍNICO
Figura 9. Tortuga jeroglífica (P. concinna) al momento de ingreso. Sufre de una fractura de la
segunda escama costal y cuarta escama marginal izquierdas e involucramiento de la segunda
placa costal izquierda y exposición del mesodermo.
La segunda fractura se ubicó en el tercer escudo costal derecho y la porción
craneolateral derecha del cuarto escudo vertebral. En esta fractura no hubo pérdida del
fragmento del caparazón, pero hubo un leve hundimiento de este. No se identificó ninguna
lesión en la cabeza, miembros y plastrón. No se observó presencia de ectoparásitos.
Entre las causas más comunes de trauma en tortugas se encuentran las fracturas de
caparazón que la mayoría del tiempo son causadas por atropello o mordeduras de perro
(Lafortune et al. 2005; Vella 2009). Las principales complicaciones que presentan los
quelonios al sufrir lesiones de este tipo son perforación de los pulmones e infección de la
herida (Mader y Divers 2014); sin embargo, ninguna de las dos situaciones se presentó. El
pronóstico de este caso se consideró favorable porque a pesar de que tenía lesiones múltiples,
29
inestables y con exposición de la cavidad celómica, las lesiones no eran penetrantes, no tenían
compromiso de la médula espinal y la tortuga mantenía su capacidad de locomoción (Mader y
Divers 2014).
Se tomaron radiografías del cuerpo entero para descartar posibles lesiones internas tras
el trauma, tomándose vista dorsoventral (A), laterolateral izquierda (B) y craneocaudal (C)
(Figura 10).
Figura 10. Radiografías de tortuga jeroglífico (P. concinna) atropellado por un auto. A. Vista
dorsoventral. B. Vista laterolateral izquierda. C. Vista craneocaudal. Las fracturas se
encuentran señaladas por flechas en cada una de las vistas.
30
lograr el éxito de la terapia es indispensable que se mantenga el vacío sobre el sitio a tratar o
de lo contrario se promoverá el crecimiento de bacterias, y también que la membrana
celómica del paciente se encuentre intacta sobre los pulmones (Lafortune et al. 2005). La
terapia se practicó durante 15 días. Los siguientes diez días se aplicó sulfadiazina de plata
tópica cada 24h. En la Figura 11 puede observarse la mejoría de las lesiones después del
tratamiento.
Figura 11. Lesiones de tortuga jeroglífica (P. conccina) después de finalizada la terapia de
cierre asistido por vacío y sulfadiazina de plata. A. Fractura izquierda. B. Fractura derecha.
En el día 19 de su hospitalización se observaron larvas de mosca en la lesión. Se
limpiaron ambas heridas con solución salina isotónica (0.9%) a presión utilizando jeringas de
20 ml, nuevamente dos veces al día durante siete días. Se desparasitó la paciente con
nitenpyram (Capstar®, 5mg, Novartis, Greensboro, NC, U.S.A.) en dosis de 1mg/kg durante
cuatro días. Esta molécula es un neonicotinoide que actúa en el receptor nicotínico de
acetilcolina, actuando sobre el receptor postsináptico del parásito y produciendo
hiperexcitabilidad (Correia et al. 2010; Miller et al 2013). Las ventajas que presenta su uso en
perros domésticos son su rápida acción (100% de eficacia a las 18h para larvas de mosca) y
poca toxicidad y rápida eliminación (Correia et al. 2010). A pesar de que todavía no hay
estudios que prueben su eficacia en reptiles, el ZMS ha utilizado el medicamento en su
práctica médica y ha conseguido eliminar las larvas de mosca en reptiles. También se
aumentó la temperatura de la incubadora a 27° C para favorecer la eclosión de los huevos de
las larvas. Se administró ceftazidima (20 mg/kg q72h) por otros cinco días. Desde el tercer día
de iniciar los tratamientos se dejó de observar la presencia de larvas.
El día 25 escaneó el caparazón para elaborar una prótesis por impresión 3D para cubrir
la fractura izquierda en la cual hubo perdida del fragmento del caparazón. Se construyó la
prótesis a base de ácido poliláctico (PLA), un polímero biodegradable, hidrofóbico y de bajo
costo.
