Agua
Agua
Agua
SUSTANCIAS HIDROFILICAS.
SUSTANCIAS HIDROFOBICAS.
SUSTANCIAS ANFIPATICAS.
DISOLUCIONES MOLECULARES.
DISOLUCIONES COLOIDALES.
El agua (H2O) es una molécula formada por dos átomos de hidrógeno (H) y uno de
oxígeno (O). La unión de esos elementos con diferente electronegatividad proporciona unas
características singulares.
Las moléculas que se disuelven bien en agua se llaman hidrófilas, por ejemplo la
sal, el azúcar, y las que no se disuelven en agua se llaman hidrófobas, por ejemplo el aceite.
AGUA COMO DISOLVENTE.
Entre las propiedades físicas del agua destaca por su importancia biológica la
extraordinaria capacidad que presenta para disolver una amplia gama de sustancias. Otras
propiedades son aprovechadas por algunos seres vivos en los que el agua desempeña
funciones específicas, sin embargo, dado que la gran mayoría de las biomoléculas se
encuentran en las células en disolución acuosa, las propiedades disolventes del agua son de
importancia capital para todas las formas de vida.
Al igual que las demás propiedades físicas, la capacidad disolvente del agua está
basada en su naturaleza dipolar, que le permite establecer interacciones electrostáticas con
determinados tipos de solutos.
Sustancias Hidrofílicas.
(del griego "amantes del agua"). Son netamente solubles en agua. Entre ellas
podemos diferenciar las sustancias iónicas, que poseen carga eléctrica neta, y las sustancias
polares, que presentan en su molécula cargas parciales. Muchas biomoléculas son sustancias
iónicas, como las sales minerales y las biomoléculas orgánicas poseedoras de grupos
funcionales ionizados al pH de la célula (por ejemplo, los aminoácidos). Otras muchas son
sustancias polares, como las biomoléculas orgánicas con grupos funcionales capaces de
formar puentes de hidrógeno (por ejemplo, los azúcares).
Sustancias Hidrofóbicas.
(del griego "miedo al agua"). Son totalmente insolubles en agua. Se caracterizan por no
poseer cargas eléctricas netas ni parciales, es decir, son totalmente apolares. Este carácter
apolar les impide establecer interacciones energéticamente favorables con las moléculas de
agua, es más, interfieren con los puentes de hidrógeno entre ellas, por lo que, cuando se
encuentran en medio acuoso, tienden a agregarse y precipitar. De este modo ofrecen al agua
la mínima superficie de contacto posible, y así se minimizan también las interferencias que
ejercen sobre los puentes de hidrógeno entre sus moléculas.
Algunas biomoléculas como las grasas neutras y las ceras son de naturaleza hidrofóbica;
también lo son los gases biológicamente importantes, como el O2, el CO2 y el N2, que son muy
poco solubles en agua.
Sustancias Anfipáticas.
Son sustancias que presentan en su molécula una parte polar (o cargada) y otra
no polar. Cuando estas sustancias se mezclan con el agua las dos zonas de su molécula
experimentan tendencias contrapuestas: las zonas polares tienden a establecer interacciones
electrostáticas con las moléculas de agua mientras que las zonas no polares tienden a
agregarse para ofrecer la mínima superficie de contacto con ella. El resultado de estas dos
tendencias contrapuestas es que las moléculas anfipáticas se asocian para constituir unas
estructuras estables denominadas micelas en las que las zonas polares se disponen hacia el
exterior, en contacto con el agua, mientras que las zonas no polares lo hacen hacia el interior,
aisladas del contacto con el agua y unidas entre sí por unas atracciones débiles
llamadas interacciones hidrofóbicas.
En determinadas condiciones las sustancias anfipáticas en el seno del agua pueden
dar lugar a bicapas cerradas sobre sí mismas que constituyen la base estructural de las
membranas celulares. Algunas biomoléculas importantes son sustancias anfipáticas; entre
ellas se encuentran los ácidos grasos, las proteínas globulares y una amplia categoría de
lípidos llamados lípidos de membrana.
El agua no es tan sólo el disolvente en el que tienen lugar las reacciones químicas de
las células vivas, sino que a menudo participa efectivamente como reactivo en dichas
reacciones. Un tipo de reacción química muy común en los seres vivos es la hidrólisis (del
griego "rotura por el agua") en la que una molécula de agua se adiciona a un enlace químico
rompiéndolo. Esta reacción participa en la degradación biológica de distintos tipos de
biomoléculas.