Capacidad de Planta
Capacidad de Planta
Capacidad de Planta
Capacidad:
Cantidad de producto que puede ser obtenido durante un cierto
período de tiempo. Puede referirse a la empresa en su conjunto o a un centro
de trabajo.
Se expresa por medio de relaciones: Tn por mes, por año; volumen
diario, mensual; No. de unidades diarias, horas máquina por mes; horas
hombre por mes; etc.
Capacidad proyectada o diseñada:
Tasa de producción ideal para la cual se diseñó el sistema. Máxima
producción teórica.
Capacidad efectiva:
Capacidad que espera alcanzar una empresa según sus actuales
limitaciones operativas (personal y equipos). Menor que la capacidad
proyectada.
Tipos de decisiones de capacidad
1. Contracción: Suele utilizarse como último recurso. Trae consigo el
cierre de plantas y despido de personal.
2. Expansión: Ampliación de la capacidad; Ante una decisión de este tipo
hay que estudiar:
Si falta capacidad instalada.
Si no hay un buen aprovechamiento de la capacidad.
Horizonte temporal: más de 1 año.
Objetivo: adecuar la capacidad existente para satisfacer la demanda, de la
forma más eficiente y económica posible
Capacidad instalada
CAPACIDAD DE PRODUCCIÓN
Definición técnica:
La capacidad de producción es el techo de máxima obtención de
bienes y servicios que pueden lograrse por unidad productiva durante un
periodo de tiempo acotado.
La capacidad de producción es la capacidad que tiene una unidad
productiva para producir su máximo nivel de bienes o servicios con una serie
de recursos disponibles. Para su cálculo, tomamos de referencia un periodo
de tiempo determinado.
Este indicador suele utilizarse mucho en la gestión empresarial. Ya
que, si una unidad de producción está produciendo por debajo de su
capacidad de producción, esta unidad no está siendo explotada a su máximo
rendimiento.
Si queremos obtener incrementos, así como decrementos, en la
capacidad de producción, estos van ligados a procesos de inversión o
desinversión. Es decir, si queremos incrementar la capacidad de producción
en una fábrica, la empresa deberá invertir en una nueva máquina que tenga
la capacidad de producir más.
Diferencia entre capacidad de producción y volumen de producción
Conviene no confundir estos dos conceptos. Cuando hablamos de la
capacidad de producción, estamos hablando de la cantidad máxima de
bienes y servicios que puede producir una unidad de producción, bajo unas
condiciones de funcionamiento normales, así como una utilización óptima de
los recursos.
Por otro lado, el volumen de producción, mide la cantidad de bienes y
servicios que una unidad productiva ha sido capaz de producir con los
recursos disponibles y, no siempre bajo unas condiciones normales de
funcionamiento.
De esta forma, mientras que la capacidad de producción mide el
máximo nivel de producción que puede alcanzar una unidad de producción,
el volumen de producción mide el resultado que finalmente se ha producido
con las distintas unidades de producción.
En otras palabras, el volumen de producción no es necesariamente
igual a la capacidad de producción, pues la unidad productiva puede estar
funcionando por debajo de su máximo nivel de rendimiento, obteniendo un
menor volumen de producción, en contraste con su capacidad productiva.
En la gestión empresarial, es muy útil conocer los dos datos. De esta
forma, si conocemos el volumen de producción y su capacidad de
producción, podemos saber cuánto están dejando de producir las unidades
productivas en escenarios en el que los volúmenes de producción no
alcancen su capacidad de producción. Basta con restar el volumen de
producción y la capacidad de producción.
Diferencia entre capacidad de producción y capacidad óptima de
producción
Estos dos conceptos tampoco deben confundirse. En muchos
escenarios, la capacidad de producción mide el máximo nivel de producción
por unidad productiva, utilizando todos los recursos disponibles bajo unas
condiciones favorables de funcionamiento.
Sin embargo, en muchas ocasiones, las unidades productivas no
pueden sostener su nivel máximo de producción en el largo plazo, a la vez
que la demanda no siempre exige una producción en su máxima capacidad.
