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Libro guía para los Ejercicios Espirituales
de San Ignacio de Loyola
ÍNDICE GENERAL
PRESENTACIÓN ..................................................... 7
INDICE GENERAL .................................................. 9
INTRODUCCIÓN .................................................... 13
ORACIONES DIARIAS ........................................... 23
A. Oración de la mañana .................................... 23
B. Otras oraciones para rezar durante el día .... 29
C. Santa Misa ........................................................ 37
D. Visita al Santísimo Sacramento .................... 44
E. Oraciones para la Comunión ........................ 49
F. Oraciones de la noche .................................... 51
EJERCICIOS ESPIRITUALES ................................. 57
A. Indicaciones generales ..................................... 57
B. Consejos útiles .................................................. 59
C. Principio y fundamento ................................... 61
D. Oración mental ................................................. 62
E. Dificultades en la oración mental ................... 68
F. Adiciones para mejor hacer los Ejercicios ..... 69
G. Examen particular ............................................. 71
H. Otros modos de orar ........................................ 73
I. Algunas citas de la Biblia ................................... 78
J. Meditaciones variadas ........................................ 79
PRIMER SEMANA .................................................... 87
A. Indicaciones para esta semana ......................... 87
B. Adiciones para esta semana .............................. 87
C. Penitencia: muerte al pecado, vida en Dios ... 88
D. Meditaciones de la primer semana .................. 92
SÍGUEME
B. Peticiones y recomendaciones
para esta cuarta semana ................................... 254
C. Misterios gloriosos ............................................ 256
D. Otras oraciones ................................................. 258
E. Misterios gloriosos ............................................ 260
F. Contemplación para alcanzar amor ................ 278
G. Reglas para sentir con la Iglesia ...................... 282
H. Renovación de las promesas del Bautismo ... 287
I. Oración por los Ejercicios ................................. 289
J. Indulgencia por haber realizado Ejercicios ..... 290
QUINTA SEMANA ................................................... 291
A. Vive en gracia de Dios ....................................... 291
B. Confiésate con frecuencia .................................. 292
C. Participa en la Santa Misa ................................... 293
D. Reza ....................................................................... 298
E. Sé devoto de María ............................................. 301
F. Busca un director espiritual ................................ 305
G. Haz todos los años tus Ejercicios ..................... 306
H. Sé apóstol ............................................................. 307
APENDICE 1: Exámenes - oración ....................... 309
A. Siguiendo los mandamientos ............................ 309
B. Siguiendo las virtudes cristianas ....................... 328
C. Siguiendo los vicios capitales ............................ 331
D. Siguiendo el Amor de Dios y del prójimo ...... 332
E. Siguiendo el Padre nuestro ............................... 337
APÉNDICE 2: Indicaciones útiles ........................ 343
A. Reglas para distribuir limosnas ....................... 343
B. Observaciones respecto a los escrúpulos ...... 344
C. Indicaciones para el examen particular .......... 346
SÍGUEME
14
INTRODUCCIÓN
A. ORACIONES DE LA MAÑANA.
Al despertar.
Cristo Rey me llama. Me levantaré para ofrecerle oro,
incienso y mirra: mi cuerpo, obras y afectos. Amén.
Ofrecimiento breve.
Señor, ocúpate Tú de mí y de mis cosas, y yo me
ocuparé de Ti y de las tuyas.
17
SÍGUEME
Padre Nuestro.
Padre nuestro que estás en el Cielo, santificado sea tu
nombre, venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad
así en la tierra como en el Cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona
nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a
los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación; y
líbranos del mal. Amén.
Ave María.
Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es
contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres; y
bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros
pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Gloria.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo; como
era en el principio, ahora, y siempre, por los siglos de los
siglos. Amén.
Credo.
Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del
cielo y de la tierra.
Y en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor.
Que fue concebido por obra y gracia del Espíritu
Santo; nació de Santa María Virgen.
Padeció bajo el poder de Poncio Pilato; fue
crucificado, muerto y sepultado.
Descendió a los infiernos; al tercer día resucitó de
entre los muertos.
ORACIONES DIARIAS
Salve.
Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida,
dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve.
A ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a ti
suspiramos gimiendo y llorando en este valle de
lágrimas.
Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros
esos tus ojos misericordiosos, y después de este
destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre.
¡Oh clementísima!, ¡oh piadosa!, ¡oh dulce Virgen María!
V. Ruega por nosotros santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas
de nuestro Señor Jesucristo.
Acto de contrición.
Ofrecimiento de obras
(de Mons. A. Tortolo).
1. Señor, este día lo tienes preparado para mí desde
toda la eternidad con todos sus pormenores, sus
problemas, sus cruces y sus goces. Sé que todo es gracia
para mí y todo es providencia sobre mí. Tú estás en
todo.
2. Señor, el deber de estado, el deber de cada
instante, es lo único que puedes aceptar con gozo,
además de exigirlo por justicia. Mi santidad, mi
personalidad de santo depende sólo de mi fidelidad y de
mi generosidad contigo a través de mi deber de estado3.
3. Señor, Tú quieres redimir, salvar y santificar por
mi intermedio. Soy tu instrumento. Pero como
instrumento tuyo debo estar vitalmente unido a Ti, por
medio de la gracia, y hacer contigo todas las cosas.
4. Señor, mi día entonces no será mío, sino tuyo.
Convivimos en la misma casa, compartimos la misma
Consagración.
Señora y Madre mía. Yo me ofrezco todo a ti; y en
prueba de mi filial afecto te consagro en este día: mis
ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra,
todo mi ser. Ya que soy todo tuyo, Madre de bondad,
ORACIONES DIARIAS
Bendita
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues
todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza. A ti
celestial princesa Virgen sagrada María, yo te ofrezco en
este día: alma, vida y corazón. Mírame con compasión,
no me dejes Madre mía.
C. SANTA MISA.
RITO DE ENTRADA.
Saludo inicial
Sacerdote: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo.
Pueblo: Amén.
S. La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor del
Padre, y la comunión del Espíritu Santo, esté con todos
vosotros.
P. Y con tu Espíritu.
Rito penitencial
S. Hermanos antes de celebrar los sagrados
misterios, reconozcamos nuestro pecados (pausa).
T. Yo confieso ante Dios todopoderoso, y ante
vosotros, hermanos, que he pecado mucho de
pensamiento, palabra, obra y omisión; por mi
culpa, por mi culpa, por mi gran culpa.
Por eso ruego a santa María, siempre Virgen, a
los Ángeles, a los Santos y a vosotros, hermanos,
que intercedáis por mí ante Dios, nuestro Señor.
S. Dios todopoderoso tenga misericordia de
nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida
eterna.
P. Amén.
o también:
S. Señor ten misericordia de nosotros.
P. Porque hemos pecado contra ti.
S. Muéstranos tu misericordia.
P. Y danos tu salvación.
ORACIONES DIARIAS
o bien:
Invocación al Señor
S. Señor, ten piedad. o bien : Kyrie, eleison.
P. Señor, ten piedad. o bien: Kyrie, eleison.
S. Cristo, ten piedad. o bien: Christe, eleison.
P. Cristo, ten piedad. o bien: Christe, eleison.
S. Señor, ten piedad. o bien: Kyrie, eleison.
P. Señor, ten piedad. o bien: Kyrie, eleison.
Himno de alabanza:
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los
hombres que ama el Señor.
SÍGUEME
Oración:
S. Oremos... por los siglos de los siglos.
P. Amén.
LITURGIA DE LA PALABRA
Evangelio:
S. El Señor esté con vosotros.
P. Y con tu Espíritu.
ORACIONES DIARIAS
LITURGIA EUCARÍSTICA
Tiene lugar la procesión de ofertorio.
(Al ofrecer el pan) S. Bendito seas Señor, Dios del
universo, por este pan, fruto de la tierra y del trabajo del
hombre, que recibimos de tu generosidad y ahora te
presentamos: él será para nosotros pan de vida.
P. Bendito seas por siempre, Señor.
(Al ofrecer el vino) S. Bendito seas Señor, Dios del
universo, por este vino, fruto de la vid y del trabajo del
hombre, que recibimos de tu generosidad y ahora te
presentamos: él será para nosotros bebida de salvación.
P. Bendito seas por siempre, Señor.
(Invitación a la oración) S. Orad, hermanos, para que
este sacrificio, mío y vuestro, sea agradable a Dios,
Padre Todopoderoso. (U otra fórmula semejante).
P. El Señor reciba de tus manos este Sacrificio,
para alabanza y gloria de tu Nombre, para nuestro
bien y el de toda su Santa Iglesia.
Prefacio:
S. El Señor esté con vosotros.
ORACIONES DIARIAS
P. Y con tu Espíritu.
S. Levantemos el corazón.
P. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
S. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
P. Es justo y necesario.
Trisagio:
¡Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios del
universo. Llenos están el cielo y la tierra de tu
gloria! ¡Hosana en el cielo!
Bendito el que viene en nombre del Señor.
¡Hosana en el cielo!
(Después de la Consagración: “esto es mi cuerpo”... “este es
el cáliz de mi sangre”):
S. Este es el misterio de la fe (u otra fórmula).
P. Anunciamos tu muerte, proclamamos tu
resurrección, ¡Ven, Señor Jesús!
Alabanza final:
P. Por Cristo, con Él y en Él, a Ti Dios Padre
Todopoderoso, en la unidad del Espíritu Santo, todo
honor y toda gloria, por los siglos de los siglos.
P. Amén. (O bien): ¡Amén! ¡Amén! ¡Amén!
SÍGUEME
Preparación a la Comunión:
S. Fieles a la recomendación del Salvador... nos
atrevemos a decir:
P. Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu reino,
hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo,
danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden,
y no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
S. Líbranos Señor, de todos los males... mientras
esperamos la venida de nuestro Señor Jesucristo.
P. Tuyo es el Reino, tuyo el poder y la gloria por
siempre, Señor.