El día 26 se repararon ambas fracturas. Se cubrieron las grietas de la fractura derecha
con cera de hueso (Bonewax 2.5g W31TM, Ethicon®, Somerville, NJ, U.S.A.). La fractura
izquierda se cubrió con la prótesis de PLA. Ambas cubiertas fueron selladas con pegamento
32
Figura 12. Reparación de fracturas del caparazón de tortuga jeroglífica (P. conccina). A.
Prótesis de PLA cubierta con pegamento de uretano. B. Caparazón reparado tras pulir el
excedente del pegamento.
Los días 26, 27 y 28 se sometió a la paciente a pruebas de nado para comprobar el
sello total de las lesiones en el caparazón y la capacidad de la tortuga de nadar tanto en la
superficie del agua como bucear. El día 30 la paciente fue liberada en un lago de la ciudad de
Baton Rouge en el cuál habitan otros animales de su misma especie (Figura 13).
6. CONCLUSIONES
7. RECOMENDACIONES
8. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Aguirre AA. 2009. Essential veterinary education in zoological and wildlife medicine: a
global perspective. Rev Sci Tech Off Int Epiz [Internet]. [citado el 14 de febrero de
2020]; 28 (2): 605–610. Disponible en:
https://www.researchgate.net/publication/41403450_Essential_veterinary_education_i
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American College of Zoo Veterinarians. [actualizado el 25 de mayo de 2018; citado el
4 de marzo de 2019]. Disponible en: https://www.aczm.org/
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Mitchell MA y Tully TN. 2009. Manual of Exotic Pet Practice. Missouri: Saunders Elsevier.
546 p.
6. ANEXOS
Anexo 1. Nombres científicos y comunes de las especies de aves tratadas durante la pasantía
según su orden y familia.
Orden Familia Especie (Nombre Especie (Nombre
científico) común)
Accipiter cooperii Gavilán de Cooper
Buteo jamaicensis Gavilán colirrojo
Buteo lagopus Busardo calzado
Accipitriformes Accipitridae Buteo lineatus Busardo hombrorrojo
Buteo platypterus Gavilán aliancho
Haliaeetus leucocephalus Águila calva
Ictinia mississippiensis Elanio de Misisipi
Anas platyrhynchos Ánade real
Anseriformes Anatidae Anser anser domesticus Ganso doméstico
Branta canadensis Ganso canadiense
Cairina moschata Pato criollo
Apodiformes Apodidae Chaetura pelagica Vencejo de chimenea
Charadriiformes Charadriidae Charadrius vociferus Chorlitejo colirrojo
Columba livia Paloma bravía
Columbiformes Columbidae Zenaida macroura Tórtola
Gallus gallus domesticus Gallina doméstica
Galliformes Phasianidae Meleagris gallopavo Chompipe
Gruiformes Rallidae Porphyrio martinicus Gallineta de Martinica
Cardinalidae Cardinalis cardinalis Cardenal norteño
Corvidae Corvus brachyrhynchos Cuervo americano
Cyanocitta cristata Chara azul
Hirundinidae Progne subis Golondrina purpúrea
Passeriformes Mimidae Mimus polyglottos Cenzotle común
Parulidae Protonotaria citrea Reinita protonotaria
Sturnidae Sturnus vulgaris Estornino europeo
Troglodytidae Thryothorus ludovicianus Cucharachero de Carolina
Turdidae Turdus migratorius Petirrojo americano
Ardea alba Garza blanca
Ardeidae Nyctanassa nycticorax Martinete común
Pelecaniformes Nyctanassa violacea Martinete cabecipinto
Pelecanidae Pelecanus erythrorhynchos Pelícano blanco
americano
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Anexo 3. Nombre común y científico de las especies de reptiles tratadas durante la pasantía
según su orden y familia.
