Reglas Gramaticales
Reglas Gramaticales
Reglas Gramaticales
Acentuación
Acento diacrítico
Signos de puntuación
La coma
Sirve para separar elementos con carácter incidental dentro de la oración: Buenos
Aires, la capital, es una ciudad muy populosa; Yo, si me lo proponen, lo acepto.
Sirve para indicar la omisión del verbo: Juana era muy agradable; Pedro, antipático.
A veces se usa para separar oraciones enlazadas por la conjunción y en los casos
en que pueda haber confusión o se prefiera esa formación más clara: A Pedro le
gustaba el trabajo y el estudio, y el ocio lo consideraba absurdo.
El punto y coma
Sirve para separar oraciones o frases largas que constituyen una serie o entre cuyos
sentidos hay proximidad o semejanza: Al contrario, vivo muy cerca; éste es mi
distrito.
Cuando la coma no es suficiente para precisar el sentido y provoca confusión: La
primera parte de la obra era interesante; la segunda, aburrida; la tercera,
francamente insípida.
El punto y seguido
Sirve para separar oraciones que contienen pensamientos relacionados entre sí,
pero no de forma inmediata. La diferencia con el punto y coma es sutilísima:
“Levantarse a las seis y media. Lavarse la cara y los brazos. Irse a la iglesia sin
distraer la mirada en cosa alguna.” (A. Yáñez).
El punto y aparte
El punto final
Indican que tras ellos viene una enumeración de elementos incluidos en la primera
frase: Cuatro nombres destacan en la novela hispanoamericana contemporánea:
García Márquez, Cortázar, Vargas Llosa y Fuentes.
Se usa con mayor frecuencia antes de la transcripción o cita de lo dicho por otra
persona: Al entrar en la casa, me dijo: “Acabo de llegar de Veracruz”.
Sirven para marcar interrupción en lo que se expresa: Sí, lo respeto mucho, pero...
Pueden estar en lugar de etcétera: Los grandes grupos animales: mamíferos, aves...
Sirven para marcar una pausa al expresar temor, duda o algo sorprendente: No me
atrevía a estrechar la mano de un... presidente; Abrí la puerta y... ¡horror!.... un
espectáculo dantesco.
El valor de estos signos corresponde al del punto; pero ello no excluye la posibilidad
de que se empleen los otros signos. Es frecuente, por ejemplo, que vayan seguidos
de una coma: ¿Quién es?, ¿cómo ha venido?
Se utiliza para marcar la separación de las palabras al final del renglón e indica que
la palabra continúa en el siguiente:
cie de fenómenos.
Se usa para marcar los prefijos o inicios de palabras, como hiper-, i-, sub-, o coloq-
, presid-; y para señalar los sufijos o terminaciones de palabras: -izar, -ismo, -ero, o
-uar, -s, -jer.
El guión mayor o largo
—No lo sé.
El paréntesis
Separa igualmente los elementos incidentales que aparecen dentro de una oración:
“Y te diré más: si hay politiqueros (y me avengo a que los hay), donde ahora los veo
menos es en mi bando.” (m. L. Guzmán). Se usan las comas, los guiones o los
paréntesis según el mayor o menor grado de relación que tenga la incidental con lo
que se escribe.
Las comillas
Dan cierto énfasis o un sentido irónico a una palabra: La “amabilidad” con que
recibió a sus competidores los hizo desconfiar.
Se usan al escribir una palabra nueva (neologismo) o algún vocablo poco conocido
(una palabra específica de una especialidad profesional o de una época en
particular): Las cabinas “presurizadas” del avión.
Los corchetes
(Miguel de Cervantes)
Se usan también para encerrar una frase que ya tiene un paréntesis o para evitar la
repetición seguida de dos paréntesis: La antigua ciudad de Vallado lid (hoy Morelia)
[Mostrar mapas y fotos] fue un centro cultural importante en la época colonial.
La diéresis
Sirve para darle valor fonético a la u en las sílabas gue, gui: cigüeña, lengüita.
de nuestro lugar
(Luis de Góngora)