Rito de la paz:
S. Señor Jesucristo.... concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
P. Amén.
S. La paz del Señor sea siempre con vosotros.
P. Y con tu espíritu.
(De acuerdo a la oportunidad se dan el saludo de la paz):
S. La paz sea contigo.
P. Y con tu espíritu.
Cordero de Dios:
Cordero de Dios, que quitas el pecado del
mundo, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del
mundo, ten piedad de nosotros.
ORACIONES DIARIAS
Al comulgar:
Ministro: El Cuerpo de Cristo.
P. Amén. (O bien: Así es).
RITO DE CLAUSURA
F. ORACIONES DE LA NOCHE.
Antes de acostarte, arrodillado, y hecha la señal de la
cruz, haz esta oración:
Dios y Señor mío, en quien creo y espero, a quien
adoro y amo con todo mi corazón, te doy gracias por
haberme creado, redimido, hecho cristiano y conservado
en este día. Dame la gracia de conocer mis pecados y
arrepentirme de ellos.
Hacer un examen breve de conciencia, siguiendo, por
ejemplo, estas indicaciones:
1°. Da gracias a Dios por los beneficios recibidos
(especialmente durante el día);
2°. Pide la gracia, la luz, para conocer tus faltas y
pecados y rechazarlos;
3°. Examina las faltas o pecados cometidos durante
el día, particularmente tu defecto dominante;
4°. Pide perdón a Dios por todos esos pecados y
faltas;
5°. Propone, con la gracia de Dios, no volverlos a
cometer mañana.
Examen de conciencia sobre los Ejercicios.
Durante estos días el examen de conciencia se debe hacer
sobre la fidelidad a los Ejercicios: las indicaciones que se dan,
“adiciones”, consejos y sobre todo las inspiraciones del
Espíritu Santo. Fuera de ejercicios se hará sobre el defecto
dominante o, mejor aún, sobre la virtud que más necesitamos.
Las siguientes preguntas te pueden ayudar para hacer el
examen de conciencia sobre los Ejercicios:
ORACIONES DIARIAS
Oración.
Señor mío Jesucristo, he llegado al final de la
jornada, y en tu nombre voy a descansar; pero antes de
caer en la inconciencia del sueño quiero reafirmar mi fe
y mi amor a Ti.
Cuando vivías en la tierra Tú también te fatigabas y
dormías; quiero unir mi descanso a tu descanso y mi
sueño a tu sueño; y que estas horas que viviré
inconciente sean también para gloria de Dios y bien de
mi alma; quiero dormir bajo el amparo de tu Divina
Presencia; que mi fe en Ti se mantenga viva en mi alma;
y que el fuego de tu amor encienda mi corazón durante
toda la noche y sea la luz de mi nuevo despertar. Amén.
Padre nuestro...
Gloria...
Tres Ave María...
Acordaos (oración de San Bernardo).
Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se
oyó decir que ninguno de los que han acudido a tu
protección, implorado tu asistencia y reclamado tu
socorro, haya sido abandonado de Ti.
Animado con esta confianza, a Ti también acudimos,
oh Madre, Virgen de las vírgenes, y gimiendo bajo el
peso de nuestros pecados, nos atrevemos a comparecer
ante vuestra presencia soberana.
Oh Madre de Dios, no despreciéis nuestras súplicas,
antes bien escuchadlas y acogedlas benignamente.
Amén.
ORACIONES DIARIAS
Himno de Completas
(la oración de la noche):
Disipa la densa noche,
oh Cristo, día y fulgor,
Tú que eres Luz de Luz,
de los justos resplandor.
Custódiame esta noche
con tu amor y con tu paz,
en Ti hallemos el descanso,
dulces horas de solaz.
Si el sueño cierra los ojos,
te contemple el corazón;
proteja tu suave mano
a cuantos te aman, Señor.
SÍGUEME
49
SÍGUEME
B. CONSEJOS ÚTILES.
(Se añaden algunos consejos, en gran parte tomados de R.
SAENZ, Sólo Dios basta, Gladius, Buenos Aires 1996):
Hambre y sed de Dios. Los Ejercicios no son una
serie de conferencias o charlas, sino una búsqueda de
Dios, un tiempo de oración y contemplación. Todo en
estos días se ordena a que puedas tener un trato libre
con Dios... En un diálogo personal e íntimo, donde
debes despertar la sed de Dios con todas tus fuerzas y
dejar que Él te ilumine y te atraiga con su gracia. Vienes
a salir definitivamente del pecado, a dejar la tibieza, a
encaminarte eficazmente a la unión íntima con Él. Te
llevarás en el alma lo que hayas asimilado meditando; lo
demás pasará.
Silencio. Silencio de los hombres y silencio de las
cosas. Ante todo silencio interior: acallar otros
pensamientos, preocupaciones, o inquietudes que
distraen tu alma de lo único necesario (cf. Lc 10,38-40).
Silencio exterior, para escuchar la voz de Dios, para
cooperar a que los otros ejercitantes escuchen su voz.
Desapego. Si eres consciente de tener un apego a
algo que te hace mal, que te lleva al pecado, o que te
impide crecer espiritualmente, es necesario desprenderte
interiormente de ello, “pidiendo a Dios lo contrario”
SÍGUEME
(EE 16). Un ave no puede volar, sea que esté atada por
una cadena, sea que la retenga un hilo delgado.
Todo a su tiempo. Los Ejercicios tienen un orden
determinado que el director te irá indicando. No te
adelantes en leer o pensar lo que no corresponde en este
momento. Hay tiempos para la meditación, tiempos
libres, tiempos para la confesión, para la elección de
estado o la reforma de vida. No te ocupes en lecturas
por simple curiosidad o que te saquen del clima.
Tomar notas. Toma apuntes, sea durante la
exposición del sacerdote para después poder guiarte
mejor en la meditación personal; sea para anotar los
propósitos, luces o gracias que vas recibiendo. Todo ello
te servirá incluso para releer y aprovecharte después de
los Ejercicios.
Hablar con el director. No dejes de frecuentar al
director de los Ejercicios. Conviene hacerlo desde el
principio para que te conozca, y conozca tus
disposiciones o expectativas. Además es indispensable
para aclarar tus dificultades, tentaciones, gracias,
propósitos, consolaciones y desolaciones, todo lo que se
va produciendo en tu alma durante los Ejercicios. No
comunicarse con frecuencia y confianza es
prácticamente hacer estéril los Ejercicios por las muchas
dificultades y tentaciones que suelen surgir.
C. PRINCIPIO Y FUNDAMENTO.
Entrada en oración (EE 75): “Un paso o dos antes
del lugar donde voy a contemplar o meditar, por espacio
de un Padre nuestro, alzaré el mente, considerando
EJERCICIOS ESPIRITUALES
D. ORACIÓN MENTAL.
iPequeño esquema. Pasos a dar en la oración mental:
◦ considerar a Dios presente, que me está
mirando.
b Preparación
para entrar ◦ Lo adoro, me humillo: Dios y yo.
en oración
◦ Oración preparatoria: ofrezco todo mi
ser y obrar para su gloria
1. Preparación.
Ponerse en presencia de Dios. Es decir tomar
conciencia, poner atención en ver que Dios está
presente en el cielo, en la tierra y en todo lugar, de modo
que no existe lugar ni cosa en el mundo donde no esté
presente. Ahora bien, como no lo vemos con nuestros
ojos, fácilmente nos olvidamos de esta presencia. De allí
que es necesario un acto de fe para advertir esta
presencia, Sl 138,8: si escalo el cielo, allí estás Tú, si bajo
al abismo, allí te encuentro. Conviene entonces, antes de
SÍGUEME
2. Meditación.
El siguiente paso es activar tu inteligencia, de
modo que con una o muchas consideraciones vayas
levantado tu corazón a Dios y las realidades de su Reino.
Y aquí está la diferencia entre estudio y meditación, pues
ésta se usa para adquirir la virtud o el amor de Dios, y
no para adquirir la ciencia. Si encuentras gusto, luz, o
fruto en alguna de las consideraciones, te debes detener
en eso, sin pasar a otra, al modo como la abeja intenta
sacar todo el néctar de la flor antes de pasar a otra. Pero
si no hallas luz, gusto o fruto en una de las
consideraciones, después de detenerte un poco más en
ellas, pasa a otra, sin preocuparte ni turbarte.
SÍGUEME
3. Coloquio.
La meditación hay que concluirla en primer lugar
dando gracias a Dios por las luces, fruto o buenos
afectos y resoluciones que en ella hayas experimentado.
Todo proviene de su bondad y misericordia.
Después hay que ofrecer a Dios la muerte, las
virtudes de su Hijo, y unidos a esta ofrenda, nuestros
afectos y resoluciones...
Finalmente le suplicamos a Dios la gracia que
necesitamos, de acuerdo a la meditación que hicimos
(dolor y arrepentimiento del pecado, amor de Dios, etc.)
para llevar a la práctica nuestros afectos y decisiones...
Rogamos también por la Iglesia, nuestros parientes y
amigos, etc... Y después el Padre nuestro, Ave María...
EJERCICIOS ESPIRITUALES
4. Examen de la meditación.
Para aprender a orar y para ir reconociendo la “voz”
de Dios, distinguiéndola de otras “voces”, conviene
emplear unos minutos en examinar cómo te fue en la
oración. Fíjate, por ejemplo, en algunos de los puntos
siguientes:
-¿Preparaste con cuidado la materia, concretándola,
previniendo el fruto que habías de sacar?
-¿Hiciste bien los preámbulos de la meditación?
-¿Recordaste los puntos, y entraste pronto en
materia?
-¿Fuiste activo en ejercitar el entendimiento, sin
prisa, con sinceridad y empeño?
-¿Has despertado afectos? ¿Hubo distracciones? En
el fervor, ¿te humillaste? En la aridez, ¿fuiste animoso?
-¿Te dejaste llevar por la pereza? ¿Luchaste contra la
desgana?
-¿Qué luces te ha dado Dios? ¿Qué emociones has
sentido? ¿Qué efectos obraron en ti?
