Filosofia
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Asignatura: Filosofía
Año:2020
4.1 Objeto de estudio de la Lógica Filosófica
A lo largo de la historia se han dado varias definiciones de lógica. Según Sergio
Custodio en su libro Introducción a la lógica, la lógica puede ser vista de tres
maneras: según su objeto de estudio, según su método y como ciencia.
Según su método
Toda actividad humana posee un método, es decir, una manera propia de estudiar
su objeto de estudio. Ya indicamos que el objeto de estudio de la lógica es el
razonamiento, mientras que su método es por una parte formal y por otra,
orientada al razonamiento. Por ello, decimos que la lógica es la ciencia de las
formas de pensar, razonar o argumentar. Esto es adecuado, ya que la lógica se
interesa por las formas que se originan en el pensamiento. La lógica se define
como ciencia formal, ya que estudia las formas y no los contenidos, formas que se
dirigen al razonamiento o a la arg umentación.
Como ciencia
Para que la lógica sea considerada como ciencia, además de poseer un objeto y
un método, es necesario que también sea sistemática.
Es común considerar que el hombre piensa, y ha pensado acerca de la naturaleza,
la sociedad y sobre sí mismo. Pero, pensar sólo es posible bajo ciertas
condiciones, más cuando se trata de comunicar estos pensamientos.
Decimos que, la lógica nos enseña a pensar y a comunicar nuestros pensamientos
en una forma clara y ordenada. Esto significa, que debemos conocer las reglas
mínimas para establecer relaciones entre conceptos, juicios y premisas y
conclusiones. De esta forma, podemos decir que la lógica es una ciencia porque
sistematiza las formas de pensar, para poder estudiarlas y establecer de manera
clara, como se debe de razonar de manera correcta y evitar los razonamientos
incorrectos o fallos del pensamiento.
"El pensar cotidiano y común es sistematizado, es decir, ordenado, para un
estudio riguroso y serio" (Sergio Custodio. Introducción a la lógica, p. 20). Y en
esta sistematización vamos de las formas más simples a las más complejas, de
las menos universales a los principios fundamentales.
Los Juicios
La relación de dos conceptos da lugar a la formulación de un juicio. Si se da entre
ambos una relación de conveniencia decimos que el juicio es afirmativo, y en caso
contrario, negativo. El sujeto del juicio es el concepto del que se afirma o niega
algo; el predicado es el concepto que se afirma o niega del sujeto. Aristóteles
distingue en los juicios la materia y la forma. La materia o contenido del juicio son
los conceptos que se relacionan; la forma es la relación que se establece entre
ellos a través del verbo ser. Aristóteles representa el sujeto del juicio con un signo
(S) y el predicado con otro (P) para intentar separar la materia de la forma: así, la
forma del juicio "Juan es alto" se representaría como "S es P", y la forma del juicio
"Juan no es alto" como "S no es P".
Los juicios se clasifican en varios grupos, atendiendo a la cantidad (según la
extensión del sujeto: universales, particulares, singulares), la cualidad (según la
cualidad de la cópula: afirmativos y negativos), la relación (según la relación entre
el sujeto y el predicado: categóricos, hipotéticos y disyuntivos) y la modalidad
(según el modo en que expresan la relación entre el sujeto y el predicado:
apodícticos, asertóricos y problemáticos).
Apodíctico
(del griego ápodeiktikóç, convincente). Lo demostrable de manera incontrovertible,
concepto para designar el conocimiento absolutamente verdadero. Con este
término, Aristóteles se refiere a la demostración rigurosamente necesaria, inferida
deductivamente de premisas que sin duda alguna son verdaderas. Así, ve el
silogismo como instrumento del saber apodíctico. El término «apodíctico» se
emplea para designar los juicios de necesidad a diferencia de los de posibilidad
(problemáticos), y de los juicios de realidad (asertóricos).
4.3 La Semántica y la Semiótica
Semántica
Se denomina como semántica a la ciencia lingüística que estudia el significado de
las palabras y expresiones, es decir, lo que las palabras quieren decir cuando
hablamos o escribimos. Término acuñado por Michel Bréal en 1833.
La finalidad de la semántica es descomponer el significado en unidades más
pequeñas, llamadas semas o rasgos semánticos, estos permiten segmentar el
significado de las palabras, y diferenciar palabras de significado parecido y
palabras de significado opuesto.
Por otro lado, la semántica lingüística se encarga de estudiar la denotación y
connotación de las palabras, cuando el mensaje se expresa objetivamente, se dice
que su significa es denotativo y, cuando a la comunicación objetiva se le añade
alguna valoración personal mediante gestos o entonación, se habla de que su
significado es connotativo.