Design Thinking
Design Thinking
Design Thinking
Design Thinking es una metodología para diseñar productos o servicios basándonos en las
necesidades reales del cliente o el usuario. Para ello lo investigamos, definimos sus necesidades,
creamos soluciones, ideamos prototipos de las mejores soluciones y luego las ponemos a prueba. Esto
sería un proceso de design thinking.
Empatizar
Definir
En la segunda fase del design thinking es el momento de definir las necesidades del cliente y por qué las
necesita. A estos problemas concretos se les conoce como insights y nos permiten focalizarnos hasta
hallar la solución definitiva.
Idear
De ahí pasamos a la fase 3, aquí comienza toda la diversión: es la etapa de idear y crear
muchas soluciones prácticas y creativas basadas en las necesidades del usuario. Para ello, seguimos una
serie de técnicas de pensamiento divergente y de resolución de problemas a través de la creatividad. Lo
importante es no quedarnos en una sola respuesta porque igual no nos vale, tenemos que buscar
muchas soluciones, ya que de la cantidad sale la calidad.
Para entender mejor la etapa creativa, David Harrison nos explica a través de un ejemplo práctico y
cotidiano qué proceso seguir para generar muchas soluciones.
Prototipar
En la fase 4 lo que hacemos es convertir la idea en un prototipo digital o físico. Lo podemos hacer con
una caja de Lego, playmobil, plastilina o simplemente empleando cajas de cartón… Como bien explica
David Harrison, tiene que ser una construcción rápida y efectiva que luego pondremos a prueba en la
fase 5.
una premisa fundamental de esta metodología es centrarnos en las necesidades del cliente y no en
nuestras propias intuiciones como diseñadores
Evaluar
En la última fase vamos a invitar a nuestros usuarios a entrar en contacto con el prototipo que hemos
creado y ver cómo interactúan. Esta quinta etapa trata de evaluar, y aquí es donde descubriremos
posible errores y carencias que pueda tener el producto. Cabe reseñar que el design thinking se basa en
las necesidades del cliente y no en nuestros deseos como diseñadores, el design thinking tiene que
responder a una necesidad real del usuario.