Candidiasis
Candidiasis
Candidiasis
PACIENTES VIH
3° Ciclo “B”
Integrante:
Joffre Rodríguez
Docente:
Carrera: Asignatura:
2021-2022
Contenido
1. Introducción ……………………………………………………………………………………………………………………… 1
1.1.Problema …………………………………………………………………………………………………………………………… 2
1.2.Epidemiología……………………………………………………………………………………………………………………… 3
1.3.Planteamiento del problema ……………………………………………………………………………………………… 4
1.4.Preguntas de Investigación ………………………………………………………………………………………………… 5
1.5.Preguntas especificas …………………………………………………………………………………………………………. 6
1.6.Objetivo General …………………………………………………………………………………………………………….…. 6
1.7.Objetivos específicos ……………………………………………………………………….………………………………… 6
1.8.Justificación………………………………………………………………………………………………………………………. 6
2. Marco Teórico …………………………………………………………………………………………………………………… 7
3. Metodología ……………………………………………………………………………………………………………………... 8
4. Anexos………………………………………………………………………………………………………………………………. 15
5. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS……………………………………………………………………………………………18
1. Introducción
La candidiasis oral (CO) es una infección frecuente de la mucosa bucal provocada por
hongos la familia de la Cándida spp. Estos hongos son integrantes de la flora bucal
habitual, pero, por diferentes factores locales y sistémicos, pueden transformarse en la
infección denominada CO.
En este trabajo se presentan los factores locales y sistémicos que favorecen la infección por
Cándida spp, se revisan las diferentes formas clínicas de presentación y los métodos de
diagnóstico más empleados. Se presentan, además, las características especiales de esta
infección en los pacientes VIH - SIDA.
Estos factores enunciados, así como otros que se mencionan más adelante, son factores
predisponentes en el hospedador que alteran el mecanismo homeostático normal, que
provee la defensa contra la infección y que favorecen la transformación de la colonización
asintomática en infección sintomática por las C spp. Odds en 1988 y luego Samaranayake
en 1992, clasificaron estos factores predisponentes en sistémicos y locales. En los cuadros 1
y 2 se presentan estas clasificaciones y luego se analizan algunos de los puntos
(www.doctorfungus.org/mycoses; Bascones & Manso, 1999; Martínez, 1997).
1.1 Problema
La candidiasis oral (CO) es una infección oportunista de la mucosa de la cavidad oral provocada
por hongos del género Cándida spp y en la mayoría de los casos, por la especie Cándida álbicans.
Las Cándida spp. (C spp) son parte de la flora bucal en un 25 a 50 % de los individuos sanos. Esta
presencia se denomina colonización asintomática. Sin embargo, al ser penetrada la mucosa por C
spp se pueden desarrollar síntomas y signos de una infección y se está en presencia de una CO. El
hongo se transforma de comensal a agente patógeno. Esta infección, que ha aumentado
notablemente su incidencia, actualmente constituye una de las causas más frecuentes de consulta
en el consultorio dental.
1.2 Epidemiología
Se realizó un estudio descriptivo de corte transversal, en 141 individuos del programa de
pacientes infectados con VIH en la ciudad de Cartagena de Indias, Colombia. Se incluyeron
sujetos que estuvieran bajo tratamiento antirretroviral ininterrumpido, con seguimiento de
linfocitos T CD4 menor a 30 días del examen clínico intraoral. Previo al examen intraoral todos
los participantes firmaron consentimiento informado. Se realizó anamnesis y examen clínico
intraoral teniendo en cuenta los criterios para el diagnóstico clínico de las manifestaciones orales
asociadas a VIH establecidos por el Centro de intercambio de criterios sobre problemas bucales
relacionados con la infección por el VIH (Instituto de Problemas Orales relacionados con la
infección por el VIH de la Comunidad Económica Europea) y el Centro Colaborador de la OMS
sobre las manifestaciones orales del virus de inmunodeficiencia humana.8-10
Las infecciones por cándida afectan distintas partes del cuerpo de distintas maneras:
El muguet o candidiasis oral es una infección por hongos que causa manchas blancas en la
boca. La esofagitis por cándida es muguet que se disemina hacia el esófago, el tubo que
lleva la comida desde la boca hacia el estómago. Provoca dolor o dificultades para tragar
Las mujeres pueden tener infecciones vaginales por cándida, lo que causa vaginitis
Las infecciones en la piel por cándida causan picazón y erupciones cutáneas
La candidiasis en la sangre puede poner la vida en peligro
Los antimicóticos pueden eliminar las infecciones por cándida en la mayoría de las
personas. Si tiene un sistema inmunitario debilitado, el tratamiento puede ser más difícil.