Para ello se utiliza el concepto de capacidad óptima de producción. Es
decir, el máximo nivel al que puede producir una unidad productiva, de forma
sostenible en el largo plazo. Es decir, en condiciones normales, cual es el
máximo nivel al que puede producir una unidad productiva de forma
sostenible durante un periodo largo de tiempo.
Este concepto, de igual forma, es muy útil en la gestión empresarial,
ya que no siempre disponemos de la capacidad de disponer de nuestras
unidades productivas en su máximo rendimiento, sosteniendo ese
rendimiento en el largo plazo. Cualquier suceso podría provocar una
paralización en la producción, incurriendo en severos problemas para la
compañía.
Planificación de la capacidad de producción
Como decíamos, la capacidad de producción siempre se debe medir
en un periodo determinado de tiempo. Es decir, cuando queremos hacer una
planificación o saber cuál ha sido la capacidad de producción, debemos tener
en cuenta el factor temporal.
De esta forma, la planificación de la producción se hace de la misma
manera. Si queremos planificar la producción, debemos especificar el nivel
de capacidad de producción de las distintas unidades productivas a un
rendimiento óptimo para la compañía.
Para ello, la planificación de la producción se hace desde distintas
ópticas temporales, las cuales son:
Factores internos.
Factores externos.
Entre los factores internos que pueden condicionar la capacidad de
producción cabría destacar:
Equipamiento y mantenimiento.
Instalaciones.
Distribución de la planta de producción y el proceso productivo.
Recursos disponibles.
Capacidad empresarial.
Sistemas de control de la calidad.
Gestión de los puestos de trabajo.
Gestión de los trabajadores.
Diseño del producto o el servicio.
Recursos financieros.
Por otro lado, entre los factores externos que podrían condicionar la
capacidad de producción cabría destacar:
Marco institucional.
Entorno político.
Legislación y regulación vigente.
Convenios colectivos sindicales.
Convenios de empresa.
Capacidad de proveedores.
Entorno económico.
Competencia empresarial.
Relación con entidades de crédito.
Estos factores internos y externos deben tomarse siempre en cuenta, ya
que condicionan nuestra capacidad de producción, así como el
funcionamiento de la compañía.
¿Cómo se calcula la capacidad de producción?
Si queremos saber cuál es la capacidad de producción de una unidad
productiva, la fórmula para el cálculo es bastante simple. La forma de hacerlo
sería, en primer lugar, calculando la cantidad de horas por unidad productiva
que tenemos disponibles.
Es decir, si contamos con una jornada laboral de 8 horas en la que
disponemos de 10 unidades de producción, la cantidad de horas de
producción total son 80 horas.
En segundo lugar, debemos medir la capacidad de producción para un
producto, en función a la unidad productiva y las horas disponibles. Es decir,
debemos dividir la capacidad de producción para un artículo entre el número
de horas disponibles, obteniendo así la capacidad de producción diaria.
En otras palabras, supongamos que cada unidad productiva tarda 1
hora para fabricar una unidad del bien o el servicio. Para el cálculo debemos
dividir el número de horas disponibles (80) entre el tiempo que tarda en
producir una unidad de producción en producir una unidad de producto o
servicio (1). Así, obtendríamos la capacidad de producción diaria.
En el ejemplo, la capacidad de producción diaria sería 80, ya que
disponemos de 80 horas de fabricación diaria, mientras que cada unidad
fabricada tarda, de media, 1 hora en producirse.
En tercer lugar, y mucho más simple. Si queremos medir la capacidad
de producción mensual de las unidades de producción, basta coger la
capacidad diaria obtenida en el paso anterior y multiplicarla por los días
laborales con los que disponemos en el mes.
De la misma forma, se realizaría para calcular la capacidad de
producción anual, pues deberíamos multiplicar por el número de días
trabajados en un año.
Posteriormente, con estos datos, ya podríamos obtener otra serie de
indicadores como el volumen de producción o la tasa de eficiencia. Es decir,
si sabemos que la capacidad de producción diaria es de 80 unidades, si
estamos produciendo 40, podemos saber que la tasa de utilización es del
50%. Es decir, el volumen de producción estaría funcionando a un 50% en
relación a su capacidad de producción.