Microcefalia Macrocefalia e Hidrocefalia
Microcefalia Macrocefalia e Hidrocefalia
Microcefalia Macrocefalia e Hidrocefalia
MACROCEFALIA
HIDROCEFALIA
MICROCEFALIA
La microcefalia es un defecto congénito en donde el tamaño de la cabeza del
bebé es más pequeño de lo esperado en comparación con el tamaño de la
cabeza de bebés de la misma edad y sexo. Los bebés con microcefalia con
frecuencia tienen un cerebro más pequeño que podría no haberse desarrollado
adecuadamente.
¿Qué es la microcefalia?
Otros problemas
Los bebés con microcefalia pueden tener una gama de problemas adicionales,
dependiendo de lo grave que sea esa afección. La microcefalia se ha asociado a
los siguientes problemas:
Convulsiones.
Retraso en el desarrollo, como problemas del habla y con otros indicadores
del desarrollo (como sentarse, pararse y caminar).
Discapacidad intelectual (disminución de la capacidad para aprender y
funcionar en la vida diaria).
Problemas con el movimiento y el equilibrio.
Problemas para alimentarse, como dificultad para tragar.
Pérdida de la audición.
Problemas de la vista.
Estos problemas pueden variar desde leves hasta graves, y con frecuencia duran
toda la vida. Debido a que el cerebro del bebé es pequeño y no se ha
desarrollado completamente, los bebés con microcefalia grave pueden tener
más de estos problemas, o tener más dificultades debido a ellos, que los bebés
con microcefalia leve. La microcefalia grave también puede poner en peligro la
vida. Debido a que es difícil predecir al momento del nacimiento los problemas
que tendrá el bebé con microcefalia, estos bebés necesitarán con frecuencia
que un proveedor de atención médica les haga un seguimiento de cerca
mediante chequeos regulares para vigilar su crecimiento y desarrollo.
Tratamientos
El zika y la microcefalia
La infección por el virus del Zika durante el embarazo es una de las causas
de microcefalia. Durante el embarazo, la cabeza del bebé crece porque crece su
cerebro. La microcefalia puede ocurrir porque el cerebro del bebé no se
desarrolló correctamente durante el embarazo o dejó de crecer después del
nacimiento.
Los bebés infectados con zika antes del nacimiento pueden presentar daños en
los ojos y/o la parte del cerebro responsable de la visión, lo cual puede afectar
su desarrollo visual. Tanto los bebés con microcefalia como los que no la tienen
pueden sufrir problemas oculares. Si su bebé nació con infección congénita por
el virus del Zika, debería recibir los exámenes y controles recomendados para
detectar problemas oculares o de otro tipo, incluso si el bebé parece estar sano.
Un estudio reciente en Brasil reveló que los bebés de 19 a 24 meses
con infección congénita por el virus del Zika demostraron que
tienen dificultades para sentarse, alimentarse y dormir solos. Los bebés también
tuvieron convulsiones y problemas auditivos y oftalmológicos, como el hecho
de no reaccionar ante el ruido del sonajero y no ser capaces de seguir a un
objeto en movimiento con la mirada. Cabe destacar que será necesario que los
bebés afectados por el virus del Zika sigan recibiendo atención especializada
por parte de diferentes proveedores de atención médica y cuidadores a medida
que van creciendo.
No todos los bebés nacidos con infección congénita por el virus del Zika
tendrán todos estos problemas. Algunos bebés con la infección por el virus del
Zika congénita que no tienen microcefalia en el nacimiento luego pueden
experimentar un crecimiento tardío de la cabeza y desarrollar microcefalia
posnatal.
Macrocefalia
Epidemiología
En cuanto a la frecuencia de esta patología, no existen datos estadísticos
específicos acerca de su prevalencia en la población general. A pesar de esto,
es una condición médica que puede presentarse en aproximadamente un 5%
de las personas, afectado de forma mayoritaria al sexo masculino.
Cuadro Clínico
La característica clínica más definitoria de la macrocefalia es la presencia de un
tamaño incrementado de la cabeza. Concretamente, puede observarse un
perímetro craneal superior a lo esperado para el sexo y grupo de edad de la
persona afectada.
En este sentido, este tipo de anomalía estructural va a provocar otra serie de
signos y síntomas significativos, como las crisis convulsivas, el retraso
generalizado del desarrollo, la presencia de déficits cognitivos, alteración de la
marcha, cefaleas recurrentes, náuseas y vómitos, somnolencia, hipertensión
intracraneal, etc.
Etiología
Las causas etiológicas de la macrocefalia pueden ser diversas, algunas de
ellas están relacionadas con las patologías cerebrales y alteración del líquido
cefalorraquídeo (LCR), mientras que otras están relacionadas con anomalías
óseas.
Diagnóstico
La macrocefalia es una condición médica, que gracias a rasgos estructurales
característicos, puede ser detectada durante la gestación, a través de las
ecografías rutinarias.
Sin embargo, no siempre es observable en estas fases, por lo que la presencia
de rasgos susceptibles de diagnóstico deben ser examinados a través de la
exploración física craneal, análisis neurológico y pediátrico o empleando
diversas pruebas complementarias (Resonancia magnética, rayos X, punción
lumbar, etc).
Tratamiento
A pesar de que no existe un tratamiento curativo para la macrocefalia, se han
descrito diversas intervenciones terapéuticas para el control sintomatológico.
Por lo tanto, en función de la causa etiológica se podrán emplear diversos
abordajes farmacológicos, fundamentalmente para el tratamiento de las
complicaciones médicas y además, abordajes no farmacológicos (rehabilitación
neuropsicológica, estimulación temprana, educación especial, etc), para el
abordaje de las posibles secuelas neurológicas y cognitivas.
Pronóstico
El pronóstico médico de las personas que padecen macrocefalia depende
fundamentalmente de la causa de esta patología y de la gravedad del cuadro
clínico asociado.
En algunos casos, es posible detectar un curso clínico benigno, con signos y
síntomas muy sutiles, por lo tanto, podrán desarrollarse de forma eficiente en
todas las áreas, tanto física como cognitiva.
Sin embargo, en otros muchos casos, las complicaciones médicas generan
importantes patologías médicas, por lo que será necesaria una intervención
terapéutica individualizada para asegurar la integridad física de la persona
afectada y por otro lado, permitir que alcance un nivel funcional eficiente e
independiente.
HIDROCEFALIA
La hidrocefalia es la acumulación de líquido dentro de las cavidades
(ventrículos) profundas del cerebro. El exceso de líquido aumenta el tamaño de
los ventrículos y ejerce presión sobre el cerebro.
Síntomas
Los signos y síntomas de la hidrocefalia varían en cierta medida según la edad
de aparición.
Bebés
Cambios en la cabeza
Vómitos
Somnolencia
Irritabilidad
Alimentación deficiente
Convulsiones
Crecimiento deficiente
Dolor de cabeza
Somnolencia o letargo
Náuseas o vómitos
Falta de equilibrio
Falta de coordinación
Falta de apetito
Convulsiones
Incontinencia urinaria
Cambios conductuales y cognitivos
Irritabilidad
Cambios en la personalidad
Dolor de cabeza
Letargo
Visión alterada
Factores de riesgo
Recién nacidos
Desarrollo anormal del sistema nervioso central que puede obstruir el flujo
de líquido cefalorraquídeo
Sangrado dentro de los ventrículos, una posible complicación del parto
prematuro
Complicaciones
Diagnóstico y tratamiento