1.7 Justificación
Las afectaciones de candidiasis en la población del mundo repercuten en la no
concientización por lo cual la sociedad entera debe de conocer sobre las graves afectaciones
que se dan en el desarrollo de las enfermedades bucales, más aún correlacionadas con las
manifestaciones clínicas más frecuentes de la candidiasis son las infecciones por Candida de
la cavidad bucal y el esófago. En los pacientes infectados por el VIH es doloroso y de
manera que puede provocar el desarrollo de otras enfermedades bucofaríngeas. El conocer
de las afectaciones bucales en los pacientes que tienen VIH es significativo dentro de la
prevención y disminución de afectaciones en el paciente.
2. Marco Teórico
La cavidad bucal es un escenario por el que desfilan durante la evolución de la infección por el
VIH, desde su comienzo hasta la etapa final o SIDA, una variedad de lesiones, que pueden ser,
en muchas ocasiones, las primeras manifestaciones clínicamente detectables que llevan al
diagnóstico; en otros casos, la aparición de alguna de ellas en las distintas etapas de la
enfermedad puede marcar una tendencia con respecto a la progresión del síndrome.
Desde el primer caso de SIDA detectado se pudo determinar la existencia de candidiasis oral
asociada con dicha patología. Esta asociación fue corroborada a medida que el SIDA se convirtió
en epidemia, y es así que actualmente la candidiasis oral se manifiesta en un gran porcentaje
(aproximadamente el 75 %) de los pacientes que presentan SIDA o el complejo relacionado con
el SIDA, mientras que también lo manifiestan cerca del 35 % de los pacientes con VIH
seropositivos que no presentan sintomatología.
Los parámetros que siguen los investigadores para incorporar o no lesiones asociadas con el
SIDA se basan en estudios epidemiológicos que prueban que la prevalencia de las lesiones en
cuestión es mayor que la encontrada en la población general "virus de inmunodeficiencia
humana negativa."6
Entre más de las 150 especies conocidas de Candida, la Candida albicans es el patógeno que se
identifica más frecuentemente en el hombre. Otras especies clínicamente importantes
incluyen Candida tropicalis, Candida parapsilosis, Candida krusei, Candida pseudotropicalis y
Candida guillermondi.
La candidiasis es la infección micótica intraoral más común en pacientes infectados con VIH. Se
han reportado otras como Cryptococcus neoformans e histoplas-mosis. Desde que se notificaron
los primeros casos del SIDA, en 1981, se sabe que la candidiasis bucal está relacionada con el
síndrome. La prevalencia de candidiasis bucal en personas que reportan comportamientos
asociados con la transmisión del VIH que parezcan estar sanas, podría ser uno de los primeros
signos de inmunosu-presión debida a la infección por el VIH. Se ha reportado una prevalencia de
candidiasis del 30 al 90 % entre los pacientes infectados por el VIH.
No obstante, la fagocitosis efectiva del hongo se cumple en los tejidos por acción de los
macrófagos. Es un proceso que consiste en la destrucción intracelular mediante un complejo
sistema químico integrado por enzimas (mieloperoxidasa), iones ferrosos, yoduro y peróxido de
hidrógeno. Sin embargo, cuando las defensas del cuerpo se debilitan, estos elementos saprófitos
se convierten en parásitos patógenos.
Las lesiones micóticas orales asociadas con la infección por el VIH son:
Candidiasis pseudomembranosa.
Candidiasis atrófica o eritematosa.
Candidiasis hiperplásica.
Queilitis angular.
Histoplasmosis.
Criptococosis.
Geotricosis.
Las principales formas clínicas de la candidiasis oral en la infección por el VIH son:
Pseudomembranosa.
Eritematosa.
Hiperplásica.
Queilitis angular.