-¿Lograste el fruto propuesto? Da gracias a Dios. Si
no, ¿Por qué?
-¿Has hecho propósitos, generales y particulares,
concretos y realizables? ¿Hiciste aplicaciones prácticas a
tus circunstancias?
-¿No te ganó el apuro, el deseo de ver toda la
materia, de terminar pronto?
-¿Hablaste con Dios, lo dejaste hablar? ¿Le suplicaste
las gracias que necesitabas, con humildad y
perseverancia?
-¿Anotaste lo más importante? Hazlo ahora.
Y delante de Dios, si te ha ido mal en esta
meditación, pídele perdón, busca la causa y el remedio
SÍGUEME
G. EXÁMENES PARTICULARES.
A medida que vayas haciendo los Ejercicios, descubrirás
que muchos de los minutos se emplean en “exámenes”:
después de cada meditación (un cuarto de hora), por la
mañana y por la noche, pero también al mediodía... La
finalidad de los Ejercicios es mantener despiertas y activas
todas las energías para vencerse a sí mismo, y ordenar la vida
de acuerdo a la voluntad de Dios... Pero también existen otras
fuerzas y energías: el demonio, la “cultura de muerte” que nos
envuelve, nuestra tendencia a la pereza, etc., de modo que van
sucediéndose en nuestro corazón distintos afectos,
pensamientos, etc. Se hace necesario distinguir, percibir estas
cosas para seguir sólo la voz de Dios. El examen es un especie
de “sensor” que nos permite percibir mejor estas experiencias.
El examen es un estado del espíritu, una actividad de
nuestra alma, que nos hace estar atentos, interesados en
conocer, discernir lo que va sucediendo en nuestro interior. El
examen nos permite ir viendo la acción de Dios y la acción de
lo que no es Dios. Esto exige un método determinado,
horarios, pasos que dar, repetición del mismo procedimiento,
etc. El examen es una parte importante de los Ejercicios. El
EJERCICIOS ESPIRITUALES
examen particular te ayudará a conservar tu alma despierta y
activa durante todo el día, para que puedas alcanzar lo que te
has propuesto de la manera más eficaz y segura.
Durante los Ejercicios Espirituales el examen particular se
hace sobre la marcha de los mismos Ejercicios: por ejemplo si
preparas bien la oración, si haces penitencia, sin consultas, etc.
Terminados los ejercicios, el examen particular es muy útil
para corregir el defecto dominante, la pasión desordenada que
nos domina... pero lo más conveniente es hacerlo respecto a la
virtud contraria al defecto, así si eres orgulloso, conviene que
trabajes en adquirir la virtud de la humildad, etc. En el
Apendice 2, encontrarás abundante material sobre este tema.
Momentos para hacer el examen particular:
(EE 24-26): “a la mañana, después de levantarme,
proponer cuidarme con diligencia del pecado particular
o defecto que quiero corregir y enmendar”.
“Después de comer, pedir a Dios nuestro Señor la
gracia de acordarme cuántas veces he caído en aquel
pecado particular o defecto, y para corregirme en
adelante. Examinarme sobre ese propósito particular,
comenzando desde que me levanté hasta la hora
presente, y anotar tantos puntos o marcas cuantas veces
haya incurrido en aquel pecado particular o defecto.
Después debo proponer corregirme”.
“Después de cenar, se hace de nuevo examen
comenzando desde el mediodía hasta la hora presente, y
anoto en la segunda línea tantos puntos cuantas veces
haya incurrido en aquel pecado o defecto”
Modo de aprovechar el examen particular:
(EE 27-31): “cada vez que se cae en aquel pecado o
defecto particular, ponerse la mano en el pecho,
doliéndose de haber caído”.
SÍGUEME
Domingo _________________
_________________
Lunes _________________
_________________
Martes _________________
_________________
Mierc _________________
_________________
Jueves _________________
_________________
Viernes _________________
_________________
Sábado _________________
_________________
J. MEDITACIONES VARIADAS.
bMeditación introductoria.
Oración preparatoria: es pedir gracia a Dios nuestro
Señor, para que todas mis intenciones, acciones y
operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad (EE 46).
SÍGUEME
bEl hombre.
Oración preparatoria (EE 46): “es pedir gracia a Dios
nuestro Señor, para que todas mis intenciones, acciones
y operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad”.
Composición de lugar: imaginar que estoy en la presencia
de Dios, de sus ángeles, santos...
Gracia propia: gracia de conocer mi fin, conocerlo a Él,
para quien he sido creado.
1°. Al inicio el hombre fue creado, a imagen y
semejanza de Dios (cf. Gen 1,27-28; 2,7.20-23). Pero
Dios es también “creador en cada hombre del alma
espiritual e inmortal” (PABLO VI, Profesión de fe n.8). El
hombre es creado. Así como la luminosidad del aire
depende del sol que lo ilumina. El sol brilla por su
naturaleza, el aire es luminoso por participar de la luz del
sol. Así Dios es el ser por esencia, su esencia es su ser.
Por eso es el que Es (cf. Ex 3,14). El hombre es ser por
participación, necesita ser conservado en su ser para
existir actualmente... Estoy actualmente participando del
ser por la acción creadora y conservadora de Dios.
2°. El hombre es creado para Dios. Dios no tiene
necesidad de nada, crea sólo por su bondad, para
comunicar el bien. Creó al hombre para que pudiese
entrar en perfecta comunión de conocimiento y amor
con Él, 1Jn 3,2: ahora somos hijos de Dios, y aun no se ha
manifestado lo que seremos, sabemos que cuando se manifieste
seremos semejantes a Él, porque lo veremos tal cual es.
Ro 6,22: al presente libres del pecado y esclavos de Dios,
fructificáis para la santidad y el fin es la vida eterna. Cuando
algo no alcanza su fruto, se dice que se pierde; cuando el
EJERCICIOS ESPIRITUALES
bLas cosas.
Oración preparatoria (EE 46): “es pedir gracia a Dios
nuestro Señor, para que todas mis intenciones, acciones
y operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad”.
Composición de lugar: imaginar que estoy en la presencia
de Dios, de sus ángeles, santos...
Gracia propia: gracia de conocer la finalidad de las
demás cosas, y para ordenarlas al servicio y alabanza de
Dios.
1°. Las cosas son creadas para que ayuden al hombre.
Instrumentos para que el hombre pueda servir a Dios y
salvarse, Sl 104,14-15: la hierba la haces brotar para el ganado
y las plantas para el uso del hombre, para que saque de la tierra el
pan, y el vino que recrea el corazón del hombre. Las creó Dios
con abundancia y profusión, para que a través de ellas el
hombre conociese la perfección de Dios (cf. Sb 13,5; Ro
1,20). Heb 1,3: Él sostiene todo con su palabra poderosa. Por
eso el hombre debe buscar primero el fin, y luego que lo
lleva al fin, Mt 6,33: buscad primero el Reino de Dios y su
justicia, y todas las demás cosas se os darán por añadidura.
2°. Las demás creaturas pueden impedir al hombre
alcanzar su fin, o ayudarlo. Si busco en todo alabar,
servir a Dios, todo cooperará para mi bien. Todo: los
dolores y enfermedades, la salud, la riqueza y la pobreza,
el éxito o el fracaso, la consolación y el gozo, la
EJERCICIOS ESPIRITUALES
bIndiferencia.
Oración preparatoria (EE 46): “es pedir gracia a Dios
nuestro Señor, para que todas mis intenciones, acciones
y operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad”.
Composición de lugar: imaginar que estoy en la presencia
de Dios, de sus ángeles, santos...
Gracia propia: gracia de ser verdaderamente libres
frente a las cosas creadas, y siervos de Dios.
1°. Indiferencia indica carencia de afección. No se
refiere al sentimiento, sino a los afectos de la voluntad.
El amor o aficción por las cosas nace a veces
SÍGUEME
79
SÍGUEME
121
SÍGUEME
bDel Nacimiento.
Oración preparatoria (EE 46): “es pedir gracia a Dios
nuestro Señor, para que todas mis intenciones, acciones
y operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad”.
Historia (EE 111): “será aquí, cómo desde Nazaret
salieron nuestra Señora grávida (embarazada) casi de
nueve meses, como se puede meditar píamente, asentada
en una asna, y José, llevando un buey para ir a Belén, a
pagar el tributo que Cesar exigió en todas aquellas
tierras, etc.”. Cf. EE 264; Lc 2,1-14; CIC 525-526.
Composición de lugar (EE 112): “será aquí con la vista
imaginativa ver el camino desde Nazaret a Belén,
considerando la distancia, la anchura, si tal camino es
llano o por valles y cuestas; asimismo mirando el lugar o
cueva del nacimiento, cuán grande, cuán pequeño, cuán
bajo, cuán alto, y cómo estaba aparejado”.
Gracia para pedir (EE 104.113): “demandar lo que
quiero, será aquí demandar conocimiento interno del
Señor, que por mí se ha hecho hombre y nace en Belén,
para que más le ame y le siga”.
1°. (EE 114) “El primer punto es ver las personas, a
saber, ver a nuestra Señora y a José y al niño Jesús,
después de haber nacido, haciéndome un pobre y
indigno esclavito como si me hallase presente con todo
acatamiento y reverencia posible, mirándolos y
contemplándolos y sirviéndolos en sus necesidades; y
después reflexionar en mí mismo para sacar algún
provecho”.
SEGUNDA SEMANA
G. REGLAS DE ELECCIÓN.
Éste es uno de los momentos más importantes de los
Ejercicios. Mirando a Cristo, nuestro modelo supremo, se
deben concretar las grandes decisiones sobre nuestra vida.