Orden Familia Especie (Nombre científico) Especie (Nombre común)
Crocodilia Alligatoridae Alligator mississippiensis Aligátor americano
Agamidae Pogona vitticeps Dragón barbudo
Squamata Pythonidae Python bivittatus Pitón de Birmania
Python regius Pitón real
Chelydridae Chelydra serpentina Tortuga lagarto
Pseudemys concinna Tortuga jeroglífica
Emydidae Terrapene carolina Tortuga de caja común
Testudines Trachemys scripta elegans Tortuga de orejas rojas
Kinosternidae Kinosternon subrubrum Tortuga de pantano del este
Testudinidae Centrochelys sulcata Tortuga de espolones africana
Gopherus polyphemus Tortuga de Florida
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Anexo 4. Manejo de los pacientes huérfanos en el Servicio de Medicina Zoológica del VTH
de LSU.
- Realizar un examen físico antes de ingresar el animal. Si son pacientes zarigüeyas y
ardillas con un peso menor a 40 g o conejos por debajo de los 30 g se sacrifican por
tener un pronóstico pobre. En cuanto a las aves, si son pinkies (piel rosada descubierta
de plumas en su totalidad, ojos cerrados, incapaces de moverse) también se considera
la eutanasia.
- Mantener el animal caliente en una incubadora a 85 °F (29.4 °C), a excepción de los
conejos con una temperatura de 75-78 °F (23.9 °C – 25.6 °C).
- Identificar los animales de la camada con colores diferentes para facilitar el monitoreo
y -registro de datos de cada uno de ellos.
- Estimar la edad del paciente y pesarlos dos veces al día. Si hay pérdidas de peso
agudas superiores al 10% y crónicas superiores al 20% son consideradas un mal
pronóstico. En estos casos se considera la eutanasia.
- Rehidratar el animal vía oral (por ejemplo, con Pedialyte®) o fluidos subcutáneos
(Lactato de Ringer) a una dosis de 100 ml/kg/día.
- Utilizar un substrato en las incubadoras. Con ardillas no utilizar toallas sino papel
periódico en tiras. Con aves si se puede utilizar una toalla.
- En el caso de los mamíferos, estimular la región genital y anal con una gaza o algodón
mojado con agua tibia para que defeque y orine.
- La alimentación de los pacientes se realiza de acuerdo con la edad y con la especie. Se
realiza alimentación forzada o gavaje con un tubo gástrico en los pacientes que no
tienen capacidad de alimentarse con sólidos o por sí mismos. Formular substituto
alimenticio según el grupo animal y sus hábitos alimenticios (aves: herbívoros,
omnívoros, carnívoros, insectívoros y piscívoros; mamíferos: herbívoros, omnívoros y
carnívoros).
Alimentación de ardillas huérfanas
Antes de las dos semanas: Alimentar cada dos horas. Iniciar con 0.5 mL antes de cumplir la
primera semana y 0.75 ml antes de cumplir la segunda.
- Día 1: 1 parte de Esbilac puppy® y 5 partes de agua.
- Día 3: 1 parte de Esbilac puppy® y 4 partes de agua.
- Día 5: 1 parte de Esbilac puppy® y 3 partes de agua.
- Día 6 en adelante: 1 porción de Esbilac puppy® y 2 porciones de agua.
- Semana 2-3: Alimentar cada 3 horas. Se alimenta el número de ml de la cantidad de
semanas; por ejemplo: 2 ml en su segunda semana, 3 ml en su tercera semana, y así
sucesivamente.
- Semana 4-7: Alimentar cada 4 horas.
- Semana 5-6: Aumento de apetito. Subir porción a 6-8 ml por alimentación.
- Semana 6-7 en adelante: Ofrecer alimento para roedores y vegetales.
- Semana 7-9: Dar fórmula 3 veces al día. Incluir alimentos sólidos en el recinto.
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- Semana 9-10: Dar fórmula 2 veces al día. Incluir alimentos sólidos en el recinto.
- Semana 10-12: Rechazará fórmula para este momento. Agregar almendras, nueces y
una pequeña porción de semillas de girasol a su alimentación. Cuando puedan abrir
nueces por sí mismos, alrededor de la semana 10-12, pueden ser liberados.
Anexo 6. Ficha de revisión física para pacientes de la clase Aves (Doneley et al 2006).
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Anexo 10. Hoja de medicaciones de emergencias elaborada para una Eclectus loratus (Lora
ecléctica) atendida personalmente durante la consulta; editado por Julio Ruiz.