Palatina papilar.6
Las manifestaciones de la candidiasis bucal varían de acuerdo con su género; la más común es la
infección pseudo-membranosa (conocida también como algodoncillo). Esta lesión se presenta
clásicamente como semiadherida, blanco amarillento, blanda, cremosa, con aspecto de gotas y
áreas de seudomembranosa que confluyen y pueden ser removidas con una gasa o un
bajalenguas, dejando una superficie roja sangrante. Esta condición está asociada con una
supresión inicial y progresiva del sistema inmune. La afección es usualmente aguda, pero sin
tratamiento persiste por varios meses y adopta un curso crónico. Puede involucrar cualquier área
de la mucosa bucal, pero es más frecuente en la lengua, el paladar duro y blando y la mucosa del
carrillo. Hemos visto una mayor prevalencia en paladar duro y blando y mucosa de carrillo, tanto
en varones como en mujeres. En cambio, la candidiasis hiperplásica, conocida también como
candidiasis leucoplasia está caracterizada por placas blancas que no pueden removerse con una
gasa o un bajalenguas. Este tipo está asociado con supresión severa del sistema inmune y
enfermedad por el VIH de larga duración. La localización habitual es la mucosa de labios y
carrillos, esta última ubicación la hemos visto en varios pacientes con SIDA, en forma de líneas
que recordaban dibujos liquenoides. Ceccotti trató un caso de localización en el límite entre el
paladar duro y blando, con el aspecto de leucoplasia verrugosa. También se ha visto formando
parte de cuadros de candidiasis multifocal, en las comisuras y el área retrocomisular bilateral,
coexistiendo con imágenes seudomembranosa, eritematosas en la lengua y el paladar duro. La
tercera forma de manifestación de la enfermedad es la candidiasis eritematosa (atrófica), que
aparece en forma de manchas rojas, visibles durante las etapas iniciales de la enfermedad por el
VIH. Se observa además la lesión roja con un epitelio atrófico o sin éste, por lo que se propone
utilizar el término eritematoso y no atrófico. El sitio afectado con más frecuencia es el paladar
duro y el dorso de la lengua, acompañado de depapilación, aunque también puede verse en la
mucosa bucal y en el paladar blando.
En la etapa pre-SIDA era común ver queilitis angular en pacientes con pérdida de dimensión
vertical o trastornos por avitaminosis B. No era frecuente en pacientes jóvenes.2-6
Otro tipo de candidiasis que se presenta en los pacientes con SIDA es la candidiasis palatina
papilar, la cual se ha visto en un solo paciente homosexual. Se localiza en paladar duro y aparece
como nódulos papilares eritematosos que recuerdan a la hiperplasia papilar inflamatoria de
origen protésico.
En un estudio realizado en el Hospital Universitario Nacional de Taiwán, desde 1986 hasta 1996,
se le realizaron autopsias a 16 pacientes con SIDA, de ellos, 15 hombres y 1 mujer; 14 habían
contraído la enfermedad como resultado de la práctica sexual, de los cuales 9 eran homosexuales,
1 bisexual y 4 heterosexuales. Uno de los pacientes se infectó a través del uso de drogas
intravenosas, la mujer era trabajadora sexual. De todos estos pacientes, solo 2 se habían hecho
pruebas del VIH antes de desarrollar el SIDA. Doce pacientes murieron por infecciones
oportunistas y uno cometió suicidio. La infección oportunista inicial fue generalmente la
candidiasis oral.
Santana Garay estudió las manifestaciones bucales de 243 pacientes infectados por el VIH
ingresados en el Sanatorio de Santiago de las Vegas. El 73,7 % corresponde al sexo masculino,
el grupo de edad más afectado fue el de 20 a 39 años. La candidiasis bucal fue la segunda lesión
más frecuente, con el 13,9 %. Los hallazgos de estas infecciones oportunistas son bajos en los
pacientes cubanos, al compararlos con los informes internacionales, al parecer por la atención a
la salud bucal en un ambiente de estancia sanatorial. Se enfatiza en la importancia del examen
sistemático del complejo bucal a todo paciente y en la necesidad de que el estomatólogo esté
informado sobre las manifestaciones bucales del SIDA.
Se realizó un estudio de candidiasis oral a 25 pacientes con VIH positivo y con SIDA. La forma
clínica de presentación predominante fue la pseudomembranosa y las especies de levadura más
frecuentes en los aislamientos fueron Candida albicans (54,1 %), Candida tropicalis (8,1 %)
y Torulopsis glabrata (8,1 %). Se demostró que los pacientes con infecciones recurrentes suelen
tener colonización de la cavidad oral por múltiples cepas y/o especies de levadura con mayor
frecuencia (30,8 %) que los que cursan por su primer episodio de candidiasis oral (12,5 %). De
los 3 medios de cultivo utilizados para el aislamiento inicial, la combinación del agar papa
dextrosa (APD) y el agar Sabouraud trifeniltetrazolium (AST) permitió obtener el máximo de
aislamiento y de diferenciación entre cepas. El agar Sabouraud (AS), el medio más utilizado para
estos fines internacionalmente, fue menos útil que los anteriores. El AST resultó ser, además, un
medio de gran utilidad para estudios de tipificación fenotípica de la mayoría de las especies de
levaduras aisladas y especialmente de Candida albicans, lo cual permitirá abordar estudios
epidemiológicos.13
En los pacientes seropositivos al VIH la candidiasis se presenta con frecuencia, y es una de las
infecciones micóticas que con determinadas manifestaciones definen el diagnóstico del SIDA.
