La Rosa Tatuada
La Rosa Tatuada
La Rosa Tatuada
De Tennessee Williams
Traducción Vicente Molina Foix
Dirección Carme Portaceli
Funciones
Del 29 de abril al 19 de junio de 2016
De Tennessee Williams
Traducción Vicente Molina Foix
Dirección Carme Portaceli
Actores vídeo
Niño 1 Simón García Prieto
Niña 2 Claudia Portaceli Delgado
Niña 3 Martina Portaceli Delgado
Niña 4 María Ávila Sánchez
Equipo Artístico
A su vez, el autor muestra cómo esta sociedad hermética, que predica una
vida austera, se salta continuamente sus propios cánones, pues no le importa
abusar del débil para obtener beneficios aunque de cara a la galería todo quede
justificado.
NOTAS DE LA DIRECTORA
“Hagamos una plegaria por todos los corazones salvajes que viven encerrados en jaulas”.
Tennessee Williams
Esta frase de nuestro autor y saber que escribió la obra junto al mar, en
Barcelona, locamente enamorado de un italiano es lo que me lleva a la esencia de
lo que habla La rosa tatuada.
Serafina se niega a vivir, sí, pero la vida es inevitable y entra y entra y entra
por las venas poco a poco y de pronto nadie se puede sustraer a ella, a una risa,
a un contacto, al amor… A vivir.
Esta obra es un canto a la vida. Una obra optimista y genial que necesita
de unas interpretaciones llenas de verdad y con el diafragma arriba, “su” como
dicen estos italianos. Y tengo, por suerte para mí, el mejor elenco con el que podía
contar. Esa Serafina/Aitana llena de vida, de sentido del humor, de
contradicciones. Ese Álvaro/Roberto que es un corazón con piernas (y con orejas).
Rosa/Alba y su necesidad de tirar para adelante sin prejuicios absurdos.
Jack/Nacho rompiéndose por una promesa hecha contra su amor profundo.
Assunta, Estella, Miss York/ Gabriela con sus diferentes y extremadas relaciones
con Serafina. Padre de Leo/Jordi con sus arraigos ideológicos sin los cuales se
resquebrajaría. Doctor, Bessie, Vendedor/Fabu con sus contradicciones entre la
tradición y la modernidad. Giuseppina/Ana constantemente cabreada con
Serafina y Violetta, Flora/Paloma cuya venganza hace temblar los cimientos del
sueño. Todos ellos entregados a esos personajes reconocibles que conforman este
paisaje real lleno de poesía y magia.
Gracias a todos por haber volado juntos en este viaje brutal que es La rosa
tatuada. Y gracias, Ernesto, por haberme dado la oportunidad de hacer este canto
a la vida.
Sí, es cierto. Son gente normal, como todos nosotros, con contradicciones
como tenemos nosotros. Son contradicciones por la sociedad donde viven, por lo
que les pasa, aunque no quieren que les pase. Lo que está claro es que Williams
no escribe obras convencionales. Es la primera vez que me enfrento a un texto de
este autor. Lo conocía, como lo conocemos todos. Sus obras forman parte de
nuestra cultura, hemos visto las películas en el cine, incluso cientos de veces en
la televisión y son producciones magníficas, con fantásticos actores, pero por
mucho que lo haya leído y visto, no he entrado en su esencia hasta ahora. Insisto
en que me parece que no es nada convencional; su obra es un canto a la vida. Él
escribe La rosa tatuada en Barcelona, de la primera a la última letra junto al mar,
mirando al mar y enamorado perdidamente de un italiano.
Obtuvo un indudable éxito también con otras obras, como Verano y humo
(1948), revisada y publicada bajo el título de Excentricidades de un ruiseñor
(representada en 1964); La rosa tatuada (1950); el extenso drama en un acto De
repente, el último verano (1958); Dulce pájaro de juventud (1959) y La noche de la iguana
(1961).
Entre sus trabajos como directora de escena destacan: Solo son mujeres de
Carmen Domingo (2015); El President de Thomas Bernhard (2014); Krum
d´Hanoch Levin (2014); Las dos bandoleras de Lope de Vega (2014); Televisor &
Miseria de la II Transición de Albert Boronet (2013); Nadie verá este vídeo de Martin
Crimp (2012); Bajos fondos de Máximo Gorki (211); Nuestra Clase de Tadeusz
Slobodzianek (2011); Conte d´hivern de W. Shakespeare (2010); Prometeu de
Esquilo-Heiner Muller (2010) Ante la jubilación de Thomas Bernhard (2008); Josep
i Maria, de Peter Turrini (2007); Fairy, de Toni Martín y Carme Portaceli (2007);
Un lloc conegut, de Daniela Feixas (2007); La suïcida (Zena bomba) de Ivana Sajko
(2007); L’agressor, de Thomas Jonigk (2006); codirección de J’arrive...! de Marta
Carrasco (2006); La finestra tancada, de Agustí Vila (2006); Aguantando la vela, de
Fabrice Melquiot (2005); La casa de Bernarda Alba, de García Lorca (2005); La pell
en flames, de Guillem Clua (2005); Raccord, de Rodolf Sirera (2005); Sopa de pollastre
amb ordi, de Arnold Wesker (espectáculo realizado en 2004, que obtuvo el Premio
ADE 2005 a la mejor dirección y los Premis de les Arts Escèniques de la
Generalitat Valenciana 2005 por mejor dirección, mejor actriz, mejor escenografía
y mejor iluminación).
Ha estado nominado dos veces como mejor actor principal por Viandantes,
Demonios y una como mejor actor de reparto Homebody/Kabul para los premios
butaca de Catalunya.
Entre sus trabajos en Cine destacan DOS a love story in reverse, producción
internacional dirigida por Stathis Athanasiou en el que interpreta a uno de sus
protagonistas y con la que ha ganado el Premio a Mejor película extranjera y
Premio del público en el New York Independent Film Festival.
Sus trabajos más recientes en escenarios teatrales han sido Medea (dir.
Andrés Lima) por el que ha obtenido el X Premio Valle-Inclán de Teatro, el
Premio Ceres 2015 del Festival Internacional de Teatro de Mérida así como el
Premio Fotogramas de Plata en su 66 edición; Los cuentos de la peste (dir. Joan
Ollé); La Chunga de Mario Vargas Llosa (dir. Joan Ollé); Babel (dir. Tamzin
Townsend); Santo (dir. Ernesto Caballero); Homero, Iliada (dir. Andrea D´Odorico;
Un diso salvaje (dir. Tamzin Townsend); Juana de Arco en la hoguera (dir.Josep
Pons); Las mil noches y una noche (dir, Joan Ollé); Odiseo y Penélope (dir. Joan Ollé);
Cruel y tierno (dir. Javier García Yague); Las criadas, de Jean Genet (dir. Mario
Gas), la ópera-oratorio de Arthur Honnegger titulada Juana de Arco en la hoguera
(dir. Daniele Abbado) y La verdad de las mentiras, donde de la mano del director
de escena Joan Ollé compartía escenario con el novelista Mario Vargas Llosa.