Es Dios quien elige: no me habéis elegido vosotros a mí, sino
que Yo os elegí (Jn 15,16). A esa elección, a ese plan de
Dios sobre cada uno se lo llama vocación: del latín vocare =
llamar. Tendrás todas las gracias y luces necesarias si vas
por el camino que Dios te llama, y no por el que te
empeñes en intentar contra Su voluntad. Dios ha soñado
un lugar para ti desde toda la eternidad, y para el cual eres
insustituible. Hay dos cosas importantes en la vida:
descubrir tu propia vocación y seguirla con generosidad
hasta el fin.
La primera gran decisión de la vida es la ‘elección de
estado’, consiste en inclinarse por una de dos opciones:
vida laical (familia...) o vida consagrada (sacerdocio - vida
religiosa). Si ya has hecho elección de estado, estas ‘reglas’
te servirán para cuando tengas que tomar otras decisiones
en tu vida.
La gran dificultad para hacer elecciones se encuentra en
los aspectos desordenados. Estos hacen que la persona no
tenga rectitud de intención, que el “ojo” de su intención no
SÍGUEME
sea simple, sino que esta “mezclado” la gloria de Dios y la
salvación del alma con otras cosas e intereses.
187
SÍGUEME
C. MISTERIOS DE LA PASIÓN.
Durante los ejercicios de mes, el primer día de esta tercer
semana, por la noche, indica san Ignacio que se debe
contemplar cómo Cristo va desde Betania a Jerusalén para la
última Cena (cf. EE 190), y a la mañana los misterios
ocurridos desde la Cena al Huerto inclusive (cf. EE 200) y
después repeticiones y aplicación de sentidos.
Y también sugiere san Ignacio (cf. EE 209): “para quien
más se quiere alargar en la pasión, debe tomar en cada
contemplación menos misterios: así ej la primera
contemplación sólo la Cena, en la seguda el lavar los pies, en
la tercera el darles el sacramento (de la Ecaristía), en la cuarta
el sermón que Cristo les hizo, y así en las otras
contemplaciones y misterios”.
“Por el contrario, quien quisiere abreviar más la Pasión,
tome a la media noche la Cena; a la mañana el huerto; a la
hora de la Misa la casa de Anás; a la hora de vísperas, la casa
de Caifás; en lugar de la hora antes de la cena, la casa de
Pilato; de manera que no haga repeticiones ni aplicación de
sentidos, sino haga cada día cinco ejercicios distintos y en
cada ejercicio, un misterio distinto de Cristo; y así acabada
toda la Pasión, puede hacer otro día toda la Pasión junta en un
ejercicio o en diversos, como más le parezca que podrá
aprovechar”.
bCristo va de Betania a Jerusalén a la última Cena.
Oración preparatoria: es pedir gracia a Dios nuestro
Señor, para que todas mis intenciones, acciones y
operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad.
Historia: Cristo desde Betania envió dos discípulos a
Jerusalén para preparar la cena, después Él va con otros
discípulos; después de comer el cordero pascual y haber
SÍGUEME
D. MISTERIOS DOLOROSOS.
Mientras rezamos las oraciones vocales: Padre nuestro,
Ave María... nuestra mente debe atender al misterio que
contemplamos... como si mirásemos a Jesús con los ojos y
amésemos con el corazón de María santísima... Si nos
damos cuenta que estmos distraídos, sin turbarnos
debemos volver a poner nuestra mente en el misterio que
contemplamos, o a la persona a la cual hablamos, o las
palabras que vamos diciendo... Fuera de Ejercicios, los
misterios dolorosos se rezan martes y viernes.
1°. La oración de Jesús en el Huerto de los
Olivos. Mt 26,36:39: Entonces Jesús va con ellos a una
propiedad llamada Getsemaní, y dice a los discípulos:
‘Sentaos aquí, mientras voy allá a orar’... Y adelantándose
un poco, cayó en tierra, y suplicaba así: ‘Padre mío, si es
posible, que pase de mí este cáliz, pero no sea como yo
quiero, sino como quieras tú’.
Nuestro Señor ora para tener la fuerza de beber el
cáliz del dolor, para sufrir y morir por nosotros.
A. INSTRUCCIONES.
La propuesta - desafío que Cristo nos hizo era:
“conquistar todo el mundo y todos los enemigos, y así
entrar en la gloria de mi Padre, por eso, quien quiere
venir conmigo ha de trabajar conmigo, para que
siguiéndome en la pena, también me siga en la gloria”
(EE 95); después de haber acompañado a Cristo en su
pasión, nos toca ahora participar del gozo de su
Resurrección.
La finalidad de esta semana es la contemplación del
rostro glorioso de Cristo. Pueden ayudarte los siguientes
capítulos del libro Imitación de Cristo:
- 2,7: Del amor que debemos tener a Cristo sobre todas las
cosas;
- 2,8: Sobre la familiar amistad con Cristo;
- 2,10: Del agradecimiento por la gracia de Dios;
- 3,1: Del habla interior de Cristo al alma fiel;
- 3,6: Del maravilloso efecto del amor divino;
- 3,7: De la prueba del verdadero amador;
- 3,24: Recordar los innumerables beneficios de Dios;
- 3,39: Para el que ama, Dios es muy sabroso en todo y
sobre todo;
- 3,53: Del día de la eternidad, y de las angustias de esta
vida;
- 3,54: Del deseo de la vida eterna y cuántos bienes son
prometidos a lo que bien pelean.
233
SÍGUEME
Sábado Santo:
- Durante todo el día el cuerpo de Cristo, unido a la
Persona divina, descansa en el Sepulcro.
- Su alma, unida a la Persona divina, desciende a rescatar a
los justos (descenso a los infiernos).
SÍGUEME
Domingo de Resurrección:
6.00 hs. - Resurrección. Sus huellas quedan
impresas en el santo Sudario.
7.00 hs. - Aparición a María Magdalena.
- Aparición a las otras mujeres del sepulcro.
- Aparición a Pedro.
19.00 hs. - Aparición a los discípulos de Emaús.
21.00 hs. - Aparición a los Apóstoles, sin Tomás.
C. MISTERIOS GLORIOSOS.
1°. La Resurrección de Cristo. Mt 28,5-6: El ángel
se dirigió a las mujeres y les dijo: ‘No temáis, pues sé que
buscáis a Jesús, el crucificado; no está aquí, ha resucitado,
como lo había dicho. Venid, ved el lugar donde estaba.
Jesús resucita de la muerte, para que también
nosotros podamos resucitar espiritualmente a la vida de
gracia, y corporalmente en el último día.
2°. La Ascensión de Jesús al Cielo. Lc 24,50-51:
(Jesús) los sacó hasta cerca de Betania y, alzando las
manos, los bendijo. Y sucedió que, mientras los bendecía, se
separó de ellos y fue llevado al cielo.
Jesús asciende al cielo para prepararnos un lugar. Por
eso ¡levantemos nuestros corazones! ¡Lo tenemos
levantado hacia el Señor!
3°. La venida del Espíritu Santo sobre la Virgen
y los Apóstoles. He 2,3-4: Se les aparecieron unas
lenguas de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada
uno de ellos; quedaron todos llenos del Espíritu Santo y se
pusieron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les
concedía expresarse.
CUARTA SEMANA
D. OTRAS ORACIONES.
Regina coeli
(en lugar del Angelus durante el tiempo pascual).
bAparición a Pedro
(cf. EE 302).
Oración preparatoria: es pedir gracia a Dios nuestro
Señor, para que todas mis intenciones, acciones y
operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad.
Historia: Pedro, advertido por las mujeres va con Juan
al sepulcro, allí ven las vendas... Jesús se aparece a Pedro
(cf. Lc 24,9-12.33-34).
Composición de lugar: imaginar el Cenáculo... el camino
al sepulcro...
Gracia propia: gracia de alegrarme y gozarme de la
gloria y gozo de Cristo...
1°: Pedro, al oir de las mujeres que Cristo había
resucitado, va rápidamente al sepulcro...
2°: al entrar sólo ve las vendas y el sudario con que
Cristo había sido cubierto...
3°: mientras Pedro pensaba estas cosas se le aparece
Cristo. Por eso los apóstoles dirán: verdaderamente el
Señor ha resucitado y se ha aparecido a Simón.
Coloquio: con Cristo glorioso... Con el Padre: Señor,
que rejuvenecidos por tu gracia tengamos una alegría
permanente, gozándonos de poseer la gloria de la
adopción final y aguardemos con alegre y segura
esperanza el día de nuestra resurrección.
SÍGUEME
bAparición en Galilea
(cf. EE 306).
Oración preparatoria: es pedir gracia a Dios nuestro
Señor, para que todas mis intenciones, acciones y
operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad.
Historia: Pedro y otros discípulos van a pescar, Cristo
se les aparece en la orilla, se produce la pesca milagrosa,
Jesús come con ellos y da a Pedro el encargo de
pastorear (cf. Jn 21,1-17).
Composición de lugar: imaginar el lago, la orilla, la mensa
Christi...
Gracia propia: alegría y gozo por tanta gloria de Cristo.
CUARTA SEMANA
bAparición a Pablo
(cf. EE 311).
Oración preparatoria: es pedir gracia a Dios nuestro
Señor, para que todas mis intenciones, acciones y
operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad.
Historia: después de la Ascención Cristo se apareció a
San Pablo (cf. 1Cor 15,8; He 9,1-8; 22,5-16; 26,10-18).
Composición de lugar: imaginar el lugar de la aparición a
Pablo...
Gracia propia: alegría por el gozo y gloria de Cristo.
1°: Jesús se aparece a san Pablo después de su
Ascensión: y en último término se me apareció también a
mí, como a un abortivo.
SÍGUEME
bParusía de Cristo.
Oración preparatoria: es pedir gracia a Dios nuestro
Señor, para que todas mis intenciones, acciones y
operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de su divina Majestad.
Historia: Jesús prometió su regreso, en el cual pondrá
punto final a la historia. No dijo ni el día ni la hora de su
segunda venida, pero nos exhortó a esperarlo alegres y
vigilantes (cf. Mt 24,42-44; 25,13; Mc 13,33).
Composición de lugar: imaginar esta última venida sobre
las nubes del cielo (cf. He 1,11).