Más del 90 % de estos pacientes presentan candidiasis oral en algún momento de su enfermedad
y entre el 9 y el 20 % desarrollan esofagitis. La candidiasis oral cursa asintomática en la mayoría
de los casos, mientras que la esofagitis por Candida suele manifestarse por síntomas
gastrointestinales como disfagia, odinofagia o dolor retroesternal (rara vez asintomática).
El diagrama de la forma oral no presenta dificultades, no ocurre así con la esofagitis por
Candida, pues se requieren estudios endoscópicos con exámenes histológicos y cultivo de
especímenes.
En la actualidad existen varios sistemas comerciales que son útiles para el diagnóstico de este
género y se emplean diferentes métodos, como el análisis de extractos de la pared celular
de Candida albicans por electroforesis en gel de poliacrilamida (PAGE) y la elaboración de
sondas de ADN específicas para Candida albicans con fines investigativos.
De Apodaca Verdura y otros estudiaron 18 pacientes con SIDA que presentaban síntomas
gastrointestinales altos o lesiones en la cavidad oral sugestivos de candidiasis. Se obtuvieron
datos clínicos, muestras de la cavidad oral, biopsias, cepillado esofágico, así como suero de todos
los pacientes. El síntoma que principalmente se observó en la candidiasis esofágica fue la
disfagia; la candidiasis oral se comportó de forma asintomática. Candida albicans fue la especie
que más se aisló, con predominio del serotipo A. Se analizaron por la técnica de electroforesis en
gel de poliacrilamida los perfiles proteicos de las 12 cepas pertenecientes a esta especie, se
observó identidad de sus patrones de peso molecular, lo que sugiere que sea la misma cepa la que
se halla en la cavidad oral y en el esófago. Se evaluó la respuesta de anticuerpos anti Candida
albicans, no resultó útil la inmunodifusión doble para el diagnóstico de candidiasis esofágica.
Millán Marcelo en su trabajo describe un paciente cubano con SIDA que a los 19 meses de
sobrevida presenta un cuadro neurológico e imagenológico compatible con neurotoxoplasmosis,
que no mejoró con el tratamiento combinado de drogas antitoxoplásmicas y depletantes del
sistema nervioso central y que en la autopsia practicada resultó ser un absceso por Candida
especie.15
La presencia del hongo en los materiales clínicos se demuestra por métodos microbiológicos y
serológicos. El diagnóstico microbiológico consiste en la demostración directa del hongo. Puede
utilizarse el examen directo o el cultivo. El examen directo se puede hacer con un hisopado y
frotis en una preparación de hidróxido de potasio o con fijado y coloreado del frotis. El hongo se
comporta como grampositivo, tanto en su forma levaduriforme como el micelio.
Con frecuencia se emplean los agólicos por su buena tolerancia, el ketoconazol, por ejemplo
(Ketozol, Orifungal, Mutum) se indica en dosis de 400 a 600 mg/día, por lo menos durante 2
semanas para la candidiasis oral. Agregamos la aplicación tópica en forma de ungüento de
ketoconazol (micolis) y de nistatina tópica, en solución y en comprimidos de disolución oral
(Micostatín). Sugerimos la aplicación 3 veces por día sobre las áreas afectadas. Si es portador de
prótesis se indica limpiarlas con hipoclorito de sodio o bicarbonato y aplicar también el tópico
sobre la superficie de apoyo del aparato. En el SIDA se observó una recaída en el 80 % de los
casos.
La frecuencia alta de candidiasis orofaríngea en pacientes con compromiso del sistema inmune
ha llevado a muchas instituciones a desarrollar protocolos para guiar el uso de agentes
antifúngicos en el tratamiento de esta infección oportuna. Sin embargo, se han hecho pocas
recomendaciones específicas para dirigir el manejo de los pacientes infectados por el VIH con
candidiasis orofaríngea. Para satisfacer esta necesidad, un grupo de expertos que representan una
variedad de disciplinas, decidió formular un acuerdo general y crear una estrategia de tratamiento
para la aplicación clínica. Entre otras recomendaciones, el algoritmo requiere el uso de un agente
tópico para el tratamiento inicial y la recurrencia de la candidiasis orofaríngea en pacientes
infectados con el VIH.
3. Metodología
Palabras clave: Candidiasis bucal; antígenos; infecciones por VIH, Terapia; Cándida,
candidiasis; Terapia Antirretroviral Altamente Activa. •
Rev cubana Estomatol vol.53 no.1 Ciudad de La Habana ene.- mar. 2016
Infect. vol.18 no.2 Bogotá Apr. /June 2014
4. Anexos
Patológico. Muguet-Interno
EVALUACIÓN
Patológico-DEL ARTÍCULO
Candiasis inicio dePARA LA
afectación
INVESTIGACIÓN
Referencias Bibliográficas
JOFFRE RODRIGUEZ
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