Conclusion Es
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Conclusion Es
Después de haber trabajado durante gran parte de su vida, las personas esperan, con
todo derecho, alcanzar una pensión de jubilación que les permita disfrutar de una etapa
en la que puedan descansar o cumplir otros retos a los que no habían podido dedicarse en
su vida laboral. Para llegar a ese momento crucial en la vida de las personas mayores, es
importante tomar medidas anticipadas y asegurar una pensión para el futuro.
Este sistema asegura también que, aun cuando aumente la cantidad de pensionistas
respecto a los trabajadores, como ocurre en la actualidad, se logra una pensión adecuada,
estable y sostenible.
Aunque con sus particularidades, en ambos sistemas el objetivo es proveer a una persona
que se jubila la tranquilidad de que mes a mes va a recibir una pensión, gracias al esfuerzo
de haber ahorrado durante su periodo como trabajador.
Ahora bien, debemos de conocer que en el sistema previsional peruano está constituido
por tres regímenes principales: el del Decreto Ley No. 19990 (denominado Sistema
Nacional de Pensiones - SNP), el del Decreto Ley No. 20530 (denominado Cédula Viva) y el
Sistema Privado de Pensiones (SPP). Los dos primeros son administrados por el Estado y
forman parte del Sistema Público de Pensiones; mientras que el tercero es administrado
por entidades privadas denominadas Administradoras Privadas de Fondos de Pensiones
(AFP).
El Régimen decreto Ley 20530, este sistema beneficia a los trabajadores sujetos al
régimen de la actividad privada (Ley No. 4916 – Decreto Leg. No. 728), a los obreros (Ley
No. 8433) y a los funcionarios y servidores públicos bajo el régimen de la actividad pública
(Ley No. 11377/ Decreto Leg. No. 276) no incorporados al Régimen del Decreto Ley No.
20530. Es un sistema de reparto, el cual tiene como característica principal el
otorgamiento de prestaciones fijas - sobre contribuciones no definidas - en valor
suficiente para que la aportación colectiva de los trabajadores financie las pensiones.
En la actualidad, este sistema es administrado por la Oficina de Normalización Previsional
(ONP). Las prestaciones que otorga el SNP son cinco:
1) jubilación;
2) invalidez;
3) viudez;
4) orfandad; y
5) ascendencia.
El Sistema Nacional de Pensiones (SNP) fue creado por el Decreto Ley N° 19990, vigente
desde el 1 de mayo de 1973, y es administrado por la Oficina de Normalización Previsional
(ONP) desde el 1 de junio de 1994. En el SNP: Tus aportes como trabajadora/trabajador
son de carácter solidario e intangible.
Como afiliado al sistema nacional de pensiones (SPP), a tu fallecimiento,
tus sobrevivientes tienen derecho a recibir una pensión; a esta se le denomina pensión de
sobrevivencia y se otorga únicamente a quienes se acrediten como beneficiarios conforme
a las exigencias previstas en las normas.
Son pensiones de sobrevivientes las siguientes:
a) De viudez;
b) De orfandad; y
c) De ascendientes.
Esta pensión se otorgara:
a) Al fallecimiento de un pensionista de invalidez o jubilación.
b) Al fallecimiento de un pensionista de invalidez o jubilación
La pensión de viudedad tiene por objeto cubrir las necesidades económicas del
beneficiario en caso de que se produzca el fallecimiento de la persona que origina la
prestación. Tiene como objeto evitar la desprotección en la unidad familiar si el familiar
era el único o el principal generador de rentas en la misma.
En el caso de los afiliados hombres beneficiarios de una pensión, el cónyuge, viuda tiene
derecho a percibir dicha prestación. En el caso de las afiliadas mujeres, el cónyuge tiene
tal derecho sólo cuando presenta condición de invalidez o tiene más de 60 años.
Adicionalmente, el cónyuge debe haber dependido económicamente del pensionista.
Pensión a otorgar: El monto máximo es igual al 50% de la pensión
c) Alcanzar el huérfano la edad máxima para el goce del beneficio o interrumpir sus
estudios; y
El Capital de Defunción no podrá exceder del monto de la pensión máxima mensual a que
se refiere el Sistema Nacional de Pensiones del Decreto Ley N° 19990, vigente al momento
del fallecimiento, dicho Capital de Defunción será equivalente a seis remuneraciones o
ingresos de referencia.
Diseñar los sistemas de pensiones es una labor muy compleja. No es casualidad que las
discusiones de reforma de pensiones pueden llevar muchos años, ya que requieren de
un consenso social amplio que no es fácil de lograr por la multiplicidad de actores,
intereses y mercados potencialmente afectados. Articular la discusión de las reformas en
torno al objetivo de pensión de largo plazo puede facilitar este proceso.