Gracia propia: alegría por la gloria de Cristo; gracia de
estar vigilantes para que su última venida nos encuentre
preparados; gracia de desear y pedir su venida gloriosa
(Ap 22,20: ‘Sí, vengo pronto’. ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!).
1°: Jesús resucitado y glorioso se manifestará a todos
los hombres. Dará a todos los hombres la luz para ver
las cosas tal como Dios las ve. Cada uno verá toda su
vida y la de los demás con total transparencia. No habrá
más preguntas, todo se hará manifiesto. A esta última
manifestación, iluminación de todo y de todos se la
llama Juicio Final, Mt 25,31-33: Cuando el Hijo del
hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles,
entonces se sentará en su trono de gloria. Serán congregadas
delante de Él todas las naciones, y Él separará a los unos
de los otros, como el pastor separa las ovejas de los
cabritos....
CUARTA SEMANA
269
SÍGUEME
D. REZA.
“El que ora se salva, el que no ora se condena” (San
Alfonso).
Orar es un mandato de Jesús (cf. Lc 21,36; Mt
22,40). Dios concede las gracias espirituales y materiales
de las cuales tenemos necesidad, a través de la oración;
la oración es la llave con la cual se abren los tesoros de
las gracias divinas (cf. Mt 7,7-8; Jn 1,5-7). La oración es
la respiración del alma, necesaria para conservarse y
morir en gracia de Dios (cf. Lc 21,36). Recuerda siempre
que Dios es Padre y se ocupa de nosotros más que de
las aves del cielo y lo lirios del campo (cf. Mt 6,25ss);
más que una madre de su hijo pequeño (cf. Is 49,14); y
cuida hasta del último cabello de nuestra cabeza (cf. Mt
10,30).
Ora con gran confianza, ya que Dios es providente
(cf. Mc 11,24-25; Mt 6,25-34); con gran humildad, ya
que Él es el Santo y nosotros pecadores (cf. Mt 6,5-6; Lc
18,9-14); con perseverancia, sin cansarnos jamás (cf.
Mt 7,7; Lc 18,1-8); con atención, pensando lo que
dices; en el Nombre de Jesucristo porque Él es el
único Mediador entre Dios y los hombres (cf. Jn 14,13-
14; 15,7; 16,24). Ora siempre (cf. Lc 21,36; 1Ts 5,17-
18); reza con pocas palabras (cf. Mt 6,7-14); reza por
los que te persiguen (cf. Mt 5,44). Cf. CIC 2598-2622.
QUINTA SEMANA
E. SÉ DEVOTO DE MARÍA.
La Virgen es Madre de Dios, porque ella es la madre
de Jesús que es el Hijo de Dios (cf. Gal 4,4; Lc 1,35.43.;
Ro 9,5; Is 7,14). Jesús nos ha dado por madre nuestra a su
propia madre: Jesús, viendo a su madre y junto a ella al
QUINTA SEMANA
H. SÉ APÓSTOL.
¿Quién es un Apóstol? Apóstol es aquel que ama
intensamente a Jesús y busca con todas sus fuerzas que otros
lo conozcan y lo amen.
Jesús llamó a los que Él quiso, para que estuviesen con Él
y para enviarlos a predicar (cf. Mc 3,13.19). Como el Padre
envió a Jesús, así Jesús manda a sus discípulos (cf. Jn 20,21;
13,20; 17,18; Mt 10,40; Lc 10,16).
Para ser Apóstol se requiere: estar unido a Él (cf. Mc 3,13;
Jn 15,5), te convertirás en su embajador (1Cor 4,1) y Jesús
estará contigo hasta el final (cf. Mt 28,20).
Tres son las armas que el Apóstol tiene para conquistar el
mundo con y para Cristo: el ejemplo (cf. Mt 5,13-16), la
oración (cf. Jn 5,16-18) y la palabra (cf. Mt 28,19-20).
APÉNDICE 1
Exámenes - Oración
Se agregan aquí otros exámenes de conciencia
(siguiendo los mandamientos, el amor a Dios y al prójimo,
vicios y virtudes...) que pueden servirte tanto para orar,
deteníendote en aquel mandamiento en el cual has pecado,
para pedirle perdón, y proponer enmienda, y en aquellos
que no has pecado, darle gracias por la gracia de no haber
caido. También te puede servir para prepararte a la
confesión general.
285
SÍGUEME
cristiana es la unión con Dios. Y esa unión con Dios se
realiza por la caridad.
Amar a Dios con todo el corazón, quiere decir que
todas nuestras acciones, sin exceptuar una sólo, deben
referirse a Él: ya comáis, ya bebáis, o ya hagáis alguna cosa,
hacedlo todo para gloria de Dios (1Cor 10,31). Amar a Dios
con toda el alma, quiere decir que nuestra voluntad se
sujete totalmente a su voluntad. Amar a Dios con toda la
mente quiere decir que nuestro entendimiento debe
someterse del todo a Dios. Con todas las fuerzas, que en
todo lo que hacemos le debemos obedecer siempre.
3. Preguntas. ¿Tengo un amor de hijo para con Dios?
¿Le amo sobre todas las cosas? ¿Creo en su palabra?
¿Confío en su bondad infinita? ¿Le hablo como al amigo
más íntimo, cada día? ¿Me preocupo de aumentar mi
conocimiento de Dios, del Evangelio, y de fortalecer mi fe?
4. Pecados. Pecas cuando libre y deliberadamente:
-dudas o niegas voluntariamente una verdad de la fe,
-pasas mucho tiempo sin rezar, sin elevar tu mente a Dios,
-dudas de la bondad o misericordia de Dios,
-crees en supersticiones o adivinaciones,
-lees libros, ves espectáculos o escuchas a quienes hablan
contra la fe, o poniendo dudas sobre ella,
-asistes a otras iglesias (evangélica, testigos...),
-desesperas o hablas contra la divina providencia,
-te burlas de Dios y de las cosas de Dios,
-confiesas mal, callando algún pecado, o sin sincero
arrepentimiento, o sin querer de veras enmendarte,
-comulgas sabiendo que estás en pecado,
-dejas tus prácticas religiosas por respeto humano, por
miedo a las burlas...
APÉNDICE 1
5. Motivos para amarlo.
a) Amarlo por lo que Él es. Porque es la Bondad
infinita, por todo lo que es Él, sin medida.
b) Por el amor eterno con que nos ama: Él nos amó
primero (1Jn 4,19) a pesar de nuestros pecados: Dios probó
su amor hacia nosotros en que, siendo aún pecadores, murió
Cristo por nosotros (Ro 5,8), amándonos Jesús hasta el fin
(Jn 13,1), hasta el extremo, sin límites.
c) Por los bienes naturales que nos ha dado: nos creó,
nos conserva en el ser: todo subsiste en Él (Col 1,17),
ordena nuestra vida por su Providencia.
d) Por los bienes de la gracia (sobrenaturales): llamados
a gozar de Él en el cielo; nos envió a su Hijo para
salvarnos, fundó la Iglesia para que distribuyese la gracia a
través de los sacramentos, nos hizo nacer en una familia
cristiana, etc.
Segundo mandamiento
No tomar su santo nombre en vano.
1. Textos de la Sagrada Escritura. Ex 20,7: no
tomarás en falso el nombre de Yahvhe.
Mt 6,9: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado
sea tu nombre.
2. Aclaraciones. En este mandamiento se prescribe la
alabanza de Dios, es decir la expresión externa de nuestro
amor interior a Dios: su alabanza está siempre en mi boca
(Mt 12,34). Y el voto: promesa hecha a Dios de un bien
mejor, futuro y posible, como ayunar, hacer oraciones, una
peregrinación, un limosna, de guardar virginidad, etc.: haced
votos al Señor y cumplidlos (Sl 76,12).
Se prohibe el uso del nombre de Dios en vano, ya sea
pronunciar sin motivo o sin el debido respeto el nombre
de Dios, de la Virgen o de los santos. La blasfemia que
SÍGUEME
consiste en injuriar a Dios, la Virgen o los santos. Es un
pecado gravísimo. El perjurio, es jurar en falso poniendo a
Dios por testigo, con lo que se da a entender que Dios no
conoce la verdad o se presta a testificar la mentira.
3. Preguntas. ¿Pronuncio siempre el nombre de Dios,
de Cristo, de la Virgen con respeto, amor y cariño?
4. Pecados. Pecas cuando libre y deliberadamente:
-blasfemas, insultas, con palabras o actos contra Dios,
-juras sin verdad, sin necesidad,
-no cumples con la promesa que hiciste, pudiendo,
-haces promesas con ligereza, por motivos pequeños o
indignos de Dios,
-hablas mal de la Iglesia, de los Obispos o sacerdotes sin
motivo real, o escandalizando a otros.
5. Motivos para honrar el nombre de Dios.
a) El general San Martín, cuando era Jefe del Ejército
de los Andes, mandó castigar severamente a todo el que
blasfeme del Santo Nombre de Dios o de su adorable
Madre, o insultare la religión.
b) De la abundancia del corazón habla la boca (cf. Mt
12,34). A Dios se lo honra no sólo con el corazón sino
también con los labios.
c) Pensar en las grandezas, perfecciones, bondad de
Dios...
Tercer mandamiento
Santificar las fiestas.
1. Textos de la Sagrada Escritura. Ex 20,8: acuérdate
del día de Sabbath para santificarlo. Seis días trabajarás y
harás tus obras, pero el séptimo día es día de descanso,
consagrado a Yavé, tu Dios, y no harás en él trabajo alguno...
APÉNDICE 1
2. Aclaraciones. Santificar una cosa, en el lenguaje de
la Escritura significa destinarla al culto divino. En este
mandamiento se nos recuerda la obligación grave de rendir
culto a Dios. Se nos manda entonces dedicar al Señor el día
Domingo y las fiestas de guardar, alimentando nuestro
espíritu en la oración, y fortificándolo en la Santa Misa.
Para poder dedicarnos más a Dios se nos manda descansar
de los demás trabajos corporales.
Preceptos o mandamientos de la Iglesia, que completan
y precisan cómo cumplir mejor los deberes para con Dios:
1° oír Misa entera los domingos y fiestas de precepto y no
realizar trabajos serviles (en Argentina desde 1991: todos
los Domingos del Año, el 1° enero: solemnidad de Santa
María Madre de Dios, 15 agosto: asunción de la Santísima
Virgen María, 8 diciembre: Inmaculada Concepción de
María, 25 diciembre: Navidad de Nuestro Señor
Jesucristo). 2° confesar al menos una vez al año,
preparando la recepción de la Eucaristía, y continuando la
obra de conversión -nos vamos haciendo cristianos. 3°
recibir al menos una vez al año la Santa Eucaristía durante
el tiempo de Pascua que recuerda la Pasión, muerte y
resurrección de Cristo. 4° abstenerse de comer carne y
ayunar los días establecidos por la Iglesia, garantizando así
los tiempos de ascesis y penitencia para prepararnos a las
grandes fiestas litúrgicas, nos ayudan también a adquirir el
dominio sobre nuestros instintos y nos dan la libertad del
corazón. 5° ayudar a las necesidades de la Iglesia, cada uno
según su capacidad y medios cooperar con las necesidades
materiales de la Iglesia: gastos de luz, mantenimiento, las
obras de caridad, las misiones, etc.
3. Preguntas. ¿El Domingo es realmente para mí el
Día del Señor? ¿Santifico como es debido ese día y ayudo a
SÍGUEME
los demás a santificarlo? ¿La Misa del domingo es para mí
el acto esencial de la Semana?
4. Pecados. Pecas cuando libre y deliberadamente:
-faltas sin motivo grave, a Misa los domingos y días de
fiesta,
-llegas tarde voluntariamente y por costumbre al Santo
Sacrificio,
-asistes a Misa sin respeto exterior, sin participar
interiormente,
-trabajas sin necesidad más de dos o tres horas,
-participas en diversiones indignas de un hijo de Dios.
Cuarto mandamiento
Honrar padre y madre.
1. Textos de la Biblia. Ex 20,12: Honra a tu padre y a
tu madre, para que vivas largos años en la tierra que Yavé, tu
Dios, te da.
Ef 6,1: Hijos, obedezcan a sus padres en el Señor, porque
esto es lo justo... Padres, no irriten a sus hijos; al contrario,
edúquenlos, corrigiéndolos y aconsejándolos, según el espíritu
del Señor.
Ef 5,22: Las mujeres deben obedecer a sus maridos como al
Señor... Maridos, amen a sus esposas como Cristo amó a la
Iglesia y se entregó por ella.
Ef 6,5: Servidores obedezcan a sus patronos con temor y
respeto, sin ninguna clase de doblez como si sirvieran a
Cristo... sirvan a sus dueños de buena gana, como si se tratara
del Señor y no de los hombres.
Y ustedes patronos, compórtense de la misma manera con
sus servidores y dejen a un lado las amenazas, sabiendo que el
Señor de ellos y el de ustedes está en el Cielo y El no hace
acepción de personas.
APÉNDICE 1
2. Aclaraciones. Los hijos deben amar a sus padres
porque ¿cómo podrás pagarles lo que han hecho por ti? Sir
7,30. Deben también respetarlos: de obra y de palabra honra
a tu padre (Sir 3,9). Deben obedecerles Ef 6,1: Hijos,
obedezcan a sus padres en el Señor, porque esto es lo justo... a
no ser que manden algo que es pecado, ya que en ese caso: es
preciso obedecer a Dios antes que a los hombres (Hch 5,29).
Deben socorrerlos en sus necesidades: como un blasfemo es
quien abandona al padre (Sir 3,16).
Por este mandamiento también los padres están
obligados a amar a sus hijos, atendiéndolos corporal y
espiritualmente, procurándoles un sólido porvenir y
colaborando en el crecimiento de su vida interior. Ef 6,1:
Padres, no irriten a sus hijos; al contrario, edúquenlos,
corrigiéndolos y aconsejándolos, según el espíritu del Señor.
Esos mismos padres, en cuanto esposos, deben amarse,
ayudarse mutuamente, convivir en paz, y asimismo ser
rectos en la administración de los bienes y en lo que atañe
al débito conyugal y la mutua fidelidad. Ef 5,22: Las
mujeres deben obedecer a sus maridos como al Señor...
Maridos, amen a sus esposas como Cristo amó a la Iglesia y se
entregó por ella.
Los hermanos entre sí se deben cariño, unión,
edificación y ayuda. Se debe, además, un amor especial a
los abuelos, tíos, primos, sobrinos, etc.
Este mandamiento obliga también a los patronos con
respecto a sus empleados, a los que deben tratar
benignamente, instruirlos, corregirlos, y pagarles el debido
salario. También obliga a los empleados a que traten con
respeto a sus patrones.
Obliga también este mandamiento a los maestros y a
los alumnos, ya que la sociedad escolar es como una
prolongación de la familia, exigiendo de ellos el
cumplimiento de sus deberes profesionales.
SÍGUEME
Finalmente este mandamiento nos impone el amor y la
piedad hacia la Patria (la palabra patria significa la tierra de
los padres), la tierra de nuestros mayores. El patriotismo
nos exige tener por nuestra Patria un amor de predilección,
respetando su historia, su tradición y destino, sirviéndola
en el cumplimiento de sus leyes, defendiéndola contra los
enemigos interiores y exteriores. Si uno no ama la Patria
que ve, ¿cómo amará la Patria celestial que aún no ve?
Jesús lloró por la suya.
Quinto mandamiento
No matar.
1. Textos de la Sagrada Escritura. Ex 20,13: No
matarás.
Mt 5,21: Ustedes han oído que se dijo a sus antepasados:
no matarás, y el que mata debe ser llevado ante el tribunal.
Pero yo les aseguro que todo aquel que se enoja con su
hermano, merece ser condenado por un tribunal.
Jn 15,12: este es mi mandamiento: ámense unos a otros
como yo os he amado.
1Jn 3,15: el que odia a su hermano es un homicida.
Mc 9,42: si alguien llegara a escandalizar a uno de estos
pequeños que tienen fe, sería preferible para él que le ataran al
cuello una piedra de moler y lo arrojaran al mar.
Mt 5,44: Yo les digo: amen a sus enemigos, rueguen por
sus perseguidores; así serán hijos del Padre que está en el
Cielo.
2. Aclaraciones. En este mandamiento se nos obliga a
conservar la propia vida, evitar el suicidio, la propia
mutilación, el descuido de los bienes humanos, el
escándalo por el cual se induce a otro a hacer el mal; nos
prohibe drogarse, cometer excesos en la comida, la bebida,
el tabaco... nos obliga a no conducir cuando se está
alcoholizado, etc.
Se prohibe además dar muerte a otra persona
injustamente, sea por homicidio, o aborto (matar el feto en
vientre de su madre), o el genocidio, o la eutanasia (matar a
los ancianos o enfermos incurables).
Este mandamiento no va contra el derecho a impedir
que un agresor injusto cause daño. La legítima defensa es
un deber grave para quien es responsable de la vida de otro
o del bien común.
APÉNDICE 1
También hay que trabajar por la paz y evitar la guerra.
Sin embargo mientras exista el riego de guerra y falte una
autoridad internacional competente y provista de la fuerza
correspondiente, una vez agotados todos los medios de
acuerdo pacífico, no se puede negar a los gobiernos el
derecho a la legítima defensa.
3. Preguntas. ¿Amo a mis hermanos como a mí
mismo, por amor de Dios? ¿Trato a los demás como
alguien o como algo...? ¿Respeto su cuerpo, su dignidad, su
libertad? ¿Me preocupo de la salud y de la vida de los
demás? ¿Doy más valor a la salud, a la vida natural que a la
gracia, y la vida de amistad con Dios?
4. Pecados. Pecas contra este mandamiento, cuando
libre y deliberadamente:
-matas, hieres, golpeas a otro por odio, rencor y venganza,
o deseas hacerlo sin poder realizarlo,
-abortas (crimen abominable por tratarse de una persona
humana inocente, indefensa, y a la que privas -al menos de
tu parte- de la vida de gracia y de la vida eterna),
-mantienes voluntariamente sentimientos de odio, cuando
no quieres perdonar,
-cuando escandalizas (matas la vida de la gracia en otro,
provocándolo directa o indirectamente al pecado, por tu
ejemplo, por tus palabras o escritos),
-abusas de otro más débil que tú (la opresión puede ser
física o moral),
-deseas o intentas suicidarte,
-pones en peligro tu vida y la de los demás, por tu
imprudencia en manejar, sea por la velocidad, por no
respetar las leyes de tránsito...
-bebes hasta perder la razón,
-te mutilas para no tener más hijos (ligadura de trompas,
vasectomía...).
SÍGUEME
5. Motivos para respetar la vida del prójimo.
a) No somos dueños, sino administradores de nuestra
vida. Dios es el Dueño y Señor de la vida y de la muerte.
b) La vida no sólo es un don para nosotros, sino
también para los demás (bien común). Atentar contra
nuestra vida o la ajena es odio contra sí mismo, rebelión
contra Dios y daño a la sociedad.
Sexto y noveno mandamientos
No cometer actos impuros.
No desear la mujer del prójimo.
1. Textos bíblicos. Ex 20,14: No adulterarás.
Mt 5,28: el que mira a una mujer deseándola, ya cometió
adulterio en su corazón.
Ro 6,12: no permitan entonces que el pecado reine en sus
cuerpos mortales, obedeciendo a sus bajos deseos. Ni hagan de
sus miembros instrumentos de injusticia al servicio del pecado.
1Cor 6,13: El cuerpo no es para la fornicación, sino para
el Señor, y el Señor es para el cuerpo.
1Cor 6,15-16: ¿No saben acaso que sus cuerpos son
miembros de Cristo? ¿Cómo voy a tomar los miembros de
Cristo para convertirlos en miembros de una prostituta? De
ninguna manera. ¿No saben que el que se une a una
prostituta se hace un solo cuerpo con ella?
Mt 5,8: Felices los que tienen un corazón recto, porque
verán a Dios.
2. En qué consiste este mandamiento. Por este
mandamiento se nos manda: ser puros de pensamiento,
palabra, deseo y acción.
Dios creó al hombre y la mujer, les dio a cada uno un
sexo complementario y para que transmitieran la vida, hizo
que la unión sexual se hiciese con placer. Buscar ese placer
APÉNDICE 1
sexual, ya sea solo, ya acompañado pero fuera del
matrimonio, ya en el matrimonio pero impidiendo
artificialmente la transmisión de la vida, es pecado y
pecado grave.
3. Hermosura de la pureza. La virtud de la pureza
prescripta por estos dos mandamientos es una de las más
hermosas y delicadas.
San Agustín daba tres consejos para practicarla
convenientemente:
1° rezar, frecuentar los sacramentos (sobre toda la
Confesión y Comunión), tener una gran devoción a la
Santísima Virgen;
2° huir de las ocasiones de pecado de impureza y rechazar
una y mil veces las tentaciones.
3° mortificar el cuerpo haciendo que se acostumbre a
obedecer al alma.
4. Preguntas. ¿Soy puro? ¿Creo de verdad que mi
cuerpo y el de los demás son templos del Espíritu Santo?
¿Tengo siempre una mirada limpia y un amor puro?
¿Domino mi cuerpo, mis pasiones, o me dejo dominar?
¿He orado cuando comenzó la tentación?
5. Pecados. Contra este mandamiento se peca cuando
libre y deliberadamente:
-te deleitas voluntariamente en pensamientos y deseos
impuros, aunque no realices estos actos.
-cometes una acción impura, solo, con otra persona
(soltera?, casada?, del mismo sexo?, pariente?, consagrada?
con un animal?) (indicar cuántas veces).
-lees libros, revistas, videos deshonestos o pornográficos.
-asistes a espectáculos inmorales (cine, televisión)
-tienes conversaciones impuras: cuentos, chistes y
canciones
SÍGUEME
-bailas buscando el deleite sexual
-utilizas contraceptivos u otros medios evitando los hijos
en el uso del matrimonio
-te pones en ocasión próxima de pecar
-comes y bebes por pura sensualidad.
6. Motivos para vivir la pureza. Bastaría saber que la
impureza es mala, que Dios la odia y la prohibe por el bien
del hombre...
a) es una profanación, ya que el cristiano es templo vivo
del Espíritu Santo (cf. 1Cor 6,17) quien peca de impureza
profana ese templo, el Espíritu ya no puede habitar en él...
b) va produciendo la esclavitud del vicio, con
enfermedades terribles (el SIDA por ejemplo), cegando la
mente, produciendo atolondramiento, ceguera para las
cosas de Dios, muerte prematura, pérdida de la fe,
alejamiento de la vida de gracia, horror a la vida del más
allá...
c) Dios ha enviado muchos castigos: diluvio, fuego
sobre Sodoma, Gomorra, guerras, pestes, muertes
repentinas... Y el castigo eterno del infierno, Ef 5,5: sabed y
entended bien esto: todo el que fornica o es impuro, o avaro, o
es idólatra, no heredará el Reino de Cristo y de Dios.
d) El ejemplo de Cristo Virgen, de su Madre santísima,
de Juan a quien le confió su madre (cf. Jn 18,25-27), de
Domingo Savio, Laura Vicuña, María Goretti...
Séptimo y décimo mandamientos:
No robar, no codiciar los bienes ajenos.
1. Textos Bíblicos. Ex 20,15-17: no robarás... No
desearás la casa de tu prójimo, ni la mujer de tu prójimo, ni
su buey, ni su asno, ni nada de cuanto le pertenece.
APÉNDICE 1
Mt 5,3: felices los que tienen alma de pobres porque a ellos
pertenece el Reino de los cielos.
Mt 6,19: no acumules tesoros en la tierra donde la polilla y
la herrumbre los consumen, y los ladrones perforan las paredes
y los roban. Acumulen, en cambio, los tesoros en el cielo... allí
donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón.
1Tim 6,10: la avaricia es la raíz de todos los pecados y al
dejarse llevar por ella algunos perdieron la fe.
Stg 5,1-4: ustedes los ricos, llores y giman por las
desgracias que les van a sobrevenir... Sepan que el salario que
han retenido a los que trabajaron en sus campos está
clamando, y el clamor de los cosechadores ha llegado a los
oídos del Señor del universo.
2. Aclaraciones. Este es uno de los mandamientos
más conocidos. Hasta los salvajes se dan cuenta de la
maldad del robo. De hecho dicen muchos creyéndose por
eso buenos: yo no mato ni robo...
El hombre necesita de las cosas exteriores de la tierra
para sustento y conservación de su vida. Tiene el deber de
conservar su vida, y por tanto el derecho a usar de los
medios necesarios. Además por el trabajo honesto el
hombre puede adquirir y aumentar sus bienes.
Por este mandamiento estamos obligados a dar a cada
cual lo que de derecho le corresponde. Si uno viola la
justicia: sacando lo ajeno, está obligado a restituir, para que
el prójimo no quede despojado de una cosa que es suya.
3. Preguntas. ¿Tengo pasión por el dinero y las cosas
de la tierra? ¿Soy pobre de espíritu? ¿Me preocupo por la
justa repartición de los bienes de la tierra? ¿Sufro y me
preocupo al saber que hay hombres con hambre? ¿Soy
egoísta?
SÍGUEME
4. Pecados. Contra ese mandamiento pecas cuando
libre y voluntariamente:
-robas algo que no es tuyo (debes decir la cantidad o su
valor aproximado);
-voluntariamente causas un grave daño material;
-cuando por imprudencia culpable causas un grave daño
material,
-no restituyes lo robado, cuando puedes hacerlo;
-vendes, engañando en el peso, o en la calidad o precio de
los productos;
-no pagas lo justo a tus obreros o empleados, para que
puedan vivir decentemente ellos y su familia;
-cuando derrochas el dinero en lujos y caprichos;
-cuando realizas ganancias por medios ilícitos (fraude o
engaño en el comercio);
-cuando no ayudas al que está en necesidad extrema y
descuidas las obras de misericordia;
-no cumples con el contrato justo y legítimo (el obrero que
no hace bien su trabajo);
-no pagas las deudas;
-la usura;
-el acaparamiento, Pr 11,26: al que acapara lo maldice el
pueblo.
5. Ideas claras sobre la pobreza y la riqueza.
a) El rico insensato: Lc 12,11-20.
c) Ni los avaros, ni los rapaces heredarán el Reino de
Dios: cf. 1Cor 6,10.
b) El ejemplo de Cristo: pesebre, vida de trabajador,
pobreza de su vida pública, muere desnudo en la Cruz. Más
aún se identifica con los pobres, cf. Mt 25,31-45.
APÉNDICE 1
Octavo mandamiento
No levantar falso testimonio ni mentir
1. Textos Bíblicos. Ex 20,16: no testificarás contra tu
prójimo falso testimonio.
Stg 3,9-11: con la lengua bendecimos al Señor, nuestro
Padre, y con ella maldecimos a los hombres hechos a imagen de
Dios. De la misma boca salen la bendición y la maldición.
Pero no debe ser así, hermanos. ¿Acaso brota el agua dulce y
la amarga de una misma fuente?
Stg 5,12: pero ante todo, hermanos no juren ni por el cielo
ni por la tierra, ni de ninguna manera: que cuando digan sí,
sea sí; y cuando digan no, sea no, para no ser condenados.
Mt 12,36: Les aseguro que en el día del Juicio, los
hombres rendirán cuenta de toda palabra vana que hayan
pronunciado. Porque por tus palabras serás justificado y por
tus palabras serás condenado.
2. Aclaraciones. Hay dos tipos de bienes que el
hombre necesita para vivir: los bienes materiales necesarios
para vivir (vida física) y la fama que corresponde a la vida
social del hombre. La mentira, el falso testimonio, es un
robo.
La verdad o veracidad es la virtud por la cual nos
mostramos sinceros en las palabras y en los actos, evitando
la duplicidad, la simulación, la hipocresía. Esta virtud es
necesaria ya que sin ella se destruye todo tipo de sociedad,
engendrando confusión, desconfianza.
La falta cometida contra la verdad exige reparación.
La sociedad tiene derecho a una información fundada
en la verdad, la libertad, la justicia.
3. Preguntas. ¿Digo siempre la verdad? ¿Expreso las
cosas como son, o las deformo? ¿Hablo siempre bien de
SÍGUEME
los demás? ¿Tengo mala lengua? ¿Soy hipócrita, fingiendo
lo que no soy, aparentando...?
4. Pecados. Pecas cuando libre y voluntariamente:
- callas la verdad, teniendo obligación grave de decirla,
- mientes con perjuicio del prójimo. El pecado será
proporcionado a la gravedad del daño que se causa,
- aceptas voluntariamente juicios temerarios, sin
fundamento serio, creyendo sin motivo suficiente que el
prójimo está en pecado o tiene mala intención,
- dañas al prójimo en su fama y honor, mintiendo o
revelando pecados ocultos, o agrandando las cosas,
- propagas chismes y cuentos.
- dejas que critiquen o murmuren, o calumnien de un
ausente cuando tienes obligación de impedirlo,
- murmuras, sembrando cizaña entre los amigos,
- difamas, quitando la fama del prójimo ausente,
- te burlas, poniendo al prójimo en ridículo ante los demás,
- no cumples tus promesas y votos,
- lees cartas contra la voluntad de los destinatarios.
5. Motivos para vivir en la verdad y sinceridad.
a) El cristiano está unido a Cristo, la Verdad. Por eso
debe vivir abrazado a la verdad (Ef 4,15) para que
despojados de toda mentira hable cada uno verdad con su
prójimo, pues que todos somos miembros unos de otros (Ef
4,25).
b) La mentira hace al hombre hijo del diablo, padre de
la mentira (cf. Mt 5,37).
APÉNDICE 1
APÉNDICE 3
Breve bibliografía.
Se agrega una pequeña bibliografía que te puede ayudar en tu
formación permanente. Nutre tu mente de Cristo que es la Verdad
(Jn 14,5), de lo contrario te alimentarás de otras cosas: la “cultura de
muerte”, etc.
A. Formación catequética.
B. Sagrada Escritura.
C. Padres de la Iglesia.
D. Magisterio de la Iglesia.
E. Espiritualidad.
F. Filosofía.
Ejercicios Espirituales:
- génesis del libro de Ejercicios (20-22);
- definición y finalidad de los Ejercicios (57);
- disposiciones para hacerlos (57);
- conveniencia del “retiro” (58);
- consejos para hacerlos bien (59-60);
- repetirlos anualmente (306).
* adiciones:
- para hacer mejor los Ejercicios (69-70);
- para la primer semana (87-88);
- para la segunda semana (133-135);
- para la tercer semana (204-206);
- para la cuarta semana (254-255).
* reglas:
- de discernimiento -primer semana- (113-119);
- de discernimiento -segunda semana- (200-202);
- de elección de estado: preámbulo (160), rectitud de
intención (169-170), materia de elección (170-171),
tiempos (172), dos modos para tiempo tranquilo: pro-vs.
(173-174) y otros (174-176);
- de reforma de vida (176): dimensiones sobre las
cuales hacer reforma (177-178), plan de vida (178);
- para ordenarse en el comer (250-252);
- para sentir con la Iglesia (282-286);
- para distribuir limosnas (343-344);
- observaciones sobre los escrúpulos (344-346).
Exámenes:
- de conciencia: indicacions para hacerlo (51);
- sobre la marcha de los Ejercicios (51-53);
- de la meditación (67-68);
- particular: en qué consiste (71-72. 346-347),
momentos para hacerlo (72), modo de aprovecharlo (72-
73), sobre diversas virtudes: humildad (347. 350-351),
caridad (347-348), paciencia (348), castidad (348), hacer
bien lo ‘ordinario’ (349), conformarse con la voluntad
de Dios (349);
- para antes de la confesión: siguiendo los
mandamientos (107-109), mandamientos más explicados
(310-328), según las virtudes cristianas (328-331), según
los pecados capitales (110.331-332), según el amor a
Dios y al prójimo (332-336).:
Ignacio de Loyola:
- notas biográficas (13-18);
- fisonomía (18-20);
- sus Ejercicios (20-22);
- consejos dados a San Francisco Javier (353-354).
Meditaciones y Contemplaciones:
* sobre el modo de meditar:
- esquema y consejos para la oración mental (62-68),
dificultades en la oración (68-69), otros modos de orar:
por mandamientos (73-75. 107-109. 310-328), por
virtudes cristianas (328-331), por pecados capitales
(331-332), por amor de Dios y del prójimo (332-336),
por la significación de las palabras de la oración (75-76),
del Padre nuestro (337-342), por el ritmo de la
respiración (77), modo de orar durante la semana (298-
301);
* puntos de meditación y contemplación:
- meditación introductoria (79);
- Principio y Fundamento (61-62);
- Dios (79-81);
- el hombre (81-83);
- las cosas (83-85);
- indiferencia (85-86);
* primer semana:
- tres pecados (92-95);
- pecados propios (95-97);
- repetición sobre los pecados (97-99);
SÍGUEME
- infierno (99-100);
- muerte eterna (119-121);
- muerte -bíblico- (122-124);
- la muerte (124-125);
- brevedad del peregrinar terreno (126-127);
- juicio final (127-130);
- la misericordia de Dios (130-131);
* segunda semana:
- contemplación del Reino (135-138);
- encarnación y nacimiento (138-146);
- anunciación (146-147);
- visitación (147-148);
- nacimiento (149-150);
- anuncio a los pastores (151-152);
- circuncisión (152-153);
- adoración de los Reyes magos (153-154);
- purificación - presentación (155-156);
- huida a Egipto (156);
- vuelta de Egipto, residencia en Nazaret (157);
- vida oculta en Nazaret (158);
- a los 12 años va al Templo (159);
- meditación de dos banderas (160-163);
- meditación de tres binarios (163-165);
- tres maneras de humildad (165-167);
- desde Nazaret al Jordán (181-182);
- Bautismo de Cristo (182-183);
- del Jordán al desierto (184-185);
- Cristo llama a los apóstoles (185-186);
- bodas de Caná: primer milagro (186-187);
- expulsión de los mercaderes del Templo (188);
- sermón de la montaña (189-190);
- tempestad calmada (190-191);
- camina sobre el mar (191-192);
- misión temporal de los apóstoles (192-193);
- conversión de María Magdalena (193-194);
- transfiguración de Cristo (194-195);
- la predicación en el Templo (195-196);
- resurrección de Lázaro (196-197);
- cena en Betania (197-198);
- Domingo de Ramos (198-199);
* tercer semana:
- de Betania a Jerusalén (208);
- Última Cena (209);
- huerto de los Olivos (210-211);
- prendimiento y casa de Anás (211-212);
- en casa de Caifás (213);
- ante Pilato (214-215);
- ante Herodes (215);
- de nuevo ante Pilato (216-217);
- condena de Pilato y crucifixión (217-218);
- en la Cruz (218-219);
- el cuerpo de Jesús en el sepulcro (220);
- la soledad (221);
- la Pasión en conjunto: la entrega (222-225);
- la Pasión: los dolores de Cristo (225-227);
- la Pasión: modos en que Cristo nos salva (227-229);
* cuarta semana:
- Cristo resucitado aparece a su Madre (260-261);
- aparición a María Magdalena (262);
- aparición a las otras mujeres (263);
- aparición a Pedro (264);
- los discípulos de Emaús (265);
- aparición a los discípulos sin Tomás (266);
- aparición a los discípulos con Tomás (267);
- aparición en Galilea (268);
- aparición sobre el monte (269);
- aparición a más de 500 hermanos (270);
- aparición a Santiago (270-271);
- aparición a Pablo (271);
- Ascensión de Cristo (272);
SÍGUEME
- venida del Espíritu Santo (273);
- Parusía de Cristo (274-276);
- la vida eterna o Cielo (276-278);
- Contemplación para alcanzar amor (278-282).
Oraciones:
- dirigidas al Padre: ofrecimiento (23), ofrecimiento
del día (23), Padre nuestro (24. 42-43. 337-342),
ofrecimiento de obras (27-28), Padre me pongo en tus
manos (259);
- dirigidas al Hijo: al desperter (23); al Sagrado
Corazón (36), Cordero de Dios (43), oración de la noche
(53), Alma de Cristo (58-59), ante el misterio del
Nacimiento (150).
- dirigidas al Espíritu Santo: oración al Espíritu
Santo (27), pidiendo la docilidad (252-253);
- a la Santísima Trinidad: Gloria (24), gloria de la
Misa (38-39);
- a la Santísima Virgen: Ave María (24), Salve (25),
Totus tuus (29), consagración (29), Bendita (29), oración
de la Legión (30), Acordaos (53), Angelus (141), Regina
Coeli (258), bajo tu amparo (304), oración a la Virgen de
Luján (304);
- otras oraciones: Credo (24-25), profesión de fe (40-
41), acto de fe (26), acto de esperanza (26), acto de
caridad (26), acto de contrición (26.111); oración al
ángel custodio (27), oración a la Divina Misericordia
(132);
- oraciones para diversas circunstancias: para las
comidas (30-31), para el estudio (31-32), para los
trabajos (34), para ofrecer las obras (27-28.34), para
pedir buen humor (259-260), letanías de la humildad
(351-352), cuando se está desolado y triste (35), para
pedir la salud (35), para dominar el enojo o la ira (35), al
sentirse tentado (100), al caer en alguna falta o pecado
(101), oración antes del examen de conciencia (107),
instrumento de tu paz (258-259), aquí estoy Señor
envíame (167);
- de la noche (53): el Bendito (54), Himno de
completas (54-55), oración final (55).
- de Ejercicios: Alma de Cristo (58-59), coloquio de
los pecados (98), coloquio de misericordia (94-95),
oración del Reino (137), oración de dos banderas (162),
oración de tres binarios (165), de la contemplación para
alzanzar amor (280); por los próximos ejercicios (306-
307).
Pecados:
- diferentes clases: mortal y venial (103-104);
- capitales (75.104.110.331-332);
- tentación y pecado (104-105);
- de palabra y omisión (105-106);
- observaciones sobre los escrúpulos (344-346).
Penitencia:
- necesidad de hacerla (88-89);
- tipos de penitencia (89);
- modos de penitencia externa (90);
- finalidad de las penitencias externas (91);
- oración para antes de la penitencia (26), al sentirse
tentado (100), al caer en una falta (101); empiezo ahora
(101); acto de contrición (111).
- ver: Sacramento de la Penitencia.
Sacramentos:
* de la Penitencia - Confesión o Reconciliación:
- Penitencia o Confesión en el Evangelio (102-103);
- los efectos que produce (106);
- pasos para recibir este sacramento (107): exámenes
(107-110), contrición del corazón (110), propósito de
mejorar (111-112), confesión (112), satisfacción (112-
113); indulgencias (290).
- conveniencias de la Confesión frecuente (292-293);
SÍGUEME
* del Bautismo:
- de Cristo, causa y ejemplo del nuestro (181-183);
- renovación de las promesas bautismales (287-288);
* de la Eucaristía:
- verdades esenciales sobre la Eucaristía (293-298);
- oraciones de la Santa Misa (37-44);
- visita al Santísimo Sacramento (44-48);
- oración para la Comunión espiritual (48-49);
- oración para recibir la Eucaristía (49-50);
- oración después de recibir la Eucaristía (50-51).